ESCUELA DE FORMACION

MINISTERIAL APOSTOLICA Y
PROFETICA MONTE SION

Manual de Discipulado
Estudiante ____________________________
 CONTENIDO

01. El Nuevo Nacimiento

02. La Biblia, Palabra de Dios
03. La Oración Personal
04. La Congregación de los Santos
05. La Fe
06. La Gracia de Dios
07. El Espíritu Santo
08. Amor y Perdón
09. El Bautismo
10. Diezmo, Ofrenda y Primicias
11. Paternidad de Dios y Sanidad del Alma
12. Libres de Opresión (por la unción y la Palabra)
13. Testificando a Otros
14. El Servicio en Dios
15. Visión y Sujeción Espiritual
 DISCIPULADO
¡Bienvenido! Usted está por comenzar el primer
módulo de Discipulado. Es de suma importancia
que usted ponga por obra lo que aprenda, pues
hay una aplicación espiritual para cada tema.
El módulo consiste de quince lecciones a
estudiarse en quince semanas. Su mentor(a)
llevará control de la asistencia a cada clase. Si
usted va a faltar a una clase por causa de fuerza
mayor, envíe anticipadamente una excusa por
escrito junto con su tarea. Luego busque con su
mentor(a) la forma de reponer la lección.
Usted leerá en casa la lección correspondiente
durante la semana, antes de cada clase. El
objetivo de ello es promover su participación en
clase. Al final de la discusión de la lección, habrá
un tiempo para responder la auto evaluación. Esta
no se calificará, pues el propósito es que usted
confirme si comprendió la lección. Si usted no
comprendió una lección, busque a su mentor(a)
para pedirle ayuda.
Usted desarrollará la tarea para presentarla en la
siguiente clase en una hoja o cuaderno aparte. El
mentor la revisará y le anotará sus comentarios.
En esta área es muy importante su puntualidad en
entregar la tarea, así como la presentación, cantidad y
contenido.
Al final del módulo, usted se someterá a una auto
evaluación final escrita.
En base a estos cuatro parámetros, al final del módulo
usted mismo(a) decidirá si será o no promovido al
siguiente módulo. Usted podrá repetir este módulo
cuantas veces lo estime conveniente.
Firmando el compromiso siguiente, usted comenzará
oficialmente este módulo de Discipulado. Recuerde que
este compromiso es muy serio y es con el Señor.
Por este medio declaro que he comprendido los
requerimientos para estudiar El Manual de
Discipulado. Me comprometo delante de Dios a
cumplir con los requisitos establecidos; a respetar,
someterme y orar por mi mentor(a) en amor y en el
temor de Dios; a estudiar diariamente La Biblia; y a
seguir el orden establecido por el Señor y mi iglesia.

_______________________
Firma

¡Disfrute la leche y la miel de la Palabra de Dios!

 CAPÍTULO 1

EL NUEVO NACIMIENTO
El Nuevo Nacimiento
Todo hombre ha nacido en lo natural; ha nacido
de la carne. Pero para vivir eternamente necesita
ser nacido del Espíritu, o sea "nacer de nuevo"
(Gálatas. 4:29). Todo ser humano necesita nacer
de nuevo para entrar al Reino de Dios y tener
acceso a la Gloria de Dios. Jesús se lo dijo
claramente a Nicodemo: "Es necesario nacer de
nuevo para ver el reino" (Juan. 3:1- 8).
Todo hombre (varón o mujer) ha sido diseñado
para vivir en gozo, salud y salvación pero para
recibir todo esto necesitamos reconocer a
Jesucristo como nuestro Salvador. La Palabra de
Dios dice "Que si confesares con tu boca que
Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que
Dios le levantó de los muertos, serás salvo Porque
con el corazón se cree para justicia, pero con la
boca se confiesa para salvación" (Romanos.10: 9-
10). ¿Qué es confesarle? Es no avergonzarnos de
Dios, sino proclamar sin timidez delante de los
hombres que Él es nuestro Señor. La Escritura
también dice "A cualquiera, pues, que me confiese
delante de los hombres, yo también le confesaré
delante de mi Padre que está en los cielos."
(Mateo.10:32).
Jesucristo el Hijo de Dios, murió en la cruz del
Calvario hace unos dos mil años y derramó Su
sangre para limpiamos de todo pecado y culpa
para acercamos y reconciliamos con Dios el
Padre. Al tercer día Jesús resucitó, subió a los
cielos, y se sentó a la derecha del Padre. Envió a
Su Espíritu Santo para vivir dentro de cada uno de
nosotros. Si usted ha creído y confesado esta
verdad con un corazón sincero y humilde,
entonces ha recibido por fe la salvación que
Jesucristo le dio gratis.
¿Por qué es importante confesar con nuestra boca
que Jesucristo es el Señor? Porque también
nuestro enemigo común (el diablo y sus
demonios) debe saber que hemos decidido
cambiamos del mundo de las tinieblas (el pecado
y la muerte) al Reino de la Luz (la Vida y la
Verdad).
La persona que ha nacido de nuevo se identifica
porque:
• Ama (1 Juan. 4:7)
• No peca (1 Juan. 5:18)
• Vence al mundo (1 Juan. 5:4)
Jesús cumplió todo esto. Él era nacido del Padre,
pero nos dejó Su Gracia para que todo el que
creyera, pudiera ser Hijo de Dios (Juan. 3:16,
1:12).
Es importante recalcar que el nuevo nacimiento es
producido por Dios; ningún ser humano puede
provocarlo ni imitarle. Bendito sea el Padre de
nuestro Señor Jesucristo que por su inmenso
amor nos hizo nacer de nuevo (1 Pedro. 1:3).
AUTOEVALUACIÓN
1 – Escoja el versículo que NO habla de nacer
de nuevo:
A – Juan 3:1-8
B – 1 Juan 3:9
C – 1 Pedro 1:23
D – Juan 2:12
2 – Las siguientes son características del
nacido de nuevo:
A – Mira el reino, ama, no peca, vence al mundo.
B – Es muy inteligente.
C – Tiene piel clara y ojos cafés.
D – Se enoja con frecuencia.
3 – Jesús le explicó claramente lo del nuevo
nacimiento a:
A – María de Betania
B – Zaqueo
C – La samaritana
D – Nicodemo
4 – Todo hombre necesita nacer de nuevo
para:
A – Tener acceso al reino de Dios.
B – Tener amigos cristianos.
C – Leer la Biblia.
D – Visitar una iglesia evangélica.

Tarea:
Explique con referencias bíblicas la diferencia
entre ser nacido de la carne y ser nacido del
Espíritu.
 CAPÍTULO 2
LA BIBLIA, PALABRA DE DIOS
La palabra de Dios es jabón que nos limpia. Todos
nosotros hemos venido de un mundo de
contaminación, iniquidad, pensamientos
negativos, temores, vicios, ataduras, dolores,
relaciones rotas, divorcio, abandono.
Necesitamos ser limpiados y renovados de cada
cosa negativa que ha ocurrido en nuestras vidas
por causa del mundo en que hemos vivido, por
presión social, o por las circunstancias en las
cuales crecimos. Todo esto va provocando
estorbos y tinieblas en nuestra alma y corazón.
Cuando nosotros nos encontramos con el que
tiene el Agua Viva, así como la mujer samaritana
(Juan 4:1-42) necesitamos que nuestro corazón,
nuestras emociones, sentimientos sean limpiados
y que nuestra mente sea renovada por Su
Palabra. La Palabra de Dios nos dice exactamente
qué dejar, qué hacer, a qué renunciar, qué
cambiar y cómo lograrlo.
La Palabra de Dios tiene poder y es eterna, nos
revela el carácter de Dios, a través de ella
conocemos a nuestro Creador. Por el poder de la
Palabra todas las cosas fueron creadas, hay un
poder creativo en la Palabra de Dios y cuando
usted absorbe esta Palabra hay una autoridad
dentro de usted para proclamar esta misma
Palabra, y tiene el mismo poder que tuvo Jesús
para ordenar que las cosas sean hechas.
La Palabra de Dios es vida y medicina para el que
la lee y la vive. Todo aquel que ha reconocido a
Jesús como Salvador de su alma, necesita
alimentarse diariamente de la Palabra de Dios.
Para que un cristiano sea estable y vaya creciendo
o madurando, necesita tener una dieta
balanceada de Biblia, oración, y congregación en
un lugar donde se le dé libertad al Espíritu Santo.

Contenido de la Biblia
• La Biblia contiene 66 libros los cuales están
divididos en capítulos y versículos para facilitar la
lectura.
• Los libros de la Biblia se separan en dos grandes
agrupaciones: El Antiguo Testamento y el Nuevo
Testamento. El Antiguo Testamento abarca desde
el relato de la creación de todas las cosas hasta el
profeta Malaquías, previo a la época del silencio.
El nuevo Testamento incluye desde el nacimiento
de Jesús el Mesías hasta las revelaciones de los
últimos tiempos.

¿Cómo leer la Biblia?

Le recomiendo comenzar a leer la Biblia por el
Nuevo Testamento, con el Evangelio según San
Mateo. Trate de leer por lo menos un capítulo
diario. Pida a Dios que Se revele a usted a través
de La Biblia; que le ayude a vivir lo que lee, para
que no sea usted sólo un conocedor intelectual,
sino que la Vida que emana de la Santa Palabra
de Dios le vaya confrontando y cambiando.
AUTOEVALUACIÓN
1 – Todas las cosas creadas fueron hechas por:
A – Los arquitectos.
B – Los ingenieros.
C – La Palabra de Dios.
D – Por sí mismas.
2 – La Palabra de Dios es:
A – Medicina para todo nuestro ser.
B – Vida para el que la obedece.
C – Poder
D – Todas las anteriores.
3 – La Biblia contiene:
A – 67 libros: 40 en el Antiguo Testamento, y 27
en el Nuevo Testamento.
B – 66 libros: 39 en el Antiguo Testamento, y 27
en el Nuevo Testamento.
C – 100 libros: 50 en el Antiguo Testamento, y 50
en el Nuevo Testamento.
D – 75 libros: 50 en el Antiguo Testamento, y 25
en el Nuevo Testamento.
4 – La Biblia nos revela:
A – El carácter de Dios.
B – El amor de Dios.
C – El plan de Dios para nuestra vida.
D – Todas las anteriores.

Tarea:
Escriba todos los nombres de los libros de la Biblia
y memorícelos.
 CAPÍTULO 3 – LA ORACIÓN PERSONAL
Orar a Dios es platicar con Él, decirle lo que siente,
lo que necesita; expresarle cuánto le ama. Esto le
acercará más a Él. Usted sentirá paz al estar con
Él en oración. No importa el lugar ni la posición,
para platicar con Dios; lo importante es acercarse
a Él con corazón sencillo, sabiendo que Él le está
escuchando. No necesita rebuscar las palabras;
sino más bien, use las palabras que brotan
espontáneamente de su corazón. Dios es un
Padre Amoroso que está dispuesto a escuchar a
Sus hijos. Él tiene millones de hijos, pero como Él
es Omnipresente y Omnisciente, puede escuchar
y responder a todos y a cada uno en todo lugar.
Jesús es nuestro modelo de oración, Él dejó
establecido en Su Palabra como debemos orar:
1. Debemos orar y pedir en el Nombre de Jesús.
Juan 14: 13,14; 16:23
2. Reconociendo nuestra posición de hijos de
Dios. Romanos 8:32 Mateo 6:9
3. Parados en la Palabra de Dios. Juan 15:7
Santiago 4:2,3
4. No dudando en el corazón. Marcos 11:23-24
5. Orar con persistencia. Lucas 11:5-8
La Biblia nos enseña que necesitamos orar:
1. Para no entrar en afán o ansiedad. (2 Pedro 5:7.
Juan 16:231
2. Para no entrar en tentación. (Mateo 26:41)
3. Para dar a luz todas las cosas (milagros,
sanidades, salud) (1 Reyes 18:41.42)
4. Porque Jesús mismo estableció la necesidad de
orar siempre. (Lucas 18:1.8)

Para desarrollar una vida de oración necesitamos:

1. Disciplina
2. Perseverancia
3. Compromiso con Su Palabra. Cuando oramos
debemos dejar tiempos de silencio para escuchar
a Dios; la verdadera oración es un diálogo, no un
monólogo. Nuestra oración personal debe de ser
algo íntimo, privado. En estos momentos vamos
siendo transformados por Dios, somos
confrontados a veces, en otras ocasiones somos
consolados, a menudo Dios nos anima y siempre
nos fortalece a través de la oración.
AUTOEVALUACIÓN
1 – Orar es:
A – Platicar con Dios.
B – Decirle lo que uno siente y necesita.
C – Expresarle a Dios cuanto le amamos.
D – Todas las anteriores.

2 – La Biblia nos enseña que debemos orar

para:
A – No entrar en tentación.
B – Que se mueran los malos.
C – No entrar en afán y ansiedad.
D – A y c son correctas

3. ¿Cuál de las siguientes afirmaciones es

incorrecta?
A – Dios escucha al temeroso de Él.
B – Dios escucha al pecador.
C – Dios responde al que le clama.
D – Dios conoce el corazón antes de que
hablemos.

4. Según Juan 14:13-14 debemos orar pidiendo

en el nombre de:
A – Jesucristo
B – Su Pastor
C – San Pedro
D – La virgen de Suyapa

Tarea:
Escriba tres versículos donde cada uno mencione:
a) Oración de acción de gracias
b) Oración persistente
c) Oración de fe
 CAPÍTULO 4 – LA CONGREGACIÓN DE
LOS SANTOS
Dios, por Su Espíritu y Su Palabra, ha creado la
Iglesia, al llamar a los que estaban en tinieblas, a
Su luz admirable. Cada uno de nosotros a nivel
personal es templo del Espíritu Santo; cuando
Jesucristo viene a morar a nuestro corazón,
somos Su iglesia, somos Su templo. (1 Corintios
3:16, 6:19, Hechos 7:48)
Existe también el concepto de la iglesia local o
congregación que se reúne en un lugar
determinado y tiene un liderazgo establecido por
Dios. La reunión de los santos también es iglesia
o templo espiritual de Dios. (Hechos 2:46)
Pero también conocemos la iglesia de Jesucristo
a nivel universal, el Cuerpo de Cristo que está
diseminado en todas partes del planeta tierra.
Nosotros somos bautizados en un solo cuerpo, por
el Espíritu Santo que nos hace miembros de él;
somos un sinnúmero de miembros con diferentes
funciones, pero un solo cuerpo, con una sola
cabeza, Jesucristo. (Romanos 12:5, Efesios 4:4)
Tenemos la responsabilidad de cuidar el templo
personal, el templo físico donde nos reunimos y el
templo universal o comunión de todos los santos
como una sola iglesia.
Debemos evitar las imprudencias que afecten
nuestro cuerpo físico; debemos cuidar cada
utensilio de la casa de Jehová y mantenerlo limpio;
también cuidaremos de mantener la unidad y
armonía entre todos los miembros del templo de
Dios o cuerpo universal de Cristo.
Hay un solo cuerpo y una sola cabeza (Jesucristo
resucitado); según es la naturaleza de la Cabeza,
así deberá ser también la naturaleza del Cuerpo
resucitado, santo, puro, unido, en armonía,
fluyendo en amor). Colosenses 1:18
No podemos por nosotros mismos ser parte de
ese Cuerpo espiritual, sino que el Espíritu Santo
es el que llama, toca, a personas de toda cultura y
época para que tengan comunión en el Cuerpo de
Cristo a través de la redención por la Sangre de
Su Hijo. (1 Corintios 12:13). Dios fluye a través del
Cuerpo de Cristo para edificar Su iglesia, por
medio de los dones del Espíritu Santo, de las
operaciones del Padre y de los ministerios
instituidos por Jesucristo, para preparar a los
santos para el ministerio. Efesios 4:16, 1 Corintios
12:27
La iglesia existe para adorar a Dios y servirle, ha
sido comisionada a proclamar las buenas nuevas
y para hacer discípulos a todas las naciones, así
como para mostrar a los principados y potestades
la multiforme sabiduría de Dios. Mateo 28:19 ,
Efesios 3:10
Describa en clase qué parte del Cuerpo cree usted
que es. Comparta con sus compañeros cómo
sabe que pasó a formar parte del Cuerpo.
AUTOEVALUACIÓN
1 – Jesús habló del templo en Juan 2:19-22
refiriéndose a:
A – El templo que construyó Salomón.
B – El templo de Artemisa.
C – Su propio cuerpo.
D – La sinagoga de Capernaum.

2 – Nosotros somos bautizados en un cuerpo

por:
A – El Espíritu Santo
B – El Pastor
C – La Santa Cena
D – Todas las anteriores.

3 – La naturaleza del cuerpo debe ser:

A – Santidad y pureza.
B – Resurrección y vida.
C – Armonía y fluir en amor.
D – Todas las anteriores.
4 – La iglesia o cuerpo es edificado mediante:
A – Los ministerios que da Cristo.
B – Los dones del Espíritu.
C – Las operaciones de Dios.
D – Todas las anteriores.

Tarea:
Escriba en su cuaderno cómo funciona la iglesia
del Señor como un cuerpo. Explique el propósito
del “Cuerpo de Cristo”.
 CAPÍTULO 5 – LA FE
Fe: creer a Dios en el corazón; creer en presente,
sin esperar (esto sería esperanza).
En la Palabra reconocemos tres tipos de fe.
La Fe para Salvación El Señor repartió una
medida de fe a cada cual (Romanos 12:3, 6). Esta
fe que está en nosotros es activada al oír la
predicación de la Palabra de Cristo. Los oídos son
abiertos por el rema de Dios (Romanos 10:17). La
salvación viene al hombre por Gracia (gratis). Se
recibe en fe, la cual también es regalo de Dios
(Efesios 2:8, Romanos10:9-10). A muchos no les
aprovechó la predicación de la Palabra, porque no
había fe en los que la oyeron; (Hechos 4:2). Sin fe
es imposible agradar a Dios (Hechos 11:6).
Muchos piden al Señor que les sea aumentada la
fe, sin embargo lo que necesitamos es ejercitar la
que tenemos, por microscópica que sea. La fe
está al servicio nuestro (Lucas 17:5-6). La fe viene
por el oír, el oír viene por la Palabra. La Palabra
aviva la fe (Romanos 10:17).
El Fruto de Fe
La Fe es parte del fruto del Espíritu Santo (Gálatas
5:22).
La Fe, como elemento importante de la armadura
de Dios, nos protege (Efesios 6:10-18).
La Fe vence al mundo (1 Juan 5:4). El fin de la fe
es la salvación de nuestras almas (1 Pedro 1:9).
Según Hechos 11:1, la Fe es:
• "La certeza de lo que se espera, la convicción de
lo que no se ve" (versión Reina Valera 1960)
• "La garantía de lo que se espera, la prueba de
las realidades que no se ven" (versión Jerusalén).
• "Tener fe es tener la plena seguridad de recibir
lo que se espera; es estar convencido de la
realidad de cosas que no vemos" (versión Dios
Habla Hoy).
• "La fe es la firme seguridad de las realidades que
se esperan, la prueba convincente de lo que no se
ve" (versión Reina Valera 1977).
• "La fe es la garantía de lo que se espera, la
certeza de lo que no se ve" (Nueva Versión
Intemacional).
Don de Fe
Es una fe sobrenatural que viene del Espíritu
Santo (1 Corintios 12:7-9), como la que operó en
Pedro y Juan cuando sanaron al cojo a la puerta
del templo (Hechos 3:1-10). Este don se
manifiesta a través de personas que han sido
bautizadas en el Espíritu y permanecen en su
Ilenura y plenitud.
AUTOEVALUACIÓN
1 – La fe es:
A – Creerle a Dios en el corazón.
B – La certeza de lo que se espera, la convicción
de lo que no se ve.
C – Sinónimo de “Esperanza”.
D – A y B son correctas.

2 – La fe en nosotros:
A – Puede ser aumentada.
B – Fue repartida con una medida.
C – Se aviva a través de las buenas obras.
D – El “don de fe” y el “fruto de fe” son lo mismo.

3 - ¿Cuál de las siguientes afirmaciones es

incorrecta?
A – Sin fe es imposible agradar a Dios.
B – La fe viene por el oír.
C – El fin de la fe es la glorificación de nuestros
cuerpos.
D – Por gracia somos salvos, mediante la fe.

4 – Según Efesios 6:10-18 la función de la fe

es:
A – Un escudo que apaga los dardos de fuego.
B – Una espada cortante de dos filos.
C – Cubrir nuestra mente para liberación.
D – Ceñir nuestros lomos con la verdad.

Tarea:
Escriba tres versículos donde cada uno mencione:
a ) Fe para salvación
b ) Fruto de fe
c ) Don de fe.
 CAPÍTULO 6 – LA GRACIA DE DIOS
De Adán a Moisés gobernó el pecado (la muerte)
(Romanos 5:14). Siendo esclavos del pecado,
aunque libres de la justicia pues no existía la ley
(Romanos 6:20). De Moisés a Juan dominó la ley
(Mateo 11:13; Romanos 5:20). Con Jesucristo
vino la Gracia (Juan 1:17).

¿QUÉ ES GRACIA?
Es la habilidad inherente a Jesucristo, para vencer
la tentación y el pecado. Es el poder de Cristo
operando a favor de la debilidad del hombre (2
Corintios 12:9). Los que por Jesucristo reciben la
abundancia de Su Gracia, podrán reinar en vida
(Romanos 5:17). Gracia significa gratis; la
recibimos sin pagar por ella, sólo por fe en
Jesucristo. Sin embargo la Palabra nos manda a:
• Crecer en Gracia y evitar caer en error (2 Pedro
3:17-18)
• Afirmar el corazón con la Gracia (Hechos13:9).
• Buscar la paz con todos y la santidad, no sea que
dejemos de alcanzar la Gracia (Hechos 12:14-
15).
• Esforzarnos en la Gracia (2 Timoteo 2:1).
• No recibir en vano la Gracia de Dios (2 Corintios
6:1).
La ley lleva en si castigo. El que está bajo la ley,
se abstiene de pecar por temor al castigo. Cristo
al introducir la Gracia a través de Sí mismo, no
anuló la ley, sino que la comprendió en un nuevo
mandamiento, el cual es la esencia de la Gracia
(Amor). Si cumplimos éste, está cumplida toda la
ley y no por temor al castigo (Mateo 22:37).
El que permanece en Gracia. (Naturaleza de
Cristo), no peca porque ama a Dios; si permanece
en amor permanece en Dios y Dios en él. (o sea
la Gracia permanece en él) (1 Juan 4:16-18).
Una característica del cristiano que vive en Gracia
es que ya el pecado no tiene dominio sobre él
(Romanos 6:14). El cristiano que vive bajo Gracia
ya no está bajo condenación, pues ya no anda
conforme a la carne, sino que anda en la Gracia,
al igual que Cristo es guiado por el Espíritu Santo
(Romanos 8:1-4, 14). Caminar en Gracia es
depender totalmente de Dios para ir siendo
transformado. Es reconocer que la capacidad de
Dios está por encima de nuestras debilidades.
Si nos salimos de la guianza del Espíritu Santo,
andaremos en la carne, abriendo puerta al pecado
y entrando en condenación. Esto nos aleja de la
gracia.
AUTOEVALUACIÓN
1 – 1. Escoja la declaración incorrecta:
A – De Adán a Moisés gobernó el pecado.
B – De Moisés a Juan dominó la ley.
C – De Elías a Malaquías sobresalió la justicia.
D – Con Jesucristo vino la Gracia.

2 – Gracia de Jesucristo es:

A – La habilidad de Cristo para vencer el pecado.
B – El poder de Cristo en favor de nuestra
debilidad.
C – Aquello que al recibirlo en abundancia nos
permitirá reinar en vida.
D – Todas las anteriores.

3 - La Palabra nos manda a:

A – Crecer en Gracia y evitar caer en error.
B – Afirmar el corazón con la gracia.
C – No esforzarnos si es que estamos en gracia.
D – Sólo a y b son correctas.
4 – 4. Una característica del cristiano que
vive en Gracia es:
A – Ya no está bajo condenación.
B – El pecado no tiene dominio sobre él.
C – Permanece en amor (en Dios) y Dios en él.
D – Todas las anteriores.

Tarea:
Describa basado en la Biblia lo que debemos
hacer para no dejar de alcanzar Su gracia.
 CAPÍTULO 7 – EL ESPÍRITU SANTO
El Espíritu Santo es una persona de la trinidad de
Dios (Mateo 28:18-19). Él ha estado alrededor de
toda la creación, desde el principio (Génesis 1:2).
El Espíritu Santo durante el Antiguo Pacto venía
sobre los hombres de Dios para darles fuerza y
sabiduría para realizar una misión (Jueces 14:6; 1
Samuel 10:10, 11:6, 16:13, 19:20).
El Espíritu Santo vino sobre Jesús en el vientre de
María (Mateo 1:18). El Espíritu Santo vino sobre
Jesús para ungirlo con poder; para que echara
fuera demonios y sanara enfermos (Hechos
10:38; Mateo 3:16; Lucas 4:18; Mateo 12:28).
Jesús habló de la necesidad de recibir al Espíritu,
al cual Él enviaría después de resucitar. (Lucas
24:49; Juan 16:7).

FUNCIONES DEL ESPÍRITU SANTO

• Maestro, nos enseña todas las cosas que Jesús
no tuvo tiempo de enseñarnos (Juan 14:26)
• Consolador (Juan 16:7)
• Espíritu de Verdad (Juan 14:17, 15:26)
• Guía a los hijos de Dios (Romanos 8:14)
• Revela a los hombres de Dios Sus misterios (1
Corintios 2:10)
• Trae libertad con Su presencia (2 Corintios 3:17)
• Habla a los siervos de Dios de misiones
específicas (Hechos 8:29; Hechos 10:19)
• Da testimonio a nuestro espíritu de que somos
hijos de Dios (Romanos 8:16)
• Nos ayuda en la debilidad (Romanos 8:26)
• Intercede por nosotros (Romanos 8:26)
• Nos bautiza en el Cuerpo de Cristo (1 Corintios
12:13)
• Nos permite reconocer el Señorío de Jesucristo
(1 Corintios 12:3)

EL ESPÍRITU SANTO HOY

• El Espíritu Santo está con y alrededor de todo
hombre dándole convicción de error, de pecado,
de justicia y juicio (Juan 14:17, 16:8)
• El Espíritu Santo está en su interior como “ríos
de agua viva” (Juan 7:38)
• El Espíritu Santo está sobre aquellos a los cuales
Él viene (Hechos 1:8)
El Espíritu Santo vino a la tierra cuando estaban
los discípulos unánimes juntos en el Aposento Alto
(Hechos 2:4). Vino para habitar y operar desde el
interior de los hombres y está disponible para todo
hombre que se lo pida al Padre (Lucas 11:13). Él
es la voz de Dios para la iglesia (Apocalipsis 2:7).
AUTOEVALUACIÓN
1 – El Espíritu Santo...
A – Es una persona de la Trinidad de Dios
B – Ha estado en la creación desde el principio
C – Engendró a Jesús en el vientre de María
D – Todas las anteriores

2 – Dice que el Espíritu Santo ungió a Jesús

con poder para liberar y sanar es:
A – Hechos 1:8
B – Hechos 10:38
C – Hechos 6:18
D – Hechos 10:8

3 – ¿Cuál NO es función del Espíritu Santo?

A – Nos enseña todas las cosas
B – Guía a los hijos de Dios.
C – Cuando pecamos, nos da convicción de que
ya no somos salvos.
D – Intercede por nosotros
4 – La diferencia entre el Antiguo Pacto y el
Nuevo, en relación al Espíritu Santo, es que...
A – Venía sobre ellos, hoy vive en nosotros.
B – Era el Maestro, ahora es el Consolador.
C – Estaba en el Arca, ahora está en el cielo.
D – Ungía a los Levitas, hoy sólo a los de Judá.

Tarea:
Escriba cinco funciones del Espíritu Santo con sus
respectivas citas bíblicas.
 CAPÍTULO 8 – AMOR Y PERDÓN
El amor es Dios mismo, porque Dios es amor.
Amar y perdonar es la vivencia de ser nacido de
Dios y conocer a Dios (1 Juan 4:7-8). Jesús dijo
que Sus discípulos serían conocidos por el amor
(es la insignia) (Juan 13:35). Dios amó y ama
eternamente al hombre, por lo cual Jesús puso Su
vida por nosotros (1 Juan 3:16; 4:10).
El gran mandamiento consiste en amar a Dios con
toda nuestra intensidad y todo nuestro ser. Luego
en amarnos a nosotros mismos, para poder amar
al prójimo como a nosotros mismos (Mateo 22:37-
39).
El hombre (varón o mujer) que no conoce el amor
perfecto (o no lo vive) guarda en el fondo de su
corazón “lo que le hicieron”; este hombre también
reincide una y otra vez en las faltas cometidas,
puesto que en él no hay conciencia de que afecta
a los demás. Necesitamos al Espíritu Santo para
perdonar y poder pedir perdón (Juan 16:8).
Antes de Jesucristo no se manifestaba el perdón
entre los hombres (Éxodo 21:23-25; Levítico
24:17-22; Deuteronomio 19:21). Ahora Dios nos
manda a perdonar toda ofensa (Romanos 12:17-
20). El Señor nos manda a perdonar hasta setenta
veces siete (Mateo 18:22). Él nos manda a amar
a nuestros enemigos, a bendecir a los que nos
maldicen y pagar con el bien el mal (Mateo 5:44;
Romanos 12:14). Es necesario perdonar para que
el Señor nos perdone a nosotros (Mateo 6:14-15).
La naturaleza del amor se describe muy bien en 1
Corintios 13:4-7. Ésta descripción corresponde a
Dios mismo, así es Su carácter: Paciente,
tolerante, despojado, no guarda rencor
(perdonador).
El perdón es fruto de salvación y debe ser dado de
todo corazón (Mateo 18:23-35; Colosenses 3:13;
Efesios 4:32). El hombre soberbio y altivo tiene
dificultad para perdonar y para pedir perdón.
El perdón es una decisión voluntaria, para no
perder la comunión y andar en luz (1 Juan 1:7-9).
Perdonamos para ser libres y librar de
sentimientos negativos a la otra persona (Mateo
5:23-24).
Satanás vino para matar, hurtar y destruir
(Juan10:10), por eso nuestra carne nunca desea
perdonar, y el enemigo se aprovecha para
hacernos sentir miserables y víctimas. La falta de
perdón produce amargura, la cual contamina a los
demás (Hebreos 12:14-15).
La falta de perdón es pecado y trae consigo
enfermedad. Es necesario confesar y que oren por
nosotros, para recibir sanidad, salud (Santiago
5:14-16).
Necesitamos perdonarnos a nosotros mismos por
el pasado o por errores cometidos, para recibir
libremente el perdón del Señor, sabiendo que Él
lanzó nuestros pecados al fondo del mar para no
acordarse más. Jesús no nos acusa, sino el diablo
(Miqueas 7:19, Isaías 43:25).
Debemos perdonar a toda persona que nos haya
hecho daño, ofendido o herido; porque la Palabra
nos manda a procurar la paz con todos (Hebreos
12:14). Perdonamos, no porque sintamos, sino
que lo hacemos por amor al Señor y obediencia a
la Palabra. Él pondrá Su querer en nosotros
(Filipenses 2:13).
AUTOEVALUACIÓN
1 – 1 Corintios 13 describe el amor así:
A – Paciente, tolerante, no guarda rencor
B – No se envanece, no tiene envidia
C – Todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta
D – Todas las anteriores

2 – El perdón es:
A – Fruto de salvación
B – Una decisión voluntaria
C – a y b son correctas
D – No olvidar la ofensa

3 – La falta de perdón produce:

A – Amargura
B – Enfermedad
C – Rencor y deseo de venganza
D – Todas las anteriores

4 – Jesús nos enseñó que debemos perdonar:

A – Hasta setenta veces siete
B – Al amigo y al enemigo
C – Sólo al que nos pida perdón
D – a y b son correctas

Tarea:
Escriba en su cuaderno los nombres de las
personas a las cuales usted necesita pedir perdón;
haga otra lista de personas a las cuales debe
perdonar.
 CAPÍTULO 9 – EL BAUTISMO
La palabra “Bautizar” proviene de la raíz griega
“rantizar” que significa sumergir, se aplicaba a la
práctica de meter las telas en un colorante, hasta
que estas eran teñidas. La Palabra bautismo
implica un estado de inmersión total y completa.
En la Biblia se mencionan varios tipos de
Bautismo, así:

BAUTISMO EN SU CUERPO
Es el Espíritu Santo el que nos sumerge (bautiza)
en el Cuerpo de Cristo (Efesios 4:5; 1 Corintios
12:13). Pero también sabemos que existen varios
bautismos espirituales con expresión natural o
externa, los cuales debemos experimentar.

BAUTISMO DE ARREPENTIMIENTO
Sabemos que Juan bautizó para arrepentimiento,
preparando el camino para recibir a Jesús.
Cuando el Espíritu Santo nos toca, dándonos
convicción de pecado, somos sumergidos
(bautizados) en las aguas de la misericordia de
Dios, preparándonos para recibir a Jesús. Algunos
experimentan llanto y quebranto, que son señal
externa de lo que ocurre en el interior.

BAUTISMO EN AGUAS
El bautismo en aguas es un mandato bíblico;
Jesús dijo: “El que creyere y fuere bautizado será
salvo”, “Por tanto, id, y haced discípulos a todas
las naciones, bautizándolos en el nombre del
Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo” (Marcos
16:16; Hechos 2:38).
No existe requisito alguno, ni preparación
necesaria para bautizarse, solamente creer en el
sacrificio de Jesucristo en la cruz, Su muerte y
resurrección. Todo aquel que cree, puede y debe
bautizarse, como muestra de su muerte a la carne
para resucitar con Cristo.
Todo aquel que tiene la autoridad para presentar
el Evangelio a alguien, también la tiene para
bautizarle. Leer acerca de Felipe y el Etíope
(Hechos 8:36)
BAUTISMO EN ESPÍRITU SANTO
Consiste en que el Espíritu Santo venga sobre el
creyente y le llene de poder para ser testigos de
Dios. Jesús fue ungido con el Espíritu Santo y con
poder, (Hechos 10:38) nosotros necesitamos ese
bautismo. El único requisito es haber recibido a
Jesús en el corazón y creer que Él nos bautiza con
Espíritu Santo y fuego (Lucas 3:16).
Una de las señales del bautismo del Espíritu
Santo, es hablar en otras lenguas (lenguas
espirituales), lo cual es diferente del don de
diversos géneros de lenguas; pero entendemos
que además, puede manifestarse cualquiera de
los dones del Espíritu Santo (Hechos 2:4).
AUTOEVALUACIÓN
1 – Bautismo o Bautizar significa:
A - Rociar con agua
B - Limpiar con agua
C - Sumergir en un líquido
D - Introducir una parte

2 – El propósito del Bautismo de Jesús fue...

A - Cumplir una señal para los judíos
B - Arrepentirse de sus pecados
C - Una estrategia para esconderse
D - Que los romanos lo apresaran

3 – El Bautismo en aguas debe hacerse

porque...
A - Es preparativo para el ministerio
B - Es una ordenanza bíblica
C - Nos hace miembros de la iglesia local
D - Es requisito para el bautismo del Espíritu
Santo
4 – El Bautismo en Espíritu Santo
A - Es necesario para vivir victoriosamente
B - Nos da poder
C - Nos capacita con dones
D - Todas las anteriores.

Tarea:
Escriba tres veces en su cuaderno el versículo 16
del capítulo 16 de Marcos. Explique la
importancia de ser bautizado en aguas. Exprese
verbalmente su deseo de bautizarse en aguas y
la razón para ello.
 CAPÍTULO 10 – DIEZMO, OFRENDA Y
PRIMICIAS
Dios establece tres maneras en que el hombre
debe darle a él:

1. EL DIEZMO
• Es Adoración a Dios
• Revela tu obediencia
• Es igual (proporcional para todos)
• Debe ser traído al alfolí
• Es previo a la ley
Y bendito sea el Dios Altísimo, que entregó tus
enemigos en tu mano. Y le dio Abraham los
diezmos de todo. (Génesis 14:20)
Y esta piedra que he puesto por señal, será casa
de Dios; y de todo lo que me dieres, el diezmo
apartaré para ti. (Génesis 28:22)

2. LA OFRENDA (SIN DEFECTO)

Había (y hay) tres clases económicas dentro del
pueblo:
• Los adinerados (abundancia): Debían traer
ganado
• Los de clase media (suficiencia): Traían oveja
• Los pobres (escasez): Podían traer tórtola
(véase la ofrenda memorable de la viuda. Marcos
2:41).
Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del
fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. Y Abel trajo
también de los primogénitos de sus ovejas, de lo
más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a
Abel y a su ofrenda; pero no miró con agrado a
Caín y a la ofrenda suya. (Génesis 4:3-5)
Por la fe Abel ofreció a Dios más excelente
sacrificio que Caín, por lo cual alcanzó testimonio
de que era justo, dando Dios testimonio de sus
ofrendas; y muerto, aún habla por ella. (Hebreos
11:4)
Por esto digo: El que siembra escasamente,
también segará escasamente; y el que siembra
generosamente, generosamente también segará.
Cada uno de cómo propuso en su corazón: no con
tristeza, ni por necesidad, porque Dios ama al
dador alegra. Y poderoso es Dios para hacer que
abunde en vosotros toda gracia, a fin de que,
teniendo siempre en todas las cosas todo lo
suficiente, abundéis para toda buena obra; como
está escrito: Repartió a los pobres; Su justicia
permanece para siempre. Y el que da semilla al
que siembra, y pan al que come, proveerá y
multiplicará vuestra sementera, y aumentará los
frutos de vuestra justicia, para que estéis
enriquecidos en todo para toda liberalidad, la
cual produce por medio de nosotros acción de
gracias a Dios. (2 Corintios 9: 6-11)

3. LAS PRIMICIAS
Las primicias de los primeros frutos de tu tierra
llevarás a la casa de Jehová tu Dios. (Éxodo
34:26)
Las primicias de tu grano, de tu vino y de tu aceite,
y las primicias de la lana de tus ovejas le darás.
(Deuteronomio 18:4)

PRINCIPIOS BIBLICOS
• Por la fe Recibes salvación
• Por la fe y actuar Recibes sanidad
• Por la fe, actuar y ofrendar Recibes
prosperidad
La fe mueve la mano de Dios; La ofrenda
conmueve el corazón de Dios. Si diezmamos y
ofrendamos podemos orar conforme a Malaquías
3:10-12
Amado, yo deseo que tú seas prosperado en
todas las cosas, y que tengas salud, así como
prospera tu alma. (3 Juan 2)
AUTOEVALUACIÓN
1 - Dios estableció tres maneras de darle a Él:
A - Diezmo, ofrenda y primicias
B - Oro, incienso y mirra
C - Oro, Plata y piedras preciosas
D - El aguinaldo y el catorceavo

2 - El diezmo:
A - Es proporcional para todos
B - Debe ser traído al alfolí
C - Es previo a la ley
D - Todas las anteriores

3 - Debemos ofrendarle a Dios:

A - Con gozo y generosidad
B - Como cada uno propuso en su corazón
C - Con fe y obediencia
D - Todas son correctas

4 - La primicia para Dios profetiza sobre:

A - Liberación
B - Danza
C - Cristo el Primogénito
D – Pentecostés

Tarea:
Escriba tres citas bíblicas que hablen del diezmo,
ofrenda y primicias.
CAPÍTULO 11 – PATERNIDAD DE DIOS Y
SANIDAD DEL ALMA
El Pacto que Dios hizo con la humanidad o la
razón por la cual Dios creó al hombre fue para
poder tener hijos; el Padre envió a Jesús, Su Hijo,
para que viniera y nos reconciliara consigo y nos
diera Su naturaleza, para que todos los hombres
(varones y mujeres) que habitaran la tierra y
creyeran en Su muerte y Su resurrección, fueran
Sus hermanos e hijos de Dios. (Juan 1:12)
A lo largo de toda la Escritura vemos que El Pacto
de Dios siempre fue: “Y Yo les seré a ellos por
Padre y ellos me serán por hijos”, ese es El Pacto
de Dios, que Él será nuestro Padre y nosotros Sus
hijos. (2 Samuel 7:14, 1 Crónicas 17:13)
Cuando llegamos al Señor le adjudicamos a
nuestro Padre celestial, o le damos
inconscientemente a nuestro Dios, características
que tenía nuestro papá terrenal, porque sólo
trasladamos la imagen, y entonces vemos a
nuestro Padre Dios con todos los defectos, con
todas las imperfecciones, y la dureza de él. Se nos
hace difícil ver a nuestro Padre celestial como el
Padre Bueno, el Padre Amoroso del cual nos
habla la Escritura; el Padre que nos sienta en Sus
rodillas, el que nos mima, el que nos expresa
palabras dulces.
Jesucristo nos acercó a un Padre que es bueno y
que se complace en darnos aun en lo más
sencillo; Él es un Padre que nos consiente.
Para que un niño crezca normalmente, sano
espiritualmente y emocionalmente es necesario
que haya una mamá y un papá en casa, esta es
una realidad que no podemos evadir.
Si vemos que la relación con nuestro papá y
nuestra mamá afecta nuestra relación con Dios,
entonces entendemos por qué Dios quiere sanar
esa área de nuestra vida, y ¿Cuál es el propósito
de Dios? Que podamos ir confiadamente donde
nuestro Papito, a Sus rodillas, a mamar de Sus
pechos y a sentirnos abrazados por Él, sabiendo
que estamos escondidos en Él y que tenemos
quien nos proteja en todo tiempo. Sin embargo,
sólo el Espíritu Santo es capaz de suplir los vacíos
de amor de padre y madre.
Aunque mi padre y mi madre me dejaran, con
todo, Dios me recogerá. (Salmos 27:10).
¡Qué consuelo que nuestro Dios dice que aunque
nuestro padre y nuestra madre nos dejaran con
todo y eso Él nos recogerá! Él es Padre de
huérfanos; Él es Padre aunque no hubiéramos
tenido una buena madre o un buen padre en lo
natural (Salmos 68:5).
AUTOEVALUACIÓN
1 - La razón por la cual Dios creo al hombre fue:
A - Tener hijos
B - Tener comunión con el hombre
C - Tener esclavos
D - a y b son correctas

2 - Para que un niño crezca sano espiritual y

emocionalmente necesita:
A - Crecer en un hogar con papá y mamá
B - Recibir expresiones de amor
C - Ser corregido en amor
D - Todas las anteriores

3 - Para poder tener una relación con Dios

como nuestro Padre necesitamos:
A - Perdonar a nuestros padres naturales
B - Permitir al Espíritu Santo sanar nuestro
corazón de heridas del pasado.
C - Reconocer a Dios como nuestro Padre
D - Todas las anteriores

4 -La relación de hijos a Padre nos produce.

A - Seguridad y confianza
B - Orgullo y vanagloria
C - Deseos de llorar
D - Odio a los padres terrenales

Tarea:
Busque en la Biblia por lo menos tres versículos
que describen a Dios como Padre y anótelos en
su cuaderno. Prepárese a compartir con sus
compañeros su experiencia con Dios como su
Padre esta semana.
 CAPÍTULO 12 – LIBRES DE OPRESIÓN
(POR LA UNCIÓN Y POR LA PALABRA)
Había sido profetizado por Isaías que Jesús
vendría para dar libertad a los cautivos y a los
oprimidos.
El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí,
porque me ungió Jehová; me ha enviado a
predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar
a los quebrantados de corazón, a publicar libertad
a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel;
a proclamar el año de la buena voluntad de
Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a
consolar a todos los enlutados; a ordenar que a
los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de
ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de
alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán
llamados árboles de justicia, plantío de Jehová,
para gloria suya. (Isaías 61:1-3)
La unción del Espíritu Santo es la que hace que se
pudran los yugos de esclavitud (con el pecado y
con el diablo) y que se quite la carga de nuestros
hombros.
Jesús fue ungido con el Espíritu Santo para
darnos libertad de la opresión que el enemigo
ejercía sobre nosotros. (Isaías 10:27)
Vosotros sabéis lo que se divulgó por toda Judea,
comenzando desde Galilea, después del bautismo
que predicó Juan: cómo Dios ungió con el Espíritu
Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo
éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos
los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba
con él. (Hechos 10:37-38)
Colosenses 1:12-14
A través de Jesucristo fuimos capacitados por el
Padre para participar de la herencia de los santos
en luz. Hemos sido librados de la potestad de las
tinieblas sobre nosotros. Hemos sido trasladados
del mundo de las tinieblas al Reino de la luz (de
Su Hijo). Fuimos redimidos por la Sangre de
Cristo. Recibimos perdón de los pecados en
Cristo.
Si hemos nacido del Espíritu y conocemos la
Verdad, tenemos autoridad sobre el enemigo; y el
Diablo y sus Demonios no tienen potestad ni
dominio sobre nuestras vidas, a no ser que:
• No haya arrepentimiento genuino del pecado
• Sigamos practicando el pecado y andando en
las obras de la carne
• Haya un derecho legal del enemigo sobre
nosotros

DERECHOS LEGALES
• Falta de perdón en el corazón
• Pacto previo con las tinieblas
• Ignorancia e imprudencia
• No tomar la autoridad de Dios
• No permanecer en la Palabra
• Poseer artículos contaminados o dedicados
que son asideros del diablo
• Levantarse contra un ungido de Dios
Jesús es “La Palabra”, Su Palabra es Verdad, la
cual nos hace libres.
Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído
en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra,
seréis verdaderamente mis discípulos; y
conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
(Juan 8:31)
Nosotros vamos siendo libres en todas las áreas
de nuestra alma y nuestro cuerpo en la medida
que vamos siendo expuestos a la Unción y a la
Palabra. Por eso es muy importante participar de
las reuniones espirituales de nuestra
congregación, donde el Espíritu Santo se
manifiesta a través de los dones espirituales que
están repartidos en el cuerpo de Cristo.
Es posible que necesitemos ser liberados de
ataduras del pasado o de la influencia de espíritus
familiares, por ejemplo de alcoholismo, de lascivia,
de mentira, de temor y muchos más. El primer
paso en la liberación es estar conscientes de la
necesidad que tenemos de ser libres, lo segundo
es estar seguros que el Señor lo hará a través de
la Unción y Su Palabra operando en nosotros.
Medite en todas aquellas áreas que han sido
fuente de pecado en su vida. Ore sobre ello, pida
al Espíritu Santo que le ilumine, que le revele
sobre esas áreas y pídale al ministro o la persona
que le está enseñando el discipulado que efectúe
una liberación profética en su vida.
AUTOEVALUACIÓN
1 - La Liberación de la Opresión:
A - Está disponible para todos
B - Sólo es para los recién convertidos
C - Es un concepto muy nuevo
D - a y b son correctas

2 - Para crecer sano espiritualmente se

necesita:
A - Ser liberado por la Palabra
B - Ser expuesto a la unción del Espíritu
C - Ser libre de opresión
D - Todas las anteriores

3 - Para mantener la Liberación necesitamos:

A - Perdonar y pedir perdón por ofensas
B - Renunciar a todo pacto con las tinieblas
C - Reconocer las artimañas del diablo y tomar
autoridad
D - Todas las anteriores
4 – Los yugos que nos oprimen se pudren
mediante:
A - La unción del Espíritu Santo
B - La Biblia
C - Orar
D – Creer

Tarea:
Revise los artículos, adornos o recuerdos que
tiene en su casa; pídale al Espíritu Santo que le
revele que cosas pueden producir opresión y si
tiene convicción, deshágase de ellos.
 CAPÍTULO 13 – TESTIFICANDO A
OTROS
Jesús dejó establecido que la venida del Espíritu
Santo tenía como primordial objetivo recibir el
poder para ser testigos de Él. Ser testigos significa
que hemos experimentado algo especial en Dios
y que queremos compartirlo con otros.
Los apóstoles que anduvieron con Jesús daban
testimonio del poder de la resurrección que
levantó a Cristo de entre los muertos; este
testimonio es poderoso, porque demuestra que
Jesús es el Hijo de Dios, el Mesías prometido.
Testificar a otros de lo que Dios ha hecho con
nosotros, cuando le damos a Él la gloria y el
mérito, tiene poder para tocar la vida de los
oyentes.
Testificar a otros nos garantiza que la fe nuestra
está siendo avivada cada vez que recordamos y
expresamos las obras de Dios. Cada vez que
compartimos con otros de lo maravilloso del
Señor, nuestro interior está siendo llenado de vida,
de unción fresca.
Hablar a otros de lo que el Señor hace en nuestra
vida podemos verlo en la Biblia con la Samaritana
(Juan capítulo 4); cuando ella fue impactada por el
Señor, ella inmediatamente dejó su vida vieja,
salió corriendo y decía: “Venid y Ved…” contaba
lo que le ocurrió y por causa de su testimonio, se
convirtió todo un pueblo llamado Sicar.
También podemos ver en Hechos 3:8, como el
paralítico que fue sanado en la puerta del Templo
La Hermosa, saltaba y brincaba y glorificaba a
Dios. Era evidente que él le estaba dando la gloria
a Dios por su sanidad y que ahora hacía lo que
antes no podía (saltar).
No debemos callar las maravillas de Dios. Hemos
sido llamados para declarar las virtudes de Aquel
que nos llamó de las tinieblas a Su Luz admirable.
(1Pedro 2:9; Lucas 19:37-40)
Cuando testifiquemos debemos cuidar de
reconocer que es por el Poder de Dios que hemos
sido sanados, liberados, o que hemos sido
cambiados; es por Su gracia. Nunca debemos
darle el reconocimiento a tal o cual Institución,
persona o congregación; porque siempre es Dios
quien opera a través de los vasos que Él escoge y
como Él quiere.
Un testimonio es más efectivo cuando es breve y
conciso; se exalta a Dios y no se le da tanto detalle
e importancia a lo que el diablo hizo, sino a lo que
Cristo ha hecho.
Debemos recordar que es cuando reconocemos el
mérito de la sangre de Cristo derramada por
nosotros, y el Poder del Espíritu Santo que levantó
a Jesús, que habrá autoridad en el testimonio.
AUTOEVALUACIÓN
1 - Testificar es:
A - Compartir con otros sobre lo que Dios hizo
B - Declarar el poder de Dios operando en
nosotros
C - Necesario y edificante
D - Todas son correctas

2 - Para que el Testimonio sea efectivo:

A - Debe ser conciso, breve
B - Debe ser genuino, no exagerando
C - Debe reconocer a Dios en todo
D - Todas las anteriores

3 - Un ejemplo bíblico de testificar a otros es:

A - La mujer de Betania
B - Débora la Profetisa
C - La Samaritana
D - La mujer del flujo de sangre
4 – El poder del Espíritu Santo viene sobre
nosotros para:
A - Que experimentemos el fuego
B - Que hablemos lenguas
C - Ser testigos de Él
D - Convertirnos en Pastores

Tarea:
Anote en su cuaderno por lo menos tres obras que
Dios ha hecho en su vida. Propóngase durante la
próxima semana para testificar por lo menos a tres
personas, que no conocen al Señor, de lo que
Dios hizo en su vida.
 CAPÍTULO 14 – EL SERVICIO EN DIOS
Jesús dijo que el que quisiera ser mayor de todos,
fuera el servidor de muchos (Mateo 23:11).
También dijo que donde estuviera Su servidor,
estaría Él (Juan 12:26). Hay muchos siervos de
Dios a lo largo de toda la Escritura, cada uno con
un diferente llamado, pero en todos hay una
coincidencia; Dios nunca llamó a los
desocupados, sino a aquellos que estaban
sirviendo.
Ser Su siervo es ser Su esclavo y reconocerlo
como Señor de nuestra vida. Para ser Su esclavo,
debemos estar seguros de oír Su voz y obedecer
sin rebeldía. Ser siervo es bajarnos a la condición
de sirvientes incondicionales de Dios. En verdad
no hay derechos para el siervo; la única
recompensa es vivir en Su casa y ser alimentados
por Él.
Jesús fue la máxima expresión del “Siervo”; vino
para servir a la humanidad. Él es el ejemplo que
debemos seguir (Isaías 42:1, 42:19, 43:10; Mateo
23:11; Fil. 2:7). La condición de Jesús como
siervo, llegó al punto máximo de servir Su propia
vida por la nuestra.
Aceptar el llamado de “siervo” es necesario para
llegar a ser amigo de Dios. La palabra ministerio
es sinónimo de la palabra servicio; un ministro es
un siervo. Los apóstoles de Jesús se identificaban
a sí mismos como “siervos de Dios o de
Jesucristo” (Judas 1, 2 Pedro 1:1, Santiago 1:1,
Ro. 1:1). María, la madre de Jesús es un fiel
ejemplo de sierva (Lucas 1:38). Todo hombre
(varón o mujer) que decide ser un verdadero
discípulo de Cristo, debe comenzar haciendo
labores de siervo. Parte de la formación básica
para funcionar un día dentro del llamado de Dios
al ministerio, ha de comenzar en el corazón.
Necesitamos tener un corazón de siervo, para vivir
como tal. Si tenemos un corazón altivo no
seremos capaces de vivir como siervos. Aunque
sirvamos a los hombres, siempre hemos de
hacerlo con la motivación correcta que es la de
servir primeramente a Dios. Aquel que pretende
agradar a los hombres antes que a Dios, deja de
ser “siervo de Dios” (Gálatas 1:10). La Biblia nos
exhorta a realizar el servicio de todo corazón a
Dios, no para agradar al ojo humano, sino para
agradar a Dios (Efesios 6:7)
Todo lo que nuestras autoridades espirituales nos
pidan hacer (o veamos necesario hacer) debemos
hacerlo como para el Señor. (Colosenses 3:22-23)
La congregación debe de ser una comunidad
donde por amor nos sirvamos unos a otros.
(Gálatas 5:13) Los verdaderos siervos de Dios
tienen un corazón conforme al Suyo; por lo tanto,
cuando servimos a un siervo que tiene un corazón
conforme al corazón de Dios, vamos a agradarlo
a Él.
AUTOEVALUACIÓN
1 - La oportunidad de servir:
A - Está disponible para todos
B - Sólo es para los miembros muy maduros
C - Es para quienes toman cursos especiales
D - b y c son correctas

2 - Para que el servicio sea de bendición hay

que:
A - Hacerlo de todo corazón
B - Hacerlo con diligencia
C - Hacerlo como para Dios
D - Todas las anteriores

3 - Nuestro ejemplo en cuanto al servicio es:

A - El Club Rotario
B - El Club de Leones
C - Jesús
D - Todas las anteriores
4 - Jesús dijo que el que quiera ser mayor de
todos:
A - Sea preponderante
B - Estudie Teología
C - Lea toda la Biblia
D - Sea servidor de muchos

Tarea:
Si usted está sirviendo en alguna área de la
Iglesia, prepárese para testificar de la bendición
que esto es. Si aún no lo está haciendo,
dispóngase hoy mismo, vaya a las oficinas de la
Iglesia y anótese para servir en el área donde le
gustaría hacerlo.