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1. DEFINICIÓN Y CLASIFICACIÓN
2. SIGNOS – SINTOMAS
No hay un único examen para diagnosticar el TDAH y hay muchos otros problemas, como la
ansiedad, la depresión y ciertos tipos de trastornos del aprendizaje, que pueden presentar
síntomas similares.
SIGNOS
1.- Falta de atención
2.- Hiperactividad e impulsividad
SINTOMAS
Es normal que a los niños les cueste concentrarse y comportarse bien de vez en cuando. Sin
embargo, los niños con TDAH no van dejando atrás esas conductas a medida que crecen. Los
síntomas continúan y pueden provocar dificultades en la escuela, el hogar o con los amigos.
Un niño con TDAH puede presentar las siguientes conductas:
● Fantasear mucho.
● Olvidar o perder las cosas con mucha frecuencia.
● Retorcerse o moverse nerviosamente.
● Hablar mucho.
● Cometer errores por descuido o correr riesgos innecesarios.
● Tener problemas para resistir la tentación.
● Tener problemas para respetar turnos.
● Tener dificultades para llevarse bien con otros.
3. DIAGNÓSTICO Y PRONOSTICO
Los profesionales de atención médica utilizan las pautas de la quinta edición del Manual
diagnóstico y estadístico (DSM-5), de la Asociación Estadounidense de Siquiatría (American
Psychiatric Association)1 para diagnosticar el TDAH. Este estándar de diagnóstico ayuda a
garantizar que el diagnóstico y tratamiento de las personas con TDAH se realice de manera
correcta. El uso del mismo estándar en todas las comunidades también puede ayudar a
determinar cuántos niños tienen TDAH y qué impacto tiene esta afección en la salud pública.
Criterios del DSM-5 para el TDAH
Las personas con TDAH muestran un patrón persistente de falta de atención o
hiperactividad/impulsividad que interfiere con el funcionamiento o el desarrollo:
1.- Falta de atención: Seis o más síntomas de falta de atención para niños de hasta 16 años de
edad, o cinco o más para adolescentes de 17 años de edad o más y adultos. Los síntomas de
falta de atención han estado presentes durante al menos 6 meses y son inapropiados para el
nivel de desarrollo de la persona:
- A menudo no logra prestar adecuada atención a los detalles o comete errores por
descuido en las actividades escolares, en el trabajo o en otras actividades.
- A menudo tiene problemas para mantener la atención en tareas o actividades
recreativas.
- A menudo no cumple las instrucciones y no logra completar las actividades escolares,
las tareas del hogar o las responsabilidades del lugar de trabajo (p. ej., pierde la
concentración, se desvía).
- A menudo tiene problemas para organizar tareas y actividades.
- A menudo evita, le disgustan o se niega a hacer tareas que requieren realizar un
esfuerzo mental durante un periodo prolongado (como las actividades o las tareas
escolares).
- A menudo pierde cosas necesarias para las tareas y actividades (p. ej., materiales
escolares, lápices, libros, herramientas, billeteras, llaves, papeles, anteojos, teléfonos
celulares).
- A menudo se distrae con facilidad.
- A menudo se olvida de las cosas durante las actividades diarias.
4. TRATAMIENTO
Los tratamientos estándar para el TDAH en los niños incluyen medicamentos, terapia conductual,
asesoramiento y servicios educativos. Estos tratamientos pueden aliviar muchos de los síntomas
del TDAH, pero no lo curan.
4.1. Medicamentos estimulantes
Actualmente, los medicamentos estimulantes (psicoestimulantes) son los más comúnmente
recetados para tratar el trastorno por déficit de atención/hiperactividad. Los estimulantes parecen
elevar y equilibrar los niveles de las sustancias químicas del cerebro llamadas
"neurotransmisores". Estos medicamentos ayudan a mejorar los signos y síntomas de falta de
atención e hiperactividad, a veces de manera eficaz en un período de tiempo breve.
● Anfetaminas. Algunos de estos son dextroanfetamina (Dexedrine), dextroanfetamina-
anfetamina (Adderall XR, Mydayis) y lisdexanfetamina (Vyvanse).
● Metilfenidatos. Algunos de estos son el metilfenidato (Concerta, Ritalin, otros) y el
dexmetilfenidato (Focalin).
La dosis adecuada varía de un niño a otro, por lo que puede llevar algún tiempo encontrar la
dosis correcta. Y la dosis puede necesitar un ajuste si se producen efectos secundarios
significativos o a medida que el niño crece.
4..1.1. Medicamentos estimulantes y ciertos riesgos para la salud
Algunas investigaciones indican que el uso de medicamentos estimulantes para el TDAH en
pacientes con ciertos problemas cardíacos puede ser una preocupación, y el riesgo de ciertos
síntomas psiquiátricos puede aumentar cuando se usan medicamentos estimulantes.
● Problemas de corazón. Los medicamentos estimulantes pueden causar un aumento de la
presión arterial o de la frecuencia cardíaca, pero el aumento del riesgo de efectos adversos
graves o de muerte súbita aún no está comprobado.
● Problemas psiquiátricos. El uso de medicamentos estimulantes rara vez puede aumentar el
riesgo de agitación o síntomas psicóticos o maníacos.
● Otros medicamentos
Otros medicamentos que pueden ser efectivos en el tratamiento del TDAH incluyen los
siguientes:
● Atomoxetina (Strattera)
● Antidepresivos, como el bupropión (Wellbutrin SR, Wellbutrin XL, otros)
● Guanfacina (Intuniv)
● Clonidina (Catapres, Kapvay)
La atomoxetina y los antidepresivos funcionan de manera más lenta que los estimulantes y
pueden tardar varias semanas en hacer efecto por completo.
4.2. Terapia del comportamiento para el TDAH
Los niños con trastorno por déficit de atención/hiperactividad a menudo logran beneficios con la
psicoterapia conductista, la capacitación en habilidades sociales, la capacitación en habilidades
parentales y el asesoramiento, que pueden ser proporcionadas por un psiquiatra, un psicólogo,
un trabajador social u otro profesional de la salud mental. Algunos niños con trastorno por déficit
de atención/hiperactividad también pueden tener otras afecciones como un trastorno de ansiedad
o depresión. En estos casos, el asesoramiento puede ser de ayuda tanto para el trastorno por
déficit de atención/hiperactividad como para el problema coexistente.
Algunos ejemplos de terapias incluyen:
● Psicoterapia conductista. Los maestros y los padres pueden aprender estrategias de
cambio de conductas, tales como sistemas de recompensas simbólicas y técnicas de
"tiempo fuera" o tiempo de reflexión, para lidiar con situaciones difíciles.
● Capacitación en habilidades sociales. Mediante este tipo de capacitación, los niños pueden
aprender comportamientos sociales apropiados.
● Capacitación en habilidades parentales. Mediante este tipo de capacitación, los padres
pueden desarrollar maneras de entender y guiar la conducta de sus hijos.
● Psicoterapia. Esta terapia permite que los niños mayores con trastorno por déficit de
atención/hiperactividad hablen sobre los temas que les molestan, exploren patrones de
conducta negativos y adquieran maneras de lidiar con sus síntomas.
● Terapia familiar. La terapia familiar puede ayudar a los padres y hermanos a enfrentar el
estrés de vivir con alguien que tiene trastorno por déficit de atención/hiperactividad.
Los mejores resultados ocurren cuando se utiliza un enfoque de trabajo en equipo, con maestros,
padres, terapeutas y médicos trabajando juntos.
4.3. Nuevo dispositivo médico
La Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos aprobó un nuevo
dispositivo médico para tratar a los niños con TDAH que tienen entre 7 y 12 años y que no toman
medicamentos recetados para tratar el TDAH. Se llama sistema de estimulación externa del
nervio trigémino (eTNS) de Monarch y solo puede adquirirse con receta.
Aproximadamente del tamaño de un teléfono celular, el dispositivo eTNS se puede utilizar en
casa bajo la supervisión de los padres, cuando el niño está durmiendo. El dispositivo genera
estimulación eléctrica de bajo nivel que se desplaza a través de un cable a un pequeño parche
colocado en la frente del niño y envía señales a áreas del cerebro relacionadas con la atención, la
emoción y el comportamiento.
4.4. Medicina alternativa
Hay poca investigación que indique que los tratamientos de medicina alternativa pueden reducir
los síntomas del TDAH. Antes de considerar cualquier intervención alternativa, habla con tu
médico para determinar si la terapia es segura. Algunos tratamientos de medicina alternativa que
se han probado, pero que aún no se ha probado científicamente, incluyen los siguientes:
● Yoga o meditación. Hacer rutinas regulares de yoga o técnicas de meditación y relajación
puede ayudar a los niños a relajarse y aprender disciplina, lo cual puede ayudarlos a
controlar sus síntomas de TDAH.
● Dietas especiales. La mayoría de las dietas promovidas para el TDAH implican la
eliminación de alimentos que se cree que aumentan la hiperactividad, como el azúcar, y de
alérgenos comunes, como el trigo, la leche y los huevos. Algunas dietas recomiendan
evitar los colorantes y aditivos artificiales de los alimentos. Hasta ahora, los estudios no
han encontrado una relación coherente entre la dieta y la mejora de los síntomas del
TDAH, aunque algunas pruebas anecdóticas sugieren que los cambios en la dieta podrían
marcar una diferencia en niños con sensibilidades alimenticias específicas. El uso de la
cafeína como estimulante para niños con TDAH puede tener efectos riesgosos y no se
recomienda.
● Suplementos vitamínicos o minerales. Aunque ciertas vitaminas y minerales de los
alimentos son necesarios para una buena salud, no hay evidencia de que las vitaminas o
los minerales suplementarios puedan reducir los síntomas del TDAH. Las "megadosis" de
vitaminas, es decir, las dosis que superan con creces la cantidad diaria recomendada
(CDR), pueden ser perjudiciales.
● Suplementos de hierbas. No existe evidencia que sugiera que los remedios a base de
hierbas ayuden con el TDAH, y algunos pueden ser perjudiciales.
● Formulaciones patentadas. Estos son productos compuestos por vitaminas, micronutrientes
y otros ingredientes que se venden como posibles suplementos del tratamiento para niños
con TDAH. Estos productos han tenido poca o ninguna investigación y están exentos de la
supervisión de la Administración de Alimentos y Medicamentos, por lo que es posible que
no sean eficaces o sean perjudiciales.
● Ácidos grasos esenciales. Estas grasas, que incluyen aceites omega-3, son necesarias
para que el cerebro funcione correctamente. Los investigadores todavía están investigando
si estos ácidos pueden reducir los síntomas del TDAH.
● Entrenamiento de neurorretroalimentación. También llamado biorretroalimentación
electroencefalográfica (EEG), en estas sesiones el niño se centra en ciertas tareas
mientras usa una máquina que muestra patrones de ondas cerebrales. Se necesita más
investigación para ver si esto funciona.