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Escuela de Sabidurías 2023 (7)

Dr. Gómez (17/2/2023) viernessábadochiquitoyantesdecarnaval emoticón festejando

La penúltima palabra de la clase anterior es de Mirna Sojo:

“Cito de la clase enviada el siguiente párrafo:

<<en la discusión sobre si en el capitalismo, reino del comercialismo según Edgar


Gabaldón Márquez, es así en verdad o es todo lo contrario: que estamos tan atentos a
lo que nos ocurre en lo interior, en lo que sentimos y deseamos como “egoindividuos”,
que se nos olvida la vida de los otros>>

Mira si eso fuera cierto, todo revolucionario no fuera consumista por ejemplo.

Si se tiene claro las sensaciones que producen "adicción", "adicciones", que es lo que
genera todo lo que el capitalismo nos brinda, entonces no seríamos tan ignorantes
sino al contrario, en lo que al individuo y a la sociedad socialista compete se hubiese
frenado ya tanto desvarío que nos viene del exterior.

Bueno esto es un asunto de cada quien y como quiera vivir su ilusión, o si prefiere
conquistarse a sí mismo y comenzar a ponerle coto al asunto que parece sencillo pero
no lo es.

Por eso insisto en el olvido”.

Aclaratoria: Decimos “penúltima palabra”, porque nadie sabe cuál es la última palabra
en una conversación, mucho menos si las y los interlocutores están vivos…Además,
en este tema es larga la culebra haciendo digestión.

Y, para no pecar de olvidadizos, aunque Mirna insista en el olvido, recordamos que


nuestra pregunta generadora es ¿Se descoloniza la memoria o el olvido? Y, en verdad
y sinceramente, no vemos la respuesta por ninguna parte y mucho menos hilvanamos
una respuesta “científica”, pero no os preocupéis que de esas incoherencias e
insuficiencias vive esta escuela y no nos ha ido tan mal en tres años.
Además, estamos seguros de que las y los participantes son cuidadosos con sus
ignorancias y seleccionan muy bien lo que aprenden y eso no es mérito nuestro sino
suyo suyito, así que el muerto al hoyo y el vivo al rollo… ¿o es al bollo?

En clase bancaria-mente-dialógica-mente-bancaria: del timbo al tambo con la


“descolonización” de las ciencias. ¡Todo un temazo!

Pareciera, desde lejos, que no es una moda como las que nos han llegado allende los
mares por más de tres siglos… ¡Una guará!, la propuesta de descolonización de la
ciencia impulsada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología (Mincyt) y esta escuela se
inmiscuirá en esa experiencia valiéndose de que es un asunto “público y notorio” y
todo el mundo tiene derecho a opinar. En palabras más serias: sacar su lengua a
coger Sol.
Claro, como no somos científicos ni tampoco enseñamos ciencias en la escuela, sino
que, a lo mucho, enseñamos sociología eurocéntrica sin que lo supiéramos o, peor
aún, positivismo mediante, porque creíamos que era tan ciencia como las ciencias
“experimentales”, hasta que conocimos los pensamientos de Carlos Marx y se nos
cambió por completo la perspectiva y de “ciencia” pasó a ser simple y llanamente
“ideología”, lo que nos metió en serios problemas, porque…

¿Qué hacíamos con lo habíamos aprendido mientras lo enseñábamos? ¿Qué hacer


con lo “viejo” aprendido que está vivito y coleando en mí mente y en mi entorno
profesional y cómo desplazarlo por lo “nuevo” que estoy aprendiendo? OJO: no valía
el suicidio…

Así nos imaginamos que están las y los docentes de las ciencias experimentales en
las escuelas y universidades incorporados al proceso de descolonización que
promueve y organiza el Mincyt, por lo que intentaremos reflexionar sobre dicha
experiencia, pero, nos limitaremos a aplicar el cuento del gusanito (¿lo recuerdan?) en
el campo de la educación y sus dos sistemas: el educativo y el escolar.

¿Ya lo recordaron? Hablaremos de la pedagogía de la descolonización venezolana


como el marco referencial de todo esfuerzo por descolonizar las ciencias, sean
experimentales o sociales, porque o se comienza por la escuela o vamos para ninguna
parte dando vueltas como el perro antes de mear… ¡Y qué descolonización ni qué
ocho cuartos!

…pero, como es viernessábadochiquito, lo dejaremos hasta aquí, para dejarles una


inquietud que durará hasta que sean las 4:00 pm y comience cada cual a prepararse
para los carnavales.

Y SI AÚN HAY COVID-19, SE PONDRÁ UN ANTIFÁZ Y GRITARÁ ¡A QUE NO ME


CONOCES!

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