Víctor Rafael Urbáez 5to EEM-B

Ensayo “Pensamiento crítico y creencias religiosas”

Desde siempre, el ser humano ha tenido la necesidad de aprobación y

validación de otros seres humanos con respecto a ideas y pensamientos, y
teniendo esto en cuenta, la religiosidad y doctrinas no quedan detrás. Se dice
del pensamiento crítico que es pensar equitativamente. Tener pensamientos
críticos es saber dar opiniones concretas y objetivas que no respaldan una
idea más que la otra. Del mismo modo, el pensamiento crítico viene
acompañado del discernimiento, ya que pensar críticamente nos ayuda a
tomar las decisiones correctas, y saber elegir entre lo bueno y lo mejor.

Al enseñarnos a pensar críticamente nos están enseñando a ser entes

activos de la sociedad. Cuando somos críticos y se nos enseña a serlo nos
están ayudando a comprender mejor nuestro entorno y ver desde otra
perspectiva las religiones, grupos sociales y etnias. Desde el punto de vista
del cristianismo, ser críticos nos ayuda a cuestionar de manera racional
nuestras creencias, costumbres, y diferenciar lo que es coherente e
incoherente. De este modo, se podrá elegir o diferenciar de manera concreta
y objetiva las distintas religiones existentes.

En la educación, el enseñar a pensar críticamente juega un papel

fundamental en el desarrollo de la sociedad. El hombre es considerado como
un ente en constante evolución y que debe relacionarse entre otros para su
desarrollo y crecimiento personal, por esto, para un futuro digno en sociedad,
el individuo debe relacionarse con otros individuos educados en moral y
criticidad.

En el ámbito religioso, la capacidad de ser críticos es una herramienta muy

conveniente para el practicante, ya que gracias a esto, un creyente puede
discernir y diferenciar entre la verdad y la mentira, descubrir el engaño y
evitar el fanatismo. Con un criterio formado, aquella persona que profese
alguna religión, tendrá la capacidad de evitar cerrarse sobre sí mismo y podrá
abrirse al respeto y a la tolerancia, de esta forma será posible convivir
pacíficamente con aquellos que no comparten sus creencias.

Esto sucede entre las naciones y sus religiones. Si alguna nación se niega a
escuchar y entender el punto de vista de alguna otra religión nunca habrá paz
asegurada, debido a la ignorancia y la intolerancia al tema.

Por esto, al ser críticos, creamos la capacidad de saber escuchar, respetar y

tolerar, porque entendemos que nuestras creencias no son las únicas y que el
mundo es solo un medio que compartimos como seres humanos. Mientras no
haya una criticidad en nuestras casas ni en nuestros sistemas educativos, no
lograremos paz ni tolerancia mundial, ya que las creencias religiosas forman
parte de la cotidianidad.

A lo largo de toda la historia se ha podido ver que la educación y la ética han

perseguido la conciencia moral del hombre, de formarlo como ente justo y
ético; sin embargo, el aspecto más importante que deberíamos desarrollar es
el pensamiento crítico. Consigo trae el respeto, la tolerancia, el sentido
humano de empatía, y la moral y ética vienen por añadidura.