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El compañerismo es uno de los valores más importantes que pueden cultivarse durante la infancia. A través de esta actitud de colaboración constante, los niños ejercitan sus
habilidades sociales. Asimismo, descubren el valor de dar y recibir desde la empatía. Pero, ¿cómo fomentar este valor en la infancia? ¡Te lo contamos! Y si te interesa formarte
profesionalmente en el ámbito educativo, puedes especializarte en este campo con nuestro curso de Auxiliar de jardín de infancia y acceder laboralmente al sector de la educación
infantil.
A continuación, sigue leyendo, porque te explicamos cómo y porqué fomentar este valor durante la infancia.
Índice de contenidos
Dar ejemplo
Trabajar la empatía. Ponerse en el lugar de los demás es esencial para comprender cómo se sienten y cómo actúan.
Fomentar el trabajo en equipo. Es esencial organizar clases mixtas y heterogéneas, fomentar la interacción entre los niños y proponerles ejercicios para asumir diferentes roles y
resolver conflictos. La idea también es proponer situaciones en que los alumnos tengan que apoyarse y ayudarse mutuamente.
Inculcar la solidaridad. Hay que trabajar la integración social, el compromiso y la generosidad entre compañeros.
Incentivar los lazos. Esto hace que los alumnos se conozcan más entre sí y que estrechen relaciones. Así, los vínculos que se crearán serán más profundos.
Trabajar la tolerancia. Hay que asegurar siempre el respeto en el aula y evitar cualquier signo de agresión o conflicto entre compañeros.
Promover la cooperación consiguiendo un compromiso individual a la vez que colectivo. Eso sí, evitando la competitividad entre miembros.
Favorece la escucha activa. Es importante enseñar a los niños a saber escuchar, esto también facilitará una comunicación de calidad entre ellos.
Dar ejemplo
Comparte anécdotas con el niño basadas en historias de tu vida. Anécdotas sencillas en las que puedas explicarle cuánto significó para ti la ayuda de un compañero. De este modo,
no solo afianzas el vínculo afectivo con el niño al mostrarte tal y como eres. El conocimiento mutuo es muy positivo para reforzar el afecto. Además, también le transmites este
mensaje de ser un buen compañero.