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IPSE-ds 2017 Vol. 10 ISSN 2013-2352 pág.

11-22

EDUCACIÓN EMOCIONAL PARA LA RESOLUCIÓN DE CONFLICTOS


EN LA ESCUELA: UNA APROXIMACIÓN DESDE LA EDUCACIÓN
SOCIAL

Jonathan Domínguez Ramos


jdominguez@opcion3canarias.org
Graduado en Educación Social (ULPGC). Técnico Socio-Educativo Asociación Opción 3 en el Programa
Rumbo de Prevención y Preservación Familiar.

Resumen:
Los contratiempos que se presentan en la escuela no son más que un reflejo de una sociedad
cada vez más compleja y sometida a constantes cambios. Ante esta evidencia el presente traba-
jo plantea la necesidad y conveniencia de repensar los objetivos de la educación, poniendo en
relieve, que además de la adquisición de los conocimientos establecidos en el currículo oficial, es
necesario que los más jóvenes adquieran recursos y estrategias para enfrentarse con las inevi-
tables experiencias que la vida les depara. Para ello y siguiendo tanto a autores como Bisquerra
(2003, 2010), Ruiz-Aranda, Fernández-Berrocal, Cabello y Salguero (2008), y Ambrona, López-
Pérez, y Márquez-González, (2013), entre otros, como algunas experiencias prácticas llevadas a
cabo en Canarias (EMOCREA, 2014), justificaremos la incorporación de la educación emocional
en los contextos escolares como herramienta eficaz para la prevención y resolución de conflic-
tos y como una posible salida a los problemas urgentes del sistema educativo. Siguiendo esta
línea de trabajo, además de reflexionar sobre estas cuestiones, reflexionaremos, con el respaldo
de las contribuciones de autores como Petrús (2004), Parcerisa (2008), o Longas (2000), etc.,
sobre la incorporación del educador/a social a los contextos escolares y las aportaciones que la
educación social puede ofrecer a la escuela en relación a la educación de las emociones con el
fin de favorecer la construcción de un proyecto educativo integral.

Palabras Clave:
PEducación Emocional, Resolución de conflictos, Escuela, Educador Social.

INTRODUCCIÓN
resolución de los mismos en este contexto,
Este trabajo parte de la idea de explicar como desde algunas experiencias prácticas
que entendemos por educación emocional llevadas a cabo en Canarias. Además, des-
y su importancia a la hora de incluirla en las cribiremos y valoraremos algunos aspectos
escuelas como una asignatura más y como de la incorporación de los educadores/as so-
posible solución a los conflictos que se desa- ciales en los centros escolares como espacio
rrollan en la misma. Para ello lo abordaremos idóneo para el desempeño de su tarea profe-
tanto desde un marco teórico donde desarro- sional vinculada a esta materia.
llemos qué se entiende por educación emo- Las emociones forman parte de la persona
cional, por conflictos en el medio escolar y la desde que nace, y constituyen, junto con el

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desarrollo cognitivo, los dos elementos esen- niveles elevados de manejo de las emocio-
ciales en la formación integral del individuo. nes parecen mostrar mejores estrategias de
Según Bisquerra (2010), una emoción es “un solución de conflictos, calidad y cantidad de
estado complejo del organismo que se gene- redes interpersonales y de apoyo social, he-
ra como respuesta a un acontecimiento ex- rramientas para disuadir comportamientos
terno o interno y está caracterizado por una disruptivos, agresivos o violentos, etc.
excitación o perturbación que predispone a La escuela hasta el momento se ha centra-
una respuesta organizada”. do en el desarrollo de la inteligencia cogniti-
Si analizamos la definición de Bisquerra va de sus alumnos, dejando de lado la pers-
(2010), podemos distinguir tres elementos pectiva emocional.
claros interrelacionados como son el fisio- Se ha convertido en algo habitual es-
lógico, el conductual y el cognitivo, compo- cuchar a los profesionales de la educación
nentes que se podrían abordar con diferen- hablar de situaciones de violencia escolar,
tes propuestas (relajación, regulación de la violencia de género, agresividad en las aulas,
expresión emocional, conocimiento de las bullying, falta de interés, etc., evidenciando
propias emociones, etc.) desde la educación las carencias que tienen nuestros jóvenes
de las emociones en la formación de los más para relacionarse y para exponerse a situa-
jóvenes. ciones de riesgo.
Cuando nos referimos al término de edu- Estas situaciones no son más que un refle-
cación emocional, es complicado encontrar jo de la sociedad en la que vivimos, por eso
una definición única. Bisquerra (2010) la de- la importancia de adquirir en la etapa escolar
fine como “un proceso educativo, continuo diversas competencias para la vida de cara a
y permanente, que pretende potenciar el la prevención (Bisquerra, 2003).
desarrollo emocional como complemento Cuando hablamos de competencias para
indispensable del desarrollo cognitivo, capa- la vida es difícil concretar aquellas que deben
citando así al individuo para afrontar mejor dominar los jóvenes al terminar la escolari-
los retos que se plantean en la vida cotidiana dad obligatoria, pero es evidente que van
y con la finalidad de aumentar el bienestar más allá de las competencias profesionales
personal y social”. habituales.
La educación emocional podría entender- Por nuestra parte nos referiremos al de-
se como una forma de prevención primaria sarrollo de las competencias emocionales
inespecífica, dirigida a intentar minimizar la vistas como factores preventivos personales
vulnerabilidad de las disfunciones o prevenir y como objetivo de la educación emocional.
su ocurrencia. Los niños y jóvenes necesitan, Según Bisquerra (2010) las competencias
en su desarrollo hacia la vida adulta, que se emocionales son un constructo amplio que
les proporcionen recursos y estrategias para incluye diversos procesos y provoca una va-
enfrentarse con las inevitables experiencias riedad de consecuencias, y las define como
que la vida les depara. “el conjunto de conocimientos, capacida-
Esto pone de manifiesto la necesidad de des, habilidades y actitudes necesarias para
atender a las emociones desde el sistema comprender, expresar y regular de forma
educativo, siendo la finalidad de la educa- apropiada los fenómenos emocionales”. En-
ción el pleno desarrollo de la personalidad tre las competencias emocionales se pueden
integral del alumnado. distinguir dos grandes bloques (Bisquerra,
Esta evidencia queda recogida en inves- 2003, pp. 25-26): intrapersonales (conciencia
tigaciones, como la de Extremera y Fernán- emocional propia y de los demás, regulación
dez (2004); Pena, Extremera, y Rey (2011); o emocional, habilidades de afrontamiento
Ambrona, López-Pérez, y Márquez-González, emocional, autonomía personal, autoestima,
(2013), que concluyen que los alumnos con responsabilidad en la toma de decisiones,

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etc.), e interpersonales (habilidad de reco- como proceso y parte que garantizan la edu-
nocer lo que los demás están pensando y cación integral de la persona (BOC, 2014).
sintiendo): habilidades sociales, empatía, Esta área es impartida por los profesores
comportamiento pro-social y cooperación, del propio centro, que a su vez han sido for-
asertividad, solución de conflictos, la comu- mados por una profesional de la Educación
nicación expresiva (verbal y n verbal), etc.). Social1. Para poder llevar a cabo la labor en
Como podemos apreciar la inclusión de el aula, la Dirección General de Ordenación,
los aspectos emocionales y sociales en el Innovación y Promoción Educativa, ha pues-
currículo de los alumnos se aprecian como to a disposición de los profesionales de la
una posible salida a alguno de los problemas educación un manual donde se recogen los
urgentes del sistema educativo (Ruiz-Aran- recursos necesarios para desarrollar el área
da, Fernández-Berrocal, Cabello y Salguero, de EMOCREA. Dicho manual “Recursos para
2008). la Educación Emocional y para la Creatividad”
En España, ha sido poco habitual iniciati- (Lemes, García, y García, 2014), es una guía
vas de innovación e investigación educativa de ejercicios prácticos y se divide en tres blo-
en educación emocional (Pérez-González y ques interrelacionados.
Pena, 2011), no obstante, en los últimos años El primer bloque de ejercicios está enfo-
se ha generado todo un movimiento educa- cado a desarrollar la conciencia emocional
tivo en el que podemos encontrar diferentes a través de ejercicios de: conciencia corporal
denominaciones como “Educación Emocio- y relajación, alfabetización emocional y con-
nal” o “Educación Socio-Emocional” (Fernán- centración y atención. El segundo bloque se
dez-Berrocal y Ruiz-Aranda, 2008). corresponde con ejercicios para aprender a
Prueba de ello es lo expuesto en septiem- regular las emociones y adecuarlas al contex-
bre de 2011 en el Simposio sobre Programas to y tipo de relaciones. Mientras que, el tercer
de educación emocional basados en la In- bloque comprende actividades para desa-
vestigación, celebrado en Madrid, donde se rrollar el potencial creativo del alumnado a
presentan algunas iniciativas de educación través de trabajar los indicadores de fluidez,
emocional que se están llevando a cabo en sensibilidad, originalidad y flexibilidad.
distintos puntos del territorio (Pérez-Gonzá- Son dinámicas variadas y fácilmente
lez y Pena, 2011, p. 34). adaptables a las diferentes edades del alum-
Situándonos en Canarias, cabe destacar nado, en las que se incluyen diferentes me-
que ha sido una de las primeras comunida- todologías: role-play, visualizaciones, uso de
des en formar a sus alumnos en educación metáforas, ejercicios de relajación, canciones,
emocional. Con la incorporación de la Ley bailes, cuentos, mímica, etc. Desde un punto
Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa de vista metodológico, dicha guía de ejerci-
(conocida como LOMCE), Educación emocio- cios no consiste simplemente de un listado
nal y para la creatividad (EMOCREA), que es de actividades.
así como se llama la materia, se comienza a Es una oportunidad para que se desarro-
impartir en el curso 2014-2015 en todos los llen situaciones de aprendizaje integradas,
colegios del archipiélago desde primero has- transversales y globalizadas en las que el
ta sexto de primaria como asignatura de libre profesorado hace uso de estas actividades o
configuración autonómica. ejercicios para lograr una finalidad educativa
Esta asignatura, desde un enfoque edu- explícita (Lemes, García, y García, 2014). Otro
cativo, se asume desde una perspectiva inte- aspecto que cobra especial relevancia y que
gradora y transversal y tiene como principal es necesario que destaquemos, es que esta
finalidad, validar el papel que desempeñan área pretende capacitar al alumnado para
los aspectos del mundo emocional y creativo que se relacione activamente y sepa com-
en relación con los contenidos curriculares prender a las demás personas.

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Con ese fin se les enseña a prevenir y re- de cara a los cambios producidos en el pro-
solver conflictos desde el diálogo y la nego- grama.
ciación, desarrollando habilidades sociales Pero aun así vemos necesario destacar
(empatía y asertividad), dotando a los niños/ la importancia de la parte evaluativa, como
as de las herramientas necesarias para ense- proceso de reflexión del trabajo realizado du-
ñarles a pensar tanto en las causas y en las rante el programa y como medida del impac-
alternativas como en las consecuencias de to del mismo.
un dilema o problema para que aprenda a Como ya hemos podido comprobar, tanto
convivir. por lo aportado por diferentes autores como
Por otro lado, la incorporación de esta por las diversas experiencias llevadas a cabo,
asignatura, (EMOCREA), en las aulas canarias, que uno de los beneficios de un buen manejo
es un respaldo y validación de prácticas edu- de las emociones, entre otros, es tener mejo-
cativas que, desde gran parte del colectivo res estrategias para solucionar los conflictos.
docente, se han venido realizando en el siste- Podemos decir que estos últimos son in-
ma educativo canario. herentes a la vida humana y al igual que en
En esta línea, destacar trabajos como los todas las organizaciones, en el medio escolar,
realizados por los colegios públicos CEIP Ciu- surgen por la confrontación de opiniones,
dad del Campo (Tamaraceite) y el CEIP Poeta intereses o actitudes entre los involucrados.
Montiano Placeres (Jinamar) en Gran Canaria. Dada la inmensa variedad de fenómenos que
En dichos centros, tras un tiempo de traba- puedan clasificarse bajo el término de “con-
jo en educación emocional con los niños/as, flicto”, no hay consenso sobre una definición
tanto profesores como familiares manifiestan única, general y suficiente.
verbalmente una enorme alegría en cuanto a Debido a esta circunstancia hemos op-
la implantación de esta materia en sus aulas tado por destacar lo que nos dice Infante
ya que han notado algunos cambios en el (1998, citado en Redorta, 2004) al respecto,
alumnado (mejor comunicación, mayor mo- definiendo conflicto, como un proceso cog-
tivación, disminución de conflictos, etc.). nitivo-emocional en el que dos individuos
Dichos resultados son impresiones tanto perciben metas incompatibles dentro de su
de los profesores como de los familiares de relación de interdependencia y el deseo de
los alumnos, puesto que no se ha realizado resolver sus diferencias de poder. Ya esta de-
aún un proceso de evaluación metodológico finición nos deja entrever como existe una
de los programas que se han llevado a cabo relación directa entre conflicto y emociones,
en dichos centros. por lo tanto, abordar la educación emocional
La dificultad de evaluar las emociones y en el medio escolar puede ser una buena es-
los efectos de estos programas implica que trategia, ya no sólo para afrontarlos sino para
no se dispone de modelos de evaluación prevenirlos. Los conflictos más habituales en
plenamente satisfactorios para aplicarlos a el contexto escolar según Martínez-Otero
la educación emocional (Bisquerra, 2003). (2005, pp. 39-42) son entre otros: disrupción
Por lo tanto se requiere mayor investigación en las aulas, indisciplina (conflictos entre pro-
metodológica para aplicarla a este campo, fesorado y alumnado), maltrato entre com-
que debido a su complejidad sigue el cami- pañeros (bullying), vandalismo y daños ma-
no de complementar metodológicamente teriales, conflicto multicultural, etc.
evidencias cuantitativas y cualitativas, donde Ya refiriéndonos a su origen, podemos
la observación, las entrevistas, los análisis de decir que existen múltiples causas. Martínez-
documentos entre otros se combinan con Otero (2005, p.p. 35-39) señala los siguientes
test estandarizados, teniendo en cuenta que factores: sociales/ambientales (desigualda-
los primeros corren con el riesgo de la sub- des sociales, los medios de comunicación;
jetividad y los últimos, con la insensibilidad etc.); relaciones interpersonales en el ámbito

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escolar (gran preocupación por el rendimien- que quizás va a depender más de la forma de
to escolar, la multiculturalidad existentes en resolución y de la actitud dispuesta por los
los centros, el excesivo número de alumnos implicados. Es más, cuando las personas han
por aula, que dificulta la educación perso- tenido que equilibrar sus necesidades indivi-
nalizada, etc.); familiares (poca conciliación duales con las necesidades de la comunidad,
laboral-familiar, la violencia familiar, la exce- la resolución de conflictos ha sido necesaria
siva tolerancia de los padres a determinados (Mayer, 2009). Visto de esta forma, ayuda a re-
comportamientos, problemas económicos, gular las relaciones sociales, permite el reco-
etc.); y personales (falta de responsabilidad nocimiento de las diferencias y que éstas no
en las propias acciones, excesiva impulsivi- sean percibidas como amenaza, sino como
dad y vehemencia, falta de empatía, legiti- resultado natural de una situación en la que
mación de la violencia, etc.). existen escasos recursos.
Como podemos advertir la aparición de Existen diversas disciplinas que desarro-
situaciones conflictivas en la escuela tiene llan técnicas de intervención en los conflictos
su origen en una gran variedad de causas, al- que favorecen el diálogo, la comunicación o
gunas externas a los jóvenes y otras internas, el compromiso como una solución satisfacto-
pero en especial relevancia, los cambios que ria para todas las partes.
se producen constantemente en nuestra so- Por lo que respecta a la educación emo-
ciedad y su adaptación por parte de los jóve- cional, destacamos como dicha materia pue-
nes a ellos, que a su vez produce un conflicto de favorecer a los más jóvenes a modelar y
en estos últimos. Por lo tanto, vemos preciso aprender una variedad de habilidades, con-
destacar que además de la adquisición de los ceptos y valores diseñados para desarrollar
conocimientos establecidos en el currículo actitudes de interés y respeto por los otros,
oficial, los jóvenes deben formarse en otras aumentar la capacidad de resolución de con-
áreas, entre las que destacamos, la educación flictos de forma no violenta, a mejorar las
emocional. relaciones interpersonales, crear ambientes
La intención es trabajar para lograr una más relajados y productivos, favorecer la au-
formación integral que aporte soluciones torregulación por la búsqueda de soluciones
más profundas y duraderas, por lo que de- autónomas y negociadas, etc. (Cabello, Casti-
bemos centrarnos en la persona, y entender llo, Rueda, y Fernández-Berrocal, 2016). Pero
que su desarrollo implica aprender a conocer ante todo a adquirir un aprendizaje centrado
los límites de su actuación. en valores, en el que construyan buenos es-
Como se da a entender anteriormente, es tilos afectivos y buenos hábitos de compor-
necesario ofrecer a los jóvenes estrategias o tamiento.
habilidades para afrontar la complejidad de En definitiva, lo que se pretende es pro-
la realidad social actual y los conflictos que mover condiciones que posibiliten el apren-
surgen de ella. Los conflictos tienen muchas dizaje de habilidades que permitan afrontar
maneras de afrontarse, pero cada uno posee de modo positivo y constructivo los desafíos
una forma concreta de hacerlo. de la vida cotidiana.
Esta manera de afrontarlos se ha ido cons- Llegados a este punto creemos que ha
truyendo durante el desarrollo de la perso- quedado claro que escuela y sociedad van
na en el cual han influido factores como la unidas. Que debemos de emprender un ca-
cultura, la educación, las formas de afrontar mino hacia a una educación que abarque
los conflictos amigos, educadores y familia, toda la vida y todos los ámbitos de la socie-
entre otros (Mayer, 2009). No existe una for- dad, y que ésta, se oriente a la integración y
ma peor o mejor para afrontarlos, por lo que a la convivencia. De lo que se trata es que se
vemos relevante transmitir que los conflictos tenga una comprensión más global de estos
no son sinónimo de perjudicial o negativo, hechos, donde la figura del educador/a social

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se presta idónea para, no sólo transmitir los sario matizar que la labor de estos profesio-
conocimientos para entender la vida, sino nales y su consideración profesional quizás
también las competencias que les ayuden a no fue la adecuada, en unas ocasiones por
saber cómo vivirla, y cómo afrontar las com- elaborar tareas que no son propias del perfil
plejidades de la misma. profesional del educador/a social y en otras
En esta línea Petrus (2004), destaca que por ser considerados personal de administra-
educación social y escolar no son excluyen- ción y servicios. Aun así, se presentan como
tes, puesto que la educación es por necesi- una gran oportunidad, en la cual educado-
dad social. La escuela tiene la necesidad de res/as sociales pueden desarrollar diversas
avanzar hacia una formación integral adap- funciones.
tada a las necesidades individuales de cada Concretar estas funciones y saber cómo
alumno/a en una realidad socioeducativa enclavarlas en el conjunto del centro, se
cada vez más compleja y diversa y además la vuelve una cuestión clave (Parcerisa, 2008).
necesidad de establecer puentes de comuni- Destacar por otro lado y desde un punto de
cación entre el centro escolar, la familia y el vista normativo/legislativo, lo que se recoge
contexto social. en la Ley 6/2014, de 25 de julio, Canaria de
De lo que se trata es de ir creando un mo- Educación no Universitaria, donde desarrolla
delo de trabajo que implique en igual medi- en varios de sus artículos la incorporación de
da a la escuela y a la sociedad en la educación educadores sociales a los centros escolares
de nuestros futuros ciudadanos/as. en determinadas circunstancias, (atención a
Un primer paso para percibir la necesidad la diversidad, alumnado de distintas culturas,
de los educadores/as sociales como parte de etc.). Para intentar amparar los diversos co-
la plantilla de los centros educativos, es dejar metidos que pueden ejercer los educadores
atrás la separación que tradicionalmente se sociales en los centros educativos, hemos
ha hecho entre educación formal, no formal optado, por un lado, consultar diversas de-
e informal. finiciones sobre qué es la educación social,
Es necesario poner énfasis en una educa- como la que propone Giné (2007)3, y por otro
ción integral, donde los conceptos de formal, identificar elementos característicos de la
no formal e informal se diluyan, porque al fi- educación social que tienen relación con la
nal la tarea educativa que se hace tanto fue- intervención educativa escolar.
ra como dentro de la escuela es un proceso En cuanto al análisis de las definiciones,
global de educación (Laorden, Prado, y Royo, entendemos que la educación social debe
2006). tener cabida dentro del sistema educativo,
Estamos ante una oportunidad para que, puesto que uno de sus fines es el desarrollo
con la participación de educadores/as socia- integral de los/as jóvenes, por lo tanto, pode-
les en este ámbito, la institución escolar se mos decir que es una parte de la educación.
adapte mejor a las nuevas realidades sociales. En esta tarea destacamos el papel funda-
En esta línea nos remontamos al año 2004, mental que juega la educación emocional, ya
año en el que se hizo público un documento que a través de ella los más jóvenes pueden
titulado “El educador y la educadora social en aprender a ser ciudadanos críticos e íntegros,
el Estado español: una concreción de su tra- y ser capaces de actuar y vivir con madurez y
bajo en los centros escolares”2. responsabilidad.
Este documento daba respuesta a expe- Ya a la hora de interrelacionar elementos
riencias en diversas zonas de España (Extre- entre educación social e intervención edu-
madura, Andalucía, Castilla la Mancha, entre cativa escolar, hemos seguido lo que desta-
otras) donde se empezaba a introducir al ca Longás (2000, pp. 101-103), resaltando lo
educador/a social en las escuelas y en insti- más relevante e intentándolo vincular a la
tutos de educación secundaria. Vemos nece- educación emocional.

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Por un lado, el objetivo de socializar a la Tras el recorrido por el marco teórico, y
mayoría de ciudadanos, incluidos aquellos por las diferentes experiencias prácticas, he-
que se identificarían más claramente como mos podido evidenciar los beneficios que
los destinatarios de la educación social, como la educación emocional puede aportar a los
por ejemplo alumnos con necesidades edu- más jóvenes, tanto en la escuela como fuera
cativas o en posible situación de riesgo y/o de ella.
exclusión social. Llegados a este punto podemos decir que
Por otro lado, los relacionados al ámbito todo sería perfecto si todos los niños/as po-
de la docencia. Si visualizamos los currícu- seyeran habilidades emocionales para afron-
lums, y las diversas innovaciones que se han tar las vivencias de su día a día, pero ¿y si no
ido implantando, reconocemos numerosos es así? ¿Podemos educar las emociones de
contenidos y prácticas características de la los más jóvenes? Educar las emociones se ha
educación social. convertido en los últimos años en una mate-
Habilidades sociales, educación en valo- ria que gran parte de la comunidad educativa
res, educación emocional, prevención de la considera primordial para el desarrollo evo-
violencia o educación para el tiempo libre lutivo y socioemocional de los más jóvenes.
son algunos ejemplos significativos de ne- Autores como Bisquerra (2010) destacan la
cesidades claramente detectadas en parte importancia de este proceso educativo, con-
del alumnado y en las que, en ocasiones, el tinuo y permanente, como una forma de pre-
profesorado que lo imparte no está suficien- vención primaria inespecífica, que permite
temente formado o incluso, es llevada a cabo a los más jóvenes en su desarrollo a la vida
por otros profesionales. adulta, adquirir recursos y estrategias para
Por último, destacar aquellas actividades enfrentarse a las diferentes experiencias que
más relacionadas con ocio y el tiempo libre, la vida les depara.
con la cultura o con el contacto con la comu- En la misma línea, investigaciones como
nidad entre otros, que son ámbitos clásicos las de Extremera y Fernández (2004); Pena,
de la educación social, pero que en muchas Extremera, y Rey, (2011); o Ambrona, López-
ocasiones son dinamizados desde la buena Pérez y Márquez-González, (2013), eviden-
voluntad por asociaciones de padres. cian como alumnos con un buen manejo de
las emociones parecen tener, entre otros be-
neficios, mejores estrategias de solución de
REFLEXIÓN conflictos, calidad y cantidad de redes inter-
En este apartado nos centraremos en re- personales y de apoyo social, herramientas
flexionar sobre los aspectos desarrollados para disuadir comportamientos disruptivos,
en el marco teórico anteriormente expuesto agresivos o violentos, etc. contrarrestando
y en las observaciones de las experiencias esto último lo evidenciado por una gran par-
prácticas llevadas a cabo en el campo de la te del profesorado (disrupción en las aulas,
educación emocional en la escuela, ya que violencia escolar, bullying, etc.), y que nos
nos permitirá analizar la información de ma- son más que un reflejo de la sociedad en la
nera crítica y objetiva. que vivimos (Bisquerra, 2003).
Para ello intentaremos seguir la misma Hasta aquí todo bien, la educación emo-
estructura del marco anterior con el fin de cional se plantea como un área importante
mantener el mismo formato de estudio. Los de trabajo con los más jóvenes, pero, ¿cómo
objetivos de este punto es considerar las llevarla a cabo? Una de las grandes tareas de
necesidades socioeducativas de los más jó- la escuela es el pleno desarrollo de la per-
venes que se plantean en la escuela y cómo sonalidad integral del alumnado y para ello
desde la educación social se le puede dar res- intenta trasmitir una serie de competencias
puesta a esas necesidades. para la vida de cara a la prevención (Bisque-

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rra, 2003). Aunque es difícil saber qué compe- (Ruiz-Aranda, Fernández-Berrocal, Cabello, y
tencias necesitan los más jóvenes para afron- Salguero, 2008).
tar los diferentes retos que se le presentan, En España en los últimos años se han he-
sabemos que ya no son sólo las competen- cho eco de ello y ya empezamos a distinguir
cias profesionales habituales. algunas iniciativas de educación emocional
Por este motivo y siguiendo a Bisquerra que se están llevando a cabo en diferentes
(2010) destacamos las competencias emo- partes del territorio, un ejemplo de ello es el
cionales como factores preventivos y como ya citado simposio, celebrado en Madrid en
objetivo de la educación emocional. septiembre de 2011(Pérez-González y Pena,
Bisquerra (2010) aporta una definición y 2011, p. 34). Siguiendo esta línea de iniciati-
una clasificación (Bisquerra, 2003, pp. 25-26) vas, Canarias se sube al carro y es una de las
de competencias emocionales interesante primeras comunidades en formar a sus alum-
de analizar, puesto que en ambos casos ya no nos en educación emocional. En el curso
sólo se refiere al saber, sino al saber hacer. 2014-2015 se empieza a impartir “EMOCREA”,
Creemos que aquí está la respuesta a la (Educación Emocional y para la Creatividad).
pregunta antes planteada, ¿cómo llevarla a Respaldada por las aportaciones de autores
cabo? Pues no sólo trabajando los aspectos como Bisquerra (2003) esta área se plantea
cognitivos, sino también los fisiológicos y los de una forma integradora, transversal y bas-
conductuales, siendo los tres elementos sus- tante práctica, donde los alumnos trabajan
ceptibles de trabajar a través de diferentes con diferentes actividades los aspectos emo-
actividades y metodologías en las aulas. cionales, como una oportunidad para desa-
La relajación, la regulación de la expresión rrollar situaciones de aprendizaje integradas,
emocional, el conocimiento de las propias tranversales y globalizadas (Lemes, García, y
emociones, etc., trabajadas a través de role- García, 2014).
play, visualizaciones, ejercicios de relajación, La intención no es meramente curricular,
canciones, bailes, cuentos, mímica, etc., son va más allá, esta área pretende capacitar al
una gran oportunidad para que los niños/as alumnado para que se relacione activamen-
desarrollen situaciones de aprendizaje viven- te y sepa comprender a las demás personas,
ciales, significativas, integradas, transversales por lo que se les enseña a prevenir y resolver
y globalizadas, teniendo como finalidad una conflictos desde el diálogo y la negociación,
labor explícitamente educativa (Lemes, Gar- desarrollando habilidades sociales (empatía
cía, y García, 2014). y asertividad), dotando a los niños/as de las
La enseñanza de estas competencias de- herramientas necesarias para que en definiti-
pende de forma prioritaria de la práctica, el va aprendan a convivir.
entrenamiento y su perfeccionamiento, y no Pero es aquí donde se nos plantea una
tanto, aunque creemos que también es im- nueva incógnita, ¿Quién podría llevar a cabo
portante, de la instrucción verbal. dicha tarea educativa? En principio dicha ta-
Creemos que lo esencial es entrenar y rea es impartida por los propios profesores
practicar las competencias o habilidades del centro que tras recibir una formación de
emocionales y convertirlas en una expresión un mes aproximadamente, y siguiendo un
adaptativa más del repertorio de los más jó- manual facilitado por la Dirección General de
venes. Ordenación, Innovación y Promoción Educa-
Como hemos podido apreciar y desta- tiva y elaborado por, Lemes, García y García
cando lo que nos dicen diversos autores, la (2014), empiezan a trabajar en el aula. Aun-
inclusión de los aspectos emocionales y so- que las aportaciones hasta el momento de
ciales en el currículo de los alumnos se apre- profesores y familiares nos dan una idea de
cian como una posible salida a alguno de los los resultados que genera un trabajo emo-
problemas urgentes del sistema educativo cional en el aula, creemos que para llevar a

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cabo esta tarea es necesario realizar algunas proceso global, podría ser el profesional que
mejoras. mejor se adapte a esta circunstancia. El fin
En primer lugar, queremos destacar el as- tanto de la escuela como de la Educación So-
pecto formativo de los educadores. Para tra- cial es la formación integral del individuo, por
bajar el aspecto emocional es necesario una lo tanto, no existen diferencias en cuanto al
formación específica, asesoramiento y apoyo objetivo principal de la educación.
profesional (Pérez-González, y Pena, 2011). Por otro lado, y ciñéndonos más a las ta-
En segundo lugar, es necesario evidenciar reas a realizar, tanto el profesorado como los
la efectividad de estos programas. Para ello educadores/as sociales, comparten la labor
se debe trabajar para elaborar modelos de de socializar al alumnado, trabajar las habi-
evaluación satisfactorios y pasar de la inter- lidades sociales, la educación en valores, la
vención a la investigación (Pérez-González, y prevención de la violencia, etc., siendo todos
Pena, 2011; Bisquerra, 2003). estos y más aspectos formativos parte del cu-
De lo contrario, puede darse el caso de rrículo del educador/a social y por el que está
que una escuela esté aplicando un progra- concienzudamente preparado.
ma, consumiendo importantes recursos hu- Ya centrándonos en la materia de educa-
manos, organizativos (de tiempo y espacios), ción emocional y vinculándola a la preven-
y económicos, y que dicho programa no sólo ción y resolución de conflictos, vemos como
no esté consiguiendo lo que se pretende, el educador/a social tiene posibilidades de
sino que incluso podría estar afectando ne- afrontar esta materia con éxito, no sin antes
gativamente al alumnado o a la comunidad destacar, que al igual que los profesores, el
educativa. educador/a social necesita formarse y espe-
Y por último y no menos importante, es cializarse en educación emocional para po-
necesario plantear la incorporación de otros der afrontarla con notoriedad.
profesionales al ámbito educativo. Es aquí Después de observar cuáles son los con-
donde lanzamos nuestra última pregunta, flictos que más abundan en los contextos
¿qué profesional de la educación sería idó- escolares y cuáles son sus posibles causas
neo para trabajar en el contexto escolar ocu- (Martínez-Otero 2005, pp. 35-42), vemos
pándose, entre otras labores, de la educación que existen aspectos en la formación del
emocional de los más jóvenes? educador/a social que le permitiría tener
Como hemos recogido y destacado en herramientas para afrontarlos con éxito, y la
apartados anteriores, escuela y sociedad van posibilidad de trabajar desde la prevención.
íntimamente unidas. Pensamos, y respalda- Es aquí, en la prevención, donde vincula-
dos por diversos autores (Laorden, Prado, y ríamos al educador/a social con la educación
Royo, 2006; Longás, 2000; Giné, 2007; Parce- de las emociones, puesto que ésta última,
risa, 2008; Petrus, 2004) y por diversas expe- y siguiendo a lo que ya apuntaba Bisquerra
riencias llevadas a cabo en diferentes comu- (2010), tiene un carácter de prevención pri-
nidades de nuestro país, que el educador/a maria inespecífica.
social es un profesional que se adapta per- Por otro lado, otro aspecto de vinculación
fectamente a la realidad de los centros edu- con la materia ya mencionada, es en la parte
cativos por diversos motivos. evaluativa, donde el educador/a por su for-
La escuela avanza hacia una formación mación inicial podría realizar diversas apor-
integral de su alumnado, donde su realidad taciones.
socioeducativa es cada vez más compleja y Por dichas cuestiones y por lo que en de-
diversa, por lo que se plantea cada vez más finitiva queremos para los más jóvenes, una
un nexo de unión entre escuela, familia y sana sociabilidad, valoramos al educador/a
contexto social. El educador/a social por su social como profesional recomendable en la
formación y su visión de la educación como intervención socioeducativa en la escuela,

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trabajando desde diversas áreas, y desempe- la educación social sus labores, se intente
ñando un tipo de docencia que debería ser modelar y definir coherentemente unas fun-
muy apreciada. ciones con una determinada línea de inter-
vención consolidada e integrada y que a su
vez sea reconocida por el resto del personal
CONCLUSIÓN/DISCUSIÓN docente. En relación a esto último destacar el
Convenio de Colaboración entre
Como se ha podido comprobar, la figura La Consejería de Educación y Universida-
del educador/a social en los contextos esco- des del Gobierno de Canarias y el Colegio
lares es un elemento clave a la hora de ela- Profesional de Educadores y Educadoras
borar e impartir tareas socioeducativas a los Sociales de Canarias (CEESCAN), para la me-
más jóvenes. jora del sistema educativo y de la Educación
Para que esto sea posible, es necesario Social, suscrito el 22 de septiembre de 2017
que se creen espacios útiles y favorecedores y publicado en el Boletín Oficial de Canarias
para el aprendizaje, todo ello en conjunto núm. 192, de 4 de Octubre de 2017, por la
con el resto de profesionales de la comuni- Consejería de Educación y Universidades.
dad educativa. Siguiendo con el desempeño profesional
Dichos espacios donde confluyen las ta- del educador/a social en las escuelas, es nece-
reas de maestros, educadores sociales, peda- sario hacer referencia a aquellas materias que
gogos, orientadores, psicólogos, etc., deben figuran en los currículums de los profesores,
ser puntos de encuentro donde exista una y que forman parte de las diversas innovacio-
cultura de colaboración interprofesional que nes que se han ido implantando en el ámbito
se construya paso a paso. educativo (habilidades sociales, educación
Es en esa construcción de trabajo en equi- en valores, educación emocional, resolución
po donde debe irse fraguando una línea de de conflictos, etc.), en donde podemos reco-
actuación compartida, donde el concepto nocer numerosos contenidos y prácticas ca-
de intervención educativa pueda entenderse racterísticas de la educación social.
como una acción intencional, teniendo como Por lo que cabe resaltar al educador/a
finalidad, el desarrollo personal y social de las social como un profesional más en la inter-
personas, grupos y comunidades, intentando vención con los jóvenes en dichas materias,
mejorar así tanto su calidad de vida como su habilitándolo así para impartir un tipo de do-
participación social. cencia que debería ser, entre otros aspectos,
Por otro lado, y ciñéndonos al desempe- muy valorada.
ño profesional de los educadores/as sociales, Otro aspecto relevante de la aportación
vemos necesario defender que la labor en los de los educadores/as sociales al trabajo en
centros educativos de dichos profesionales el ámbito escolar sería en la evaluación y se-
no se debe relegar a la función de apagafue- guimiento de los diferentes programas que
gos o a la intervención exclusiva por com- se llevan a cabo en este contexto, entre ellos
portamientos disruptivos, ante todo para no los referidos a la educación emocional, pues
convertir la profesión en un recurso de relevo como aporta Bisquerra (2003) no se dispone
y soporte asistencial. de modelos de evaluación plenamente satis-
Para ello resaltamos la idea que, desde la factorios para aplicarlos en dicha materia.
administración correspondiente, con los di- Es aquí donde el educador social por su
ferentes Reglamentos y Órdenes, desde los formación, podría realizar una muy buena
Colegios contribución, realizando estudios rigurosos
Profesionales de Educadores/as Sociales, de la eficacia de los programas de educación
como desde los propios centros escolares emocional en pro de la calidad educativa, to-
donde desarrollan algunos profesionales de mando como referencia buenos modelos de

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evaluación de programas, realizando buenos fesionales con los que comparte tarea, en fin
diseños de investigación y empleando herra- “tener pasión por lo que hace”.
mientas apropiadas tanto para la recogida En definitiva, debemos de abrir la posibi-
de información como para la valoración sis- lidad de trabajar con todos, desde la preven-
temática del diseño, del desarrollo y de los ción y en clave comunitaria, desde la educa-
resultados de tales programas. ción infantil hasta la secundaria, y en todo
Por otro lado, adentrándonos en la forma- tipo de centros, tanto aquellos donde existe
ción inicial de los educadores/as sociales se mayor conflictividad social como en aquellos
deben incorporar los principios, realidades y contextos más “normalizados”.
necesidades de la educación en los centros La intención es intervenir para fortalecer a
escolares. los alumnos y a las familias que participan en
Aspectos como el conocimiento del cu- la comunidad educativa sin tener que espe-
rrículo, legislación educativa, competencias rar a que aparezcan los problemas.
profesionales de maestros u otros profesio- Todo ello nos lleva a una realidad edu-
nales (pedagogos, orientadores, trabajadores cativa donde el respeto hacia las diferentes
sociales, etc.), deben formar parte del conjun- formas y prácticas de trabajo, se une a la ne-
to de conocimientos que permitan acercarse cesidad de continuar apreciando de forma
de una forma práctica a esta realidad y a su continuada y crítica, tanto la incorporación,
vez promuevan el desarrollo de mejoras so- como la tarea profesional de los/as educado-
ciales y educativas. res/as sociales en los contextos escolares.
Otro aspecto en la formación inicial de
los educadores/as sociales y que sería una
primera semilla para un trabajo compartido
con profesionales de la educación y con otros REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
técnicos que desarrollan sus tareas en este - Ambrona, T., López-Pérez, B. y Márquez-Gon-
campo, es que desde los primeros años del zález, M. (2013). Eficacia de un Programa de
Grado Universitario se empiece a trabajar de Educación Emocional Breve para Incrementar la
manera interdisciplinar. Es decir, la universi- Competencia Emocional de Niños de Educación
dad debe facilitar espacios de encuentro en- Primaria. REOP. 23(1), 39-49
tre diferentes carreras que sean susceptibles - Bisquerra, R. (2003). Educación Emocional y
de compartir espacios profesionales, para así Competencias Básicas para la Vida. Revista de
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entre el profesorado, educadores/as sociales - Bisquerra, R. (2010). Educación emocional. Puig,
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Por otro lado, por parte del educador/a so- educación para la ciudadanía. ICE: Horsori.
cial es necesario que a lo largo de su desem- - BOC (2014). Decreto 89/2014, de 1 de agosto,
peño profesional realice una serie de tareas por el que se establece la ordenación y el cu-
para poder ser respetado y valorado en este rrículo de la Educación Primaria en la Comu-
nidad Autónoma de Canarias. Boletín Oficial
contexto.
de Canarias, 13 de agosto de 2014, nº 156, pp.
Debe formarse y actualizarse constante- 21911-22582.
mente, ya no sólo para aprender sino para
- Cabello, R., Castillo, R., Rueda, P. y Fernández-
desaprender, indagar en experiencias prác- Berrocal, P. (2016). Mejorar la inteligencia de
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