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Materia: Muci
Seccion: C-1-1
Valores
El respeto
Tolerancia
Honestidad
Responsabilidad
Justicia
Empatía
Gratitud
Importancia de fomentar los valores
universales que Promueven una Convivencia
pacifica y armoniosa entre las personas
Respeto
Definición De Respeto: El respeto se puede definir como un
sentimiento de consideración, valoración y reconocimiento hacia otra
persona, entidad o cosa. Es una actitud que implica tratar a los demás
con amabilidad, cortesía, consideración y dignidad, reconociendo sus
derechos, opiniones y necesidades.
Tolerancia
Definición de Tolerancia: La tolerancia se puede definir como la actitud
de respetar y aceptar las opiniones, creencias, prácticas y modos de
vida de los demás, aunque difieran de los propios. Es un
comportamiento que implica la comprensión, el diálogo y la
convivencia pacífica con las personas que tienen diferentes puntos de
vista, culturas, religiones, orientaciones sexuales, entre otros aspectos.
Cuento de la responsabilidad
Había una vez un pequeño ratón llamado Tito que vivía en una casa
con su familia. Tito era muy inquieto y curioso, siempre quería explorar
nuevos lugares y descubrir cosas nuevas.
Un día, mientras su familia estaba durmiendo, Tito decidió aventurarse
fuera de la casa en busca de aventuras. A pesar de que su mamá le
había dicho que no se alejara demasiado, Tito decidió ignorar su
consejo y explorar el mundo exterior.
Mientras caminaba por el jardín, Tito encontró un pedazo de queso
delicioso que estaba en el suelo. A pesar de que sabía que no debería
comer algo que no había sido provisto por su mamá, Tito decidió
comerlo de todos modos.
Después de comer el queso, Tito comenzó a sentirse mal. Se dio
cuenta de que había comido algo que no debía y que su mamá tenía
razón al decirle que no se alejara demasiado. Se sintió muy
arrepentido por su acción y decidió volver a casa lo antes posible.
Cuando llegó a casa, Tito se sintió aún más mal. Se había enfermado
por comer el queso del jardín y no podía hacer nada más que dormir.
Al día siguiente, su mamá lo cuidó y le dijo que siempre debía ser
responsable y no ignorar los consejos que se le daban.
Desde entonces, Tito aprendió la importancia de ser responsable y de
seguir las instrucciones de los mayores. Aprendió que sus acciones
pueden tener consecuencias y que es importante pensar antes de
actuar. Y así, Tito se convirtió en un ratón más maduro y responsable.
Justicia
Cuento de la Empatia
1. Hacer una lista diaria de cosas por las que estar agradecido. Al
final del día, reflexionar sobre lo que ha sucedido y anotar lo que
se valora en un diario de gratitud.
2. Agradecer a las personas que nos rodean, amigos, familiares,
compañeros de trabajo, por las cosas positivas que hacen por
nosotros, incluso por las cosas pequeñas.
3. Dar las gracias por las oportunidades, por la salud, por las
relaciones, por la naturaleza, por la vida misma, por todo lo que
se tenga en la vida.
4. Practicar la gratitud en momentos difíciles, encontrando aspectos
positivos en las situaciones desafiantes, y agradecer la
oportunidad de aprender y crecer a través de ellas.
5. Ser consciente de los pequeños detalles que pueden pasar
desapercibidos en la vida diaria y agradecerlos. Por ejemplo, el
sol que brilla, una brisa suave, una sonrisa, un abrazo.
6. Compartir la gratitud con los demás. Expresar nuestra gratitud
hacia los demás puede ayudarles a sentirse valorados y
apreciados.
7. Ayudar a los demás y ser voluntario. Ayudar a los demás puede
ayudarnos a ser más conscientes de nuestras propias
bendiciones y agradecer por ellas.
8. Ser agradecido en las situaciones cotidianas, como en una
comida, antes de dormir o al despertar, agradeciendo por lo que
se tiene en la vida
Había una vez un niño llamado Juan que siempre se quejaba de todo.
Nunca estaba contento con lo que tenía y siempre quería más
juguetes, más dulces y más atención de sus padres.
Un día, su abuela vino a visitarlos y le regaló a Juan una pequeña
planta de girasol. La abuela le explicó que si la cuidaba bien, crecería
grande y hermosa, y le daría flores amarillas que alegrarían su día.
Al principio, Juan estaba emocionado con la planta, pero pronto se
olvidó de regarla y cuidarla. La planta comenzó a marchitarse y las
hojas se volvieron marrones. Juan se dio cuenta de que no estaba
haciendo su parte para cuidarla y se sintió mal.
Entonces, decidió que iba a cambiar su actitud y empezó a cuidar la
planta todos los días. Le daba agua y la colocaba en un lugar soleado
para que pudiera crecer bien. Poco a poco, la planta comenzó a revivir
y a crecer cada vez más.
Un día, cuando la planta finalmente floreció, Juan estaba asombrado
por su belleza. Las flores amarillas eran tan brillantes y alegres que
iluminaron toda la habitación. Juan se dio cuenta de lo importante que
era cuidar las cosas y agradecer por lo que tenía.
Desde ese día, Juan empezó a ser más agradecido por todo lo que
tenía en su vida. Agradecía por su familia, sus amigos, su hogar y
todas las pequeñas cosas que antes daba por sentado. Y siempre
recordaba la pequeña planta de girasol que le había enseñado la
importancia de la gratitud y el cuidado