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Nivel I Módulo II Ámbito CientíficoTecnológico
Unidad de aprendizaje 1 Percibimos y representamos los objetos
Introducción
Cualquier descripción de un objeto comienza por un análisis de la forma que lo caracteriza y, en este
sentido, la geometría, es una de las ramas fundamentales de las matemáticas, pues permite
reconocer, describir y analizar las propiedades de los cuerpos geométricos en tanto que son formas.
Por eso comienza el tema con la descripción y estudio de los cuerpos geométricos fundamentales.
La forma, desde una perspectiva geométrica, no es sólo una característica que permite clasificar los
objetos en entidades: cuadradas, triangulares, circulares, etcétera; sino que permite obtener de ellos
datos que son de utilidad en los más diversos problemas de la vida cotidiana. Por ejemplo, el cálculo
de perímetros y áreas se aplica a diario, en el hogar o en la compra de parcelas o pisos; el uso de
escalas, por su parte, resulta básico en la interpretación de mapas o de planos.
Captar la naturaleza geométrica de los objetos es un primer paso; el siguiente es ser capaz de
expresar en términos geométricos aquello que queremos o necesitamos de un objeto. Ese
constituye el objeto de la segunda parte de la unidad.
El procedimiento más sencillo para poner de manifiesto esas propiedades es mediante la realización
de un boceto. Así conseguiremos comunicar, por ejemplo, cómo es la estantería que queremos, la
cocina que deseamos para nuestra casa o la pieza de la maquinaria que queremos fabricar. Para
optimizar la capacidad de elaborar bocetos y croquis, se revisa la utilización de los instrumentos
básicos de dibujo, así como algunas técnicas sencillas de representación; para concluir mostrando
nuevas herramientas y posibilidades mediante la aplicación del diseño a través del ordenador.
La tercera parte de la unidad reflexiona sobre cómo el ser humano es capaz de captar e interpretar
esa forma de los objetos. Se parte del análisis de la luz como realidad que puede ser descrita
geométricamente, para introducirnos posteriormente en el estudio del sentido de la vista y, a
continuación, del sentido del oído.
Los sentidos perciben los objetos exteriores, pero el significado de éstos sólo puede ser captado
gracias al sistema nervioso. Con su estudio se cierra la unidad: una revisión básica de cómo
percibimos los objetos, y una aplicación práctica de cómo los representamos y de cómo utilizamos
sus propiedades en nuestra vida cotidiana.
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