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APARATO REPRODUCTOR

Los aparatos reproductores femenino y masculino se especializan en producir descendencia con


diversidad genética a través de la reproducción sexual, en la cual los genes de dos individuos se
combinan al azar con cada nueva generación. La diversidad genética es la base de la selección
natural; conforme las condiciones del medio se transforman por la evolución, los rasgos
genéticos sobrevivientes de los individuos de una población se propagarán.

APARATO REPRODUCTOR FEMENINO


Formado por órganos
Genitales internos: vagina, útero, trompas de Falopio y ovarios.
Genitales externos: la vulva. Glándula anexa: glándula mamaria.

ÚTERO
Órgano de la gestación, situado entre la vejiga y el recto, debajo de las asas intestinales y colon
sigmoideo, encima de la vagina. (Hipogastrio)
Tiene forma de cono y se describen diferentes porciones: el fondo, el cuerpo, el istmo y el cuello
uterino.

Relaciones:
Cara anterior con la vejiga, separada a nivel del istmo y cuerpo por el fondo de saco peritoneal
vesicouterino. A nivel del cuello del útero solo la separa tejido celular laxo.
Cara posterior las asas intestinales y el recto. Totalmente tapizada por peritoneo que se refleja
sobre la cara anterior del recto formando el fondo de saco peritoneal de Douglas (útero
vaginoirectal) Caías laterales: los vasos uterinos y los ligamentos anchos.

En su estructura se describe una capa superficial, la serosa peritoneal, el perimetrio; una capa
muscular o miometrio y una capa profunda o mucosa llamada endometrio que sufrirá cambios
cíclicos por acción de las hormonas en la vida fértil de la mujer. El endometrio posee glándulas y
se divide en dos capas: la capa basal que es la más profunda en contacto con el miometrio y la
capa funcional, superficial que se desarrolla a expensas de la anterior por estímulo hormonal y se
descama con cada menstruación.

Tres pares de ligamentos unen el útero a la pelvis. Los ligamentos laterales: ligamentos anchos:
unen al útero a la pared lateral de la pelvis. Los ligamentos anteriores o ligamentos redondos:
que se extienden desde el ángulo lateral del útero a la región púbica, penetran en el conducto
inguinal y terminan en el monte de Venus y los labios mayores. Los ligamentos posteriores o
uterosacros unen la cara posterior de útero al sacro.

OVARIOS
Son los órganos formadores de la gameta sexual femenina (óvulo) y son a la vez glándulas de
secreción interna con la producción de hormonas sexuales femeninas (estrógenos y
progesterona, y en menor proporción de andrógenos). Se encuentran en la excavación pélvica,
por detrás de los ligamentos anchos (fosa ilíaca derecha e izquierda). En el borde anterior se
encuentra el hilio del órgano. El ovario está unido a la hoja posterior del ligamento ancho por un
repliegue peritoneal: el mesovario que se fija al borde anterior del órgano. Resulta entonces que
el ovario no está totalmente recubierto por peritoneo. Por su cara interna se relaciona con la
trompa de Falopio y su meso.

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TROMPAS DE FALOPIO
Son dos conductos que prolongan hacia fuera los ángulos laterales del útero hasta la superficie
del ovario. Por ellas los óvulos llegan al útero y es el sitio de encuentro de las gametas
(fecundación). Se describe una porción intersticial (intrauterina), el istmo, la ampolla y el
pabellón tubario en forma de embudo que posee fimbrias. La cara externa está recubierta por
peritoneo, la cara interna tiene un orificio que comunica el interior de la trompa con la cavidad
peritoneal. Las fimbrias sirven con su movimiento para barrido de la zona y así captar el óvulo
liberado a la cavidad peritoneal por el ovario en el momento de la ovulación. La trompa ocupa el
borde superior del ligamento ancho.

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VAGINA

Conducto que se extiende desde el cuello uterino hasta la vulva. Atraviesa la excavación
pélvica y el suelo perineal. Perineo
Conjunto de partes blandas que cierran por abajo la excavación pelviana. Tiene forma
romboidal, una línea que une un isquión y otro, divide esta región romboidal en dos
triángulos, uno anterior o urogenital atravesado por la uretra en el hombre y por la uretra y la
vagina en la mujer, y otro posterior o anal atravesado por la porción anal del recto. A estos
conductos van anexos músculos y aponeurosis con algunas diferencias en el hombre y la
mujer.

Relaciones: Su cara anterior se relaciona con la vejiga y los uréteres por arriba y la uretra por
debajo, su cara posterior se relaciona con el recto del que está separada por el fondo de saco
de douglas en la porción pelviana. En la porción perineal la vagina se separa del recto por
formaciones musculares y fibrosas del perineo. El extremo superior forma alrededor del cuello
del útero el fondo de saco anterior, posterior y laterales de la vagina, lugar donde se formará
el lago seminal en el momento de la eyaculación durante el coito. El extremo inferior
desemboca en el vestíbulo de la vulva, del que está separado por el himen.
VULVA

Depresión limitada por dos repliegues cutáneos, los labios mayores y menores. En el fondo
desembocan la uretra y la vagina. Se describen como anexos las glándulas de Bartholino o
vulvovaginales y el aparato eréctil femenino formado por el clítoris y los bulbos de la vagina.
Las glándulas de Bartholino o vuivovaginales, tienen su conducto excretor a cada lado del
conducto vaginal, en el canal que forma el himen y el labio menor. Su secreción es la
responsable de la lubricación en el acto sexual.
GLÁNDULAS MAMARLAS

Son glándulas especializadas en producir leche después del parto. Se encuentran en el tórax, a la
altura de la tercera y séptima costillas sobre el músculo pectoral mayor.
Rodeada de tejido adiposo, la glándula está formada por lóbulos mamarios. Cada uno de ellos
consta de una porción secretora, los acinos mamarios y conductos de excreción.
Los conductos de excreción de cada lóbulo, llamados conductos galactóforos, terminan a nivel del
pezón.

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Durante la pubertad, las hormonas ováricas estimulan el desarrollo de las glándulas mamarias
y los conductos.
Durante el embarazo, los estrógenos y progesterona preparan las mamas para la producción
de leche. Pero son necesarias otras hormonas. La prolactina, que se inhibe durante el
embarazo por acción de los estrógenos y la progesterona, aumenta después del parto. La
prolactina estimula la producción de leche por estímulo de la succión del bebé. La expulsión o
salida de la leche por los conductos, depende de otra hormona, la oxitocina, elaborada por la
glándula hipófisis.

APARATO REPRODUCTOR MASCULINO

Formado por los testículos o gónadas masculinas que se encuentran en el escroto, el epidídimo,
conducto deferente, próstata, vesículas seminales, glándulas bulbouretrales, los conductos
eyaculadores y el pene (la uretra en su interior permite la salida de espermatozoides en el
momento de la eyaculación).

URETRA

Es un conducto por el cual sale la orina y el esperma al exterior. Se extiende desde la vejiga
hasta el extremo del pene donde se encuentra el meato urinario. Mide aproximadamente 17
cm y en el curso de su trayecto atraviesa la próstata, la aponeurosis del perineo y el cuerpo
esponjoso del pene que la envuelve hasta su terminación.

Tiene tres partes:


 Uretra prostática
 Uretra membranosa
 Uretra esponjosa

A nivel de la uretra prostática se encuentran tres orificios uno en la línea media: el orificio
prostático y a cada lado los orificios de los conductos eyaculadores.

Describe en su recorrido un arco cuya concavidad abraza la sínfisis púbica y luego de dirección
descendente con el pene fláccido, formando un ángulo entre la porción posterior y la
descendente.

PRÓSTATA

Órgano glandular que envuelve la uretra posterior, situada debajo de la vejiga, encima del suelo
perineal, delante del recto y detrás de la sínfisis del pubis.
La próstata engloba la porción inicial de la uretra, y los conductos eyaculadores.
Está envuelta en una cápsula que envía trabéculas a su interior, que divide la glándula en
Lóbulos:
1. - Lóbulo anterior: por delante de la uretra
2. - Dos lóbulos lateroposteriores: por detrás de la uretra.
3. - Lóbulo medio: entre la uretra por delante y los conductos eyaculadores por detrás.

Función: secreta líquido prostático, líquido alcalino claro de aspecto lechoso que neutraliza
la acidez vaginal que inmoviliza los espermatozoides.

TESTÍCULO

Glándula de secreción interna productora de TESTOSTERONA por las células de Leydig y


productora de espermatozoides o gametas sexuales masculinas. Son dos y están ubicados en
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bolsas llamadas sacos escrotales por debajo de la región peneal, de forma ovoide. En el borde
superior, en el que descansa el epidídimo se encuentran los vasos del cordón espermático que
llegan al testículo.
De la túnica albugínea (membrana fibrosa que recubre el testículo) parten trabéculas que
dividen al testículo en lobulillos. Éstos están formados por los túbulos seminíferos dónde a
partir de células germinales ( espermatogonios) se producen espermatozoides por el proceso
de espermatogénesis. Entre los túbulos hay nidos de células intersticiales o de de Leydig que
producen testosterona.

VÍAS ESPERMÁTICAS

Es el conjunto de vías de excreción del esperma. Del testículo los tubos seminíferos se reúnen
en una red de conductos que llegan al epidídimo. Éste se encuentra en el borde superior del
testículo y termina en el conducto deferente. Se describen en el epidídimo una cabeza, un
cuerpo y una cola.
El conducto deferente se extiende desde el epidídimo hasta la base de la próstata. Tiene una
longitud aproximada de 45 cm, para lo cual debe atravesar el conducto inguinal con el resto
de los elementos que forman el cordón espermático.
A nivel pelviano el conducto deferente llega a la parte posterior de la vejiga, por dentro de las
vesículas seminales, dónde terminan.
Las vesículas seminales son dos reservóreos membranosos ubicados en el extremo posterior
de los conductos deferentes en las cuales se acumulan los espermatozoides llevados por el
conducto deferente. Están situadas en la cara posteroinferior de la vejiga. Secretan líquido
seminal, con valor nutritivo y protector para los espermatozoides. Se continúan con los
conductos eyaculadores que desembocan en la que desembocan en la uretra prostática.
Las glándulas bulbouretrales se encuentran por debajo de la próstata y desembocan en la
uretra. Secretan líquido que lubrica la uretra y la punta del pene.

PENE

Es el órgano de la copulación, situado por encima de las bolsas escrotales. Termina por
adelante en un ensanchamiento conoide llamado glande, agujereado en el centro por el
meato urinario separado del resto del órgano por el surca bálanoprepucial que se prolonga a
lo largo de la cara inferior del glande hasta el meato en forma de dos canales separados en la
línea media por un repliegue: el frenillo.

Está constituido por los siguientes órganos eréctiles:


1. Cuerpos cavémosos
2. Cuerpo esponjoso
3. Glande

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Conducción de líquido seminal

Los túbulos seminíferos, en los cuales se producen los espermatozoides, conducen al epidídimo,
un conducto muy enroscado, de unos 610 cm de largo, que se encuentra arriba y a lo largo de uno
de los lados de los testículos. El epidídimo almacena los espermatozoides hasta que maduran y
alcanzan sus etapas funcionales finales.

Durante la eyaculación (liberación potente de esperma), los transporta a otro túbulo, el vaso
deferente. Las ondas de contracción de los vasos impulsan los espermatozoides hasta la unión de
los vasos deferentes de cada testículo, en el ducto eyaculador, que se origina en la vesícula semi-
nal. El esperma pasa del ducto eyaculador a la uretra, que se extiende a lo largo del pene (durante
el proceso de excreción, la uretra conduce la orina). Por último, el pene libera los
espermatozoides.

El pene está constituido por tres áreas, en forma de bandas, de tejido esponjoso o tejido eréctil,
unidas por tejido fibroso. Una de estas bandas se agranda en la punta del pene, y forma el glande,
que puede estar cubierto por el prepucio.

Los espermatozoides se producen por el proceso de espermatogénesis, a partir de células


denominadas espermatogonias, ubicadas en las paredes de los túbulos seminíferos. En la
adolescencia, aproximadamente la mitad de las espermatogenias aumentan de tamaño y se
convierten en espermatocitos primarios. Los espermatocitos primarios se dividen por meiosis (un
tipo especial de reproducción celular) y originan espermatocitos secundarios, que, a su vez,
forman dos células espermátidas. A partir de cada espermátida, que es haploide —es decir, tiene
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un solo juego de cromosomas—, se diferenciará un espermatozoide maduro, con cabeza, cuello y
flagelo. La cabeza del espermatozoide consta de un núcleo y de un acrosomo localizado en su
extremo frontal.
El acrosomo produce enzimas que le ayudan a penetrar el óvulo.

El varón eyacula alrededor de 3,5 ml de semen, conformando por espermatozoides (aprox. 400
millones) y por las secreciones de las vesículas seminales, la próstata, las glándulas bulbouretrales
y otras glándulas situadas en las paredes de los conductos. La actividad de la glándula próstata es
particularmente importante pues aumenta los volúmenes de líquido seminal y le brinda
alcalinidad (pH de alrededor de 7,5). Esta alcalinidad neutraliza la acidez natural de los ductos
reproductivos de la mujer, que es necesaria para inhibir el desarrollo de microorganismos. Los
espermatozoides, una vez introducidos en la mujer, se mueven a una velocidad de 2 a 3 mm por
minuto.

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FECUNDACIÓN
Debemos tener en cuenta que los espermatozoides pueden vivir varias semanas en las vías
genitales masculinas, pero una vez eyaculados, a temperatura corporal en el aparato genital
femenino se mantienen viables entre 24 y 72 horas. La gameta femenina se conserva viable y
capaz de ser fecundada sólo 24 horas después de la ovulación. De esto se deduce que un coito
para que sea fecundante debe ocurrir desde, un día antes hasta un día después de la ovulación.
Después del coito, los espermatozoides pasan a través del útero hasta el extremo ovárico de la
trompa, aprox. en 5 minutos, por motilidad propia del espermatozoide y las contracciones
uterinas. En el tercio medio de la trompa se produce el encuentro de gametas con la consiguiente
fecundación. De todos los espermatozoides que llegan a la trompa, sólo uno puede atravesar la
zona pellúcida, por las enzimas proteoliticas presentes en la cabeza del espermatozoide
(Acrosoma).

Cuando el espermatozoide penetra al óvulo, su cabeza se transforma en el pronúcleo masculino, se


une al pronúcleo femenino, ambos con 23 cromosomas y se forma el huevo o cigoto con 23 pares
de cromosomas (mitad del padre y mitad de la madre). El huevo desciende por la trompa al útero,
dónde se produce la implantación, aprox. 7 días después de la fecundación.
Las células que rodean el huevo, células trofoblásticas, se encargan de producir gonadotrofina
coriónica, (cuyo dosaje se utiliza para diagnóstico de embarazo).
La nutrición del embrión las primeras semanas está a cargo de las secreciones de las glándulas
endometriales, estimuladas por la progesterona producida por el cuerpo amanillo. Luego la
placenta toma el comando de la nutrición del embrión y de la producción de hormonas:
gonadotrofina coriónica, estrógenos, progesterona y hormona lactógeno placentario.

Ciclo Menstrual:
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El aparato reproductor femenino, a diferencia del masculino, muestra cambios cíclicos regulares,
preparación periódica para la fecundación y el embarazo. El rasgo más visible es la aparición del
sangrado periódico por descamación de la mucosa uterina: Menstruación.
La duración del ciclo es variable, promedio 28 días +/- 7. Recordar que se cuenta como día 1 el
primer día de la menstruación. El ciclo es bifásico, con una primera fase llamada estrogénica (ya
que sus cambios dependen de la producción de estrógenos) y una segunda fase llamada
progestacional (porque los cambios dependen de la progesterona). El hecho que divide estas dos
fases ocurre aprox. el día 14 y es la ovulación. Durante este ciclo se producen cambios a nivel del
ovario y de la mucosa uterina (endometrio) por acción de las gonadotropinas hipofisarias y los
esteroides gonadales.
Ciclo ovárico:
Por debajo de la cápsula ovárica, se encuentran los folículos primarios o primordiales que poseen
en su interior un ovocito inmaduro. Al iniciarse el ciclo, varios folículos primarios comienzan su
maduración por acción de la FSH, hasta que uno alcanza la maduración total: folículo maduro o de
Graaf. Sus células son la fuente primaria de estrógenos.
Aprox. el día 14 se rompe el folículo maduro y se libera el ovocito a la cavidad peritoneal, dónde
es atrapado por las fimbrias de la trompa: ovulación. Ésta se produce por un pico elevado de LH
hipofisaria.
Los folículos del ovario que empezaron a madurar pero no lograron hacerlo totalmente
degeneran después de la ovulación, formando los folículos atrésicos.
El folículo que se rompió durante la ovulación sufre una serie de transformaciones y forma el
cuerpo amarillo o lúteo productor de progesterona. El cuerpo amarillo persiste su desarrollo si hay
embarazo y cesa si se produce la menstruación. La progesterona del cuerpo amarillo mantiene el
embarazo nutriendo al embrión hasta que toma el comando la placenta.
Si se produce la menstruación el cuerpo amarillo involucionado forma el cuerpo blanco o albicans.

Ciclo Uterino
Al final de la menstruación, se han desprendido todas las capas superficiales del endometrio,
quedando la capa profunda o basal. Bajo influencia de los estrógenos el endometrio basal
empieza a proliferar (Etapa proliferativa o estrogénica), aumentando el espesor y longitud de las
glándulas desde el quinto al 14 día del ciclo.
Producida la ovulación, por acción de la progesterona comienza la secreción a nivel de las
glándulas endometriales (Etapa secretoria o Progestacional).
Si no hay embarazo, las arteriolas de la capa funcional o superficial del endometrio comienzan a
experimentar vasoconstricción, con la consiguiente disminución de la vascularización y necrosis de
la capa superficial, produciéndose la hemorragia: Menstruación. Descamada la capa funcional,
ésta vuelva a regenerarse comenzando un nuevo ciclo. Cada ciclo menstrual tiene entonces dos
fases: Una primera fase o estrogénica y una segunda o progestacional separadas por la ovulación
que ocurre a la mitad del ciclo aproximadamente. (Ciclo sexual Bifásico)

FISIOLOGÍA DE LA REPRODUCCIÓN DESARROLLO SEXUAL FEMENINO Y MASCULINO


Después del nacimiento las gónadas permanecen quiescentes hasta la pubertad, cuando son
activadas por las gonadotrofinas de la glándula Hipófisis: La hormona Folículo estimulante
(FSH) y La hormona Latinizante (LH). Las hormonas secretadas por las gónadas durante este
período son las responsables de la aparición de los caracteres sexuales secundarios.

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En el hombre, los testículos secretan andrógenos, Testosterona y pequeña cantidad de
estrógenos.

En la mujer, los ovarios secretan estrógenos, y en escasa cantidad andrógenos ováricos. Los
andrógenos son esteroides sexuales de acción masculinizante, mientras que los estrógenos
tienen acción feminizante.

Pubertad: comienza con el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios y termina con la
menarca en la mujer y la primera eyaculación, en el hombre.
Edad de comienzo: en la mujer: 10 a 11 años, en el hombre; 12 a 13 años.

Adolescencia: arranca al terminar la pubertad y termina con el cierre de los cartílagos de


crecimiento de los huesos largos (fin del crecimiento en longitud) aprox. a los 17 años en la
mujer y a los 19 años en el hombre.
Bases fisiológicas: en la infancia las gónadas secretan pequeñas cantidades de hormonas,
suficientes para inhibir la secreción de gonadotrofinas hipofisarias. En la pubertad, la hipófisis
comienza a secretar mayor cantidad de gonadotrofinas (Gn), y también otras hormonas como
la hormona de crecimiento (STH) y la prolactina (Prl), lo cual trae diferentes efectos en el
hombre y la mujer:

La FSH: -estimula el desarrollo de folículos ováricos con la producción de Estrógenos


-estimula a los túbulos seminíferos (espermatogénesis)

La LH: -estimula a las células de Leydig (testosterona)


-estimula la ovulación y el cuerpo amarillo (progesterona)

La STH: acción anabólica, estimula la síntesis de proteínas e hidratos de carbono.


Estrógenos: estimula el crecimiento y maduración del útero, vagina, labios menores y mamas.

Progesterona: prepara el útero para la nidación y los acinos mamarios.

Testosterona: estimula el crecimiento del pene, del escroto, vello pubiano, barba y bigote,
desarrollo óseo y muscular tipo masculino, y el desarrollo de la laringe.
Las glándulas suprarrenales hasta la pubertad actúan en la producción de glucocorticoides y
aldosterona, produciendo pequeñas cantidades de andrógenos. Éstos aumentan en la
pubertad siendo responsables del crecimiento del clítoris y labios mayores en la mujer.
Estimulan el cierre de los cartílagos epifisarios.
El brote de crecimiento pubertad aparece en la mujer a los 10 a 11 años, después del
comienzo del desarrollo mamario. En el hombre, a los 12 a 14 años, después de los primeros
empujes de desarrollo testicular. El crecimiento en longitud termina a los 18 años en la mujer
y a los 22 en el varón.
Menarca: edad promedio 13 años (entre 12 y 15 años) uno a dos años después del brote
mamario y del vello pubiano.
Menopausia: Fin de los ciclos sexuales en la mujer (cese de menstruación) entre los 45 a 55 años.
Acompañado de una serie de síntomas generales (calores o tufaradas, depresión, etc).
En el hombre las funciones sexuales van declinando paulatinamente, sin el cese total.

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