Está en la página 1de 14

TRASTORNO DE DÉFICIT DE ATENCIÓN CON HIPERACTIVIDAD.

1. Introducción
El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es uno de los trastornos
psiquiátricos más frecuentes en la infancia, ya que afecta entre el 3% y 6% de los niños.
Tiene elevada comorbilidad, ya que con frecuencia aparece acompañado de otros problemas.
Se transmite en familias con un alto componente genético y factores medioambientales no
completamente conocidos. Se han encontrado alteraciones en la estructura, función y
neurotransmisión cerebral en pacientes con TDAH. El tratamiento se basa en un abordaje con
medicación y psicosocial (apoyo escolar y entrenamiento de padres sobre el TDAH y manejo
conductual).
El TDAH es una de las enfermedades mejor y más extensamente estudiadas en medicina, y
hay datos claros sobre su validez como entidad diagnóstica. No hay ningún debate entre
profesionales competentes, bien formados, y que estén al día de los avances científicos, sobre
que el TDAH es un trastorno biológico cerebral, que causa un gran impacto en aquellos que
la sufren.

¿Es el TDAH una enfermedad nueva?


No. El TDAH se describió en 1865 por Hoffman (en el cuento infantil Der Struwwelpeter) y
en 1902 por Still. El médico español Gonzalo Rodríguez-Lafora lo describió a principios del
siglo XX. Se llamó Disfunción Cerebral Mínima, y desde 1950, Síndrome Hipercinético.
Desde 1960 se describe el Síndrome del Niño Hiperactivo y recientemente se detectó el
aspecto del déficit de atención. En la clasificación Americana DSM-III (1980) se cambia el
nombre de Reacción Hipercinética de la Infancia a Trastorno por Déficit de Atención (con o
sin Hiperactividad) (TDA con H, TDA sin H), poniendo más énfasis en la inatención y la
impulsividad. Desde el DSM-IV (1994), el síndrome se llama TDAH y hay tres subtipos:
combinado, inatento e hiperactivo-impulsivo.

2. Concepto (Autores) (Kary)

El TDAH es el trastorno psiquiátrico más frecuente en la infancia, y el motivo más frecuente


de consulta en los servicios de salud mental en niños. También es bastante frecuente en las
consultas de pediatría, y su frecuencia es muy alta en los alumnos que tienen fracaso escolar
y precisan de una evaluación por los servicios de orientación pedagógica de los colegios. En
estudios realizados en población general se ha calculado que afecta aproximadamente al 2 –
12% de los niños, con una media de aproximadamente del 5%. Estas variaciones en la cifra
de prevalencia se deben a que existen diferencias importantes en terminología, definición del
síndrome, y metodología entre los distintos criterios utilizados para hacer el diagnóstico de
TDAH.

¿Qué es el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad o TDAH?


El TDAH es un trastorno psiquiátrico de origen biológico, a nivel cerebral, y con transmisión
genética, que afecta a la capacidad del niño, adolescente o adulto de:
a) regular su nivel de actividad, por lo que tienen hiperactividad,
b) inhibir o frenar sus ideas, pensamientos o comportamiento, por lo que tienen
impulsividad, y
c) prestar atención a las acciones que realizan, por lo que sufren inatención.
El niño con TDAH tiene gran dificultad o incapacidad para prestar atención y concentrarse,
presenta un nivel alto de actividad inadecuado para su edad, se distrae muy fácilmente y es
muy impulsivo.

¿Cómo se define el TDAH?


El TDAH se define como:
a) un nivel de inatención, o de hiperactividad e impulsividad inadecuado para la edad del
niño,
b) cuyos síntomas empiezan antes de los 7 años de edad,
c) que produce un deterioro importante o afecta negativamente al niño o adolescente, en
al menos dos ambientes de su vida (en casa, en el colegio, con los amigos…),
d) que dura al menos seis meses,
e) que no se debe a otro problema psiquiátrico (por ejemplo: ansiedad, depresión),
f) ni a un problema médico, una sustancia (alcohol, drogas) o a alguna medicación.
Por lo tanto, la presencia de los síntomas no es suficiente; es necesario que los síntomas
tengan un impacto en la vida del niño, en dos ambientes, y que no sea por otra causa
psiquiátrica, médica o tóxica.

3. Características principales (Kary)

Inatención
- Frecuentemente no presta atención a los detalles, o comete errores por descuido en
los deberes del colegio, trabajo u otras actividades.

- Frecuentemente tiene dificultades para mantener la atención en tareas o juegos.

- Frecuentemente parece que no escucha cuando se le habla directamente.

- Frecuentemente no sigue instrucciones, o no termina trabajos del colegio, recados,


tareas, o encargos en el lugar de trabajo (no por causa de comportamiento oposicional o
por no entender las instrucciones).

- Frecuentemente tiene dificultad para organizarse tareas y actividades.

- Frecuentemente evita, no le gusta, o es reacio a hacer tareas que requieren esfuerzo


mental mantenido (como trabajos en el colegio, o los deberes en casa).

- Frecuentemente pierde cosas necesarias para actividades o tareas (juguetes,


deberes del colegio, lápices, libros, herramientas).

- Frecuentemente se distrae con facilidad por estímulos externos.

- Frecuentemente es olvidadizo en sus actividades diarias o rutinarias.

Hiperactividad

- Frecuentemente enreda con manos o pies, o se mueve en su sitio.

- Frecuentemente se levanta en clase o en otras situaciones, cuando debe


permanecer sentado.

- Frecuentemente corre o se sube a sitios de forma excesiva en situaciones en las


que es inapropiado (en adultos o adolescentes, puede ser solamente sensación subjetiva de
inquietud).

- Frecuentemente tiene dificultades para jugar o divertirse en silencio.

- Frecuentemente está en movimiento, o actúa como si estuviera <<con el motor en


marcha>>.

- Frecuentemente habla en exceso.


Impulsividad

- Frecuentemente responde impulsivamente, antes de que se haya completado la


pregunta.

- Frecuentemente tiene dificultades para esperar su turno.

- Frecuentemente interrumpe o se entromete en las actividades de otros (se mete en


conversaciones o juegos).

4. Factores que ayudan a identificar la existencia del trastorno. (Kary)

Existen dos sistemas de clasificación de las enfermedades mentales: el Internacional de la


Organización Mundial de la Salud (CIE – 10: Clasificación Internacional de Enfermedades),
y el Norteamericano (DSM-IV: Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders) de la
American Psychiatric Association (APA). El sistema CIE-10 ha sido históricamente más
usado en Europa que en EE.UU., pero en los últimos 5 años se está imponiendo el DSM-IV y
el concepto más amplio de TDAH en prácticamente todo el mundo. La CIE-10 emplea
criterios más <<estrictos>> por lo que deja a algunos niños sin diagnosticar. Además, la CIE-
10 no distingue los subtipos de TDAH.

Las diferencias en los criterios diagnósticos del trastorno hipercinético de la CIE-10 y del
TDAH del DSM-IV dificultan la comparación de resultados de los distintos estudios. Para
diagnosticar un trastorno hipercinético, la CIE-10 requiere que el paciente presente al menos
6 síntomas persistentes de inatención y 3 síntomas de hiperactividad y un síntoma de
impulsividad presentes en más de un ambiente de la vida del niño. Por lo tanto, para hacer un
diagnóstico CIE-10 son obligatorios al menos 10 síntomas de los 3 dominios. Sin embargo, el
DSM-IV define el TDAH de una forma más amplia. Para el diagnóstico se requiere la
presencia de 6 síntomas de inatención o 6 de hiperactividad/impulsividad, para los tipos
inatento o hiperactivo/impulsivo. Alternativamente requiere síntomas en ambas áreas (6
síntomas de cada grupo) en el tipo combinado. Los síntomas deben estar presentes antes de
los 7 años al menos en 2 ambientes de la vida del niño, y durar al menos 6 meses.

Como se puede observar, el trastorno hipercinético descrito en la CIE-10 define un síndrome


más grave y menos frecuente, ya que precisa de 10 síntomas de inatención, hiperactividad e
impulsividad, y el DSM-IV un síndrome con tres posibles tipos: hiperactivo/impulsivo (6
síntomas), inatento (6 síntomas) o combinado (12 síntomas). En el DSM-IV existe la
posibilidad, no contemplada de la CIE-10, de que un niño con TDAH tipo inatento pueda no
tener ningún síntoma de hiperactividad/impulsividad. Por ello, si se siguen los criterios CIE-
10, es más probable que los niños con TDAH de tipo inatento queden por debajo del umbral
diagnóstico y su trastorno quede sin detectar, produciéndose así un falso negativo (menor
sensibilidad y mayor especificidad). Por otro lado, al usar criterios DSM-IV es más probable
diagnosticar las formas de hiperactividad e inatención leves (teóricamente <<normales>>
para la edad) como TDAH, con mayor riesgo de obtener falsos positivos en el diagnóstico
(menor especificidad y mayor sensibilidad).

Es importante manejar y conocer las diferencias entre la nomenclatura CIE-10 y DSM-IV


cuando se lee la literatura médica. Este conocimiento de las posibles ventajes, limitaciones y
diferencias de los dos sistemas es más útil que muchas discusiones sobre cuál de las dos es la
<<correcta>>.

Por lo general, la prevalencia del TDAH, si se usan criterios DSM-IV, es del 5% de los niños
en edad escolar (rango del 2,2 al 12%). A pesar de las controversias, algunas interesadas, está
claro que no se trata de un trastorno solamente americano ni de una <<enfermedad
cultural>>. Además de los estudios en EE.UU. hay evidencia sobrada de que el TDAH tiene
validez transcultural, y una prevalencia importante en países tan diferentes culturalmente de
EE.UU. como Nueva Zelanda, China, India y Alemania, por lo que se puede estimar que la
prevalencia real del TDAH según diversos estudios epidemiológicos que emplean diferentes
criterios diagnósticos estará probablemente entre el 2 y el 12%. Hay estudios que identifican
prevalencias del 9,6 % en Alemania, del 3,7 % en Suecia, del 6% en España, del 17% en
Colombia, y del 9% en Hong-Kong. Las diferencias de prevalencia dependen, como hemos
visto, del uso de criterios CIE-10 o DSM-IV y también del modo de hacer el diagnóstico: con
evaluaciones clínicas (la forma más fiable), con cuestionarios de profesores y también padres,
o sólo cuestionarios de padres o profesores, pero no de ambos.

¿Cómo se diferencia el TDAH de la actividad elevada o despistes característicos de los


niños pequeños?

Algunos síntomas del TDAH se pueden confundir con características normales. Pero en niños
sanos, al crecer y pasar de educación infantil a primaria, los síntomas suelen disminuir. Lo
más importante que nos hará distinguir entre un niño con TDAH y un niño sin TDAH es la
cantidad e intensidad de los síntomas y su permanencia en el tiempo y en diferentes
situaciones. En el TDAH, los síntomas son muchos (no uno o dos solamente), de intensidad
alta e interfieren con la vida diaria; están presentes en varias situaciones (no solo en casa o
solo en el colegio) y son inadecuados para la edad del niño. Es decir, lo que puede ser
frecuente y normal a una edad no lo es a otra. Por ello, frecuentemente a los padres de niños
con TDAH les dicen que son “inmaduros” y que ya madurarán, pero los síntomas siguen año
tras año. En niños sin TDAH, estos síntomas mejoran con el tiempo, o con un poco de
dirección por parte de los padres y profesores. Así, un niño que en educación infantil no se
mantiene sentado, va mejorando y ya en primaria permanece sentado sin problemas. Sin
embargo, los niños con TDAH parece que no aprenden cosas elementales (sentarse,
preocuparse de hacer sus tareas, acordarse de su material, pedir permiso y no interrumpir). Al
contrario que sus compañeros, que al principio de curso pueden tener problemas similares, se
van quedando atrás, no sólo en conocimientos, sino también en comportamientos. Los niños
con TDAH suelen ser detectados pronto por padres y profesores, que ven que algo va mal.

5. Edades donde es más probable que se presente (Isa)

El TDAH se presenta antes de los 7 años de edad. Más del 80% de los niños continuarán
presentando problemas en la adolescencia, y entre el 30-65% en la edad adulta.

6. Causas (Isa)

No tiene una sola causa. El TDAH se origina como consecuencia de múltiples causas que se
dan a la vez en el niño.
causas más importantes del TDAH:
● Causa genética.
● bajo peso al nacer.
● gran adversidad psicosocial.
● consumo de cigarrillos durante el embarazo.
● consumo de alcohol.

POSIBLES CAUSAS:
● No ejercen normalmente las funciones ejecutivas
● cuentan con menor actividad en la zona prefrontal del cerebro.
como efecto de lo anterior, afecta al aprendizaje.

7. Cómo afecta al aprendizaje (Isa)


El TDAH tiene efecto muy negativo sobre el que lo padece a largo plazo y si no se trata
correctamente, produce una disminución del fracaso escolar, esto dificulta su paso a cursos
superiores, si pasan curso, no dominan la materia anterior y la base de conocimientos del niño
se hace cada vez endeble. Los síntomas derivados del TDAH dificultan el aprendizaje del
niño que los padece, ya que influyen directamente en la atención y hace que su cerebro
estructure los contenidos asimilados de manera diferente. Esto implica que el alumno con
TDAH tenga problemas en diferentes tareas, como leer, escribir, memorizar, recordar,
escuchar, hablar, deletrear, razonar, organizar la información y aprender las distintas
materias, por lo que se ven perjudicados los siguientes procesos de aprendizaje:

- Los adquiridos por textos.


- Los adquiridos por explicaciones orales y escritas.
- Los que requieren solución de problemas matemáticos.
- Los que requieren de una comprensión de las relaciones entre ideas.

Afecta al desarrollo social y emocional del niño. Debido a los múltiples problemas en las
relaciones con los compañeros por su impulsividad. tienden a tener pocos amigos, pocos
duraderos y las relaciones son menos estrechas. Debido a los fracasos repetitivos en el
colegio, las discusiones con los amigos y con los padres, por malas notas y mal
comportamiento.
son frecuentes los síntomas depresivos (causa-efecto del TDAH).
Algunos niños con TDAH desarrollan:
Comportamientos negativistas.
Desobediencias progresivas.
Desafío a la autoridad
Problemas de conductas mayores.
Abuso de alcohol y drogas.

IMPORTANTE: No es un trastorno “cosmético” o fruto del perfeccionismo de la sociedad,


los niños que no reciben tratamiento correcto suelen alcanzar trabajos o profesiones por
debajo de su capacidad.
8. Tipos de TDAH con sus características (Made)
Existen tres tipos de TDAH:
1.TDAH tipo hiperactivo -impulsivo
2.TDAH tipo inatento
3.TDAH tipo combinado

1. TDAH tipo hiperactivo -impulsivo (el niño solo presenta


hiperactividad e impulsividad), que es muy poco presente.
Los niños con hiperactividad están en constante movimiento y tienen muchas
dificultades para permanecer sentados durante mucho tiempo, se levantan y merodean
sin sentido y hablan sin parar. Le resulta imposible aguantar una clase entera sentados
y quietos. se levanta y dan vueltas por la clase. Cuando están sentados, se mueven
mucho en la silla, enredando con los pies y manos, cambiando de postura, tocándolo
todo, por lo que, con frecuencia, las cosas se le caen al suelo. Son ruidosos, y están
siempre dando golpecitos en la mesa.Los padres cuentan que estos niños mordisquean
y rompen los lápices, dañan bolígrafos, también muerden la ropa o arrancan los hilitos
que sobresalen hasta que los rompen.
Sumado a eso también son impulsivos tienen dificultades para inhibir o modular sus
respuestas o reacciones inmediatas ante las situaciones, No piensan en las
consecuencias de sus actos y directamente hacen lo primero que piensan, lo que se les
pasa por la cabeza. Por eso, en clase responden sin pensar a veces, incluso antes de
que el profesor haya terminado de formular la pregunta, sin pensar realmente en lo
que se le está preguntando. Hacen comentarios inapropiados. Los niños con TDAH no
tienen ese diálogo interior antes de realizar una acción, no valoran las posibilidades ni
las consecuencias de cada acto.

2. TDAH tipo inatento (el niño tiene inatención)


Los niños con inatención tienen muchas dificultades para realizar una misma
actividad durante mucho tiempo. Se aburren enseguida tras unos minutos haciendo la
tarea, empiezan a pensar en otras cosas.
Cometen errores por no prestar atención a los detalles, no mantiene la atención en
tareas largas, parece que no escuchan, tienen dificultad para completar órdenes
complejas (dejan las cosas a medias), evitan las acciones que requieren esfuerzo
mental (dejan los deberes siempre al final), son muy desorganizados, pierden cosas,
son olvidadizos y se distraen con facilidad, los niños con TDAH tipo inatento pueden
pasar inadvertidos en clase porque no molestan. Como este tipo de TDAH es más
frecuente en niñas, hay veces pasan por “ tontas” o “despistadas” se pasan el día
pensando en las musarañas, suelen venir a la consulta en curso más alto de primaria
porque no “molestan” en clase.
Inicialmente no tienen problemas graves con las notas hasta que las clases se hacen
más complicadas y los niños deben ser más autónomos en clase.
En el colegio, si tienen que ir a sacar punta el lápiz, pueden encontrarse por el camino
con otros niños con que los que harán bromas y se distraen; olvidarán que iban a
sacar punta, el profesor le llamará la atención y volverá a su sitio con el lápiz sin
punta, teniendo que volver a levantarse... la inatención hace que cualquier estímulo o
situación que se cruce por el camino del niño le haga perder el norte y olvidarse de lo
que estaba haciendo, dejando las cosas a medias, pues nunca alcanzan el objetivo
final.

3. TDAH tipo combinado (el niño presenta los tres síntomas,


hiperactividad, inatención e impulsividad) que es el más
frecuente.

9. Estrategias para ayudar en el proceso de aprendizaje (Made)

1) Establece reglas claras

Entre mayor sea la claridad de las reglas y las expectativas, mayor será la posibilidad
de que un niño o niña con TDAH las comprenda.

El conjunto de lineamientos debería estar expuesto en un lugar en donde se puedan


leer fácilmente. Del mismo modo, los maestros deben asegurarse de que los niños las
entiendan. Para que sea aún más fácil tenerlas a la mano, un niño con TDAH puede
tener las reglas impresas y pegadas en su escritorio. Si el adulto a cargo o profesor
nota que al niño le cuesta gestionar los tiempos, es conveniente que establezca señales
verbales, corporales o que haya un cronómetro para indicar cuántos minutos quedan
para una actividad.
2) Evita las distracciones

Si hay un niño del aula que se va a distraer, ese es el niño con TDAH.

Entre las estrategias de aprendizaje para niños con déficit de atención, una que parece
obvia, pero no lo es, consiste en evitar y, de ser posible, eliminar las distracciones.
Esto no es sencillo de lograr porque los niños ya tienen tendencia de por sí a las
distracciones. Sin embargo, al niño con TDAH conviene sentarlo lejos de las
ventanas, puertas, sacapuntas de uso general y cualquier otro estímulo similar.
También es pertinente evitar los ruidos excesivos y los estímulos visuales. Si es
posible, dedica unos minutos a la escucha de música suave, pues puede ser una buena
alternativa para ayudar a mantener el foco.

3) Refuerza los comportamientos esperados e indícale cuándo cometa los que no


son los adecuados.

Para un niño con TDAH es difícil mantener el foco, pero también lo es tener un
enfoque. Cuando él o ella hagan algo según lo que esperas que suceda, díselo y
reconóceselo. Esta es una forma de aumentar las posibilidades de que el
comportamiento se repita en un futuro. Por el contrario, cuando sea necesario, ten
preparadas las consecuencias que deben seguir posterior a un comportamiento no
deseado. De esta forma podrás actuar más rápido y evitar que escale a mayores.

4) Dales una recompensa por su buen comportamiento

Una estrategia para el TDAH en el aula es proveer recompensas. Estas deben ser
variadas con frecuencia para evitar el aburrimiento.

Si el comportamiento es negativo, no se debe utilizar la pérdida del recreo como una


medida de castigo, tampoco la pérdida de una clase, pues la tarea del profesor es hacer
que el niño siga viendo la escuela como un lugar en el que quiera estar.

5) Las pausas son positivas si se saben administrar. Úsalas a tu favor

Visto que a los niños con TDAH les cuesta permanecer sentados durante mucho
tiempo, pequeñas pausas pueden tener un efecto positivo en su concentración. Por
decirlo de algún modo, es como permitirles que liberen las grandes cantidades de
energía que tienen contenida. Estas pausas activas pueden emplearse en beneficio del
orden en el aula o se pueden hacer con alguna actividad lúdica. He de pedirles que
borren la pizarra, beban agua o que den algunas vueltas alrededor del espacio del aula
es una buena forma de lograrlo.

6) Las normas que establezcan deben ser flexibles

Cuando se trata de estrategias para trabajar con niños con TDAH, el establecimiento
de reglas debe contemplar la flexibilidad como base fundamental, para ellos, las
normas estrictas son complejas de asumir. Si la forma en la que logran concentrarse
para leer es de pie, una norma como la de leer solo en el pupitre, debería ser
flexibilizada. Incluso se puede permitir la utilización de algunos juguetes flexibles que
tengan como propósito ejercitar el movimiento en sus propios asientos.

7) Evita sobrecargar de actividades a un niño con TDAH

Los niños con TDAH tienen problemas para cumplir con muchas asignaciones y para
pasar de una a la otra. Exigirles que cumplan con todos puede hacerles sentir culpa,
por lo que es conveniente evaluarlos partiendo de otras variables.

8) Promueve el apoyo de otros compañeros

Aunque la idea de comunicarles a todos los integrantes del aula acerca del compañero
con TDAH es contraproducente porque algunos pueden hacerle bullying, sí es
conveniente seleccionar algún compañero que pueda prestarle apoyo.

El compañero de estudio debería reunir una serie de atributos como empatía y


comprensión. Normalmente, el alumno indicado para esta labor se muestra maduro y
amable en clase, la experiencia de este tipo de asociaciones suele ser beneficiosa para
ambos, pues los dos conocen una forma de ser y actuar que no les es familiar. El
estudiante disciplinado no suele tener problemas para concentrarse y viceversa.

10. Todo lo que se encuentre (Diana)

¿Se puede curar el TDAH?


Si bien algunos niños parecen "superar" sus síntomas de TDAH, en el sentido de que
parecen luchar significativamente menos con los síntomas a medida que crecen, no
hay evidencia de que el trastorno se pueda curar. El tratamiento, ya sea médico o
conductual, puede ayudar a un individuo a manejar sus deficiencias, pero no hace que
las causas subyacentes de la falta de atención o la hiperactividad desaparezcan. E
incluso entre los niños que "superan" los síntomas, los retrasos en el desarrollo
temprano y los contratiempos académicos pueden crear problemas duraderos.

Factores que inciden (Diana)


1-Fumar o Tomar Alcohol en el Embarazo
La exposición fetal al tabaco es un factor que podría influir también en el desarrollo
de niños con TDAH. Un feto expuesto a tabaco es 2.4 veces más propenso a nacer con
TDAH.
Además, los fetos expuestos a alcohol, pueden contraer el efecto del síndrome de
alcohol, que tiene síntomas muy parecidos a los del TDAH

2.-Conservadores en Comidas
Muchos países han prohibido los conservadores en la comida, ya que han sido
relacionados directamente con la hiperactividad en niños menores.
También los sabores artificiales y el benzonato de sodio que se encuentran en su
mayoría presentes en comida empaquetada han sido relacionados con cambios en la
conducta y atención en niños pequeños.
Lo mejor es evitar que un niño pequeño consuma este tipo de productos.

3-Azúcar
La azúcar blanca, es muy difícil de procesar en el cuerpo, aunque no se ha podido
encontrar una relación directa en el desarrollo de TDAH, sí se sabe que aumenta la
hiperactividad en niños.
Lo mejor es siempre limitar el consumo de azúcar en niños.

4.-Televisión o Vídeo Juegos


No hay una prueba contundente de que demasiada televisión o vídeo juegos causen
TDAH, pero se sabe que los niños que pasan demasiado tiempo en estos aparatos
presentan síntomas de distracción o falta de atención.
Lo mejor es limitar el tiempo de uso en niños pequeños.

5.-Lesiones en el Cerebro
Una lesión en el cerebro que puede ser por un golpe, un tumor, un derrame cerebral o
una enfermedad. Una lesión de este tipo puede causar problemas de atención o una
pobre regulación motora.
Según estudios, los niños que tienen este tipo de trauma, pueden presentar síntomas
similares al TDAH, pero tampoco se atribuye como una causa directa del desarrollo
de TDAH.

6.- Mala alimentación


Existen estudios que sugieren que los adolescentes con altos consumos de grasas,
azúcar refinada y sodio son el doble de propensos a presentar TDAH. Al igual, otros
estudios muestran que dietas con bajo consumo de omega 3 natural, aumentan los
síntomas del TDAH.
Lo mismo ocurre en niños pequeños, así que si bien no se considera el factor principal
de las causas del TDAH, se sabe que es un factor que puede influir fuertemente en el
aumento o disminución de los síntomas.

7.-Genética
La evidencia de estudios sugiere que el TDAH viene directamente de la genética de
los padres más que por cualquier otro factor que pueda influir en el desarrollo de este.
Un niño es cuatro veces más propenso a desarrollar TDAH si cualquiera de su línea
familiar tuvo o presentó TDAH. Hasta ahora, lo que se sabe es que hay una alteración
de falta o duplicación de ADN.

8.-Exposición a Químicos
Mientras la exposición al tabaco, alcohol y pesticidas pueda ser un problema, las
investigaciones apuntan hacia que hay otros químicos que puedan influir en el
desarrollo de TDAH.
Se han realizado estudios que apuntan hacia otros compuestos de la comida, como el
polifluoroalquilo, presentes especialmente en envases de comida rápida.
Aunque no se tiene la certeza completa de la relación directa de este y otros químicos
en comidas procesadas, lo mejor es mantener una dieta baja en consumo de productos
procesados y alta en productos naturales, tanto para la madre en etapa de embarazo,
como para niños pequeños.
https://www.apnadah.org/web2/bkofwb/docspdf/mj_1359372216.pdf

11. Ejemplos (Diana)


Ejemplos de TDAH (Casos)

REFERENCIAS

https://www.aepap.org/sites/default/files/documento/archivos-adjuntos/tdah_-
_estrategias_recomendadas.pdf

http://www.feaadah.org/es/sobre-el-tdah/datos-y-cifras.htm

● Esperón, C. S., & Suárez, A. D. (2007). Manual de diagnóstico y tratamiento del


TDAH. Editorial Médica Panamericana.
● Esperón, C. S. (2008). Convivir con Niños y Adolescentes con Trastornos por Déficit
de Atención e Hiperactividad (TDAH). Editorial Médica Panamericana.
● 403 Forbidden. (s. f.). Psychology Today.
https://www.psychologytoday.com/es/fundamentos/tdah/causas-del-tdah
● Araujo, E. (2022, 12 junio). 8 Estrategias en el aula para niños con TDAH. Chile
Psicólogos. https://chilepsicologos.cl/estrategias-en-el-aula-para-ninos-con-tdah
● Ejemplos de TDAH (Casos). (s. f.). https://www.ejemplos.co/5-ejemplos-de-tdah-
casos/
● Destreza, C. (2019, 22 julio). 12 Factores que Influyen el Desarrollo del TDAH.
Destreza. http://www.destreza.com.mx/12-factores-que-influyen-el-desarrollo-del-
tdah/
● Rickel, A. U. (2008b). Trastorno por déficit de atención con hiperactividad en niños
y adultos (1.a ed.). Editorial El Manual Moderno.

También podría gustarte