Principio epigenético: Esto se refiere a que todas las etapas están conectadas, es decir, que si una

aún no termina no se puede seguir de forma correcta con la siguiente, y al no pasar de forma
correcta, tenemos resultados negativos como la maladaptación o malignidad; la maladaptación, es
confiar demasiado en el mundo, y malignidad, es ser muy desconfiado. Ambos extremos son
negativos.

Problemática social: Una problemática social, sería la falta de identidad, que es una tendencia de
repudio, que se les ve más en los adolescentes, que va en el lado de las propias fantasías
psicóticas. De igual forma, en un niño escolar presenta los problemas de interacciones sociales en
la escuela y en la familia. A lo largo de la vida, inicialmente en los infantes, está la desconfianza, en
un bebé se encuentra la vergüenza y la duda, en los prescolar se presenta la culpa, los escolares
suelen mostrar inferioridad, así le sigue la adolescencia, que acá se manifiesta la confusión de
roles y como se anunció anteriormente, la identidad yoica. Al llegar al adulto joven, suele ocurrir
que se pierden a sí mismo, los adultos medios presentan la autoabsorción, y finalmente, un adulto
viejo comienza con la desesperación.

Etapas:

1-. Infante: Esta etapa va de los 0 a 1 años, la cual sus virtudes son la esperanza y la fe. Ya que se
dice que en ese tiempo ellos creen mucho en sus padres. La malignidad en esta etapa son la
distorsión sensorial y el desvanecimiento, es decir, puede ser alguien depresivo. En esta etapa, el
impacto que tiene para el aprendizaje es que al ser confiados suelen pensar que socialmente el
mundo es un lugar seguro, entonces aprenden a confiar en su mismo cuerpo y las necesidades
biológicas.

2-. Bebé: Esta etapa va de los 2 a 3 años, la cual sus virtudes son la voluntad y determinación, eso
lo pueden lograr con el equilibrio apropiado y positivo, los niños tienen en mente que ellos pueden
lograr todo. La malignidad en esta etapa es la impulsividad y compulsión, es decir que se lanzan a
la vida sin considerar los límites y sus consecuencias. En esta etapa, el impacto que tiene para el
aprendizaje es que comienzan a explorar todo, creando un sentido de autonomía, que eso es
importante para los bebés ya que van creando un autocontrol, lo ideal es que debemos darle su
espacio al niño, pero aun así debemos observarlo y tener paciencia.

3-. Prescolar: Esta etapa va de los 3 a 6 años, la cual sus virtudes con el propósito y el coraje, es
decir, hacen lo que se proponen, aunque conozcan sus limitaciones. La malignidad en esta etapa
es la crueldad e inhibición, es decir, son menos empáticos, hacen lo que sea para cumplir sus
objetivos y no toman en cuenta a los que pasan a llevar. En esta etapa, el impacto que tiene para
el aprendizaje social es que puede imaginarse una situación futura, aprendiendo lo que es real o
irreal, también es importante inculcarle el juego para que vaya entendiendo sobre el sexto
sentido.

4-. Escolar: Esta etapa va de los 7 a 12 años, la cual su virtud es la competencia, a los niños se les
considera inferiores. La malignidad en esta etapa es la virtuosidad unilateral e inercia, estas
conductas se les ve a los niños que no se les permite ser niños al 100%. En esta etapa, el impacto
que tiene para el aprendizaje es que debe dedicarse a lo educativo para aprender las habilidades
necesarias para la sociedad, acá entra la familia, los profesores y sus mismos compañeros, donde
los padres deben animar, los docentes deben cuidar y sus compañeros aceptar, los niños deben
aprender el sentimiento del éxito.

5-. Adolescencia: Esta etapa va de los 12 a 18 años, la cual su virtud es la fidelidad y lealtad, estas
mismas, sirven para que los niños tengan alguna estabilidad y un desarrollo adecuado. La
malignidad en esta etapa es el fanatismo y el repudio, se refiere a que la persona piensa que
solamente él sabe. En esta etapa, el impacto que tiene para el aprendizaje es que acá tomamos
todo lo que hemos aprendido sobre la vida y de nosotros mismos y tratamos de moldearla para
que sea aceptada socialmente.

6-. Adulto joven: Esta etapa comienza en los 20's, la cual su virtud es el amor. Y su malignidad es la
promiscuidad y exclusividad, es decir que se vuelven muy abiertos. En esta etapa, el impacto que
tiene para el aprendizaje es que socialmente, suele aparecer la intimidad, es decir el poder estar
cerca de otros, ya sea de amantes o amigos, para poder participar en la sociedad.

7-. Adulto medio: Esta etapa va de los 20's a 50's, la cual su virtud es el cuidado. Y su malignidad es
la sobrextensión y rechazo, es decir que deja de ser un miembro productivo en la sociedad. En esta
etapa, el impacto que tiene para el aprendizaje es que deben aprender a estar solos, ya que la
mayoría tienen hijos que comienzan a separarse de su lado, entonces deben seguir con su vida, o
dejarán de ser un miembro productivo en la sociedad.

8-. Adulto viejo: Esta etapa comienza a los 50's, la cual su virtud es la sabiduría. Y su malignidad en
la presunción y desesperanza, es decir que la vida se vuelve como un desacato. En esta etapa, el
impacto que tiene para el aprendizaje es que su cuerpo ya no responde como antes, se comienzan
a preocupar con el pasado, en vez de aprender solamente se preocupan de sus fallos y se quejan
de que ya no tienen el tiempo para revertir todo lo que no hicieron cuando eran más jóvenes.

Estadio 1: Sensorial-oral, desarrolla la confianza y desconfianza, los padres o uno de ellos proveen
un lugar de familiaridad, consistencia y continuidad, el infante desarrolla una confianza en el
mundo, pensando que es un lugar seguro, que existen personas de fiar y amorosas. Con
respuestas paternas el niño aprende a confiar en si mismo y en las necesidades biológicas de su
cuerpo. En cambio, si los padres del infante son irresponsables, o dejados, el niño se vuelve
alguien desconfiado y prontamente sea una persona aprensiva y suspicaz. Los padres
sobreprotectores también causan negativos en sus hijos, ya que generan actitudes maladaptativas,
que les llaman un desajuste sensorial, el infante se vuelve excesivamente confiado al punto de
llegar a ser crédulo. Aunque puede ser peor con pequeños abandonados ya que toman conductas
malignas que es desvanecimiento. Son depresivos y paranoicas, pueden desarrollar psicosis. Pero
no todo es negativo, si se encuentra un equilibrio el niño puede desarrollar la virtud de esperanza,
la que ve no pierde la fe aun en los momentos más negativos de su vida. Y sabemos esto cuando el
joven da respuesta a estímulos negativos con la espera de sus padres sabiendo que si no están en
ese momento lo estarán en unos segundos más.
Estadio 2: Anal-muscular 18 meses – 3 años. Alcanzar grados de autonomía conservando la
vergüenza y duda. Padres o cuidadores permiten que el niño explore y pueda manipular su medio,
puede desarrollar autonomía a o independencia, sin desalentarles ni empujarlos mucho. Se
requiere de un equilibrio, padres “firmes pero tolerantes” así el infante genera autocontrol con
autoestima. Por lo contrario, es muy fácil hacer que el niño desarrolle vergüenza y duda cuando
los padres acuden de inmediato a sustituir sus acciones al explorar, el niño se dará por vencido y
no podrá hacer las cosas solos., y al burlarnos de sus acciones lo avergonzamos y lo hacemos sentir
muy inseguro de sí mismo. También hay otras formas de hacer que el niño se sienta avergonzado y
dudoso. Si le damos al niño una libertad sin restricciones con una ausencia de límites, o si le
ayudamos a hacer lo que él podría hacer solo, también le estamos diciendo que no es lo
suficientemente bueno. Si no somos lo suficientemente pacientes para esperar a que el niño se
ate los cordones de sus zapatos, nunca aprenderá a atárselos, asumiendo que esto es demasiado
difícil para aprenderlo. Peor aún es demasiada vergüenza y duda, lo que llevará al niño a
desarrollar la malignidad que Erikson llama compulsividad. Una de las cosas más admirables de un
niño de dos o tres años es su determinación

Estadio 3: Genital – locomotor 4-6 años aprender la iniciativa sin una culpa exagerada. La iniciativa
sugiere una respuesta positiva ante los retos del mundo, asumiendo responsabilidades,
aprendiendo nuevas habilidades y sintiéndose útil. Ahora el niño puede imaginarse, como nunc
una situación futura, una que no es la realidad actual. La iniciativa es el intento de hacer real lo
irreal. Podría sentirse culpable del acto y comenzaría a sentirse culpable también. Erikson es, por
supuesto, un freudiano y por tanto incluye la experiencia edípica en este estadio. Desde su punto
de vista, la crisis edípica comprende la renuencia que siente el niño a abandonar su cercanía al
sexo opuesto. Pero si este proceso se establece de manera muy dura y extrema, el niño aprende a
sentirse culpable con respecto a sus sentimientos. Demasiado iniciativa y muy poca culpa significa
una tendencia maladaptativa que Erikson llama crueldad.

Estadio 4: lactancia 6 - 12 años desarrollar capacidad de laboriosidad sentimiento de inferioridad.

Domesticar la imaginación y un enfoque académico, aprender habilidades necesarias para
sobrevivir las exigencias sociales. Los niños deben aprender que no solamente existe placer en
concebir un plan, sino también en llevarlo a cabo. Una buena forma de percibir las diferencias
entre un niño en el tercer estadio y otro del cuarto es sentarse a ver cómo juegan. Los niños de
cuatro años pueden querer jugar, pero solo tienen conocimientos vagos de las reglas e incluso las
cambian varias veces a todo lo largo del juego escogido. Un niño de siete años, sin embargo, está
dedicado a las reglas, las consideran algo mucho más sagrado e incluso puede enfadarse si no se
permite que el juego llegue a una conclusión estipulada. Si el niño no logra mucho éxito, debido a
maestros muy rígidos o a compañeros muy negadores, por ejemplo, desarrollará entonces un
sentimiento de inferioridad o incompetencia. Una fuente adicional de inferioridad, en palabras de
Erikson, la constituye el racismo, sexismo y cualquier otra forma de discriminación. Si un niño cree
que el éxito se logra en virtud de quién es en vez de cuán fuerte puede trabajar, entonces ¿para
qué intentarlo? Todos nosotros admiramos su laboriosidad, pero si nos acercamos más, todo ello
se sustenta en una vida vacía. Esto incluye a todos aquellos de nosotros que poseemos un
«complejo de inferioridad». Si a la primera no logramos el éxito, ¡no volvamos a intentarlo! Otros
nunca desarrollaron habilidades sociales, entonces nunca saldrán a la vida pública. La persona
cruel toma la iniciativa. Todo es el logro y los sentimientos de culpa son para los débiles. La forma
extrema de la crueldad es la sociopatía. La crueldad es mala para los demás, pero relativamente
fácil para la persona cruel. Peor para el sujeto es la malignidad de culpa exagerada, lo cual Erikson
llama inhibición. La persona inhibida no probará cosa alguna, ya que «si no hay aventura, nada se
pierde» y particularmente, nada de lo que sentirse culpable. El sentido del propósito es algo que
muchas personas anhelan a lo largo de su vida, aunque la mayoría de ellas no se dan cuenta que,
de hecho, ya llevan a cabo sus propósitos a través de su imaginación y su iniciativa.

Estadio5: adolescencia, empieza pubertad de los 13- 20. Identidad del yo y evitar confusión de los
roles. La identidad yoica significa saber quiénes somos y cómo encajamos en el resto de la
sociedad. Primero, debemos poseer una corriente cultural adulta que sea válida para el
adolescente, con buenos modelos de roles adultos y líneas abiertas de comunicación. En las
culturas tradicionales y primitivas, se le insta al adolescente a abandonar el poblado por un
periodo de tiempo determinado con el objeto de sobrevivir por sí mismo, cazar algún animal
simbólico o buscar una visión inspiradora. Sin estos límites, nos embarcamos en una confusión de
roles, lo que significa que no sabremos cuál es nuestro lugar en la sociedad y en el mundo. Erikson
dice que cuando un adolescente pasa por una confusión de roles, está sufriendo una crisis de
identidad. De hecho, una pregunta muy común de los adolescentes en nuestra sociedad es
«¿Quién soy?». Una de las sugerencias que Erikson plantea para la adolescencia en nuestra
sociedad es la una moratoria psicosocial. Erikson llama a esta tendencia maladaptativa fanatismo.
La falta de identidad es bastante más problemática, y Erikson se refiere a esta tendencia maligna
como repudio. Estas personas repudian su membresía en el mundo adulto e incluso repudian su
necesidad de una identidad. La fidelidad implica lealtad, o la habilidad para vivir de acuerdo con
los estándares de la sociedad a pesar de sus imperfecciones, faltas e inconsistencias. Realmente, la
fidelidad de la que hablamos se establece cuando hemos hallado un lugar para nosotros dentro de
ésta, un lugar que nos permitirá contribuir a su estabilidad y desarrollo.

Estadio 6: adulto joven 18-30 intimidad y actitud opuesta a aislamiento

El "miedo al compromiso" que algunas personas parecen presentar es un buen ejemplo de

inmadurez en este estadio. Muchas personas enlentecen o postergan el proceso progresivo de sus
relaciones interpersonales. Una relación de pareja adolescente sí busca un establecimiento de
identidad a través de la relación. La relación de adultos jóvenes debe ser una cuestión de dos egos
independientes que quieren crear algo más extenso que ellos mismos. Intuitivamente
reconocemos esto cuando observamos la relación de pareja de dos sujetos donde uno de ellos es
un adolescente y el otro un adulto joven. El énfasis sobre la formación profesional, el aislamiento
de la vida urbana, la fractura de las relaciones por motivos de traslados y la naturaleza
generalmente impersonal de la vida moderna, hacen que sea más difícil el desarrollo de relaciones
íntimas. Yo soy una de esas personas que he tenido que mudarme de lugar docenas de veces en
mi vida. No tengo ni la más remota idea de lo que pasó con mis amigos infantiles o incluso de
aquellos que tenía en la universidad. Mis amigos más antiguos están a miles de kilómetros de
donde vivo. Pero este estilo de vida se está volviendo rápidamente un anacronismo. Esta
tendencia se puede dar tanto con tu amante, como con tus amigos, compañeros y vecinos. La
persona se aísla de sus seres queridos o parejas, amigos y vecinos, desarrollando como
compensación un sentimiento constante de cierta rabia o irritabilidad que le sirve de compañía. Si
atravesamos con éxito esta etapa, llevaremos con nosotros esa virtud o fuerza psicosocial que
Erikson llama amor. Dentro de este contexto teórico, el amor se refiere a esa habilidad para alejar
las diferencias y los antagonismos a través de una "mutualidad de devoción". Incluye no
solamente el amor que compartimos en un buen matrimonio, sino también el amor entre amigos y
el amor de mi vecino, compañero de trabajo y compatriota.

7-. Estadio7: adultez media difícil determinar edad se puede decir entre los 20-50 . Productividad y
estancamiento. La productividad es una extensión del amor hacia el futuro. Pero la verdad es que
si no recibimos el amor de vuelta, no lo consideramos un amor verdadero. Con la productividad,
no estamos esperando, al menos parece que no implícitamente, una reciprocidad en el acto.
Aunque la mayoría de las personas ponen en práctica la productividad teniendo y criando los hijos,
existen otras maneras también. Erikson considera que la enseñanza, la escritura, la inventiva, las
ciencias y las artes, el activismo social complementan la tarea de productividad. La persona
estancada deja de ser un miembro productivo de la sociedad. Es bastante difícil imaginarse que
uno tenga algún tipo de estancamiento en nuestras vidas, tal y como ilustra la tendencia
maladaptativa que Erikson llama sobrextensión. Algunas personas tratan de ser tan productivas
que llega un momento en que no se pueden permitir nada de tiempo para sí mismos, para
relajarse y descansar. Al final, estas personas tampoco logran contribuir algo a la sociedad. Más
obvia todavía resulta la tendencia maligna de rechazo, lo que supone muy poca productividad y
bastante estancamiento, lo que produce una mínima participación o contribución a la sociedad. Y
desde luego que aquello que llamamos «el sentido de la vida» es una cuestión de cómo y qué
contribuimos o participamos en la sociedad.

Estadio 8: Adulto tardía 60 años. La tarea primordial aquí es lograr una integridad yoica con un
mínimo de desesperanza. Junto a las enfermedades, aparecen las preocupaciones relativas a la
muerte. La integridad yoica significa llegar a los términos de tu vida, y por tanto, llegar a los
términos del final de tu vida. Aunque la mayoría de ustedes no se encuentran en este punto de la
vida, quizás podríamos identificarnos un poco si empezamos a cuestionarnos nuestra vida hasta el
momento. Si hemos sido muy afortunados, o si hemos jugado a la vida de forma segura y con
pocos errores, nuestra vida no habría sido tan rica como lo es. Esto ocurre cuando la persona
«presume» de una integridad yoica sin afrontar de hecho las dificultades de la senectud. Erikson la
define como un desacato a la vida, tanto propia como la de los demás. La persona que afronta la
muerte sin miedo tiene la virtud que Erikson llama sabiduría. Considera que este es un regalo para
los hijos, dado que «los niños sanos no temerán a la vida si sus mayores tienen la suficiente
integridad para no temer a la muerte».