Profesor Titular Dr. Juan Carlos Romo Salazar Profesora Adjunta Dra. Gabriela Guadalupe Elizondo Omaña Jefa de Coordinación y Enseñanza Dra. Gloria Navarrete Floriano
19 DE AGOSTO DEL 2022 SANTA CATARINA NUEVO LEON MEXICO
Cabeza y cuello Como regla general, todos los defectos congénitos de cara y cuello deben ser derivados a un cirujano al nacer o al momento del diagnóstico, ya que en el momento en que requieran cirugía, serán derivados a clínica. Síntomas. Las deformidades de los labios y el paladar a menudo requieren múltiples procedimientos quirúrgicos y ortopédicos para corregirlas, por lo que seguir un programa bien planificado es esencial para el éxito. Por lo general, se pretende que se resuelva funcionalmente a los 20 meses de edad, aunque las familias deben ser conscientes de la posible necesidad de una corrección estética en la adolescencia. El tratamiento de la actitud comienza muy temprano, por lo que se debe realizar la derivación a un especialista al nacer. El retraso significativo temporal en el cierre del paladar puede dar lugar a graves secuelas funcionales, especialmente en la voz. • La linfadenopatía sublingual, la causa de la espondilitis anquilosante, es fácilmente tratable clínicamente dentro de los tres primeros meses posparto, con sangrado mínimo y autolimitado. El tiempo de retraso indica la necesidad de anestesia general. El dentado superior debe cortarse cuando provoca desalineación (separación entre los incisivos). Debe derivar al cirujano, en cuanto comience a aparecer la dentadura permanente, a realizar la incisión quirúrgica bajo anestesia en el momento en que hayan aparecido, al menos, dos caninos. • La orejuela del ventrículo anterior derecho se retira durante los primeros 12 meses de vida, ya que a esta edad es posible la cirugía con anestesia local. Si esto no es posible en este momento y se considera una intervención exclusivamente cosmética, entonces es mejor esperar hasta la adolescencia. • En todas las lesiones quísticas y fistulosas faciales se debe sugerir la cirugía tan pronto como se haga el diagnóstico, evitando así posibles complicaciones infecciosas, alto riesgo de recurrencia y peores resultados estéticos. • Los quistes de la cola y los quistes del conducto tiroideo también están indicados para cirugía en el momento del diagnóstico, porque el riesgo de infección y de degeneración maligna es mínimo, pero existe. • La tortícolis congénita debe tratarse con fisioterapia desde el nacimiento y debe derivarse a un cirujano a los 6 meses de edad si no hay respuesta. Es posible que la polifagia secundaria no desaparezca por completo. • Anomalías vasculares: sus opciones de tratamiento dependen del tipo de malformación, la localización y progresión de la lesión, así como de la edad del paciente. En general, serán examinados por un pediatra, refiriéndose desde el nacimiento a aquellos con sospecha diagnóstica o complicaciones derivadas de sus antecedentes. Los hemangiomas después de la etapa proliferativa, que dura unos 20 meses, tenderán a ser espontáneos, por lo que sólo se trasladarán aquellos con complicaciones que dejen secuelas funcionales y aquellos que dejen secuelas estéticas. Las malformaciones vasculares permanecerán estables durante toda la vida, las malformaciones que puedan producir cambios funcionales o estéticos deben ser remitidas a un cirujano. Todos los linfomas o malformaciones linfangiomatosas deben ser remitidos al cirujano, ya que el diagnóstico preciso es difícil y su evolución es impredecible. Las que crezcan, se localicen en zonas sensibles o las que ya estén infectadas serán tratadas quirúrgicamente. El método de tratamiento más utilizado en la actualidad es la terapia de bioacupuntura o cirugía percutánea. En nuestra experiencia, el método de punción OK- 32 en linfoma poliquístico gigante ha dado muy buenos resultados. Tórax En general, las anomalías de la pared torácica deben remitirse para evaluación quirúrgica durante la etapa prepuberal, ya que los tejidos aún son lo suficientemente elásticos y el niño cooperará en el autotratamiento. Los casos de pulmón se derivarán en el momento del diagnóstico. • Las malformaciones torácicas, tanto depresivas como protuberantes, suelen ser el objetivo a los 7 años de edad, ya que emergerán en el momento del crecimiento puberal, por lo que las correcciones deben realizarse en tejidos que todavía son flexibles y maleables, pero parcialmente desarrollados. Además, a esta edad contaremos con la indispensable colaboración de los niños. Actualmente, la cirugía mínimamente invasiva juega un papel muy importante en este tipo de malformaciones. • La ginecomastia en los hombres puede estar relacionada con el tejido de las glándulas mamarias o la acumulación de tejido graso en la obesidad. Ocurre durante la pubertad y el tratamiento quirúrgico está indicado en niños con evidentes defectos físicos y conflictos psíquicos. La politelia y la polimastia se recomiendan para evitar problemas mentales y estéticos, más que por el riesgo de degeneración maligna, y pueden realizarse a cualquier edad. • El resto de las anomalías y patologías torácicas descritas, tales como: malformación pulmonar o cistoadenoma, se observan comúnmente en el ámbito hospitalario y siempre se tratan con urgencia o prioridad. Cirugía abdominal y anorrectal (Tabla III) Las hernias medianas, umbilicales y epigástricas son las anomalías quirúrgicas abdominales más comunes en los niños. El epigastrio, por regla general, será operado; mientras que solo un pequeño porcentaje de cordones umbilicales necesitará corrección. • En los últimos años, el tratamiento de la enfermedad de Hirschsprung ha evolucionado gracias al desarrollo de una serie de técnicas quirúrgicas que permiten el tratamiento definitivo de la enfermedad con una sola intervención a los pocos meses de nacer, por lo que cualquier bebé con sospecha de padecer esta afección debe ser derivado a un especialista de inmediato. • Debido a que la hernia umbilical a los 80 años se cerrará a los años y el riesgo de incarceración o estrangulación es mínimo, la evaluación quirúrgica está indicada sólo a esta edad. • La hernia epigástrica es causada por el cierre de la línea media del abdomen por encima del ombligo, con protrusión de grasa preperitoneal. Su resolución espontánea es infrecuente y suelen ser irritantes, por lo que está indicado el tratamiento quirúrgico en el momento del diagnóstico. • La fístula anal neonatal suele resolverse espontáneamente, requiriendo cirugía sólo en los casos que persisten en el tiempo o se complican con abscesos recurrentes.
1. Cirugía programada. Calendario quirúrgico [Internet]. Pediatriaintegral.es. [cited
2022 Aug 19]. Available from: https://www.pediatriaintegral.es/publicacion-2014- 12/cirugia-programada-calendario-quirurgico/
Protocolos departamento de ortopedia y traumatología, hospital universitario San Vicente de Paul. Medellín. Dr. Jaime Acosta. Ortopedista. Dr. Eloy Guillermo Barrios. Residente de Ortopedia