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El documento propone reutilizar las aguas residuales del lavado del café, conocidas como "aguas mieles", para hacer abono orgánico y violes en vez de desecharlas. Esto traería múltiples beneficios a los caficultores y al ambiente al mitigar el impacto del lavado del café, reducir gastos en abono y fertilizantes, y permitir su uso en tiempos de sequía.
El documento propone reutilizar las aguas residuales del lavado del café, conocidas como "aguas mieles", para hacer abono orgánico y violes en vez de desecharlas. Esto traería múltiples beneficios a los caficultores y al ambiente al mitigar el impacto del lavado del café, reducir gastos en abono y fertilizantes, y permitir su uso en tiempos de sequía.
El documento propone reutilizar las aguas residuales del lavado del café, conocidas como "aguas mieles", para hacer abono orgánico y violes en vez de desecharlas. Esto traería múltiples beneficios a los caficultores y al ambiente al mitigar el impacto del lavado del café, reducir gastos en abono y fertilizantes, y permitir su uso en tiempos de sequía.
Los productores de café, vienen recibiendo charlas y capacitaciones por parte
de entidades y cooperativas de recetas para la preparación de violes, los
especialistas orientan al caficultor a utilizar leche, cáscara de arroz, entre otros productos en su mayoría, no provenientes de la zona, el cual implica mayor gasto y al no comprobar la eficacia de estas recetas el caficultor evita poner en práctica estás recetas. En la actualidad, existen dos formas de lavado para la extracción del mucilago del café, de los cuales se opta por el artesanal, el cual requiere un excesivo uso de litros de agua, provocando cantidades excesivas de aguas contaminadas por este proceso y suelos por tal razón como medidas de mitigación se construye pozas en la cual se almacena las aguas residuales resultado del lavado, para filtrar las aguas residuales del café. Se propone reutilizar estas aguas producto del lavado del café llamadas aguas mieles (mucilagos), para la elaboración de violes, el cual proporciona múltiples beneficios al caficultor y al ambiente, proporcionará un abono netamente orgánico, mitigación de impacto ambiental que produce el lavado del café, reducción de gastos de abono y fertilizantes y como adicional permite su uso en tiempo de sequias.