Este Domingo predicó un hermano quien fue su cuarta vez que ha tenido la oportunidad de predicar. Estaba muy nervioso, y se disculpó por toser, tener los lentes equivocados, y otra cosa que no me recuerdo. A la verdad, le falta mucho a este hermano, pero al menos está abierto aprender. Su texto fue de Lucas 22:66-71, que habla con respecto al juicio de Jesús por los líderes y sacerdotes del pueblo. De interés personal, es el versículo 69, que dice así: Pero desde ahora el Hijo del Hombre se sentará a la diestra del poder de Dios. En la predicación no se oyó nada sobre el significado de lo que Jesús estaba diciendo, y mucho menos porque los líderes condenaron a Jesús por su respuesta. Primero, lo que siempre se ha dicho, y con razón, es que Jesús acá está refiriéndose a Salmos 110:1. Vemos el uso de este concepto en el cristianismo primitivo, cf. Hch. 2:34-35; Rom. 8:34; Heb. 1:3, 13; 8:1; 10:12; 12:2. A esto, le podemos añadir que finalmente, el trono que solo se le atribuía al Padre, es ahora también el trono del Cordero, cf. Apoc. 22:3. Finalmente, no podemos pasar por alto que el titulo “hijo del Hombre” se refiere a Daniel 7:13, donde se ve la pre-existencia de Jesús, como su origen divino. Creo que algo que no se ha mencionado a menudo dentro de los círculos cristianos, es la herejía que existía dentro del Judaísmo del Segundo Templo conocida como “Los dos poderes en el cielo”. La premisa principal de este herejía combatida por los rabís del primer siglo es que las principales manifestaciones angélicas y hipostáticas en el cielo eran equivalente a Dios. A esto, los rabís la confrontaban con textos de Deuteronomio y Isaías que enfatizaban la unidad de Dios, Deut. 32:39; Isa. 44:6. Alan Segal, en su libro Two Powers in Heaven: Early Rabinic Reports about Christianity and Gnosticism, es del concepto que la Cristología Cristiana del primer siglo fue influida por esta herejía, y que finalmente fue la posición tomada por el Cristianismo primitivo. Ha esto hizo referencia Larry Hurtado, en una conferencia donde se discutía el libro de Bart Ehrman How Jesus became God. Hurtado llego a sugerir que el Cristianismo primitivo, antes de ser Trinitario, era binitario. Pero cómo Hurtado también menciona en su libro ¿Cómo llegó Jesús a ser Dios? Cuestiones históricas sobre la primitiva devoción a Jesús. Capítulo 5 nota 50, el hecho de creer en un segundo poder en el cielo, por el cual Dios haya creado todo, no quitaba o afectaba el monoteísmo profesado por aquellos Judíos en la Diáspora. Volviendo al versículo de Lucas, creo que podríamos concluir, que Jesús al apelar a algo que a los oídos de sus jueces sería una herejía, lo condenarían sin pensarlo. Pero siguieron preguntando una pregunta mas, si Jesús era el hijo de Dios. Lo que Jesús les afirma al decir que ellos dicen que el es el hijo de Dios, es que Jesús es el Rey de Israel. Es de interés como Jesús se refiere a sí mismo como un ser celestial, mientras que los líderes del pueblo lo rebajan a ser solo un rey terrenal. Jesús al aprobar lo que ellos decían, no solo reclamaba para si un origen celestial, sino también terrenal. Bueno, espero que estos pensamientos sean de ayuda para el conocimiento del Judaísmo del Segundo Templo, y para que tomemos en cuenta como el Cristianismo primitivo compartía ciertas creencias, y no creencias tan ortodoxas dentro del Judaísmo del Segundo Templo, pero que por su interpretación de ciertos textos, el Cristianismo llegó a adoptar y aplicar a Jesús después de su resurrección. La herejía de los dos poderes en el cielo y los cuatro que entraron en el Pardes En la Torá hay dos descripciones del Dios que se revela: uno es que el separa las aguas del mar Rojo, un Dios guerrero, como si fuera joven; el otro, es el que revela los diez mandamientos en el Sinaí, lleno de sabiduría y misericordia, como si fuera un anciano. Esta correlación está presente también en la figura del Anciano de Días y del Hijo del Hombre en Dn 7: un Padre y un Hijo. ¿Dos poderes en el cielo? Ciertamente es así para parte del judaísmo del segundo templo…pero con la concreción y expansión del cristianismo, estas ideas serán definidas como herejía por el emergente judaísmo rabínico. Un ejemplo que vale la pena tener en cuenta: Leemos en un versículo: “Su trono llameaba” [Dn 7,9], y en otro [lugar del mismo] leemos: “Hasta que fueron puestos sus tronos y un anciano de días tomó asiento” [Dn 7,9]. No hay ninguna dificultad aquí: uno [de los tronos] era para él y el otro para David. Como nos enseña una barayta [una tradición tannaítica extramisnaica]: Uno era para él y el otro para David es lo que Rabbi Aquiva dijo. Rabbi Yose el Galileo le dijo a su vez: ¡Aquiva! ¿Cuándo dejarás de profanar la Sejina? Habría que decir más bien: Uno [de los tronos] era para su justicia y el otro para su misericordia. ¿Aceptó él esta explicación?¡Venid y oíd! Uno era para su justicia y el otro para su misericordia; esas fueron también las palabras de Rabbi Aquiva (TB Hagiga 14ª). La solución rabínica, por lo tanto, salva la unicidad de Dios a través de un modalismo divino. Algo que después, en el misticismo de la cábala, dará paso a una idea más elevada de los dos brazos de Dios (o emanaciones): la justicia y la misericordia. Idea que ya estaba presente en Filón de Alejandría (irónicamente, un gran adherente a la teología de los dos poderes en el cielo) cuando comenta la función de los dos querubines que se hayan sobre el arca de la Alianza. Como sea revisemos, aún, otro texto rabínico pertinente que nos habla del relato de los cuatro que entraron en el pardes y que relaciona la desgracia de quienes no regresaron sanos con el aceptar la herejía de los dos poderes en el cielo: Nuestros rabinos enseñan que quienes visitaron el Pardes fueron cuatro. ¿Quiénes fueron? Ben Azzai y Ben Zoma, Aher y Rabbi Aquiva […] Aher taló sus árboles. Rabbi Aquiva [entró y ] Salió en paz[…] “Aher taló sus árboles”. A él se refiere el versículo que dice: “No consientas que tu boca te haga culpable” [Qo 5,5]. ¿Qué significa esto? [Aher] vio que Metatrón tenía permiso para sentarse [a la derecha de Dios] y [para] poner por escrito las buenas obras de Israel. Dijo: ¡Pero se nos ha enseñado que nadie tomará asiento en lo alto y que no habrá allí lugar para la competencia, ni […] para la fatiga! ¡O es que hay en el cielo, Dios no lo quiera, ¡dos poderes! Sacaron de allí a Metatron y lo azotaron con sesenta azotes de fuego. Le dijeron: “¿Cuál es la razón por la que al verlo no te pusiste en pie?” Y le permitieron borrar las buenas obras de Aher. Una voz dijo desde el cielo: “¡Regresad, rebeldes!” [Jr 3,14.22], esto es, todos, salvo Aher. Y añadió “Dado que él ha sido expulsado del mundo por venir, ¡dejad que salga y que disfrute de este mundo!”. [Aher] salió [de allí] y se dio a la mala vida. Se fue con una prostituta cuyos servicios solicitó. Pero ella le dijo: “¡¿No eres tú Elisa ben Abuya?!”. Él arrancó un rábano un sábado y se lo ofreció. Y ella exclamó entonces: “¡Ha de ser otro!” (TB Hagiga 15,a). Recordemos que además de Aher, también Ben Zoma y Ben Azzai cayeron en la herejía de los dos poderes en el cielo. Leemos en Génesis Rabba 5: Rabbi Levi dijo: Hay entre quienes predican algunos que, como Ben Zoma y Ben Azzai, proclaman que la voz del Santo, Bendito y Único, se convirtió en Metatron sobre las aguas, según está escrito: “¡La voz de Dios sobre las aguas!” [Sal 29,3]. Rabbi Aquiva fue el único que se arrepintió de sus anteriores opiniones, el único de los cuatro que, “entró y salió en paz [del Pardes]” (TB Hagiga 14b]. Para más detalles: Daniel Boyarin, Espacios Fronterizos, Judaísmo y cristianismo en la Antigüedad tardía, Trotta, p. 237-242. EL TARGUM, LOS DOS PODERES EN EL CIELO Y LA CÁBALA El Targum es una traducción al arameo de las escrituras que tiende a ser literal, al mismo tiempo que agrega material al texto de manera ininterrumpida. Una de las características del Targum es la tendencia de traducir de tal manera el texto hebreo de borrar cualquier señal antropomórfica de Dios. Esto es, cualquier texto veterotestamentario que acentúa cualidades humanas de Dios se re-escribe de tal forma que se salva la incuestionable trascendencia de Dios. Esto, principalmente, se hace de cuatro formas. La primera es a través del uso del termino Shekinah para referirse a la presencia de Dios cuando Israel lo alaba. Por ejemplo, cuando en Ex 34,9 Moisés ruega para "que el Señor camine en medio de nosotros", el Targum Onqelos traduce como "que la Shekinah del Señor camine en medio de nosotros". Lv 26,12 lee como Dios señala: "Yo caminaré en medio de vosotros", mientras que la traducción aramea del T. Onqelos dice: "Yo haré que mi Shekinah habite en medio de vosotros". Una segunda forma de atenuar el antropomorfismo divino es a través del uso del memra ( palabra del Señor) para hablar de su "voz" o "comando". Esta es la circunvalación más común en el Targum. Por ejemplo, en Os 14,1 el hebreo de la frase"Samaria se ha rebelado contra su Dios" se traduce al arameo como "Samaria se ha rebelado en contra la palabra de su Dios". También en Os 14,5 se reemplaza el hebreo de "Yo seré como el rocío , por el arameo "mi palabra sera como el rocío". Una tercera forma de atenuar el antropomorfismo divino es el uso de la palabra "Gloria", que en el caso del Targum Neofeti se complementa con la "Shekinah". Por ejemplo el hebreo "Dios los bendijo" de Gn 1,28 se traduce al arameo "la gloria del Señor los bendijo". En el mismo Targum Neofeti se traduce "Moisés temía mirar a Dios" de Ex 3,6 al arameo "Moisés temía mirar a la gloria de la Shekina". Por último, una cuarta forma, era a través de la preposición "antes" combinada con otras alteraciones de la frase de tal forma de cambiar las acciones de Dios para no describirlo actuando directamente. Así por ejemplo, cuando en Gn 3,5 leemos en hebreo que "Dios sabia", en arameo se transforma en "Y le fue revelado delante de Dios". Así la información le es dada a Dios, ahorrando cualquier actividad cognitiva humana por su parte. De igual manera el Targum Pseudo Jonatan reemplaza al "espíritu de Dios revoloteaba sobre la faz de las aguas" de Gn 1,2 por "el espíritu de la misericordia delante de Dios soplaba sobre la faz de las aguas". Para mas detalles: Paul Flesher y Bruce Chilton, The Targums, A Critical Introduction, p. 45-46. La importancia de estas traducciones se trasluce, por ejemplo, en un texto de un filósofo judío del siglo XI, llamado Maimonides. Este autor, influido por la filosofía platónica, defiende la traducción al arameo del Targum Onquelos precisamente por salvar la trascendencia divina. Sin embargo, y al mismo tiempo, cruza la delgada línea roja tendiendo a personalizar cualidades divinas convirtiéndolas en segundas divinidades. Estamos a la puerta del desarrollo cabalístico que multiplica con creces el pensamiento trinitario de los cristianos. Refiriéndose a la traducción de Ex 24,10 (y vieron al Dios de Israel: bajo sus pies tenía una especie de pavimento de zafiro,) señala: "La interpretación de Onquelos, como sabéis considera que el sufijo de la tercera persona, "sus", en las palabras "pies", se refiere al Trono de Dios, y de acuerdo a esto traduce: "Y bajo el Trono de Su Trono de su Gloria tenía una especie de pavimento...". Entended esto y admiraros de cuan lejos Onquelos estaba de creer en la corporalidad de Dios y de todo lo que lleve a pensar en ello incluso de lejos. Y es que no traduce "Y bajo su Trono", porque el término "trono" pudiese malinterpretarse en el sentido explicado más arriba, esto es que Dios se pudiese sentar sobre un trono físicamente y por lo tanto suponiendo la creencia en su corporalidad. Por lo tanto Onquelos se refiere al termino "Trono" en relación a "Su Gloria", esto es la Shekhinah, que es una luz creada" (Moreh I,28)