Pregunta de investigación

¿Cómo y por qué se presenta y se clasifica la depresión en los adolescentes de 15 a 18 años

en el CCH Oriente en el periodo de 2021-2023?

Tema
Clasificación y síntomas de la depresión en adolescentes de 15 a 18 años en el CCH Oriente
del año 2021-2023

Delimitación espacio/temporal
La investigación se enfocará en la presentación y clasificación de la depresión en los
adolescentes de 15 a 18 años que estudian dentro del CCH Oriente en el periodo de 2021-
2023, se expondrán factores biológicos, sociales y familiares que pueden influir en la aparición
y clasificación de la depresión.

Planteamiento del problema

¿Cómo se clasifica la depresión en los adolescentes del CCH Oriente y qué medidas se están
tomando para asegurar que se les brinde el tratamiento adecuado?
La depresión es un trastorno de salud mental que afecta a un número significativo de
adolescentes en todo el mundo, incluyendo aquellos que estudian en el Colegio de Ciencias y
Humanidades Oriente (CCH Oriente) en México. Aunque se ha demostrado que la depresión
puede ser tratada con éxito, muchos adolescentes que experimentan esta condición no reciben
el tratamiento adecuado. Por lo tanto, es esencial comprender cómo y por qué se presenta y se
clasifica la depresión en los adolescentes de 15 a 18 años en el CCH Oriente en el período de
2021-2023.
La depresión en los adolescentes del CCH Oriente puede tener un impacto significativo en el
bienestar emocional, el rendimiento académico y las relaciones sociales de los adolescentes
afectados. Aunque se han identificado varios factores de riesgo para la depresión en los
adolescentes, como el estrés, la presión académica y los problemas familiares. Además,
existen diferencias culturales y sociales que pueden influir en la percepción y el manejo de la
depresión en los adolescentes del CCH Oriente. Por lo tanto, es importante investigar los
factores que pueden contribuir a la aparición y clasificación de la depresión en los adolescentes
de este colegio, con el fin de desarrollar estrategias de prevención y tratamiento más efectivas
para mejorar la salud mental de los adolescentes.

Objetivos
General
● Visibilizar los sintomas por causas de la depresión en los adolescentes de 15 a 18 años
del CCH Oriente.
Particulares
● Generar conciencia en los compañeros que habitualmente generan un ambiente dificil
para las personas con depresión en clase.
● Comprender las causas y consecuencias de la depresión en el sector antes mencionado
● Ampliar el conocimiento estudiantil sobre las afectaciones de la depresion en los
adolescentes
● Encontrar soluciones e intentar reducir el número de personas con depresion en el
plantel y en el sector visualizado.

Justificación
En el presente trabajo escrito se expondrá el impacto generado por la depresion, para ello se
empleará el apoyo de la comunidad estudiantil que sufre las consecuencias de esta dificultad,
esto a partir de encuestas realizadas de manera anónima. A la par se emplearán estudios
médicos y psicológicos que avalen las repercusiones que conlleva el tener depresion a una
corta edad; el tema seleccionado fue por motivos personales debido a que mi grupo cercano de
amigos y compañeros incluyendome, el cuestionamiento a tratar se nos hace muy importante
ya que cada día se ven más casos de depresion en la adolesencia, por lo mismo queremos
darlo a conocer e informar a la comunidad estudiantil las consecuencias que la misma provoca
para crear conciencia y poder prevenirla.
La investigación sobre cómo y por qué se presenta y se clasifica la depresión en los
adolescentes de 15 a 18 años en el CCH Oriente es esencial para mejorar la salud mental de
los adolescentes y prevenir futuros casos de depresión. La información obtenida puede ser
utilizada para desarrollar estrategias de prevención y tratamiento más efectivas que aborden
los factores de riesgo específicos en este grupo de edad y en el contexto de este colegio.
Además, la investigación puede ayudar a crear conciencia sobre la importancia de la salud
mental y reducir el estigma asociado con la depresión y otras condiciones de salud mental en
los adolescentes.

Hipótesis:
 La depresión en los adolescentes puede estar relacionada con los factores biológicos,
cómo cambios hormonales y alteraciones en la química cerebral.
 Los adolescentes que experimentan depresión pueden presentar una tendencia hacia el
perfeccionismo y la autoexigencia excesiva, lo que puede generar una mayor
vulnerabilidad al estrés y la ansiedad.
 Los problemas familiares, como el divorcio de los padres o la dinámica familiar
disfuncional, pueden aumentar la probabilidad de que los adolescentes experimenten
depresión.
 La falta de acceso a recursos de salud mental, como terapia y medicación, pueden
contribuir a la falta de tratamiento adecuado y, por lo tanto, a la clasificación errónea o
inadecuada de la depresión en los adolescentes
 La exposición a contenidos negativos o violentos en los medios de comuncación y en
las redes sociales podría ser un factor de riesgp para la aparición y la clasificación de la
depresión en los adolescentes

Índice o Punteo
1- La depresión: definición y clasificación
1.1.1- Depres y depresiones
1.1.2- Causas de la depresión en los adolescentes
1.2 Clasificación de los estados depresivos
1.2.1- Depresiones endógenas
1.2.2- Depresiones somatógenas
1.2.3- Depresiones psicógenas
1.2.4- Depresiones secundarias
1.2.5- Depresiones primarias
1.3- Modelos psicológicos de depresión
1.3.1- El modelo psicoanalítico
1-3-1- El modelo cognoscitivo
 Capitulo 1
La depresión: definición y clasificación
La depresión es un trastorno emocional común en adolescentes y jóvenes adultos. Se
caracteriza por un estado de ánimo triste y melancólico, pérdida de interés en actividades que
antes eran placenteras, sentimientos de inutilidad y culpa, cambios en el apetito y el sueño, y
pensamientos de muerte o suicidio. La depresión es una enfermedad mental grave que puede
afectar la capacidad de una persona para llevar una vida normal y satisfactoria.
Existen factores de riesgo para la depresión en los adolescentes, incluyen antecedentes
familiares de depresión, estrés, abuso o trauma, enfermedades físicas crónicas, falta de apoyo
social, problemas escolares y de relación, y abuso de sustancias.
Para la depresión en adolescentes existen diversos tratamientos que puede incluir psicoterapia,
medicamentos antidepresivos o una combinación de ambos. La terapia cognitivo-conductual
(TCC) es un tipo de psicoterapia que se ha demostrado eficaz para tratar la depresión en los
adolescentes. Los antidepresivos pueden ser útiles para reducir los síntomas de la depresión,
pero deben ser utilizados con precaución y bajo supervisión médica, ya que pueden tener
efectos secundarios graves y aumentar el riesgo de pensamientos y comportamientos suicidas
en algunos adolescentes.
La depresión en los adolescentes se define como un trastorno del estado de ánimo que se
caracteriza por la presencia de tristeza, desesperanza, desesperación, pérdida de interés en
actividades previamente disfrutadas, problemas de sueño y apetito, fatiga, baja autoestima,
dificultades para concentrarse y pensamientos suicidas. Los síntomas pueden durar semanas,
meses o incluso años si no se trata adecuadamente.
La depresión en los adolescentes puede clasificarse en tres tipos principales: depresión mayor,
distimia y trastorno afectivo bipolar.
La depresión mayor es un tipo de depresión grave que se caracteriza por la presencia de
síntomas como tristeza profunda, pérdida de interés en actividades que antes eran placenteras,
problemas de sueño y apetito, fatiga, sentimientos de inutilidad y pensamientos de muerte o
suicidio.
La distimia es un tipo de depresión crónica de baja intensidad que se caracteriza por síntomas
como tristeza leve, pérdida de interés en actividades que antes eran placenteras, problemas de
sueño y apetito, fatiga, baja autoestima y dificultades para concentrarse. Estos síntomas
pueden durar años si no se tratan adecuadamente.
El trastorno afectivo bipolar es un tipo de depresión que se caracteriza por cambios en el
estado de ánimo que alternan entre episodios de depresión mayor y episodios de manía.
Durante los episodios de manía, los adolescentes pueden sentirse extremadamente felices,
excitados y llenos de energía, lo que puede llevar a comportamientos arriesgados e impulsivos.

1.1.1- Depres y depresiones

Las depres y las depresiones en los adolescentes son trastornos mentales caracterizados por
sentimientos persistentes de tristeza, desesperanza y falta de interés o placer en las
actividades cotidianas. Los adolescentes con depresión pueden experimentar cambios en el
apetito, el sueño y la energía, así como dificultades para concentrarse y tomar decisiones.
También pueden tener pensamientos negativos sobre sí mismos, el mundo y el futuro.
La depresión en los adolescentes puede variar en gravedad y duración. Algunos adolescentes
pueden experimentar síntomas leves y transitorios de depresión, mientras que otros pueden
experimentar síntomas graves y duraderos que afectan significativamente su bienestar
emocional y su capacidad para funcionar en la vida cotidiana.
Es importante tener en cuenta que la depresión no es simplemente una respuesta normal a los
desafíos y las presiones de la vida. La depresión es una enfermedad mental real que puede
tratarse eficazmente con una combinación de terapia y, en algunos casos, medicación.

1.1.2 Causas de la depresión en los adolescentes

La depresión en los adolescentes puede ser causada por una combinación de factores
biológicos, psicológicos y ambientales. Algunos de los factores que pueden contribuir a la
depresión en los adolescentes incluyen varios factores.
La depresión puede tener una base genética, lo que significa que puede ser hereditaria. Si un
miembro de la familia tiene depresión, el riesgo de que un adolescente desarrolle depresión
puede ser mayor.
Durante la adolescencia, el cerebro experimenta importantes cambios en su estructura y
función. Estos cambios pueden afectar la forma en que los adolescentes procesan las
emociones y pueden aumentar el riesgo de depresión.
Los adolescentes que han experimentado eventos estresantes o traumáticos, como la muerte
de un ser querido, el divorcio de los padres, la violencia, el acoso o el abuso, pueden tener un
mayor riesgo de desarrollar depresión.
Los problemas en el hogar, como el divorcio, la falta de apoyo emocional de los padres o el
conflicto familiar, pueden contribuir a la depresión en los adolescentes.
La presión para obtener buenas calificaciones, asistir a la universidad o tener éxito en la vida
puede ser abrumadora para algunos adolescentes y puede contribuir a la depresión.
Los adolescentes que tienen dificultades para relacionarse con sus compañeros, se sienten
aislados o tienen problemas para establecer relaciones saludables pueden estar en mayor
riesgo

Capítulo 2
1.2 Clasificación de los estados depresivos
Los estados depresivos en adolescentes se clasifican de la misma manera que en los adultos,
con la diferencia de que se toman en cuenta las características propias de la etapa de la vida
en la que se encuentran.
La clasificación de los estados depresivos en los adolescentes se realiza con el objetivo de
proporcionar un diagnóstico preciso y adecuado para cada caso, lo que permite diseñar un plan
de tratamiento específico.
Los estados depresivos en los adolescentes pueden ser clasificados según su duración,
gravedad y causa subyacente. La depresión mayor es la forma más común de depresión en los
adolescentes y se caracteriza por la presencia de síntomas depresivos significativos durante al
menos dos semanas.
Es importante señalar que la clasificación de los estados depresivos en los adolescentes puede
ser más compleja que en los adultos debido a la variabilidad en la presentación de los síntomas
y a la necesidad de tener en cuenta los cambios hormonales y emocionales que ocurren
durante la adolescencia.
la clasificación de los estados depresivos en los adolescentes se realiza para proporcionar una
comprensión más completa de la naturaleza de la enfermedad y para garantizar que los
adolescentes reciban el tratamiento adecuado para su situación particular. Si un adolescente
experimenta síntomas depresivos persistentes o graves, es importante buscar ayuda
profesional para recibir un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.

1.2.1- Depresiones endógenas

Las depresiones endógenas son un tipo de trastorno depresivo que se caracterizan por la
presencia de síntomas depresivos graves sin una causa evidente. A diferencia de la depresión
reactiva, que se produce en respuesta a eventos estresantes o traumáticos, la depresión
endógena no tiene una causa clara y puede estar relacionada con factores biológicos o
genéticos.
En las depresiones endógenas, se cree que la causa subyacente es una disfunción en el
equilibrio químico del cerebro, en particular la falta de serotonina, dopamina y norepinefrina,
sustancias químicas que son importantes para el control del estado de ánimo y la regulación
emocional. Los factores genéticos también pueden desempeñar un papel importante en la
aparición de depresiones endógenas, ya que algunos estudios han demostrado que ciertos
genes pueden predisponer a una persona a sufrir depresión.
Los síntomas de la depresión endógena pueden incluir tristeza persistente, pérdida de interés
en actividades que antes se disfrutaban, cambios en el apetito y en el sueño, fatiga,
sentimientos de inutilidad y culpa, dificultad para concentrarse y pensamientos de suicidio.
El tratamiento de las depresiones endógenas puede incluir terapia psicológica y/o
medicamentos antidepresivos que ayuden a regular los niveles de serotonina, dopamina y
norepinefrina en el cerebro. Es importante destacar que el tratamiento de las depresiones
endógenas puede llevar tiempo y puede requerir una combinación de tratamientos para ser
efectivo.
Es importante buscar ayuda profesional de un médico o psicólogo para recibir un diagnóstico
preciso y un tratamiento adecuado. La depresión endógena es un trastorno grave que puede
afectar significativamente la calidad de vida, pero con el tratamiento adecuado, es posible
recuperarse y llevar una vida plena y satisfactoria.

1.2.2 - Depresiones somatógenas

Las depresiones somatógenas son un tipo de trastorno depresivo que se caracterizan por la
presencia de síntomas depresivos como resultado de una enfermedad física o una lesión
cerebral. Estos síntomas pueden estar relacionados con cambios químicos o estructurales en el
cerebro causados por la enfermedad o lesión.
Entre las enfermedades físicas que pueden causar depresiones somatógenas se incluyen
enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, enfermedades
autoinmunitarias, enfermedades neurológicas, cáncer y trastornos hormonales. La lesión
cerebral también puede ser una causa importante de depresión somatógena, especialmente
después de una lesión traumática en la cabeza.
Los síntomas de la depresión somatógena pueden incluir tristeza persistente, falta de energía,
pérdida de interés en actividades que antes se disfrutaban, cambios en el apetito y en el sueño,
fatiga, sentimientos de inutilidad y culpa, dificultad para concentrarse y pensamientos de
suicidio. Además, los síntomas físicos pueden incluir dolor crónico, problemas
gastrointestinales, dolor de cabeza, fatiga, disminución del apetito sexual y otros síntomas
relacionados con la enfermedad o lesión subyacente.
El tratamiento de las depresiones somatógenas depende de la causa subyacente y puede
incluir tratamientos para la enfermedad o lesión física, así como terapia psicológica y/o
medicamentos antidepresivos. Es importante destacar que el tratamiento de las depresiones
somatógenas puede ser complejo y requerir un enfoque multidisciplinario para abordar tanto los
síntomas físicos como los psicológicos.
Es importante buscar ayuda profesional de un médico o psicólogo para recibir un diagnóstico
preciso y un tratamiento adecuado. La depresión somatógena puede ser un trastorno grave que
afecta significativamente la calidad de vida, pero con el tratamiento adecuado, es posible
recuperarse y llevar una vida plena y satisfactoria.

1.2.3 - Depresiones psicógenas

Las depresiones psicógenas son un tipo de trastorno depresivo que se caracterizan por la
presencia de síntomas depresivos como resultado de factores psicológicos y emocionales.
Estos factores pueden incluir eventos estresantes de la vida, como la muerte de un ser querido,
la pérdida del trabajo, el divorcio, la violencia, el abuso, entre otros.
Las depresiones psicógenas también pueden ser causadas por traumas emocionales, como
experiencias de abuso infantil o abandono emocional, que pueden llevar a la persona a tener
una baja autoestima, dificultad para establecer relaciones interpersonales saludables y
problemas para regular las emociones.
Los síntomas de la depresión psicógena pueden incluir tristeza persistente, falta de energía,
pérdida de interés en actividades que antes se disfrutaban, cambios en el apetito y en el sueño,
fatiga, sentimientos de inutilidad y culpa, dificultad para concentrarse y pensamientos de
suicidio. Además, los síntomas pueden estar asociados a síntomas físicos, como dolores de
cabeza, problemas digestivos y otros síntomas relacionados con el estrés.
El tratamiento de las depresiones psicógenas puede incluir terapia psicológica y medicamentos
antidepresivos. La terapia puede incluir terapia cognitivo-conductual, terapia de aceptación y
compromiso, terapia interpersonal y terapia psicodinámica, entre otras. En algunos casos,
también puede ser útil la terapia de grupo o la terapia familiar para ayudar a la persona a lidiar
con los factores estresantes del entorno y mejorar sus habilidades para relacionarse con los
demás.
Es importante buscar ayuda profesional de un psicólogo o psiquiatra para recibir un diagnóstico
preciso y un tratamiento adecuado. Con el tratamiento adecuado, es posible superar la
depresión psicógena y llevar una vida plena y satisfactoria.
1.2.4- Depresiones secundarias
Las depresiones secundarias, también conocidas como depresiones situacionales, son un tipo
de trastorno depresivo que se produce como resultado de un evento estresante o de una
enfermedad física o psicológica que afecta a la persona. Estos eventos pueden incluir la muerte
de un ser querido, la pérdida del trabajo, el divorcio, un accidente, una enfermedad crónica o
una discapacidad.
La depresión secundaria se produce cuando la persona no puede lidiar adecuadamente con el
estrés y las emociones negativas asociadas con el evento estresante o la enfermedad, lo que
lleva a una disminución en el estado de ánimo y una serie de síntomas depresivos. Estos
síntomas pueden incluir tristeza persistente, falta de energía, pérdida de interés en actividades
que antes se disfrutaban, cambios en el apetito y en el sueño, fatiga, sentimientos de inutilidad
y culpa, dificultad para concentrarse y pensamientos de suicidio.
El tratamiento de la depresión secundaria puede incluir terapia psicológica y medicamentos
antidepresivos. La terapia puede incluir terapia cognitivo-conductual, terapia de aceptación y
compromiso, terapia interpersonal y terapia psicodinámica, entre otras. El objetivo de la terapia
es ayudar a la persona a procesar y lidiar con el evento estresante o la enfermedad, a
desarrollar habilidades para manejar el estrés y las emociones negativas y a mejorar la calidad
de vida.
En algunos casos, también puede ser útil la terapia de grupo o la terapia familiar para ayudar a
la persona a lidiar con los factores estresantes del entorno y mejorar sus habilidades para
relacionarse con los demás.
En algunos casos, también puede ser útil la terapia de grupo o la terapia familiar para ayudar a
la persona a lidiar con los factores estresantes del entorno y mejorar sus habilidades para
relacionarse con los demás.
Es importante buscar ayuda profesional de un psicólogo o psiquiatra para recibir un diagnóstico
preciso y un tratamiento adecuado. Con el tratamiento adecuado, es posible superar la
depresión secundaria y llevar una vida plena y satisfactoria.

1.2.5- Depresiones primarias

Las depresiones primarias, también conocidas como trastornos depresivos mayores o
depresión mayor, son un tipo de trastorno depresivo que se produce sin una causa aparente y
no están relacionadas con eventos estresantes externos o enfermedades físicas o psicológicas.
Se caracterizan por una tristeza profunda y persistente, la pérdida de interés en actividades que
antes se disfrutaban y una disminución en el nivel de energía y motivación.
Los síntomas de la depresión primaria pueden incluir tristeza persistente, falta de energía,
pérdida de interés en actividades que antes se disfrutaban, cambios en el apetito y en el sueño,
fatiga, sentimientos de inutilidad y culpa, dificultad para concentrarse y pensamientos de
suicidio. Los síntomas pueden ser leves, moderados o graves y pueden durar semanas, meses
o incluso años.
El tratamiento de la depresión primaria puede incluir terapia psicológica, medicamentos
antidepresivos o una combinación de ambos. La terapia psicológica puede incluir terapia
cognitivo-conductual, terapia interpersonal, terapia de aceptación y compromiso y terapia
psicodinámica, entre otras. El objetivo de la terapia es ayudar a la persona a identificar y
cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento negativos que contribuyen a la
depresión, así como a desarrollar habilidades para manejar el estrés y las emociones
negativas.
Los medicamentos antidepresivos pueden ayudar a reducir los síntomas de la depresión
primaria al aumentar los niveles de ciertos neurotransmisores en el cerebro que están
asociados con el estado de ánimo. Es importante señalar que los medicamentos antidepresivos
pueden tardar varias semanas en comenzar a hacer efecto y pueden tener efectos
secundarios. Por lo tanto, es importante trabajar con un médico para encontrar el medicamento
adecuado y la dosis correcta. Los medicamentos antidepresivos pueden ayudar a reducir los
síntomas de la depresión primaria al aumentar los niveles de ciertos neurotransmisores en el
cerebro que están asociados con el estado de ánimo. Es importante señalar que los
medicamentos antidepresivos pueden tardar varias semanas en comenzar a hacer efecto y
pueden tener efectos secundarios. Por lo tanto, es importante trabajar con un médico para
encontrar el medicamento adecuado y la dosis correcta.
Es importante buscar ayuda profesional y con el tratamiento adecuado, la mayoría de las
personas con depresión primaria pueden recuperarse y llevar una vida plena y satisfactoria.