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y el Desarrollo””
Fiscalía Provincial Corporativa Especializada en
Violencia Contra la Mujer e Integrantes del Grupo
Familiar Ate – Sede Ate
SEGUNDO DESPACHO
CONSIDERANDO
SUBSUNCIÓN TÍPICA
SEGUNDO: Los hechos materia de la presente investigación, se subsumen en el delito de
Agresiones en contra de las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar tipificado en el
primer párrafo del artículo 122-B° del Código Penal, el cual estipula lo siguiente: “El que de
cualquier modo cause lesiones corporales que requieran menos de diez días de asistencia o descanso
según prescripción facultativa o algún tipo de afectación psicológica, cognitiva o conductual que no
califique como daño psíquico a una mujer por su condición de tal o a integrantes de grupo familiar en
cualquiera de los contextos previstos en el primer párrafo del artículo 108-B, será reprimido con pena
privativa de libertad no menor de uno ni mayor de tres años e inhabilitación conforme a los numerales
5 y 11 del artículo 36 del presente Código y los artículos 75 y 77 del Código de los Niños y
Adolescentes, según corresponda”.
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3.1. En ese sentido, se debe tener en cuenta que el bien jurídico protegido, en relación a la
violencia psicológica, se identifica como: “Incolumidad corporal o el bienestar corporal o persona,
que es entendido como el mantenimiento del conjunto del cuerpo humano intacto, el cual puede ser
lesionado tanto por conductas que produzcan menoscabo en la salud física o mental o en la integridad
corporal como por los malos tratos que no representan un menoscabo objetivo para la salud y a
cualquier conducta que produzca la perturbación de la salud en sentido amplio, una disminución de la
capacidad laboral de la víctima o un menoscabo a su integridad corporal.” 1
3.2. Asimismo, en el artículo 8° de la Ley 30364 – Ley para Prevenir, Sancionar y Erradicar la
Violencia contra las Mujeres y los Integrantes del Grupo Familiar, se define a la Violencia
psicológica como la acción o conducta, tendiente a controlar o aislar a la persona contra su voluntad, a
humillarla o avergonzarla y que puede ocasionar daños psíquicos, señalando que el daño psíquico es la
afectación o alteración de algunas funciones mentales o capacidades de la persona, producida por un
hecho o conjunto de situaciones de violencia, que determina un menoscabo temporal o permanente,
reversible o irreversible del funcionamiento integral previo.
3.3. Por otra parte, se debe tener en cuenta lo señalado en la Guía Médico Legal de
Valoración Integral de las Lesiones Corporales, el cual define a la lesión como: “cualquier
alteración somática (física) o psíquica que perturbe, amenace o inquiete la salud de quien la
sufre, o simplemente limite o menoscabe la integridad personal del afectado, ya sea en lo
orgánico (anatómico) o funcional”, y como consecuencia de esta, se indica que “producida la
lesión, lleva aparejado consigo, perturbaciones de diversas naturalezas (objetivas y
subjetivas) que conducen a un daño. (...)”2; en ese sentido, vale decir que “la conducta idónea
para la creación de un riesgo relevante, se puede definir como la acción dirigida a causar un daño
psicológico o trastorno mental no momentáneo, de tal forma que el autor tenga conocimiento o se
represente que con su comportamiento va a incapacitar a la víctima en su ámbito psíquico”, por ello
no son imputables objetivamente las conductas que no generen riesgo relevante (aquellas
1
Galvez Villegas, Tomas Aladino y Ropas León, Ricardo Cesar. “Derecho Penal -Parte Especial
(Introducción a la parte general)”. Tomo I, Editorial Jurista Editores E.I.R.L, Lima – Perú, Octubre
2011, Pag. 657.
2
MINISTERIO PÚBLICO, “Guía médico legal de valoración integral de las lesiones corporales”, Lima: Instituto de Medicina
Legal del Ministerio Público, 2016. Recuperado de [https://bit.ly/2rMqPvo]
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4.1. Es necesario indicar que, dentro de nuestro sistema jurídico interno, el derecho penal es
considerado como instrumento de “última ratio”, en la medida en que obedece a una
función del control social formal, puesto que utiliza el “jus puniendi” como último
instrumento para restablecer el orden social vulnerado, en tanto no exista otra vía paralela
para solucionar el conflicto de intereses derivado de la comisión del hecho delictivo. Ello es
concordante con el Código Procesal Penal vigente, el cual posee una tendencia
eminentemente garantista de los derechos fundamentales de la persona, partiendo por el
respeto a la dignidad de la persona humana (artículo 1º de Constitución Política), es decir, de
las partes intervinientes en una investigación penal. En ese sentido, impulsar una
persecución penal formal cuando del análisis de las diligencias realizadas se puede inferir
que, finalmente, no se podrá destruir la presunción de inocencia y obtener una sentencia
condenatoria, representa una injerencia ilegítima, por innecesaria e inútil, en el plexo de los
derechos fundamentales, tanto de las personas a las que se les atribuye la comisión de un
delito –puesto que, pueden ser afectados en sus derechos fundamentales al tener que
soportar medidas de coerción procesal que derivan de la investigación y restrinjan los
mismos– como para quien reclama la condición de agraviado en un hecho ilícito, dado que
persiguiendo formalmente casos se puede percibir que no tendrán éxito, además de generar
pérdida de tiempo y recursos a la administración de justicia, conllevando a afectar el sistema
de justicia penal, lo cual resulta constitucionalmente inadmisible.
4.3. Las acciones realizadas por la fiscalía han estado destinadas a cumplir la finalidad
inmediata y mediata de las diligencias preliminares. Al respecto, la finalidad inmediata
abarca lo siguiente: a) Realizar actos urgentes o inaplazables solo para determinar si los
hechos investigados son reales y si además configuran uno o varios ilícitos penalmente
perseguibles; b) Asegurar elementos materiales que se utilizaron para su comisión, es decir,
asegurar la escena del crimen y la evidencia sensible de la presunta comisión del ilícito y
evitar en lo posible mayores consecuencias derivadas de la perpetración del delito; y, c)
Individualizar a las personas involucradas y a los agraviados, fundamentalmente
individualizar al presunto imputado y en lo posible al agraviado; mientras que la finalidad
mediata consiste en determinar si el fiscal debe formalizar o no la investigación
preparatoria3.
4.4. Así también, las diligencias preliminares tienen por objeto desarrollar una actividad de
investigación indagatoria que permita obtener los elementos de convicción, y de esa manera
el Fiscal pueda determinar si debe formalizar investigación preparatoria (Artículo 330º.1 del
Código Procesal Penal) o, caso contrario, en caso la investigación preliminar establezca
suficientemente la realidad del delito y la intervención del imputado en su comisión,
formular acusación, siempre dentro de los lineamientos expuestos precedentemente, esto es,
dentro de un criterio objetivo y proscribiendo todo acto arbitrario dentro del proceso penal.
5.1. Que, el artículo 336.1 del actual Código Procesal Penal, estipula que para la
formalización de la investigación preparatoria, previamente, se debe establecer: la
concurrencia no sólo de indicios reveladores de la comisión de un delito, sino también que
la acción penal no haya prescrito y se haya individualizado al imputado.
5.2. Así también, se debe tener en cuenta lo establecido por la Segunda Sala Penal Transitoria
3
Lineamientos establecidos en la casació n N° 318-2011-LIMA.
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5.3. De igual modo se debe tener en cuenta que la declaración de los agraviados resulta ser
eje central de la denuncia y el origen de los cargos incriminatorios del delito, ello significa
que a partir de la declaración de los agraviados se sustenta la imputación delictuosa hacia el
responsable del hecho delictivo, aunado a ello se agrega la condición de que la declaración
del agraviado debe ser consistente y veras, lo cual solo es posible a través de su declaración,
esto implica la obligación de concurrir a declarar e informar de forma detallada los hechos
que ha afirmado a través de su denuncia, ya que con una actitud contraria podría denotar
carencia de veracidad en torno a los hechos que contiene su denuncia y ello a su vez
originaria el debilitamiento de la sindicación o imputación efectuada en desmedro de
proseguir con éxito la investigación. Finalmente corresponde precisar que para la
declaración del agraviado rige lo señalado mediante el numeral 5 del artículo 171 del Código
Procesal Penal.
5.4. Ahora bien, resulta necesario traer a colación lo establecido por la Sala Penal Permanente
de la Corte Suprema de Justicia de la Republica, en el Recurso de Nulidad N° 1446-2020 –
Lima, en el cual señala que: “La materialidad del delito de lesiones (…) queda acreditada con el
Certificado Médico Legal, mientras que la responsabilidad del imputado se corrobora con la
sindicación directa, uniforme y coherente”.
6.1. En ese sentido, resulta necesario realizar el juicio de tipicidad o subsunción, el cual
implica el encuadramiento de los hechos investigados al tipo penal contenido in examine; en
ese sentido, para evaluar si existen elementos de convicción de la existencia de un delito,
previamente se debe verificar si tales hechos se encuadran en determinado tipo penal, pues
superado satisfactoriamente este primer nivel de análisis, recién podremos pronunciarnos en
lo referido a la existencia o no de elementos de convicción; ya que si no se supera tal nivel
primigenio (para ello basta la falta de inconcurrencia de un elemento objetivo del tipo), será
innecesario pronunciarnos en adelante, concluyendo ineludiblemente que la conducta
denunciada deviene en atípica.
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6.2. Para ello, es necesario determinar si la agraviada Nikol Esperanza Huaman Evaristo,
resulta ser sujeto pasivo del delito materia de investigación. Es así que, tenemos que entre la
agraviada y el investigado Cristian Enrique Ismodes Sanchez, existe una relación parentesco
al mantener el vínculo familiar convivientes.
6.3. En ese sentido se tiene que: i) Se le imputó al hoy investigado Cristian Enrique
Ismodes Sanchez, ser presunto autor del delito de Agresiones en contra de las mujeres y
los integrantes del grupo familiar, en la modalidad de violencia física y psicológica, en
agravio de Nikol Esperanza Huaman Evaristo; a razón de la imputación efectuada por
esta última en su denuncia policial obrante a folios 03; ii) En ese sentido, la agraviada
fue sometida a su respectiva evaluación física, conforme se desprende del Certificado
Médico Legal N° 006734-VFL, a través del cual se concluyó que presenta lesiones en su
integridad física, que le requirieron: (02) dos atenciones facultativas y (07) siete días de
incapacidad médico legal; iii) Circunstancias que permitieron dar inicio a la
investigación preliminar, por parte del Ministerio Público; no obstante, la agraviada fue
requerida por la autoridad fiscal penal con la finalidad de que declare o presente los
descargos correspondientes a la sindicación realizada contra el investigado, así como
también, a fin de que permita corroborar las conclusiones a las cuales se arribó en su
respectiva evaluación física; sin embargo, no cumplió con acudir al llamado
correspondiente, pese a encontrarse válidamente notificada, conforme es de verse de las
actas de inconcurrencia realizadas por el personal policial, que obran a fojas 57/58, lo
cual no ha permitido reunir mayores datos como en qué contexto, modo, circunstancias
se realizaron los hechos materia de investigación, deviniendo ello en que nos
encontremos frente a una falta de imputación necesaria; iv) Que, aun cuando la
agraviada haya presentado lesiones en su integridad física, dicha conclusión no le puede
ser atribuida al investigado, pues en efecto como se ha desarrollado, la agraviada no
acudió a declarar, circunstancia no permite vincular al investigado con la lesiones que
presenta la misma, ya que no existe una corroboración en cuanto a la sindicación
realizada por la agraviada en su denuncia policial; por lo que, en el presente caso nos
encontramos frente a una manifiesta carencia de elementos de convicción, respecto a la
acreditación de los elementos normativos del tipo penal atribuido, esto es, elementos de
convicción que vinculen al investigado con el delito de Agresiones en contra de las
mujeres y los integrantes del grupo familiar, en su modalidad de Violencia Física y
Psicológica; en consecuencia, es del caso no proceder ni continuar con la investigación
preparatoria
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DECISIÓN
Estando a las consideraciones expuestas, dentro de las exigencias del Principio de Celeridad
y Eficacia que el Ministerio Público pregona en el marco de aplicación del Nuevo Sistema
Procesal implementado, este Despacho Fiscal con la facultad que le confiere el artículo 1° y
94° del Decreto Legislativo Nº 052 - Ley Orgánica del Ministerio Público y al amparo del
Artículo 334°del Código Procesal Penal, DISPONE: