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Informe de Lectura: El dilema de la estrategia y la estructura organizacional: una

mirada a la evolución del pensamiento administrativo- Luis Arteaga y Jairo Burbano.


Estudiante: Luis Angel Meneses Cerón Reporte: S2B Fecha: 23 de febrero de 2023.

La estrategia en el área administrativa es un campo de estudio que ha venido


evolucionando a través del tiempo desde una visión estructuralista basada en
la conquista del mercado hacia una visión más administrativa que se centra en
cómo las empresas pueden alcanzar y mantener una ventaja competitiva en su
mercado vinculando la gestión del conocimiento y los stakeholders (Arteaga &
Burbano, 2017).

De acuerdo con Arteaga & Burbano (2017) esta área de investigación ha


evolucionado a lo largo del tiempo, y se han desarrollado varias teorías y
enfoques para ayudar a las empresas a desarrollar e implementar estrategias
efectivas. En sus inicios (antes de 1950) el concepto de estrategia se asociaba
al campo militar, enfocado estrictamente a la búsqueda de la victoria en la
batalla, por ello, obras como la de Sun Tzu inspiraron por largo tiempo el
escenario empresarial. Su posterior homologación al campo administrativo
permitió desarrollar una visión estructuralista caracterizada por la gestión del
personal y la competencia por un determinado mercado. Tiempo después, este
enfoque evolucionó a una perspectiva mucho más estratégica, humana y
administrativa vinculando nuevas variables, entre ellas: una visión holística
sustentada en la relevancia de la competitividad, la innovación, la gestión del
conocimiento y la responsabilidad social y ambiental para garantizar la
sostenibilidad organizacional.

Uno de los aportes seminales de la estrategia empresarial fue el modelo de las


cinco fuerzas de Porter, desarrollado por Michael Porter en la década de 1980.
Este modelo se centra en el análisis de la industria y las fuerzas competitivas
que influyen en ella, y cómo las empresas pueden utilizar esta información para
desarrollar una estrategia exitosa. Así mismo, Otro enfoque importante es el de
la estrategia basada en recursos por Barney (1991), que se enfoca en cómo las
empresas pueden utilizar sus recursos internos para obtener una ventaja
competitiva. Este enfoque sugiere que las empresas deben identificar sus
recursos y capacidades únicas y utilizarlas para desarrollar estrategias que les
permitan diferenciarse de sus competidores.

Igualmente, es pertinente resaltar el trabajo de Henry Mintzberg al estudio de la


estructura organizacional, cuyo enfoque parte de la identificación de las partes
y procesos organizacionales, así como su modelo de configuraciones
estructurales, que ha sido utilizado por muchos académicos y ejecutivos para
entender mejor cómo las organizaciones pueden estructurarse para alcanzar
sus objetivos.

En los últimos años, la estrategia de innovación ha ganado importancia, ya que


las empresas buscan nuevas formas de innovar y crear valor para sus clientes.
La estrategia de innovación se centra en cómo las empresas pueden crear y
desarrollar productos, servicios y procesos innovadores para mantenerse
competitivas en un mercado en constante evolución( Kim, 1952; Mauborgne,
1963).

A partir de lo anterior, se vislumbra que la estrategia en el área administrativa


ha evolucionado con el tiempo y se ha convertido en una parte integral de la
gestión empresarial. Los enfoques mencionados anteriormente son solo
algunos de los muchos que se han desarrollado para ayudar a las empresas a
desarrollar e implementar estrategias efectivas.

Entre las principales críticas al estudio de la estrategia en el campo


administrativo, podemos identificar que el estudio de la estrategia puede ser
demasiado teórico y no se traduce en aplicaciones prácticas en el mundo real
de los negocios. De igual forma, se enfoca demasiado en la planificación de la
estrategia y no lo suficiente en la ejecución de la misma. Aunado a lo anterior,
la estrategia a menudo se ve como algo estático en lugar de dinámico. Las
empresas deben ser capaces de adaptarse a un entorno cambiante, y la
estrategia también debe ser capaz de cambiar para mantenerse al día con los
nuevos desafíos. Finalmente, hay un centrado interés en el análisis de datos en
lugar de tener una comprensión completa del negocio, su entorno y la cultura
empresarial.
Uno de los aportes centrales del documento, es reconocer los nuevos
abordajes de la estrategia que incorporan la gestión del conocimiento y la
competitividad. La gestión del conocimiento se refiere al proceso de
identificación, creación, almacenamiento, uso y transferencia del conocimiento
dentro de una organización. La competitividad, por otro lado, se refiere a la
capacidad de una empresa para competir con éxito en el mercado y generar
valor para sus clientes y accionistas. Al respecto, la gestión del conocimiento
puede ser un factor clave en la mejora de la competitividad de una empresa al
fomentar la innovación, mejorar los procesos empresariales, mejorar la toma de
decisiones y fomentar el aprendizaje organizacional.

Finalmente, una conclusión importante de Arteaga & Burbano (2017) consiste


en identificar que: primero, la estrategia y la estructura organizacional están
intimamente ligadas en una relación dinamica y segundo, que se encuentran en
un proceso constante de transformación y aprendizaje en aras de adaptarse a
las condiciones cambiantes del entorno y el mercado.

Bibliografía

Arteaga, L., & Burbano, J. (2017). El dilema de la estrategia y la estructura


organizacional: una mirada a la evolución del pensamiento administrativo.
Economia & Administración, 14(2), 13-29.

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