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El documento define el acto administrativo como una afirmación de voluntad de una autoridad administrativa que tiene efectos jurídicos sobre los gobernados. Explica que los actos administrativos se pueden clasificar de acuerdo a su relación con la ley, su ámbito de aplicación, su finalidad y las voluntades que intervienen. También describe los elementos internos y externos de un acto administrativo y explica que los efectos jurídicos de estos actos consisten en generar, modificar o extinguir situaciones jurídicas individuales.
El documento define el acto administrativo como una afirmación de voluntad de una autoridad administrativa que tiene efectos jurídicos sobre los gobernados. Explica que los actos administrativos se pueden clasificar de acuerdo a su relación con la ley, su ámbito de aplicación, su finalidad y las voluntades que intervienen. También describe los elementos internos y externos de un acto administrativo y explica que los efectos jurídicos de estos actos consisten en generar, modificar o extinguir situaciones jurídicas individuales.
El documento define el acto administrativo como una afirmación de voluntad de una autoridad administrativa que tiene efectos jurídicos sobre los gobernados. Explica que los actos administrativos se pueden clasificar de acuerdo a su relación con la ley, su ámbito de aplicación, su finalidad y las voluntades que intervienen. También describe los elementos internos y externos de un acto administrativo y explica que los efectos jurídicos de estos actos consisten en generar, modificar o extinguir situaciones jurídicas individuales.
3 los actos administrativos: Concepto de acto administrativo
El acto administrativo es toda afirmación de voluntad administrativa; esto es, una disposición que toma un órgano de la Administración Pública y que tiene efectos jurídicos sobre el gobernado. El acto jurídico (que siempre produce efectos jurídicos) tiene por esencia el interés, evolución o conclusión de derechos u obligaciones. En cambio, el acto administrativo no es sino una de las especies del acto jurídico (que es el género), y que tiene consecuencias jurídicas para el destinatario o administrado. Si bien no es la única forma de manifestarse que posee la Administración Pública, el acto jurídico si es el único acto atacable. Se distingue de los actos internos de la Administración Pública, porque estos no tienen consecuencias sobre el administrado. Por su lado los actos civiles de la Administración Pública, que son los que ella ejerce en la esfera del derecho privado, dejan de lado el derecho público (ejemplo: contrato de alquiler con un particular para instalar una dependencia de la Administración Pública).
4 clasificación de los actos administrativos.
Los actos administrativos se clasifican en varias categorías, de acuerdo al punto de vista desde el cual se consideren, a saber: Desde el punto de vista de su relación con la ley, se clasifican en actos discrecionales y actos reglados. Acto discrecional: Es el que se produce cuando la administración ejercita una facultad que le otorga la ley para obrar libremente. Acto reglado: es el que está determinado en todos sus aspectos por una norma legal. Esta clasificación tiene especial importancia en la materia contenciosa-administrativa.
5 Desde el punto de vista del radio de acción del acto, se clasifican en
internos y externos, según que solo produzcan sus efectos en el seno de la Administración o se extiendan más allá de ella. 6 Desde el punto de vista de su finalidad, se clasifican en actos constitutivos y en actos de ejecución. Actos constitutivos son los que definen y concretan, para los individuos, los derechos y las obligaciones que la ley establece en forma abstracta o impersonal. Actos de ejecución son los que tienen que hacer cumplir las obligaciones impuestas por la ley o por un acto administrativo.
7 Desde el punto de vista de las voluntades que intervienen en el acto, se
dividen en unilaterales y bilaterales. Actos Unilaterales: Se entiende como acto administrativo unilateral al acto jurídico, adoptado unilateralmente por una autoridad administrativa, que modifica o rechaza modificar los derechos o las obligaciones de los administrados independientemente de su consentimiento. Actos bilaterales son aquellos que para su formación requieren de la manifestación de voluntad de varias partes. Desde el punto de vista de su contenido, se dividen en: Actos que no crean una relación jurídica inmediata entre la Administración y los particulares, a pesar de que ambos intervienen, como los registros y certificaciones. Actos que crean obligaciones a cargo de los particulares, que son los que se conocen con el nombre de órdenes de la autoridad, o propiamente disposiciones. Actos que crean derecho a favor del particular, aunque conlleven ciertas cargas, como actos de admisión, las autorizaciones, permisos y licencias. Actos que crean al mismo tiempo derechos y obligaciones para los particulares, como lo contratos administrativos, y su especie, as concesiones administrativas.
8 Elementos del acto jurídico administrativo.
Los elementos que constituyen el acto jurídico administrativo ordinario se agrupan en dos categorías: los elementos externos y los elementos internos. Los elementos externos del acto administrativo son: 1.- La Competencia del órgano que lo realiza; y 2.- Los requisitos de forma que la ley establece. Los elementos internos: 1.- La existencia de una voluntad libre; 2.- La existencia de un objeto posible y lícito; 3.- La existencia de un motivo legal; y 4.- Una finalidad concordante con la que establece la ley.
9 efectos jurídicos del acto administrativo.
El efecto jurídico del acto administrativo consiste en generar, modificar o extinguir una situación jurídica individual, o condicionar el nacimiento, modificación o extinción, para un caso particular, de una situación general. Ese efecto se produce entre la administración, por una parte, y el particular, por la otra. Como regla general, sujeta a algunas excepciones, los derechos que un particular obtiene y las obligaciones que sume o resultan de su cargo por obra de los actos administrativos, son intrasmisibles, salvo nuevo acto de la administración. Generalmente, los derechos y obligaciones que resultan de los actos administrativos son personales, en el sentido que a este término no se da en el Derecho Civil, esto es, como contraposición a los derechos reales. Se ha sostenido que, en ciertos casos, los actos administrativos no solo crean derechos y obligaciones personales, sino que entre ellos se puede señalar algunos que dan nacimiento a derechos y obligaciones reales, que guardan gran semejanza con los de la misma naturaleza conocidos en el derecho civil. En realidad, el concepto de derecho real civil es inaplicable tratándose de bienes del dominio público; y los derechos administrativos que sobre ellos pueden establecerse corresponden a una categoría jurídica diferentes. Examinados a fondo, no son otra cosa sino tolerancias que la Administración puede conceder cuando no se infrinja la regla de la inalienabilidad. Tratándose de los actos administrativos, se pude afirmar que el principio que regula sus efectos es precisamente contrario al rige, en materia civil, los efectos relativos a derechos patrimoniales, es decir que la regla general en este caso es que las situaciones jurídicas creadas por el acto administrativo son oponibles a todo el mundo. Sin embargo, esa regla general tiene excepción. Existen derechos de los particulares que la Administración está obligada a representar, o que solo puede afectar mediante ciertos requisitos. De tal manera que, cuando realiza un acto administrativo, este es oponible a todos, siempre que se observe aquel respeto o cumpla con los requisitos establecidos para afectar el derecho del tercero. Lo cual, en otras palabras, quiere decir que el acto administrativo no puede violar derechos anteriores, creados por otro acto administrativo, o por un título especial de derecho público o de derecho privado. De lo anterior resulta que, en el derecho administrativo, solo existe el concepto de tercero, en los casos ya aludidos, pero no el de causahabiente.