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Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH)

¿Qué es el TDAH?

El trástorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), es un trástorno


crónico del neurodesarrollo que afecta al 11% de los niños en edad escolar. Los
síntomas continúan hasta la edad adulta en más de 3 de 4 casos. Se caracteriza
por niveles inapropiados de falta de atención, impulsividad e hiperactividad.

Las personas con el TDAH pueden tener problemas para prestar atención,
controlar conductas impulsivas (podrían actuar sin pensar en el resultado de sus
acciones) o pueden ser demasiado activos. Aunque el TDAH no tiene cura, se
puede controlar eficazmente y algunos síntomas pueden mejorar a medida que el
niño va creciendo.
Tipos:

• Presentación en la que predomina la falta de atención: Es difícil para la


persona organizarse o terminar una tarea, prestar una atención a los detalles o
seguir instrucciones o conversaciones. La persona se distrae fácilmente o se
olvida de detalles de la rutina diaria.

• Presentación en la que predomina la hiperactividad/impulsividad: La


persona se mueve nerviosamente y habla mucho. Le resulta difícil quedarse
sentada quieta durante mucho tiempo (p. ej., para una comida o mientras hace la
tarea escolar). Los niños más pequeños pueden correr, saltar o trepar
constantemente. La persona se siente inquieta y tiene problemas con la
impulsividad. Una persona que es impulsiva puede interrumpir mucho a otros,
agarrar cosas que les pertenecen a otros o hablar en momentos inapropiados. Es
difícil para la persona esperar su turno o escuchar instrucciones. Una persona con
impulsividad puede tener más accidentes y lesiones que los demás.

• Presentación combinada: Los síntomas de los dos tipos anteriores están


igualmente presentes en la persona.

Dado que los síntomas pueden cambiar con el paso del tiempo, la presentación
también puede cambiar con el tiempo.
Causas del TDAH

Los científicos estudian las causas y los factores de riesgo para intentar encontrar
mejores maneras de manejar y reducir las probabilidades de que una persona
tenga TDAH. Se desconocen las causas y los factores de riesgo del TDAH, pero
investigaciones actuales muestran que la genética tiene un papel importante.

Además de la genética, los científicos están estudiando otras causas y factores de


riesgo posibles que incluyen los siguientes:

 Lesión cerebral
 Exposición ambiental (p. ej., al plomo)
 Consumo de alcohol o tabaco durante el embarazo
 Parto prematuro
 Bajo peso al nacer

Los resultados de investigaciones no respaldan las opiniones populares de que el


TDAH se origina por comer demasiada azúcar, ver demasiada televisión, por las
técnicas de crianza o por factores sociales y ambientales, como la pobreza o el
caos familiar. Por supuesto, muchas cosas, incluidas estas, podrían empeorar los
síntomas, especialmente en ciertas personas, pero no hay suficientes datos de
peso como para concluir que son las causas principales del TDAH.

Diagnóstico

Decidir si un niño tiene TDAH es un proceso de varios pasos. No hay un único


examen para diagnosticar el TDAH y hay muchos otros problemas, como la
ansiedad, la depresión y ciertos tipos de trastornos del aprendizaje, que pueden
presentar síntomas similares. Un paso del proceso implica realizar un examen
médico, que incluye pruebas auditivas y de la visión, para descartar otros
problemas con síntomas similares a los del TDAH. Otra parte ydel proceso puede
incluir completar una lista de verificación para calificar los síntomas del TDAH y
recolectar los antecedentes del niño por parte de los padres, maestros y, a veces,
el propio niño.

¿Cómo se diagnostica el TDAH?

Las personas con TDAH muestran un patrón persistente de falta de atención o


hiperactividad/impulsividad que interfiere con el funcionamiento o el desarrollo:

1. Falta de atención: Seis o más síntomas de falta de atención para niños de


hasta 16 años de edad, o cinco o más para adolescentes de 17 años de
edad o más y adultos. Los síntomas de falta de atención han estado
presentes durante al menos 6 meses y son inapropiados para el nivel de
desarrollo de la persona:

 A menudo no logra prestar adecuada atención a los detalles o comete


errores por descuido en las actividades escolares, en el trabajo o en otras
actividades.
 A menudo tiene problemas para mantener la atención en tareas o
actividades recreativas.
 A menudo pareciera que no escucha cuando se le habla directamente.
 A menudo no cumple las instrucciones y no logra completar las actividades
escolares, las tareas del hogar o las responsabilidades del lugar de trabajo
(p. ej., pierde la concentración, se desvía).
 A menudo tiene problemas para organizar tareas y actividades.
 A menudo evita, le disgustan o se niega a hacer tareas que requieren
realizar un esfuerzo mental durante un periodo prolongado (como las
actividades o las tareas escolares).
 A menudo pierde cosas necesarias para las tareas y actividades (p. ej.,
materiales escolares, lápices, libros, herramientas, billeteras, llaves,
papeles, anteojos, teléfonos celulares).
 A menudo se distrae con facilidad.
 A menudo se olvida de las cosas durante las actividades diarias.

2. Hiperactividad e impulsividad: Seis o más síntomas de


hiperactividad/impulsividad para niños de hasta 16 años de edad, o cinco o
más para adolescentes de 17 años de edad o más y adultos. Los síntomas
de hiperactividad/impulsividad han estado presentes durante al menos 6
meses al punto que son perjudiciales e inapropiados para el nivel de
desarrollo de la persona:

o A menudo se mueve nerviosamente o da golpecitos con las manos o


los pies, o se retuerce en el asiento.
o A menudo deja su asiento en situaciones en las que se espera que
se quede sentado.
o A menudo corre o trepa en situaciones en las que no es adecuado
(en adolescentes o adultos puede limitarse a una sensación de
inquietud).
o A menudo no puede jugar o participar en actividades recreativas de
manera tranquila.
o A menudo se encuentra “en movimiento” y actúa como si “lo
impulsara un motor”.
o A menudo habla de manera excesiva.
o A menudo suelta una respuesta antes de que se termine la pregunta.
o A menudo le cuesta esperar su turno.
o A menudo interrumpe a otros o se entromete (p. ej., se mete en
conversaciones o juegos).

Además, se deben cumplir las siguientes condiciones:

 Varios de los síntomas de falta de atención o hiperactividad/impulsividad se


presentaron antes de los 12 años de edad.
 Varios de los síntomas se presentan en dos o más contextos (como en el
hogar, la escuela o el trabajo; con amigos o familiares; en otras
actividades).
 Hay indicios claros de que los síntomas interfieren con el funcionamiento
social, escolar y laboral, o que reducen su calidad.

Los síntomas no tienen una explicación mejor si se los asocia a otro trastorno
mental (como trastorno del humor, trastorno de ansiedad, trastorno disociativo
o trastorno de la personalidad). Los síntomas no ocurren solo durante el curso
de episodios de esquizofrenia u otro trastorno sicótico.

¿Cómo se trata el TDAH?

El tratamiento de TDAH requiere a menudo intervenciones médicas,


esucativas, conductuales y psicológicas. Éste metodo integral de tratamiento
aveces se denomina “multimodal” y dependiendo la edad de la persona con
TDAH, puede incluír lo siguiente:

 Educación de los padres


 Medicamentos
 Capacitación de habilidades
 Asesoramiento
 Terapia conductual
 Apoyo educativo
 Educación sobre el TDAH

¿Sabía usted...?
La capacitación de los padres en la terapia conductual también se conoce como terapia conductual
de los padres, capacitación en manejo del comportamiento para padres, capacitación conductual
para padres, terapia del comportamiento para padres o simplemente capacitación para padres.

Hay muchos famosos que han confesado estar diagnosticados de TDAH: Magic


Johnson (jugador de la NBA), Michael Jordan (jugador de la NBA), Bill Gates, Will
Smith (actor)

¿Qué empeora el TDAH?


Los principales problemas asociados al TDAH se reflejan en: la relación con los
compañeros, baja autoestima, alteraciones de conducta, consumo de sustancias,
marginalidad o fracaso escolar. Esto implica que el diagnóstico precoz es
fundamental para que la evolución sea favorable y el pronóstico sea bueno.

¿Qué ventajas tiene tener TDAH?


Las personas con TDAH obtenían puntajes más altos en creatividad y en logros
creativos que las personas sin TDAH. Las personas con TDAH preferían generar
ideas nuevas mientras que las personas sin TDAH preferían clarificar problemas y
desarrollar las ideas.
Con el TDAH las emociones pueden ser más intensas y entorpecer la vida diaria. 
Las metas de la terapia del comportamiento son aprender o fortalecer los
comportamientos positivos y eliminar los comportamientos no deseados o
problemáticos. La terapia conductual puede incluir capacitación en terapia
conductual para los padres, terapia conductual con los niños o una combinación
de ambas. Los maestros también pueden utilizar terapia conductual para ayudar a
reducir las conductas problemáticas en el aula.

 En la capacitación de los padres, los padres aprenden nuevas habilidades o


fortalecen las habilidades que ya tienen para enseñarles a sus hijos y
guiarlos, y para manejar su conducta. Se ha demostrado que la
capacitación de los padres en terapia conductual fortalece la relación entre
padres e hijos, y disminuye las conductas negativas o problemáticas de los
niños. La capacitación de los padres en terapia conductual también se
conoce como capacitación en manejo del comportamiento para padres,
capacitación conductual para padres, terapia del comportamiento para
padres o simplemente capacitación para padres.

 En la terapia conductual con los niños, el terapeuta trabaja con los niños
para que aprendan nuevas conductas que reemplacen las que no funcionan
o las que causan problemas. El terapeuta también puede ayudar a los niños
a aprender a expresar sus sentimientos de maneras que no generen
problemas para ellos ni para otras personas.
Terapia conductual para niños pequeños: Capacitación de los padres

La AAP recomienda que los médicos indiquen terapia conductual como la primera
línea de tratamiento para los niños en edad prescolar (4-5 años de edad) con
TDAH. La eficacia de este tipo de capacitación está bien fundamentada, pero los
maestros y los cuidadores de niños pequeños también pueden utilizar la terapia
conductual en el aula.

¿Por qué deben los padres intentar primero la terapia conductual antes de
tratar con algún medicamento?

La terapia conductual es un primer paso importante por lo siguiente:

 La terapia conductual les da a los padres las habilidades y estrategias para


ayudar a su hijo.
 La terapia conductual ha demostrado ser tan eficaz como los medicamentos
para tratar el TDAH en niños pequeños.
 Los niños pequeños tienen más efectos secundarios por los medicamentos
para el TDAH que los niños mayores.
 No se han estudiado bien los efectos a largo plazo de los medicamentos
para el TDAH en los niños pequeños.

Antecedentes

Las posiciones de los primeros clínicos de la psiquiatría como Esquirol darían una
escasa cabida al trastorno mental entre los niños, puesto que aquel se
conceptualizaba como una alteración de la razón, presupuesto no aplicable según
la época a los niños, en que no existe razón, y suponiendo las alteraciones de
comportamiento como hechos constitucionales en muchas ocasiones.

De forma excepcional para la época, Sir Alexander Crichton (1763-1856), un


médico escocés, escribió sobre una `inquietud mental` muy similar al subtipo
inatento del TDAH. Crichton describe las características de este trastorno, que
incluían la falta de atención y la inquietud en los niños, afirmando que `los muevia
en exceso`. Señaló que los niños afectados eran incapaces de prestar atención en
la escuela y sugirió que estos niños recibieran una de educación especial.
Crichton también mencionó que los síntomas desaparecían por lo general cuando
los pacientes llegaban a la edad adulta.

En 1901 Still describe en las conferencias Goulstonianas un grupo de 43 niños con


lo que se ha denominado la primera descripción clínica moderna del TDAH.

George Still, un pediatra británico, describe una condición que provoca un


comportamiento impulsivo, hiperactivo, desafiante y una falta de atención en
numerosos pacientes. Debido a que estos pacientes tenían niveles normales de
inteligencia, Still todavía pensaba que los comportamientos `inaceptables` fueron
causadas por un `defecto en el control moral`.

Entre 1917 y 1918 debido a las epidemias de encefalitis, muchos pediatras


notaron un aumento en el número de pacientes que presentaban síntomas de
hiperactividad, falta de concentración e impulsividad. Éstos decidieron que dichos
comportamientos son el resultado del daño cerebral de la encefalitis, una
enfermedad que causa inflamación del cerebro. Sin embargo, a medida que los
niños afectados crecieron, los médicos descubrieron que la mayoría de ellos eran
en realidad muy inteligentes. Ellos cambiaron el nombre del estado a `daño
cerebral mínimo`.

El trastorno con síntomas similares al TDAH apareció por primera vez en la (APA)
de la American Psychiatric Association `Manual de Diagnóstico y Estadístico de
los Trastornos Mentales (DSM)` en 1968. Se llama `reacción hipercinético de la
infancia`, que se consideraba el principal síntoma de hiperactividad.

Ritalin, un medicamento estimulante que se había introducido a mediados de la


década de los 50, llegó a ser ampliamente utilizado para tratar a los pacientes
hiperactivos. Profesionales de la salud mental creían que la hiperactividad era una
condición de la infancia de los pacientes que eventualmente se supera.

Durante la década de 1970, la investigación académica y médica comenzó a


enfocarse en los síntomas de inatención del TDAH como comportamiento. Las
doctoras Virginia Douglas y Susan Campbell determinaron que la falta de
atención, de soñar despierto y la falta de concentración estaban relacionados con
la impulsividad verbal, física y cognitiva. La versión de 1980 del DSM incluye
conjuntos de criterios para el diagnóstico del TDAH con y sin hiperactividad.

A finales de 1980, los investigadores cambiaron su enfoque lejos de la falta de


atención e introdujeron la teoría de que el TDA coluyendo que estaba causada por
el cerebro o por la `traducción` incorrecta de recibir la información que recibía el
niño. La APA cambió el nombre del trastorno `de déficit de atención con
hiperactividad` (TDAH), y define tres subtipos principales: el subtipo
predominantemente inatento, predominantemente hiperactivo-impulsivo y el
subtipo de un subtipo combinado. Aunque la Asociación Médica Americana (AMA)
ha declarado que el TDAH es el trastorno más ampliamente investigado de la
conducta y que la causa exacta del TDAH sigue siendo desconocida.

La revisión de la historia conceptual del TDAH permite establecer una larga


tradición en la observación y estudio del TDAH y trastorno hipercinético.

La prevalencia del TDAH a nivel mundial es alta. Los estudios epidemiológicos


muestran que 3 a 5% de los niños en edad escolar pueden recibir este
diagnóstico. En México se estima que hay aproximadamente 33 millones de niños
y adolescentes, de los cuales 1.5 millones podrían ser diagnosticados con TDAH.
A continuación, les relataré la historia de un niño con TDAH, para que ustedes
puedan darse cuenta de lo que podría suceder al no recibir tratamiento.

***

Carlos nació en Trujillo, el 29 de agosto de 1988. Fue el segundo de los tres hijos
de Juan y Mayra, comerciantes del lugar. Desde pequeño, Carlos fue un bebé muy
inquieto. Mayra decía que “desde que estaba en el vientre pateaba y saltaba”. Le
dieron pecho por un año, caminó y habló igual que sus hermanos.

Infancia

A los cuatro años cayó a una piscina donde por poco se ahoga por andar
corriendo sin cuidado. En dos ocasiones se lastimó: una vez se rompió el brazo
derecho y la otra se abrió la cabeza con una puerta de vidrio. La maestra de inicial
les dijo que “Carlitos” era muy inquieto y extrovertido y que deberían llevarlo a
terapia.

Durante los primeros cuatro años de primaria, la conducta de Carlos fue regular y
sacaba buenas calificaciones, siempre estudiaba y hacía las tareas a punta de
golpes de Mayra. A principios de quinto grado, Carlos fue expulsado por desafiar a
la maestra y aventarle el lapicero cuando ella le gritó. Concluyó quinto y sexto
grado en otra escuela donde los problemas de impulsividad, oposición y desafío
empeoraron. Por eso es que Carlos entró a “terapia”, acudía una vez a la semana,
pero la abandonó después de 4 meses “pues la verdad era muy cara y funcionaba
poco”, según su mamá.

Adolescencia
Mayra dejó de apoyar a Carlos por recomendación de los profesores de
secundaria, pues “ya no era un niño”. Fue un calvario. Cada año estudió en
escuelas diferentes, las quejas fueron las mismas: no se concentraba en clase,
interrumpía a sus profesores, molestaba a los compañeros, no hacía ni entregaba
tareas. El director en tercero de secundaria pidió que “ya no asistiera el último mes
de clases”.

Carlos acordó con sus padres, Juan y Mayra ir al colegio no escolarizado y lo


terminó en 5 años. En ese tiempo conoció a sus nuevos amigos, muchachos del
mismo colegio que le presentaron al “Alo” (alcohol) y a la “Mary” (marihuana).
Carlos se hizo amigo íntimo de estos dos y por las tardes era usual que pidiera
permiso para visitarles.

Una tarde de domingo, cuando sus padres miraban la televisión, tocaron el timbre
de la casa. Era la Vero, vecina del lugar, quien llevaba un bebé de un mes de
edad, el hijo de Carlos, para que le conocieran. Juan y Mayra acordaron obligar a
Carlos a trabajar para mantener a la criatura. Así, todos los días por la tarde,
Carlos atendía la tienda familiar. Carlos se sentía muy presionado con el colegio,
el trabajo y su hijo, tomaba y se drogaba cada fin de semana. Entonces, un
sábado cuando estaba de parranda, se accidentó y tuvo que quedarse en el
hospital por tres semanas.

Adultez

Fue entonces que el compadre Checo lo invitó a Lima, ya tenía 20 años y


finalmente había concluido el colegio. Aprendió a ser “barman” y era bueno, lo
malo es que no duraba. Llegó a trabajar en ocho bares en cinco años. En el último
bar conoció a su amigo el Gringo, quien lo invitó a llevar “pasta” (cocaína) al “otro
lado”. El negocio fue bueno por varios años hasta que le metieron en “cana”.

Ayer Carlos cumplió 30 años de edad y uno en la “sombra” de los 20 que pasará.
No ha visto a su hijo en cinco años y no sabe de él. Una vez al año lo visita Mayra,
su madre.

¿Y Juan, la Vero, el Gringo, el Alo y la Mary? Pues se olvidaron de él.

Hipótesis:

Es importante señalar que el desconocimiento por padres de familia sobre este


padecimiento neurológico y sus causas desencadenan una ruptura afectiva hacia
el hijo que padece este trastorno. Que por falta de información, en ocasiones
sufren de violencia verbal no solo por parte de sus familias sino también por parte
de su profesor (a). Es importante conocer como se genera la reacción cuando los
padres se enteran del fracaso escolar de su hijo (a) no se debe al mero descuido e
indiferencia del niño sino a factores genéticos que contrarrestan y canalizan de
manera distinta sus habilidades, más aún aquellas enfocadas en la concentración.
Es importante que los padres actúen de manera pacífica y no culpando a sus hijos
de ello. Muchos de los padres renuncian a educar a sus hijos o modifican la
instrucción hacia ellos implementando castigos inapropiados que que pueden
ocasionar daños significativos en la autoestima del niño.

Hipótesis Psicosocial:

Los factores psicosociales no han tenido un papel prioritario dentro de las


hipótesis etiológica, aunque no podemos descuidarlas ya que muestran su
importancia dentro del trastorno.
En familias con hijos con TDAH, se encuentran distintas relaciones padres-hijos y
disfunciones familiares. Los conflictos en la interacción con la madre son más
comúnes en los niños pequeños con TDAH que con niños más grandes. En las
familias con adolescentes TDAH, éstos muestran más desobediencia y
verbalizaciones negativas en familias con niños TDAH que con niños sin este
trastorno. Éstos factores psicosociales se tienden a asociar primero con el
desarrollo del trastorno de conducta desafiante-oposicionista y al trastorno de
conducta más que a los síntomas principales del TDAH.

Conclusión Personal:
Es un trastorno más común de lo que parece, pero aún desconocido, nos
hace falta difundir y concientizar en la sociedad información de éste, lo
vemos mucho en las escuelas y pensamos que sólo es falta de educación,
y tendemos a juzgar, cuando en realidad es un problema neurológico, en
lo personal convivo muy cercanamente con una persona con TDAH, y
tenemos que ser pacientes, para poder entender que es su
comportamiento natural, pero es divertido cuando aprendes a verlo desde
una perspectiva diferente.

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