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ÍNDICE

Introducción 1
Bloque 1: Enfoque Estructural de la función SUJETO 7
Aspectualización y estado de la cuestión en el Cuadernillo de
aula 11
Caracterización formal: el Sujeto léxico o explícito 15
Criterio 1: Concordancia con verbo 18
Criterio 2: La categoría del Sujeto 21
Criterio 3: Las posiciones del Sujeto 21
Impersonalidad de la oración: el Sujeto cero 23
El Sujeto Tácito: precisiones sobre el Sujeto explícito y el Sujeto
desinencial 25
Bloque 2: Enfoque Sistémico-Funcional 28
Sistemas de opciones: diferentes estratos de significado 34
a) Transitividad: el Sujeto lógico en la organización de la
experiencia 36
b) Modalidad: el Sujeto gramatical y los significados
interpersonales 40
c) Textual: el Sujeto psicológico en la progresión temática 49
c.I) El orden de los recursos léxico-gramáticos, prominencia
temática y las funciones Tema y Rema 51
c.II) Las opciones de Tema Marcado y No Marcado: el Sujeto-
Tema 54
c.III) Un recurso cohesivo: alternancia de Sujeto explícito y
Sujeto gramatical 58
c.IV) Desambiguación 60
c.V) Progresión temática 61
c.VI) Macro-Tema e Hiper-Tema: implicancia didáctica en la
comprensión y producción de textos 65
Bloque 3: Secuencia Didáctica 67
Revisión estructural y reformulación funcional del Sujeto 67
Descripción y ejemplificación del dispositivo didáctico 69
Referencias bibliográficas 70
Referencias de los textos analizados e incluidos en la Secuencia
Didáctica 72
Anexo 72

Introducción Comentado [1]: Sugiero agregar el BLOQUE


PRESENTACI´´ON u tendría las partes y suntítulo
(corregidos) de oq e presentaste en el proyecto. Esta
introducciión iría a algun apartado de esa
presentacioón. Los bloques 1 y 2 serían marco teóric

Uno de los principales objetivos que guían la presente propuesta Comentado [2]: No sé si es objetivo o punto de part

de intervención didáctica se centra en el relevamiento de


contenidos gramaticales que forman de la planificación del espacio
curricular Lengua y Literatura del Ciclo Básico, cuya cristalización
ha obstaculizado un tratamiento didáctico que impacte en el
mejoramiento de la comprensión lectora y de la producción escrita.

1
El eje de la propuesta girará en torno a las conceptualizaciones
relativas a la función Sujeto y los tipos de significados que
concurren en ella, no solo para evaluar y reformular el estado de la
cuestión en el dispositivo didáctico con el que se trabaja en el aula,
sino además concretar un abordaje metodológico integral
sustentado en distintos enfoques gramaticales. Comentado [3]: didáctico-gramaticales?

El carácter programático de la propuesta puede sintetizarse de la


siguiente manera:
1. Revisar y precisar las posibles transferencias didácticas del
Sujeto como función morfosintáctica y textual;
2. Para tal efecto, profundizar su abordaje en el nivel
oracional desde el Enfoque Estructural:
a) Redefinir la caracterización tradicional de Sujeto
rescatando su importancia, aunque señalando sus
limitaciones para el reconocimiento de la función.
b) Volver sobre los rasgos formales del Sujeto en
relación al Verbo y el resto de los componentes
oracionales.
3. Si bien la enseñanza gramatical es marcadamente
estructural, la propuesta intenta conformar una revisión
pedagógico-didáctica de los distintos enfoques
gramaticales considerados para poder arribar a un abordaje
integral de la función Sujeto. Así, la inclusión de algunos
aspectos del Enfoque Sistémico-Funcional en el nivel
2
textual se justifica porque permite entender al Sujeto como
parte de un conjunto de estructuras y funciones que operan
dentro de una red de opciones de significados seleccionados
por los usuarios de la lengua. Comentado [4]: Terminar de relacionar con la
comprensión y producción textual.

El Enfoque Sistémico-Funcional tiene diferentes líneas de


investigación que, de una u otra manera, se vinculan con los
Enfoques Tradicional y Estructural , ya que reaizó
reformulóteóricas provenientes de ambos. Sirviéndose de
formalizaciones tradicional-estructuralistas, el Enfoque Sistémico-
Funcional se ha centrado en la productividad y en los intercambios
de significados que el hablante/escritor utiliza como usuario de la
lengua; significados condicionados por los contextos socio-
culturales en los que se gestan y que se concretan en formas más o
menos estandarizadas en las superficies textuales, más allá del
nivel oracional. Comentado [5]: En alguna parte, tendrías que justifi
por qué no incuís Generativa, >Cognitiva, etcc.

Aquí, el lenguaje funciona como “un conjunto de herramientas


que sirven para la comunicación” (Jara Murillo, 2002, p. 172; en
Supisiche & Defagó, 2017). De ahí, la importancia conferida a los
significados que se producen y atraviesan las formas lingüísticas y
los contextos concretos en los que los usuarios hablan y escriben
en una determinada lengua.
La escuela constituye uno de los contextos en los que los
discursos se configuran especialmente y en donde se reflexiona
sobre las formas y los significados que produce el uso de la lengua.
3
La necesidad de que los alumnos progresivamente actualicen
habilidades y estrategias lingüísticas, pragmáticas y discursivas
que los habilite como productores de distintos tipos de textos
escritos y que puedan resolver los problemas específicamente
implicados en la comprensión de los mismos, constituye una
urgencia de aparente insolubilidad que tiene larga data en la escuela
secundaria. No obstante, cabe preguntarse si esa urgencia
pedagógica se condice con sus necesidades discursivas y culturales
signadas por su grupo etario de adolescentes y jóvenes en edad
escolar, por un lado; y también por las demandas más generales en
vistas a futuras colocaciones profesionales y laborales de los
estudiantes, inmersos en un mercado que exige determinadas
habilidades lingüísticas y comunicativas. Estos es, en qué medida,
más allá de la prescripción curricular, se diseñan experiencias
educativas en torno a contenidos gramaticales que se articulen con
el universo cultural de los estudiantes sin vulnerar la especificidad
y legitimidad de esos saberes. Un universo compuesto de prácticas Comentado [6]: En alguna parte habrá que hacer
referencia a las redes sociales, a sus caracteristicas
gramaticales de las rases en esos contextos, alguna
discursivas y productos culturales que rara vez son objeto de disolución de la gramática y, paradjalmenbte, su
oersistencia

indagación sistemática por parte del currículum gramatical. Los


textos que son objeto de reflexión metalingüística revelan la
ausencia de lo que Supisiche (2017) llama una “Gramática
Pedagógica o Significativa”:
“sostengo que la reflexión gramatical, si bien puede suponer
una dimensión descriptiva, implica la consideración de los
4
fenómenos en discursos (…) Es decir, la delimitación de
sujeto sintáctico, su identificación con procedimientos
morfológicos y su posición; su jerarquía sintáctica y
semántica; la realización con pronombres y su sustitución
léxica o `gramatical´, pueden ser relevantes en la medida en
que sea posible ponerlos en relación con la jerarquización de
la información en prácticas discursivas complejas.” (p. 44)
Lejos de la “reflexión gramatical”, prescripción curricular y
cristalización de determinados modos de enseñanza se
amalgamaron en “el efecto de naturalización-reificación”
(Bronckart, 2007), es decir, en la afiliación acrítica de marcos
teóricos de referencia que se han plasmado en documentos
pedagógicos desfasados de las realizaciones lingüístico-
discursivas empíricas que aparentemente explican y describen. Comentado [7]: A Ttoda esta larga oración no tiene
S/P o el predicado.... Conceptualemnte está impecab
le falta algo de armado.
Así, en el Cuadernillo de aula, el breve manual nos sirve como Comentado [8]: ¿qué es? Explicar

punto de partida para la reformulación de Sujeto; sin embargo????,


la oración y las propiedades de las secuencias textuales no son
presentadas como generalizaciones abstractas que registran las
regularidades del objeto de estudio, sino que son atomizadas como
esquemas de aplicación directa. “Este `aplanamiento´ de los Comentado [9]: No sé si esa situación ilustra
claramente la cita de Bronckart. ¿Excesiva teorizació
sin transferencia? Pero también mezcla de teorías, s
niveles de análisis trastoca el estatus de las propuestas teóricas de una precisa delimitación.

referencia” (Bronckart, 2007, p. 121) y se traducen directamente


en actividades de producción sin que medien reflexiones
lingüísticas y discursivas como parte del andamiaje didáctico.
5
Son numerosos los conceptos (oración, clases de palabras,
campo semántico, coherencia y cohesión, tipología verbal, etc.)
que nutren los contenidos escolares que se imparten en las clases
de Lengua, tomando como cajas de herramientas los textos
ficcionales y no-ficcionales, al mismo tiempo que se desconocen
los rangos de especificidad léxica, gramatical, semántica,
pragmática y discursiva de los mismos. Contenidos escolares que Comentado [10]: Bien.Los coencptos pretecenecen
diferentes planos o niveles del lenguaje sin que ellos
delimiten claramenbte,. Lengua es una licuadora don
tampoco se percatan de las necesidades y competencias que se se vierten conceptos de distintas procedencia y
naturaleza.

espera que los alumnos desarrollen, más y mejores lectores y


escritores que contribuyan a la expresión de su idiosincrasia
lingüística y discursiva, generalmente desplazada a un segundo
plano dentro del circuito comunicativo escolar.
Esta breve reseña preliminar suministra algunas características
del contexto pedagógico y didáctico que motiva esta propuesta. La
articulación de los enfoques gramaticales se orienta a “conformar
un cuerpo teórico reelaborado”, es decir, “una propuesta holística
desde distintas gramáticas con proyección didáctica constituye un
desafío en el que no es difícil incurrir en el serio riesgo implicado
en construir un camino teórica y metodológicamente inadecuado.”
(Supisiche et al. 2015, p. 837) y congruente, que permita establecer
recorridos alternativos pero sin perder de vista su potencial
didáctico ni violentar la integridad disciplinar de las
conceptualizaciones sometidas a revisión.

6
En busca del Sujeto
El marco teórico intenta integrar contenidos curriculares
específicos del espacio Lengua y Literatura conjuntamente con
aportes de enfoques gramaticales que, hasta el momento de la
elaboración de esta propuesta, o bien, han sido dispositivos de
enseñanza fragmentarios y confusas, o bien, son contenidos Comentado [11]: concordancia

desterrados de las planificaciones como integraciones holísticas en


el ámbito áulico de la escuela secundaria. En el caso particular de
la presente propuesta, se tienen en cuenta las informaciones
proporcionadas por el Cuadernillo de aula correspondiente al 2º Comentado [12]: En algín apartado tendrías que da
más datos sobre el cuadrenillo. Año, quién lo elaboró
fue mmodificado etc....
Año (Ciclo Básico), de un I.P.E.M. con orientaciones técnicas, sito
en la ciudad de Córdoba. Asimismo, teniendo en cuenta aquellos
aspectos a revisar, las profundizaciones, reformulaciones y
posibles implementaciones didácticas que se desarrollarán a
continuación tienen a este ciclo educativo como su destinatario.
En la primera parte de la Introducción se especificó que la Comentado [13]: Control¿a perona verbal. Vas a us
1 persona plural??? E algunas páginas anteriores y
dos línes más abajo aparecen NOS
temática seleccionada corresponde a conceptualizaciones del
Sujeto; sin embargo, antes de adentrarnos en las explicaciones y
descripciones que se puedan obtener de los distintos enfoques, es
necesario tomar como punto de partida en qué medida son los
limitados o erróneos los postulados del Cuadernillo de aula. A
primera vista, la noción de Sujeto consensuada tanto en el
departamento académico como en su plasmación, el
Cuadernillo…, indica una adscripción de corte tradicional y
7
estructural. El inconveniente observado no está directamente Comentado [14]: No sé si esto va en la introducción
convendría un apartado, ubicado más adelante, la
descripción (critica) del material de trabajo.
asociado a los enfoques que aparentemente lo sustentaN, sino EN
LA PRESENTACIÓN ESQUEMÁTICA Y ATOMICISTA’ el
esquematismo y atomización de los contenidos seleccionados. En
consecuencia, la cristalización de las definiciones carentes de un
sustento epistemológico que las integre no tiene el correspondiente
anclaje en ejercicios y actividades que permitan las reflexiones
metalingúísticas imprescindibles para la comprensión y la
producción de textos. Comentado [15]: Creoque son dos problemas.... uno
abordaje esquematico y atomizado. Otro, falta de
vínculación con otras dimensiones como la
En particular, el concepto atomizado de Sujeto no tiene más comprensión y proucción....

razón de ser que la de un constructo teórico funcional al


sintactismo, dejando de lado su importancia en la estructura
oracional dentro del paradigma estructural. Es decir, el sustento
teórico atomizado, como se mencionaba más arriba, oscila entre lo
fragmentario y lo confuso, por lo que en esta propuesta se intentará
profundizar y ampliar la conceptualización de Sujeto. En un primer
momento, tomar como punto de partida la definición nocional de
Sujeto (“quien realiza la acción del verbo”) para arribar a la
formalización que provee la gramática Estructural (Concordancia
Sujeto-verbo).
El carácter inmanentista de la descripción del sistema lingüístico
EN el Enfoque Estructural se tradujo en una transposición
didáctica aplicacionista de métodos de análisis propios de la
disciplina en el plano de las estrategias de enseñanza para enseñar
8
a escribir textos correctos y adecuados. El recorte epistemológico
no es un defecto del enfoque, pero las adecuaciones curriculares se
desentendieron de las limitaciones del mismo. En consecuencia,
por ejemplo, en el Cuadernillo de aula se presenta un esquema
que tiene su punto de partida en la oración simple
(unimembres/bimembres, etc.) y compuesta
(coordinadas/subordinadas, etc.). Las sucesivas taxonomías
sintácticas y los ejemplos arquetípicos de análisis y reconocimiento
de oraciones típicas y sus componentes están completamente
descontextualizados. Los ejemplos no son representativos de
producciones textuales reales, solo son reconocibles dentro de los
límites oracionales. Y allí se agota el saber gramatical de los tipos
de estructuras intermedias (Sujeto, tipos y modificadores), palabras
y sus funciones sintácticas (sustantivo, en función de núcleo, de
OD, etc.). En ese sentido, esta compleja clasificación sería
comprensible si se hicieran demostraciones integrales en el nivel
textual, que es donde las palabras o construcciones con
determinadas funciones y conexiones sintácticas tienen
implicaciones semánticas y discursivas.
Ahora bien, si el Enfoque Estructural se agota en la descripción
de la lengua como sistema estático cuyas unidades establecen
relaciones de asociación y de oposición, sistema abstraído de la
comunidad lingüística, entonces… ¿En qué medida el Enfoque
Sistémico-funcional es superador en su concepción del lenguaje?
9
¿Por qué el lenguaje es un macro-sistema dinámico de opciones?
¿Cómo se definen los roles comunicativos de los usuarios dentro
de esos sistemas de opciones? ¿De qué naturaleza son los
significados intercambiados entre los usuarios y los contextos en
los que se producen/circulan? En relación al tema de esta
propuesta…¿Qué características del Sujeto que no fueron
consideradas por el Enfoque Estructural aportaría el Enfoque
Sistémico-funcional en la construcción de los distintos tipos de
significados? Si la oración simple, la unidad de análisis, y el
Sujeto estructural son insuficientes para describir las
metafunciones del lenguaje, entonces ¿Cuáles son las
redefiniciones de Sujeto que posibilitan una proyección discursiva
de las redes textuales?
Para poder arribar a respuestas preliminares, será necesario
establecer un punto de partida. El BLOQUE 1 del marco teórico
se organiza teniendo en cuenta: primero, el planteamiento de los
contenidos gramaticales en el Cuadernillo de aula, un paneo
general del material de consulta y de práctica destinado a los
alumnos; segundo, el desarrollo introductorio del Enfoque Comentado [16]: Sugiero separar el bloque 1. >Com
descripción crpitica o punto de partida. También pod
incluir allí datos del contexto isntitucional.
Estructural y, a continuación, explicitaciones y ampliaciones de la
noción de Sujeto. No obstante, para llegar a ello, antes será
necesario redefinir a la oración simple según su estructura Comentado [17]: ¿definir?

sintáctica. Luego, explorar morfosintácticamente los rasgos

10
formales que posibilitan identificar a determinadas palabras y
construcciones en función de Sujeto.
Este bloque condensa en parte los lineamientos propuestos por el
lingüista español Emilio Alarcos Llorac (1922-1998), sobre todo
de las conceptualizaciones estructurales sobre el Sujeto; y también
de la lingüista argentina Ofelia Kovacci (1927-2001),
principalmente en sus descripciones de la estructura oracional y sus
constituyentes. Comentado [18]: Poner año de los lbros tomados, n
de datos biográficos.

A continuación, el BLOQUE 2 del marco teórico se focalizará


en la redefinición sistémico-funcional de Sujeto y en los tres tipos Comentado [19]: Autor/es, año de fuentes.

de significados amalgamados (sujeto lógico, el sujeto gramatical y


el sujeto psicológico) que se retraducen en las correspondientes
metafunciones del lenguaje en el rango de la oración. Esto es, Comentado [20]: En los tres sistemas del estrato
gramatical.

cómo esas hebras de sentido se traducen según lo que el Lenguaje


posibilita como sistema de opciones. Por un lado, la activación del
sistema de la transitividad (los procesos), en menor medida en el
sistema de la modalidad (intercambios interpersonales) y, sobre
todo, en el sistema textual (tema-rema), en donde las características Comentado [21]: Esyá en los tres, especialmente en
1....

estructurales de sujeto expreso/sujeto desinencial adquieren mayor


relieve. En efecto, la función Sujeto dinamiza una serie de
significados que los usuarios de la lengua codifican y actualizan
dentro de los textos orales y escritos. Comentado [22]: circuito o trauectora de la informac
en textos, basados en el dispositiovo graatical.

En cuanto a los autores considerados en este bloque, es


inequívoca la referencia al lingüista australiano M. K. Halliday, Comentado [23]: británico.

11
uno de los lingüistas fundamentales del Enfoque Sistémico-
Funcional, tanto por su concepción funcional e integral del
lenguaje verbal como el desarrollo de una tipología de significados
asociados a la función Sujeto. También, se consideró la relevancia
del abordaje dado por la lingüista argentina Ann Montemayor-
Borsinger de los significados textuales y, principalmente, sobre los
conceptos de Tema (no marcado/marcado) que adquieren especial
relieve para los propósitos didácticos de nuestra propuesta: la
comprensión y producción de textos. Comentado [24]: Controlar que lo haga desde GSF
fundamentar por qué su inlcusión

Por último, el BLOQUE 3 reúne el conjunto de actividades de


la propuesta didáctica. La secuencia de ejercicios se orienta a que
el alumno vaya más allá de la memorización mecanicista y el
reconocimiento de categorías, es decir, que pueda resolverlos
reflexionando metalingüísca Y DISCURSIVAMENTE????: el
reconocimiento de que determinados tipos de palabras y
construcciones pueden funcionar como núcleos de Sujeto y que
esta función sintáctica puede ocupar distintas posiciones, o cuándo
funciona la alternancia Sujeto expreso-Sujeto desinencial en la
superficie de la oración y cambios de significados textuales, etc.
De ahí que las actividades están organizadas según la complejidad
que adquiere la noción de Sujeto a las luz de los enfoques
lingüísticos de referencia: se parte desde los aspectos
morfosintácticos asociados a esta función y, una vez cimentada
esta base, avanzar en un corpus de textos que permitan trabajar
12
sobre los cambios de sentidos o significados que repercuten en la
red semántica y en la organización del contenido dentro de la trama
textual. Llegar a esta instancia es uno de los objetivos de esta
propuesta ya que se pretende que el alumno identifique,
reflexione y gestione sus capacidades lingüísticas y discursivas,
principalmente escritas según el ámbito comunicativo en el que
interactúe.

Bloque 1: Enfoque Estructural de la función SUJETO

El programa general del Enfoque Estructural se orientó a la


descripción pormenorizada de la lengua, a diferencia del Enfoque
Tradicional, más centrado en la prescripción valorativa y en los
juicios lógicos. Al respecto, el filólogo y lingüista Emilio Alarcos
Llorach (1990) sintetiza así “el error fundamental” de la teoría
gramatical tradicional:
“partir de supuestos extralingüísticos y afirmar la tesis del
perfecto paralelismo entre el pensar y el hablar, al querer
identificar las categorías gramaticales con las categorías
lógicas. Este error fundamental, sin embargo, conduce a una
13
apreciación justa: la existencia de una gramática general o
teoría del lenguaje, de la que las gramáticas particulares no son
sino su aplicación a las diferentes lenguas. Lo inexacto es la
creencia de que ese sustrato común a todos los idiomas sea de
índole lógica. En dos puntos, pues, la vieja gramática estaba
acertada: en la consideración sincrónica o estática de los
fenómenos de un idioma, y en la afirmación de que había una
constante tras las múltiples variaciones de la lengua humana.
En otros dos puntos se equivoca radicalmente: en la
identificación de las categorías gramaticales con las lógicas,
pues trataba de ver cómo éstas se reflejaban en la lengua y no
al contrario, y en la creencia de que la constante o norma
general del lenguaje era precisamente la de una lengua
determinada, el griego o el latín, pretendiendo que las
categorías válidas en esa lengua se proyectaban en los demás
idiomas.” (p. 12)
Después de Saussure, “la gramática será el estudio del sistema
de un estado de lengua dado, sin atender al uso particular que los
individuos hacen de él” (Alarcos Llorach, 1990, p. 13). La
declaración programática de uno de los principales lingüistas
estructuralistas en lengua española clarifica, desde el campo
disciplinar, la escasa o nula proyección didáctica que pudiera tener
este enfoque en la producción y comprensión de textos, sobre todo
en el actual campo cultural en donde la fusión o hibridación de
14
géneros discursos, potenciada por la digitalización de la
comunicación y de las plataformas audiovisuales. En mayor o Comentado [25]: SUGIERO DEDICAR, MÁS
ADELANTE, UNA PÁGINA A LA ENSEÑANZA
ESTRCTURAL, QUE ES MUY DISTINTA DEL
menor medida, la mayoría de los alumnos están hiperconectados y ENFOQUE ESTRUCTURAL.

sincronizados con productos culturales en donde el lenguaje verbal


es un elemento más dentro del complejo entramado de las
narrativas transmedia.
Para Alarcos Llorach (1990), el Enfoque Estructural
“se basa exclusivamente en postulados lingüísticos (…) Y
estudiando los sistemas de lenguas particulares, los sistemas
idiosincrónicos, se ha llegado a fundar una pancronía o
metacronía en que se exponen las leyes generales de la
estructura y el funcionamiento del sistema abstracto del
lenguaje, del cual son proyecciones los diferentes sistemas de
las lenguas particulares.” (p. 13)
En las descripciones exhaustivas de su objetivo, la lengua
constituye un sistema de signos, autónomo y abstracto, regido por
relaciones opositivas y asociación entre sus componentes y que, a
su vez, adquieren valores diferenciales dentro del sistema en su
totalidad.
Desde el punto de vista metodológico, los análisis sistemáticos
de la lengua debían ser inmanentes, ya que la lengua se estudiaba
en sí misma. En razón de ello, el Estructuralismo lingüístico
desarrolló un metalenguaje descriptivo que no solo dotó de entidad
científica al objeto lengua sino que además configuró a la
15
disciplina lingüística en el rigor y la precisión de instrumentos
exhaustivos de análisis y descripciones gramaticales. De ahí la
necesidad de formalizar criterios y procedimientos que dar cuenta
de la complejidad de la lengua como estructura formal, cuyos
fenómenos deben ser taxonomizados según principios racionales y
coherentes en relación al objeto de estudio. En ese sentido,
explicita Benveniste (1964):
“La noción de nivel (…) es adecuada para hacer justicia a la
naturaleza articulada del lenguaje y al carácter discreto de sus
elementos (…) El dominio en que la estudiaremos es el de la
lengua como sistema orgánico de signos lingüísticos.” (p. 118)
Así el estructuralismo toma la lengua como una totalidad
sistemática compuesta de formas de carácter discreto, es decir,
unidades constantes y estáticas, relaciones distintivas y opositivas,
valores diferenciales, etc. De manera tal que la labor del analista
es la de taxonomizar y describir esas unidades, nivel por nivel.
Entonces, el criterio metodológico es la organización nivelar de la
lengua.
Al respecto, Benveniste (1964) distingue varios niveles de
análisis. Si se procede a segmentaciones de las unidades
lingüísticas, los análisis sucesivos de los niveles alcanza un piso de
elementos no segmentales, es decir, los fonemas, sonidos mínimos
que pueden identificarse y sustituirse mutuamente, y a su vez
descomponerse en rasgos distintivos pero no son sustituibles.
16
Siguiendo el análisis ascendente, Benveniste llama a este par de
estratos dependientes de la siguiente manera: nivel merismático, el
de los rasgos distintivos que forman fonemas, y el nivel fonemático
o fonológico, el de los fonemas propiamente dichos o sonidos
mínimos que portan significado. A continuación, sigue el nivel del
signo o morfológico, es decir, el nivel de la palabra
(morfema/alomorfo y lexema): definido “como la menor unidad
significante libre susceptible de efectuar una frase, y de ser ella
misma efectuada por fonemas.” (Benveniste, 1964, p. 122) Tiene
una posición funcional intermedia, ya que puede descomponerse
en unidades fonemáticas y ser también una unidad significante y
particular junto a otras de un nivel superior.
Dicho nivel es el de la frase, el techo o límite superior de análisis
lingüístico: el nivel categoremático o sintáctico. La frase está
constituida por palabras1, pero no es una suma de ellas. Benveniste
señala que la frase es un todo que se reparte en el conjunto de sus
constituyentes, aunque la palabra es una unidad autónoma cuyo
sentido funciona de otra manera en el seno de la frase: otra vez, la
suma de los significados de las palabras no traduce mecánicamente
el significado global de la frase que forman. “Concluimos que con
la frase se sale del dominio de la lengua como sistema de signos y
se penetra en otro universo, el de la lengua como instrumento de

1
Benveniste distingue entre palabras “autónomas” (constituyentes de frases) y palabras “sinnomas” (solo
entran en las frases unidas palabras).
17
comunicación, cuya expresión es el discurso.” (Benveniste, 1964,
p. 129)
Por otra parte, el énfasis cientificista en la centralidad de la
estructura como componente inmanente de los fenómenos
gramaticales empujó al Enfoque Estructural a despojarse de los
aspectos lingüísticos no discretos, sobre todo los que pertenecen al
habla, a la lengua en uso y, por consiguiente, del hablante/oyente.
El nivel categoremático o sintáctico, como límite analítico del
enfoque, demarcó metodológicamente las muestras que el
investigador recolectaba, las cuales conformaban un corpus “para
dar cobertura léxica a las estructuras sintácticas que se propone
describir y analizar” (Gaiser, 2011, p. 98) de dicho nivel o de los
niveles inferiores. Las descripciones de los fragmentos escritos y
orales recopilados se basaban en segmentaciones lingüísticas
representativas de las hipótesis estructurales pero no de su
funcionamiento más allá del nivel oracional. Las limitaciones Comentado [26]: el estructuralismo operaba con
'corpus' de datos.... De ellos formulaba procediientos
descriptivos; pero no los tenái en cuenta respecto de
metodológicas estructuralistas agotaron en enfoque en el desarrollo contexto u otras variables.

de definiciones opositivas y taxonómicas y en el análisis de la


lengua como sistema en funcionamiento sin contrastarlos con datos
extralingüísticos.
Desde el punto de vista didáctico, no hay interés en desarrollar Comentado [27]: ¿fuentes? 'Funademto de la
afirmación?

gramáticas pedagógicas que muestren genuinas transposiciones


didácticas de sus postulados que pudieran ser “bajados” al aula.
Sin respaldo de las ciencias de referencia, se realizaron
18
adaptaciones curriculares que devinieron en planificaciones
conceptual y metodológicamente desfasadas, a tal punto que, bajo
la ópticas de perspectivas pedagógicas, se llegó a homologar
Estructuralismo lingüístico con la disciplina gramática, y una vez
decantada ésta, con el método mismo del análisis sintáctico. En
consecuencia, los resultados de esa atomización fueron:
`sintactismo´ puro y el reconocimiento de esquemas oracionales
cristalizados con escaso asidero en reales contextos formales e
informales de comunicación. Las forzadas transposiciones Comentado [28]: No sé si son forzadas, sí
descontextualizadas. Porque buscan corroborar los
prinicpios de las lenguas 'estructuradas'
didácticas del método sintáctico con la finalidad de formar
hablantes y escritores correctos partió de modelos y presupuestos Comentado [29]: no creo que se refiera a hablantes
escritores....

lingüísticos y comunicacionales no contemplados por el programa


de investigación estructuralista que aparentemente justificaba.
Definitivamente, hablar y escribir según el dictamen de este
esquema derivó en confusiones conceptuales y disciplinares, por
ejemplo, el intento de perfeccionar la lengua oral como réplica del
sistema de escritura. Tampoco proveyó instrumentos
metodológicos que redundaran en una mejor comprensión lectora
ni se encaminó a afianzar una mejor calidad de las producciones
escritas contextuadas. Después, con el auge pedagógico del
enfoque comunicativo, al hacer ingresar distintos tipos de
presupuestos teóricos como la Teoría de enunciación, la
Lingüística textual, Sociolingüística, Filosofía del lenguaje, etc.
Todas disciplinas que se focalizaron en distintos aspectos del
19
Lenguaje, con lo que el panorama didáctico de la Gramática quedó Comentado [30]: Revisar fredacción porque asa alg
con el predicado.

cercado y luego, con la implementación de la Ley Federal de


Educación Nº 24.195 (1993), desplazado y casi erradicado de las
planificaciones del espacio curricular. En cierta medida, el
Cuadernillo de aula refleja esa conjugación y reducción
heterogénea de contenidos gramaticales. Comentado [31]: lingüísticos. la gramática perdió
centralidad y, en un rimer moemnto, se presentó una
vresión sintética de la versión original.
No obstante, en modo alguno se soslayan los aspectos positivos
del Enfoque Estructural. Hasta aquí, a modo introductorio, se
intentará precisar y objetivar en sus fundamentos para trazar un
nuevo punto de partida que guiará la propuesta didáctica.
En el siguiente apartado, se profundiza en la noción de Sujeto
con un doble propósito: definir la función de acuerdo a los rasgos
formales que provee el enfoque y, paralelamente, ampliarla dentro
del abordaje didáctico gramatical imperante teniendo en cuenta la
limitación del análisis estructural, la oración y la frase. Esas
limitaciones constituyen otros puntos de partida que describen los
diferentes significados que colecta la dinámica función de Sujeto
dentro del entramado textual y que serán explorados en el Bloque
2.

20
Aspectualización y estado de la cuestión en el Cuadernillo de Comentado [32]: ¿por qué aspectualización????

aula Comentado [33]: ESTO DEBERÍA ANTES DEL


ESTRUCTURALISMO SEGÚN LO ANAUNCASTE E
LA INTRODUCCIÓN.
SUGIERO INCLUIR DATOS DEL CONTEXTO
INSTITUCIONAL-

El Cuadernillo de aula cuenta con un apartado dedicado a


gramática y a sintaxis; en el mismo se visualiza un apretado cuadro
sinóptico que organiza los distintos componentes taxonómicos de
la Oración Simple. Las sucesivas particiones de la unidad mínima
estructural, la oración, complejiza su entramado en las
construcciones intermedias (bimembre/unimembre,
sujeto/predicado) hasta llegar a aquellas palabras portadoras de
significados léxicos y gramaticales (verbo, nexo, sustantivo,
adjetivo, etc.) y distintas funciones (núcleo, modificador, objetos
directo o indirecto, circunstanciales, etc.) que nuclean
determinadas configuraciones sintácticas, a las que aportan sus
características denominaciones (distintos tipos de sujeto y de
predicado, sea que posean o no núcleos, sea que estén o no
acompañados de complementos/modificadores). A continuación,
el esquema descripto:
imagen del esquema
El diagrama clasificatorio esquematiza la Oración Simple y, a su
vez, a sus tipos sintácticos inmediatos según construcciones que la
21
integran (tengan o no sujeto-predicado): oración bimembre y
oración unimembre. Dadas las características de esta propuesta,
nos interesa centrarnos en el primer tipo oracional y puntualmente
en una de sus componentes: el Sujeto. Una de las principales
razones radica en que la Oración Simple es uno de los contenidos
prescriptos en el espacio curricular Lengua y Literatura del Ciclo
Básico; y, sobre todo, porque nos permite explorar con mayor
detalle su caracterización formal para contextuar morfológica,
sintáctica y semánticamente la función Sujeto.
En primer lugar, en el Cuadernillo de aula se registra una
atomización de las segmentaciones estructurales de las partes
constituyentes de la oración, dentro de las cuales puede rastrearse
una conceptualización híbrida de Sujeto que oscila entre lo
tradicional y lo estructural:

SUJETO
❖ es quien realiza la acción del verbo; Comentado [34]: CITERIO SEMÁNTICO NO
ESTRICTURAL

❖ jamás comienza con una preposición;


❖ su núcleo es siempre un sustantivo;
❖ responde a la pregunta del verbo ¿Quién o Comentado [35]: OJO!!! ESTO N ES ESTRUCTURA

quiénes?

22
El principal inconveniente que tiene esta definición radica en que
no hace una distinción explícita entre los presupuestos de uno y
otro enfoque gramatical para determinar formalmente el Sujeto.
Apelar exclusivamente a criterios semánticos de corte tradicional
ha sido y sigue siendo fuente de permanentes confusiones. De ahí
la necesidad de desglosar estas premisas con la finalidad de
clarificar las limitaciones de esta conceptualización mediante
contraejemplos que tensionen sus limitaciones didácticas.
Aquí, se restringe la realización del Sujeto a una persona o a una
entidad designada de la cual predica el verbo conjugado. Por
ejemplo: La bebé del vecino llora muchísimo, Un vendaval
enfurecido se llevó las chapas del galpón. Sin embargo, el ítem
contempla entidades no animadas pasibles de estados, eventos o
cosas que pueden estar requeridos por la predicación del verbo
conjugado. Por ejemplo: El móvil policial fue baleado en pleno
centro, Puertas y ventanas seguirán cerradas, la U.E.P.C. recibió
muchos críticas, El motor encendió sin problemas, etc. En los
casos de El móvil policial y Puertas y ventanas no son entidades
animadas, sin embargo funcionan como Sujeto. De lo que puede
inferirse que la regla es inconsistente porque deja de lado un gran
número de sustantivos que perfectamente son núcleo de Sujeto.
En segundo lugar, es relativa la imposibilidad de que una
preposición encabece un Sujeto, ya que en lengua española se dan Comentado [36]: Creo que es un problema de quien
elaboró el cuaderillo, no del enfoque. También admit
los casos de entre y hasta como palabras que forman parte de la reposición junto.... Y hasta también tiene sus
problemas.
23
construcciones en posición de Sujeto. No obstante, estas
preposiciones no funcionan como tales y no rigen término.
Ejemplos: Entre el perro y el gato rompieron la maseta, Hasta
Julián se enteró de lo que hablamos.
En tercer lugar, solo un sustantivo puede ser núcleo de Sujeto.
Sin embargo, los pronombres personales, que también son
sustantivos, así como ciertas formas no personales del verbo no son
indicados en el Cuadernillo de aula como núcleos de Sujeto. Por
ejemplo: Yo te avisé temprano, Él dijo esa burrada, Ellos no
vendrán, Joder es su pasatiempo favorito, etc. Para el Enfoque
Estructural, los pronombres no son una clase plena de palabras,
sino una subclase semántica integrada en el conjunto de los
sustantivos. Comentado [37]: cuidado con alguna confusión
conceptual.... Sustantivo se define porsu función: suj
puede construirse con pronombre sustantivo,
Y por último, en el esquema se visualizan dos premisas que se sustantivo, y construcción sustantiva (quien llegó tard
es Juan). Pro los pronombres como clase semántica
cumplen funciones sintácticas. Los personales son
encuadran en el Enfoque Tradicional. La interrogación “quién todos sustantivos...

hace qué cosa o acción”, que funciona como localizador de la parte


oracional que oficia como el agente de lo que se hace, se sustenta
en un criterio semántico que no proporciona información sobre
rasgos formales que permiten establecer las funciones y límites
sintácticos de las palabras que pueden ser Sujeto, por consiguiente
tampoco se especifica la relación composicional entre esta función
y el Predicado. Se parte de una noción semántica muy restringida Comentado [38]: Y no todo sujeto es agente

que no da cuenta de su estructura, definida en el nivel morfológico


por los rasgos de concordancia a partir de la flexión verbal y en el
24
nivel sintáctico por la construcción composicional de sujeto-
predicado. En el ejemplo Los aullidos de perro de mi vecino bajo
la ducha se escuchan desde media cuadra, si se aplica
exclusivamente el criterio nocional “quién hace qué”, dejando de
lado el criterio formal de concordancia, es probable identificar al
agente en vecino, pero es el Sujeto, sino el término del modificador
indirecto.
Además, de la misma manera en que no todos los sustantivos
denotan personas o entidades animadas (por ejemplo, los
sustantivos abstractos o los sustantivos comunes), muchos verbos
no son exclusivamente de acción (como ser, estar, parecer, semejar,
etc.), por lo que valerse únicamente de “¿Quién o quiénes?”
devuelve como respuesta tan solo el agente. Tampoco “¿Quién?”
considera casos en los que el Sujeto denota una cosa, por lo que
debería responder a la interrogación “¿Qué?”: El router indica que
no hay Internet; Una ventana quedó abierta; etc.
En relación a lo anterior, hay verbos que solamente expresan un
estado, es decir, no predican acciones efectuadas o experimentadas
por un agente animado o no. Tal es el caso de los verbos como ser,
estar, semejar, permanecer, etc.: Nosotros estamos bien, Juan es
locutor de la radio local, etc.
Así, en oraciones pasivas participiales en donde el Sujeto no es
la persona o cosa que realiza la acción predicada por el verbo sino
la entidad que la padece o experimenta, de alguna manera pone en
25
entredicho la estrategia semántica de preguntar “quién hace qué”.
Esto se debe a que esa interrogación devuelve el agente de la acción
denotada, que es función semántica, pero no es el Sujeto, que sí es
una función sintáctica. Por ejemplo:

[Pedro] aprobó el concurso.


[ Los alumnos] fueron amonestados por el preceptor.
[El popular cantante] fue declarado “ciudadano ilustre”
por las autoridades locales.

En el caso de las oraciones pasivas, la única información que se


obtiene con “quién...” es de tipo semántico y señala, en todo caso,
el Tema aunque no precisamente el Sujeto gramatical. Su Comentado [39]: Comentario: no sé desde qué teor
te referís a tema... GG? GSF? No desde el
Estructuralismo. Tema alude a GG.
correspondencia sintáctica es la función complemento agente, que
no concuerda con el verbo: la posición canónica que precede al
verbo está ocupada por el Sujeto paciente, es decir, el objeto directo
de la oración activa. Esta interrogación como estrategia didáctica
es imprecisa y desdibuja la complejidad gramatical de la oración.
Por ejemplo: la oración pasiva Las pruebas concluyentes del caso
fueron aportadas por el testigo ocasional localiza la agencia en el
Complemento Agente, función sintáctica que se inicia con una
preposición (por) y que, como ya se indicó más arriba, no puede
encabezar un Sujeto. Esta función es sintáctica y pragmáticamente
opcional: puede o no figurar en la oración según la intencionalidad
26
comunicativa del hablante/escritor. Por su parte, la
correspondiente oración activa, El testigo aportó las pruebas
concluyentes del caso, sí tiene un Sujeto con la que coincide la
agencia: “quién (El testigo) hace (aportó) qué (las pruebas
concluyentes del caso)”.
En contrapartida, si se considera la noción tradicional de
Predicado se esgrime un argumento circular que lo define por
oposición al Sujeto, es decir, es Predicado porque no es Sujeto y
viceversa. Aquí la definición en el Cuadernillo de aula, p. 21:

“PREDICADO: es lo que resta de la oración después de


identificar al sujeto. Su núcleo siempre es un verbo.”

Entre otras observaciones, el postulado deja de lado al sustantivo,


al adjetivo y al adverbio, palabras que también pueden funcionar
como núcleo de Predicado. Comentado [40]: Quizás e perdí en la lectura..... Est
parte de análisis del Cuadeenos.... es para ilustrar
cómo hay contradicciones en los materiales que se
Las definiciones presentadas son instrumentales y están manejan en Lengua. Quizás habría que reforzar esa
meta en diferentes apartados.

subsumidas a una operación de reconocimiento que no tiene en


cuenta de manera integral los presupuestos en los que
supuestamente se inscribe: sea el Enfoque Tradicional, tal como se
indicó en las características dadas al Sujeto; sea en el Enfoque
Estructural, ya que la noción de Sujeto presente dentro del esquema
de la oración simple no reporta las descripciones que pudiera
aportar este enfoque.
27
Atendiendo esa demanda, a continuación se ampliará y
profundizará el concepto Sujeto a la luz de los presupuestos
gramaticales estructuralistas: esto es, redefinir y reconocer el
Sujeto en función de los rasgos constitutivos y funcionales como
categoría sintáctica, más allá de los ítems semánticos y lógicos de
la concepción gramatical tradicional. Poder delimitar los alcances
y limitaciones que el Enfoque Estructural circunscribe para el
Sujeto, proporciona puntos de partida fundamentados para la toma
de decisiones didácticas.

Caracterización formal: el Sujeto léxico o explícito

El Enfoque Estructural tiene en la oración su unidad de análisis.


La oración simple es “la unidad lingüística formada por dos
componentes solidarios: a) un componente sintáctico: una palabra
o sintagma; y b) un componente suprasintáctico: la figura tomal.”
(Kovacci, 1990, p. 41) La figura tonal, la curva melódica de
entonación comprendida entre el silencio inicial y la pausa final,
hace referencia a la segmentación de la cadena hablada de tal
manera que cada unidad, cada oración, expresa el sentido que le
28
imprime la modalidad de la actitud del hablante (aseveración,
interrogación, exhortación, etc.). La figura tonal demarca el límite
de la oración, lo que deriva en la autonomía de su componente
sintáctico. De esa manera, la oración no está contenida en una
unidad sintáctica mayor.2
Según la estructura sintáctica, la oración simple puede constar de
uno y dos miembros, o miembros paralelos, es decir, según sus
posibilidades de segmentación se obtienen oraciones bimembres
de sujeto y predicado verbal, oraciones unimembres3 y oraciones
con bipartición paralela. Considerando el norte temático que
direcciona esta propuesta didáctica no se desarrollarán aspectos
relativos a la oración compuesta y a los dos últimos tipos de oración
simple, salvo que se inserten como argumento contrastivo para
explicitar su construcción y, especialmente, el concepto
estructuralista de Sujeto.
La oración simple define sus miembros composicionalmente en
los siguientes términos: “Llamamos `sujeto/predicado´ a toda
construcción exocéntrica cuyos constituyentes inmediatos son dos
palabras o construcciones endoncéntricas en relación de
enfrentamiento paralelas a esta.” (Barrenechea & Rosetti, 1984, p.
12-13) ¿Qué caracteriza a las construcciones exocéntricas y

2
En el sistema de escritura, la mayúscula inicial y el punto seguido/final son marcas ortográficas que señalan
los límites oracionales.
3
Por defecto, las oraciones unimembres son oraciones que no pueden partirse en sujeto-predicado.
Normalmente, se construyen con una única palabra (¡Hola!, ¡Chau!) o puede ser una construcción sustantiva (La
cuñada de mi hermana) o verbos que carecen de rasgos de concordancia, como Granizó.
29
endocéntricas? Las primeras están formadas por “dos
constituyentes interdependientes (que) no tienen núcleo que pueda
comportarse como construcción. Se distinguen tres tipos:
subordinante-término; sujeto-predicado; paralela.” (Kovacci,
1990, p. 54) Mientras que las segundas construcciones “Son
aquellas en las que aparece por lo menos un núcleo, (...) Se
distinguen tres relaciones: coordinación, subordinación y
aposición.” (Kovacci, 1990, p. 54)
De lo anterior se deriva que el Sujeto es una construcción
endocéntrica enfrentada al predicado, que también lo es. Dentro
de las mismas, sus estructuras se construyen alrededor de “los
`núcleos´, constituyentes que se apoyan en los núcleos”
(Barrenechea & Rosetti, 1984, p. 15) En el caso del Sujeto, el
núcleo es llenado por un sustantivo y los “subordinados” son los
modificadores, que no pueden trocar sus funciones con el núcleo
(Un perro chiquito/*Un chiquito perro) y las formas declarativas
como el adjunto (El accidente ocurrió en Av. Colón y Mendoza, un
cruce peligroso). A su vez, todo modificador se especifica por el Comentado [41]: No sé si es adjunto o aposición.

tipo de conexión que tiene: “1) `modificador directo´(Gato negro,


Un café fuerte) referido directamente al núcleo sin elemento que
establezca conexión, y 2) `modificador indirecto´ (Un perro con
sarna, La pileta de mi vecino) referido al núcleo por intermedio de
un elemento conector.” (Barrenechea & Rosetti, 1984, p. 15) Aquí Comentado [42]: Oo con cofundir modificadores del
Sujeto con funciones del sustantivo

también el modificador indirecto es una construcción exocéntrica


30
cuya estructura está formada por una preposición que rige un
término. La presencia o no de un núcleo o las relaciones de
enfrentamiento entre proposiciones u oraciones determinan los
tipos de construcciones que se observan hacia el interior y el
exterior de la configuración oracional.
A diferencia de las consideraciones parciales de la noción
tradicional de Sujeto recogida en el Cuadernillo de aula, el
Enfoque Estructural formaliza , en primera instancia, el concepto
de oración simple y su tipología en arreglo a sus componentes
sintácticos. Concretamente, el binomio sujeto/predicado funciona
como términos que se presuponen, es decir, son “dos funciones
sintácticas interdependientes y se reconocen en este caso por las
relaciones de concordancia que contraen.” (Kovacci, 1990, p. 42)
Las variaciones de uno inciden en la construcción del otro; así, el
cambio de persona y/o número del Sujeto tiene su correspondiente
réplica en el Predicado.
El Sujeto y el Predicado son construcciones enfrentadas que
poseen palabras que canónicamente funcionan como núcleos: “Al
núcleo del Sujeto lo llamaremos provisionalmente `sustantivo´y al
núcleo del predicado `verbo´cuando posee inflexiones de persona,
número, tiempos, etc.” (Barrenechea, 1984, p. 14)
La concordancia es uno de los criterios morfosintácticos
formales más importantes para establecer la función Sujeto. Es un
criterio superador con respecto a las descripciones tradicionales, ya
31
que, valiéndose de caracterizaciones no formales, fallaban en
deslindar con precisión las funciones semánticas (actor o entidad
que realiza la acción: Agente) de las funciones informativas
(aquello de lo que se habla/escribe: Tema) de las palabras o
construcciones en determinados contextos sintácticos. En algunos
casos, las funciones semánticas y sintácticas coinciden, se solapan;
por ejemplo, el agente y el sujeto en las oraciones activas y en
donde el segundo ocupa una posición preverbal: Yo te mandé un
whatsApp anoche o Los invitados ya se habían comido todo
llegamos al cumpleaños. Sin embargo, las confusiones emergen
en oraciones como las que siguen:

a) Pedro recibió el pasaporte a tiempo.


b) Mi perro tiene moquillo.
c) El horno prendido convirtió el departamento en un
sauna.
d) Los descuentos fueron realizados puntualmente.
e) El robo en la ferretería de la esquina fue muy
comentado en el barrio.

En las oraciones ejemplificadas el Sujeto puede identificarse a la


izquierda del verbo conjugado, pero no corresponde al agente: la
información sintáctica no coincide necesariamente con la
información semántica. Adopta otras funciones semánticas: en a)
32
es el destinatario; en b) es el experimentante; en c) es la causa; en
d) es el paciente; y en e) es el tema, respectivamente. Comentado [43]: No es un prpblea, solo alerto para
incluir un pie de pa´gina ya que algunas
denominaciones correspondenden a la Geertiva.
Por eso es que, en este sentido, los criterios morfosintácticos
formales son los que permiten demarcar cuál es el Sujeto de la
oración. Repasando las definiciones ofrecidas en el Cuadernillo
de aula, puede apreciarse que los aspectos conceptuales de Sujeto
son bastante más complejos que las presentaciones nocionales allí
contenidas. Las clasificaciones de Sujeto según figure o no en la
superficie oracional (expreso/tácito), tenga más de un núcleo
(simple/compuesto), esté acompañado o no de distintos tipos de
modificadores (complejo/incomplejo) es insuficiente, puesto que
se cristaliza en esquematismos que no se ajustan a criterios
formales. Paralelamente, la batería de actividades se basan en
ejemplificaciones con textos propios de registros escritos muy
restringidos o que directamente son infrecuentes en la lengua en
uso y en los contextos socioculturales de los destinatarios del
Cuadernillo de aula.

Criterio 1: Concordancia con verbo Comentado [44]: perdón, pero no entiendo de dónde
aparecen estos criterios. Quizás no leí bien.

Es una de las propiedades más importantes para su


reconocimiento. la información se obtiene de los rasgos
flexionales de número y persona. En estos casos, el
33
comportamiento típico del verbo se acomoda a las variaciones
morfológicas producidas en el Sujeto tal como se aprecia en los
siguientes ejemplos.

Tabla 1 Concordancia Sujeto-verbo.

Variaciones
Oración Simple Sujeto Verbo de
Concordanci
a

Perso Núme
na ro

Yo viajaré a Villa La Yo viajaré 1ª


Serranita.
Singul
Vos viajarás a Villa La Vos viajarás 2ª
ar
Serranita.

Él/Ella viajará a Villa La Él/Ella viajará 3ª


Serranita.

Nosotros/as viajaremos a Nosotros/ viajaremo 1ª


Villa La Serranita as s
Plural
Ellos/as viajarán a Villa La Ellos/as viajarán 2ª
Serranita

34
Ustedes viajarán a Villa La Ustedes viajarán 3ª
Serranita

Así las covariaciones entre Sujeto y verbo se estructuran en las


diferentes opciones de persona y de número. Los rasgos formales
se acomodan no solo a la lógica interna del sistema oracional sino
también a la intencionalidad comunicativa del hablante/escritor.
En este punto, siguiendo a Kovacci (1990), se consignan las
reglas fundamentales de concordancia:

Tabla 2 Concordancia Persona-Número

Concordancia Sujeto-Verbo / Persona y Número

Reglas ➔ Si el Sujeto es compuesto el verbo corresponde en


genera plural:
les
Los gremio-s docentes reclama-n la reapertura de las
paritarias nacionales.

➔ Si aparecen personas diferentes, debe respetarse el


orden de posiciones: la 2ª precede a la 3ª y la 1ª a las
dos anteriores:

35
Ellos llegaron antes que vos me vinieras a buscar a
casa.

Reglas ➔ Si el Sujeto consta de un sustantivo colectivo o


especi construcciones partitivas y el modificador indirecto
ales cuyo término en plural indica unidades que integran el
conjunto denotado por el colectivo/partitivo, entonces
el verbo puede concordar con el sustantivo o con el
término del modificador:
La mitad de todas esa-s barbaridade-s sobre mí son
falsa-s.
La mitad de todas esas barbaridades sobre mí es falsa.

➔ El verbo puede concordar en singular con un Sujeto


compuesto en 3ª pers. y en posición posverbal:

Acá se cortó luz, agua y vacaciones.

➔ El verbo ser puede tener una proposición encabezada


por un pronombre relativo (lo que, la que, el que,

36
quien, quienes, etc.) en función de predicativo:

a) Nosotros fuimos los que salieron. a)


Vos sos el que jugará.
b) Nosotros fuimos los que salimos. b)
Vos sos el que jugás.

➔ Por un lado, en a) el verbo concuerda en persona con el


pronombre que funciona como Sujeto de la proposición
(en función de predicativo en la oración), o como en b),
con el Sujeto de la oración si está en 1ª o 2ª pers.

En este punto vale introducir una importante distinción al Comentado [45]: En cuadri faltan las excepciones d
preposicione entre y junto con....

momento de establecer cuál palabra o construcción funciona como


Sujeto y, en relación con el verbo que concuerda, poder establecer
cuándo se presenta el sujeto gramatical y cuándo el sujeto explícito,
léxico o expreso. Uno y otro tipo de Sujeto abundan en la
bibliografía gramatical escolar y suelen ser conceptualizados como
antinomias: el `gramatical´ homologado sin más con el sujeto
tácito, mientras que el `expreso´ exclusivamente con el sustantivo
que designa al agente de la acción y que se materializa en la

37
superficie de la oración. Teniendo en cuenta esta simplificación,
la siguiente distinción dada por Alarcos Llorach es iluminadora al
respecto:
“El signo léxico del verbo (o sea, el significado de la
raíz) es el verdadero predicado de la oración, y el signo
gramatical o morfológico funciona como el auténtico
sujeto (esto es, la persona designada por la terminación
verbal), y que debe llamarse sujeto gramatical o, si
prefiere, sujeto personal.” (Alarcos Llorach, 2000, p.
257)
En la definición se identifica el verbo como centro de
organización de los componentes de la oración, más aún, en la
flexión que porta las informaciones del “sujeto gramatical” y que
es lo que posibilita establecer si el elemento de predicación
requiere o no una realización léxica en el sujeto explicitado.
Al respecto, Alarcos Llorach (2000) precisa:
“Cuando el sujeto gramatical expresado por el
morfema personal incluido en la terminación del verbo
no hace una referencia inequívoca en la situación de
habla, se agrega un adyacente que especifica la
designación de una persona y que denominamos sujeto
explícito o léxico. Su presencia es, pues, optativa ya que
para que haya oración basta la existencia del sujeto
gramatical.” (p. 265)
38
Reconocer la conformación del verbo como unidad formada en
una parte léxica y otra morfológica y sus correspondientes
significados, así como los rasgos de concordancia de persona y
número propios del sujeto gramatical, constituyen un inmenso
desafío para muchos estudiantes que encuentran el andamiaje
teórico gramatical desconectado de los textos escritos y orales que
frecuentan.

Criterio 2: La categoría del Sujeto

Definir y reconocer la categoría de las palabras y/o las


construcciones que pueden funcionar como Sujeto es otro de sus
criterios formales característicos. En primer lugar, la función
puede ser desempeñada por sustantivos propios (Josefina es la hija
de mi hermano) y sustantivos comunes (Una empresa presentó un
modelo de auto eléctrico): “Son palabras que tienen función
privativa de sujeto, objeto directo, objeto indirecto y agente.”
(Barrenechea & Rosetti, 1984, p. 21) También pueden serlo las
construcciones sustantivas (Las empresas locales de transporte Comentado [46]: También son construcciones las
proposiciones subordinadas sustantivas n función
sujeto.
público evalúan otra suba del boleto) y los verbos infinitivos (El
salir desabrigado me enfermó), pero no los adjetivos,
construcciones preposicionales ni los adverbios.
Respecto a los pronombres, las autoras citadas señalan que no
tienen estatuto estructural de palabra: “no consideramos al
39
`pronombre´ como clase funcional aparte. Las palabras de
significado pronominal entran, según su función, en las clases de
los `sustantivos´ (Yo lo dudo, Esto me desagrada, Nadie llamó,
¿Quién ha venido?).” (Barrenechea & Rosetti, 1984, p. 21) Así
recategorizados, “Son sustantivos los pronombres personales,
todos los neutros (esto, eso, ello, algo, etc.) y algunos
interrogativos e indefinidos (quién, alguien, etc.).” (Kovacci,
1990, p. 98) Según estas lingüistas, los pronombres son una clase
semántica de palabras y con significado deíctico. En cuanto al
aspecto funcional, constituyen una subclase de palabras: así, los
relativos (que, quien, cuando, etc.) se agrupan dentro de los
relacionantes; los posesivos (mi, suyo, mío, su, etc.) funcionan
como adjetivos; los enfáticos o interrogativos (cómo, dónde,
cuánto, cuándo, etc.) funcionan como adverbios.
En algunos casos, los pronombres personales, cuando funcionan
como Sujeto, sólo pueden formar oraciones gramaticales con
verbos conjugados: Yo estornudé, Vos te fuiste rápido, Ustedes
vendrán después, etc. Comentado [47]: Lo discutiría.... Al salir el sol/ Canta
nosotros?

Criterio 3: Las posiciones del Sujeto

40
En la lengua española, al Sujeto puede tener distintas posiciones
de acuerdo a determinadas categorías léxicas, construcciones y
contextos sintácticos.

a) Libertad posicional respecto al verbo:


En la oración [Marcela]Sujeto se ha comprado un iPhone X, el
verbo transitivo habilita diferentes ordenamientos de las
construcciones restantes que forman la oración. Por ejemplo:

➔ Ha comprado [Marcela]Sujeto un iPhone X.


➔ Un iPhone X ha comprado [Marcela.]Sujeto

Las tres variantes, además de ser gramaticalmente adecuadas,


tienen diferentes conmutaciones entre sus componentes y
distintas posibilidades interpretativas. El orden canónico propio
de nuestra lengua es Sujeto [S] → verbo [V] → objeto [O]: es el
orden prototípico de las oraciones activas en donde el Sujeto,
además de duplicar en su realización léxica los rasgos gramaticales
de persona y número ya portados por la desinencia verbal, puede
asumir la función semántica de ser el agente de la acción o evento
predicado.
Tal como se observa en los ejemplos, la flexibilidad posicional
de las construcciones permite asimismo anteponer o posponer el
41
Sujeto. El sustantivo propio (Marcela), núcleo de la construcción
endocéntrica Sujeto encabeza la primera oración, o se ubica entre
el verbo y el objeto directo como en la segunda, o aparece
pospuesto en la tercera opción.
La relativa libertad del Sujeto no es irrestricta; en determinados
contextos sintácticos es obligatoriamente posverbal y ello está
directamente relacionado a la naturaleza léxica del verbo. Así,
puede aparecer delante o detrás:

➔ Vinieron ayer [mis sobrinos.]Sujeto


➔ Me gustan [esas zapatillas.]Sujeto

b) En oraciones copulativas con “ser”:


El verbo ser designa una identificación entre las construcciones
que la integran, entre el Sujeto y el Predicado, aunque por regla
general se indica como Sujeto al elemento que está en posición
preverbal.

➔ [El dólar]Sujeto es el centro de las preocupaciones del


mercado.
➔ [El centro de las preocupaciones del gobierno]Sujeto es
el dólar.

42
c) En oraciones pasivas reflejas:
Son oraciones que se introducen con la partícula “se”, con la
característica de que tienen forma a sintáctica activa pero
significado pasivo.

➔ Se han vendido [dos departamentos en mi edificio.]Sujeto


➔ Se comentan [los dichos del ministro.]Sujeto
➔ Se anunciaron [los resultados de las pruebas
APRENDER.]Sujeto

En estos casos “se” es una partícula que encubre un agente, es


decir, una persona o cosa que realiza la acción designada por el
verbo. El número y la persona del Sujeto deben concordar con el
verbo. Son oraciones semánticamente impersonales, pero de
acuerdo al contexto sintáctico sí tienen sujeto léxico.

Impersonalidad de la oración: el Sujeto cero

43
En el Cuadernillo de aula se clasifica a las oraciones en
bimembres y unimembres: el segundo tipo es la oración “que no se
puede dividir en sujeto y predicado o tiene verbo impersonal.”
(Oración simple, p. 20) En efecto, son impersonales aquellos
verbos que no admiten Sujeto expreso no desinencial. Aún así,
Alarcos Llorach (2000) insiste en que “es preferible denominarlos,
según hacía Bello, verbos unipersonales, puesto que solo se
utilizan en tercera persona de singular.” (p. 274)
También existen construcciones en 3ª persona de plural en la que
no se requiere Sujeto léxico porque es innecesario dada la situación
comunicativa. En Decían que el policía es corrupto, el plural del
verbo principal no particulariza de quién predica, lo que deriva en
la indeterminación de la entidad que podía operar como Sujeto
léxico; y esto ocurre porque el hablante/escritor no tiene interés
(por conveniencia o por inconveniencia) de explicitar. Existen
casos con Sujeto gramatical en 3ª persona de plural pero sin Sujeto
explícito: Llaman por teléfono o En el segundo piso gritan mucho,
Nos dijeron de todo, etc. Las predicación del verbo no significa
que tenga correlato referencial a varias personas o entidades, ya
que, en el caso de la primera oración, puede designar quizá a una
sola persona o varias, o tan solo consignar el hecho de la llamada.
Concretamente, hay indiferenciación numérica por el Sujeto es
indeterminado. Comentado [48]: Hay algo rearo en la frase. las de
sujeto indeterminado coresponde a criterio semántico
no sintáctico.

44
En estos ejemplos los verbos no son impersonales estrictos, sino
oraciones con valor de impersonalidad en donde la ausencia del
Sujeto explícito no obedece tanto a razones gramaticales como a la
intencionalidad discursiva y comunicativa de no explicitar.
En cambio, son genuinos verbos impersonales los siguientes
tipos:

➔ Verbos atmosféricos: estos verbos poseen su significado


léxico relativo a fenómenos atmosféricos (llover, tronar,
granizar, garuar, nevar, etc.), que no tienen morfemas de
persona, aunque sí se los usa siempre en 3ª persona de
singular. Por ejemplo: Ha llovido, Tronó, Nieva tupido, Ha
helado, Está garrotillando, Está refusilando, etc. Dado que
el significado léxico de estos verbos no aporta rasgos de
persona ni de número en sus desinencias, prescinden de
Sujeto.
Excepto cuando se usan en sentido figurado; sólo así
flexionan en persona gramatical y son concurrentes con
Sujeto explícito: Les llueven las causas, Nos llovieron
propuestas, Te relampaguean los ojos de bronca, La
hinchada tronó cuando Talleres hizo el gol, etc.

45
➔ Verbo Haber, 3ª persona de singular: queda
invariablemente circunscripto a la 3ª persona de singular. Por
consiguiente, no requiere Sujeto y las sucesivas
construcciones ofician como objetos como objeto directo
(que suelen confundirse con el Sujeto). Haber funciona como
verbo autónomo en construcciones impersonales y en el
Presente de Indicativo: No hay plata en el cajero, Había una
cola larguísima en el banco, Hubo quilombo en la
manifestación, Hay entradas para el recital, etc.

➔ Verbos Hacer, Ser y Estar, con referencias temporales:


otro importante verbo es Hacer, que sustituye a Haber en las
referencias temporales. Por ejemplo: Hace tanto tiempo de
eso en verdad, Ayer hizo cuatro años que asumió, Hace frío,
etc. La prueba de sustitución pronominal con lo/los permite
reconocer el objeto directo de la oraciones, pero no el Sujeto:
Lo hace en verdad, Los hace en verdad, Los hizo, Lo hace,
etc.
En cuanto a Ser y Estar con valor referencial meteorológico
o temporal, también tienen un comportamiento impersonal
sin Sujeto: Era temprano, Estaba tan tormentoso, Fue ayer,
Está amaneciendo, etc.

46
➔ Construcciones impersonales con se: la combinación del
pronombre se y ciertos verbos forman construcciones
impersonales que excluyen la composición con Sujeto
explícito. Por ejemplo: Se baja por la escalera, Se entra a las
seis, Se espera a los maratonistas, Se almorzó temprano, etc.
No es difícil confundirlas con las oraciones pasivas reflejas
que, como se vio en el apartado anterior, también se inician
con se pero tienen además un Sujeto léxico.
En cambio, las oraciones impersonales con se, con Sujeto cero
(∅) o no recuperable, se expresan en tres tipos según los
siguientes verbos:
● Verbos intransitivos: Se vive relativamente bien en el
pueblo, etc.
● Verbos copulativos: Cuando se está cansado se piensa
en la almohada, etc.
● Verbos transitivos y objeto directo de persona con la
preposición a: Se imputó a los funcionarios sindicados
como partícipes de las maniobras ilegales, etc.

Más adelante, en el apartado que analiza si la función Sujeto es


o no portadora de significados interpersonales desde el Enfoque
Sistémico-funcional, se considerarán las implicancias de
impersonalidad en contextos comunicativos más complejos que el
rango de la oración.
47
El Sujeto Tácito: precisiones sobre el Sujeto explícito y el Sujeto Comentado [49]: explícito o expreso? No sé en qué
marco teórico estás.

desinencial

El Cuadernillo de aula contiene las siguientes definiciones para


referirse a la función Sujeto cuando no está expresada en la
superficie de la oración aunque puede recuperarse para completar
el sentido de la misma:

“Tácito: cuando no está escrito, se sobreentiende.” Comentado [50]: ¡Qué mal! Hay mucho para criticar

“Cuando una oración tiene SUJETO TÁCITO, es una


oración Bimembre.”
(COMPLETAR CITA DEL CUADERNILLO)

En una oración bimembre típica y lógicamente ordenada en


Sujeto y Predicado también puede reescribirse sin consignar la
primera función, por lo que el Sujeto tácito incluido en el
Cuadernillo de aula se define por oposición a la de Sujeto explícito
o léxico. Así, este último se asocia al hecho concreto de estar Comentado [51]: ¿Sujeto lexico remite a Generativa
Tener en cuenta la terminología...

escrito en la construcción oracional, mientras que el Sujeto tácito


“se sobreentiende” porque “no está escrito”. Es decir, la definición
se establece en base a un criterio no formal y valiéndose de las
intuiciones de quien lee para establecer si es o no un Sujeto tácito.
48
Sin embargo, en la definición no se dan precisiones sobre cómo
funciona el mecanismo que permite reconocer este tipo de Sujeto,
es decir, es decir, cómo “sobreentiende” el que lee/escucha una
información que puede ser recuperada en base a otra ya conocida y
localizada en un punto anterior del rango oracional.
El Sujeto explícito o léxico es el que está “expresado” en la
oración, se materializa en un sustantivo o en una construcción
habilitada para esa función, y se vincula lógicamente con el verbo
conjugado en persona y número. En cambio, el Sujeto tácito no
tiene realización léxica. La lengua española tiene la particularidad
de que puede elidir el Sujeto, es decir, no expresar la posición
inicial de la oración que complementa la predicación. Por un lado,
el usuario de la lengua puede recuperar la información contenida
en la función Sujeto a partir de los rasgos de concordancia de la
desinencia verbal, ya que por defecto la persona y el número
obligatoriamente concuerdan con el Sujeto; y, por el otro, también
reponer el Sujeto elidido de acuerdo al conocimiento que el usuario
tiene del contexto oracional: la elisión del Sujeto remite a
información que, o bien, recupera del verbo, o bien, a otro punto
anterior en el rango oracional que el usuario ya leyó o ya escuchó.
En ese sentido es que se “sobreentiende” el Sujeto tácito. Comentado [52]: Quizás me adelanto pero Kovacci
habla de sujeto desinencial y lo distingue del tácito.

Entonces, teniendo en cuenta la desinencia verbal y el cotexto se


distinguen dos variantes cuando no hay Sujeto explícito o léxico:

49
Tabla 3: Sujeto tácito

Sujeto ● Desinencia verbal ⬌ concordancia Sujeto/verbo.


tácito Teníamos buenos vecinos. (1ª persona del plural)
desinencial

Sujeto ● En esa casa estuvo de visitas hasta la semana


tácito pasada una familia de Misiones. Eran muy
contextual tranquilos. (3ª persona del plural)

Ahora bien, estas generalizaciones no proporcionan una


definición fundamentada de qué es Sujeto tácito. Para ello,
volveremos sobre algunas consideraciones que amplían esta noción
a la luz del Enfoque Estructural:
“El núcleo de la oración es, pues, un verbo en forma
personal. Se vio que esta clase de palabras consta de dos
signos, uno de referencia léxica expresado por la raíz (en
el ejemplo escrib-, que alude a la noción de <escribir>)
y otro de valor gramatical manifestado por la
terminación (la vocal temática e, cuyo contenido engloba
varios morfemas o accidentes, entre ellos el de
<persona>, en este caso <tercera>). El signo léxico del
verbo (o sea, el significado de la raíz) es el verdadero
predicado de la oración, y el signo gramatical o
morfológico funciona como el auténtico sujeto (esto es,
50
la persona designada por la terminación verbal), y que
debe llamarse sujeto gramatical o, si se prefiere, sujeto
personal.” (Alarcos Llorach, 2000, p. 257)
De la definición se desprende que la oración simple está
constituida por dos construcciones, Sujeto y Predicado, que se
organizan en torno a un núcleo acompañados de términos
“adyacentes”. El Sujeto es un “adyacente” más jerarquizado por el Comentado [53]: Cuidado con introducir más
terminología que proceden de distintas vertientes
estrcturalistas.
verbo y, al estar expresado, es el Sujeto léxico. Si no es así, si se
produce elisión de Sujeto, no necesita ser sustituído por formas
pronominales (a diferencia de lo que ocurre en el objeto directo, o
como lo denomina Alarcos Llorach, el “implemento”).
El núcleo organizacional de la oración, el verbo, aporta dos tipos
de significados, el primero identificado en la raíz que contiene el
valor léxico referido al evento/entidad designado, mientras que la
terminación o desinencia agrupa los rasgos gramaticales que
precisan el significado léxico. El primero de ellos es el verdadero
predicado de la oración y el segundo funciona como el auténtico
sujeto, o el Sujeto gramatical que es el que aporta la información
necesaria para que el oyente/lector reconstruya sobre qué o quién
se hace referencia en la predicación.
Sin embargo, Alarcos Llorach señala:
“Cuando la situación en que se habla no es suficiente
para poder identificar qué ente real se corresponde con la
persona (o sujeto gramatical) incluido en el verbo, se
51
agrega un sustantivo (o segmento equivalente) que la
especifica.” (Alarcos Llorach, 2000, p. 258)
Por ejemplo: Los estudiantes dicen, Las normas dicen, Los que
dicen, Ellos dicen, etc. Los términos adyacentes que preceden al
verbo concuerdan con la 3ª persona del plural marcada por la
desinencia y, al mismo tiempo, especifican con un equivalente
léxico la entidad designada. Entonces, los tipos de Sujeto
coexisten y mantienen una relación de dependencia evidenciada
por la concordancia de persona y de número. La presencia del
Sujeto léxico es optativa porque, cuando hay predicación, es
suficiente la expresión del Sujeto gramatical.
Según el Enfoque Estructural de Alarcos Llorach, la oración, en
tanto unidad sintáctica que se describe a través de la función
nuclear y jerarquizadora del verbo conjugado, contiene adyacentes
cuya existencia no es obligatoria para mantener la estabilidad del
rango oracional. De esa manera, el Sujeto gramatical, alojado en
la desinencia verbal, refuerza el carácter opcional del Sujeto
explícito o léxico.
Si actualizamos la definición inicial de Sujeto tácito dada en el
Cuadernillo de aula, se podría concluir que su funcionalidad
depende del carácter opcional del Sujeto léxico en una oración o
en una secuencia de oraciones en la que el o los ítems léxicos en
esa función sean idénticos y mantengan referencias semánticas
constantes o similares. Solo así se justifica la conmutación entre
52
el `explícito´y el `tácito´. No obstante, como se verá en el apartado
correspondiente a los significados textuales en el marco del
Enfoque Sistémico-funcional, la alternancia Sujeto explícito-
Sujeto tácito adquiere notable relevancia en el nivel textual en
virtud de la batería de opciones discursivas que puede seleccionar
el hablante/escritor para mantener o redireccionar hilos
discursivos.
Al primar el criterio sintáctico por encima del criterio lógico o
nocional, el Sujeto es un componente más de la oración simple,
cuyo funcionamiento está regulado por la relaciones
intrasintácticas que afectan el ordenamiento de las palabras y las
construcciones y, a su vez, por las necesidades pragmáticas y
lingüístico-discursivas de los usuarios de la lengua.

Bloque 2: Enfoque Sistémico-Funcional

53
Avanzada la década del `60, la lingüística descriptiva,
observacional y rigurosamente formal propia del Enfoque
Estructural había comenzado a saturar los estudios del lenguaje y
la metodologías de investigación centradas en los datos que daban
cuenta del objeto `lengua´. Las críticas dirigidas al tratamiento
estructuralista del lenguaje verbal apuntaron directamente a la
exclusiva dimensión inmanentista y sincrónica de las
descripciones y a la preocupación excesiva en las características
sistemáticas de la lengua. Preocupaciones lícitas desde el punto
epistemológico, pero constituían un severo recorte sobre la
diversidad de facetas pragmáticas, sociolingüísticas,
psicolingüísticas y de sujetos usuarios de la lengua y de variedad
de contextos de realización de los intercambios verbales. Comentado [54]: ¿fuentes?

Hacia finales de los años `70, los intereses se desplazan al


análisis de las interacciones de los hablantes como usuarios de la
lengua y los modos en que se inscriben en sus textos: qué recursos
lingüísticos seleccionan y en qué contextos para construir
determinados que se negocian con otros significados o para
producir ciertas acciones o comportamientos.
En este panorama de nuevos puntos de partida es que cobra
relevancia el Enfoque Sistémico-Funcional de la Escuela de
Sidney, liderada por M. K. Halliday. El aparato teórico se valió de
la función comunicativa de la lengua y, en base a ello, poder
analizar los aspectos y las relaciones léxico-gramaticales que
54
intervienen en la elaboración de los mensajes teniendo en cuenta el
contexto social y cultural en el que se dan los intercambios. El
armazón gramatical y de otros niveles que constituyen el lenguaje
hace del objeto lengua´ un dispositivo de comunicación y de
producción de mensajes que vehiculizan determinados
significados. Estos mensajes forman textos escritos y orales,
unidades mayores que básicamente entrelazan tres tipos
fundamentales de significados: experienciales, los cuales codifican
las experiencias y visiones del mundo; interpersonales, que se
refieren a las interacciones sociales de los usuarios; y textuales, que
vertebran los dos anteriores y los realizan en el nivel léxico-
gramatical.
En tal sentido, la lengua deja de ser un objeto de estudio que da
cuenta de sí misma. Aquí, la lengua se constituye en un medio para
el logro de un fin. La reformulación del objeto de estudio amplía
su espectro de investigación: además de la lengua, se confiere un
nuevo estatuto a los propios usuarios como productores de
mensajes verbales cuyo anclaje en situaciones reales de emisión y
recepción suplantan a los datos aislados de los exhaustivos análisis
estructuralistas. En el plano de la productividad verbal, los textos
desplazan a la oración simple como unidad de análisis y de sentido.
Si a partir de entonces se toma como eje orientador la función y el
contexto comunicativo, la oración no puede vehiculizar esos

55
fenómenos. Es necesario posicionarse en los niveles del enunciado
y del discurso.
En tanto gramática de opciones, y no solo de un sistema
integrado por unidades discretas y sucesivas (relaciones
sintagmáticas), el énfasis está puesto en la organización
paradigmática. En efecto, el Enfoque Sistémico-Funcional
entiende que los significados que intercambian los usuarios están
motivados socialmente a diferencia de los enfoques formales
estructuralistas cuyas gramáticas son semánticamente arbitrarias.
El lingüístico de Halliday intentó superar el esquematismo de Comentado [55]: ?

reglas para desarrollar y describir una gramática como recurso


dinámico que funciona y es atravesado por contextos
socioculturales diversos. Así, el sistema lingüístico es descrito en
términos de estratos de realización más que de niveles de análisis,
en donde el contexto constituye uno más dentro de la organización
del lenguaje:

➔ “Estrato semántico: sistema de significados referencial,


cognitivo, ideativo, interpersonal y temático.
➔ Estrato léxico-gramatical: sistema de expresión verbal.
Gramática y léxico.
➔ Estrato fonológico-grafemático: sistema de sonido y
escritura.”

56
(Pastore, B. & Asfurá, D., p. 164, en Supisiche &
Defagó, 2017) Comentado [56]: Está el material de Fernández- Gh
disponible. Pastore se basa en en ese material que
traduce y sintetiza aspectos d¿básicos de LSF

Por otro lado, el abordaje sistémico-funcional desarrolló un


metalenguaje no tan específicamente lingüístico, más bien Comentado [57]: Sí en escala de rango

implementa una terminología híbrida de categorías tradicionales


como las clases de palabras y de un abanico formas provenientes
de la Escuela de Praga, como las nociones de Tema-Rema así como
también expresiones propiamente funcionales: metafunción,
estrato, rango, proceso, etc. Este metalenguaje debía expresar el
carácter funcional y dinámico de los fenómenos del lenguaje que
intentaba definir, ya que la perspectiva se proponía erigirse en una
herramienta holística, socio-semiótica y sistémica. Por eso es que
la noción de “oración”, de clara adscripción estructuralista y
categoría de análisis centrada en los aspectos sintagmáticos del
sistema, es sustituído por el término “cláusula”, más flexible y que Comentado [58]: y más compleja, más rica....

permite la concurrencia descriptiva de las hebras de significado que


realiza. Una cláusula puede estar integrada por una oración o por
un grupo de oraciones que interaccionan en la red textual a la que
pertenecen. En adelante, se utilizarán como cuasi-sinónimos los
términos “cláusula” y “oración-mensaje”.
Uno de los ejes rectores de este enfoque es justamente la noción
misma de sistema. La gramática es entendida como una red
flexible de sistema y no un compendio de estructuras; la gramática
57
de una lengua se constituye en un sistema de información que
ofrece a los usuarios una red de elecciones de significados que
proyecta un conjunto de virtuales realizaciones opcionales y
contrastivas. Es decir, los hablantes/escritores emplean recursos
gramaticales seleccionando las opciones de los sistemas de
realización que consideren más adecuadas o idóneas según la
situación comunicativa. Dicha selección habilita la configuración
de determinado texto que responde a las necesidades discursivas y
comunicativas contextualizados. En fin, el Enfoque Sistémico-
Funcional focaliza en ciertos aspectos del lenguaje pero sin restar
importancia a otros: así, prioriza la “función antes que las formas”;
“la retórica” a “la lógica”; “el texto” a “las oraciones”, “los
recursos” a “las reglas”, y “la significación” a “la gramaticalidad”.
(Ghío & Fernández, 2008, p. 68) Más adelante, las autoras
agregan: la gramática funcional de Halliday “No pretende ofrecer
un modelo denso de la estructura gramatical sino más bien un
modelo laxo y esto implica que se ocupará de rangos, no de
constituyentes inmediatos. Estas aclaraciones demuestran una
intención de diferenciarse de las gramáticas estructurales (...)”
El carácter “funcional” hace referencia a que la estructura de una
lengua está condicionada por los usos que hacen los hablantes,
mientras que el carácter “sistémico” señala el complejo de
opciones paradigmáticas que éstos escogen para sus interacciones
lingüísticas.
58
El lenguaje es aquí entendido como sistema de opciones: los
usuarios recurren a usos formalizados de los significados que
portan las unidades y expresiones de la lengua y los recodifican en
actualizaciones cuando los seleccionan con la finalidad de
construir textos contextuados. A su vez, éstos se sustentan en el
andamiaje gramatical y, puesto que son unidades que vehiculizan
significados, circulan en situaciones discursivas enmarcadas en
determinados patrones culturales.
El Enfoque Sistémico-Funcional postula que sólo un estudio
integral del lenguaje verbal que vaya más allá del inmanentismo
sistemático puede dar cabal cuenta de las unidades y componentes
directamente relacionados a los distintos significados expresados.
De ahí la importancia dada a las producciones concretas de los
hablantes, es decir, los textos producidos y que circulan entre los
hablantes/escritores. En consecuencia, el texto es simultáneamente
“una instancia significativa de la lengua” (Ghío & Fernández,
2008, p. 69), y la unidad de análisis de este enfoque. Un texto tiene
una extensión no especificada: puede estar formada por una
palabra, uno o varios grupos sintácticos o por una o más cláusulas.
El estudio de las funciones del lenguaje no puede obviar la
estructura lingüística, ni viceversa. La relación uso-forma está
profundamente integrada dentro de los fenómenos del lenguaje; de
la misma manera, el sistema gramatical cumple un rol fundamental
para que el lenguaje cumpla las necesidades comunicativas
59
demandadas. La elaboración de un texto necesita tanto de las
funciones (uso) como de las estructuras formales (forma) en su
conjunto. Luego de An Introduction to Function Grammar
(Halliday & Matthiessen, 2004), se afinó la conceptualización de
las funciones del lenguaje en tres grandes grupos porque según los
autores es en el nivel de la cláusula donde se concreta la producción
de tres significados específicos. Al respecto, otro lingüista, Robin
Fawcett, también enrolado en el Enfoque Sistémico-Funcional y
compatriota de Halliday, plantea las funciones del lenguaje en
términos de la siguiente analogía:

“La estructura de la cláusula es más bien como la


estructura de una soga de cáñamo. Una soga de este tipo
consta de muchas hebras, cada una de las cuales está
hecha de innumerables fibras. En otras palabras, toda
cláusula expresa muchas hebras de significado, cada una
de las cuales pertenecen a una clase distinta, sirven a una
función distinta y, además, incluyen estructuras más
finas. Estas diferentes hebras de significado conforman
un tejido muy compacto y, todas juntas, configuran lo
que percibimos como una entidad simple: la soga como
un todo. En consecuencia, `significado´ debe entenderse
en un sentido amplio, que incluye precisamente muchos
tipos de significado. Toda cláusula en todo texto que
60
alguna vez haya sido producido es, en este sentido
especial, `multifuncional´. Tres de esas fundamentales
hebras de significado son el significado son el
significado experiencial, el interpersonal y el temático.
El `principio multifuncional´ no se aplica sólo al inglés
sino a todas las lenguas naturales.” (Fawcett, 2008, p. 44-
45)

Las metafunciones del lenguaje se caracterizan de la siguiente


manera:
➔ Metafunción ideativa: el lenguaje sirve para que los
hablantes/escritores interpretan su propio mundo real, incluso
su mundo interior y que puedan establecer relaciones lógicas,
como permitirles relacionar un hecho con otro en términos de
causa y efecto, etc. La metafunción ideativa contribuye en la
conformación y la organización de la experiencia.
➔ Metafunción interpersonal: el lenguaje interviene
activamente en establecer y mantener la relaciones sociales
(positivas y/o negativas), en expresar los roles sociales de
quienes detentan/atacan las posiciones de poder asociadas a
la palabra. Los usos del lenguaje configuran mediante esta
función los agrupamientos sociales y las identidades.

61
➔ Metafunción textual: el lenguaje proporciona a los usuarios
las unidades y medios para crear mensajes o textos coherentes
consigo mismos y con el contexto de situación. Esta
metafunción es fundamental para hablantes/escritores ya que
es la unidad básica de todo proceso semántico.

En el Enfoque Sistémico-Funcional los significados lingüísticos


son una realización de la léxico-gramática; funcionan como
interface entre el plano extralingüístico y la forma lingüística. El
escalafón de rango pone de manifiesto las metafunciones
ideacional. interpersonal y textual que corresponde a la estructura
de la cláusula, unidad primordial del estrato léxico-gramatical.
Los tres tipos de significado se combinan y se proyectan en la
estructura oracional para producir la expresión verbal como:

➔ Representación: se construye algún proceso de la experiencia


humana del mundo;
➔ Intercambio: transacción que media entre el hablante/escritor
y el oyente/audiencia;
➔ Mensaje: se comunica determinada información.

A su vez, estos aspectos que definen la especificidad de las Comentado [59]: Creo que faltaría mención a estrat
como para insertar los sistemas en el estrato
léxico.gramtical.
metafunciones del lenguaje se organizan en tres sistemas de

62
significado en el rango de la cláusula. En los siguientes apartados
se ampliarán los sistemas de realización de estos significados y,
concretamente, nos centraremos en la especial configuración que
adquiere la función Sujeto como rol participante en el sistema de
la transitividad, el marcado contraste del funcionamiento del sujeto
de la oración inglesa en el marco de los significados Comentado [60]: ???

interpersonales de la modalidad con respecto al Sujeto español y


las instanciaciones temáticas dentro de la oración-mensaje y el
entramado textual.
Si bien el Enfoque Sistémico-Funcional tuvo una notable
adhesión en los inicios de los `90, tuvo interpretaciones didácticas
apresuradas y alejadas de las aulas. Desde las propuestas
editoriales se quiso poner en marcha un improvisado golpe de
innovación al suplantar los saberes propios de los enfoques
gramaticales tradicional y estructural por ser considerados
obsoletos, en el sentido que han señalado Gaspar & Otañi (2002)4,
al referirse al “desencanto amoroso” entre la escuela y los
presupuestos estructuralistas. En su lugar, se extendieron las
propuestas basadas en la gramática funcional, sobre todo en lo Comentado [61]: Creo q ue se tomaron nociones de
lingüística sistémico y casi nada de la Gramática. No
interesaron por la gramática sino por los aspectos
referente a los análisis textuales (coherencia y cohesión, conceptos textuales de la teoría. la fragmentaron y la dividieron
según sus intereses.

como campo, registro, tenor, modo, progresión temática, etc.) y la

4
“El eje central del modelo estructural es la elección del sistema como objeto de estudio. La escuela tuvo que
manejar la tensión entre adoptar un modelo centrado en el sistema de la lengua y alcanzar el objeto de desarrollar
en sus alumnos habilidades de uso de la lengua (...)” OTAÑI, L. & GASPAR, M. (2002) Sobre la gramática; p.
85.
63
circulación de los mismos. Las prescripciones didácticas y los
exiguos resultados en el aula pusieron en evidencia que desplazar
al Enfoque Estructural no impactó positivamente en las
competencias de escritura y de lectura de los estudiantes. El
resultado fue que los desplazamientos teóricos de un enfoque por
otro produjo más incertidumbres que aciertos sin lograr lo más
importante: que pudieran desarrollar una genuina comprensión
lectora y, sobre todo, que lograran ser productores competentes de
textos escritos y orales.
Nuevamente, la enseñanza de la gramática con un sesgo Comentado [62]: En los períodos más furibundos, s
decreto su eliminación o su inclusión como apéndice
cuadernillo separado (como el del Aula???)
marcadamente prescriptivista minó cualquier posibilidad de poder
aprender que la formación gramatical es fundamental para
vertebrar las comunicaciones verbales y producir los significados
que permiten reconstruir la realidad y mantener distancia crítica
con las diferentes representaciones que son mediadas por el
lenguaje. En ese sentido, no se trató de modelos teóricos sino de
prescripción pedagógica que se negaba a revisar sus prácticas sobre
el estado de la enseñanza de la lengua.
Aún así, consideramos que el Enfoque Sistémico-Funcional
“resulta de gran utilidad en la enseñanza de competencias textuales
ya que explicita no solo los recursos que el sistema habilita para la
creación de discurso, sino también la forma en que estos adquieren
significado al formar parte de un sistema de opciones.” (Gaido, p.
74; en Defagó, 2016)
64
Sistemas de opciones: diferentes estratos de significado

Las metafunciones ideacional, interpersonales y textual se


proyectan en la estructura de la oración-mensaje. Halliday &
Mattiessen (2004), a su vez, incorporaron un importante concepto
tomado del enfoque gramatical tradicional: el Sujeto. Así esta
función puede dar cuenta de las tres funciones diferenciadas dentro
la estructura oracional. En la siguiente tabla puede apreciarse que
cada metafunción se proyecta con un término específico en la
propia oración y que las distintas denominaciones del sujeto
tradicional efectiviza la concreción de un significado particular de
acuerdo al sistema de opciones al que tiene acceso el usuario.
La reformulación sistémico-funcional de la noción del sujeto
tradicional, nocionalista y no formal, se fundamenta en la
necesidad de distinguir las hebras de significado de las
metafunciones del lenguaje que se realiza en el rango oracional:

Tabla 4: Correspondencias Metafunciones-Tipo de Sujeto Comentado [63]: fuente

Metafunción Función en la Tipo de sujeto


estructura
oracional

65
Experiencial Actor Lógico

Interpersonal Sujeto gramatical Gramatical

Textual Tema Psicológico

Entre el conjunto de opciones que habilita la lengua española, la


triple funcionalidad del Sujeto puede ser concurrente en un único
ítem léxico-gramatical:

[Joaquín] pasó la cartuchera de Nadia a Lucho.


Sujeto lógico
Sujeto psicológico
Sujeto gramatical

La construcción sustantiva Joaquín es el que agrupa todas las


funciones de: a) Sujeto lógico porque expresa quién ejecuta la
acción de `pasar´; b) Sujeto gramatical porque es una construcción
nucleada por un sustantivo propio (Joaquín) que concuerda con el
verbo conjugado (pasó); y c) Sujeto psicológico porque se refiere
a la acción del muchacho. Comentado [64]: Revisar porque primero y tercero
están muy cercanos. El c es de loq ue se habla por la
posicción.
También suele ocurrir que los tres tipos de sujeto pueden
realizarse mediante tres ítems léxico-gramaticales distintos. De esa
manera las opciones que provee el sistema dan la posibilidad al

66
usuario de generar cambios de significado. La elección consciente
de recursos lingüísticos permite reagrupar los grupos sintácticos
mediante el cambio de `voz´ de la oración-mensaje inicial:

[A Lucho le] fue pasada [la cartuchera de Nadia] [por


Joaquín.] Comentado [65]: No entiendo el cuadro.

Sujeto psicológico
Sujeto gramatical Sujeto lógico

Así, la oración conmuta la voz activa por la voz pasiva, por lo


que los Sujetos se reorganizan de la siguiente manera:
● el grupo preposicional A Lucho está en posición de
beneficiario; es el sujeto psicológico, duplicado por el
pronombre le, es aquello de lo trata la oración;
● la cartuchera de Nadia se posiciona como sujeto
gramatical porque es la realización léxica de lo que
predica el verbo y replica los rasgos de concordancia de
persona y de número de la desinencia verbal;
● y como sujeto lógico, la construcción preposicional que
contiene al agente, por Joaquín.

En Enfoque Sistémico-Funcional confirma un dato iluminador


del análisis estructural en su reinterpretación del Sujeto: su
flexibilidad posicional dentro de la oración demuestra que además
67
de expresar significados relativos a las tres metafunciones, también
contribuye a la concordancia en el nivel de la oración y, lo que es
más importante en el nivel textual, construye una red de
significados que atraviesa transversalmente su entramado. En Comentado [66]: MB!

consecuencia, la progresiva estratificación de redes semánticas


realizadas en el nivel léxico-gramatical, puede dar cuenta de las
experiencias e interpretaciones de mundo, posicionar a los
hablantes/escritores y los interlocutores en el marco de contextos
comunicativos en donde se negocian/tensionan intercambios
verbales y/o se promueven y condicionan acciones, y
simultáneamente generan mensajes escritos y orales sobre los que
se proyectan particulares configuraciones de la información.

a) Transitividad: el Sujeto lógico en la organización de la


experiencia Comentado [67]: En algún punto recomiendo incluir
escala de rango, que sería la sección 'estructura' del
modelo-

Constituye el significado del componente ideacional que expresa


la experiencia humana como `proceso´en el que interviene un
`agente´ (participante activo) y las `circunstancias´que
contextualizan ese proceso. Este sistema acomoda la estructura
oracional a los constituyentes principales del flujo experiencial
especificando los correspondientes rangos inferiores de realización
en la léxica-gramática. En virtud del análisis funcional de este
68
enfoque, la oración-mensaje acomoda las unidades sintácticas a las
unidades semánticas, aunque no siempre la correspondencia es de
uno a uno. Así, Fawcett (2008) esquematiza de la siguiente manera
los planos de SIGNIFICADO, el nivel semántico de la oración-
mensaje, y FORMA, el nivel sintáctico:

Proceso

{SIGNIFICADO_________________________________
______CONTEXTO}
Verbo Principal

{FORMA_______________________________________
______ORACIÓN-MENSAJE}

{elemento que ancla la`situación´
expresada por el Proceso en la
forma de la Oración-mensaje}

Los elementos del significado transitivo mantienen las


siguientes correspondencias de realización con los grupos
sintácticos:

69
PARTICIPANTES ⇆ Grupo nominal
PROCESO ⇆ Grupo verbal
CIRCUNSTANCIAS ⇆ Grupo adverbial - Grupo
nominal - Grupo preposicional

El sistema de transitividad se estructura en el nivel de la oración-


mensaje en un Proceso y los Roles participantes. En el siguiente
ejemplo se reconocen los elementos que especifican los roles
participantes (RPs) y el proceso que forman parte del significado
ideacional: un actor o agente que realiza o experimenta una acción,
evento que constituye el proceso (V) que se efectúa en una acción
concreta o tiene un producto determinado, el afectado (Af) en
determinadas situaciones contextuales, la circunstancia:

Tabla 5: Componentes de realización

Participant AGENTE PROCESO AFECTAD


e O

Grupo Sujeto/Ag. Verbo Complement


sintáctico o/Afectado

Oración- María compra un perfume


mensaje

70
V corresponde al grupo verbal que expresa el Proceso
(compra), mientras que S es grupo nominal o sustantivo
concretado en la función Sujeto (María), que expresa a una de los
Roles participantes del significado transitivo, el otro rol
participante corresponde es el Complemento (un perfume), el
Afectado. “Un Complemento es un RP porque `complementa´ el
Proceso, puesto que se lo requiere para `completar´ el significado
expresado en el Proceso.” (Fawcett, 2008, p. 110)
Entonces, en la lengua española se tiene que:
● el V siempre instancia el Proceso, y Aux (verbo auxiliar)
cuando el grupo esté conformado con una frase verbal;
● el S, el Sujeto Agente, es siempre un Rp;
● el C siempre instancia un Rp, distinto del S.

Dentro del esquema funcional, el rol participante constituye una


función del sistema de transitividad, de lo que puede interferirse
que el Sujeto como rol participante (Rp) tiene una relevancia en la
construcción de estos significados. Como se verá más adelante, el
Sujeto desempeña otros dos roles, el de tema en la hebra textual y
en el Modo en la hebra interpersonal, aunque con escasa incidencia
en la lengua española.
Por otra parte, el sistema de la transitividad construye la
experiencia de la realidad en base a seis tipos de procesos cuyos
límites entre sí son difusos: Halliday establece que las experiencias
71
del mundo externo que realizan a través de los procesos materiales;
que las experiencias de la conciencia se hace mediante los que son
mentales y que éstos se intervinculan según los relacionales. A su
vez, entre los intersticios limítrofes de los anteriores figuran los de
comportamiento, los verbales y los existenciales. La realización
típica de los procesos opera mediante los rangos constitutivos:
Procesos, participantes y circunstancias se realizan en grupos
sintácticos específicos. A continuación, se presenta una
integración entre los procesos y sus realizaciones correspondientes
en los roles participantes:

Tabla 6: Tipos de procesos (Ghío & Fernández, 2008, p.111)

Tipo de Participantes o asociados Ejemplos5 Comentado [68]: Creo que en la columna central ha
datos referidos al proceso, su delimitación y también
cuestiones relativas a los participantes Sugiero agreg
proceso una columna.

Agente + Meta + Beneficiario


El agente es el SUJETO.
El proceso no siempre a) El gato
corresponde a eventos concretos o arañó el
físicos, también puede referirse a sofá.
abstracciones. Si hay solo un
Material participante, la cláusula es b) Las
intransitiva (alguien hace algo), palomas

5
Ejemplos propios.
72
pero si hay dos o más cagaron el
participantes, entonces la cláusula parabrisas.
es transitiva (alguien hace algo y
en el proceso se involucra otra c) Los pibes
entidad): admite la transformación regalaron
en pasivas (el sujeto no es el una remera
agente) y activas (agente y sujeto de su
se superponen en el mismo equipo
constituyente). El beneficiario favorito a
(recipiente o cliente) es el que Marcos.
percibe algo dado o quien
experimenta algo.

Agente + Proceso + Alcance a) Todos nos


Procesos de comportamiento incomodam
Comport fisiológico y psicológico como os con su
amiento respirar, soñar, sonreír, toser. actitud
arrogante.
b) Me reí
mucho con
tus memes.

Perceptor + Fenómeno a) No sin


Mental- El participante, el sensor, es susto vimos

73
Perceptiv humano y consciente. El y oímos
o- fenómeno puede ser sentido o con Ana la
Cognitivo percibido y puede funcionar como tormenta
-Afectivo Sujeto. (Ejemplo2) de piedra.
b) La crecida
del río San
Antonio fue
vista por
todos los
turistas.

Verbal Emisor + Locución + a) Escuché tu


Destinatario audio.
Procesos de “decir”. Participante b) Dejá de
“hablante” y otro que el hablar
“receptor”, el cual es el pavadas.
destinatario.

Tipos de participantes Identificativos:


Procesos de “ser” o “tener”, identificador +
referidos a aquellos en donde se identificado
Relacion establece una relación entre dos a) Jorgelina
al- entidades separadas. es la actual
Intensivo secretaria

74
- docente.
Circunst b) Ahora los
ancial- fines de
Posesivo semana son
Neflix.
c) Lucía y
Constanza
son primas.

Atributivos:
portador +
atributo
a) Tengo dos
gatos
siameses.

Existenci Existente + circunstancia


al Procesos que representan eventos a) El
naturalizando su esencia, sin accidente
señalar causas, efectos, ni así
explicaciones que den cuenta del sucedería
estado del mismo. Verbos: existir, en
ser, presentarse, sucedió, ocurrir, cualquier

75
etc., tienen función existencial. momento.
Estas expresiones asociadas a la b) Hay
impersonalidad contribuyen a la demasiados
ausencia de los participantes libros en la
correspondientes a actores vieja
sociales responsables del evento biblioteca.
relatado.
El se pasivo impersonal puede
usarse con el mismo efecto
discursivo y de manipulación
informativa.

Circunst Circunstancias: lugar, tiempo, modo, cantidad,


ancial causa, etc. Comentado [69]: Ojo, circusntancial parece tipo de
proceso por el diseño.

Tanto en la oralidad como en la escritura, el hablante/escritor


selecciona opciones que relevan los procesos representados y, por
consiguiente, los significados destacados dentro del discurso con
lo cual se hace manifiesta, en parte, la intencionalidad discursiva
de quien detenta la palabra (escrita u oral). Poder desenredar la
madeja de cuáles son los participantes asociados a cierto tipo de
procesos, con sus roles sintácticos y semánticos desempeñados en
el texto, habilita a triangular de qué manera se reconstruyen
76
gramaticalmente los eventos que se leen o se oyen, sobre todo en
aquellos discursos legitimados y omnipresentes. Así, en textos que
forman parte de géneros discursivos de circulación masiva, en los
procesos materiales los actores son humanos, individuales o
colectivos, armados en frases nominales o nominalizaciones
plenas, que actúan de manera activa o paciente. En modo alguno
estas opciones son equivalentes en la superficie del proceso que los
involucra, ni mucho menos. referencian los mismos aspectos del
mundo exterior.
Nos interesa destacar aquí la constitución del Sujeto y su
importancia en la expresión de los significados transitivos. En ese
sentido, la propuesta funcional va un paso más allá del análisis
estructural porque, dentro del entramado de significados que se
amalgaman en la oración-mensaje, la función sintáctica Sujeto
cumple diferentes roles que exceden los límites oracionales y que
se acomodan según el sistema de realización: un rol participante
(Rp) en la agencia que matiza el significado ideacional, pero
simultáneamente el Sujeto participa en los distintos significados
textual e interpersonal. Aunque, como se verá en el próximo
apartado, el Sujeto no realiza el significado interpersonal en la Comentado [70]: ¿cuál de ellos?

lengua española.

77
b) Modalidad: el Sujeto gramatical y los significados
interpersonales

El sistema de la modalidad expresa las relaciones interpersonales


que condicionan los intercambios entre emisor (hablante/escritor)
y el receptor (oyente/lector). El sistema describe, en el rango de la
oración-mensaje, las expresiones de las intencionalidades
discursivas del usuario de la lengua, las representaciones de sí
mismo y sus interlocutores, y los posicionamientos desde/frente a
la situación comunicativa instanciados por los recursos léxicos-
gramaticales.
Los significados se estructuran en el “elemento modo” y el
“resto” (Halliday & Matthiessen, 2004). En el primer segmento
oracional se ubica el Sujeto, la Flexión verbal (el Finito) y la
Polaridad, mientras que en el segundo se incluye el Predicador, los
Complementos y los Adjuntos. Por su parte, el “elemento modo”
proporciona el anclaje de la oración al aquí-ahora, relacionando de
esa manera la proposición con el contexto comunicativo.
Halliday plantea la modalidad tomando como punto de partida la
descripción de la lengua inglesa. En consecuencia, dado que la
lengua española tiene otra organización gramatical, las
descripciones de dicho sistema revelarán otros aspectos de su
funcionamiento. Más adelante se ampliará en qué sentido la
modalidad de una y otra lengua son distintivas, por lo pronto se
78
analizará en más detalle la estructuración léxico-gramatical del
“elemento modalidad-resto” y su proyección interpersonal.
Por un lado, el “Finito” o verbo conjugado expresa el “tiempo
principal” (presente, pasado o futuro) relativo al aquí-ahora en que
se enuncia una oración-mensaje y que determina si “una
proposición (es) argumentable o discutible especificado en estos
términos temporales.” (Ghío & Fernández, 2008, p. 125)
En relación a esto, otro aspecto importante es el operador de
“modalidad”, el cual expresa el criterio o juicio del usuario; es
decir, “Una proposición puede ser argumentable o discutible por
ser presentada como probable-improbable, deseable-indeseable,
etc. La finitud se expresa por medio de un operador verbal
temporal o modal que fusiona ambos.” (Ghío & Fernández, 2008,
p. 125) Por ejemplo, en la lengua inglesa la flexión funciona con
dos valores que son mutuamente excluentes: operador de
modalidad u operador de tiempo primario. En It can´t be true
(traducción aproximada: Esto no puede ser cierto o Esto no puede
ser verdad) tiene en can (verbo poder) un verbo modal que fija a
la oración al aquí-ahora pero no expresa un tiempo principal. A
diferencia del inglés, la lengua española integra el valor del
operador en la estructura del verbo conjugado.
El “Finito”, además de integrar el operador verbal de tiempo y la
modalidad, combina la “Polaridad” ya que en una proposición
“para que algo sea argumentable o discutible tiene que especificar
79
su polaridad, es decir, si es sí o si es no.” (Ghío & Fernández, 2008,
p. 126)
El segmento de finitud es el componente verbal del modo, pero
también, y esto es lo que nos interesa destacar, se relaciona con un
componente que está integrado por un sustantivo o grupo
sustantivo: es el Sujeto gramatical que denota a la entidad animada
o no animada de la cual el hablante el hablante/escritor predica algo
y es la función que marca la validez o no de la proposición
contenida en la oración-mensaje. En la lengua inglesa, el Sujeto
gramatical y el finito están fuertemente enlazados y es en ese
segmento léxico-gramatical donde se realizan los significados
interpersonales: la movilidad posicional del operador y del Sujeto
determina qué tipo de significado interpersonal expresa la oración-
mensaje y qué roles comunicativos se asignan los interlocutores.
Es decir, la anteposición del Sujeto al operador verbal determinará
que la oración-mensaje será “dadora de información” (una
afirmación); por el contrario, si es pospuesto, será “buscadora de
información” (una interrogación). Paralelamente, se tienen los
roles comunicativos de un emisor, el “dador de información”, de
“buscador de información”, “promotor de una acción”, etc.
Por su parte, en la lengua española el “elemento modo” realiza
esos significados de manera bien distinta a la lengua inglesa. Es
más, el Sujeto español no interviene en la formación de los mismos
o, en todo caso, sólo expresa otros significados relativos a lo
80
interpersonal. En efecto, el Sujeto español extiende la red de
significados entre el “elemento de modo” y el Resto. Vimos que
el “elemento modo” se compone del Sujeto y del Finito o verbo
conjugado: la rica flexión verbal del español, a diferencia del
sistema verbal inglés, permite que los rasgos de la concordancia
(persona y número) se localicen expresados en la flexión verbal,
por lo que son gramaticalmente redundantes al ser replicados por
el Sujeto en posición preverbal, es decir, por el Sujeto explícito o
léxico.
El Sujeto gramatical está contenido en el verbo conjugado: la
desinencia verbal porta los rasgos de persona y de número y
concuerda con el Sujeto explícito que, en este caso, constituye la
realización léxica de un grupo sustantivo y duplica los rasgos de
concordancia; dicha duplicación permite prescindir del Sujeto
explícito y habilita la opción del Sujeto Tácito/desinencial. Las
razones que determinan su presencia o ausencia en la superficie
responde a razones tanto sintácticas como pragmáticas o
discursivas según las necesidades del hablante/escritor: que el
Sujeto sea expreso o sea desinencial dependerá del contexto, del
rol comunicativo de quien enuncia y de la necesidad de mantener
o interrumpir el rumbo del discurso. Son aspectos que se
ampliarán en el apartado del Sistema textual en relación a la
progresión temática.

81
Esta particularidad establece un vínculo con el binomio
conmutable Sujeto explícito/Sujeto Tácito/desinencial que aquí
tendrá su reformulación sistémico-funcional. Por un lado, la
redundancia léxico-gramatical en el seno de la oración-mensaje
replica los rasgos de los sistemas de persona y de número ya
incluidos en la flexión verbal: por ejemplo, Los presos/Los
pacientes/Las motos/Las palomas colmaron el patio. A partir de
la desinencia de colmaron es posible recuperar las rasgos de
persona y de número en virtud del Sujeto gramatical, pero también
de la concordancia que mantiene con la instanciación léxica del
Sujeto explícito. Por el otro, el rasgo “explícito” del Sujeto
vehiculiza parte de los significados que se completan con la
información aportada por el Resto [compuesto por el Predicador
(pueden ser verbos no personales que acompañan al verbo de
“tiempo principal”: 𝞡 poder hacer, 𝞡 tener que salir, 𝞡 estar
saliendo, etc.), Complementos (OD, OI), Adjuntos
(Circunstancias)]. El valor semántico del Sujeto contribuye a la
expresión de las relaciones sociales que el hablante/escritor tiene
la intencionalidad de visibilizar en el nivel del rango oracional,
pero, insistimos, el Sujeto español n o cumple rol alguno en el
anclaje modal de una proposición. Aquí el Sujeto explícito o
tácito/desinencial, además de designar aquello de que predica el
grupo verbal, contribuye a posicionar el rol comunicativo del
hablante/escritor respecto de lo que enuncia.
82
Por ejemplo, en Nosotros compramos una Amarok se la
redundancia de la flexión -mos con el Sujeto Nosotros, ambos en
1º persona del plural. Como esta función no aporta nada al Modo,
ya replicado en el verbo conjugado, la información explicitada por
Nosotros comunica significados con cierta relevancia interpersonal
que va más allá de los límites gramaticales de la oración-mensaje,
es decir, hay razones pragmáticas y discursivas que revelan
características del hablante/escritor. Entonces, la razón por la cual
el Sujeto es explayado por el emisor tiene un sesgo interpersonal
en cuanto a que considera que es pertinente y necesario reponer una
información que resulta relevante comunicar.
En el análisis sistémico-funcional se aprecia la disposición de los
componentes de la siguiente manera:

Tabla 7: Ejemplo de componentes de análisis sistémico-funcional.

Oración Nosotros compra- -mos una


- Amarok.
mensaje

Element SUJETO FLEXIÓN

83
o de
Modo

Resto Predicador Compleme


nto

Por otra parte, las descripciones del sistema de la modalidad


permite identificar roles comunicativos de los hablantes/escritores
que se acomodan de determinada manera en los recursos léxico-
gramaticales. La oración-mensaje es entendida como instanciación
de los significados interpersonales que establecen los roles
discursivos que los posicionan de cara a lo que se dice/recepta. Así,
el acto de habla se polariza en dos roles discursivos que definen
en términos de lo que se intercambia: DAR (Implica `recibir´: Te
dejé las camisas sobre la silla.) y DEMANDAR (Implica dar una
respuesta: ¿Encontraste las camisas?). En cuanto al objeto
intercambiado, Halliday define: BIENES Y SERVICIOS, el objeto
que se intercambia es un bien o un servicio no verbal, cuya
respuesta puede o no ser verbal y tiene en el lenguaje un medio de
instanciación (No verbal: Ya te ponés a planchar las camisas) e
INFORMACIÓN, donde el requerimiento y la respuesta son
verbales , por lo que el lenguaje es el medio y la finalidad del
intercambio (Verbal: Contame lo que te dijo.).
El hablante/escritor realiza selecciones asumiendo su rol
discursivo que, por defecto, asigna a su interlocutor el rol de
84
oyente/lector; el proceso de interrogación puede o no constituir una
respuesta a lo propuesto. El diálogo es una fluctuación dinámica
de intercambios y negociaciones de proposiciones y propuestas que
se ofrecen y/o se niegan; se aceptan y/o se rechazan; es decir,
intercambios, más o menos exitosos, esperados/deseables por el
hablante o de alternativas que quedan sujetas al criterio del oyente,
quien puede cuestionar/evaluar/confrontar la pertinencia del
intercambio. Desde el punto de vista semántico, el diálogo se
articula en una selección discursiva y, desde el punto de vista
gramatical, esas fluctuaciones se realizan de acuerdo a una gama
de opciones dentro del sistema de modo.
En relación a que el usuario sea un “buscador” o un “dador” de
información o “promotor de acción”, si se considera la oración-
mensaje Luciano tiene una reunión, en el contexto de un diálogo,
quien oficia de dador de informativo interpreta un rol de “dador de
información” que implica la participación de uno o varios
interlocutores, sus receptores, que son los destinatarios de esa
proposición. Pero si la expresión cambia a Tenés que ir a la
reunión, Luciano, el hablante asume el rol de “impartidor de una
orden” que demanda una acción y el interlocutor, Luciano, quien
obedece y la ejecuta, o la rechaza. En la lengua española, estas
oraciones portan significados afirmativos o exhortativos en virtud
de los roles comunicativos asumidos y también porque en el rango
oracional los modos verbales Indicativo e Imperativo proveen los
85
operadores que o bien indica/objetiva, o bien modaliza la
expresión, respectivamente. En consecuencia, el Sujeto español no
tiene incidencia directa en la articulación modal de la oración-
mensaje.
Por su parte, la lengua inglesa, para poder establecer roles
discursivos cuando se da o requiere información, el Sujeto
funciona dentro del “elemento de modo” en posiciones muy
restringidas: si encabeza la oración y está delante del verbo, el
hablante es “dador” de información; mientras que si tiene posición
posverbal, la expresión será una interrogación con un marcado
sesgo que requiere una respuesta polarizada, por un sí o por un no:
Do haitians invade Chile? (¿Los haitianos invaden Chile?), Did
new neighbors move in the next apartment? (Se mudaron nuevos
vecinos al departamento de al lado?), Does inflation go down?,
(¿Baja la inflación?), etc. En la lengua inglesa, la articulación del
binomio Sujeto-Finito define los roles comunicativos de los
hablantes/escritores según los interlocutores, necesidades y
contextos comunicativos.
Distinto es el caso del Sujeto español que posee ciertas
particularidades que restringen acusadamente sus posibilidades de
portar significados interpersonales y la asignación de roles
comunicativos. La relativa libertad posicional permite que no esté
fusionado con la flexión verbal en el “elemento de modo”, como

86
ocurre en el ligamiento del Sujeto inglés con el Finito. Por
ejemplo:

a) Don Juan arma el calefón.


El calefón arma Don Juan.
Arma Don Juan el calefón.

b) ¿Don Juan arma el calefón?


¿El calefón arma Don Juan?
¿Arma Don Juan el calefón?

Tanto en las oraciones-mensaje de a) como en las


interrogaciones de b), no son las posiciones sintácticas del Sujeto
las que determinan necesariamente que sean dadoras y/o
buscadoras de información, respectivamente. La posición del
Sujeto, sea canónica o no, no presenta indicios de modalidad, aún
en realizaciones con una configuración sintáctica infrecuente como
en Arma Don Juan el calefón.
Además, existe otro aspecto relacionado al Sujeto que convalida
la tesis de que en la lengua española no expresa significados
interpersonales: la impersonalidad. Las oraciones unimembres no
admiten Sujeto: Hay lugar, Se hace tarde, Hace mucho frío,
Garúa, Se evaluó a los aspirantes, etc. En estas oraciones su
ausencia no invalida la modalidad de las mismas, al contrario,
87
funcionan como “dadoras de información”. Es decir, sí existe el
Modo más allá de que no haya Sujeto. Pero ¿cómo se expresa en
el español? ¿Qué rasgos determinan los roles comunicativos en la
lengua española?
Todo parece indicar que la modalidad se establece mediante los
rasgos flexivos del verbo y los rasgos fonológicos o la entonación.
Los componentes morfológicos y fonológicos son factores
fundamentales que se combinan para garantizar que los
hablantes/escritores puedan producir, receptar e interpretar cuando
una expresión da o busca información, promueve acciones, etc.
Por ejemplo:

Tabla 8: Sujeto español y la modalidad.

Oración- [SUJETO Verbo/operad Complemento]


mensaje or

Sintaxis María compra un perfume.


Morfología Rasgos flexivos: 3ª persona, MODALIDAD en


→ singular. la oración-mensaje
española
Fonología Entonación descendente.

88
En español, el Sujeto mantiene con el verbo un lazo indisoluble
en virtud de la concordancia y de la entonación
(ascendente/descendente) para poder expresar los significados
relativos a lo interpersonal. Aún así es necesario precisar qué
palabras o grupos sintácticos funcionan como Sujeto.
Concretamente, ¿cuáles son los rasgos morfosintácticos que
determinan que tales palabras o grupos son el Sujeto de la oración-
mensaje? Y como ya se señaló antes, el Sujeto español no tiene
proyecciones en los significados interpersonales, entonces, a modo
de adelanto, ¿qué particularidades implican al Sujeto en la
expresión de los significados del sistema textual?
Por lo pronto, para dar respuesta a la primera interrogación,
Fawcett (2008) ensaya una alternativa que, aunque naturalmente
orientada a dar cuenta de la modalidad del inglés, posibilita
explorar características gramaticales del Sujeto español. En este
sentido, el Enfoque Sistémico-Funcional retoma aportes
estructurales para su versión funcional del Sujeto.

Un test del Sujeto español. Reglas de reconocimiento

Para Fawcett, el Sujeto


“es la palabra o conjunto de palabras que, por aparecer
antes del Operador, muestra si la cláusula es dadora de
89
información o buscadora de información. SO en inglés
quiere decir `dadora de información´ y OS en inglés
quiere decir `burcadora de información´. Ejemplo:
reformúlese Fiona will see him como Will Fiona see
him? (Fiona irá a verlo/ ¿Irá a verlo Fiona?).” (Fawcett,
2008, p. 70)

Dado que el Sujeto español es opcional, si en nuestra lengua


queremos afirmar, preguntar, negar, dudar, etc., los
correspondientes roles comunicativos son reconocidos en función
de la particular curva de entonación y los rasgos de concordancia
de la flexión verbal. Al respecto, el operador es una partícula que
se amalgama al verbo conjugado español, no se instancia separado
como en el inglés para formar con el Sujeto el `elemento de
modo´(Fiona will.../Will Fiona...). Por el contrario, en el inglés la
instanciación del Sujeto es obligatoria y su
anteposición/posposición respecto al operador es lo que determina
que la oración-mensaje o es “dadora de información” (SO) o es
“buscadora de información” (OS).
En general, la definición de Sujeto es funcionalista. Sin
embargo, el propio Fawcett se vale de criterios formales
estructurales para determinar qué ítems léxicos o cuál conjunto de
los mismos `llenan´ la función, con lo cual se otorga una gran
importancia al grupo nominal concordante con el grupo verbal en
90
la expresión de los significados. Teniendo en cuenta lo anterior,
existe otra razón que justifica un “test” del Sujeto español: es un
instrumento que resulta operativamente didáctico, ya que se basa
en una serie sencilla de reglas que permiten evaluar y reconocer las
palabras o grupos que `llenan´el Sujeto gramatical o léxico. A
saber:

1. Encontrar la forma verbal conjugada, ya sea el verbo


principal y el operador (V/O);
2. Encontrar el sustantivo que concuerde con la forma
verbal conjugada;
3. De no ser factible la Regla 2, explicitar un pronombre
personal que concuerde con el grupo verbal
seleccionado a partir de la Regla 1;

Si la construcción es unimembre, entonces no admite Sujeto por


lo que la oración-mensaje es impersonal.
Retomamos un ejemplo anterior para ilustrar sucesivamente las
Reglas:

{3ª persona, singular}


a) María (S) compra (V/O) un perfume.
b) María (S) puede (Aux/O) comprar un perfume.

91
{3ª persona, plural}
c) A María le gustan (V/O) los perfumes. (S)
d) A María siempre le han (O/V) gustado los
perfumes.

La aplicación de la Regla 1 evidencia algunas relaciones de


concordancia entre el Sujeto explícito y la flexión verbal, ya sea en
la amalgama verbo principal (V) y operador (O), en a) y c); o
auxiliar (Aux) y operador (O), en b). Ahora bien, el Sujeto español
tiene una particularidad de la que carece el Sujeto inglés, la opción
de conmutar en Sujeto tácito. El hecho de que no se instancie en
la superficie oracional se debe a que puede recuperarse de la
flexión verbal. Efectivamente, los usuarios de la lengua española
pueden recuperar el Sujeto a partir del grupo verbal.

{Sujeto gramatical: 1ª persona, plural}


a) Almorzaremos (V/O) hamburguesas y verduras.

{Sujeto gramatical, 3ª persona, plural}


b) Han (Aux/O) cenado hamburguesas y verduras.

La Regla 2 no define la opción del Sujeto desinencial, por lo que


es necesario la implementación de la Regla 3, que sí posibilita
recuperar ese tipo de sujeto mediante un pronombre personal. Las
92
reglas ayudan a reconocer cuándo hay un Sujeto desinencial y,
simultáneamente, poder dilucidar casos de oraciones-mensaje
potencialmente ambiguas. Por ejemplo: en Leyó Frankenstein.

a) Leyó (V/O) Frankenstein. (Sujeto


desinencial/tácito: Él/Ella)
(Leyó Frankenstein, de Shelley. También Anne
Radcliffe y toda esa onda gótica.)

b) Leyó (V/O) Frankenstein (S).


(Recién leyó Frankenstein. Ahora es el turno de
Sánchez.)

Las interpretaciones y las asignaciones de uno y otro tipo de


Sujeto del contexto sintáctico y la situación comunicativa en la que
se genera la oración-mensaje. La referencia contextual es
fundamental. De ahí que el hablante/escritor selecciona los
recursos léxico-gramáticos en base al sistema de opciones que le
permiten construir o el Sujeto explícito o el Sujeto tácito según
cuál/cuáles significados decida expresar. Más precisamente aún,
los significados asociados al Sujeto explícito corresponden a la
hebra textual. En el apartado dedicado al Sistema textual se
ampliará la caracterización de dicha hebra.

93
Por último, parte de los intercambios comunicativos seleccionan
oraciones-mensaje que carecen de Sujeto. Cuando se agotan las
anteriores instancias de reconocimiento del Sujeto, la Regla 4
constata la impersonalidad pero también parte de los significados
interpersonales conjuntamente con la entonación, que es la
expresión del modo en la lengua española.
En todo caso, el Sujeto expresa los significados redundantes
replicados por la desinencia verbal y una serie de significados
afectivos y de cortesía, cuya importancia comunicativa es
intencionalmente enfatizada por el hablante. La explicitación del
Sujeto no sólo obedece aquí a la realización léxico-gramática
expresada por un sustantivo, un verbo infinitivo o grupo sustantivo
que enfrenta composicionalmente al predicado, en donde además
pueden detectarse las hebras de significado transitivo. En el
sistema de la modalidad el Sujeto explícito puede patentizar el
compromiso y otras características de intencionalidad (positiva o
negativa) del hablante en situaciones de diálogo:
● Yo te ayudo.
● Yo te comprendo.
● Nosotros no tenemos nada que ver.
● Yo te lo digo por tu bien.
● Nosotros te acompañaremos.
Si bien el Sujeto español interviene como participante en las
redes sistémicas de la Transitividad y con escaso impacto en las de
94
la Modalidad, ya que su incidencia decisiva la adquiere en la
expresión de los significados textuales. A continuación, en el
próximo apartado se intentará determinar de qué manera incide con
su rol de Sujeto-Tema en la hebra de los significados textuales.

c) Textual: el Sujeto psicológico en la progresión temática


Las metafunciones son abstracciones que, en el rango de la
oración-mensaje, expresan el orden y las relaciones lógicas de las
ideas así como también en la asignación de los roles de los
hablantes/escritores y las representaciones/valoraciones asociadas
a ello de acuerdo a las opciones que provee el sistema. Los
intercambios de significados ideacionales e interpersonales
siempre se instancian en forma de textos orales y/o escritos. Las
realizaciones del sistema textual y las expresiones específicas de
este tipo de significados tienen gran importancia no solo en cómo
se configuran los recursos léxico-gramáticos en este estrato, sino
además en las posibles proyecciones didácticas de los procesos de
producción escrita.
Precisamente, es la metafunción textual la que da cuenta de las
propiedades de coherencia y de cohesión que estructuran los textos
en arreglo a la situación comunicativa. Los significados ideacional
e interpersonal son codificados por los recursos léxico-gramáticos
como información semántica que, a su vez, se organizan en redes
textuales. Así, “Halliday se refiere a la metafunción textual como
95
la `función habilitadora´de significados ideacionales (experiencial
más lógico) e interpersonales justamente porque ella juega este
papel de apoyo semántico.” (Montemayor-Borsinger, 2009, p.
115-116) La metafunción textual tiene el rol fundamental de
facilitar la actualización de esos componentes semánticos que
simultáneamente funcionan en el rango oracional a través de las
opciones que ofrecen sus correspondientes sistemas de realización:
Transitividad, Modalidad y el sistema de Tema-Rema.
La oración-mensaje concentra en una misma estructura
gramatical la realización de los tres tipos de significados. Es la
plataforma desde donde se dice y hace algo en arreglo al cotexto
formado por los ítems léxicos, entre una oración y otra, y con el
resto de la madeja textual. La organización de la información en
el sistema de Tema-Rema es el factor que vincula y traza la red
textual y esto es posible porque las unidades y constituyentes
oracionales no están dispuestos arbitrariamente sino que las
combinaciones sintácticas se ajustan a las opciones que el usuario
pueda seleccionar teniendo en cuenta lo que necesite expresar a
determinados interlocutores en un contexto comunicativo dado. La
estructura temática de la oración es la que posibilita ese anclaje
comunicativo. Los recursos léxico-gramaticales se organizan
como mensaje, en donde se puede reconocer que una de sus partes,
la principal, el Tema es el punto de partida del flujo de información

96
y el que, desde la perspectiva del usuario enunciador, indica lo que
se va decir sobre alguien/algo.
Halliday llevó adelante una serie de trabajos6 sobre la
metafunción textual en donde pueden rastrearse influencias y
puntos de contacto con los estudios realizados por algunos de los
lingüistas de la Escuela de Praga: Valen Mathesius, Fransitek
Daneš y Jan Firbas. Con el último en especial y su perspectiva
funcional de la oración, Halliday compartió su preocupación por la
organización del discurso y en especial en lo relativo a los
conceptos de Tema y de Rema. Sin embargo, entre la Escuela de
Praga y lo que después fue la Escuela de Sydney existen
diferencias.
Para Halliday la asignación del concepto de Tema responde a un
criterio marcadamente posicional: es Tema cualquier palabra o
grupo de palabras que encabeza una cláusula u oración-mensaje
pero que no es necesariamente un elemento `conocido´. En
cambio, para Firbas el Tema es la información conocida que no
necesariamente está en posición inicial y que permite a un emisor
direccionar su discurso. Tanto la `posición inicial´como la
`información conocida´ coinciden en una misma estructura si la
oración-mensaje mantiene el orden Sujeto-Verbo-Objeto: así “Para
Halliday el Tema es el punto de partida y tiende a ser la

6
Notes on transitivity and theme in English I, en Journal of Linguistics 3, 1967a; Notes on transitivity and
theme in English 2, en Journal of Linguistics 3, 1967b; Notes on transitivity and theme in English 3, en Journal of
Linguistics 4, 1968.
97
información `conocida´; para Firbas el Tema es la información
conocida y tiende a ser el comienzo de la oración.” (Montemayor-
Borsinger, 2009, p. 80) El criterio posicional de Halliday es el que
orientará la configuración de los significados textuales en las
funciones de Tema y de Sujeto.

c.I) El orden de los recursos léxico-gramáticos, prominencia


temática y las funciones Tema y Rema
En su configuración típica Sujeto-Verbo-Objeto, la oración
simple se compone de Sujeto y de Predicado. Del mismo modo, el
sistema Tema-Rema coincide, más o menos, con esas funciones:
así, el elemento temático se amalgaman con el Sujeto, mientras que
el elemento remático lo hace con el Predicado, que funciona como
elemento dinámico de transición de la información. En ese
sentido, el Sujeto adquiere una gran relevancia en la expresión de
la prominencia temática.
Como se mencionó antes, el Sujeto puede ser explícito o
desinencial. Reiteramos, el primero es una realización léxica que
replica los rasgos de concordancia ya contenidos en la desinencia
del verbo conjugado, mientras que el segundo tipo contiene la
persona y el número en la terminación gramatical del verbo
conjugado y que permite asignar tácitamente un Sujeto no ha sido
explicitado. Son dos opciones que provee el sistema que dispone
de un mecanismo que permite ubicar al Sujeto explícito en posición
98
pre o posverbal. La flexibilidad posicional y el carácter
explícito/elidido obedecen en parte a que lo usuarios
intencionalmente optan, o bien porque elidir el Sujeto, o bien
tienen la necesidad de expresarlo, y no solo por razones
pragmáticas, porque simplemente necesitan enfatizar determinada
información. Indirectamente, el Sujeto puede tener significados
relativos a lo interpersonal; sin embargo, en la red del sistema
textual,sí puede configurar aquellos significados textuales que
contribuyen a la estructuración y progresión temática de la oración-
mensaje y del texto, lo que se traduce en el sistema en los anclajes
a la red semántica del texto para que el oyente/lector interprete lo
se expresa en el estrato léxico-gramatical.
La oración-mensaje se organiza en participantes, procesos y
circunstancias, que es donde se realizan los significados transitivos
que los hablantes seleccionan para dar cuenta de lo experiencial y
de sus visiones de mundo, por lo que cualquier segmento que
adquiere importancia discursiva puede funcionar como Tema. El
usuario puede optar colocar en posición inicial determinada
información que considere relevante. Así, “El Tema de una
oración, desde la perspectiva de la Lingüística Sistémico Funcional
(LSF), es el elemento o grupo de elementos en posición inicial que
pertenecen a la metafunción experiencial (Halliday, 1994, p. 38).
Estos elementos construyen modelos de experiencia del mundo y
transmiten determinadas representaciones por medio de procesos
99
(o verbos, en términos de la gramática tradicional) con sus
participantes y circunstanciales asociados (...)” (Montemayor-
Borsinger, 2013, p. 116)
Esta noción se relaciona a la organización sistemática que tiene
la información dentro de la oración, a nivel micro, y dentro de la
red textual, a nivel macro. El sistema de Tema constituye una
marca de referencia que ancla determinada información a un
contexto local en relación a la dada con anterioridad, de esa manera
una oración tiene su punto de partida en determinado nudo de la
trama textual: esa localización se llama Tema7. “Las opciones
textuales hechas en el Tema no introducen contenidos ideacionales
nuevos o nuevas dimensiones interpersonales en un texto, sino los
habilitan, les dan distintas prioridades.” (Montemayor-Borsinger,
2009, p. 116)
Más allá de lo que resta de la oración-mensaje es el Rema.
Entonces, se tiene que la oración típicamente estructurada en
Sujeto-Verbo-Objeto está informativamente organizada en Tema +
Rema. En términos sintácticos, el primer miembro corresponde al
Sujeto y el segundo, al predicado. Por ejemplo:

Tabla 9

7
El Sistema de Tema es uno de los sistemas que organizan los significados: el otro se llama Sistema de
Información que se basa en la entonación y que organiza el mensaje integrado por los elementos Dado/Nuevo. Si
bien ambos sistemas están integrados, funcionan con relativa independencia, por lo que se justifica aquí no
explayar el Sistema de información.
100
La Feria del Libro está colmada de
Oración- gente.
mensaje
Ese programa de es un bodrio.
radio

Plano Sujeto Verbo Complement


Sintáctico o

Plano Tema Rema


Textual

“El Tema emplea la posición para organizar la información a


partir de la orientación inicial a la que le sigue el Rema.” (Ghío &
Fernández, 2008, p. 138) En a) y b) el Tema se fija en la posición
inicial en relación a datos ya proporcionados antes (en la primera
oración, en el hilo conversacional o de alguna nota publicitaria
sobre las ofertas editoriales de la feria, por ejemplo) y se enlazan
con el Rema, el segmento siguiente en la progresión temática. En
lo que resta de la oración, el punto de partida original (compras,
ofertas) desplaza el eje temático hacia el remático, una nueva
posición a la que progresa transitoriamente la información antes
del próximo Tema que iniciará en la próxima oración.
Como se verá más adelante, la función Tema no solo se ajusta a
la oración-mensaje sino que abarca al párrafo y a textos completos

101
orales y escritos. Las estructuras de Tema y de Rema organizan la
expresión de los significados experienciales e interpersonales y
constituyen las opciones que los usuarios seleccionan para que sus
textos sean comunicativamente exitosos o los que los bienes y
servicios que negocian se efectivicen o no. Precisamente, una
selección idónea de esas opciones temáticas impacta en un mayor
grado de cohesión interna de un texto y en un coherente flujo de
los significados que se desean comunicar. No obstante, las
opciones varían según se expresen en la oralidad o en la escritura:
“en una conversación cara a cara, los puntos de partida
de la mayoría de nuestros mensajes somos nosotros,
nuestros interlocutores, nuestros quehaceres que, por ser
de algún modo conectados con la situación inmediata, se
incluyen en desinencias verbales o toman la forma de
pronombres. En cambio, en registros netamente
anclados en los escritos, como registros legales o
académicos, el Modo/Medio exige la tematización de
abstracciones: no partimos de nuestros sentimientos o
experiencias individuales, sino de generalizaciones
razonadas sobre personas, situaciones, que toman la
forma de grupos nominales.” (Montemayor-Borsinger,
2009, p. 120)

102
Montemayor-Borsinger (2009) generaliza que, en mayor o menor
medida, los significados experienciales e interpersonales se
tematizan según estén expresados en el registro oral o en el escrito.
En primer lugar, se puede inferir que en los intercambios
contextuados por la inmediatez comunicativa, los usuarios
seleccionan las opciones léxico-gramaticales y sintácticas en las
que predomina la función Sujeto desinencial/tácito o de
pronombres. En segundo lugar, en los diferentes géneros escritos,
el sistema tiende a colocar en posición preverbal ítems y grupos
sintácticos nominales que se realizan en la función Sujeto
explícito.

c.II) Las opciones de Tema Marcado y No Marcado: el Sujeto-


Tema
En el Enfoque Sistémico-Funcional, la función Sujeto gramatical
representa el elemento sobre el cual la proposición hace un juicio,
sobre el que afirma o niega algo. Si es un grupo nominal en función
de Sujeto explícito y se ubica a la izquierda del verbo, en posición
preoracional, dicha categoría se amalgama con el Tema. Por
consiguiente, la explicitación del participante, el grupo sustantivo,
tematiza el Sujeto y le confiere el estatus relevantemente
comunicativo de Tema: de esa manera, ubicarse al inicio de la
oración-mensaje, el Sujeto se constituye en el elemento
103
tematizado, es decir, en el Sujeto-tema. Entonces, el componente
de los sujetos gramaticales, o de los sujetos explícitos en posición
inicial, indica los puntos de la progresión temática de un texto.
En el plano textual, es el segmento `no marcado´, que hace
referencia a la posición canónica del Sujeto explícito, cuya
elección no destaca ninguna prominencia textual. El Sujeto-Tema
expresa significados ideacionales o experienciales y, en menor
medida, interpersonales pero sobre todo vehiculiza significados
textuales. En este caso es un tema no-marcado. Ejemplo:

a) [El biblioteca del Carbó]TEMA_NO-MARCADO registró


varios libros muy valiosos en el sistema Aguapey.
b) [Mis amigos y yo]TEMA_NO-MARCADO nos juntamos a
comer un asadito al mediodía.

Son típicas oraciones en voz activa que tienen participantes,


procesos, afectados y circunstancias, en donde el Sujeto es tema no
marcado, como en a) y en b). No obstante, en español la posición
tema no marcado no incumbe exclusivamente a la función Sujeto.
Por un lado, la flexibilidad posicional de los grupos sintácticos en
las oraciones declarativas y, por el otro, la posibilidad de que el
Sujeto sea desinencial o nulo permite que los usuarios seleccionen
como Tema a ciertos verbos conjugados y pronombres.

104
Según Taboada, M. T. (1995) y Montemayor-Borsinger (2005b,
2009), los sujetos, los verbos conjugados y los pronombres clíticos
con sus respectivos verbos asociados pueden funcionar como tema
no marcado y de esa manera sostener el rumbo temático de un
texto. Primero, los verbos conjugados, es decir, los procesos en
posición de Tema posibilitan caracterizar a los participantes desde
la perspectivas de las acciones que predican. De esto se desprende
su importancia para el análisis y la utilidad pedagógica de textos
narrativos. Segundo, los clíticos como la, le, lo pueden encabezar
oraciones, por lo que también funcionan como Tema aunque están
íntimamente asociados a los verbos que acompañan. Por ejemplo:
[Le dijo] lo que entendió, [Lo trajo] anoche, [La envié] por
encomienda, etc.
Pero el Tema no es privativo del Sujeto, ya que otros grupos
sintácticos pueden desplazarse a la posición preverbal y asumir la
prominencia temática. En ese caso, dicho grupo es un tema
marcado. En los siguientes ejemplos, en a) el tema marcado es una
construcción preposicional, mientras que en b) lo es un adverbio
de modo:

a) [Por desacuerdos internos,]TEMA_MARCADO los bloques


de diputados de la oposición no sesionaron.
b) [Imprevistamente]TEMA_MARCADO no declararon los
imputados en la causa CBI.
105
En consecuencia, “De acuerdo con la `perspectiva funcional de
la oración´ el orden no marcado respecto de cómo se da la
información sería: tema, transición, y rema. Proyectado en una
estructura gramatical este orden corresponde a sujeto, verbo y
objeto.” (Lavandera, B., 1985, p. 29) Cuando se invierte el orden,
esta función efectivamente se rematiza, en tanto que el verbo,
algunos de sus complementos o adjuntos se convierten en tema
`marcado´.
Así ocurre con los llamados verbos impersonales o unipersonales
y el pronombre proclítico se las oraciones pasivas cuasi-reflejas (Se
publicarán todas las vacantes), con valor reflexivo puro (Se
contradijo Miguel cuando fue interrogado, Se rasguñó el brazo) y
en las oraciones con valor de impersonalidad (3ª pers. de singular
seguido frase preposicional como en Se priorizó a los niños, Se
llegará por la tarde) forman elementos tematizados, o sea verbos
y pronombres que ascienden a posición de Tema `marcado´
mientras que desplazan toda la información en el rema.
Por otra parte, la importancia del Sujeto explícito como Sujeto-
Tema radica en que, más allá de sus rasgos formales, el hablante
considera imprescindible explicitar ciertos significados textuales
que son comunicativamente necesarios destacar y enfatizar.
Aunque también, puede haber un cambio de referencia, si es un
texto escrito en el que se tratan distintos temas en el esquema
106
textual dinámico que hace fluctuar la información temática hasta la
posición remática. La transición dentro de la oración de un
elemento a otro se da en términos de una transición informativa
entre las oraciones que se suceden. En consecuencia, la progresión
es la que posibilita el discurrir del texto y suministra las pistas al
lector/oyente para reconocer, interpretar y comprender los
significados mediante las marcas léxico-gramaticales y sintácticas
que porta el texto. Los casos de Sujeto explícito y desinencial aquí
considerados son algunas estrategias de esa dinámica.
El siguiente ejemplo ilustra el Sujeto-Tema (subrayado) y el
elemento tematizado (en itálica) donde se observa que pueden o no
coincidir:
Berta cambia cortinas.
Cortinas cambia Berta.
Cambia cortinas Berta.
Cambia cortinas. (Sujeto desinencial)
Cortinas cambia. (Sujeto desinencial)
La alternancia Sujeto explícito y desinencial se articula con el
recambio de informaciones que hace oscilar los significados
textuales en Tema-Rema. Entendiendo el Tema como el elemento
en posición inicial en un contexto dado de la oración-mensaje y el
Rema como la posición transitoria que se conecta con la
información nueva, se puede trazar la progresión temática de un
texto que constituye la red de significados que los usuarios de la
107
lengua por razones funcionales intercambian en distintas
circunstancias. En los ejemplos se aprecia que los elementos en
posición temática varían según las opciones que, si bien son
sintácticamente adecuados, tienen un impacto dispar tanto en el
modo en que se “acomoda” la información así como en su
recepción.
En la oración activa se puede distinguir dos niveles: un nivel de
los significados transitivos en donde la agencia del evento vincula
a, por lo menos, dos roles participantes (Rps), el Sujeto y el
Afectado, en función de un proceso; un nivel léxico-gramático,
referido a las palabras y demás constituyentes oracionales, es decir,
el grupo sustantivo que tiene significado transitivo proyectado en
el Sujeto, el grupo verbal que porta la predicación de la agencia y,
al menos, un segundo grupo sustantivo en función de
Complemento (OD, correspondiente al Afectado), que expresa el
efecto de la agencia de la entidad en función de Sujeto.
En el caso de la oración pasiva, el Sujeto paciente también es un
grupo sustantivo que tiene la relevancia informativa bajo el rótulo
textual de Sujeto-Tema. Si bien el significado transitivo es el
mismo, adquiere preeminencia la hebra textual en virtud de la
reorganización de los componentes oracionales. En efecto, el
proceso predicado por el verbo principal es experimentado por la
entidad o cosa que se instancia en el Sujeto, ahora en posición
`paciente´. El desplazamiento del grupo sustantivo en función de
108
OD en la oración activa lo actualiza en Sujeto-Tema. La
prominencia informativa responde a que el sistema provee la
opción funcional y también porque el enunciador es el que “le dice
al destinatario `de qué´se trata la cláusula (...) decide presentar
como Sujeto-Tema al Participante que típicamente aparece
segundo, entonces se presenta el Auxiliar Pasivo.” (Fawcett, 2008,
p. 90) Por ejemplo:
a) Los hinchas cantaron el `hit del verano´.
b) El `hit del verano´fue cantado por los hinchas.
El verbo principal (cantaron en la oración activa) se transforma
en frase verbal con ser + participio (fue cantado en la oración
pasiva), mientras que el Complemento (el `hit del verano´) se
desplaza a la posición preverbal como Sujeto paciente. A la
inversa, el Participante inicial de la activa se refuncionaliza como
Complemento Agente (preposición por + término grupo
sustantivo: por los hinchas). De manera tal que el proceso se
polariza con un Participante en a), que es `lo cantado´, y otro en b),
que es `los cantantes´del proceso. En ambos casos, en la activa y
en la pasiva, el grupo sustantivo del extremo izquierdo y en
posición inicial es el Sujeto-Tema.
Así como quien enuncia puede optar por la reorganización de los
recursos, la de convertir una oración activa en otra pasiva, para
otorgar mayor prominencia a un Participante que originariamente
no puede funcionar como Sujeto-Tema, también puede seleccionar
109
este tipo este tipo de oraciones para dejar afuera a un Participante
cuya aparición es típicamente preverbal en el inicio de la oarción
activa. En este caso se llama `Participante encubierto´, porque el
enunciador desea elidirlo, invisibilizarlo de su mensaje por
diferentes razones. El ejemplo indica la posición de dicho
Participante (C=por los hinchas) que ha sido sustituido por un rol
participante circunstancial (Adjunto):

El `hit del fue cantado (C) al concluir el


verano´ partido.

SUJETO- PROCESO PARTICIPANT PARTICIPANTE


TEMA E CIRCUNSTANCI
ENCUBIERTO AL

La articulación desarrollada por Halliday entre Sujeto explícito


([]) y desinencial (∅) y el binomio Tema-Rema (T-R) permite
identificar dos planos de la oración-mensaje: uno sintáctico y otro
textual. El primero de los planos contiene la información de los
grupos sintácticos y sus correspondientes funciones, entre las que
se encuentra el Sujeto, y el segundo contiene la información de
punto de partida o conocida, el Tema y la información nueva o
Rema. Entre el plano sintáctico y el plano textual no hay
correspondencia biunívoca: el tema sea o no marcado no es

110
necesariamente “llenado” por la función Sujeto aunque, como se
verá a continuación, adquiere especial relieve en los
procedimientos de cohesión textual.

c.III) Un recurso cohesivo: alternancia de Sujeto explícito y


Sujeto gramatical
El Sujeto juega un papel muy importante como recurso cohesivo
en la creación y cambio de referencia del hilo discursivo a medida
que el texto desarrolla el tema progresivamente añadiendo o
reformulando información nueva a la que ya conoce quien
habla/escribe.
Por un lado, en la alternancia de Sujeto explícito/Sujeto
desinencial/Tácito contribuye a la creación de referencia
intratextual y, por el otro, en la rematización de los elementos
tematizados para establecer los significados textuales referidos a
las entidades extradiscursivas, valga la redundancia, en el texto.
Los siguientes textos fueron tomados de un diario local a los fines
de ejemplificar las opciones del Sujeto:

Texto 1: Fragmento adaptado de Análisis: terruños cordobeses.


La Voz del Interior, 24/02/2018

111
“Si nos movemos hacia el Noroeste provincial (Ischilín, Quilino,
Cruz del Eje), la altitud sobre el nivel del mar aumenta, los suelos
se vuelven más pobres y las condiciones climáticas se hacen algo
más cálidas. Sin dudas, colabora en la producción de vinos más
concentrados e intensos. El sector tiene una buena cantidad de
viñedos implantados, por lo que sugiero “mirarlo con atención”
en el corto y mediano plazo. Si bien ya hay algunos productos de
esta zona en el mercado, esperamos poder degustar algunos
exponentes más esbozar un perfil básico de la zona.
El Valle de Calamuchita es la comarca vitivinícola más nueva de
la provincia, pero ya hay en ella casi 50 hectáreas cultivadas.
Tiene suelos pedregosos, escasos en materia orgánica y con
fuertes pendientes; unidos a un clima templado y bastante
húmedo. Seguramente, la convierte en una región ideal para la
producción de vinos blancos y espumosos, así como tintos de
Pinot Noir, Merlot o Malbec. (...)”

Texto 2: Fragmento de Ulises Bueno: drogas, Rodrigo, película


y la verdad detrás de una famosa canción. La Voz del Interior,
24/02/2018

112
“Nuestra relación eran de padre-hijo la relación. Él tenía 19
cuando falleció mi viejo, yo 8. Me cuidaba mucho, me malcriaba,
se iba de viaje y cuando volvía me traía regalos, golosinas, me
llevaba al parque de diversiones, con sus amigos, era como su
mascota. Era una criatura que los divertía a ellos. Jugaba
mucho con la actuación, hacía el papel de ridículo, los imitaba a
ellos, me llevaban siempre a lugares donde estaban ellos, dijo
sobre su relación con su hermano, Rodrigo. (...)”

En ambos textos la alternancia explícito/tácito del Sujeto


establece un juego de referencias extra e intertextuales. Así, en el
primer párrafo del Texto 1 el Sujeto explícito []figura en cada una
de las tres proposiciones copulativas para referirse a diferentes
aspectos del paisaje del noroeste cordobés, la referencia
extratextual. Salvo el Sujeto explícito [El sector...], que es una
expresión cuasi-sinónima del paisaje descrito y no supone un
cambio sustancial de tema, el resto de los sujetos desinenciales
remiten a la persona de quien enuncia aunque con un matiz
diferencial en el número: en la subordinada de la oración 3, el verbo
sugiero, 1ª pers., singular; y en la subordinada condicional de la
oración 4, 1ª pers., plural inclusivo.
En el Texto 2, el fragmento en 1ª pers. de una entrevista realizada
a Ulises Bueno, cantante cuartetero cordobés, toma como punto de

113
partida la rememoración de la relación afectiva con su hermano
Rodrigo. Excepto en el final en donde la 3ª pers., singular
posibilita la reposición de un Sujeto tácito que recapitula la
referencia a su hermano, ya mencionado al inicio de su narración.
Para referirse a su hermano, Rodrigo, y a sí mismo utiliza la
alternancia de pronombres personales. Solo al inicio de su
declaración, para generalizar el tipo de relación que el entrevistado
tenía con su hermano: en la oración 1 esa instanciación se configura
en un Sujeto explícito en [Nuestra relación...]; en la oración 2, el
Sujeto explícito es un pronombre personal en [Él...]; y, en el resto
del fragmento, se encabalgan con elisiones de sujeto que
configuran una red de referencia interna. Por un lado, la 3ª pers.,
singular indica que el enunciador narra un evento que vivió
exclusivamente con su hermano, como en [me cuidaba mucho
(...)], [me malcriaba (...)], [Jugaba mucho con la actuación, hacía
el papel de ridículo (...)]; por el otro, la 3ª pers., plural refiere a los
demás que acompañaban a su hermano y a él: [los imitaba a ellos
(...)].
Los textos 1 y 2 ilustran que mientras se mantiene el Sujeto
explícito, el tema y la referencia extratextual son constantes y el
Sujeto tácito contribuye a la cohesión interna dinamizando la
correferencia interna, de manera tal que la relación con el
antecedente es redundante con la flexión verbal, salvo que o bien,
se reponga un nuevo Sujeto explícito cuyo núcleo sea un sinónimo
114
o expresión equivalente, o bien, se desee cambiar el rumbo del
discurso y ese cambio se instancia en sustantivo o grupo sustantivo
que inicia otro punto de partida. Paralelamente, en el predicado,
que funciona como rema, se hacen las anticipaciones que
garantizan la progresión temática.

c.IV) Desambiguación
El Sujeto explícito también permite desentrañar ambigüedades
cuando no hay dos o más ítems léxicos idénticos o similares pero
que refieren a agentes o entidades diferentes, o cuando la
información proveída por el Sujeto gramatical es insuficiente. En
una oración-mensaje como Cantaba en el coro, si no se especifica
quién y/o en qué circunstancias ocurre el evento, la ambigüedad es
manifiesta.
Si el enunciador decide resolver la ambigüedad, el significado se
completa: introducir sustantivos propios o comunes como
María/Juan/El niño/La vocalista cantaba en el coro, o conmutando
por los correspondientes pronombres personales de 1ª y 3ª pers.,
singular. El verbo cantaba (Modo Indicativo, Pretérito
Imperfecto) repite su forma en la 1ª pers., singular como en la 3ª
pers., singular, de ahí que una manera de desambiguar la oración
es colocar un Sujeto explícito mediante la adición de los
pronombres.

115
Por ejemplo, Compra Marolio es una oración-mensaje
potencialmente ambigua tal como se la presenta: en una
interpretación, si se localiza el verbo conjugado está en 3ª pers.,
singular y es concordante con el sustantivo, tenemos:

a) [Compra]verbo Marolio.Sujeto

Del ejemplo, se puede inferir que existe un intercambio, que


puede reflejar confianza o dominancia entre los participantes, entre
alguien de apellido Marolio y quien consigna que realizará la
`compra´.
Sin embargo, existe una segunda interpretación. Manteniendo la
descontextualización de Compra Marolio, puede asumirse que no
es posible hacer concordar el sustantivo con el verbo conjugado
aunque sí con un pronombre personal (él/ella), de lo que se obtiene:
b) [Compr-a Marolio.] (él/ella, Sujeto tácito)
En contextos de intercambio oral, un hablante puede enunciar
Compra Marolio para referir la acción realizada y para referenciar
quién es el agente como en la opción a); pero en la b), los
interlocutores, conscientes de la referencia compartida de la marca
del producto que se compra, sabrán interpretar quién está
camuflado en el Sujeto tácito.
Si el ejemplo inicial se contextualiza, la ambigüedad
prácticamente desaparece, como en
116
a) Compra Marolio...Es el nuevo vecino que se encargará
de los insumos para las refacciones del sótano.
b) Compr-a Marolio.(Sujeto tácito: él/ella)Casi siempre prefiere
los productos de esa marca porque son más baratos.

La alternancia de Sujeto explícito o de Sujeto desinencial/tácito


son opciones que el usuario (hablante/escritor) selecciona según
los significados que desee expresar, precisamente para evitar la
ambigüedad y fijar una referencia en común con sus potenciales
interlocutores. En especial, las opciones del Sujeto español
vehiculizan significados textuales.

c.V) Progresión temática


A medida que las oraciones-mensaje construyen el entramado
significativo del texto, se efectúa una progresiva tematización de
remas, es decir, los nuevos segmentos de información requeridos
por el tema. El desarrollo temático se da mediante el vínculo entre
rema de una oración y el tema de la siguiente. Como se verá en el
ejemplo, a medida que se ejecuta la progresión lineal y simple, el
Sujeto explícito necesita del bloque remático contenido en la
oración anterior para poder establecer el punto de partida siguiente
y así sucesivamente hasta el entramado total del texto.
Daneš (1970) denomina progresión temática a las secuencias
conectadas de Temas, interrelacionadas y jerarquizadas en relación
117
a los párrafos y a la totalidad del texto de acuerdo a la situación de
intercambio en el que se efectúa. Distingue los siguientes tipos de
progresiones temáticas, de tema evolutivo lineal y de tema
constante, entre otros:

a) Progresión de tema evolutivo o lineal: responde a una


concatenación de temas, estos es, el rema de una proposición
o parte de éste se convierte en tema de la siguiente. [Esta
mañana he estado en la peluquería. ∅ (en la peluquería)
También estaba la vecina. ∅ (la vecina) Me ha dicho que...].
Es frecuente en la exposición de acontecimientos en cadena,
en el que uno es la causa del otro. Los procedimientos de
cohesión textual típicos en este tipo de progresión son: los
hiperónimos, las pronominalizaciones o el desplazamiento de
complementos a la posición preverbal. Una representación
esquemática posible es:

Tema 1 ⟾ Rema 1

Tema 2 ⟾ Rema 2

Tema 3 ⟾ Rema 3

118
Texto 3: Hallan una nueva especie de mariposa en las Sierras
(adaptado). La Voz del Interior, 24/02/2018

“Una mariposa desconocida para la ciencia volaba entre los


pastizales en las noches de la Pampa de Achala hasta que fue
descubierta. El investigador Hernán Beccacece, biólogo del
CONICET, llegó a este paraje y la descubrió. Decidió llamarla
Leucanopis navarroi. Leucanopis hace referencia al género de
estos insectos y navarroi es honor a Fernando Navarro, un
investigador experto en mariposas ya fallecido.
(...) No le falta belleza. Hernán piensa lo contrario. Este insecto
es una mariposa nocturna. Esta variedad de mariposa es una
polilla bastante fea. Son feas pero muy importantes porque son
grandes polinizadores de cultivos. También, estas polillas son
alimento de murciélagos y aves. Sin embargo, otras pueden ser
perjudiciales para el ser humano (....)”

En el Texto 3, el título introduce el macro-Tema del artículo. A


su vez, se estructura en una serie de subtemas que tienen sentido
dentro del ecosistema textual. En el párrafo 1: Tema 1 corresponde
al descubrimiento de la mariposa; el Tema 2, al investigador que la
descubrió; el tema 3, al nombre científico del insecto; y el Tema 4,
expresa el homenaje a otro investigador entomológo. En el párrafo
2, el Tema 5, que progresa en las cuatro primeras oraciones referido

119
al aspecto del insecto, pero cambia cuando aparecen dos temas
finales, cuya progresión transitoria se inicia en el rema contenido e
iniciado en la proposición adversativa de la oración cuatro.

b) Progresión de tema constante: a un mismo tema se le van


asignando distintos remas, es decir, el mismo tema aparece en
sucesivas oraciones con remas diferentes [Gabriel es
inteligente. ∅ (Gabriel) Es muy rápido razonando. ∅
(Gabriel) Siempre dice cosas oportunas y sensatas.] Es el
esquema más simple con el que el usuario escritor no pone en
peligro la interpretación, ya que el lector siempre tiene un
único punto de referencia común -en esta caso, Gabriel- entre
todas las oraciones-mensaje. Es aquí en dónde la alternancia
entre Sujeto explícito y Sujeto tácito/desinencial funciona
conformando un procedimiento cohesivo que uniformiza un
mismo tema entre las sucesivas oraciones-mensaje. Se
representa del siguiente modo:

Tema 1 ⟾ Rema 1

Tema 2 ⟾ Rema 2

Tema 3 ⟾ Rema 3

120
Texto 4: Baños porteños unisex: avanza un proyecto para
permitirlos en más bares y boliches (adaptado). Clarín,
23/02/2018.

“(...) Los shoppings y locales con más de 2000 metros cuadrados


tendrán que hacer un cambio específico: construir un denominado
“baño familiar” por cada nivel de acceso al público. Uno deberá
tener un inodoro y lavabo para chicos; el otro, para adultos y un
cambiador para bebés. Con esto, se eliminaría en ese ámbito el
sexismo implícito en el hecho de que los cambiadores para bebés
están, en la mayoría de los casos, en los sanitarios de mujeres.”

c) Progresión de temas derivados: todos los significados


textuales parten de un hiper-Tema a partir del cual se
desglosan sus rasgos constitutivos, que puede encontrarse al
inicio de una oracion-mensaje u oraciones-mensaje
precedentes. La contigüidad semántica entre cohipónimos y
entre éstos y el hiper-Tema permiten la derivación temática.
Su representación típica es:
d)

T (hiper-Tema)

121

Tema 1⟹Rema 1

Tema 2⟹Rema 2

Tema
3⟹Rema 3
Texto 5: Concepto de Redes Sociales (fragmento adaptado)

“El concepto está vinculado a la estructura donde un grupo de


personas que mantienen algún tipo de vínculo. Dichas
relaciones pueden ser amistosas, comerciales o de otra índole.
También llamadas “comunidades virtuales”, su popularidad ha
crecido hasta alcanzar dimensiones insospechadas. Las redes
sociales son sitios de Internet formados por comunidades de
individuos con intereses o actividades en común (como amistad,
parentesco, trabajo, etc.) y que permiten el contacto entre estos,
de manera que se puedan comunicar e intercambiar diferentes
tipos de información. Se clasifican según su origen y función.
Existen las redes genérica, las redes profesionales y las redes
temáticas (...)”

En el ejemplo anterior, el hiper-Tema se condensa en el título de


la nota: Concepto de Redes Sociales, concretamente en Redes
122
Sociales. En primer orden, el grupo sustantivo Redes Sociales
tiene sus cohipónimos que marcan subtemas , como comunidades
virtuales, sitios de Internet, redes genéricas, redes profesionales y
redes temáticas. A su vez, el hiper-Tema se fragmenta en función
de las necesidades comunicativas de la progresión temática. Sigue
el esquema de responder qué son las redes sociales, para qué sirven
y cómo se clasifican.
De los tres tipos de progresión temática se puede establecer que
la expresión de los significados textuales en función de los
eslabones que unen al tema con puntos precedentes del texto se
produce mediante la selección de ciertas unidades lingüísticas
características de cada tipo de progresión. A su vez, el Sujeto
explícito y el Sujeto desinencial/tácito vehiculizan la función
semántica Tema. Por un lado, la lengua española tiene Sujeto
obligatorio y organiza típicamente sus componentes en Sujeto-
Verbo-Objeto, es decir, en oraciones activas en donde el Sujeto es
una función sintáctica posicionada a la izquierda del verbo; por el
otro, la función semántica Tema también tiene una posición inicial
que constituye el punto de partida de lo significados que el usuarios
optó expresar. En consecuencia, los distintos tipos de progresión
temática tienden a expresar unidades léxico-gramáticas más o
menos concurrentes con la función sintáctica Sujeto y la función
semántica Tema. De ahí la enorme importancia del Sujeto en la
articulación de los significados textuales.
123
Cuando la progresión es constante, el Sujeto tácito replica los
rasgos de concordancia del Sujeto explícito expresado en un punto
precedente del texto y es la opción que mantiene el tema constante,
salvo cuando es necesario cambiar de referencia temática mediante
un Sujeto explícito; por su parte, en la progresión lineal el Sujeto
explícito se articula con distintas unidades cohesivas para formar
el Tema de una oración-mensaje que `tematiza´ parte del rema de
la anterior; y, por último, en la progresión derivada, el hiper-Tema
(hiperónimo) puede ser un Sujeto-Tema que `tematiza´ a las
diferentes unidades lingüísticas (cohipónimos)8 que desarrollan los
significados textuales.

c.VI) Macro-Tema e Hiper-Tema: implicancia didáctica en la


comprensión y producción de textos
“El Tema de una oración, dentro del (enfoque) sistémico-
funcional, es el elemento de origen experiencial en posición inicial
que sirve de punto de partida del mensaje.” (Montemayor-
Borsinger, 2009, p. 89) Ese punto de partida responde a las
intenciones del usuario, de la selección de los recursos, de cómo
desea ordenarlos en el texto y de cómo aspira o se representa ser
receptado por la potencial audiencia. Desde el punto de vista
semántico y textual, la sucesión de temas constituye el “andamiaje”

8
Dada la posición inicial del Tema, los cohipónimos no necesariamente son grupos sustantivos en función de
Sujeto explícito, ya que también pueden ser adjuntos.
124
que conecta y distribuye la información conocida con la nueva
mediante la estructuración Tema-Rema: así, un Tema (lo conocido)
y un Rema (lo nuevo y el segmento en transición al próximo Tema)
optimiza la eficiencia en la guía y la ubicación de los posibles
interlocutores dentro del desarrollo de un texto.
Las distintas oraciones que integran un texto, sobre todo en
español, puede estructurarse o no según el orden canónico S-V-O.
Si la oración-mensaje sigue ese orden, el grupo sintáctico en
función de Sujeto coincide con el Tema. De lo contrario, con
ordenamiento no canónico, serán otros grupos sintácticos,
diferentes al que se desempeña en función Sujeto, los que se
posicionan como Tema en el inicio de la oración-mensaje. La
distinción que suponen los ordenamientos sintácticos se
amalgaman con la información semántica que el usuario opta o
desea expresar como punto de partida para su discurso. Así, en la
secuencia S-V-O el Tema es no marcado, mientras que en otras
secuencias no canónicas, el Tema es marcado.
El Tema no marcado compacta la información considerada
relevante en el inicio del segmento oracional, cuya realización
típica es el sustantivo o grupo sustantivo en función de Sujeto y,
en el caso de la lengua española, la posición no marcada es
extensible a los verbos conjugados así como a los pronombres
clíticos. Por su parte, el Tema marcado se instancia en grupos
adverbiales o construcciones preposicionales que, por diferentes
125
razones pragmáticas y discursivas, el usuario opta por desplazar al
comienzo de la oración-mensaje, antes del Sujeto. Aquí, el
hablante/escritor desea puntualizar sobre determinados ejes
semánticos de tipo temporal, causal, espacial, modal, etc., es decir,
segmentos contextualizadores que suministran información extra
sobre el tema.
Pero ¿qué ocurre con la función Tema más allá del rango
oracional? ¿Es posible trazar e identificar un mapa temático en los
segmentos correspondientes a los párrafos, incluso a textos
completos? Montemayor-Borsinger (2009), siguiendo los
lineamientos del lingüista sistémico J. M. Martin (1992), introduce
los conceptos de hiperTema y de macrotema. Los términos hacen
referencia a distintas organizaciones temáticas en los rangos
supraoracionales que permiten reconocer cómo están distribuidos
los significados textuales y, a partir de estos, de qué manera se
integran y expresan los significados ideacionales e interpersonales.
El hiperTema constituye la organización temática en el nivel del
párrafo. Desde el punto de vista posicional así como de la
jerarquización semántica, es la primera oración-mensaje del
párrafo. Por ejemplo, en el artículo Los videojuegos, también una
fuente de aprendizaje (La Nación, 2011) comienza así:

126
{ { “En inglés ya tiene una expresión que la define: Edutainment
.} Esta palabra compuesta se refiere al uso de videojuegos en la
educación y puede convertirse en un gran avance en las
herramientas didácticas a disposición de los docentes. Si las
computadoras han cambiado la forma en que nos comunicamos,
trabajamos y nos divertimos, ¿por qué no pensar que también
pueden modificar la manera en que aprendemos?”}

La primera oración es el {hiperTema} del párrafo: referencia a


lo declarado por el título del artículo y a la temática desarrollada
en el resto del párrafo introductorio.
En un segmento superior al rango oracional, el macroTema de un
texto puede ser su primer párrafo, en donde la organización en
redes subtemáticas indican los aspectos generales del tema
principal enunciado en el título y que marcará la tónica del resto
del artículo. En el ejemplo, el párrafo introductorio funciona
como {macroTerma}.

Bloque 3: Secuencia Didáctica

127
Revisión estructural y reformulación funcional del Sujeto

La caracterización funcional del Sujeto contempla criterios


semánticos que parcialmente son deudores del Enfoque
Tradicional y criterios formales, propios del Enfoque Estructural:
los primeros, sustentados en premisas lógicas y nocionales que
intentan establecer qué unidades o construcciones responden al
clásico ¿Qué/Quiénes?; y los segundos, centrados en las relaciones
de concordancia Sujeto-verbo. Según el encuadre teórico de
referencia desde el cual se aborde la conceptualización, los
criterios son adecuados pero lo cierto es que el Cuadernillo de aula
la definición es presentada como una generalización que responden
a un estructura oracional estática. No se considera la posibilidad
de entender a los textos orales y escritos como sistemas y redes
dinámicos con los cuales los usuarios interactúan.
Una alternativa superadora de la noción exclusivamente nocional
es recurrir a los criterios formales. Existen diferentes categorías
gramaticales (principalmente el sustantivo) y contextos sintácticos
(posición del Sujeto, verbos impersonales, oraciones
activas/pasivas, etc.) que revelan la dinámica morfosintáctica del
Sujeto. De ahí la necesidad de ampliar y profundizar su definición
de acuerdo al Enfoque Estructural para poder explicitar con mayor
detalle su impacto oracional. Los rasgos formales de persona y de
número son determinantes para configurar sintácticamente al
128
Sujeto, ubicando en otro plano la función semántica de agente
(¿Qué/Quiénes?), que puede o no desempeñar según el orden de
los constituyentes de todo el conjunto oracional.
La concordancia Sujeto-verbo así como la interacción Sujeto
explícito/Sujeto desinencial-tácito son caracterizaciones
fundamentales que se definen en términos de la estructura oración
simple, pero es aquí donde el Enfoque Estructural encuentra sus
limitaciones, ya que la función Sujeto es formalizada en términos
de la construcciones inmediatas que forman la oración, nivel y
límite superior del análisis estructural, el llamado nivel
categoremático o de la frase (Benveniste, 1964), Más allá de la
oración hay texto. Entonces, las categorías gramaticales o
construcciones que `llenan´el Sujeto estructural solo proyectan
significados locales al nivel intraoracional en virtud de las
relaciones morfosintácticas que se establecen entre los
constituyentes: la concordancia de persona y de número con el
verbo. Sin embargo, en el plano textual el criterio formal es
insuficiente para dar cuenta la red de significados que usuario
expresa y de cuáles opciones combinatorias son acordes al contexto
comunicativo.
Si el propósito es revisar la noción de punto de partida y,
simultáneamente, profundizar un marco teórico cuyos contenidos
gramaticales permitan arribar a una mejor comprensión y
producción de textos, será condición indispensable superar el tope
129
del recorte metodológico del Enfoque Estructural. Al respecto, sin
desplazar dicho enfoque, es necesario redefinir funcionalmente el
Sujeto para explorar los significados que se instancian en la oración
como mensaje.
Los significados se organizan en torno a las relaciones
paradigmáticas de los sistemas, atraviesan transversalmente
oración y texto, por lo que se requiere una caja de herramientas
sintácticas que detallen cómo funciona la red semántica con y
desde el Sujeto. El Enfoque Sistémico-Funcional es el que permite
franquear el límite de la oración simple, pero integrando los aportes
tradicionales (los características lógica, psicológica y gramatical
del Sujeto) y estructurales (rasgos formales de constitución y de
reconocimiento). En ese sentido, los abordajes de la función Sujeto
se efectúan a caballo de los presupuestos estructurales y sistémico-
funcionales, por lo que su importancia didáctica radica en
presentarlos conjuntamente en esta propuesta.
El abordaje funcional del Sujeto permite desdoblar en sus tres
funciones originales porque expresa tres hebras de significados
diferentes: uno que se relaciona con experiencias que el
hablante/escritor tiene sobre sí y del mundo; un segundo tipo de
significado relacionado en cómo el usuario se instala en el lenguaje
respecto a sus interlocutores; y, por último, cómo se configura la
información dentro de las secuencias textuales.

130
La importancia de la reformulación funcional radica en que se
explicitan los significados experienciales, los roles comunicativos
y los modos en que la intencionalidad de los usuarios se posicionan
y, además, aquellos significados asociados a la progresión
temática/remática. Cada una de esas hebras adquiere especiales
configuraciones en las redes sistémicas de los diferentes estratos
del lenguaje. Por eso es que la oración como mensaje, la oración-
mensaje, tal como plantea el Enfoque Sistémico-funcional,
redunda en mayor flexibilidad de análisis teniendo en cuenta los
significados y los roles que instancia dentro de la red textual.
La especificación tripartita de Sujeto lógico, gramatical y
psicológico vehiculizan los significados
experienciales/ideacionales, interpersonales y textuales,
respectivamente; y que, a su vez, se enmarcan, desde el punto de
vista metodológico del enfoque, en el sistema de transitividad,
sistema de modalidad y sistema textual. En efecto, la triple
funcionalidad del Sujeto realiza roles participantes inherentes a las
experiencias y procesos que el hablante/escritor desea comunicar;
de la misma manera que interviene en la construcción de los roles
comunicativos, aunque más asociado a significados de tipos
afectivo en el caso de nuestra lengua española; y, por último, los
rasgos estructurales de ser explícito/desinencial-tácito y de tener
de tener o no posición preverbal tienen repercusiones en la
construcción de los significados textuales. Por ejemplo, la
131
asignación de la prominencia temática cuando el usuario desea
destacar como punto de partida cierta información según
necesidades discursivas y comunicativas en general.
En la lengua española, en el plano de los significados que realiza
dentro de la oración-mensaje, el Sujeto está fuertemente asociado
a los significados textuales que constituyen el punto de partida que
el usuario selecciona de acuerdo a su situación comunicativa y, en
el plano del registro, los mensajes en la lengua escrita tienden a
“acomodar” los grupos sintácticos en función de Sujeto explícito a
la izquierda del grupo verbal, sobre todo en textos informativos o
académicos. Mientras que en producciones verbales propias del
registro oral, los usuarios tienden a elidir el Sujeto, ya que pueden
recuperar la información del mismo a partir de la desinencia verbal
o por inferencia cotextuales anteriormente enunciadas por los
hablantes. La elisión del Sujeto forma parte de la batería de
recursos que economizan y complejizan los intercambios orales.

Descripción y ejemplificación del dispositivo didáctico

132
Referencias bibliográficas

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Referencias de los textos analizados e incluidos en la


Secuencia Didáctica

Los videojuegos, también una fuente de aprendizaje. La Nación,


11/03/2011. Retomado en:
https://www.lanacion.com.ar/cultura/los-videojuegos-
tambien-una-fuente-de-aprendizaje-nid1357018

Anexo

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