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Nava Martínez Karina Montserrat Grupo 2202 Control de lectura 2.

La emergencia del individuo y la ambigüedad de la libertad

La historia del hombre había comenzado cuando este podía diferenciarse o ser

autónomo de acuerdo al mundo natural, esto con la finalidad de adquirir una unidad

diferenciada de la naturaleza, aunque no todo el tiempo fue muy claro.

La individuación abarca la integración de la personalidad individual junto con el

crecimiento de la fuerza, y es al mismo tiempo un proceso donde se ha perdido la

identidad original con los otros, esto porque el niño se ha separado de los demás.

Si bien, el proceso de individuación tiene un progreso que se desarrolla

automáticamente, el crecimiento del yo tiene una dificultad o hay algo que le impide

expresarse por un cierto número de causas individuales y sociales.

La ausencia de un acoplamiento entre los procesos mencionados anteriormente,

origina lo que es sentimientos de aislamiento e impotencia, esto a su vez, conduce

a algunos mecanismos psíquicos, los cuales son mecanismos de evasión.

El hombre no es guiado por instintos, si bien, es importante el hecho de que estos

existan, no significa que sean lo que predice las acciones de la especie humana,

que es considerada como superior, esta especie es orientada por una educación.

El hombre nace desprovisto del aparato necesario para obrar

adecuadamente, aparato que, en cambio, posee el animal; depende de sus

padres durante un tiempo más largo que cualquier otro animal y sus

reacciones al ambiente son menos rápidas y menos eficientes que las

reacciones automáticamente reguladas por el instinto. Tiene que enfrentar

todos los peligros y temores debido a esa carencia del aparato instintivo. Y,

sin embargo, este mismo desamparo constituye la fuente de la que brota el

desarrollo humano; la debilidad biológica, del hombre es la condición de

la cultura humana (Fromm, 1941, p. 58).


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El hombre comienza a pensar y a parar de ceder a sus impulsos, este al establecer

diversos escenarios, por ejemplo, de una decisión, está llevando a cabo lo que hoy

se conoce como libertad, no era adecuado según la naturaleza, pero fue el comienzo

de su cuestionamiento y evolución.

La libertad se torna de diferentes colores, es una novedad que demuestra el

dominio del hombre como especie y a la vez, es una representación de lo

peligroso e inseguro que puede llegar a ser el antes mencionado. “Cada paso

hacia un mayor grado de individuación entraña para los hombres una amenaza de

nuevas formas de inseguridad” (Fromm, 1941).

Entonces, conforme avanza el tiempo y la cultura, la personalidad e identidad del

hombre, varía, teniendo esto en cuenta, podemos decir que cada concepto

conocido ahora como libertad, fue cambiando durante estos últimos 4 siglos,

resignificando casi la totalidad de lo que hoy conforma las normas sociales o la

individualidad.
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Referencias.

Fromm, E. (1941). La emergencia del individuo y la ambigüedad de la libertad. En

Fromm, E. (2008) El miedo a la libertad. Buenos Aires, Argentina: Paidos.

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