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MOVIMIENTO GIROSCÓPICO

Al hacer "bailar" un trompo, éste realiza curiosos movimientos, cuando el eje de giro ya
no se mantiene vertical. Cuando esto sucede, el nuevo eje de giro, se mueve
alrededor del eje vertical, en el mismo sentido de giro del trompo. Este movimiento
recibe el nombre de movimiento de precesión. Figura 1.15.

Figura 1.15. Movimiento giroscópico del trompo.

Este movimiento aparece siempre que se aplica una fuerza a un sólido que gira con
una gran velocidad angular w alrededor de su eje. En este caso la fuerza es la de
atracción gravitacional. Esta fuerza , conjuntamente con la reacción en el punto
de apoyo A, originan un torque que en un intervalo de tiempo D t, dan lugar a un
elemento de cantidad de movimiento angular, perpendicular al plano de la figura y
saliendo de él de forma tal que:

Si en cierto instante el eje de giro del trompo es AB, su cantidad de movimiento


angular y la velocidad angular , estarán en la dirección AB.

Este vector se suma con el dando una resultante que formará cierto ángulo con
la dirección de , obligando al eje del trompo a coincidir con esta nueva dirección.
Este procedimiento se repite continuamente, dando lugar al movimiento del trompo
alrededor del eje y, independiente del movimiento que tiene al girar sobre sí mismo.

Este movimiento del eje de rotación del trompo alrededor del eje y es el denominado
movimiento de precesión.

La tierra también está dotada de un movimiento de precesión, cuyo periodo se ha


calculado en 25 000 años, lo que supone una variación en la posición de los polos, con
respecto al plano de la eclíptica.

Este movimiento se explica teniendo en cuenta que sobre la tierra en rotación, actúan
fuerzas de atracción gravitacional que originan un torque resultante.

Los movimientos de precesión se ponen muy bien de manifiesto en los aparatos


llamados giróscopos. Un giróscopo consiste de un volante de alto momento de inercia,
que gira rápidamente alrededor de un eje fijo al aparato.
Cuando el volante gira, su cantidad de movimiento angular es .

Si se aplica al giróscopo un par de fuerzas , que ocasionan un torque , se


incrementará L en un valor , resultando con ello que el volante tenderá a
girar según la nueva dirección de la cantidad de movimiento angular Li resultante.

Como esto sucede de un modo continuó, se origina un movimiento de giro en todo el


aparato con velocidad w i que, por la regla del tornillo será perpendicular al plano que
forman los vectores y .

Se puede afirmar entonces, que en el movimiento giroscópico, la cantidad de


movimiento angular tiende siempre a coincidir con la dirección del torque del par
aplicado.

Figura 1.16.

En cuanto a aplicaciones del giróscopo, en esta unidad modular se pueden mencionar


dos. En la brújula giroscópica, debido al movimiento de rotación de la tierra, cualquier
giróscopo de eje horizontal puede indicar la dirección del meridiano en un punto
cualquiera de esta.

En balística, el movimiento giroscópico se logra en el rayado de los cañones de


artillería con el objeto de producir en el proyectil un movimiento de rotación. Con esto
se consigue una gran estabilidad en la dirección del proyectil. Si el proyectil no
estuviese dotado de esta rotación, cualquier acción exterior, por ejemplo de la del
viento, le desviarán de la trayectoria prevista, haciendo inútil todo calculo balístico.

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