HISTORIA EPISTEMOLÓGICA DE LA PSICOLOGÍA que busca alcanzar el nivel teórico explicativo de los hechos

históricos, articulando una mirada interna (Feyerabend, Lakatos,

FUNDAMENTACION Kuhn) con una mirada externa (Foucault) que analiza las
condiciones de posibilidad del desarrollo de una ciencia
(Klappenbach, Hugo. 1999)
La primera unidad de la asignatura pretende hacer
Según Francois Dosse el “histor” es el encargado de
conocer el oficio del historiador, sus modos de pensar y operar con
demorar la desaparición de las huellas del hombre. Los
el objeto de estudio: el hecho histórico. Indaga sobre los
historiadores tienen el caro oficio de narrar los hechos del pasado,
dispositivos de investigación histórica necesarios para estudiar el
hacerlos comprensibles a nuestro entendimiento permitiéndonos
conjunto de acontecimientos dignos de memoria que han producido
encontrar el sentido que adquieren con relación al presente. Ahora
ese campo de conocimientos y prácticas que denominamos
bien, hay diversas maneras de ejercer este oficio. Muchas veces
Psicología. La segunda unidad recorre las corrientes
los historiadores, tal como lo señala Lacan, pueden generar la
epistemológicas; aquellas concepciones que aportan herramientas
ilusión de que las etapas del pensamiento humano se suceden
para problematizar la ciencia y su devenir, siempre discontinuo,
unas a otras como en una especie de continuidad en la que lo
fragmentado, construido y deconstruido una y otra vez. Contando
mejor de una época pasa a la siguiente y la mejora. En las historias
con herramientas aportadas por la ciencia histórica
disciplinares suele suceder algo similar y la historia de la Psicología
(contextualizadoras) y las herramientas
no es la excepción. Por el contrario, un examen más minucioso de
epistemológicas .T(problematizadoras) se inicia el recorrido de la
la historia muestra que el pensamiento humano y, en particular, la
tercera unidad. En ella se aborda la historiografía de la Psicología
construcción del campo de la Psicología, está plagado de rupturas
problematizando la construcción histórica de la disciplina. Diversos
y quiebres, por ensayos y pruebas, por comienzos.
atores nos presentan sus perspectivas, acentuando la figura del
Una historia que se ocupe de exponer esas rupturas
hombre, del héroe, el investigador, o acentuando la teoría, o
ha de situarse en una posición diferente de una historia de la
poniendo énfasis en los campos de indagación. Una lectura de
Psicología que enfatiza continuidades; ha de constituirse en historia
esas variadas interpretaciones permite descubrir un campo que se
epistemológica, es decir, problematizadora de la construcción
caracteriza más por la diversidad que por la unidad. Por último, la
histórica de la Psicología. Sobre a base de este principio se
cuarta unidad está destinada al estudio de la Psicología en la
organiza el recorrido que propone la materia. Para posibilitar el
Argentina, su surgimiento y su encuentro con el Psicoanálisis. La
pasaje de una historia de la Psicología a una Historia
formación del Psicólogo argentino ha de ser también un punto a
Epistemológica de la Psicología hemos de recurrir a un concepto
problematizar en esta unidad considerando que una reflexión sobre
clave para nuestro trabajo: la historiografía. Entendemos por ella a
este aspecto es de suma importancia para la formación de un
los diferentes modos de narrar la historia; sólo mediante la
profesional crítico de su propia práctica.
confrontación de los diversos enfoques que se le han dado a la
La formación del Psicólogo implica un amplio
historia de la Psicología es posible, a nuestro entender, analizar los
recorrido por diversas teorías y prácticas para cuya aproximación
comienzos, las discontinuidades que son propias de este campo.
se cuenta con un organizador: el plan de estudio de la carrera. En
El marco referencial teórico en el cual se encuadra la
él, las diversas materias que lo componen, en forma ineludible, en
materia es la llamada “historia crítica” entendiendo por tal aquella

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algún momento, hacen referencias a cuestiones históricas. La OBJETIVOS GENERALES DE LA ASIGNATURA
historia de la locura, la historia del concepto del niño, la historia de
la clínica, de la grupalidad, de los procedimientos terapéuticos, son
sólo algunos ejemplos de temáticas tratadas en la formación de A- Que el alumno adquiera una visión histórica de la
grado del Psicólogo. La materia Historia Epistemológica de la disciplina, desde un enfoque historiográfico, que le
Psicología aporta conocimientos para que los alumnos, al momento permita comprender que los hechos históricos tienen
de tratar esos diversos tópicos, cuenten con las herramientas una relación de sentido con el presente de la ciencia
conceptuales de la ciencia histórica y de la epistemología para una psicológica.
adecuada comprensión de los mismos.
Por otra parte, es importante comprender el aporte B- Que el alumno sea capaz de comprender y analizar el
de esta materia en relación con los objetivos de la carrera. En tal lugar de la Psicología y su devenir histórico desde
sentido se busca que el alumno, al estudiar la historia de la diferentes perspectivas epistemológicas.
Psicología, “conozca, comprenda y diferencie los fundamentos
científicos, éticos, filosóficos y socioculturales que conlleva toda
teoría y práctica psicológica”, como también que “desarrolle, C- Que el alumno sea capaz de analizar y arribar a una
durante la transcurso de la carrera, la capacidad de abordar comprensión socio-histórica de la Psicología en la
críticamente teorías, métodos, técnicas e instrumentos de la Argentina y los procesos de legalización del ejercicio
actividad profesional en cada uno de los ámbitos de aplicación”. profesional.
De igual modo procedemos a relacionar el aporte de
la materia con respecto al perfil del egresado. El estudio de la
D- Que el alumno sea capaz de valorar e integrar el
historia de la disciplina permitirá al futuro profesional, “responder a
conocimiento de la historia de la Psicologia a su
los requerimientos específicos que derivan de las actividades
formación de grado considerándolo un aspecto
reservadas al título y de las leyes de ejercicio profesional,
relevante para asumir un compromiso social y
respetando los principios y normas éticas de la profesión” y pueda
participativo, atento al bien común, para el desempeño
“desarrollar su propio rol profesional desde una perspectiva crítica y
de su tarea profesional.
reflexiva, integrando la investigación y la acción en sus
producciones científicas, interrogando y problematizando el valor
científico y social de sus conocimientos”.
Finalmente, los conocimientos y la reflexión que
promueve esta materia intentan aportar elementos para el ejercicio
profesional en la siguiente actividad reservada al titulo: “asesorar
en la elaboración de legislación que involucren conocimientos y
prácticas de las distintas áreas y campos de la psicología”.

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 HISTORIA E HISTORIOGRAFIA lector la reflexión sobre el presente y el futuro. Pretende, cuando no
es dogmático, ser escuchado o leído con ánimo crítico y polémico.
DE LA PSICOLOGÍA
El historiador sitúa el hecho que trata como sazón de inicio o
Profesor: Alejandro Roberto Oscar López - 2003
final de un tiempo o periodo, es decir, como límite entre momentos
dispares, señalando sus diferencias. Presenta los hechos con sus
contrastes, sus similitudes, sus continuidades y rupturas. Aporta
datos concretos tomados de documentos y archivos. Abreva en
¿Cómo piensan los historiadores?
relatos y tradiciones orales y escritas para sostener sus
afirmaciones e hipótesis explicativas. Busca afanosamente arribar a
Si la historia es la ciencia que narra los acontecimientos del
la objetividad histórica, pero inevitablemente se ve empujado a
pasado y hechos memorables, si dicha nación adopta la forma de
formular juicios de valor y modos de parecer personales. Al mismo
anales, crónicas, acontecimientos reseñados, incidentes descriptos,
tiempo ofrece al lector una gama de contenidos históricos para que
episodios y anécdotas pinceladas con diversos matices, son los
éste, por su parte, realice su propia composición de lugar,
historiadores quienes tienen la tarea de acercarnos a esas
aportando los datos necesarios para ello. Alguno que otro invita al
narraciones. Pero: ¿Cómo piensan los historiadores?
lector a mantener con él, un diálogo, adoptando en su discurso
escrito un tono coloquial, pues entiende que la historia es la historia
Describamos someramente este modo de proceder de estos
narrada, contada, dicha.
indagadores del pasado. El historiador toma uno o más hechos del
pasado, los contextualiza, los ubica cronológicamente, los compara,
Aún tratándose de la historia más lejana en el tiempo y
los vincula y relaciona con otros hechos, más o menos relevantes.
distancia, el historiador tiene la habilidad de acercárnosla, no solo
Luego de presentar los hechos memorables, se dedica a desarrollar
porque puede imprimirle a sus relatos orales o escritos la frescura
una serie de sucesos de menor relevancia, pero que en su conjunto
vívida de los acontecimientos - condición muchas veces facilitada
constituyen los antecedentes, la antesala, los prolegómenos del
por sus dotes literarias- sino, y en especial, porque posee la
asunto que ha trascendido en la memoria de los individuos y los
cualidad de establecer relaciones entre el pasado y el presente que
pueblos. Describe los escenarios en los que se suceden las
nos involucra en forma directa, como si su pluma estuviera
circunstancias de su interés. Presenta a los personajes que
orientada por un principio que le dicta que la historia lejana se
intervienen, desde sus ideas y recorridos personales, filosóficos e
convierte en historia próxima en tanto y en cuanto se relaciona con
ideológicos. Dibuja sus personalidades, sus ideales, sus prejuicios,
la historia propia. Esa es su habilidad, acertar, con la flecha de su
fortalezas y flaquezas de espíritu; y lo hace siempre desde un lugar
estilo, el blanco de nuestra propia historia personal, que sin darnos
instituyente, desde una ideología, usando su propia tabla de
cuenta y por fuera de nuestra voluntad, nos captura hacia el interés
valores. Presenta las ideas y teorías de pensadores consagrados
por la historia.
por una determinada tradición intelectual o cultural que, de algún
modo, puedan servir como representativas de las diferentes épocas
El historiador
históricas. Desde el fondo del presente, hace resaltar las figuras del
"Es el pasado, pues, el que se selecciona hechos
pasado para señalar las lecciones de la historia suscitando en el
instala en la conciencia del
observador cuando pretende
atrapar su presente".
3
significativos del pasado confiado en que lo hace de manera
adecuada. Hace uso - afirma Felix Luna- del fascinante poder que
tiene el historiador al decir que "la historia es tal como yo la cuento"
y establece de este modo cuales hechos son relevantes y cuales
no. Y esto, aunque pueda sonar a pedantería o exceso de
pretensión, no es otra cosa que la posibilidad de abrir el debate
historiográfico confrontando diversas opiniones ante un mismo
acontecimiento. Y en su labor no olvida nunca dedicar grandes
esfuerzos a señalar las consecuencias o hechos posteriores al que
analiza y del cual extrae, de modo intencional, una observación,
una sentencia, una lección para el presente en el que, al decir de J.
L. Romero: "es el pasado, pues, el que se instala en la conciencia
del observador cuando pretende atrapar su presente".
Para sí o para otros, el historiador pretende orientar y servir
de referencia para trabajos de investigación histórica de tal modo
que el estudioso de estas cuestiones pueda establecer los
contenidos concretos que se deben considerar insoslayables para
la transmisión de la historia y la formación de historiadores.
CONCEPTO DE HISTORIA
¿Para qué estudiamos la historia? Nadie puede dudar en
nuestros días acerca de la afirmación de que el ser humano es un
ser histórico. Se comprende por su historia, recurre a su memoria
histórica para comprender su presente y su devenir. Con el tiempo
ha convertido a la historia en objeto de estudio científico, ha hecho
de la historia una ciencia: la ciencia histórica. Esta, si bien
constituye un campo de conocimiento delimitado tanto por su objeto
como por sus métodos propios, es al mismo tiempo una disciplina
científica transversal, es decir, opera y contribuye con sus
conocimientos a otras disciplina, las atraviesa. Al momento en que
4
una ciencia cualquiera intenta dar fundamentos de su existencia, de
su práctica, de su trabajo con el conocimiento, de sus aristas
epistemológicas, recurre a la historia.
En nuestro caso, con relación a la Psicología recurrimos a la
historia para comprender que su estudio constituye un
instrumento válido para el esclarecimiento, formulación y
revisión de los fundamentos de la ciencia psicológica. Como
veremos más adelante la historia no debe confundirse con un relato
más o menos convenientemente ordenado de hechos, es más que
eso, implica una aproximación a los hechos históricos desde
diferentes perspectivas; aproximación que promueve la
comparación de éstas para dimensionar los efectos de la
historia sobre el presente de la disciplina psicológica. Con
relación a la historia más próxima, la historia de la psicología en
nuestro país, permite acceder al conocimiento de las principales
ideas y corrientes que han tenido vigencia y aún la mantienen.
¿Qué es la historia? Este primer interrogante nos abre el camino
que recorreremos. La historia esta constituida por los hechos
dignos de memoria. Con esta simple y sencilla expresión
intentamos dar respuesta a nuestra pregunta. Y aunque sencilla
exige algunas explicaciones que la fundamenten. Cuando
hablamos de historia frecuentemente la asociamos a los hechos
pasados ubicados cronológicamente en una línea de tiempo
imaginaria que nos dice cuando sucedió, que acontecimiento lo
antecede y cual lo continua. Pero esa ubicación solo es un paso
para el estudio de la historia. Si nos quedáramos en la cronología
reduciríamos la historia a un conjunto de hechos convenientemente
ordenados. La historia y su estudio merece otro tratamiento si
hemos de extraer de ella alguna enseñanza.
 La primera indicación para iniciar un estudio histórico es
determinar si serán incluidos todos los hechos acaecidos en el
pasado o solo aquellos que realmente revisten alguna importancia
para nuestro tema de interés.

Nuestra respuesta a la pregunta inicial nos dice que es

necesario seleccionar hechos y no tomar a todos. Si quisiéramos
incluir a todos los hechos del pasado que forman parte de la
historia de la psicología, no solo convertiríamos a esta en extensa,
sino también en tediosa y aburrida.

Es necesario entonces una operación de selección de

hechos. Esa selección la haremos desde el presente. Desde allí
dirigiremos nuestra atención hacia el pasado y dispondremos
nuestro pensamiento a indagar y reflexionar sobre esos
acontecimientos que guardan con nuestro presente alguna relación
de sentido. Así podremos imaginar, según el recorrido histórico, un
por venir. CONCEPTO DE VIDA HISTORICA

Como hemos dicho, la historia, entendida como ciencia con

El PRESENTE es siempre el curso medio del río, donde la vista se
pierde aguas arriba y aguas abajo.
José Luis Romero
De allí que sostenemos que estudiar historia, y en nuestro
caso estudiar historia de la psicología, es trascender la cronología,
para abocarnos a una operación de lectura de los hechos
históricos. Porque entendemos que al hacerlo de ese modo lo
convertimos en un instrumento valido para el esclarecimiento,
formulación y revisión de los fundamentos de la ciencia psicológica.
método y objeto propio, puede aporta a otras disciplinas de ciertos
instrumentos para sus propios análisis. Dichos instrumentos
ideados por los historiadores facilitan la tarea del investigador. Tal
es el caso del concepto de vida histórica que propone J. L.
Romero. Según este autor el concepto de vida histórica tiene tres
reinos conceptuales: sujeto histórico, estructura histórica y
proceso histórico. Con ellos es posible analizar los hechos del
pasado y extraer alguna enseñanza.
El sujeto histórico, el actor o actores que intervienen en la
producción de los hechos históricos tienen según Romero "una
continuidad sobrepersonal gracias a la cual la vida histórica tiene
un flujo de larga duración en el que lo que suele llamarse 'presente'
no es sino un acto de conciencia del individuo que incide en un
punto temporal de ese flujo y divide subjetivamente el curso
continuo de la vida histórica en dos etapas, una anterior y otra

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posterior a su personal incidencia en ella…, …el pasado resulta ser
la única realidad puesto que el futuro es sólo una realidad virtual" Dado este argumento, es necesario complementar la
dimensión cronológica con otros modos de analizar. La perspectiva
La estructura histórica, las ideas concepciones, teorías, paradigmática aporta elementos de interpretación histórica que
pensamientos producidos por el sujeto histórico constituyen la develan las concepciones y teorías más relevantes de un periodo o
estructura ideológica. Pero estas estructuras ideológicas van época en particular, así como la posibilidad de su comparación.
acompañadas por una serie de productos reales, materiales, que
forman la estructura real. La confluencia de ambas forma la La perspectiva procedimental invita a un estudio del sujeto
estructura histórica. histórico considerando sus niveles decisionales. Sabemos que todo
investigador, productor de conocimientos, generador de teorías y
El proceso histórico es el devenir temporal en el que se concepciones (en forma individual o colectiva) se ve enfrentado a la
conjugan tanto el sujeto histórico como la estructura histórica, responsabilidad de decidir en cada momento de su investigación
ideológica y real, y permite un análisis de los procesos de cambio los pasos que dará en el avance de su propio conocimiento y de la
que acompañan a la vida histórica en su naturaleza inmanente. ciencia que estudia en general. Estas decisiones nos informan
acerca de su modo de proceder, de sus detenciones y de sus
búsquedas. Nos interesan siempre las decisiones que afectan al
DISPOSITIVO TERNARIO DE INVESTIGACIÓN HISTORICA proceso histórico, es decir, aquellas que tienen consecuencias
relevantes para los continuadores y los procesos de construcción
Por nuestra parte, y dado el interés que despierta la del conocimiento. Además, es importante tener en cuenta que estas
investigación histórica, decisiones son tomadas a partir de ciertos referentes, no son
proponemos estudiar la hechas de manera ingenua o caprichosa. Rastrear los referentes -
DISPOSITIVO TERNARIO DE historia desde es decir, oros investigadores, teorías, concepciones y posturas
INVESTIGACIÓN HISTORICA diferentes similares o francamente diferentes a la suya, de autores anteriores
perspectivas: perspectivas: o contemporáneos- que los investigadores tienen en cuenta al
 Cronológica, cronológica, momento de decidir es una manera de comprender el trabajo que
 Paradigmática paradigmática y han realizado con el conocimiento.
 Procedimental. procedimental. La
primera hace referencia
a los hechos históricos OPERACIÓN HISTORIZANTE
desde su ubicación temporal. La historia no puede desprenderse de
esa noción de tiempo en tanto ordenadora de los hechos, de su Por su parte, un autor argentino, Hugo Vezzetti, dedicado
secuencia, que permite diferenciar el antes y el después. Sin desde hace tiempo a la historia de la Psicología en la Argentina,
embargo la cronología no agota los recursos de la ciencia histórica; propone el concepto de operación historizante. Por ella entiende el
en tal sentido la cronología es una condición necesaria pero no proceso mediante el cual se analizan "quiénes, cuándo y cómo
suficiente para comprender la historia. pensaron, desde un presente, un pasado históricamente

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formulable. En efecto, una disciplina construye y reconstruye
permanentemente su historia retroactivamente trazando hacia el
pasado las líneas de fuerza que ordenan los problemas del
presente. Se trata de una operación historizante por la cual se
piensa sus 'orígenes', funda tradiciones, selecciona y excluye,
legitima y sanciona. Y lo hace siempre desde algún lugar
institucional: cátedra, sociedad científica, publicación".
Hasta aquí disponemos entonces de diversos instrumentos
para analizar los hechos del pasado y comprender sus efectos
sobre nuestro presente, de tal modo que la memoria sea
recuperada y en su dinamismo permita conocer las tendencias de
la disciplina hacia el futuro.
FUNCIONES DEL HISTORIADOR
Abad Pascual y Díaz Fernández señalaban que el
historiador pretende cumplir con cuatro funciones básicas.
1. Una función historiografía (termino que nosotros
utilizaremos en un sentido diferente) llevando a
cabo un estudio lo mas critico posible de las
diferentes épocas en relacion con sus con sus
mas representativos pensamientos teniendo en
cuenta sus dimensiones históricas, políticas,
literarias, etc.
2. Una función comprensiva en un intento de
interpretar el significado y la importancia de los
principales problemas de cada época y su
vigencia y relevancia actual.
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3. Una función articuladora en busca de una visión
integradora de la historia indicando las
semejanzas y continuidades del pensamiento de
una época con relación a otra, o sus diferencias y
marcadas rupturas, que en ultima instancia, a
través de innumerables vicisitudes, se plasman
en determinadas realizaciones actuales.
4. Por ultimo una función de incardinacion
(implicación) en la vida por la cual se entiende
que los contenidos de la historia no deben
presentarse como una mera acumulación de
datos o simple curiosidad erudita, mas bien,
desde este punto de vista, debe encontrarse en
ellos el significado de nuestra propia vida
EL OBJETO DE ESTUDIO DE LA HISTORIA DELA PSICOLOGIA
Si la historia toma como su objeto al conjunto de hechos
dignos de memoria, conviene ahora precisar si la historia de la
psicología tiene, por su parte, un objeto de estudio.
Tortosa Gil dice:
“El objeto de estudio de la historia de la psicología es el
proceso de construcción, transformación y cambio de la
psicología a lo largo del tiempo, entendida esta como una
actividad organizada de ciertos individuos en torno a unos
problemas de investigación que ellos mismos califican de
psicológicos”
Para un estudio de la historia de la psicología que
responda a los requerimientos de abordaje de un objeto de
estudio como el que señala Tortosa Gil en el párrafo anterior, es
necesario considerar que la cronología es una condición
necesaria pero no suficiente y entonces se necesita de otros
aspectos que la complementen. Para ello proponemos aquí un
enfoque al que llamamos historiográfico que nos posibilita
introducir nuevas dimensiones de investigación histórica.
HISTORIA E HISTORIOGRAFIA
Historia, Historiografía, Filosofía de la Historia, son expresiones
conceptuales que describen la gama de matices que vinculan al
hombre con su pasado. O dicho en otros termino, son los modos
conceptuales que el hombre ha ideado para arreglárselas con la
comprensión de su pasado. Agnes Heller, al estudiar la llamada
conciencia histórica (los restos del pasado son la conciencia
histórica misma) sostiene que esta evoluciona y discurre desde una
conciencia cotidiana, anterior a la historia escrita, que a su vez es
anterior a la filosofía de la historia como ultimo estadio de la
reflexión histórica.
CONCIENCIA HISTORICA
Es verdad que el ser humano ha pasado por estos tres
momentos: vivió la historia, luego la escribió, por ultimo
reflexionó sobre lo escrito. El historiador de nuestros días tiene la
posibilidad de integrar estas tres etapas de manera dialéctica como
momentos diferenciados de su producción investigadora.
No pretendemos hacer aquí filosofía de la historia. No solo
porque hacerlo resulta demasiado ambicioso, sino también porque
8
los problemas a los que ella se dedica exceden los propósitos de
este ensayo. Recordemos someramente que la filosofía de la
historia se enfrenta a problemas de orden ontológico,
epistemológicos, metodológicos, y de manera aun más precisa
intenta responder a interrogantes como ¿Cuál es la naturaleza de
los hechos históricos?, ¿Existen, acaso, diversos tipos de hechos
históricos?, ¿Cuál es el sujeto de la historia?, Existe la explicación
histórica?
Lejos estamos de intentar responder a estas cuestiones.
Nos limitaremos a recorrer los territorios de la Historia y la
Historiografía de la Psicología. Pero en razón de que existe cierta
ambigüedad en el uso de ambos términos, hasta el punto de
confundirse con facilidad, es necesario aclarar qué sentido toman
para nosotros. Usamos el termino Historia para referirnos al
conjunto de acontecimientos dignos de memoria. Dicho conjunto
resulta de un acto de selección mediante el cual, desde un
presente, se escogen de entre todos los hechos del pasado, sólo
aquellos que guardan con nuestro presente una relación de sentido.
En lo atinente a la psicología incluso puede pensarse que su
historia estaría en condiciones de delinear su propio objeto de
estudio.
En lo que respecta al termino Historiografía, lo utilizamos
para describir la actividad mediante la cual el historiador se ocupa
de analizar lo modos, métodos, etc. que se han usado para narrar y
estudiar acontecimientos históricos. En otras palabras, mientras la
historia relata y estudia los hechos del pasado, la historiografía
estudia los modos en que la historia es narrada por los diversos
historiadores.
La distinción que hacemos entre ambos términos es
necesaria para sostener la idea de que la historia de la psicología
puede ser abordada, estudiada y comprendida, desde un enfoque
historiográfico. Analizando los diferentes estilos y modos de escribir
e interpretar la historia de la psicología podremos conocerla y 3. Investigan la historia de la psicología
comprenderla. Este enfoque presenta al menos dos ventajas teniendo en cuenta los países de origen de las
diferentes posiciones teóricas.

1. Permite no ajustarse a una sola

versión de la historia. En el siguiente cuadro se presentan las Psicología según los
tipos de agrupamientos historiográficos.
2. Facilita tener una visión más amplia
de los hechos históricos
posibilitando la confrontación de
datos y diversas opiniones. ESCUELAS Y LINEAS DE PSICOLOGIAS
SISTEMAS DE INDAGACION POR PAISES DE
PSICOLOGÍA ORIGEN
Existen en la historia de la psicología diversos textos
dedicados a su estudio y cada uno de ellos indica el conjunto de Funcionalismo Psicología Psicología
fuerzas históricas que han intervenido en la constitución de esta Experimental Alemana
disciplina científica. Están escritas de acuerdo a la perspectiva que Estructuralismo
cada autor toma respecto de sus intereses seleccionando los Psicología Animal Psicología
eventos más relevantes. Agrupados de manera general Conductismo Británica
encontramos aquellos que Psicología
Neoconductismo Individual Psicología Rusa
1. Investigan la historia de la psicología
considerando el surgimiento y Reflexología Psicología Clínica Psicología
desarrollo de los Sistemas y Escuelas Francesa
de Psicología. Psicología Infantil
Gestalt
Psicología
2. Investigan la historia de la psicología Norteamericana
Psicoanálisis Psicología Social
según las líneas de indagación y los
dominios que se abren a partir del
momento en que la psicología busca Cognitivismo
su propio camino hacia el campo de la
ciencia.

LA PSICOLOGIA PRECIENTIFICA

9
 Los desarrollos del positivismo inaugurados por su fundador
y divulgados por el mundo occidental, con mayor o menor grado de
aceptación, a partir de la década de 1830 adquiere relevancia para
todas las ciencias que aspiran a formar parte del concierto del
conocimiento reconocido por la comunidad de intelectuales y
sabios. El positivismo se convierte en un referente ineludible al
momento de determinar objetos de estudio y métodos, tanto en el
marco de las ciencias físicas como naturales. Las ciencias sociales
emergentes en la segunda mitad del siglo XIX, entre ellas la
Psicología, no escapan a esa especie de atractor que seduce sin
más a la inteligencia de los hombres pensantes: la posibilidad de
constituir una ciencia positiva que contribuya no solo al progreso
del conocimiento sino también al mejoramiento de la sociedad.
La psicología, inicialmente encaminada por filósofos,
educadores y médicos, pretendía su porción de ciencia. Esta
intencionalidad de, por ejemplo, un Beber, un Fechner o un von
Hemholtz, interesados en llevar los fenómenos mentales al
laboratorio tomando como modelo y garantía de cientificidad a las
ciencias naturales, en particular la fisiología, conlleva una división
de aguas. Se perfila así una psicología pre - científica y una
científica. La primera ligada a la filosofía y la religión, especulativa,
metafísica, sin límites definidos, sin objeto preciso y método propio.
La segunda conquistando aquello de lo que carecía: objeto y
método para sumarse al entorno científico de su época.
Si bien se reconoce una serie de hechos como delimitadora
de ambas psicologías, la psicología pre – científica es a su vez
subdividida por los historiadores en tres grandes sub – periodos. El
primero al que llaman clásico y coincide con el pensamiento griego,
de tipo cosmo - céntrico, más precisamente el pensamiento pre -
socrático.
El segundo el teo – céntrico, correspondiente a la edad
media en la que la preocupación giraba en torno a la comprobación
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de la existencia de Dios. El tercero el antropo – céntrico con
marcado interés en la naturaleza y en particular en la naturaleza del
hombre. Algunos historiadores de la psicología (entre ellos Edna
Heidbreder) reconocen que muchas ideas ya presentes en el
pensamiento griego fueron retomadas por la psicología y
desarrolladas bajo concepciones y conjuntos teórico prácticos de
carácter científico. A modo de ejemplo, la idea de proceso psíquico
esta presente en la noción de devenir de Heráclito; la noción de
totalidad organizada (gestalt) esta presente en Anaxágoras.
Como ya señalamos la psicología científica nace ante la
inquietud de llevar problemáticas aun no explicadas al ámbito de la
ciencia, en particular las ciencias naturales. Sin embargo, los temas
de interés no resultaron de la nada. Muchos de ellos fueron
heredados de la filosofía y los primero intentos de organizar una
psicología científica constituyeron las respuestas a dichos
problemas. Entre ellos la temática de la percepción, o la relación
mente cuerpo, o los tiempos de reacción, las diferencias
individuales, merecieron miríadas de monografías especializadas.
LA PSICOLOGÍA CIENTÍFICA: EL MOMENTO FUNDACIONAL
Diversos historiadores de la Psicología señalan el año 1879
como el momento inaugural de la Psicología científica tomando
como referencia la implantación del laboratorio de Psicología
experimental creado en Leipzig (Alemania) por W. Wundt.
Este hecho por supuesto implica un acto determinante para
la historia de la disciplina. Sin embargo, la atribución de acto
fundador conlleva el riesgo de omitir y negar otros hechos de
naturaleza similar que obturados por el primero, se pierden en la
historia. De este modo al decir que Wundt funda el primer
laboratorio de psicología experimental en 1879 implica desconocer
iniciativas similares que lo precedieron. Tal es el caso de Seguí en
Italia quien también, en años anteriores (1876), generó la creación
de un laboratorio de psicología experimental como el de Alemania.
Por tal motivo, a nuestro entender, sería más conveniente decir que
el laboratorio de Wundt es, en todo caso, el principal más que el
primero. Principal porque en comparación con otros, que tenían los
mismos objetivos, el de Wundt fue convocante y reconocido como
más avanzado. A él recurrieron infinidad de investigadores
dedicados a las temáticas psicológicas, los que luego de un periodo
de formación con el maestro alemán, al volver a sus países de
origen, promovieron a su vez la creación de otros tantos
laboratorios tomando como modelo al de Leipzig.
Oponemos de este modo la noción de momento fundacional
al de acto de fundación. La primera denota la necesidad de
reconocer que en un determinado periodo de tiempo –para nuestro
caso, la segunda mitad del siglo XIX- existía la intención de
consolidar la disciplina psicológica para encuadrarla dentro de los
cánones de la ciencia. Dicha intención se manifestaba
simultáneamente en diferentes lugares geográficos y a cargo de
diversos investigadores, cada uno de los cuales intentaba a su
manera y con los recursos de su formación y de su tiempo,
responder a los requerimientos de la investigación. Le segunda
implica determinar y privilegiar un hito, o varios, pero con el riesgo
de omitir acontecimientos relevantes para una adecuada
interpretación histórica.
Estas iniciativas desembocan pronto en la determinación de
un objeto de estudio y una metodología capaz de abordarlo. Pero
antes de señalar estos componentes indispensables para la
consideración de científica para cualquier conocimiento construido
por el hombre, es necesario indicar cuales fueron los pasos
iniciales de lo que hemos llamado el momento fundacional. El
primer paso fue intentar llevar ciertos fenómenos, todavía
11
inexplicados, al campo de la experimentación. Los problemas
heredados de la filosofía marcan las temáticas inaugurales, y con
ellas la posibilidad entrevista de lograr introducir la medida en
Psicología.
Los nombres de Beber, Fechner y von Hemholtz resaltan en
el horizonte de la búsqueda de sistematización cuasi matemática y
con marcado acento positivista, de los fenómenos psíquicos. A este
primer tiempo se lo llegó a denominar incluso “psicofisiologista”
dado que la referencia científica recaía en la disciplina fisiológica
como garantía de confiabilidad y cientificidad. Los recursos,
métodos y técnicas de la fisiología –para ese entonces bastante
avanzados- aseguraban una forma de investigación confiable,
además de reconocidos y validados por la comunidad científica.
Pronto vendrán los laboratorios experimentales que se
expanden por todo el mundo occidental –incluida la Argentina- para
hacerse cargo de la posta de la investigación psicológica
anunciando de ese modo la autonomía de la disciplina con la
delimitación de un objeto de estudio y una metodología específica.
La conciencia, o la experiencia inmediata, se entrona como el
objeto a investigar. El método, la introspección o capacidad de
observación interior. La filosofía que guía todo este entramado
investigativo: la filosofía positiva. El modelo a imitar: la ciencia
natural.
LA NUEVA PSICOLOGIA
Si bien no fue el único, la figura de W. Wundt resalta en la
perspectiva de la nueva psicología. Este autor, proveniente del
campo de la filosofía entrevió el basto campo de indagación de la
psicología y encaró el desafío de llevar, a dominios antes inciertos,
temas de investigación mediante métodos y técnicas ideadas por él
y su equipo de investigación. La generación de experimentos e
incluso de instrumentos especialmente diseñados favorecieron la
demostración de un sin número de eventos psíquicos conscientes
vinculados a las sensaciones y percepciones, novedosos para la
época. Tomando a la conciencia como objeto se proponía
descomponerla en sus elementos más simples mediante el análisis.
En segundo lugar comprender los mecanismos que intervienen en
la combinación de tales elementos y por último, deducir ello leyes
generales. Con ello pudo obtener diversas expresiones de la vida
mental. Sin embargo, tiempo después de trabajar en estos tópicos
advirtió la dificultad de estos procedimientos para comprender
aspectos de la vida humana de orden superior y buscó en otros
dominios las formas de investigarlos.
Se distinguen así en la obra de Wundt, dos periodos de
investigación. El primero, dedicado a la psicología individual,
coincidente con la creación de su laboratorio, y los primeros
tiempos de exploración de los territorios recién conquistados por la
psicología. De ese periodo se nutrieron, como ya lo señalamos, un
conjunto de investigadores entre los que se destaca Titchener que
lleva las enseñanzas de Wundt a Estados Unidos formando en ese
país el movimiento estructuralista. El segundo periodo wundtiano
está caracterizado por su búsqueda de explicación de fenómenos
de la vida psíquica y social del hombre, para los cuales los recursos
de una psicología individual se mostraban insuficientes. Su
preocupación giraba entonces en comprender el orden cultural, el
lenguaje, el pensamiento, y sobre todo la voluntad. Inaugura con
estas temáticas su periodo de psicología etnográfica en la que por
sobre los estudios individuales, predominan las investigaciones
etnográficas y de la psicología de los pueblos, que merecieron
incluso las observaciones y las críticas de Freud en Tótem y Tabú.
LAS TRASFORMACIONES DE LA PSICOLOGÍA
12
La investigación histórica de esta disciplina permite
reconocer las grandes transformaciones que ha sufrido con el
transcurrir del tiempo, mencionaremos sucintamente algunas de
ellas:
 Desde su intención de formar parte de las ciencias naturales
se transforma en ciencia social
 Por su preocupación por ser ciencia básica pasa a constituirse
en ciencia aplicada.
 De su desarrollo casi exclusivo en el ámbito académico se ve
conducida al ámbito profesional.
 Desde su búsqueda de leyes generales llega a descubrir e
investigar la singularidad.
BIBLIOGRAFIA BASICA
GONDRA, José María. 1998. Historia de la psicología. Madrid. Ed.
Síntesis.
MARX, M. Y HILLIX, W. 1985. Sistemas y teorías psicológicos
contemporáneos. México. Ed. Paidos.
REUCHLIN, Maurice. 1980. Historia de la psicología. México. Ed.
Paidos.
ROMERO, José Luis. 1988. La vida histórica. Buenos Aires. Ed.
Sudamericana.
TORTOSA GIL, Francisco. 1998. Una historia de la psicología
moderna. Madrid. Ed. Mc Graw Hill.
VEZZETTI, Hugo. 1988. El nacimiento de la psicología en la
Argentina. Buenos Aires. Ed. Puntosur.
LINEAS DE INDAGACION Y
DOMINIOS EN PSICOLOGIA

1 - INTRODUCCION
Al considerar los programas de estudio de
las carreras de Psicología resulta
imposible no prestar atención a ciertas
regularidades y a la interrelación de
algunos de sus componentes básicos.
Dichas interrelaciones parecen dibujar líneas
que se desprenden de un tronco común y manifiestan la vinculación
de sus contenidos, de tal modo que puede uno agruparlos
delimitando ciertos campos específicos de conocimientos y de
práctica.
Así por ejemplo podemos reconocer que
Metodología de la investigación, se vincula con Práctica de la
investigación. Psicoestadística con Psicodiagnóstico.
Neuropsicología con Psicoanálisis, Psicopatología, Psicología
clínica y Psicoterapia. Psicología Evolutiva Niñez con Psicología
cognitiva y del aprendizaje y Psicología educacional. Psicología de
la comunicación con Problemas sociológicos, Psicología social,
familia y Sistemas, Teoría y técnica de grupos, y psicología
institucional y comunitaria.
Por otra parte sucede algo similar al observar las leyes de
ejercicio profesional de la psicología. Al delimitar el ejercicio de la
profesión y las áreas ocupacionales, se reitera la clásica división:
Psicología Clinica, Psicología Educacional, Psicología Laboral,
Psicología Social e Institucional y Psicología Jurídica (Ley de
Ejercicio Profesional de la Psicología de la Provincia del Chaco Nº
3503, Art. 4; Ley de Ejercicio Profesional de la Psicología de la
Provincia de Corrientes Nº 4025, Art. 4) De este modo se otorga
incluso estatuto legal a la tarea del psicólogo circunscribiendo los
dominios de aplicación de esta ciencia y dejando abierta la
posibilidad de que nuevos avances aconsejen otras clasificaciones.
En otros contextos la división en secciones o áreas de
interés de la psicología, tanto en los aspectos teóricos como de
aplicación, adquiere ribetes muy detallados cuyos limites muchas
veces resulta difícil de reconocer. Así por ejemplo el número de
secciones de la American Psychological Association para fines de
los 80’ contaba con alrededor de 45 secciones diferentes.
Algunas Divisiones de la American Psychological Association en
1989
 Psicología general

13
 Enseñanza de la psicología
 Psicología experimental
 Evaluación, medición y estadística
 Psicología fisiológica y comparativa
 Psicología del desarrollo
 Psicología de la personalidad y social
 Sociedad para el estudio psicológico de problemas sociales
 Psicología de las artes
 Psicología Clinica
 Asesoría psicológica
 Sociedad de psicología industria y Organizacional
 Psicología educacional
 Psicología escolar
 Psicología de la orientación
 Psicólogos que trabajan en servicios públicos
 Psicología militar
 Desarrollo del adulto y envejecimiento
 Experimental aplicada e ingeniería psicológica
 Psicología de la rehabilitación
 Psicología del consumo
 Psicología teórica y filosófica
 Análisis experimental del comportamiento
Pues bien:
 ¿Existe entre estas evidencias alguna relación?
 ¿Existe entre el diseño de los planes de estudio para la
formación del psicólogo, la legalización de su práctica
profesional diferenciada en campos ocupacionales, o la división
en secciones particularizadas que expresan los intereses y
preocupaciones que los guían, alguna relación de sentido?
Por supuesto la respuesta resultará afirmativa casi por su
obviedad. Ahora bien, la pregunta siguiente es:
 ¿Por qué?
Y ante ella existen al menos dos alternativas. Considerar que las
cosas son así, que los psicólogos se ocupan de cuestiones clínicas,
educativas, comunitarias, jurídicas, etc., y para ello se deben formar
con planes de estudio que los capaciten en estas prácticas; y,
además, no solo es así, sino que siempre será así. Posición que
llamaremos nosotros “fijismo”.
La otra alternativa es analizar esta cuestión desde una
perspectiva histórica indagando en el pasado las razones que han
conducido a la realidad que observamos en el presente, de tal
modo que podamos liberarnos del fijismo antes descripto y entrever
las tendencias que nos conducirán al futuro de la profesión y la
ciencia psicológica.
2 - LAS DIVERSAS FUNCIONES DEL HISTORIADOR
Ello implica activar en nosotros una mirada histórica e
incluso historiográfica para comprender el devenir de la
investigación en psicología, sus resultados y los
campos de aplicación que se fueron diseñando a lo
largo de su historia.
Activar
del historiador, ubicarnos en el modo de pensar de éste,
utilizar sus categorías de pensamiento y extraer de ello las
enseñanzas de la historia. Para facilitarnos ese posicionamiento
puede resultarnos útil recordar las funciones del historiador.

14

Abad Pascual y Díaz Hernández señalan que el historiador
pretende cumplir con cuatro funciones básicas:
a) Una función historiográfica1 llevando a cabo un estudio lo
más critico posible de las diferentes épocas en relación con sus
más representativos pensamientos teniendo en cuenta sus
dimensiones históricas, políticas, literarias, etc.
diversos textos que se han ocupado de la historia de esta disciplina.
Desde un texto ya clásico como el trabajo de Edna Heidbreder en
su Psicología del siglo XX, hasta uno más contemporáneo como el
de Francisco Tortosa Gil, coordinador de un trabajo que reúne a
casi 37 investigadores de la historia de la Psicología. O, desde José
Ingenieros y su Psicología en la República Argentina de 1909,
hasta los trabajos de Hugo Vezzetti en el caso de la historia de la
psicología argentina.

b) Una función comprensiva en un intento de interpretar el

significado y la importancia de los principales problemas de
cada época, y su vigencia y relevancia actual. 3 – LA HISTORIOGRAFIA DELA PSICOLOGIA

c) Una función articuladora en busca de una visión integradora

La historiografía de la Psicología muestra
de la historia indicando las semejanzas y continuidades del
diversos matices. El clásico enfoque que
pensamiento de una época con relación a otra, o sus
describe los acontecimientos más
diferencias y marcadas rupturas, que en última instancia, a
relevantes de la historia de la disciplina
través de innumerables vicisitudes históricas, se plasman en
según la organización de sistemas y
determinadas realizaciones actuales.
escuelas, denota la trascendencia de
algunos nombres importantes, su obra, sus
d) Una función de incardinacion (o implicación) en la vida por la
teorías, las de sus seguidores y los diversos
cual se entiende que los contenidos de la historia no deben
nucleamientos alrededor de un conjunto de ideas directrices. No
presentarse como una mera acumulación de datos o simple
hay dudas de que estos sistemas y escuelas pretenden lograr2:
curiosidad erudita, más bien, desde este punto de vista, debe
encontrarse en ellos el significado en nuestra propia vida.
1- Una exposición coherente y unitaria del campo total de la
psicología.
Se trata entonces de establecer un estudio critico de los
2- Que los elementos en apariencia caóticos puedan ordenarse y
principales problemas de cada época con relación a otras y de
esclarecerse.
hallar en dicho estudio la relación de sentido con nuestro presente.
3- Definir un objeto de estudio.
Si llevamos el despliegue de estas funciones al ámbito de
nuestro interés, la psicología, no resultará difícil reconocerlas en los
4- Establecer los problemas centrales.
1
Concepto al que damos nosotros un sentido diferente entendiéndolo más bien 2
Para una ampliación de estos aspectos puede consultarse el texto de Edna
como los distintos modos de contar o narrar la historia. Heidbreder “Psicologías de siglo XX”. Ed. Paidos (1991)

15

5- Coordinar los métodos de investigación.
6- Precisar las relaciones con otros núcleos de conocimiento.
7- Identificar procesos y elementos básicos.
8- Destacar los aspectos distintivos.
9- Delinear el entorno general u orientación características.
Este enfoque historiográfico nos brinda un panorama
general de los sistemas y escuelas que se fueron desarrollando a lo
largo de la historia de la psicología. Pero puede resultar insuficiente
para responder a las preguntas que formulábamos en la
introducción acerca de la relación entre la formación del profesional
psicólogo, la delimitación de campos de su práctica profesional y el
devenir histórico.
Para complementar esa primera orientación historiográfica
podemos recurrir a un segundo enfoque que quizá convenga
describir como una historia de la psicología que estudia e investiga
las líneas de indagación y los dominios que se abrieron a partir
del momento en que la psicología buscó su propio camino en el
campo de la ciencia.
4 – LAS LINEAS DE INDAGACION
Recordemos sintéticamente que el intento de la Psicología para
establecer su independencia respecto de la Filosofía y de la
16
Religión, tuvo su máxima expresión en la segunda mitad del siglo
XIX, y principalmente en los últimos 25 años de ese siglo. Sin
delimitar con una precisión exhaustiva el momento exacto de
nacimiento de lo que pasaría a llamarse “Psicología Científica”,
preferimos nosotros calificar a dicho periodo como el “momento
fundacional” de la psicología científica. Desde los primeros
intentos de llevar temas psicológicos al laboratorio, lograr controlar
determinados fenómenos de acuerdo a los métodos de las ciencias
físico-naturales, hasta la demarcación de un objeto de estudio y un
método propio, la psicología fue delineando diversos dominios de
investigación, exploración y aplicación de sus resultados.
Como ya lo hemos señalado, uno de los aspectos
resultantes de ese momento fundacional fue el surgimiento de
diversos sistemas y escuelas psicológicas. Paralelamente también
surgieron diferentes dominios al intentar dar respuestas y
explicaciones a los fenómenos que se estudiaban. Un autor que se
ha dedicado a señalar estas líneas de indagación dibujadas por la
psicología desde el momento de su inicio como ciencia autónoma
es Maurice Reuchlin. Este autor se ha interesado en explorar la
variedad de problemas a los que se han enfrentado los primeros
psicólogos y las estrategias que idearon para responder a dichos
problemas. En la introducción de su libro Historia de la Psicología,
expresa:
“Muy pronto se multiplicaron las investigaciones para
explorar un dominio que revelaba ser vastísimo. En
efecto, se trataba de tomar como objeto de estudio tanto
al animal como al hombre, de considerar a éste tanto en
sus características generales como en las diferencias que
distinguen a los individuos, de estudiar al enfermo y al
hombre normal, al niño y al adulto, y al hombre aislado y
también incluido en los múltiples grupos sociales de que
forma parte. La gran diversidad de estos problemas ha
 provocado cierta diversificación de los métodos, y
actualmente es legitimo distinguir diversos dominios”.
En el análisis de los dominios a los que se refiere,
Reuchlin distingue básicamente a:
1) La psicología experimental
2) La psicología animal
3) La psicología diferencial
4) La psicología patológica
5) La psicología infantil
6) La psicología social
A continuación describiremos brevemente cada una de
ellas.
La Psicología Experimentalbusca estudiar al
hombre normal en situaciones especialmente
controlables de laboratorio. Si bien se la puede
reconocer como una psicología particular, puede al
mismo tiempo considerarse al método experimental
como un método de la psicología compartido por otras
psicologías, ya que sus procedimientos son igualmente aplicados
en, por ejemplo, la psicología animal, infantil o social. Su modelo
de cientificidad lo toma de las ciencias físico-naturales y acentúa
la importancia de la medición y la observación de los fenómenos.
Su predominio debe situarse en el momento inicial en que la
psicología se encuentra íntimamente vinculada a la fisiología.
Pero pronto el modelo del método experimental utilizado
17
demostraba que sus alcances resultaban insuficientes para dar
cuenta de fenómenos humanos de orden superior como la
afectividad, la voluntad, el pensamiento, la imaginación o el
lenguaje. Sin embargo, los intentos de sistematizar los resultados
experimentales continuaron y, para superar las limitaciones del
método, se recurrió a nuevas formas que, pasando por el campo
de la estadística y el análisis factorial, llevaron en los tiempos
más modernos a los estudios de campo, métodos de encuestas o
a la denominada investigación-acción.
La Psicología Animal pudo demostrar que ciertas
adaptaciones se efectuaban en el hombre y en el
animal siguiendo los mismos procesos. De ello
resulta que la experimentación e investigación con
animales podía ser fructíferas para extender sus
resultados al hombre y otorgarles un alcance
general. El uso de animales para la investigación
psicológica contaba con algunas ventajas
importantes:
1- En primer término, ciertos procesos son en general más
simples en el animal que en el hombre, en el sentido de
que no está expuestos a niveles de interferencias
producto de aprendizajes previos.
2- En segundo término, la investigación con animales
permite explorar problemas en un nivel más elemental de
lo que posibilita la experiencia más sencilla efectuada en
el hombre.
3- La posibilidad de llevar los resultados de los experimentos
con animales a la comprensión de la naturaleza del
hombre evitando incurrir en un antropomorfismo.

La Psicología Diferencialtoma como objeto de
estudio para sus investigaciones a las variaciones
entre individuos o entre grupos. Sus avances
permitieron incorporar a la psicología estudios
estadísticos y comparativos. Por otra parte la comprobación de
que era posible la medición de ciertas funciones psíquicas
mediante la utilización de instrumentos adecuadamente
construidos para tal fin, dio lugar a la proliferación de estos y a la
generación una tradición llamada psicometría. En esta rama de la
psicología ubicaremos a los Test Mentales. Con ellos se intentan
evaluar diferentes funciones psíquicas superiores como la
inteligencia y/o factores de la personalidad dando lugar a la
diferencia entre pruebas psicométricas y pruebas proyectivas o
de personalidad. El ámbito de aplicación de estos instrumentos
es variado y abarca desde el diagnóstico de personalidad, la
selección de personal para diferentes desempeños, la orientación
vocacional, investigaciones educativas, pericias judiciales. En
general se ha abandonado la idea de que la sola aplicación de
estas técnicas facilita la comprensión de las facultades o la
personalidad del sujeto, y se sostiene la necesidad de
combinarlas con otras técnicas como por ejemplo la entrevista
psicológica.
La Psicología Patológicase interesa por
una categoría especial de hechos, el
comportamiento de los enfermos mentales.
Sus investigaciones se enlazan con
ámbitos vinculados con la Psiquiatría, en
especial la de origen francés y el
Psicoanálisis. Este último ha tenido una
importancia fundamental en la psicología al desarrollar sus
estudios sobre la vida y los determinantes inconscientes en la
producción de los fenómenos normales y anormales. El aporte
principal de esta psicología ha sido el denominado “método
18
clínico”. Este método procura arribar a un examen histórico
exhaustivo que conduce a un cuadro descriptivo explicativo del
caso y a un pronostico del mismo. Esta noción del método clínico
es propia de los enfoques psiquiátricos. La psicología y en
especial el psicoanálisis ponen el énfasis en el tratamiento del
paciente en una relación personalizada en la que, sobre todo,
prevalezca la particularidad y la singularidad de esta último.
La Psicología Infantil estudia la evolución, el
desarrollo, el crecimiento, la adquisición de las
diversas facultades del hombre, tales como la
inteligencia, la afectividad, el sentido social y
moral. La preguntas por las características del ser
adulto han llevado a la psicología a interrogar sobre el niño y su
desarrollo. Sin embargo, este primer núcleo de interés condujo a
determinar que su objeto de estudio, el niño, tenía su propia
especificidad, y por lo tanto las investigaciones se abocaron a
explorar las características de esa edad evitando el
reduccionismo que establece que el niño es un adulto en
miniatura. Entre los aspectos más destacados de esta psicología
se encuentra la diferenciación entre los estudios longitudinales y
los estudios transversales. Los primeros se dedican a
observaciones prolongadas en el tiempo de uno o varios sujetos
con el fin de evaluar y realizar un seguimiento de la evolución de
determinada función. Los transversales, en cambio, efectúan
observaciones sobre un sujeto o varios, en un momento o tiempo
determinado.
La Psicología
Social se dedica a estudiar las
interacciones entre los individuos y los
grupos. La dinámica de los grupos constituye un amplio campo
de investigación en el que se intentan develar las fuerzas que
intervienen en la formación y desarrollo de los grupos, a través
del estudio de variables como cohesión grupal, pertenencia
grupal, pertinencia grupal, liderazgo, objetivos grupales, factores BIBLIOGRAFIA CONSULTADA
internos y externos que inciden en su dinámica, la relación del
grupo con la tarea, etc.
Qué aporta el individuo al grupo, y a la vez, qué brinda el grupo a  Leyes de ejercicio profesional de la psicología de CHACO y
la subjetividad del individuo son las preguntas fundamentales de CORRIENTES.
esta psicología. El campo de aplicación se desarrolla en torno a  MORRIS, CHARLES. (1992) Psicología: un nuevo enfoque. México.
estudios de opinión y actitudes, la publicidad, las relaciones Ed. Prentice Hall.
 ABAD PASCUAL, JUAN J. y DIAZ HERNADEZ, CARLOS. Historia
humanas, la educación, la industria y las condiciones de trabajo.
de la Filosofía.. (1996). España. Mc Graw Hill.
 REUCHLIN, MAURICE. (1991). Historia de la psicología. México. Ed.
Paidos.
5 – COMENTARIO FINAL  HEIDBREDER, EDNA.(1991). Psicologías de siglo XX. Ed. Paidos
 VEZZETTI, HUGO. (1988). El nacimiento de la Psicología en la
La mirada histórica –como lo señaláramos más arriba- Argentina. Buenos Aires. Ed./ Puntosur.
busca establecer un estudio critico de los principales problemas  TORTOSA GIL. (1998). Una historia de la psicología moderna.
de cada época con relación a otras y de hallar en dicho estudio la España. Ed. Mc Graw Hill.
relación de sentido con nuestro presente. Siguiendo esta
orientación y estableciendo un estudio eminentemente
historiográfico, podemos establecer que las características de los
PSICOLOGÍA Y PSICÓLOGOS
planes de estudio para la formación del profesional psicólogo y la
delimitación de las diferentes áreas ocupacionales, no es
ARGENTINOS
meramente un producto arbitrario; son el resultado del devenir
histórico de la psicología. Desde el momento en que la psicología
DE LOS AÑOS 80`
se constituye en ciencia autónoma va marcando los caminos de
la investigación, los problemas con los que se encuentra y las
diversas maneras de responder a ellos. Hemos recorrido Lic. Alejandro Roberto Oscar López
sintéticamente las líneas de indagación que se perfilaron al Profesor Titular de la Cátedra de
comienzo, algunas de las cuales aún continúan y marcan una
Historia Epistemológica de la Psicología
tradición. Otras quizá persistan aunque en espacios restringidos.
Universidad de la Cuenca del Plata
La tendencia que se observa es a la ampliación de estos
dominios. Si bien en nuestro medio mantenemos cierta tradición,
es posible reconocer la necesidad de profundizar en la
exploración de ciertos campos, y la existencia de nuevos 1 - INTRODUCCIÓN
ámbitos de investigación, teorización y aplicación de la ciencia
psicológica.

19
 Aquí esbozaré, a modo de ensayo, algunas reflexiones
acerca de un pasado reciente, un pasado que aún nos pisa los
talones. Afortunadamente la ciencia historiográfica, después
de excomulgar durante mucho tiempo al pasado reciente
como objeto de investigación, lo ha recuperado, y hoy cuenta
con medio siglo de vida. Diversas razones confluyen para ello.
En primer término porque las sociedades han comprendido
que la formación de identidades colectivas o individuales ya
no se construyen mirando al futuro, sino a partir de un
pasado que debe ser recuperado, preservado. Sobre todo si ese
pasado está vinculado directamente con circunstancias
traumáticas que requieren una pronta atención para
considerar sus efectos. En segundo término, porque la ciencia
histórica, abandonando el terreno seguro de la objetividad
absoluta, se ha internado en la gleba de la subjetividad
privilegiando el valor testimonial de los actores y la verdad de
sus subjetividades. Y en esta recuperación del pasado reciente
como objeto de la historiografía y el valor del testimonio,
adquiere importancia el concepto de memoria. Como lo
señalan Marina Franco y Florencia Levin 3 el término memoria
“puede aludir tanto a la capacidad de conservar o retener
ideas previamente adquiridas como, contrariamente, a un
proceso activo de construcción simbólica y elaboración de
sentidos sobre el pasado”. Además, la memoria constituye
una dimensión que implica a lo privado y a lo colectivo y
permite trazar un vínculo entre ambos, entendiendo que “los
3
Franco Mariana, Levin Florencia. 2007. Historia reciente: perspectivas y
desafíos par un campo en construcción. Editorial Paidos.
20
relatos y sentidos construidos colectivamente influyen en las
memorias individuales”.
En este ensayo intentaré esbozar una caracterización de
la psicología argentina de los años 80`con el propósito de
considerar algunos aspectos relevantes de las luchas y
conquistas de los profesionales psicólogos en torno a la
inserción y la responsabilidad que les ha tocado en la tarea de
contribuir al bien común. Intentaré recorrer ese pasado
reciente para poner de manifiesto la tarea de construcción de
una identidad colectiva dentro de un campo social por parte
de un cuerpo profesional. Se trata de recuperar, para la
memoria, momentos de la historia de la psicología argentina
del siglo XX en los que se han producido importantes cambios
en torno a la legislación, la formación, la práctica, el
reconocimiento de la autonomía de la Psicología y de los
Psicólogos.
2 - LOS PSICÓLOGOS EN EL CONTEXTO DE LAS
PROFESIONES
La década de los 80`encuentra al país atravesando una
profunda crisis. Los sectores sociales anhelan la necesaria e
imprescindible apertura política reclamada por diversos
sectores y el colectivo social se dispone a participar de la
reconstrucción del país. El sector profesional argentino se
pregunta de qué modo le cabe participar en esta importante
tarea. Más allá de las diferencias propias del sector
profesional, una coincidencia unifica a este campo social:
poner en valor el hecho de que es portador de un conjunto de
saberes y prácticas que debe estar al servicio de la comunidad.
Al mismo tiempo el sector profesional era consciente del
hecho de que su trama fue debilitada durante los años
anteriores debido a que muchos profesionales altamente
calificados se vieron condicionados, por diversas razones,
sobre todo políticas, a emigrar del país, circunstancias que
privaron a la comunidad de sus valiosas contribuciones.
De todos modos fue necesario superar la pérdida de tan
importante masa crítica de profesionales y trabajar en pos de
la transferencia del conocimiento hacia la comunidad a través
de diversas prácticas, en el campo asistencial, en la
investigación o la docencia. Junto a estas acciones,
paralelamente, se fueron generando y recuperando las
condiciones de posibilidad para la activa participación de los
profesionales en organización comunitarias, gremiales,
científicas, partidarias, empresariales, culturales, etc.
Los psicólogos argentinos no fueron ajenos a este
movimiento tendiente a promover la emergencia de
organizaciones e instituciones con funcionamiento
relativamente autónomo atento a sus necesidades e intereses,
pero no ya como parte del aparato del Estado, sino regulado
por este. La sociedad iba despertando lentamente a la
21
recuperación de esta posibilidad; los profesionales en general
y los psicólogos en particular, entre ellos. El fortalecimiento de
las entidades científico gremiales en las jurisdicciones
provinciales, lideradas por la Fe.P.R.A. (Federación de
Psicólogos de la República Argentina) constituyó una vía
posible para contribuir al colectivo social desde una
especificidad profesional que, por otra parte, venía desde
muchos años atrás luchando por su identidad y
reconocimiento por parte de la sociedad y el Estado.
3 - DIFICULTADES EXTERNAS E INTERNAS
El fortalecimiento del rol del psicólogo sostenido desde
las entidades científico gremiales como la Fe.P.R.A., los
Colegios de Psicólogos o Asociaciones de Psicólogos de las
provincias, debían sin embargo sortear algunos obstáculos
provenientes tanto del exterior del campo de la psicología
como del interior mismo. Desde el exterior el aún
vigenteDecreto Ley Nº 17.132 del año 1967, sancionado
durante el gobierno del Gral. Onganía, sobre las incumbencias
del médico, en la que se considera al psicólogo como auxiliar
de la medicina; la permanencia del debate, ya iniciado en los
años 60`, sobre el ejercicio de la psicoterapia por parte de
psicólogos-práctica a la que se oponían médicos y
psiquiatras-; la negativa de las obras sociales a generar un
nomenclador nacional de prácticas psicológicas diferenciadas
de las médicas; la falta de reconocimiento de la igual jerarquía
de los psicólogos para ocupar cargos directivos en hospitales,
obras sociales, áreas gubernamentales vinculadas a la salud, el
bienestar social, educación o justicia. En suma, la
imposibilidad de acceder a la participación de políticas
sanitarias y/o de otro orden, temática que será recurrente a lo
largo de toda la década que estamos analizando.
En el frente interno de la profesión, tratándose de una
práctica liberal, los psicólogos demostraban escaso interés en
participar en políticas sanitarias, a lo que se suma el reducido
número de profesionales formados en sanitarismo. El
predominio abrumador de la práctica profesional en el campo
clínico, principalmente en el orden privado, y el escaso
desarrollo en otros campos de la psicología como el
institucional, comunitario, jurídico o educacional, son algunos
de los factores que desde el interior mismo de la profesión
representaban dificultades para lograr la inserción en diversos
planos nacionales, provinciales o municipales, obtener
reconocimiento y la ansiada legalización de su práctica.
Sin embargo, el desafío de los psicólogos y de las
entidades que los nucleaban en los años 80` fue trabajar para
revertir las limitaciones provenientes de los flancos externos e
internos.
22
4 - ANTECEDENTES
En esta tarea, la década de los 80` significó un giro
importante para la profesión del psicólogo y para la psicología
argentina, en muchos sentidos. Remontándonos un poco en
la historia, la creación de las carreras de psicología a fines de
la década de los 50`, se dio en el marco del surgimiento de las
ciencias sociales en una Universidad por entonces gobernada
democráticamente por docentes, egresados y alumnos. El
surgimiento se corresponde con un creciente desarrollo
económico del país y la Universidad decidió acompañar dicho
crecimiento incorporando nuevas carreras y disciplinas, la
Psicología entre ellas. Surgía la necesidad de forjar espacios de
reflexión e investigación, enfocando científicamente la
problemática del hombre, su conducta, su formación, su
cultura, sus instituciones sociales. Los inicios fueron
prometedores. Graduados en Antropología, Sociología,
Psicología, Ciencias de la Educación, con un alto nivel
académico y sólida formación comenzaron a desempeñar
papeles relevantes no sólo dentro del país sino también en el
exterior.
Luego de esta floreciente primera etapa, llegó la
segunda en la que la falta de reconocimiento de los aportes
provenientes de estas disciplinas, el escaso valor dado a ellas,
la intolerancia ideológica, la falta de libertad académica y el
cierre de carreras, fueron algunos de los problemas que
debieron afrontar los profesionales de estas ramas del
conocimiento. En la tercera etapa, en los 80`, tras la
recuperación de la vida democrática, las entidades que
nucleaban a estos profesionales, Colegios y Asociaciones,
resaltan la importancia de las ciencias sociales yhacen un
llamado a sus asociados proponiéndoles tomar consciencia de
la necesidad de revertir el deterioro de la trama profesional
que ha dejado el proceso anterior, y ello es posible con el
concurso y participación de todos.
Como se ha dicho, la Psicología formó parte de estas
disciplinas y como todas, enfrentó sus propias cuestiones en el
esfuerzo por lograr su inserción. El primer debate suscitado en
el momento en que la carrera es creada en la segunda mitad
de la década de los 50` giró en torno a definir en qué facultad
correspondía ser ubicada. Dos posiciones se disputaban la
pertenencia. Por un lado estaban aquellos que sostenían que la
carrera de psicología debía ser dependiente de la Facultad de
Medicina. Posición sostenida por defensores de corrientes
organicistas y biologiotas apegados a modelos y conceptos de
la ciencia que correspondían más al siglo XIX que al presente.
Frente a ellas se erigían argumentos que desde enfoques
científicos defendían la idea de considerar a la Psicología
como una ciencia autónoma y proponían su inclusión en
facultades de Ciencias Sociales. Esta última posición es la que
finalmente triunfó. Se suma a esta definición de posición, el
hecho de que la recepción de las carreras haya tenido éxito
23
desde el principio, demostrado por el interés de los aspirantes
universitarios que la elegían, como también por la recepción
del gran público que comenzaba a demandar atención
psicológica a los psicólogos. Todo ello a pesar de los
constantes embates provenientes de sectores reacios a la
aceptación de este nuevo rol profesional, en especial sectores
provenientes del campo médico y psiquiátrico. El debate
inicial de los 60` sobre qué facultad sería la receptora de la
carrera de Psicología, se convertirá en los 80` en un debate
acerca de la creación de una Facultad de Psicología,
independiente y gestionada por los mismos Psicólogos.
5 - LUCHAS Y REIVINDICACIONES
El movimiento científico gremial que caracterizó a la
Psicología de los años 80`tuvo metas claras y propuestas
concretas sobre un conjunto de reivindicaciones que se venían
planteando en décadas anteriores. El conjunto de reclamos y
propuestas se centraban en: la elaboración de un anteproyecto
de Ley de ejercicio profesional; la determinación de la
incumbencias profesionales por parte del Ministerio de
Educación de la Nación; la formulación de una carrera
sanitaria que beneficiaría principalmente a los psicólogos que
se desempeñaban en el ámbito hospitalario; la inclusión de
prestaciones psicológicas en el nomenclador nacional INOS
(Instituto Nacional de Obras Sociales); y la no menos
importante colegiación.
6 - LA DIVERSIDAD
Un aspecto interesante de este movimiento fue que las
entidades movilizadoras como la Fe.P.R.A. y asociaciones
profesionales, A.P.B.A. (Asociación de Psicólogos de Buenos
Aires) entre ellas, buscaron establecer vinculación con las
instituciones de formación de psicólogos (Universidades)
preocupadas, no sólo por la reivindicación de los psicólogos y
sus prácticas, sino también por la formación de los futuros
profesionales. La idea era clara: “la formulación de
alternativas que permitan colocar decididamente a la carrera
de Psicología de frente al país y al servicio de las necesidades
de nuestro pueblo”. La estrategia para ello también era clara:
actividades científicas que convoque a egresados, docentes y
estudiantes de Psicología. Aunque resultaba bastante difícil
conciliar opiniones y posiciones de egresados provenientes de
diferentes universidades y por ende de diversos proyectos
académicos. Por otro lado debía tenerse en cuenta además,
que confluían en estas actividades egresados formados en
diferentes momentos políticos del país: aquellos formados en
la carrera originaria entre los años 1957 y 1966; los que
estudiaron bajo el “onganiato”; los que lo hicieron entre el
1973 y 1976; los formados durante el “proceso”; y aquellos que
24
comenzaban a egresar luego de la recuperación de la vida
democrática.
7 - PLAN NACIONAL DE LUCHA
Frente a estas dificultades, conscientes de ellas, los
psicólogos, a través de sus organizaciones, perfilaban un
proyecto común que será sostenido a lo largo de la década. El
proyecto incluía: obtención de legislación adecuada para
regular el ejercicio profesional, reivindicaciones laborales,
prestación de servicios y participación en la formación de
psicólogos.
Si bien la idea y el proyecto eran claros, también era
evidente que la tarea por realizar no resultaría sencilla ni
exenta de obstáculos y esfuerzo. Diversos frentes requerían de
la acción de los psicólogos para asegurar que su rol sea
reconocido, su práctica valorada y su identidad legitimada.
Por una parte era necesario trabajar con la comunidad para el
esclarecimiento del rol del psicólogo, de modo que ésta
tuviera claridad acerca de qué servicios podría requerir de
este profesional. Además, prevenir que no sea engañada en su
buena fe por la oferta de otros profesionales y no
profesionales que ofrecían prestaciones psicológicas sin la
formación adecuada ni los títulos habilitantes. En tal sentido
el año 83` señala un importante ejercicio de esclarecimiento
dirigido a la comunidad, lo que será mantenido en los años
posteriores. Desde las organizaciones de psicólogos se
promovía la utilización de espacios de difusión masiva
(diarios, radios, televisión, revistas) con el propósito de
generar una comunicación con la comunidad donde se
destaque el rol del psicólogo haciendo conocer su lucha
gremial; y al mismo tiempo, orientar con fundamentos
científicos y disciplinares sobre el tipo de prácticas del
psicólogo en los diferentes campos de su desempeño. Para
logar la mayor efectividad de estas acciones se las formuló en
términos de un Plan Nacional de Reclamos, con la Fe.P.R.A. a
la cabeza.
8 - HACER LEGAL LO QUE ES LEGÍTIMO
El Plan priorizaba sobre todo la búsqueda de la sanción
de una legislación sobre el ejercicio profesional y la
delimitación de las incumbencias del título. En este terreno la
empresa consistía en esclarecer y asesorar a los legisladores
acerca de la función y rol del psicólogo, sus campos de
desempeño, sus incumbencias profesionales y todo lo
necesario para que estos lo vuelquen en leyes que regulen la
profesión y garanticen al Estado y a la sociedad la calidad e
idoneidad de los profesionales psicólogos. En materia de
incumbencias, la ley 17.132/67 del gobierno de Onganía ponía
freno a la libertad de trabajo del psicólogo. Estos habían
25
efectuado una presentación en 1980 para que fuera derogada,
centrando el cuestionamiento en el hecho de que la norma
solo admitía que el psicólogo podía intervenir a instancias de
un médico, cosa que a todas luces lesionaba la autonomía de
la profesión y de la ciencia psicológica. El petitorio tuvo
opinión favorable de la comisión formada para su estudio en
el Ministerio de Bienestar Social en la que participaron
representantes de las entidades de psicólogos. Sin embargo, la
contraofensiva del gobierno ante esta avanzada, no se hizo
esperar. En septiembre de ese año el Ministerio de Educación
emite una Resolución que, a buen entendedor, ratifica los
términos de la ley 17.132. No tardó más de 24 hs. la respuesta
de los psicólogos. El debate quedó abierto e incluso llego a los
medios masivos de comunicación ocupando espacios
importantes. Para los psicólogos esta gesta es considerada un
triunfo y una derrota para el régimen ya que la norma no
llegó a publicarse en el Boletín Oficial y motivó que se
reuniera el Consejo de Rectores para emitir opinión. El
resultado de todas estascontroversias se verá recién en 1985
cuando el Ministerio de Educación mediante Resolución
2447/85 establezca las incumbencias de título de psicólogo.
Pero, las tareas vinculadas a lograr la sanción de leyes
adecuadas y delimitación de las incumbencias, no resultaban
fáciles. Sobre todo porque implicaban el ejercicio de la
participación: de los psicólogos en la lucha por la defensa de
su rol; de la comunidad en la recepción de las prestaciones
psicológicas realizadas por psicólogos –aspecto que por
razones históricas, que no vienen al caso analizar en este
trabajo, resultó ser el flanco menos conflictivo-; de los
legisladores y responsables gubernamentales para representar
de manera equitativa los intereses de sectores diversos,
muchas veces enfrentados. Participación sin la cual no hay
democracia real y que en los inicios de los 80`, tras la
recuperación de la vida democrática y con un proceso militar
y una guerra irracional perdida, no resultaba asequible en un
lapso de tiempo tan breve. Los siete años anteriores, donde la
participación fue abolida, prohibida, e incluso reprimida
violentamente, dejaron su huella. Pero, poco a poco, el pueblo
argentino fue demostrando su madurez y progresivamente
fue acercándose a las organizaciones para participar.
9 - LA LUCHA EN CAPITAL FEDERAL, ACOMPAÑADA
POR LAS PROVINCIAS
“El tránsito estaba tan
pesado que nos acercábamos a
paso de hombre. Se avanzaba muy
lentamente, o así nos parecía.
Marchábamos en el auto de una
psicóloga con Avelluto y Devries.
Nos arrimamos a la zona de la
verdad e inquietos hacíamos
26
pronósticos. Se alternaba el
`crónico` optimismo del primero
con el `realismo` del segundo. La
ansiedad, vanamente contenida, se
percibía nítida pese a los
disimulados intentos de dominio.”
Con este párrafo inicia la Oficina de Prensa de la
A.P.B.A. la crónica de una campaña. Se trató de un día
histórico allá por el año 1983, más precisamente el 8 de julio
de ese año. Jornada en la que los psicólogos marcharon como
parte del Plan Nacional en reclamo de sus reivindicaciones.
Mediante esta acción solicitaban a los futuros legisladores la
ansiada Ley de ejercicio profesional. Los diarios de la época se
hicieron eco de esta manifestación con diversos titulares: “Los
psicólogos argentinos hacen varios reclamos”, “Los psicólogos
marcharon por sus reivindicaciones”, “El diván volvió a la carga”,
“En manifestación los psicólogos hicieron reclamos”, “Se movilizan
los psicólogos”. La ansiedad de Osvaldo Avelluto (por entonces
presidente de Fe.P.R.A.) y Osvaldo Devries (por entonces
Presidente de A.P.B.A.) se vio satisfecha frente al éxito de la
convocatoria.
La crónica lo ubica como “un hito fundamental en la
reversión de la actual situación legislativa respecto del ejercicio
profesional del psicólogo”. Se impone a partir de allí una frase
que seguirá vigente hasta que la última provincia argentina
logre la sanción de una ley de ejercicio profesional. La frase
fue: “HACER LEGAL LO QUE ES LEGÍTIMO”. Se trata de
una expresión en la que se intentaba dejar claro que el
Psicólogo contaba con un título otorgado por una Universidad
reconocida y por lo tanto legítimo, al mismo tiempo, su
práctica estaba legitimada también por la misma comunidad
que requería sus servicios en diferentes ámbitos; sólo restaba
hacer de esa doble legitimación, algo legal. Pero la actividad
de los psicólogos en esa jornada no se redujo sólo a esta
marcha, fue custodiada por otras acciones, entre ellas,
entrevistas con diversos sectores representativos de la vida
nacional.
Mientras los psicólogos movilizados hacían oír sus
reclamos, estaban atentos también a lo que sucedía en el país
en general. Se transitaban jornadas intensas y de gran
expectativa; la ley de amnistía recibía el rechazo de inmensos
sectores de la sociedad y la economía asfixiaba; las internas
partidarias se encaminan al tramo final con la esperanza de
vislumbrar un cambio para el país. Testigos y partícipes de la
vida institucional renovada que acompaña los nuevos aires
del país, tratando de dejar atrás las horas oscuras del
“proceso” y atesorando el valor representativo de las urnas, la
comunidad de psicólogos siguió bregando por sus luchas
reivindicativas. Aunque no del todo convencidos de que la
nueva vida democrática asegure el éxito de la empresa.
Muchos antecedentes históricos seguían presentes en la
27
memoria y manteniendo su vigencia (por ejemplo: el decreto
Ley 17.132 de 1967 y la Resolución ministerial de Llerena
Amadeo de 1980,).
10 - ESPERANZA Y PARTICIPACIÓN
Luego de dejar atrás el régimen de la dictadura militar
y esperando que la historia juzgue los hechos aberrantes
cometidos en él; régimen que había devastado la trama social
del país, surge la esperanza puesta en la recuperada vida
democrática y sus reglas de juego. Los psicólogos argentinos
intentarán jugar el juego democrático con las herramientas
que éste propone, la principal: la participación para lograr los
legítimos objetivos de que son portadores. Participación para
que el gobierno, a través de sus tres poderes, otorgue
reconocimiento pleno e inmediato a sus reclamos. En ello se
marcaron prioridades: que el Senado y Cámara de Diputados
de la Nación sancione la Ley de Ejercicio Profesional que
regule su práctica en Capital Federal, Tierra del Fuego e Islas
del Atlántico Sur.: un anteproyecto de dicha Ley y sus
fundamentos fue presentado en mayo de 1984. A esta altura
de la historia, ya se habían sancionado leyes en siete
provincias argentinas: Entre Ríos, Santiago del Estero,
Misiones, Salta, Tucumán, Catamarca, San Luís. Durante 1984
lo logarán seis provincias más: Córdoba, Formosa, Santa Fe,
La Pampa, Santa Cruz, Jujuy.

La referencia a las acciones encaminadas por
organizaciones de Psicólogos de Buenos Aires, constituye un
ejemplo claro de los movimientos que a lo largo del país se
desarrollaban en paralelo. La A.P.B.A. en Capital Federal, la
Fe.P.R.A. acompañándola e instando a los colegas del interior
a replicar las acciones en sus provincias y ante las autoridades
locales. De este modo, con trabajo y esfuerzo del conjunto, se
iba conformando un collar al que una a una se le agregaba
perlas.
11 - ESTRATEGIAS Y ALIADOS
La estrategia no era nueva. Fue pensada en los años 70`
cuando, luego de que los psicólogos se vieron obligados a
disolver la Co.P.R.A. (Confederación de Psicólogos de la
República Argentina) durante la dictadura militar,
comenzaron tímidamente y con gran reserva a reunirse
nuevamente para defender a los profesionales, las carreras de
psicología y las agrupaciones de psicólogos. También se
vieron en la necesidad de adoptar un nuevo nombre para la
agrupación, ya que la anterior (Co.P.R.A.) ligada a Psicología
constituía un ataque a los principios del proceso militar. Ante
el temor de los psicólogos y dirigentes de estar asociados a ese
nombre -incluso constituía un delito portar documentos de la
28
Co.P.R.A.- nace la Fe.P.R.A. el 3de diciembre de 19774. La Lic.
Beatriz Perosio fue su primera presidenta, y será recordada no
solo por esa importante tarea de iniciar una organización
representativa de los psicólogos para recuperar los principios
de la Co.P.R.A., sino porque fue secuestrada y desaparecida
un 8 de agosto de 1978 por la injustificada intolerancia a la
libertad de ideas de un terrorismo de estado. Junto a ella,
Osvaldo Avelluto y otros, pensaron una estrategia que se
basaba en tener en cuenta a los aliados. Uno de ellos fue la
C.G.P. (Confederación General de Profesionales).
La agrupación de psicólogos formaba parte de este
movimiento de profesionales argentinos y la vinculación y el
respaldo de esta, aseguraba ciertas garantías a las acciones por
emprender. Otro pilar de la estrategia consistía en ligar a los
psicólogos a la comunidad, tratando en la medida de lo
posible de que esta también reconociera la práctica del
psicólogo como práctica social importante. Además de las
alianzas con los agentes externos al campo, era necesario
4
GRUPO FUNDADOR: Lic. Beatriz Perosio / Lic. Osvaldo Avelluto / Lic.
Graciela Lume (APBA)Psic. Guillermo Colantoni (Asoc. de Psic. de La
Plata y Fed. Psic. Bs. As.) Psic. Stella Maris Posse / Psic. María J. Desiderio
(Asoc. Psic. de La Plata) Psic. José E. Montaña (Col. de Psic. de Rosario)
Psic. María E. Salgado / Psic. Rosa E. Astudillo (Asoc. de Psic. de Santa Fé)
Lic. Hugo Solís (Asoc. de Psic. de Entre Ríos) Lic. María Guillermina Cesco
(Asoc. de Psicólogos de San Juan) Lic. María Rosa Astori (Asoc. de
Psicólogos de Viedma) Lic. Susana E. Salar / Lic. Silvia Espósito Lic.
MartaLaura Rodríguez / Lic. Carola Tagle.
Fuente: Fe.P.R.A.
establecer alianzas internas, es decir, con los mismos
psicólogos. El propósito era doble: por un lado mantener
unidos a los psicólogos; y por otro, jerarquizar la psicología
dejando claro ante la comunidad toda la potestad de los
psicólogos sobre la psicología. Esto se lograría a través de la
organización de diversas actividades científicas. Tanto en
Capital Federal como en el interior del país se llevaron a cabo
diversas actividades científicas, no solo con el propósito de
propiciar la formación continua de los psicólogos, sino,
también, demostrar a la comunidad en general, a los
legisladores, a los que pudieran pertenecer a otros campos del
saber, otros profesionales, estaba siendo atendida por los
psicólogos, que ese era su campo de intervención y
producción. Cuando estas actividades se producían, se
intentaba ganar terreno publicitándolas en los medios masivos
de comunicación. Esto era parte de la estrategia, dar a conocer
las actividades de los psicólogos, y no dejarlas reservadas para
el ámbito interno.
La jornada del 24 de mayo de 1984 en Buenos Aires,
constituyó otro hito importante en la lucha de los psicólogos,
fecha en la que sin dudas el recuerdo de Beatriz Perosio
estuvo presente en la memoria de quienes asistieron 5. Ese día
5
En el número 2 de Espacios y Propuestas de la Fe.P.R.A. correspondiente
a mayo y junio del año 1985, se publica la nómina de psicólogos
desaparecidos bajo el epígrafe: “Publicamos la nómina de nuestros colegas
desaparecidos, según datos recogidos por distintos organismos de Derechos
Humanos, entre los cuales se encuentra la primera Presidente de Fe.P.R.A. Lic.
29
fue presentado el anteproyecto de Ley de ejercicio profesional
ante los presidentes de los bloques parlamentarios del Poder
Legislativo y antela Comisión de Salud de la Honorable
Cámara de Diputados de la Nación. Se buscaba
principalmente hacer conocer a los legisladores el hecho de
que la formación de Psicólogos, en el plano universitario, se
daba en el marco de una carrera mayor universitaria (se
denominaba así a toda carrera universitaria con una duración
de al menos 5 años de duración) y que con el doctorado
alcanzaba el más alto grado académico. Los argumentos en
defensa del reconocimiento del nivel de los psicólogos eran
fundamentados en razones éticas y científicas y en
antecedentes jurídicos en el terreno de la asistencia
psicológica. Acompañando ese hecho se realizó también una
Beatriz Perosio. Exigimos a sus secuestradores la aparición con vida y el
indispensable juicio y castigo a los culpables del terrorismo de estado: 1. Elena
ANDRES, 2. Juan José AVILA, 3. María Cristina BEJAS, 4. Marta BREA, 5.
Margarita BREGLIA, 6. María BUGNONE, 7. Diana Noemí CONDE, 8. Blas
Roberto EVANGELISTA, 9. Ester Silvia FELIPE, 10. Lilian Nilda
FERNANDEZ MENVILLE, 11. Horacio Bernardo FLORES, 12. Diana Iris
GARCIA, 13. Hugo Ricardo GARELIX, 14. María Esther GOULECOZIAN, 15.
Eduardo Mario KORIN, 16. María Esther LACROIX, 17. María Delia LEIVA,
18. Beatriz Ofelia MANCEBO, 19. Liliana Graciela MIZRAJI, 20. Ana María
MOBILI, 21. María Inés MUCHIUTTI, 22. María de Lourdes NOIA, 23. Daniel
Horacio OLIVENCIA, 24. Irene ORLANDO, 25. Beatriz PEROSIO, 26.
Anabella PIETTELLI, 27. Graciela Noemí RAGO, 28. María Matilde
SANCHEZ, 29. Norma Susana SAVIGNONE, 30. Raquel Alicia SCIARRETA,
31. María SEOANE TOIMIL, 32. María del Carmen VANELLA BOLL, 33.
Carmen Rosa VILTE, 34. Aída Inés VILLEGAS”.
movilización donde los psicólogos y estudiantes de psicología
ganaron nuevamente la calle bajo dos lemas: “hacer legal lo
que es legítimo” y “Ley justa para los psicólogos”. Pero el
reclamo iba más allá de la ansiada ley, se bregaba también por
el aumento del presupuesto para el área de salud, la defensa
de la salud mental de la población, la inclusión de las
prestaciones psicológicas en las obras sociales y la inclusión
de los psicólogos en la carrera sanitaria. En síntesis, el pleno
reconocimiento orgánico del quehacer del psicólogo en los
ámbitos de la salud, la educación, el campo laboral y forence.
La crónica de ese día indica que ni la lluvia ni el frío, como en
la movilización del 83`, detuvieron la marcha. Los psicólogo
no estuvieron solos en esa oportunidad; centros de salud,
escuelas de estudio, colegas del interior, se hicieron presentes
acompañando la lucha.
La movilización que las organizaciones de psicólogos
(Fe.P.R.A. en primer lugar) solicitaban a sus miembros
requería de una participación multifacética. Por un lado,
mantener los puestos de trabajo tanto en el orden público
como privado, es decir, sostener el quehacer cotidiano de la
práctica. Por otro lado, sumarse a las manifestaciones y a todo
aquello que promueva el esclarecimiento del rol en los
espacios masivos de comunicación, colaborando con artículos
sobre temas diversos de atención del psicólogo. Participar en
la vida política y gremial del país y de la profesión. Formar
comisiones de trabajo con colegas, en lo posible con carácter
30
interdisciplinario en Salud, Educación, Instituciones, Justicia.
Aportar trabajos científicos en Congresos, Jornadas,
Seminarios y todo tipo de actividad vinculada a la formación
continua. Todas estas acciones tendían a lograr que los
psicólogos marquen una presencia.
12 - SOSTENER LA ORGANIZACIÓN DEL SECTOR
Mejorar y adecuar la legislación en materia de
regulación de la práctica del psicólogo fue la meta propuesta
por estas movilizaciones que, si bien tenían su punto
centralizado en la Capital Federal, se extendieron por todo el
país. Pero también era necesario un fuerte trabajo de
concientización para que el interés de los psicólogos en los
reclamos no decayera y la lucha se mantenga hasta obtener los
resultados esperados. La futura Ley de ejercicio profesional
requería de una estructura que la sostenga y la haga real,
evitando que sea letra muerta. Era necesario profundizar la
organización del sector. Ligar Ley y colegiación comenzó a
hacerse carne en los psicólogos, porque entendían que un
Colegio permitiría plasmar la solidaridad mutua ya que lo
fundante de un Colegio es la participación de todos.
¿Cuál es el sentido de una colegiación? Este
interrogante formó parte de los debates en las organizaciones
de los psicólogos. Diversos argumentos accedieron a dar
respuesta. Junto con la Ley, los colegios de psicólogos
propenderían a brindar un salto importante en la calidad y
cantidad de prácticas del psicólogo. Al tener carácter
representativo, todos tendrían la posibilidad de ser
defendidos por igual, de participar en la toma de decisiones
respecto de la conducción de las organizaciones, lo que
requeriría también igual esfuerzo para sostener la conducción,
la gestión de los colegios y asociaciones. Los psicólogos se
estaban convenciendo de que un Colegio de Ley podría
otorgar mayor poder para intervenir en los ámbitos
relacionados con la psicología, comenzando por el
otorgamiento y control de la matrícula profesional.
Secundariamente, se comenzaban a perfilar algunas ventajas
de una colegiación: la posibilidad de crear una caja
provisional que abarcara temas de la seguridad social; la
alternativa de generar fondos destinado a la creación y
sostenimientos de institutos de investigación en áreas de la
psicología y/o bibliotecas especializadas que estén al servicio
de la producción científica del campo. Y, la no menos
importante tarea de redactar códigos de ética sobre el ejercicio
de la profesión.
A favor de la colegiación se expresaban muchos colegas
y agrupaciones; y en desacuerdo también. Los primeros
sostenían la concepción de que un colegio constituía un
medio, un instrumento idóneo para expandir el ejercicio
profesional y la consideraban una herramienta insustituible
31
para la defensa del sector. Los segundos pensaban que se
trataba solo de generar, a través de la creación de colegios
profesionales, una estructura corporativa. Pero lo más
importante de la cuestión: “colegio sí” o “colegio no”, radica
en que de ambas posiciones compartían la idea de que sólo el
debate puede generar el espacio para que algo sea dicho y
escuchado, discutido, pensado. Toda la ciudadanía
comenzaba a valorar esos espacios de debate, y los psicólogos,
con su única herramienta de trabajo: la palabra, se
encontraban como pez en el agua. Afortunadamente
quedaban atrás las horas en el que el silencio se imponía.
Nada más triste que recordar cómo los ciudadanos de Buenos
Aires se levantaron un día y encontraron el obelisco rodeado
por un gran aro en el que se leía “el silencio es salud”, juego
de palabras perverso de la dictadura que, con la excusa de
disminuir los ruidos urbanos, escondían el imperativo de que
había cosas de las que convenía no hablar.
13 - BALANCE
A comienzos del año 1985, un balance general indica
que se avanzó en materia gremial. Varias leyes de ejercicio
fueron sancionadas ya, colegios de ley creados, proyectos
presentados y alguno con media sanción. Todas estas leyes y
proyectos, más allá de las diferencias locales, sostenían y
defendían:

– la plena autonomía profesional del psicólogo;
– la validez del título de psicólogo otorgado por
universidad nacional o privada reconocida, como única
condición para el ejercicio profesional;
– el reconocimiento de los diferentes campos de ejercicio
profesional, clínico, educacional, laboral, institucional,
forense;
– el reconocimiento de la práctica de la psicoterapia, a
cargo del psicólogo, en el área clínica.
Existía en las organizaciones de psicólogos optimismo
en que los años venideros se obtendrían mayores logros.
Logros que fueron el resultado de la labor de muchos años en
los que se fue ganando paulatinamente la legitimación del
trabajo del psicólogo, por parte de la comunidad que requería
de sus servicios y valoraba su quehacer y también de otros
sectores.
14 - FALTA DE CORRELATO EN LO LABORAL
Sin embargo los psicólogos, valorando el
reconocimiento obtenido hasta el momento en los planos
científicos, gremiales y sociales, continuaban preocupados
porque estos logros no contaban con su correlato en el ámbito
32
laboral. Una gran mayoría de psicólogos trabajaban ad
honores. Cuando percibían alguna remuneración, esta era
insuficiente. Las partidas presupuestarias en materia de salud,
además de escasas, eran injustamente distribuidas; la
contratación de psicólogos en hospitales o centros
especializados nunca fue una prioridad, y el presupuesto
generalmente era destinado a la contratación de otros
profesionales o de personal perteneciente a ramas auxiliares
de la medicina. Aunque se percibían algunos avances, en el
terreno de las obras sociales, estas no incluían prestaciones
psicológicas o lo hacían deficientemente y no estaban en el
nomenclador nacional.
Mientras, en un nivel comenzaba a legitimarse la tarea
de los psicólogos, en otro, se presentaban limitaciones y
discriminaciones. Por ello la insistencia permanente de las
instituciones que nucleaban a los psicólogos para consolidar la
unidad en la lucha. Y esta unidad estaba en consonancia con
la fuerte convicción de que era necesaria la consolidación de la
democracia y que 30.000 psicólogos (datos de 1985) veían aún
cercenada la posibilidad de ejercer plenamente la profesión,
costeada con esfuerzo personal y de la comunidad.
Si bien, a medida que avanzamos en la década se van
presentando aristas que requieren que los psicólogos y sus
organizaciones adopten una posición de lucha y defensa
permanente, los logros se van obteniendo paso a paso.
Recordemos que la lucha se presentaba en diferentes frentes:
reclamos para lograr la sanción de leyes de ejercicio
profesional en las provincias que aún no cuentan con una
legislación adecuada; defensa a favor de la generación de
fuentes laborales genuinas para los psicólogos; puesta en
valor del derecho a la salud mental de la población, para la
cual los psicólogos se consideraban agentes calificados;
normalización de las carreras de psicología en aquellas
universidades donde se dictaba la carrera; reafirmación de la
autonomía de la psicología y la necesidad de derogar
normativas contrarias a dicha autonomía, en particular las
referidas a las incumbencias del título.
15 - NUEVOS DESAFÍOS
1985 será recordado como el año en el que se produce
un giro importante en relación a los reclamos y representa el
surgimiento de nuevos desafíos. En primer lugar se sanciona
la Ley de ejercicio profesional que regularía la profesión en
Capital Federal, Tierra del Fuego e Islas del Atlántico Sur con
el número 23.277/85, dejando atrás definitivamente la
17.132/67. La ciudad de Buenos Aires se suma al collar de
perlas formado por las provincias que ya cuentan con
legislación adecuada para regular la profesión. Se dicta una
Resolución del Ministerio de Educación que establece las
incumbencias del título de Psicólogo con el número 2.447/85,
33
derogando la normativa de 1980 (Llerena Amadeo). Se
produce la apertura del Registro de Prestadores Psicólogos en
el Instituto Nacional de Obras Sociales (I.N.O.S.) haciendo
justicia e igualando la profesión del psicólogo con otras
profesiones vinculadas al campo de la salud. Se crea la
Facultad de Psicología en la Universidad de Buenos Aires.
Todas estas referencias a una situación local (Buenos
Aires) se deben, como se señaló más arriba, al hecho de que
allí se producía el epicentro de la movilización de los
psicólogos, y las acciones emprendidas en ese contexto se
irradiaban a lo largo del país. En tal sentido entonces, lo que
ocurría en Capital Federal es representativo del conjunto
nacional. Lo allí acaecido llegaba a las provincias y, en menor
escala pero con igual contundencia, se reproducía con matices
locales; a la inversa lo que acontecía en las provincias
retroalimentaba la lucha de los porteños y servía para
fundamentar los reclamos locales. El acuerdo entre los
psicólogos, al menos en este punto, era unánime: se trataba de
un Plan Nacional de Lucha. Presentación de anteproyectos de
Ley, algunas sancionadas antes que la ley nacional, debates en
medios de comunicación, esclarecimiento del rol del psicólogo
ante la comunidad, los legisladores y representantes
gubernamentales, constituyeron un cotidiano en la vida de los
psicólogos, tanto en Capital Federal como en todas las
jurisdicciones provinciales de esos años. Principalmente de los
psicólogos que actuaban en representación del conjunto a
quienes se debe agradecer la dedicación a la tarea gremial, en
muchos casos postergando compromisos familiares o
destinando horas laborales de la actividad privada a esta
tarea.
16 - AL COLLAR LE FALTAN DOS PERLAS
La lucha de estos años apuntaba, como ya lo he
señalado reiteradas veces, a fortalecer las organizaciones
representativas de los psicólogos, la identidad profesional y
acrecentar en calidad la formación académica. Los logros
positivos y concretos que marcan un antes y un después de
1985, demostraban que la agenda de trabajo y las estrategias
ideadas casi ocho años antes, no eran equivocadas. La sanción
sucesiva de leyes de ejercicio profesional formó parte del plan
para ir conformando un collar de perlas que, desde el interior
del país hacia la Capital Federal, fuera creando las condiciones
para la derogación definitiva de la célebre Ley 17.132/67. Sin
embargo al finalizar 1985 aun quedaban dos provincias
argentinas sin norma legislativa: Neuquén y Chaco. Esto
significaba que las organizaciones mantenían el estado de
alerta y movilización en solidaridad con los colegas de esas
provincias.
En Neuquén los Psicólogos, al tanto del panorama que
ya había mejorado notoriamente en el resto del país, acuden
con preocupación a sus legisladores que una y otra vez
34
postergan el tratamiento del proyecto de Ley de ejercicio
profesional de la psicología en esa provincia. Los psicólogos
neuquinos denuncias una evidente contradicción cuando
alertan que, en momentos donde la provincia está a punto de
recibir un premio internacional por su sistema de salud, sus
gobernantes no parecen comprender que en materia de salud
también juegan un papel importante las políticas de salud
mental. La campaña de los neuquinos mantiene los principios,
estrategias y acciones que a lo largo del país se fueron
proponiendo y reproduciendo. Bajo el lema “Neuquén tiene la
oportunidad de no quedar atrás” se utilizaron los medios
masivos de comunicación para concretar entrevistas radiales y
televisivas, marchas, distribución de volantes explicativos de
la situación de la psicología en la provincia y del Psicólogo
como trabajador de la salud mental, adhesiones de la
comunidad y partidos políticos. Con esta serie de acciones se
pudo demostrar nuevamente que los reclamos iban más allá
de los intereses sectoriales y estaban vinculados con el
derecho a la salud de la población y acceso igualitario a dicho
servicio.
La situación en el Chaco era similar a la de otras
provincias. No se contaba con legislación y aun así la labor de
los psicólogos había generado ya un campo diverso de
prácticas en dos grandes áreas de competencia: clínica, y
educacional, y en menor medida laboral y jurídica. La
Asociación de Psicólogos se sumó a las estrategias del plan
nacional ocupando todos los espacios posibles para dar a
conocer la realidad de la profesión y esclarecer ante la
comunidad el atraso legislativo de regulación de la profesión
de psicólogo. Si bien, a fines de 1983, se pudo cristalizar un
anteproyecto de Ley que ponía énfasis en la autonomía
profesional, en consonancia con otras leyes de ejercicio ya
sancionadas y que fuera consensuado por todos los asociados,
recién a principios del 84´ se pudieron iniciar los contactos con
los diputados y comisiones de legislación de la Cámara de
Diputados de la Provincia. Durante los dos años siguientes la
tarea fue incesante. Además de las acciones de esclarecimiento
de la función y rol de Psicólogo dirigidas a la conducción
legislativa, los representantes del gobierno provincial, y en
general a la población toda, se concretaron actividades
científicas como parte de la estrategia con el propósito de
poner de manifiesto que la formación continua jerarquiza la
profesión.
Finalmente, las acciones emprendidas en ambas
provincias, con el apoyo de las entidades nacionales, dieron
los resultados esperados y las leyes de Neuquén y Chaco
fueron sancionadas en noviembre y diciembre de 1986
respectivamente completando así el collar de perlas.
17 - HACER REAL LO QUE ES LEGAL
35
Una pregunta comenzaba a instalarse en el discurso
cotidiano de los psicólogos: ¿mejoraron las cosas con la Ley?
El Lic. Sergio Rousseaux, en una entrevista concedida a
Espacios y Propuestas reflexionaba ante esta cuestión y
señalando que podrían ser reconocidas dos posiciones. Por un
lado quienes consideraban que la tarea de las organizaciones
estaba ya concluida y que su existencia perdía paulatinamente
sentido. Los objetivos principales estaban cumplidos y
quedaba poco por hacer. La sola presencia de las leyes de
ejercicio profesional garantizaría el cambio tan ansiado en
materia de reconocimiento de la profesión y el hecho de
invocarla y llevar una copia bajo el brazo, abriría las puertas a
los lugares de trabajo en diferentes ámbitos de aplicación. Esta
idea ocasionó, en muchos casos, que algunos colegas se
alejaran de las organizaciones perdiendo interés y declinando
en su participación. En el extremo opuesto se hallaban
psicólogos más pesimistas, partidarios de considerar que nada
había cambiado, que todo seguía igual. Para estos, la sanción
de las leyes en todas las provincias del país no trajo aparejada
ninguna modificación de las condiciones de la profesión.
Frente a estas dos posiciones tan extremas, reflexiona
Rousseaux, es importante adoptar una posición de centro, sin
que ello signifique neutralidad. Por el contrario debe ser una
clara posición en la que se reconozca de manera dialéctica un
“punto de llegada” y un “punto de partida”. La obtención de
uno de lo objetivos principales del proyecto conjunto de los
psicólogos de todo el país, la sanción de leyes de ejercicio 17 Corrientes 4025 05-09-85
18 San Juan 5436 19-09-85
profesional, debe considerarse una condición necesaria
19 Mendoza 5045 20-09-85
(“punto de llegada”) pero no suficiente (“punto de partida”) 20 Ciudad de Buenos 23.277 27-09-85
para dar continuidad al plan de reclamos y de mejora de las Aires
21 Chubut 2585 09-10-85
condiciones profesionales de los psicólogos.
22 Neuquén 1674 17-11-86
23 Chaco 3203 10-12-86
Los años siguientes a 1986 significan la continuidad en 24 Tierra del Fuego 318 27-09-96
la lucha por hacer real lo que comenzaba a ser legal
(Fuente: Fe.P.R.A.)

LEYES DE EJERCICIO PROFESIONAL DE LA PSICOLOGÍA

Nº PROVINCIA Nº DE FECHA DE OBSERVACIONES 18 - COMENTARIO FINAL
LEY SANCIÓN
1 Entre Ríos 5336 11-05-73 Julio F. Villegas en “Problemas centrales para la
2 Río Negro 972- 06-09-74 Derogada en abril 1980 y
Dec.1216 restituida por Dec. 1856 en
formación académica y el entrenamiento profesional del
1984 psicólogo en las Américas” señala, en el marco de la
3 Santiago del Estero 4629 14-06-78 conferencia inaugural del 2do Congreso Latinoamericano de
4 Misiones 1306 10-10-80
Estudiantes de Psicología realizado en Santiago de Chile en
5 Salta 6063 11-02-83
6 Tucumán 5467 25-02-83 1999, las etapas que ha atravesado el desarrollo de la
6 Catamarca 4024 28-10-83 psicología en los países del cono sur. La coincidencia en todos
8 San Luis 4511 28-10-83 ellos, más allá de las particularidades de cada país, radica en
9 Córdoba 7106 21-09-84 Ejercicio profesional- 08-09-
93/ Ley 8312 - Creación del que la psicología y la formación de psicólogos han atravesado
Colegio tres etapas sucesivas de constitución.
10 Formosa 461 17-10-84
11 Santa Fe 9538 08-11-84
12 La Pampa 818 22-11-84
La primera, denominada “procesos de desplazamiento
13 Santa Cruz 1709 27-11-84 de la responsabilidad”, en la que las temáticas de la psicología
14 Jujuy 4124 11-12-84 son el producto de profesionales y académicos no
15 La Rioja 4503 25-04-85
pertenecientes a la disciplina. En esta etapa se debe reconocer
16 Provincia de 10.306 21-08-85
Buenos Aires el esfuerzo de educadores, filósofos, médicos, abogados que

36
actuaron como fundadores de un campo llamado psicología;
su compromiso queda claro en la abundante producción
teórica y práctica que nos han legado. El interés radicaba en
producir saberes psicológicos aplicables a la resolución de
problemas de otros campos profesionales ya conformados, la
educación, la criminología, la clínica médica. En la historia de
la psicología argentina pertenecen a esta etapa nombres como
Rivarola, Matienzo, Piñero, Ingenieros, Etchard, Senet,
Mercante, Rimoldi, entre otros.
La segunda etapa corresponde al surgimiento de los
primeros psicólogos egresados de las nacientes carreras de
Psicología y se puede denominar según Villegas “procesos de
difusión de la responsabilidad”. Este pequeño número de
psicólogos que asumía la tarea de generar un nuevo espacio
social y profesional, no contaba aun con organizaciones
reconocibles (nos referimos a espacios académicos y
asociaciones o colegios profesionales) que permitieran la
apropiación del desarrollo de la psicología como ciencia y
como profesión. La responsabilidad de su desarrollo era
difusa y se distribuía entre estos nuevos agentes y los que no
pertenecían a la disciplina. A esta etapa corresponden, por
ejemplo, Nuria Cortada (primera psicóloga argentina) Pichon
Riviere, Bleger, Ulloa (estos últimos no pertenecían a la
disciplina pero contribuyeron enormemente a su desarrollo).
37
La tercera etapa se denomina “procesos para asumir
nuestra responsabilidad”. Se trata de un periodo en el que,
contando ya con la presencia de un buen número de
psicólogos, distribuidos a lo largo de todo el país (aunque no
de manera adecuada) estos tienen que asumir la
responsabilidad de desarrollar la psicología desde sus
organizaciones, tanto académicas como científicas y gremiales.
No hay dudas de que el periodo que aquí se analiza
corresponde a esta tercera etapa.
Por otra parte, quizás no sea demasiado aventurado
decir que los 80` constituyen una década en la que se produjo
la mayor unidad y movilización en la lucha llevada adelante
por los psicólogos de todo el país. En particular el periodo que
abarca desde 1982 hasta 1986 donde el movimiento de
reivindicación adoptó sus niveles más altos. Sin embargo la
unidad no estuvo exenta de disensos internos que más que
debilitarla, la fortalecían en la medida en que generaba los
debates necesarios para confrontar ideas y opiniones para
nutrir los aportes y las propuestas del plan de lucha. No
olvidemos que se trataba de un plan nacional y en ello se
veían implicados todos los psicólogos a través de sus
instituciones representativas: asociaciones y colegios. Pero no
sólo era un plan gremial, era un plan general, es decir, incluía
en su formulación estrategias de defensa y lucha que miraban
a la población y las instituciones como destinatarias y
beneficiarias de la labor del Psicólogo. En lo gremial: sí, era
claro que se trataba de defender las fuentes genuinas de
trabajo, reconocimiento del rol profesional, sanción de leyes
de ejercicio profesional, incumbencias: estos grandes temas
giraron durante esos años en las mesas de trabajo y discusión,
tanto en el campo interno como en el externo, sobre todo con
representantes gubernamentales del más alto nivel. El
movimiento fue incesante durante este periodo, de la capital a
las provincias, de las provincias a la capital. Todo ello a favor
de la lucha por los derechos de los trabajadores psicólogos
y,en el plano general, en defensa del derecho de la población a
recibir una prestación psicológica garantizada por la historia y
por las instituciones formadoras de psicólogos.
Es posible reseñar en cuatro tiempos la tarea
emprendida por los Psicólogos durante la década de los 80´. El
primero, puede considerarse una resistencia a la dictadura
militar. En realidad se inicia aún antes de comenzar la década
de los 80´ en el momento en que, con gran valentía, un grupo
de Psicólogos emprendía la tarea de crear un espacio de
representación dando continuidad a la Co.P.R.A., fundando
Fe.P.R.A en 1977. Movimiento liderado por Beatriz Perosio,
otros colegas y compañeros del momento que supieron
interpretar el espíritu del gremio y, a pesar del complicado
momento político e ideológico del país, tomaron la iniciativa
de hacer un llamado a los psicólogos para lograr un
entendimiento en torno a coincidencias básicas.
38
El segundo, a partir de 1984 bajo las banderas de “hacer
legal lo que es legítimo” y “Ley justa para los Psicólogos”,
donde la movilización de los psicólogos se hace cada vez más
intensa al punto de ser considerado un plan nacional de lucha.
Plan que afortunadamente y por acción y decisión de sus
líderes, iba ganando adhesiones de múltiples sectores de la
comunidad profesional y no profesional y de la dirigencia
política.
El tercer tiempo, y mediante un fuerte protagonismo
del sector, comienzan a verse los frutos de tan ardua tarea: se
sancionan, una a una, las leyes de ejercicio profesional en las
distintas jurisdicciones del país completando el collar de
perlas; quedan determinadas las incumbencias del título; se
abre el registro de prestadores de obra social, para nombrar
sólo algunos de los primeros logros.
El cuarto tiempo se inaugura alrededor del año 1986
con un nuevo estandarte: “hacer real lo que es legal”. Se
trataba de lograr que las leyes sancionadas y los éxitos
obtenidos -como se dijo más arriba- no sean letra muerta. La
tarea continuaba y requería el mismo esfuerzo y entusiasmo
de años anteriores. Obtener fuentes de trabajo genuinas,
condiciones laborales justas y retribuciones equitativas,
generar y fortalecer los contratos con obras sociales, participar
y lograr protagonismo en la elaboración y ejecución de planes
de salud y educación, desarrollo social, comunidad, justicia,
continuar trabajando para el reconocimiento del rol de
Psicólogo en los diferentes ámbitos de su desempeño,
fortalecer el ámbito universitario asegurando la formación
continua en grado y postgrado, constituían las tareas a partir
de allí.
Deliberadamente han sido dejados de lado en este
ensayo, algunos temas relevantes que también atañen al
periodo estudiado. Entre ellos la problemática de los
desaparecidos, más allá de que se mencione la lista de
psicólogos desaparecidos por el terrorismo de estado.
También se han omitido referencias a la hegemonía del
psicoanálisis, como teoría casi exclusiva, que se evidencia en
las publicaciones de las principales organizaciones de
psicólogos. Ello es fácil de verificar si se leen los títulos de
alguno de los trabajos: “La terminación del análisis”, “Sobre el
narcisismo”, “El espacio psicótico: reflexiones desde el borde”,
“La Represión”, por nombrar solo algunos. Cada uno de estos
trascendentales tópicos merece más de un capítulo, en
especial el primero. Aquí se han priorizado en particular los
movimientos gremiales para dar sentido y significación a la
expresión utilizada por Villegas: “procesos para asumir
nuestra responsabilidad”.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
COUREL RAUL, TALAK ANA MARIA. 2001. La formación académica y
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39
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GACETA PSICOLÓGICA: Publicación de la Asociación de Psicólogos de
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Julio/Agosto 1982; Nº 47-Octubre 1982; Nº 48-Noviembre 1982; Nº 49-
Diciembre 1982; Nº 50 Marzo 1983; Nº 52-Mayo1983; Nº 53-Junio 1983; Nº
54-Julio 1983; Nº 55-Agosto 1983; Nº 56-Octubre 1983; Nº 57-Noviembre
1983; Suplemento especial Diciembre 1983; Nº 58-Marzo 1984; Nº 59-
Junio/Julio 1984; Nº 61-Agosto/Septiembre 1984;Nº 62-Octubre/Noviembre
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