Paula Andrea Ocampo López

Seminario l, Maestría en Estética y Creación

Universidad Tecnológica de Pereira

El texto "Orígenes de la Estética Moderna" de Valeriano Bozal es un texto que aborda el

surgimiento y desarrollo de la estética moderna, y que resulta de gran interés para comprender la
evolución del pensamiento estético a lo largo de los siglos XVIII y XIX.
El texto de Bozal nos ofrece un análisis de los diferentes campos que contribuyeron a la transición
desde la estética clásica a la moderna estos fueron: la literatura de G. E. Lessign en el Laocoonte
desde la cual se asentan las bases que permitieron desligar el arte de su condición de representación
simbólica y en cambio apelar a sus cualidades visuales y sensibles, esto quiere decir que “las
cualidades sensibles de los acontecimientos narrados o de las figuras y objetos representados no son
medios para representar significados distintos de ellas mismas”, esta perspectiva da inicio a la
Autonomía del arte, mientras que la estética clásica se centró en la imitación de la naturaleza y en la
belleza como un ideal objetivo, la estética moderna se enfocó en la subjetividad y en la expresión
emocional del artista. La autonomía del arte es una preocupación fundamental en la estética
moderna, y se refiere a la capacidad del arte de ser independiente de su función social y política
Bozal destaca el papel fundamental de Immanuel Kant en la transformación de la estética al poner
énfasis en la percepción y la experiencia subjetiva del observador. Preocupándose por la experiencia
estética, por la sensibilidad del sujeto ante la obra de arte, por la emoción y la sensación que ésta
despierta en él se convierte en una forma de explorar y expresar experiencias humanas que no
pueden ser comprendidas o expresadas por otras formas de conocimiento
Otro aspecto interesante que destaca el autor es la influencia que tuvo el surgimiento de la crítica de
arte en el desarrollo de la estética moderna, Bozal explica que la importancia de los salones de arte
como un espacio crucial para la difusión y promoción de nuevas tendencias artísticas, así como para
la formación de gustos y la generación de juicios críticos. A través de los salones, se pueden
compartir ideas y obras de arte, fomentar el debate y la reflexión crítica, y promover tanto la
información como la crítica en el mundo del arte. Por lo tanto, los salones tienen un papel
fundamental en la creación y consolidación de movimientos artísticos y en la formación de una
cultura estética en constante evolución. En este sentido, la crítica de arte contribuyó a consolidar la
estética moderna como una disciplina autónoma y a enriquecerla con nuevas reflexiones y teorías.
Además, la crítica de arte permitió establecer una relación más estrecha entre el arte y la sociedad, y
a valorar el papel que el arte desempeña en la cultura y en la formación de la conciencia colectiva.
Por otro lado, también recalca que la historia del arte no surge como una mera cronología de obras y
artistas, sino que es un proceso dinámico en el que se van construyendo distintos discursos y
narrativas sobre el arte y su significado. Bozal menciona a J. J. Winckelmann como una figura clave
en la construcción de la historia del arte moderno, fue uno de los primeros en reconocer que el arte
antiguo griego era un modelo de perfección estética y que debía ser estudiado y valorado como tal.
Otro tema importante en el texto es la relación entre la estética y la sociedad. Bozal afirma que la
estética moderna surgió en un momento de crisis en la que la sociedad se cuestionaba los valores
tradicionales y buscaba nuevas formas de entender el mundo. El arte y la estética se convirtieron en
medios para explorar estos nuevos valores y para expresar las preocupaciones sociales y políticas.
En cuanto al desarrollo del concepto de la belleza, Bozal argumenta que este fue cuestionado en la
era moderna, dando lugar a nuevas formas de entender el arte y la estética. En lugar de la belleza
como un ideal objetivo, surgieron nuevas categorías como lo sublime, lo grotesco y lo pintoresco.
Bozal retoma la teoría de Addison sobre la relación entre belleza, sensibilidad, gusto e imaginación,
destaca la importancia que otorga al gusto como una habilidad que se puede cultivar y educar, y que
es fundamental para la apreciación de la belleza, también enfatiza la importancia de la imaginación
en la experiencia estética, pues es lo que permite al espectador transportarse a otros mundos y
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acceder a experiencias estéticas que de otra manera serían imposibles . También analiza la figura de
Rafael Mengs y su importancia en la historia de la estética, fue uno de los principales defensores de
la vuelta a los ideales clásicos en el arte y la estética.
Finalmente Bozal hace referencia al modo en que la autonomía del arte afecta la percepción del arte
“Ut pictura poesis” pues Lessing hace una importante contribución a la discusión sobre la relación
entre la poesía y la pintura, argumenta que la poesía y la pintura son dos formas de arte diferentes y
que cada una tiene sus propias características y limitaciones. Lessing sostiene que la pintura es una
forma de arte espacial, que utiliza el espacio bidimensional para crear la ilusión de profundidad y
perspectiva, mientras que la poesía es una forma de arte temporal, que utiliza el lenguaje para crear
imágenes en la mente del lector. Según Lessing, la pintura es capaz de representar la belleza física y
la emoción de una manera más directa que la poesía, mientras que la poesía es más adecuada para
representar ideas abstractas y complejas.
Bibliografía
Bozal, Valeriano, Los orígenes de la estética moderna, Historia de las ideas y de las teorías artísticas
contemporáneas (1996), pág. 19- 31