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ETAPAS DEL DESARROLLO

El desarrollo es un proceso continuo a lo largo de la vida, el cual es


posible de dividir en etapas a partir de los principales cambios que se
producen en el individuo. En base a los estudios del psicólogo Erik
Erikson se pueden distinguir ocho etapas básicas en el desarrollo de
una persona.

No obstante, no se puede decir con seguridad cuando comienza


exactamente y cuando termina cada etapa, pues en el desarrollo
influyen diversos factores individuales, sociales y culturales. Por eso
se dice que cada ser humano tiene su propio ritmo de desarrollo.

1) Etapa prenatal: comprende desde la concepción hasta el


nacimiento. La influencia de los factores genéticos y ambientales
durante este periodo pueden ser determinante para el posterior
desarrollo psicológico. Si bien no forma parte de las ocho etapas
de Erikson, es importante tomarla en cuenta.

2) Confianza vs desconfianza: comienza en el nacimiento y


termina alrededor de los dieciocho meses (año y medio). En esta
etapa el bebé debe aprender a confiar en los adultos presentes
en su vida. Para el bebé la única forma de avisar de sus
necesidades es llorando. Si se satisfacen debidamente sus
necesidades, confiara en su cuidador, que generalmente es la
madre, y desarrollara un sentido de seguridad. Por el contrario,
si sus necesidades son ignoradas, este no desarrollara confianza
en su entorno y en sus cuidadores, se sentirá abandonado, por
lo que puede que crezca con un sentimiento de desconfianza
hacia las personas.
3) Autonomía vs vergüenza/duda: comprende del año y medio a
los 3 años. Aquí el niño comienza su desarrollo cognitivo y
motor; aprende a caminar, hablar, controlar sus esfínteres, entre
otras cosas. Esta etapa también se conoce como “yo lo hago”,
es cuando el niño comienza a tomar decisiones; expresara sus
preferencias en su entorno, la ropa que quiere usar y el juguete
que prefiere. El niño adquiere un sentido de independencia. Si el
niño no explora las experiencias de toma de decisiones, este
puede desarrollar una baja autoestima y vergüenza. Los padres
o cuidadores trataran de no hacer todo por el niño para que este
tenga autonomía en el mundo.

4) Iniciativa vs culpa: de los 3 a 6 años. El juego adquiere una


gran importancia, descubre los roles más significativos para él y
los representa, aprender a planificar y lograr metas involucrando
a otros. El niño necesita identificar y proyectar su rol en el
mundo. La iniciativa a esta edad, consiste en la planificación de
ese rol social que actúa. Los niños que tienen éxito en esta
etapa se sienten capaces y confiado para guiar a otros, aquellos
que no logran adquirir estas habilidades lo más probable es que
se queden con un sentimiento de culpa y falta de iniciativa. La
culpa es buena, en el sentido de que ayuda al niño a reconocer
que hizo algo más, pero en exceso e inmerecida puede hacer
que niño descarte desafíos por no sentirse capaz de afrontarlos.

5) Industriosidad vs inferioridad: abarca de los 6 a los 13 años.


Es durante la edad escolar que el niño, independientemente de
que si se siente cómodo o no, comienza a tener reconocimiento
por lo que hace en ese nuevo entorno. Está en disposición de
adquirir nuevos conocimientos y habilidades o, dicho de otra
manera, de volverse productivo. En esta etapa los compañeros
del niño, sus profesores y padres desempeñaran un papel
importante en su vida y se convertirán en su principal refuerzo de
confianza. El riesgo en esta etapa radica en que cuando no hay
suficiente reconocimiento, aparece una sensación de
inadecuación que puede conducir a un sentimiento de
inferioridad, si este eco de inferioridad no se aborda
adecuadamente el niño puede optar por descartar cualquier
tarea que sea difícil por medio de volver a vivir esa sensación
(pierde la motivación). En cambio, la valoración recibida hacia
sus esfuerzos le hará desarrollar un sentimiento de orgullo por
sus logros; el cómo es capaz de dominar y dar culminación a sus
tareas y/o metas.

6) Identidad vs confusión de roles: de los 13 a los 19 años. Este


periodo se caracteriza por poner en duda todo aquello en lo que
se confiaba. Es decir, los conocimientos, las habilidades y las
experiencias adquiridas. Todo ello debido a los cambios
biológicos y psicológicos que sufre el adolescente y la crisis de
personalidad que esto genera. En esta etapa el adolescente se
pregunta “¿Quién soy?, “¿Qué quiero hacer con mi vida?”.
Presentan confusión en cuanto a su identidad, son idealistas y
altamente influenciables. Es el momento en que comienza a
moldear su propia personalidad, elige a quien quiere parecerse y
que rol quiere desempeñar en la sociedad, para ello la vida
social adquiere un papel esencial, aquí los padres le deben
permitir cierta independencia, darle más libertad de elección y de
acción, pues ya no es un niño, pero al mismo tiempo hacerle ver
que la libertad va de la mano con la responsabilidad, que sus
acciones tienen consecuencias.

7) Intimidad vs aislamiento: representa a los adultos jóvenes (20


años) hasta los 40 años. Es el momento en que el joven adulto
está en capacidad de establecer compromisos laborales,
sentimentales, políticos y profesionales, y de ser necesario,
hacer los sacrificios que tales compromisos y/o relaciones
requieren. Si por temor el joven adulto no logra establecer este
tipo de vínculos con el mundo, el peligro subyacente será el
aislamiento, este puede crear un sentimiento de inferioridad que
le hará pensar hay algo malo con él. Es la etapa de las
decisiones y de los retos para adquirir estabilidad. También es el
periodo en donde se afianzan las concepciones acerca del
trabajo, la amistad, la familia, etc. Básicamente es en esta etapa
cuando se da el paso definitivo hacia la adultez.

8) Generatividad vs estancamiento: el adulto en esta etapa tiene


entre 40 y 60 años. La generatividad se refiere al deseo en la
edad madura de contribuir a la sociedad por medio de un legado,
el cual guie a las futuras generaciones futuras, ya sea a través
del trabajo o la paternidad. Cuando esto no se produce,
comienza un proceso de estancamiento personal que está ligado
a la sensación de no trascender, de no tener ningún tipo de
impacto en el porvenir.

9) Integridad del yo vs desesperación: esta es la última etapa del


desarrollo psicológico de Erikson, y comienza a partir de los
sesenta años y más. Esta etapa puede ser serena o llena de
inquietud. El adulto que reflexiona positivamente sobre su vida
tendrá un sentimiento de satisfacción, la sensación de que ha
merecido la pena lo logrado. Si por el contrario el adulto siente
que fracaso con su vida, a menudo se obsesionará con las ideas
de “¿Qué hubiese pasado sí?”, “Podría haber hecho”. Lo usual
es que en ese caso aparezca un miedo profundo a la
enfermedad, al sufrimiento y a la muerte y, por lo general, el
adulto sentirá amargura y desesperación. Tener una visión u otra
nos hará afrontar los cambios físicos de la vejez y los duelos
propios de esa etapa de una forma más o menos positiva.
Bibliografía

https://utelesup.edu.pe/blog-psicologia/psicologia-evolutiva/

https://es.wikiversity.org/wiki/Introducci%C3%B3n_a_la_psicolog%C3
%ADa/Desarrollo_humano

https://www.universidadviu.com/int/actualidad/nuestros-
expertos/psicologia-evolutiva-y-etapas-del-desarrollo

https://lamenteesmaravillosa.com/las-ocho-edades-del-hombre-segun-
erik-erikson/

https://www.usnanny.org/es/learning-theorist-erik-erikson/

https://youtu.be/5deSkroXJio

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