TÉCNICA DEL SEMÁFORO

¿Qué es?
La técnica del semáforo es una herramienta que se utiliza a partir de los 4 años para
aprender a manejar la impulsividad generada por emociones desagradables como
frustración, enfado e incluso tristeza.
La estrategia consiste en avisar al niño (proporcionarle un feedback) cuando la crisis o
berrinche está empezando a activarse.

Asociar los colores del semáforo con las emociones y la conducta

ROJO = PARAR: cuando no podemos controlar una emoción sentimos (mucha rabia,
queremos agredir a alguien) tenemos que parar como lo hace un auto cuando se
encuentra en luz roja en el semáforo.
AMARILLO = PENSAR: después de parar nos detenemos a pensar, ¿qué es lo que
molesta, ¿cómo me siento con esto, ¿qué puedo hacer?
VERDE = SOLUCIONAR: Si ya nos damos un tiempo para pensar, pueden surgir
alternativas o soluciones para el problema es tiempo de aplicar la solución.
Para asociar las luces al semáforo lo podemos hacer de la siguiente manera:

Luz roja
1. Alto: respiro, y pienso antes de actuar.
Luz amarilla

2. Pienso: soluciones o alternativas y sus consecuencias.

Luz verde
3. Adelante: pongo en práctica la mejor solución.

Lo importante aquí es trabajar en la identificación de las sensaciones previas a la

conducta impulsiva y trabajarla paralelamente con una técnica de relajación o estrategia
alternativa de afrontamiento en este caso (técnica de la tortuga)
Se pueden colocar semáforos en diferentes lugares de la escuela / hogar como estímulos
discriminativos; de esa manera se harán conscientes de que deberán pararse, pensar y
solucionar pacíficamente sus conflictos, o mejorar su estado emocional.