¿Cómo defendemos al patrón?

En general, un empleador puede despedir a un empleado por justa causa si el

empleado comete un delito fuera del lugar de trabajo que afecta negativamente la
relación laboral o la reputación de la empresa. Sin embargo, el empleador debe
seguir los procedimientos legales adecuados y demostrar que el despido fue
justificado por motivos legítimos.

En primer lugar, el empleador debe investigar el delito cometido por el empleado y

recopilar pruebas suficientes para demostrar que el delito afecta negativamente la
relación laboral o la reputación de la empresa.

Además, el empleador debe notificar al empleado de las razones del despido y

ofrecerle la oportunidad de responder a las acusaciones en una audiencia
disciplinaria.
El escrito se podría mandar con posterioridad a la audiencia , en razón de que el
patrón no afecte la reputación de la empresa.

Si después de la audiencia disciplinaria el empleador determina que el despido es

justificado, el empleador debe notificar al empleado por escrito y proporcionarle
detalles de la razón del despido. Además, el empleador debe cumplir con todas las
obligaciones legales, como el pago de la compensación que corresponda al
empleado.
Es importante tener en cuenta que la justa causa para el despido debe estar
claramente relacionada con el trabajo y no ser simplemente por la comisión de un
delito fuera del lugar de trabajo. Además, el empleador debe actuar de manera justa
y razonable al tomar la decisión de despedir al empleado.

El artículo 46 : el trabajador o el patrón podrán rescindir en cualquier tiempo la

relación de trabajo, por causa justificada, sin incurrir en responsabilidad.