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Capítulo XV

Soporte Nutricional
en el Paciente Oncológico

Implicaciones de la cirugía en el enfermo


oncológico
A. Zarazaga Monzón*, A. García de Lorenzo y Mateos** y J.M. Culebras Fernández***
*Departamento de Cirugía. Hospital Universitario La Paz. Madrid
** Servicio de Medicina Intensiva. Hospital Universitario La Paz. Madrid
*** Servicio de Cirugía General. Hospital de León. León

RESUMEN Respecto a la vía utilizada, la dieta o fórmula, y la


duración del soporte, éstas dependerán de las limitacio-
Para poder analizar de qué manera influye el en- nes, físicas o funcionales que el enfermo padezca, en
torno quirúrgico, dentro del contexto nutricional, en el función de la localización del tumor y de su propio de-
paciente oncológico, debemos previamente señalar terioro orgánico.
aquellos factores específicos que lo diferencian, o que Por otra parte, el paciente quirúrgico es sometido
pueden influir de forma negativa, en el desarrollo de la (casi siempre en cirugía oncológica a una gran agresión:
función alimenticia de estos pacientes, en todas y cada las necesidades energético-proteicas se incrementan y
una de sus fases (ingesta, digestión, absorción, síntesis y las reservas orgánicas no son boyantes; si a esto añadi-
degradación). mos la posibles complicaciones, algunas de ellas largo
El paciente tumoral que precisa, en algún momento tiempo mantenidas y tremendamente exigentes en
de su tratamiento, una actuación quirúrgica, debería cuanto a necesidades energéticas se refiere, el cuadro
encontrarse en el momento de esta intervención en la evolutivo, en un paciente malnutrido, se oscurece toda-
mejor situación metabólica, dentro de sus posibilidades, vía más.
y para ello sería preciso evaluarlo nutricionalmente, e Y todo ello sin olvidar algo que por evidente no de-
indicar y aplicar, si fuera preciso, un soporte nutricional bemos soslayar: la cirugía digestiva casi siempre consis-
previo al acto quirúrgico para conseguir este efecto (no te en resecar, total o parcialmente, órganos que tienen
olvidemos el significado de la palabra soporte: apoyo una importante función en el proceso alimentario, y és-
técnico o farmacológico externo, cuando el sistema de te quedará, durante un período de tiempo más o menos
autorregulación orgánico es incapaz de modular el me- largo, cuando no permanentemente, gravemente altera-
tabolismo). do. Es por ello que se requiere establecer vías alternati-
Por tanto, ya existe una característica patognomóni- vas de acceso al tubo digestivo, o en su defecto parente-
ca del paciente quirúrgico: la conveniencia de establecer rales, durante el tiempo en que no se logre conseguir un
un período de soporte nutricional previo al propio tra- balance energético-proteico positivo mediante la ingesta
tamiento (siempre que no consideremos este soporte nu- convencional.
tricional “per se” una parte del tratamiento). Este pro- Pero, en ocasiones, en este tipo de enfermos, estas al-
cedimiento, que denominamos soporte nutricional teraciones se prolongan durante mucho tiempo: en las
preoperatorio, es una parte muy importante dentro de grandes resecciones, el tubo digestivo pierde su “autono-
todo el proceso nutricional perioperatorio (podríamos mía nutricional”, siendo preciso aportar suplementos de
compararlo a otros procesos preoperatorios de probada micro e incluso macronutrientes “de por vida”.
eficacia tales como la profilaxis antibiótica o la anti- En otras ocasiones, tras la cirugía, el paciente pier-
trombótica) de, total o parcialmente, la capacidad para percibir sen-
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saciones que potencian o favorecen la ingesta (olfato, lucionado” hacia su normal regulación y compensa-
gusto, etc.) o, por el contrario, adquiere otras percep- ción y no precisa soporte externo. Pero si la fase de
ciones nocivas (aversiones, etc.), con lo que aquélla va agresión se perpetúa, debido a la patología previa, a
deteriorándose progresivamente. la importancia de la noxa, a la afectación de varios
Finalmente, no olvidemos que con frecuencia la ci- sistemas orgánicos o a diferentes complicaciones,
rugía no es sino una parte, si bien importante, de todo entonces debe ser manipulada para evitar que el pa-
el proceder terapéutico, la aplicación de radioterapia, ciente caiga en situación de Fallo o Disfunción Mul-
quimioterapia adyuvante y/o neoadyuvantes es otra tiorgánico
agresión prolongada y sobreañadida que incrementará Por ello, a lo largo de esta revisión, vamos a ha-
las necesidades en un paciente, que no puede, no quiere cer especial hincapié en las áreas de conocimiento
(porque no le apetece) y no sabe cómo alimentarse co- que se centran tanto en el patrón metabólico de la
rrectamente. agresión y de la neoplasia, en sus mediadores, y en
En este capítulo hablaremos de la fisiología de la do- las necesidades energético-proteicas del paciente
ble agresión: la tumoral y la terapéutica, y de cómo am- sometido a cirugía por tumor. No podemos olvidar
bas pueden influir en la desnutrición y/o caquexia de es- que el futuro del soporte nutro-metabólico de nues-
tos pacientes. Qué procedimientos podemos utilizar tros pacientes se basa tanto en los nutrientes enfer-
para ayudar a estos pacientes con el fin de mejorar su medad-específicos, sistema-específicos u órgano-es-
evolución, sin entrar en recomendaciones, o protocolos pecíficos2, 3 como en los fármacos con efecto
de actuación nutricional motivo de atención particular metabólico.
en otros capítulos de este libro, de la nutrición periope-
ratoria (con sus éxitos y sus fracasos), y de las vías de
aporte recomendables. Trataremos nuevos criterios te- Metabolismo en el paciente oncológico
rapéuticos en una situación específica compleja, tal co-
mo el tratamiento nutricional en fístulas tras dehiscen- La asociación de malnutrición proteico-energé-
cia anastomótica. tica y cáncer tiene una elevada incidencia. El sín-
Finalmente analizaremos aquellas “dificultades” que d rome paraneoplásico se caracteriza por una serie
aparecen en la práctica clínica, durante el estableci- de alteraciones, entre las que se encuentran la pér-
miento del soporte nutricional en todas y cada una de dida de peso involuntaria, la anorexia, las altera-
sus fases (pre y postoperatorio) y que influyen en su ciones metabólicas y las pérdidas tisulares (was-
aplicabilidad, en su efectividad, y, por tanto, en su utili- ting) a las que solemos denominar caquexia
dad para el paciente. cancerosa4. Aunque las causas son diversas, pueden
ser divididas en:
– Reducción de la ingesta (y utilización) de nu-
FISIOPATOLOGÍA EN EL PACIENTE
trientes.
TUMORAL
– Disbalance metabólico.
El conocimiento del metabolismo y, por tanto, Los mediadores de la caquexia primaria (sin etio-
del soporte nutro-metabólico del paciente bajo logía mecánica o funcional) pueden incluir sustan-
agresión1 requiere especial consideración en rela- cias con características hormona-like o productos de
ción tanto a su especificidad como a la existencia de los tejidos del paciente que influyen de una forma
diferencias fisiopatológicas con el más conocido pa- indirecta el metabolismo. Entre estos últimos se in-
trón metabólico del paciente no crítico, o en situa- cluye el FNT-a, la IL-6, y el g-interferón. Además,
ción de ayuno. Ello se hace más complejo cuando también han sido implicados los factores de movili-
diferentes situaciones o patrones metabólicos (agre- zación de los lípidos.
sión vs. tumor) se superponen. Existen claras evidencias de que la depleción
La agresión (sensu lato) se sigue de una fase agu- nutricional causa alteraciones en las funciones in-
da de estimulación neuroendocrina, neuropeptídica munes humorales y celulares, así como en la re s-
y de mediadores lipídicos. Cuando el individuo su- puesta inflamatoria, lo que hace al paciente más
pera espontáneamente esta fase y evoluciona hacia susceptible a una mala cicatrización de las heridas,
la convalecencia, significa que la respuesta ha “evo- a un aumento de las complicaciones infecciosas, a
Implicaciones de la cirugía en el enfermo oncológico 199

íleo postoperatorio prolongado y a mayor estancia Metabolismo y fases de la respuesta a la agresión


hospitalaria.
Independientemente de los efectos locales del La respuesta orgánica al estrés biológico es casi
tumor sobre la ingesta-utilización de nutrientes constante y se acompaña de un número de respues-
(“per se”, o por la respuesta del paciente al tumor), tas metabólicas comunes6.
los problemas nutricionales pueden proceder de al- Clásicamente se ha dividido a la situación de es-
teraciones metabólicas específicas: trés en tres fases consecutivas y bien diferenciadas
– Las células tumorales derivan una parte im- conocidas como: ebb, flow y anabólica7. Actualmente
portante de la energía del metabolismo de la consideramos que un enfoque más realista es el
glucosa a la producción de ácido láctico (ci- considerar que el proceso de la agresión es dinámi-
clo de Cori) más que a la más compleja oxi- co y no obligadamente consecutivo y que desgra-
ciadamente no siempre finaliza con la recuperación
dación a CO2 y H2O. Además, la conversión
del paciente. Por ello dividimos a la respuesta hi-
del láctico a glucosa en la neoglucogénesis
permetabólica en cuatro Fases: Fase I o Aguda que
hepática consume 6 moles de ATP por ciclo
se inicia con la agresión, tiene expresión máxima
de glucosa-lactato, produciendo lo que se
hacia el segundo-tercer día y si la evolución es fa-
conoce como ciclos fútiles o ineficaces. Las
vorable conduce hacia la Fase II o de Recupera-
células tumorales tienen aumentados re q u e-
ción. Ahora bien, si la agresión persiste, o el mane-
rimientos de glucosa como fuente de energ í a ,
jo del paciente es inadecuado, se pasa a la Fase III
tanto a través de actividades enzimáticas al-
o de Reactivación, y si la reactivación de la res-
teradas como en relación a la hipoxia re l a t i-
puesta metabólica se mantiene nos encontraremos
va secundaria a una pobre vascularización
en la Fase IV o de Fallo Orgánico Multisistémi-
tumoral.
co, que frecuentemente se asocia a muerte8, 9.
– El alterado metabolismo de las proteínas se
La situación de agresión se caracteriza por una
relaciona con la captación aumentada de ami-
respuesta hipermetabólica en la que destaca una
noácidos por las células tumorales, por la dis-
acelerada utilización de sustratos10. Puede predomi-
minución de la síntesis proteica, por el au-
nar una alterada situación hormonal que condicio-
mento en la degradación de las proteínas y
na un aumento del flujo de sustratos y, ocasional-
por las altas pérdidas de éstas por fístulas o
mente, una mala utilización de éstos. Esta deficiente
problemas gastrointestinales. Además, el ba-
utilización se verá agravada si el paciente evolucio-
lance nitrogenado negativo está relacionado
na a Fallo Orgánico, situación de difícil manejo,
tanto con la anorexia como con las aumenta-
tanto medicamentoso como metabólico, en la que
das necesidades.
destaca un caótico empleo de los sustratos endóge-
– En lo que respecta al metabolismo lipídico, la
nos y exógenos (tabla I).
situación puede ser tanto de disminución en
Esta situación de hipermetabolismo tiene una
la movilización de los depósitos como de au-
serie de consecuencias. Una de ellas es el obligado
mento para cubrir las necesidades adicionales
aumento en el gasto energético que se manifiesta
de energía.
por incrementos en el consumo de oxígeno, pro-
Sobre las alteraciones metabólicas de pro t e í n a s , ducción de carbónico y acidosis metabólica. En pre-
lípidos e hidratos de carbono debemos re c o rdar sencia de una adecuada distribución de oxígeno, la
que las células cancerosas producen péptidos, oli- producción de energía parece cubrir las demandas
gonucleótidos y otros metabolitos que pueden ser energéticas con un estado redox normal en la mito-
responsables de la génesis de la anorexia/caquexia condria y en el citosol, lo que se refleja en la rela-
por distintos mecanismos: alteración de la sensa- ción lactato/piruvato y en la velocidad de produc-
ción del gusto; efectos neuroendocrinos periféri- ción de cuerpos cetónicos en ausencia de acidosis.
cos; acciones directas centrales hipotalámicas y del La fuente carbonada de la producción energética es
SNC y producción de sustancias hormonales (simi- diferente a la del metabolismo aerobio normal, y
lares a las de los síndromes paraneoplásicos), que ello se caracteriza por una disminución en la oxida-
alteran la ingesta de nutrientes, la absorción y el ción del piruvato y por un aumento en la utilización
metabolismo5. de sustratos energéticos que evitan la glicolisis co-
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síntesis, y se presenta un balance nitrogenado neto


Tabla I
negativo12.
Hipermetabolismo en la situación de estrés
En lo que respecta a la inmunidad, los estudios
ETIOLOGÍA: actuales coinciden en que las perturbaciones inmu-
• Hormonas nológicas en el paciente crítico son extremadamen-
• Citokinas te complejas y pueden afectar a todos los compo-
• Mediadores inflamatorios endógenos nentes de la respuesta inmune13. Aunque son
• Bioproductos metabólicos muchas las anomalías inmunológicas referidas tras
• Prostaglandinas la sepsis, pérdidas hemorrágicas, isquemia e inter-
vención quirúrgica, los mecanismos que producen
PATOGÉNESIS:
estas alteraciones en la función de los linfocitos T y
• Alteración de la termorregulación a nivel central
B no han sido todavía definidas con precisión. El es-
• Consumo de oxigeno por la herida (órgano extra)
• Aumento del G.E. del músculo cardiaco trés fisiológico y la isquemia provocan un incre-
• Aumento del G.E. hepático para reconversión del mento en la liberación de hormonas y péptidos
láctico neuroendocrinos, capaces de afectar el normal fun-
• Costo energético de síntesis y catabolismo proteico cionamiento del equilibrio neuroendocrino-inmu-
• Efecto Q 10: Aumento del 13% G.E. por grado nológico y producir inmunosupresión. La isquemia
temperatura tisular conduce a la producción incrementada de
• Calor latente de evaporación de agua una serie de proteínas procedentes de las células hi-
• Aumento del tono muscular o actividad poperfundidas que son capaces de alterar la función
• O2 molecular: peroxidacion lipídica, radicales libres de los linfocitos T. Igualmente tras la agresión se
• NPT (glucosa, AA)
produce liberación de factores inmunosupresores
séricos, los cuales se muestran responsables de la
PATRÓN:
• Elevado gasto energético inhibición de la función de las células T y B14.
• Elevada excreción de nitrógeno
• Movilización de ácidos grasos y triglicéridos
• Hiperglucemia con hiperinsulinemia Cálculo del aporte energético total
• Acidosis láctica
• Anormal patrón plasmático y muscular de AAs Aunque los pacientes en situación de estrés pre-
• Retención de sodio y agua sentan una respuesta hipermetabólica, el aumento
• Perdida de fósforo y potasio del Gasto Energético no presenta una correlación
• Moderada cetosis d i recta con la gravedad de la agresión. No está
completamente aclarado el porqué de ello, pero se
piensa que existen diferentes factores implicados
mo son las grasas de dos carbonos y los aminoáci- entre los que destacan: el reposo, la sedación-re l a-
dos (AA) de cadena ramificada. jación y la frecuente situación de ayuno-semiayuno
Otro efecto del proceso nosológico es una redis- que presentan los pacientes críticos15. Ello nos lle-
tribución de la masa magra corporal11. La masa va a considerar que, en la fase de estrés, el aumen-
muscular esquelética se moviliza rápidamente y li- to clásico en los requerimientos energéticos puede
bera aminoácidos: algunos de los AA se oxidan en ser contrabalanceado por una reducción del consu-
el músculo esquelético para producir energía, otros mo de energía dependiente de la no actividad y de
son captados por la masa celular mononuclear para la no termogénesis de la dieta. La resultante final se
la síntesis proteica, algunos son transportados al hí- c o n c reta en una demanda energética no tan eleva-
gado tanto para neoglucogénesis como para la sín- da como la que, basada en más clásicas pre m i s a s ,
tesis proteica y, finalmente, otros son utilizados en podría predecirse. Se ha propuesto que los aumen-
las áreas lesionadas para síntesis de proteínas. Todo tos estimados en el GE basal (GEB) en situación de
ello indica que la masa muscular esquelética des- estrés varían desde un 10-30% en el postoperato-
aparece rápidamente y se redistribuye a las áreas rio, un 10-50% en el trauma, un 30-50% en la sep-
viscerales y de lesión (órgano extra) que tienen una sis, hasta un 100-120% en el paciente quemado
síntesis proteica activa. El catabolismo excede a la crítico16. La aplicación práctica en el paciente qui-
Implicaciones de la cirugía en el enfermo oncológico 201

Tabla II sistencia de neoglucogénesis, a pesar de la hiperglu-


cemia, refleja la urgente necesidad orgánica de glu-
Grado AA/kg/día Relac. kcalnp/gN
cosa, movilizándose los lípidos para cubrir las ne-
0 1,0-1,2 150:1 cesidades energéticas cardiacas y musculares en un
1 1,3-1,5 130:1 intento de ahorro de glucosa para los tejidos que la
2 1,6-1,8 110:1 requieren especialmente como son el SNC y el teji-
3 > 1,7 80-100:1 do celular inmune27.
Kcolnp: kcal no proteicas. Una nueva hipótesis sobre el significado del ca-
tabolismo muscular que se produce durante el es-
trés metabólico nos indica que es esencial para la
rúrgico suele consistir en calcular un GE (GEc), supervivencia, pues al liberarse AAs (especialmen-
multiplicando el GEB (basado en la ecuación de te AAs de cadena ramificada o AAR) éstos sirven
H a rr i s-Benedict del paciente) por un factor de como donantes de grupos amino para la síntesis de
agresión estimado entre 1,1-1,417, 18. En esta línea glutamina.
está la propuesta presentada en la tabla II, en la que Consideramos que el soporte nutricional se hace
a partir del grado de agresión podemos calcular, menos efectivo a medida que aumenta la gravedad
tanto el aporte nitrogenado o proteico, como las ca- de la respuesta al estrés. Debe ser pautado precoz-
lorías recomendadas, según unas relaciones calóri- mente y su composición estará gobernada tanto por
co-nitrogenadas definidas. la respuesta conseguida como por la condición clí-
nica del paciente (tabla III). Una aproximación sim-
ple debe consistir en un adecuado aporte de hidra-
Utilización de sustratos en la agresión tos de carbono (glucosa o no-glucosa), lípidos,
aminoácidos y otros nutrientes esenciales (vitami-
Actualmente, la mayor parte de la investigación nas, micronutrientes y elementos traza28). En este
que se realiza sobre el soporte nutricional está diri- campo debemos destacar los nuevos conceptos so-
gida tanto hacia el conocimiento de las alteraciones
metabólicas19 como hacia el impacto clínico que su-
pone la manipulación artificial de esta situación so- Tabla III
bre los diversos órganos y sistemas20, 21. Entendien- Recomendaciones
do que tal manipulación deriva principalmente del para el soporte nutro-metabólico
soporte nutricional artificial amén de unos campos,
en parte inexplorados, que indican que la interven- I. EVITAR LA SOBRECARGA CALÓRICA
ción farmacológica puede ser beneficiosa y que una • kcal totales/kg/día = 25-35
mayor preocupación sobre la fisiopatología de la • 1,3-1,4 x HB
enfermedad y sobre los sustratos nutrientes reque- • Calorimetría indirecta
ridos es prioritaria a nivel de un mejor abordaje fi-
siopatológico22. II. EVITAR LA SOBRECARGA DE GLUCOSA
• Glucosa 5 g/kg/d
La nutrición artificial es principalmente una for-
• Sustratos alternativos = polioles
ma de administrar nutrientes pero no una forma de
utilización de ellos23, 24 y, hoy por hoy, quedan un III. EVITAR SOBRECARGA GRASA
importante número de áreas que deben ser investi- • No más de 1,5 g/kg/d
gadas en el contexto de las diversas situaciones de
estrés y los diferentes grados de agresión en relación IV. DOSIS DE AMINOÁCIDOS
con el metabolismo de los sustratos nutrientes en- • 1,3-1,7 g/kg/d
dógenos y exógenos25, 26. En un sentido teleológico, • Patrón de AAs modificado (glutamina, arginina)
la respuesta a la agresión debe ser valorada como de
movilización de las proteínas corporales y de los de- V. VIA DE ADMINISTRACIÓN
pósitos grasos y de hidratos de carbono para asegu- • Enteral
rar unos niveles circulantes de sustratos (glucosa, • Complementaria: enteral y parenteral
• Parenteral
ácidos grasos y AAs) en ausencia de ingesta. La per-
202 Soporte Nutricional en el Paciente Oncológico

bre los requerimientos nutricionales de las células tante alteración de los tejidos, por parte del tumor,
inmunes, enterocitos, células secretoras, etc., entre la culpable de una mala absorción de nutrientes,
los que se contemplan posibilidades, en nutrición por lo que el enfermo sufre las consecuencias. A es-
enteral, tan variadas como los nucleótidos, pépti- ta desnutrición se le llama locorregional, es decir,
dos, arginina, glutamina, ácido oleico (w-9) y acei- debida a la localización del tumor.
tes de pescado (w-3) entre otras2, 30, 31. Pero la cirugía, sola o acompañada de otras téc-
Diferentes estudios indican que la vía de admi- nicas, si bien soluciona el problema “mecánico”, e
nistración de los nutrientes afecta a la composición incluso, en ocasiones cura al paciente de su patolo-
corporal, supervivencia tras peritonitis, respuesta al gía tumoral, no siempre soluciona el problema ali-
estrés y utilización de los sustratos. La nutrición en- mentario, sino que a veces incluso lo complica.
teral32 incrementa la masa intestinal (glutamina, fi-
bra, SCFA) y afecta favorablemente a la inmuno-
competencia del intestino (arginina, nucleótidos) EFECTOS DE LAS TERAPIAS
especialmente respecto a la IgA secretora, que posee ANTITUMORALES
propiedades antibacterianas y antivíricas y puede
impedir la translocación de patógenos a través de la Cuando se lleva a cabo una intervención quirúr-
mucosa intestinal33. Este punto, conocido como Gut gica, dependiendo de la localización anatómica del
Hypothesis34, 35, presenta cada día más relevancia en tumor, la exéresis y posterior reconstrucción del
el contexto de las peritonitis y cuadros sépticos se- tracto digestivo puede afectar el proceso alimentario
cundarios a translocación bacteriana por atrofia y de diferentes formas.
aumento de la permeabilidad intestinal. Pero no de-
bemos olvidar que la hipótesis tiene dos compo-
nentes: bacterias intestinales que producen neumo- Cirugía de cabeza y cuello
nía nosocomial por Gram (-) tras su paso al árbol
traqueobronquial36 y flora más toxinas intestinales, La mayoría de los tumores malignos de cabeza y
que translocan a los sistemas linfáticos o vasculares cuello se tratan mediante terapia multimodal (ra-
regionales para diseminarse a tejidos distantes. dioterapia y quimioterapia neo y/o adyuvante y ci-
rugía radical), por tanto a la malnutrición previa
ocasionada por el tumor, se añadirán diversos efec-
OTROS FACTORES QUE CONTRIBUYEN tos nocivos ocasionados por la agresión terapéutica
A LA CAQUEXIA TUMORAL (anorexia, disfagia, náuseas, vómitos, etc.), así co-
mo un incremento de las necesidades energéticas
Aparte de los efectos metabólicos del propio tu- del paciente difícilmente alcanzable en esas circuns-
mor, y que han sido previamente definidos, existen tancias.
otros factores que se implican en la malnutrición En enfermos con carcinoma de la cavidad oral,
del paciente tumoral. Éstos son: la localización ana- laringe o faringe se observa una desnutrición pre-
tómica del propio tumor, los procedimientos apli- operatoria en un 40% de los pacientes, y un por-
cados a lo largo del proceso terapéutico y en oca- centaje próximo al 40% requieren nutrición enteral
siones el entorno social o la percepción psicológica por períodos prolongados (superior a un mes), por
y aceptación por parte del paciente y de su entorno, tanto sería recomendable37 la colocación de una
de la enfermedad. sonda de gastrostomía en aquellos pacientes que
Uno de los factores que intervienen de forma de- tiene dos o más factores de riesgo identificados
cisiva en la desnutrición del paciente oncológico es (pérdida de peso preoperatorio, cánceres en esta-
la localización del tumor, que tiene efectos deter- dios avanzados, y aplicación de terapias multimo-
minantes desde estadios muy tempranos de la neo- dales: uso de cirugía y radioterapia combinada), uti-
plasia. Los tumores que se localizan en el tubo di- lizando, sin embargo, la sonda nasoenteral en
gestivo: esofágicos, gástricos o cercanos como los aquellos pacientes en que los que se prevé un corto
pancreáticos, muchas veces suponen además un período de aporte enteral.
impedimento físico al paso del alimento, por lo que Debemos tener presente que, generalmente, la
el enfermo deja de comer. Otras veces es la impor- cirugía de cabeza y cuello provoca directamente una
Implicaciones de la cirugía en el enfermo oncológico 203

dificultad en la masticación y deglución, que puede rio en este tipo de pacientes. Por lo que con fre-
ir asociada con una sustancial afectación psicosocial cuencia no se dejan intraoperatoriamente vías para
en función del grado de resección quirúrgica instaurar una nutrición enteral,
Debemos tener en cuenta que, en estos casos,
técnicamente se realiza una esofagectomía total o
Cirugía esofágica casi total con reconstrucción del tránsito mediante
una plastia gástrica o cólica.
Los pacientes con cánceres esofágicos avanzados Una sonda nasoentérica, si bien es una opción
presentan odinofagia, disfagia y malnutrición grave. sencilla y sin riesgo para el paciente, presenta un al-
A estos pacientes se les aplican protocolos de radio- to índice de fracasos (por movilización de la sonda,
quimioterapia prequirúrgicos, prolongados durante incluso extracción, inicio tardío de la alimentación,
un período de 30 a 60 días, en los que, si el paciente suspensiones innecesarias, etc.), por lo que, salvo
no es controlado desde el punto de vista nutricio- en medios muy entrenados, suele resultar inefecti-
nal, su situación suele deteriorarse gravemente, por va. Creemos, por tanto, en la conveniencia de ali-
ello debería plantearse una estrategia de apoyo nu- mentar a estos pacientes mediante catéter de yeyu-
tricional en este período previo a la intervención nostomía instaurado durante el tiempo quirúrgico.
quirúrgica. Esto permite establecer una alimentación enteral
En el preoperatorio, tras la evaluación nutricio- temprana y distal a las anastomosis (sin riesgo de
nal, si el paciente p u e d e comer, estableceremos un que el aporte enteral precoz “favorezca” una poten-
s o p o rte complementario, incluyendo recomenda- cial dehiscencia), permite una nutrición correcta en
ciones dietéticas. Es muy importante no limitarse caso de que aparezca alguna complicación grave
a prescribir un preparado específico y la pauta de (dehiscencia, mediastinitis, necrosis de la plastia), y
ingesta, o contentarse con hacerle las recomenda- facilita el alta precoz (aun cuando la ingesta oral sea
ciones, sin comprobar su eficacia, mediante la insuficiente) para seguir el soporte en régimen am-
evaluación de los resultados que establezcamos bulatorio.
como válidos (valoraciones nutricionales bioquí- Posteriormente, entre las secuelas de la cirugía
micas y antropométricas). Nuestra finalidad será, esofágica, pueden aparecer estasis gástrico y malab-
cuando menos, frenar el catabolismo, y en el caso sorción grasa secundaria a la sección vagal.
de que esto no se consiga, o bien el enfermo no
consiga realizar una ingesta oral apropiada, será
p reciso alimentarle mediante una sonda nasoenté- Cirugía gástrica
rica (introducida mediante control endoscópico o
radiológico). Si ello no fuera posible, a causa de la La técnica “modelo” en el tratamiento quirúrg i-
estenosis esofágica, se puede realizar una re p e r- co del cáncer gástrico consiste en la gastrectomía
meabilización esofágica mediante prótesis expan- total con anastomosis esófago-yeyunal. Dado que
dible del tipo Wallstent, si bien si lo realizamos las complicaciones graves tales como la dehiscen-
como un procedimiento provisional previo a la ci- cia son poco frecuentes (menos que en la cirugía
rugía, recomendamos la utilización de los mode- esofágica) y menos graves, el período previsible de
los re c u b i e rtos por una membrana de silicona soporte nutricional es, por tanto, más corto. La co-
(con el fin de evitar o enlentecer el crecimiento locación de una sonda nasoyeyunal intraoperato-
tumoral en la prótesis, lo que dificultaría poste- riamente dejando su cabo distal por debajo de la
riormente la resección quirúrgica de la pieza). anastomosis yeyuno-yeyunal de la Y de Roux sue-
La gastrostomía percutánea no suele ser una op- le ser suficientemente efectiva para alimentar al
ción recomendable en este caso, porque inhabilita- paciente durante el postoperatorio, permitiendo
ría el estómago como plastia esofágica, y presenta, iniciar un aporte enteral precoz (en las primeras
asimismo, dificultades de realización en las grandes 24 horas).
estenosis esofágicas Según la experiencia del cirujano, y calibrando
En el postoperatorio existe generalmente un exa- ventajas e inconvenientes, de una y otra, la segunda
gerado optimismo, por parte del cirujano, respecto opción sería la yeyunostomía con catéter fino colo-
al inicio de la alimentación oral en el postoperato- cado intraoperatoriamente.
204 Soporte Nutricional en el Paciente Oncológico

La cirugía gástrica, a largo plazo, puede cursar pueden iniciar la ingesta oral, por lo que en el pe-
con malabsorción grasa y proteica, síndrome de ríodo postoperatorio suele ser suficiente un soport e
dumping con hipoglucemia reactiva, y saciedad nutricional parenteral aportado por vía periférica.
p recoz, así como malabsorción de vitaminas y mi- Los problemas se plantean, en el postoperatorio in-
nerales. mediato, ante la aparición de complicaciones qui-
rúrgicas (dehiscencias, fístulas, grandes resecciones
intestinales, etc.), o más tardíamente como secuelas
Cirugía pancreática de las terapias multimodales (obstrucciones por ad-
herencias, enteritis radica, síndrome de intestino
La realización de una duodeno-pancreatectomía c o rto, etc.). Por su trascendencia, y por las implica-
como tratamiento de un cáncer de cabeza de pán- ciones que la nutrición tiene en esta compleja situa-
creas plantea al cirujano una estrategia bien conoci- ción (bien sea como soporte vital o como técnica
da. En primer lugar, se encuentra ante un paciente complementaria a la reconstrucción quirúrgica), in-
malnutrido, inmunodeprimido, y en ocasiones, con s i s t i remos de forma especial en la circunstancia de la
una ictericia obstructiva de un par de semanas de dehiscencia anastomótica.
evolución, al cual se le va a realizar una operación La cirugía de intestino delgado y colon provoca-
muy agresiva, resecando páncreas, antro y duode- rá, en ocasiones a largo plazo, como las anteriores
no. Tras cerrar la cavidad abdominal, el paciente técnicas descritas, malabsorción proteica y grasa,
tendrá realizadas cuatro anastomosis intestinales, o deficiencias vitamínicas y minerales, diarrea, y pér-
b i l i o - p a n c reato-intestinales. Durante el período didas excesivas de agua y electrolitos.
postoperatorio (entre cinco y siete días) pueden Adicionalmente, aparecen complicaciones qui-
aparecer, por tanto, complicaciones anastomóticas rúrgicas con implicaciones nutricionales tales como
(independientemente de las infecciosas o hemorrá- infecciones locales o sistémicas, fístulas (entero-en-
gicas), que van a retrasar la ingesta oral, y si estas téricas o entero-cutáneas), y malabsorción por sín-
complicaciones se cronifican (fístula biliar o diges- drome de intestino corto.
tiva), el soporte nutricional va a ser parte esencial, En otros casos, los pacientes pueden reducir ac-
cuando no el único tratamiento. tivamente su ingesta oral tras una diversión intesti-
Por tanto, la colocación de un catéter de yeyu- nal, una ileostomía o incluso una colostomía, con el
nostomía, como un paso más de la intervención fin de disminuir el volumen de pérdidas por el es-
quirúrgica, permite establecer una pauta de nutri- toma. Como vemos, todos estos factores, de uno en
ción enteral precoz y facilita su mantenimiento an- uno, o todos ellos interrelacionados, pueden oca-
te la aparición de complicaciones fistulosas. sionar una marcada disminución en la ingesta o de
La sonda nasoyeyunal sería, así mismo, una se- la absorción después de la práctica quirúrgica.
gunda alternativa en esta patología, con sus venta-
jas (facilidad de implantación y ausencia de riesgos)
y sus inconvenientes (mayor índice de fracasos). Dehiscencia anastomótica y fístula intestinal
La cirugía de la resección pancreática, a largo
plazo, puede provocar malabsorción proteica y gra- Una situación nutricional que merece especial
sa, deficiencias vitamínicas y minerales, así como atención en el paciente quirúrgico oncológico du-
diabetes mellitus. rante el período postoperatorio es la originada por
la dehiscencia anastomótica, complicación precoz y
grave.
Cirugía intestinal El paciente, que hasta ese momento podía tole-
rar una alimentación enteral de inicio, suspende la
El tratamiento de los tumores malignos de intes- ingesta o el aporte enteral, a la vez que incrementa
tino delgado o colon no suelen ocasionar problemas sus necesidades energético-proteicas por efecto de
nutricionales previos a la cirugía. Por otra parte, los la infección concomitante. ¿Cuál es la actitud reco-
pacientes no presentan grados avanzados de malnu- mendable durante este proceso?
trición, la agresión quirúrgica no suele ser impor- En primer lugar debemos distinguir dos perío-
tante, y en un período corto de tiempo (2-3 días) dos claramente definidos: en el primero, fase aguda
Implicaciones de la cirugía en el enfermo oncológico 205

(aparición de la dehiscencia), se presenta un cuadro Tabla IV


séptico y, por tanto, como tal deberemos establecer Fístulas intestinales. Fase de investigación
las medidas del soporte. En primer lugar aparece un
incremento de las necesidades: el gasto energético Localización anatómica y estudio de la fístula
será equivalente a un grado II-III de agresión, sien- • Localización: Alta o baja
do recomendable un aporte proteico entre 1,6 a 1,8 • Tipo: terminal o lateral
g de AA/ K peso/día, y entre 110 y 80 kcal no pro- • Calibre del orificio profundo
teicas/gramo de N con una proporción lípidos/car- • Estado del tramo intestinal perifistuloso
• Existencia de una oclusión distal
bohidratos de hasta 1/1. Naturalmente, el soporte
• Características del trayecto fistuloso
nutricional se realizará por vía parenteral, supri-
• Presencia de cuerpos extraños
miendo la vía enteral iniciada. • Localización de abscesos a distancia del trayecto
Si la evolución del proceso es favorable, pasamos fistuloso
a la segunda fase: la situación de estabilización (fís-
tula establecida), en que debemos instaurar una nu-
trición artificial a largo plazo. En este caso, las nece- sea bien tolerado y que no incremente de forma lla-
sidades energéticas disminuyen (grado 0-I de mativa el débito de la fístula), y 4. Otras medidas te-
agresión): el aporte proteico recomendado es de 1,1 rapéuticas o de protección, como antibioterapia,
a 1,5 g de AA/k/día y unas 150 kcal no proteicas/g. profilaxis antitromboembólica, uso de fármacos in-
de N disminuyendo la relación lípidos/carbohidra- hibidores de las secreciones, etc.
tos a 1/3. Para controlar el débito de la fístula, además de
En esta fase debemos plantearnos cómo instau- la utilización de fármacos inhibidores de las secre-
rar un aporte enteral, bien sea complementario o to- ciones bilio-pancreato-gastro-intestinales tales co-
tal (si éste fuera posible), con el fin de evitar el fra- mo la somatostatina y su análogo el octopéptido
caso intestinal, siempre que este aporte no ocasione SMS, se utilizan los sistemas de aspiración-perfu-
un empeoramiento del proceso evolutivo. Con el fin sión. Su objetivo es proteger la piel alrededor del
de evitarlo es importante realizar previamente un orificio fistuloso (en el caso de fístulas bien delimi-
estudio de la localización y de las características de tadas), recoger íntegramente los líquidos perdidos,
esa fístula (fase de investigación), mediante pruebas y mejorar el bienestar y la calidad de vida del pa-
radiológicas: fistulografía, tránsito intestinal, y otras ciente. Para ello se instalan mecanismos de lavado y
como la ecografía o el escáner, que permiten diag- aspiración, que diluyen y neutralizan primeramen-
nosticar la existencia de colecciones intra-abdomi- te (mediante soluciones “tampón”) la acción diges-
nales dependientes de la fístula. Sólo tras su realiza- tiva de las sales biliares y de las enzimas pancreáti-
ción, podremos llegar a conclusiones sobre su cas, y además recogen directamente el líquido
localización características propias (terminal o late- resultante evitando así la irritación de la piel y de la
ral), tamaño del orificio, situación anatómica del herida. La solución más utilizada es la de Tremolie-
tracto intestinal distal, existencia, o no, de oclusio- res compuesta por una base fuerte (bicarbonato só-
nes distales, etc. Lo que no servirá para plantear la dico) y un ácido débil (ácido láctico). Esta solución
estrategia a seguir, tanto desde el punto de vista nu- sólo debe utilizarse cuando la fístula tiene un orifi-
tricional, como respecto al procedimiento terapéu- cio externo bien delimitado, con la herida cubierta
tico recomendable (actitud quirúrgica o conserva- por la piel. En situaciones en que está el peritoneo
dora tabla IV). expuesto (fístulas en el lecho de una evisceración)
La actitud conservadora (durante un período en- debe emplearse una solución salina isotónica o de
tre 4 a 8 semanas) plantea unas nuevas medidas se- Solución de Ringer lactato, perfundiendo en una
cuenciales entre las que el soporte nutricional tiene, proporción de 3/1 (tres volúmenes de dicha solu-
como veremos, gran trascendencia. ción por volumen de líquido intestinal).
Estas medidas incluirán: 1. Protección de la piel Uno de los inconvenientes que se atribuye al
y de la herida (y de las asas intestinales en el caso de mantenimiento de la actitud conservadora ante la
evisceración). 2. Control del débito de la fístula (re- existencia de una fístula por dehiscencia es la de
posición hidroelectrolítica y del quimo intestinal). “dejar pasar el tiempo”... y limitarse a observar una
3. Aplicación del “mejor“soporte nutricional (que hipotética y lenta mejoría del paciente, o en el peor
206 Soporte Nutricional en el Paciente Oncológico

de los casos, una disminución del débito de la fís- Tabla V


tula, a costa de un deterioro progresivo de la situa- Probabilidades de curación de las fístulas
ción general del paciente. Por ello es recomendable con tratamiento conservador
tomar, ante esta patología, una actitud “más inter- Curación
vencionista”, marcando previamente el período “de
observación vigilada” (recomendable entre 4 y 8 se- Precocidad de aparición
manas en un enfermo con situación general estable, Antes del 5.º día: 15%
Entre el 5.º y el 15 día: 40%
pero sin evolución favorable en la cicatrización de
Débito
su fístula), así como definir los parámetros que em- 1.500 cc/día 20%
plearemos para modificar nuestra actitud hacia un < 200 cc/día 50%
replanteamiento de la reconstrucción quirúrgica. Localización
La aparición de signos que desequilibren o des- Yeyuno 10%
controlen este status: dolor o distensión abdominal, Ileal 30%
suspensión o no restablecimiento del tránsito (necesi- Término-ileales 70%
dad de instaurar NPT), ausencia de respuesta a los so-
p o rtes nutricionales o vitales, aparición de disfunciones
o fracasos uni o multiorgánicos, etc., serán una clara nimiento del balance hidroelectrolítico, favorece la
indicación para cambiar, lo antes posible, nuestra
absorción de los nutrientes aportados por vía ente-
actitud conservadora, hacia la intervencionista qui-
ral, protege la mucosa y el mecanismo de barrera in-
rúrgica.
testinal, protege piel y herida del efecto corrosivo de
Pero la actitud conservadora no quiere decir me-
el drenaje intestinal, mejora la calidad de vida del
ramente observacional, y existe un nuevo proceder
paciente y sobre todo evita el deterioro progresivo y
terapéutico, en el que, como veremos, tiene una
consunción del paciente, pero al ser preciso recoger
gran importancia el soporte nutricional, tanto en
mediante un tubo todo el drenaje fistuloso y reins-
cuanto a su calidad como en cuanto a la vía de apor-
tilarlo a través de otro catéter al intestino distal, di-
te. Este procedimiento consiste en la reinstilación en
ficulta el cierre espontáneo de la fístula y, por tanto,
el intestino, junto al aporte nutricional, del quimo
deberá estar reservado para aquellas fístulas que por
recogido de la fístula (es decir, restaurar el tránsito
su débito cuantioso, aparición precoz, localización,
intestinal extracorpóreamente).
o situación del tracto distal, tengan muy pocas po-
Para establecer dicho procedimiento definir la
fístula según los siguientes criterios: sibilidades de cerrarse espontáneamente (tabla V).
En la tabla VI mostramos las recomendaciones a
a) Localización: Alta, media o baja. seguir, en función de localización, estado funcional,
b) Posibilidad de intubación sublesional: Ca- y posibilidades de intubación del segmento distal.
téter de yeyunostomía
c) Estado funcional del intestino distal (exis-
tencia de patología, orgánica o funcional, que Las terapias oncológicas no quirúrgicas
impida el establecimiento de una nutrición
enteral efectiva). La aplicación de terapias antitumorales no qui-
Una vez establecidas las características de la le- rúrgicas (quimioterapia, radioterapia, trasplante de
sión fistulosa, podremos instaurar el pro c e d i m i e n- médula, etc.), aplicadas de forma adyuvante o neo-
to de nutrición enteral con c i rculación extracorpórea adyuvante, tiene graves efectos sobre la salud gene-
del quimo (CEQ)38, bien sea de manera a rt e s a n al ral del enfermo contribuyendo al deterioro nutri-
(mediante la recogida del líquido fistuloso y su cional progresivo. Hay que tener en cuenta que se
conservación refrigerada para la reinstilación por emplean fármacos que resultan muy tóxicos para el
sonda yeyunal distal cada 4 horas) o automática- organismo, además de producir inflamación de di-
mente mediante perfusión continua con bomba au- ferentes tejidos, sobre todo los del tracto digestivo.
t o rreguladora. Esta situación provoca que no se pueda lleva a cabo
Las ventajas teóricas de la reposición del conte- una buena absorción de nutrientes. Estos trata-
nido intestinal no se nos escapan: facilita el mante- mientos también provocarán náuseas, vómitos y
Implicaciones de la cirugía en el enfermo oncológico 207

Tabla VI
Elección del procedimiento nutricional

Posibilidad de intubación
sub-lesional Estado funcional
Localización de la fístula
del intestino subyacente
Sí No
NET y CEQ NPT Bueno
< 50 cm
NPT + NEC NPT Malo

NET y CEQ NPT + NEC Bueno


50 y 100 cm
NPT + NEC NPT + NEC Malo
NET y CEQ NPT + NEC Bueno
> 100 cm
NPT + NEC NPT + NEC Malo
CEQ: Circulación extracorpórea del Quimo. NEC: Nutricional enteral complementaria. NET: Nutrición enteral total. NPT: Nutrición parenteral
Total.

otras alteraciones digestivas, que tienen consecuen- gesta oral eficaz durante el período preoperatorio
cias muy negativas sobre el apetito. En este caso se (con o sin terapia neoadyuvante multimodal inclui-
produce desnutrición iatrogénica. Sus efectos, con- da en este tiempo), plantearemos cuál va a ser la es-
secuencias, así como su tratamiento, son tratados trategia de soporte nutricional perioperatorio (todo
en profundidad en otros capítulos específicos del li- ello en función de su estado, necesidad de soporte
bro, por lo que no insistiremos sobre ellos, pero no preoperatorio, estado del tracto gastrointestinal, ví-
deberemos olvidar la circunstancia de que tras valo- as de acceso disponibles, etc.) (tabla IX). Si el pa-
rar el estado nutricional, ante cada paciente debere- ciente esta normonutrido, o con una malnutrición
mos plantear la estrategia a seguir, y no es el mismo leve, no creemos conveniente establecer una nutri-
riesgo el que sufre un paciente al que se le va a rea- ción perioperatoria previa a la cirugía (los posibles
lizar una técnica quirúrgica paliativa que el de un riesgos superan a las potenciales ventajas), pero, sin
paciente sometido a una gran resección oncológica embargo, sí que consideramos útil el valorar su es-
con terapia neoadyunvante quimio-radioterápica y, tado nutricional y establecer un protocolo de eva-
por tanto, en este paciente, el soporte nutricional luación y seguimiento que nos permitirá iniciar un
perioperatorio tendrá una gran trascendencia. En soporte nutricional precoz posteriormente en el
otras situaciones, la nutrición tendrá su “momento postoperatorio.
culminante” durante un período postoperatorio Si el paciente presenta una malnutrición grave*
mas o menos “alargado” (convalecencia), y en esca- iniciaremos, tras la valoración, un soporte nutricional
sas ocasiones, salvo que aparezcan complicaciones preoperatorio apropiado (oral, enteral, mixto o pa-
(dehiscencias o fístulas) que exijan grandes resec- renteral), teniendo en cuenta sus necesidades, limi-
ciones, a largo plazo (tabla VII). taciones y deficiencias, durante el período previo a
la intervención (entre 7-10 días). Este período y la
intensidad del soporte variarán a la demanda, pro-
Evaluación e indicación del soporte nutricional longándose si el paciente va a ser sometido a terapia
en el paciente tumoral quirúrgico oncológica neo-adyuvante.

Ante un paciente diagnosticado de cáncer, con


* La literatura define la malnutrición grave por dos vías: funcio-
indicación terapéutica quirúrgica, tras valorar de nal (aumento del riesgo de morbilidad y/o mortalidad) y por
forma sencilla su estado nutricional (tabla VIII) y la valoración de la pérdida de peso (superior al 2% por sema-
conociendo sus posibilidades de mantener una in- na, 5% por mes, 7,5% en tres meses, y 10% en 6 meses).
208 Soporte Nutricional en el Paciente Oncológico

Tabla VII
Importancia del Soporte Nutricional en la Cirugía Oncológica
CIRUGÍA Perioperatorio Convalecencia Largo plazo

CABEZA y C +++ ++ ++
CUELLO P + + +
C +++ +++/ (*)++++ +
ESOFÁGICA
P
C ++ ++ +
GÁSTRICA
P + + +
C + (*)
+++ (*)
+++
PANCREÁTICA
P + + +
C + (*)
+++ (*)
+++
INTESTINAL
P + + +
Muy Importante: (+++) Importante: (++) Poco Importante (a la demanda): (+)
INTENCIONALIDAD: C: Curativo P: Paliativo (*) Ante la aparición de complicaciones

Tabla VIII
Protocolo de Soporte Nutricional Perioperatorio
Evaluación preoperatoria de cirugía mayor programada

1. Calcular el Porcentaje de pérdida de peso


2. Valorar Niveles plasmáticos de Albúmina sérica.
Pérdida > 10% del peso habitual/tres meses
y/o
Albúmina sérica < 3 mg/dl
INTERCONSULTA Preferente a Nutrición específicando:
PROTOCOLO PREOPERATORIO
(aportando la última bioquímica y etiquetas).
Requieren un mínimo de 7 a 10 días de nutrición (“repleción”) previa a la cirugía

Indicación de soporte nutrición artifical postoperatorio

MALNUTRIDOS
(pérdida de peso > 10% y/o albúmina < 3 mg/dl)

BIEN NUTRIDOS
• CON ESTRÉS METABÓLICO GRAVE (Valorar técnica quirúrgica) y PERÍODO PREVISIBLE DE INGESTA
ORAL INSUFICIENTE MAYOR DE 7 DÍAS (5-10 días).
• COMPLICACIONES POSTOPERATORIAS GRAVES QUE IMPIDAN UNA ALIMENTACIÓN ORAL
ADECUADA Y SUFICIENTE.

En general: Cirugia esofágica, gástrica o de intestino delgado por cáncer, y patología pancreática maligna.
Implicaciones de la cirugía en el enfermo oncológico 209

Tabla IX (puede ir de 2 a 10 días), la probabilidad de apari-


Indicaciones de soporte nutricional ción de complicaciones graves, y las vías de acceso
en los pacientes oncológicos quirúrgicos posibles) (tabla X).
En el caso de que el paciente no tolere una ali-
Diagnóstico de cáncer mentación oral, o ésta resulte insuficiente, bien sea
permanentemente o durante un período determina-
Indicación de cirugía do, será preciso establecer un soporte nutricional
(total o suplementario) con el fin de lograr una ali-
Valoración nutricional
mentación eficaz. ¿Cuál será la vía de elección?
El uso del tracto gastrointestinal ha demostrado
ser menos costoso, presentar menos complicaciones
Normal, leve Malnutrición grave graves (metabólicas y sépticas) y contribuir al man-
o moderada tenimiento de la morfología y función del mecanis-
Repleción preoperatoria mo de barrera intestinal, cosa difícil de conseguir
un mínimo de 7-10 días con el soporte nutricional por vía parenteral. Por
tanto, cuando el paciente no colabora y/o no es po-
sible la ingesta oral, elegimos un acceso a diferentes
CIRUGÍA tramos gastrointestinales mediante la utilización de
diversas sondas o catéteres. La elección del mismo,
Operación Operación
que siempre realizaremos en función de la eficacia,
sobre el tracto sobre el tracto riesgo y confort que represente para el paciente, te-
digestivo bajo digestivo alto niendo en cuenta las indicaciones y contraindica-
ciones generales para establecer una u otra vía (en-
Alimentación Normal Malnutrición teral o parenteral), son objeto de otro capítulo en
oral o grave este libro.
postoperatoria Malnutrición leve o mederada Una vez que se establece la “indicación” y la vía
más apropiada para establecer una nutrición artifi-
Sin Soporte cial (en este caso una nutrición enteral), ¿reciben los
complicaciones Complicaciones nutricional sonda pacientes el aporte necesario para sus requerimien-
yeyunostomía tos? O dicho de otra forma, ¿cuáles son los proble-
mas más frecuentes en el establecimiento de una
Menores Graves nutrición enteral perioperatoria? En primer lugar,
Ingesta inadecuada > 10 días
según un reciente estudio de Spain39, los pacientes
Nutricional hospitalarios sometidos a NE están infranutridos. El
Alimentación oral enteral 66% de los pacientes reciben el 52% de sus reque-
Soporte nutricional hasta que la rimientos, y ello es debido a múltiples causas: inco-
ingesta oral rrecta prescripción, a una progresión lenta a partir
sea adecuada
del momento de su teórico inicio, y a las interrup-
ciones frecuentes (el 22% del tiempo). En otro es-
tudio, realizado por De Jonghe40 en pacientes críti-
Hasta ahora hemos tratado de la primera etapa cos y, por tanto, bien controlados, los autores
( p reoperatorio) dentro del proceso nutricional observan que de los pacientes sometidos a NE tan
completo (perioperatorio). Posteriormente, en fun- sólo recibieron el 58% de los días previstos, el 78%
ción de la técnica quirúrgica realizada, planteare- de las prescripciones eran correctas y sólo fue apor-
mos cuál será la vía de aporte electiva. Para defi- tado el 71% de lo prescrito, y atribuye la baja rela-
nirla en este segundo período (postoperatorio) ción prescripción/aporte a: intolerancia digestiva en
debemos considerar otros parámetros esenciales: el un 28% de los casos, a la utilización de procedi-
estado nutricional previo, el grado de agresión de mientos diagnósticos en un 27%, y a diversos pro-
la intervención quirúrgica (incluyendo el período blemas mecánicos en un 15%, como conclusión ar-
postoperatorio), el tiempo de ayuno pre v i s i b l e gumentan que un bajo índice de prescripción por
210 Soporte Nutricional en el Paciente Oncológico

Tabla X
Nutrición artificial perioperatoria en el paciente oncológico quirúrgico

Cirugía E. nutricional G. Agresión Tiempo Ayuno I. Complicaciones Vías utilizadas

NPO NPT
Cabeza y cuello Malo Alto 9/10 d. Alto
NEP
NPO NPT
Esofágica Malo (+) Muy Alto 9/10 d. Alto
NEP
NPO NPT
Gástrica Malo Alto 9/10 d. Medio - Alto
NEP
A Normal Medio/bajo 3/4 d. Bajo NPP
I. delgado NPT
C Malo Alto 9/10 d. Alto
NE + NPT
Cólica Normal Medio/bajo 3/4 d. Bajo NPP / NEP
NPO NPT
Pancreática Malo Alto 9/10 d. Alto
NEP
NPO: Nutrición Perioperatoria A: Aguda
Preoperatorio
NPT: Nutrición Parenteral Total C: Crónica (fístulas)
Postoperatorio
NEP: Nutrición Enteral Precoz E: Estado
NE: Nutrición Enteral I: Indice
NPP: Nutrición Parenteral Periférica G: Grado

parte de los clínicos, y la inexistencia de programas 3. García de Lorenzo A, Ortiz C & Grupo de Trabajo de Me-
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