Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Conceptos:
Paridad: (Amelia Valcárcel) es el objetivo que persigue alcanzar una presencia del mismo
número de mujeres que los hombres en cargos relevantes, en ámbitos de poder. Busca
erradicar los sistemas de manipulación por los que los currículums de las mujeres no se juzga
imparcialmente, esto impide que traspasen el techo de cristal.
Cosificación: (Asunción Bernardez) Es una conceptualización, una ficción dominante y esta
imagen de la mujer es difundida y potenciada en los medios de comunicación. Se compone
por un estereotipo hipersexualizado y muñequizado. Cosificar responde a representar a las
mujeres como objetos sexuales despersonalizados, configuradas como indiscernibles unas de
otras. Es una manifestación de la violencia simbólica y es, a la vez, causa y síntoma de la
ideología de género propia del patriarcado.
Matización sobre los derechos
Los derechos de primera generación son derechos civiles en los que se pide al estado que no
intervenga - Declaración de los derechos del ciudadano.
Los derechos de segunda generación son los derechos básicos. Estos se obtienen en el estado
de bienestar. El Estado debe intervenir en los momentos en los que suceden injusticias.
Pretende alcanzar una justicia social limitando las justicias observadas (personas con
discapacidad).
Otro apunte
En todos los contratos donde se implique a una mujer (matrimonial, de prostitución) son
contratos sexuales. Mención a Kant, para quien el matrimonio era el contrato de dar poder al
hombre sobre la mujer.
Mujer y mal en el mundo
Después, vimos la concepción de la mujer como la causante del mal en el mundo. De esta
manera, si las mujeres son malas está bien tenerlas oprimidas para que sus fallas no sean
ningún peligro. Siendo esto así estaríamos legitimando la opresión hacia ellas. También
podemos distinguir entre dos representaciones de la feminidad. La positiva, según la cual la
mujer se somete al hombre, y la negativa, que hace referencia a la peligrosidad de las
mujeres.
Argumento de las naturalezas diferentes y complementarias de los sexos
Defiende que hombres y mujeres son diferentes por naturaleza y por tanto deben dedicarse a
tareas distintas. Diría que ontológicamente son diferentes y las dos distinguidas esencias se
complementan. De aquí se pueden derivar dos posturas. De la esencia femenina surge un
discurso de inferioridad y exclusión donde se le categoriza como mala. Pero también es
posible lo contrario, el discurso de excelencia, según el cual las cualidades de las mujeres son
preferibles a las de los hombres. No obstante, esto acaba conduciendo a afirmaciones del tipo,
que buenas son las cualidades de las mujeres, mejor que se queden en casa para no perderlas
y que no se mal influencien. Si bien, debemos apreciar como la consecuencia política de
ambas posturas es la misma, la exclusión de las mujeres.
Y aquí habría que distinguir entre el feminismo de la diferencia y el de la igualdad como ya
ha explicado Jose.
1.1.b) PATRIARCADOS
La primera aproximación al concepto de patriarcado en el libro Ser feministas lo define como
toda sociedad donde los puestos clave de poder están ocupados mayoritariamente por
hombres. A continuación hemos tratado el tema a partir del texto Patriarcado de Alicia
Puleo.
Es un término que desde la teoria feminista alude a la hegemonía masculina en las sociedades
antiguas y modernas, expresando asi una situación de dominación y explotación. En el
feminismo radical se ubica como una pieza clave. Kate Millet lo define como una política
sexual ejercida fundamentalmente por el colectivo de varones sobre el colectivo de las
mujeres y afirma que las armas del patriarcado son la universalidad y la longevidad. También
debemos tener en cuenta el lema del neofeminismo “lo personal es político” pues definen
política como el conjunto de estratagemas destinadas a mantener un sistema. Otra opción,
como sostiene Gayle Rubin, es el término “sistema de género-sexo” aludiendo a la
organizacion de los géneros sin ser necesariamente opresiva ni jerárquica. Si bien, para Celia
Amorós son sinónimos porque si hubiera un sistema igualitario no produciría la marca de
género. Si hablamos de política es porque el patriarcado no está sustentado por una ontología,
sino que es una organización social.
Sobre el origen del patriarcado:
Se puede hablar de dos hipótesis, (1) ha sido el modo de organizarse de todas las sociedades
desde el origen de la especie o (2) ha surgido en un momento histórico concreto. Por otro
lado, la hipótesis del matriarcado originario que no resulta otra cosa que un mito.
Distinción patriarcados de coerción y patriarcados de consentimiento:
Debemos tener en cuenta que todo patriarcado tiene ambos elementos, coerción y
consentimiento. El patriarcado de coerción se estipula por leyes adscritas por costumbre
sobre lo permitido o prohibido a las mujeres, es decir, la inferioridad de la mujer está
respaldada legalmente. Por el contrario los de consentimiento incitan a los roles sexuales, se
definen por haber igualdad formal, es decir, en leyes, de hombres y mujeres. En el patriarcado
de consentimiento la mujer cree obrar en libertad, pero en realidad está obedeciendo las
nuevas consignas sociales, por eso podemos decir que realmente no hay igualdad.
Puleo cita a Celia Amoros:
Aquí debemos mencionar que metaestable significa que se adapta a todos los contextos y
circunstancias, por eso es un sistema que se ha podido perpetuar.
Luego, los estudios antropológicos parecen revelar la universalidad del patriarcado, como
destaca Amelia Valcárcel:
Apunta al paso de lo sociobiológico al campo ético, pues que algo haya sido de una manera
mucho tiempo no significa que deba seguir siéndolo.
A continuación traigo la cita más importante que hemos visto este curso de Kate Millet:
Dualismos antropológicos:
Después, desde la antropología estructuralista se ha caracterizado la menta humana como un
sistema de categorías binarias y opuestas. Se insiste en asociar mujer y naturaleza y por otro
lado hombre y cultura y muchas otras parejas, por ejemplo: mente / cuerpo, racionalidad /
emocionalidad, autosuficiencia / dependencia, etc.
Aquí destacan dos figuras. Primero, Sherry B. Ortner en ¿Es la mujer con respecto al hombre
lo que la naturaleza con respecto a la cultura?
“La distinción cultura / naturaleza es, de por sí, un producto de la cultura, definiéndose
mínimamente la cultura como el trascender, por medio de sistemas de pensamiento y
tecnología, los hechos naturales de la existencia.”
Señala que hay las culturas consideran a la mujer como naturaleza, así, es algo inferior que
hay que dominar. Establece 3 elementos: (1) Ideología patriarcal, centrada en el desprecio a
las mujeres, (2) simbologías: para ilustrar la inferioridad de la mujer y (3) las estructuras
sociales: esferas de poder de donde son relegadas las mujeres. Por otro lado, se dan 3 factores
que generan una dominación de los hombres sobre las mujeres por considerarlas inferiores.
Así se consigue que las mujeres no controlen las esferas de poder. Son: la fisiología, los roles
sociales y la psicología femenina.
Y en segundo lugar, Simone de Beauvoir, que tambien habla de esta subordinacion y como la
mujer fue reducida a la creacion natural en El segundo sexo:
“La genealogía, como lógica de la generación, como logos por el que la generación recibe
sus sellos legitimadores, sus articulaciones de sentido, ha sido hasta ahora el monopolio
patriarcal.”
Presentación de la ilustración olvidada
Para esta autora donde hay genealogía hay poder y donde hay poder se quiere genealogía, por
lo que podemos concluir que todo poder tiene que ver con una genealogía. Remarca la
importancia de narrar reflexivamente la tradición feminista puesto que tiene efectos
emancipatorios. El feminismo permite a la humanidad pensarse a sí misma. Una de sus tesis
más importantes es conceptualizar es politizar, alega que debemos pasar de la anécdota a la
categoría. Un ejemplo es cuando se cambió de violencia doméstica a violencia de género para
visibilizar la violencia ejercida contra las mujeres por el mero hecho de serlo.
El siguiente punto es la vindicación y la igualdad. La igualdad surge cuando aparecieron las
abstracciones universalizadoras con la crisis de las jerarquías estamentales, pues cuando no
hay ideas universalizadoras no se puede articular el concepto de vindicación. En la sociedad
estamental, al no existir una lógica universalizadora no se podía hablar de discriminación. Si
es universalizador debería aplicarse a todo el mundo por lo que las mujeres deberian estar
incluidas, sin embargo, se da la discriminación cuando, en la práctica, el concepto
universalizador no se aplica a cierto grupo. Emplea la imagen del paraguas identificado con
los conceptos universalizadores, la discriminación es cuando dejas a gente fuera de ese
paraguas. Pero, cuando no hay paraguas no puede haber discriminación porque al no haber
conceptos universalizadores no hay parámetros conmensurables. Cuando no los hay el
feminismo no se puede articular como una vindicación y, por eso, la igualdad parte de la
posibilidad de articular vindicaciones. En ciertos aspectos abstractos estamos en igualdad,
pero se necesita la aparición histórica de las abstracciones y que no se apliquen en términos
restrictivos.
Podemos recoger todo esto en su cita:
“La idea de igualdad y la vindicación están así íntimamente ligadas: la noción de igualdad
genera vindicaciones en la medida misma en que toda vindicación apela a la idea de
igualdad.”
Tiempo de feminismo. Sobre feminismo, proyecto ilustrado y postmodernidad
[Extra, dijo en clase que lo buscáramos] Diferencia entre vindicar y reivindicar. Vindicar
consiste en recuperar lo que nos ha pertenecido, si bien, reivindicar es recuperar eso a lo que
se tiene derecho por razón de dominio y de lo que se ha desposeído.
Todo esto lo ha empleado para ilustrar que no se puede discutir sobre igualdad sin
remontarnos al periodo histórico que aparecieron los términos.
Después habla de Simone de Beauvoir. Se considera la teórica del sufragismo y es una
radicalización de Mary Wollstonecraft. Se centra en la polémica sobre la distinción de
hombres y mujeres, si es algo natural o cultural. Por eso afirma “ mujer no se nace, se hace”.
Remite a la cuestión del esencialismo. También afirma que las mujeres han sido relegadas
porque las actividades prestigiosas se han asignado a los hombres porque ellos son quienes
tienen el poder, como son la guerra o las expediciones, que corresponden a la trascendencia
de la vida, por el contrario, la mujer está condenada a repetir la vida, a la inmanencia. Se
cuestiona por qué la trascendencia se encarna en las actividades prestigiosas de los varones.
Resulta que sus actividades se prestigiaron porque ellos tenían el poder. Cuando la cuestión
debería ser no atribuir inmanencia o trascendencia a las actividades.
Lo masculino se ha asumido como lo genéricamente humano, o en el otro sentido, lo
genéricamente humano tiene un subtexto masculino. La lucha de las mujeres es que lo
femenino también se incluya en lo genéricamente humano. Por eso se pasa del ciclo del
hambre, es decir, considerarse igual que los varón en tanto que seres humanos, como sujetos,
al ciclo del olfato, redefinir lo genéricamente humano realizando una crítica al
androcentrismo y el subtexto masculino subsumido a lo genéricamente humano.
Amorós también afirma que cuando se quiere la libertad se quiere la verdad. Por eso el
objetivo es tener las ideas adecuadas de las cosas. Además, habla de las vetas de la ilustración
y recuerda que no solo las sociedades occidentales presentan movimientos feministas.
Finalmente, apela a las alianzas ruinosas del feminismo. Es decir, las alianzas del feminismo
con otros movimientos o teorías como las antiesclavistas o marxistas no han sido fructíferas
porque la lucha feminista se ha acabado subsumiendo a ellas.
1.2.b) Diferenciación entre misoginia y sexismo
Sexismo: Es la opresión e invisibilización de las mujeres dentro de un sistema patriarcal. No
es posible que haya sexismo hacia los hombres porque no hay un sistema de opresión hacia
ellos, es decir, el sexismo solo puede ser hacia el grupo oprimido, las mujeres.
Misoginia: Consiste en una actitud hostil contra las mujeres que puede sintetizarse en odio. El
motivo es su sexo biologico. Tiene muchas manifestaciones, desde desprecios, exclusión
política o económica.
1.3.a) La polémica entre los misóginos y los defensores de las damas.
Ejemplo de misoginia:
“Pero como en estos tiempos esta perfidia se encuentra con más frecuencia entre las
mujeres que entre los hombres, como lo sabemos por experiencia, si alguien siente
curiosidad en cuanto a la razón, podemos agregar, a lo ya dicho, lo siguiente: que como
son más débiles de mente y de cuerpo, no es de extrañar que caigan en mayor medida bajo
el hechizo de la brujería.”
“Toda la brujería proviene del apetito carnal que en las mujeres es insaciable.”
E. Kramer y J. Sprenger en El martillo de las brujas, 1482
En Vacas, cerdos, guerras y brujas, Marvin Harris trataba de explicar fenómenos culturales.
En la inquisición del medio millón de víctimas que hubo el 82% eran mujeres. Las
antropólogas feministas le han criticado porque se le ha olvidado la misoginia en ese
momento histórico. La mujer cumplió la función de ser un chivos expiatorios, era necesario
acabar con ellas para abordar la sociedad en crisis. Un ejemplo son las curanderas y
comadronas que tenían el conocimiento práctico y a quienes intentaron quitar del camino
cuando empiezan a surgir los médicos filósofos que tenían el conocimiento teórico.
Otro ejemplo es Aristóteles con lo que hemos visto antes.
“Al contrario, filósofos, poetas, moralistas, todos -y la lista sería demasiado larga- parecen
hablar con la misma voz para llegar a la conclusión de que la mujer, mala por esencia y
naturaleza, ¡siempre se inclina hacia el vicio.”
“El más grande es aquel o aquella que más méritos tiene. La superioridad o inferioridad de
la gente no reside en su cuerpo, atendiendo a su sexo, sino en la perfección de sus hábitos y
cualidades.”
“Si le hubiera estado permitido a las mujeres establecer leyes y narrar historias, ¡cuántas
tragedias habrían podido componer sobre la maldad inconmensurable de los hombres…”
Así como Rousseau establece la igualdad en el estado de naturaleza, De la Barre defiende esta
igualdad también cuando pasamos a una sociedad evolucionada. Este defiende que la desigualdad se
crea en el momento en el que se excluye a las mujeres de la guerra. Como las mujeres se quedan en el
hogar no pueden desarrollar la fuerza, no llevan a cabo la actividad que tiene valor social por lo que
las mujeres son excluidas.
Empieza a crecer la burguesía, crecimiento de las ciudades, revolución industrial, poder económico de
la mano del poder político, filosofía universalista.
El pensamiento ilustrado está caracterizado por los valores de igualdad, libertad y fraternidad, por la
razón, autonomía y progreso (tanto tecnológico como moral), la fe en la educación como método de
cambio, etc. Pero todo esto parece ser solo para los hombres, un claro defensor de esto es Kant. En el
texto: Ni virtuosas ni ciudadanas, Concha Roldán expone todas las inconsistencias que el filósofo
presenta en la teoría. Las conclusiones a las que llega son:
Por otra parte, algunos como Poulain de la Barre consideraba que las mujeres también son poseedoras
de todos estos valores.
Los discursos de la biología de la época (el argumento de desigualdad natural de los sexos) servían de
respaldo para apoyar esta desigualdad. Esto hizo que hubiese o se decantase por certificar una
inferioridad ontológica de la mujer.
Por otra parte, Diderot y Montesquieu intentaron abogar por los derechos de las mujeres, pero con
comentarios todavía un poco machistas.
Otro personaje importante de la época fue, como ya hemos mencionado, Rousseau. El hombre es
bueno por naturaleza. En este estado de naturaleza el hombre tiene igualdad y libertad, y esto está
acompañado de un principio de conservación y tiende a la compasión. Pero lo que le interesa es
formar parte de un Estado, dejar atrás ese estado de naturaleza para pasar a la civilización. En el
Estado los hombres gozan de todos estos privilegios, pero se deja completamente al margen a las
mujeres. Se consigue una voluntad general para los hombres, pero no para las mujeres. Todo esto se
consigue con la educación.
En la ilustración los ciudadanos están caracterizados por la libertad, sin embargo, los niños, las
mujeres y los sirvientes no son poseedoras de ello.
Como podemos ver, nos encontramos en algunos pensadores una ambigüedad en el discurso ilustrado
con respecto a las mujeres. Proclaman la libertad y la racionalidad pero dejan fuera a gran parte de la
sociedad. Esto es debido a los prejuicios arraigados en la época.
Es importante el avance de las ciencias naturales, discurso biologicista, la sustitución del discurso
religioso por el discurso médico. Es, por lo tanto, que se produce una legitimación de la subordinación
de las mujeres desde la ciencia.
Para Olympe de Gouges es muy importante hablar del concepto de autonomía: esta palabra
etimológicamente significa actuar siguiendo cada uno sus propias leyes. Sin embargo, esto es algo de
lo que carecen las mujeres, por esto demandan libertad. Lo que quieren conseguir es ser dueñas de su
propia vida y tener independencia para sus iniciativas, deseos y expectativas. Esto está completamente
en contraposición con la violencia cotidiana que sufren todas las mujeres, y mucho más en aquella
época. La desigualdad es palpable y sus raíces se encuentran en la inferioridad natural basada en la
diferencia biológica entre los sexos, lo que desemboca en una incapacidad racional asociada a las
mujeres, lo que las excluyó de la vida pública. En la Ilustración es donde empieza a arraigarse la idea
de la igualdad por naturaleza de todos los seres humanos. Y figuras como el marqués de Condorcet,
Mary Wollstonecraft y Olympe de Gouges fueron cruciales para defenderla.
Olympe de Gouges pensaba que mantener una sociedad desigualitaria es perjudicial tanto para los
hombres como para mujeres, por eso deberíamos ser todos iguales. En su obra Declaración de los
derechos de la mujer y la ciudadana (1791) (escrita tras la Declaración de los derechos del hombre y
el ciudadano aprobada por la asamblea nacional constituyente francesa en 1789) Gouges reclamó un
trato igualitario de la mujer con respecto al hombre en todos los aspectos de la vida, públicos y
privados: el derecho de voto, de ejercer cargos públicos, de hablar en público sobre asuntos políticos,
de igualdad de honores públicos, de derecho a la propiedad privada, de participar en el ejército y otros
muchos más, revolucionarios para su época. Una de sus citas que mejor recoge todo esto es: “Todos
los seres humanos nacen con el inalienable derecho a la igualdad, la independencia y libertad.”
Wollstonecraft vincula en su filosofía la razón y la virtud y afirma que solo se puede ser virtuoso
empleando la razón. Teniendo en cuenta este argumento y la concepción que se tiene sobre las
mujeres en la época, Wollstonecraft arguye que las mujeres nunca llegarán a ser virtuosas debido a las
trabas existentes en su educación y en la socialización. Nos explica que incluso el que los hombres
tengan una mayor musculatura que las mujeres tiene un trasfondo educativo, ya que a ellos se les
educa haciendo deporte y actividades físicas mientras que a ellas no. Afirma que las niñas tienen una
debilidad mental por no permitir que desarrollen su inteligencia, pero también una debilidad física ya
que tampoco se les permite trabajar estas capacidades. En la defensa por esta educación de las mujeres
podemos encontrar algunos paralelismos con la búsqueda de una educación feminista en la
actualidad. Como hemos podido ver en el curso con el concepto de Paloma Alcalá, la educación
feminista es aquella cuya finalidad es eliminar la discriminación por sexo y superar los roles de
género, buscando el desarrollo de personas libres. Si bien, en un principio se reivindicaba el derecho
de las mujeres para acceder a la educación, actualmente se busca una educación en base feminista
tanto para hombres como para mujeres que rechace lo masculino como lo universal y se ofrezca una
perspectiva de género.
Wollstonecraft sitúa la virtud como un principio universal que solo puede ejercerse mediante la
libertad, por lo que establece una unión entre razón, virtud, libertad y felicidad. Si a las mujeres se les
permitiese ser virtuosas estas serían felices, lo cual aumentaría la moralidad de la civilización.
Nos encontramos, en relación a su obra Una vindicación de los derechos de la mujer, con un intento
de deslegitimar a la autora cuando un año después de su publicación (1792) surge un libro llamado
Una vindicación de los derechos de las bestias. En él, como ya hemos dicho, se intenta deslegitimar la
búsqueda de los derechos de las mujeres estableciendo similitudes con la búsqueda de derechos para
los animales. De esta forma algunas filósofas comienzan la defensa por los derechos de los animales,
un ejemplo de ello es Olympe de Gouge. Se establece aquí un paralelismo entre Kant y
Wollstonecraft, ya que él dice que aquellos individuos que sean crueles con los animales no podrán ser
buenos con las personas; mientras que ella afirma que los niños que se divierten torturando animales
en su infancia, cuando sean adultos serán unos maridos tiránicos.
[CITA PPT]: Esta, siendo una de sus citas más conocidas, representa de nuevo el deseo de las mujeres
de ser dueñas de sí mismas, de sus propios cuerpos y vidas; tal y como expone Concha Roldán en el
concepto de autonomía, de tener libertad. Se encuentran las mujeres ante una desigualdad cuyas
raíces se encuentran en la inferioridad natural basada en la diferencia biológica de los sexos. Se las
excluye de la vida pública y se encuentran constantemente frente a una violencia que hace patente esta
desigualdad. Es en la ilustración cuando comienza a desarrollarse la idea de la igualdad por
naturaleza, y son figuras como la citada Mary Wollstonecraft u Olympe de Gouges quienes defienden
esta idea.
Antes de casarse hay mujeres que poseen ciertos derechos civiles, por ejemplo, una herencia familiar.
Sin embargo, en el momento en el que contraen matrimonio esa herencia pasa a ser propiedad del
marido. Hablamos de sufragismo, pero no solo como reivindicación del derecho a voto, sino como
reivindicación de todos los derechos civiles y políticos. El derecho a voto les facilitaba el entrar al
poder y cambiar las cosas, pero, aunque esto permite que todas las mujeres puedan votar, comenzó
con una serie de restricciones mediante las cuales solo podían votar mujeres mayores de 30 años, que
fueran propietarias, etc. Además, el feminismo se ha posicionado en contra de otras opresiones.
Numerosas mujeres burguesas en Inglaterra se posicionaron como antiesclavistas.
Existían médicos filósofos en la época que afirmaban que existían causas médicas que estudian la
veracidad de la naturaleza diferente y complementaria de los sexos: las mujeres se encargan del
perfeccionamiento de la especie y los hombres de la perfección de la humanidad. Esto da lugar a la
división sexual del trabajo. No se les permite a las mujeres trabajar y estudiar ya que esto las desviaría
de su cometido, ser madres y esposas.
Cuando hablamos de poder en el siglo XIX debemos hacer referencia al binomio cultural
individuo/clase. La individualidad es la tradición política liberal, mientras que la clase es la tradición
política pre y post marxista. Las mujeres no entran en ninguna de las dos concepciones, no son
concebidas como individuo ni como clase, no pueden luchar por el poder. Las mujeres son lo
primitivo y los varones lo civilizado nos dice Darwin.
Es en la convención de Seneca Falls en 1848 donde se incluyen todos los derechos incluidos dentro
del movimiento sufragista, se reivindica la igualdad en todos los terrenos. Desde el movimiento
feminista parece que siempre hay una responsabilidad por parte de las oprimidas de ver la opresión
que sufren y luchar contra ella. Sin embargo, no solo se reclama la responsabilidad de las mujeres,
sino que también los hombres formen parte del movimiento. Podemos observar esta perspectiva en el
concepto hombres profeministas de Octavio Salazar e Iván Sambade. Se trata de un cambio personal
necesario que, tanto hace un par de siglos como en la actualidad, supone un crecimiento. No basta con
la transformación de un solo individuo, sino que es necesaria una acción política que apoye las
políticas feministas y le otorgue voz a las mujeres, sin usurpar su protagonismo en la lucha.
Con relación a este apartado me gustaría mencionar algunos de los sucesos más característicos que
ocurren en la película Las Sufragistas. Se expone, en un primer momento, todos los prejuicios que
muestran los hombres en contra de la participación de las mujeres en el ámbito político. Alegan que si
las mujeres pudieran votar se perdería la estructura social. Serían capaces de redactar leyes y
preceptos, lo cual derrumbaría las bases sobre las que se regía la sociedad. Algunos de los derechos
que buscan las mujeres en la película son el derecho a voto como derecho político, pero también
reivindican sus derechos civiles, como son el hecho de tener voz y decidir con respecto a la vida de
sus hijos y que no solo pertenezcan al padre, además de buscar el ser más que madres y esposas, como
se hace presente en una escena entre la protagonista y su marido. Buscan ser escuchadas y tomadas en
cuenta, al contrario de lo que sucede, por ejemplo, a la hora de denunciar las violaciones hacia las
trabajadoras del jefe de la lavandería en la que trabajan algunas de las protagonistas. La forma en la
que logran llegar a tener voz es mediante el apoyo de unas a otras, la solidaridad entre mujeres que
hace posible una lucha unificada, se trata de sororidad, tal y como la expone Isabel Balza en su
concepto en el libro Ser feministas, como una alianza entre mujeres que busca establecer relaciones
entre iguales mediante la confianza y el apoyo mutuo, una crítica al contrato fraternal que integra a
todas las mujeres.
Las reacciones desde la cultura popular son la imaginación del mundo al revés. Ponen de manifiesto
lo que pasaría si las mujeres recibieran el poder y pudiesen votar. Se representa que si la mujer
accediese al ámbito público se intercambiarían los papeles, y serían los hombres los que estarían
subordinados a las mujeres.
Freud afirmaba que la mujer tiene menos sentido de la justicia y se deja llevar por los sentimientos. Al
ser el psicoanálisis el que diga esto hace que la gente se lo crea.
Finalmente, el filósofo Friedrich Engels afirma que lo positivo del análisis marxista es que intenta
explicar la situación de desigualdad de las mujeres eliminando todos los argumentos biologicistas. La
desigualdad de las mujeres surge con la propiedad privada ya que los hombres quieren asegurar su
herencia para sus hijos, y la manera de asegurarme de que mis hijos son legítimos es sometiendo a la
mujer. Sin embargo, como la opresión de las mujeres se reduce a una cuestión económica, desde el
marxismo se rechaza la lucha sufragista. Defiende que con la lucha proletaria ya se conseguiría una
sociedad igualitaria.
2.7. John Stuart Mill y Harriet Taylor Mill
Ambos publican la obra La sujeción de la mujer en 1869, y Stuart Mill reconoce que en su obra tuvo
mucho que ver Taylor Mill. Podemos observar que el padre de Mill escribe sobre el gobierno y apoya
el sufragio universal salvo en aquellos casos en los que los intereses estén ya reflejados, como los
intereses de los niños reflejados ya en los intereses de los padres, o los intereses de la mujer
representados en sus maridos.
Mill apuesta por la necesidad de cambios en el carácter humano, queremos lograr una sociedad
virtuosa y se nos presenta que para ello debemos conseguir cambios en el carácter a través de la
educación. Se plantea qué instituciones permiten crear ciudadanos buenos y justos, qué empeora y qué
mejora la sociedad; y defiende que para que evolucione la sociedad debe darse la igualdad. Partimos
de la premisa de la naturaleza complementaria y diferente de los sexos. Entonces plantea que si ya
estamos en una situación en la que lo que legitima el poder y la autoridad son el esfuerzo y el mérito,
por qué seguimos creyendo en la naturaleza diferente de los sexos. No podemos decir que lo que
legitima una desigualdad es que uno es más fuerte que otro, sin embargo, esto sí que se da con las
mujeres. Por ello, defiende que para que puedan darse relaciones sociales justas y libres debe darse
igualdad entre hombres y mujeres. Ofrece a continuación una serie de argumentos en contra de la
naturaleza diferente y complementaria de los sexos:
1) Argumento del agnosticismo: No hay posibilidad de justificar que exista una naturaleza
femenina inferior y una masculina superior. Como no podemos saberlo no podemos decir que
existe.
2) Si se estableciese, por otro lado, que la naturaleza femenina es inferior, mil propone que se
eliminen todas las leyes, ya que no haría falta coaccionar a las mujeres para que no accedan a
puestos de poder.
3) Catálogo de mujeres ilustres: ofrece ejemplos de mujeres que han podido gobernar.
4) Argumento del tutor excelente: nos ofrecen tener un tutor que tome todas las decisiones
importantes de nuestra vida, las tomará de manera excelente, nos garantiza la felicidad. ¿Quién
tomaría la opción de escoger al tutor? Si lo que verdaderamente nos hace felices es escoger por
nosotros mismos, estamos haciendo que las mujeres no sean felices. Si se busca una sociedad
libre las mujeres deben dejar de estar oprimidas.
5) Tema del carácter humano. Necesitamos un cambio en la propia familia en pos de la igualdad
entre hombres y mujeres. Aumentaría la felicidad en el mundo si hubiese una educación
igualitaria ya que los hombres y mujeres compartirían gustos y aficiones.
Finalmente, como hemos podido observar, Mill le otorga mucha importancia tanto a modificar el
carácter de la sociedad como a una educación igualitaria que permita a las mujeres encontrarse en
igualdad de oportunidades que los hombres, sin embargo, Mill continua romantizando los valores
tradicionales, y aunque defiende la educación y emancipación femeninas, en la práctica continua
prefiriendo que se mantengan en el ámbito privado como ha ocurrido a lo largo de la historia.
DIAPOSITIVA BLOQUE 3
En este último bloque yo voy a tratar de dar una descripción fiel sobre la teoría feminista de Simone
de Beauvoir, mi compañero va a hablar sobre el feminismo liberal y el feminismo radical, además de
darnos una explicación y descripción del ecofeminismo y para finalizar voy a exponer que es la
violencia de género con numerosos ejemplos para entenderlo correctamente y el mito de la libre
elección.
DIAPOSITIVA
Simone de Beauvoir
Nadie puede negar que sea una de las grandes figuras del feminismo en general, es probable que ya la
mayoría supiésemos de la cita “no se nace mujer, se llega a serlo” y como claro ejemplo de la visión
que se tiene de la mujer en esta sociedad patriarcal, probablemente mucha gente la haya conocido por
buscar en Google “mujer de Sartre”. Es bastante vislumbrador a cómo y donde vivimos.
A pesar de este lamentable hecho, era una mujer más que capaz para poder desarrollar por sí misma
toda una teoría feminista que aun a día de hoy sigue suscitando debate. Comenzando por quizás el
punto más negativo de esta teoría, es el hecho de que no plantea dentro de la misma en ningún
momento que la sociedad tenga un sesgo androcéntrico, mostrado con ejemplos como la guerra y la
caza, actos humanos, actos trascendentes, actos llevados a cabo por hombre, mientras que dar a luz o
amamantar, actos no trascendentes, actos que también realizan los animales, actos llevados a cabo por
mujeres, es decir, estas están fuera de la actividad humana. Además, como anotación personal, aunque
no lo he reflexionado lo suficiente, tengo la ligera teoría de que la cita “no se nace mujer, se llega a
serlo” es tan famosa porque en parte resulta un argumento positivo para la perpetuación del
patriarcado. Apoya a la fratría ya que hace ver a la mujer con unos valores específicos, un ser humano
que bajo ciertas normas prestablecidas ha aprendido como comportarse y como vivir. El ejemplo más
simple y que aunque parezca nimio no lo es, es la postura. Pero a lo que me refiero con esto es a que
sirve para mantener viva la ideología de género.
Dejando de lado esta faceta considerada androcéntrica del discurso de Simone de Beauvoir hemos de
saber que su lucha es contra el esencialismo en auge de su época, lucha donde empleará argumentos
existencialistas que quizás es lo que en parte le hacen caer en la diferencia por género de la sociedad.
Para complementar la tan famosa cita ya mencionada varias veces, es importante a destacar el titulo
de su obra más famosa El segundo sexo. El interés de Simone de Beauvoir en cuanto a la teoría
feminista nace del simple hecho de tener que justificar constantemente el hecho de ser mujer,
comenzando por buscar un sentido a los mitos que rodean a esta misma, a la feminidad en concreto, y
dándose cuenta de que ningún hombre se ha interesado en este mismo estudio pero sobre la
masculinidad. Desarrolla que en la mayoría de las sociedades el hombre es tanto el polo positivo
como el neutro, mientras que la mujer se limita a ser el otro, y aquí volvemos al origen de lo que
comentaba antes, es el segundo sexo.
Uno de los grandes problemas que tiene el género femenino es que, al contrario que en otros grupos
excluidos, no se llega a crear un sentimiento de comunidad, no existe un “nosotras”, es decir, al
contrario que hoy en día, no existe la sororidad que hemos mencionado a lo largo del curso. Por dejar
claro que es la sororidad según el libro Ser feministas, Isabel Balza nos describe como esta palabra
proviene de soros, hermana, y apunta a ser aquello capaz de combatir la fratría anteriormente
mencionada. Es un acto político de unión y apoyo de las mujeres que lucha contra la práctica
patriarcal de separar a las mujeres y presentarlas como enemigas entre ellas. Tenemos varios ejemplos
de sororidad pero entre los más conocidos encontramos el #MeToo que se hizo tan viral en 2017.
El comportamiento de las mujeres viene dado por la cultura de la sociedad que ha recibido, no por la
biología de esta, siendo este obviamente el origen de tan famosa y mencionada cita “no se nace mujer,
se llega a serlo”. Lo que sucede con muchas mujeres es que se quedan en su feminidad porque el
hombre les explica qué es lo que les corresponde como mujeres. Simone de Beauvoir no pretende
cambiar la condición femenina pero sí concienciar sobre esta diferencia. En el momento en el que el
“segundo sexo” tenga la posibilidad de decidir y decida que es lo que quiere para su sexualidad, su
familia, su trabajo, básicamente que quiere para su vida y lo que la rodea, es el momento en el que
viviremos en una sociedad completa, poderosa, constituida por hombres y mujeres completos y libres.
Feminismo liberal.
En la década de los cincuenta hay una especie de suspenso digestivo y silencioso en los feminismos,
el optimismo de la postguerra estadounidense parece dominar el discurso cultural hasta que en 1963 la
psicóloga Betty Friedan publica “La mística de la feminidad”.
“Cuando (la mujer) hacía las camas, la compra, (…) comía sándwiches de crema de cacahuete con
sus hijos (…) y se acostaba junto a su marido por las noches, le daba miedo hacer, incluso hacerse a
sí misma, la pregunta nunca pronunciada: «¿Es esto todo?»”
Las mujeres tienen un malestar, un “problema que no tiene nombre”, es una condición invisible. Son
medicadas pero no cambia su situación, la medicina no consigue diagnosticar acertadamente, por eso
Friedan utiliza la expresión de problema que no tiene nombre.
A su juicio, la causa de su malestar es la heterodesignación. Lo que la mujer es y debe ser, lo han
decidido y determinado los hombres. Están en crisis de identidad, atrapadas por la mística de la
feminidad, lo que posteriormente pasará a conceptualizarse como género.
Esta mística femenina, esta designación mediante la cual tienen sentidos sus vidas, impuesta por los
varones, se expresa en sus roles suficientes y necesarios de “esposa” y “madre”. El segundo sexo se
agota en estas funciones.
Betty Friedan es la principal teórica y activista del feminismo liberal. Este se caracteriza por su
reformismo, la lucha tiene por fin la igualdad de oportunidades laborales, sociales e individuales.
Enmarcado en el sistema capitalista americano y en la corriente individualista, persigue, sin conseguir
tampoco desbordar los límites de Simone de Beauvoir, incluir al sexo femenino en lo genéricamente
humano. Conseguir proyectos vitales autónomos, acceso al ámbito público e igualdad laboral.
Pero sin ningún tipo de crítica sistémica o transformación profunda. Estas serán traídas a los
feminismos, por las mujeres jóvenes de finales de los 60 y la década de los 70. Las feministas
radicales.
Feminismo radical.
Radical viene de raíz, es, en contraposición al feminismo liberal, un intento de transformación y no de
reforma. De revolución y no de ajuste.
Las feministas radicales son mujeres jóvenes, no como la generación de Friedan, a la que se deben,
por supuesto, pero a la que radicalmente desbordan. Son herederas y participantes de la contracultura
y los movimientos transformadores de los 60 así como de las corrientes estructuralista y
posestructuralista.
Kate Millet y Shulamith Firestone son dos de las autoras centrales, ambas publican en 1970. Millet
escribe “Política sexual” y Firestone escribe “Dialéctica del sexo”.
El análisis radical es rico y prolífico, los conceptos clave que producen estas feministas son
herramientas profundas y fundamentales para los feminismos posteriores.
Estas autoras y activistas forman grupos de consciencia, en la que se juntan mujeres que comparten
impresiones y experiencias. Así, comienzan a reconocer patrones que se repiten en sus vidas privadas:
en sus relaciones sexuales y afectivas, en sus familias, y sus entornos.
El poder atraviesa todas las instancias sociales y las relaciones personales, en lo personal se manifiesta
el patriarcado. Kate Millet establece el patriarcado como sistema básico, metastable dirá luego
Amorós, de dominación de la mujer (y del varón joven) por parte del varón, el patriarcado es anterior,
está “por debajo o detrás” de todos los sistemas políticos, científicos, económicos, éticos, etc. Está en
las relaciones personales. La violencia que sufren las mujeres en su vida privada es violencia
patriarcal, es política.
Ecofeminismo
El término ecofeminismo fue acuñado por Françoise d’Eaubonne en los años 70. Es una corriente que
centra su foco de análisis y práctica en la coincidencia de la opresión a las mujeres y la explotación de
la naturaleza.
En “Filosofía ecofeminista” la autora Karen Warren, diagnostica los problemas del ecofeminismo
como los Marcos conceptuales opresivos, entre los que incluye el pensamiento jerárquico-valorativo,
los dualismos valorados y la lógica de la dominación. Estos paradigmas filosóficos son la justificación
y garantía de continuación de las prácticas violentas y opresivas tanto hacia los ecosistemas, la vida
animal no humana, y las mujeres. Siendo ámbitos distintos, su raíz y su enemigo es el mismo.
El pensamiento valorativo tiende a considerar lo diferente como inferior, los dualismos reorganizan en
torno a enemistades y oposiciones y la lógica del dominio es la que da el paso de la diferencia a la
dominación.
La filósofa y ecofeminista Val Plumwood desarticula también la lógica del dominio. El problema
fundamental vendría a ser el androcentrismo radical. El hombre, (que también es la razón, la cultura,
el individuo, etc) es lo uno, lo propio, el sujeto, la variable A; y todo lo demás, todo lo que lo opone
como dualismo conceptual vendría a ser no-A.
Es esto lo que se conoce como dependencia negativa, lo Otro, no vendría a ser B, C, Z.. sino no-A. Lo
que define a todo lo distinto del sujeto-hombre-cultura es este mismo sujeto-hombre-cultura, su
estatus ontológico es el de dependiente y el de negación, su ser es en cuanto no-ser, en tanto que
subordinado a lo que afirmativamente es protagonista y válido.
Es en esta lógica, que parece completamente obvio, razonable y justo, que la naturaleza y la mujer
sean explotadas y poseídas, no tienen validez lógica ni ontológica más que como dependientes del
varón.
Cumple un papel fundamental entonces la filosofía de la diferencia y la ética del cuidado.
Karen Warren hablaba del paso necesario de una percepción arrogante a una afectiva. Carol Gilligan
desarrolló la ética del cuidado a partir de la teoría del desarrollo moral de Kohlberg. La psicóloga
identificó que la perspectiva de la ética de la justicia estaba sesgada, en los estudios de Kohlberg los
niños eran evaluados en etapas de mayor desarrollo moral que las niñas. Gilligan se dio cuenta de que
los criterios éticos eran diferentes, los niños solían valorar los argumentos abstractos y la justicia,
mientras que las niñas pensaban antes en las relaciones personales y el cuidado. A partir de esto
desarrolló una crítica a la superioridad conceptual de la justicia abstracta respecto del cuidado y las
relaciones, las diferencias no se deben a esencias distintas entre hombre y mujeres sino a los
dualismos conceptuales en el patriarcado. El cuidado, como paradigma ético es independiente de los
sexos y perteneciente a ambos, la educación y la lógica del dominio son los que lo han invisibilizado y
despreciado, aunque siempre ha estado ahí, relegado a las mujeres y la oscuridad, porque no hay
posibilidad de vida y desarrollo humano, o no humano, sin el cuidado.
DIAPOSITIVA
VIOLENCIA DE GÉNERO
La violencia de género es aquella que se realiza en base a un género. Esto puede resultar muy obvio,
sí, sin embargo, el punto clave a entender de ello, es que la violencia se ejerce sobre un género el cual
se encuentra ya de por sí en escalafón inferior respecto al sistema. Es de reseñar que no es
simplemente una violencia “lineal”, sino que se trata de lo que podemos considerar un ouroboros,
donde la violencia perpetúa la discriminación del género, y esa misma discriminación genera aun más
violencia. Es así como el patriarcado ha instaurado que el género femenino sea el que se encuentre en
el centro de la diana en lo que ha violencia de género se refiere. Es muy ilustrativo el ejemplo que
vimos a principio de curso sobre los artículos deportivos, donde de primeras encontramos que sobre
hombres salen tales como “top 10 jugadores de los JJOO”, en cambio, sobre mujeres, vemos “Las 10
bellezas que no te puedes perder de los JJOO”, y pongo este como ejemplo por ser benévolo con estos
medios de comunicación viejunos, sin mencionar claro que tras las quejas feministas sobre este último
artículo vimos un claro ejemplo de “y si fuera al revés” típico de twitter y subieron el artículo “top 10
casa novas de los JJOO”.
//Decir que estás hablando de la cita de K. Millet// Bueno, no es ninguna sorpresa que, como ya he
mencionado, el patriarcado es aquello que permite que esto pase, siendo esta una estructura muy bien
montada, que utiliza la fuerza como instrumento, centrada en el patriarcado como consentimiento.[4]
Es obvio y lo vemos cada día que se exculpa a los hombres de los actos que se cometen y se
criminaliza a las mujeres por aquellos mismos actos que sufren, para verlo simplemente hay que leer
un par de artículos referidos a violaciones o, como no, DIAPOSITIVA leer twitter. Se trata muy poco
esto pero es que es una red social que es un claro reflejo de lo que la sociedad querría decir bajo su
nombre y no pueden así que lo dicen como “Mario69RM”.[5] La definición de esta red social, con la
importancia que tiene en la actualidad, cada vez que sucede algún acto de violencia de género viral o
se abre debate sobre la violencia sobre las mujeres, nos encontramos con miles de memes quitando
importancia y que, en la gran mayoría de las ocasiones, esconden detrás a una persona machista.
DIAPOSITIVA Pero vamos, que si quieres ahondar más aun en el tema solo tienes que ver las
campañas contra la violencia de género en Galicia que culpan de que se drogue a las mujeres a estas
mismas por dejar su copa desatendida dos minutos, o de que las violen por salir a correr en mallas por
la noche. Eso sí, luego el gobierno les dice que esto es machista y ellos contestan que lo único que
tienen de machistas es ser fans de Carmen Machi, ridículo.
DIAPOSITIVA
Una buena definición del mismo la encontramos, de nuevo, en el libro Ser feministas, donde Ana de
Miguel nos dice que se refiere a la relación que tienen los individuos con sus características de género
en los patriarcados de consentimiento, todo esto dentro de un marco de falsedad que no hace más que
esclarecer el hecho de que las elecciones que tomamos en cuestiones de género tradicionales no son
libres y estas son condicionadas por fuerzas externas de manera subconsciente.
Para que se de este mito de la libre elección es importante cuanto menos que nos hallemos en un
patriarcado de consentimiento, ya que no tendría sentido que exista siquiera potestad para elegir algo
en un patriarcado de coerción. La apariencia de tolerancia e igualdad con la que se ve este primer tipo
de patriarcado mencionado es el marco perfecto para poder blanquear las manipulaciones que existen
a la hora de tomar decisiones, sin ir más lejos, el mismo sistema es quien defiende que la presencia de
los caracteres de género siguen presentes a día de hoy por la libre elección de los individuos, de ahí el
mito.
Nos podemos encontrar con infinidad de ejemplos del mito de la libre elección, y entre otros muchos
los videos que hemos visto durante el curso son más que suficientes para entender de qué se trata y
que es un problema real. Solamente por hacer memoria y darles mención, está el video aquel sobre los
niños dibujando a personas en diferentes profesiones y como la educación que han recibido les lleva a
relacionar dichas profesiones con hombres, para que luego cuando ven que son mujeres aquellas que
las desempeñas pues quedarse locos. Además está el video de “run like a girl”, que es aquel donde los
adultos exaltan la feminidad como algo negativo y los niños al contrario los toman igual que los
masculinos y por último aquel de las poses exageradas y ridículas que vemos de la publicidad.
Ahora bien, he comentado al principio del punto que se trata de una de las piedras angulares del
feminismo y quizás a simple vista pueda parecer que hay otros temas a tratar prioritariamente en
comparación, sin embargo, el mito de la libre elección es tan importante, o al menos así lo considero
yo, por la relación tan directa que tiene con las prostitución, y de ahí todas las ramas que esta masiva y
podrida industria de la explotación trae consigo, siendo este sí, uno de los mayores problemas que
debería solventar el feminismo cuanto antes.
[3] Perdón por poner esto, pero creo que cuanto más claro mejor, este párrafo se cuenta como una
historia para terminar con la conclusión como super esclarecedora de que es el segundo sexo.
[4] Esto se menciona como características si nadie ha descrito el patriarcado antes, si lo han explicado
en profundidad anteriormente, es como una lista para rememorar de forma informal.