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UNIVERSIDAD ESTATAL DE SONORA

UNIDAD ACADÉMICA HERMOSILLO


LICENCIATURA EN ENFERMERIA

“CUIDADOS DE ENFERMERIA DEL NIÑO PEDIATRICO


CON OXIGENOTERAPIA, ASIRACION DE
SECRECIONES, NEBULIZACION, FISIOTERAPIA
PULMONAR”

ENFERMERIA PEDIATRIA
QUINTO SEMESTRE

PROFESOR: CLAUDIA ZUGEY GALLEGOS MEDINA


PRESENTA:
GARCIA VASQUEZ FLOR JACKELINE
Hermosillo, SONORA 15 DE NOVIEMBRE DEL 2022
CUIDADOS DE ENFERMERIA DEL NIÑO PEDIATRICO CON OXIGENOTERAPIA

 Suministrar el tipo y el grado de ayuda respiratoria compatible con las necesidades


y tolerancia del niño.
 Evitar la toxicidad producida por el oxígeno cuando se administra a
concentraciones muy elevadas o durante periodos muy prolongados.
 Disminuir la ansiedad de los padres y del niño respecto a la necesidad de ayuda
ventilatoria.
 Comprobar la concentración/FiO2 prescrita.
 No poner en contacto el material que se va a utilizar con grasas y aceites
(vaselina), ya que el oxígeno es un comburente enérgico.
 Tener en cuenta que la administración de oxigeno está contraindicada en la
intoxicación por bleomicina (antibiótico citotóxico) y paraquat (herbicida) porque
aumenta el daño pulmonar. (7)
 En patologías que cursan con hipercapnia e hipoxia crónica, como la enfermedad
pulmonar obstructiva crónica (EPOC), administrar oxígeno a altas concentraciones,
puede disminuir el impulso ventilatorio y/o agravar el fallo respiratorio por
hipercapnia. (7)
 En pacientes con terapia de alto flujo con cánula nasal, Existe riesgo de
barotrauma en flujos muy elevados, estando contraindicado en pacientes con fosas
nasales dañadas u obstruidas.
 Usar solamente agua bidestilada
 Verificar los niveles de agua periódicamente
 Verificar el funcionamiento del filtro del nebulizador y permeabilizar cuando sea
necesario
 Cambiar el circuito cada 24 horas
 Vaciar cada cierto tiempo el agua depositada en las paredes del tubo corrugado,
evite que este se acode
 Si es posible en niños con baja temperatura colocar calefactor en el nebulizador
 Evitar el roce de la cara del niño con los bordes del cilindro, verificando que este no
quede incrustado en los hombros del niño
 Mantener en lo posible al niño en posición semi-Fowler
 Mantener la piel del cuello seca y limpia, así también la ropa de cuna de la zona
cefálica.
 Están indicadas sólo para pacientes críticos
 No usar por más de 4 horas, porque podrían provocar retención de CO2
 Medir periódicamente la concentración de oxígeno (FIO2 real) en el interior del Halo
 Vigilar el grado de dificultad respiratoria y dinámica respiratoria del niño.
 Verificar que las válvulas queden bien ubicadas en su sitio para lograr la
concentración esperada de Oxígeno (95%)
CUIDADOS DE ENFERMERIA DEL NIÑO PEDIATRICO CON ASIRACION DE
SECRECIONES

 Utilizar técnicas divertidas para estimular la respiración profunda (burbujas, silbato,


globos, etc.).
 Administración de broncodilatadores, aerosoles, si procede.
 Administrar aire u oxígeno humidificado, si procede.
 Regular la ingesta de líquidos para optimizar el equilibrio de líquidos.
 Colocar al paciente en posición tal que se alivie la disnea.
 Vigilar el estado respiratorio y la oxigenación, si procede.
 Observar estado de consciencia, coloración de la piel, mucosas.
 Monitorizar constantes vitales, saturación de oxígeno, frecuencia respiratoria,
temperatura, etc.
 Control de la actividad. Manejo del sueño.
 Facilitar el cuidado de las actividades de la vida diaria, básicas como la
alimentación, la higiene, la eliminación, el vestirse y desvestirse o la movilidad
funcional, así como las instrumentales que lo más probable a su edad es que haya
que suplirlas.
 Manejo de la medicación y cuidados de la vía periférica. Balance hídrico.
 Administración de oxígeno.
 Educación a la familia.
 Enseñar a los padres / familia a fomentar la independencia, para intervenir
solamente cuando el paciente no pueda realizar la acción dada.
 Establecer una rutina de actividades de autocuidados.

CUIDADOS DE ENFERMERIA DEL NIÑO PEDIATRICO CON NEBULIZACION

 Realizar higiene de manos.


 Preparar el fármaco en forma líquida hasta obtener un volumen de 4-5ml y ponerlo
en la cazoleta5.
 Unir la mascarilla, la cazoleta y la alargadera y conectarla al caudalímetro.
 Colocar la mascarilla al paciente.
 Comprobar que el nebulizador esté en posición vertical.
 Abrir el caudalímetro entre 6/7 litros/minuto comprobando la salida de vapor.
 Pedir al paciente que inspire lento, profundo y uniforme por la boca.
 Retirar la nebulización cuando ya no se observe vapor o cuando el líquido se haya
acabado.
 En pacientes que requieran la administración nebulizada de salbutamol (Ventolin) y
bromuro de ipratropio (Atrovent), se recomienda asociarlos en la misma cazoleta ya
que tienen mayor efecto que el de ambos por separado. Puede asociarse también
budesonida.
 Administrar medicamentos con efecto local o general.
 Mejorar la movilización y la evacuación de las secreciones respiratorias.
 Fluidificar secreciones.
 Mantener húmedas las mucosas.
 Aliviar la irritación de las mucosas de las vías respiratorias.
 Comprobar que se produzca una nube de aerosol.
 Controlar que el paciente haga inspiraciones profundas con la boca abierta en
forma lenta.

CUIDADOS DE ENFERMERIA DEL NIÑO PEDIATRICO CON FISIOTERAPIA


PULMONAR

 Realizar una valoración rápida y detallada de la función respiratoria (30-60


segundos máximo) utilizando el TEP, para identificar el tipo y la gravedad del
problema.
 Evaluar la apariencia: tono muscular (flácido, hipoactivo).
 Evaluar interacción con el entorno: grado de alerta, reacción al sonido cuando se le
llama por el nombre, juega interactúa o rechaza el juego.
 Valorar durante el llanto atiende al llamarlo por el nombre, permite ser consolado o
llora y grita de forma irritable.
 Valorar si la mirada es fija o perdida, mantiene los ojos abiertos, abre los ojos como
respuesta a la llamada, ojos cerrados, reacción pupilar presente.
 Evaluar el lenguaje: balbuceo, habla o está callado, iniciar una conversación para
saber si está orientado en el tiempo y espacio, o está desorientado y confuso, el
paciente inconsciente no responde al llamado.
 Evaluar la respiración: esfuerzo respiratorio, aleteo nasal, retracciones, uso de
músculos intercostales cada vez que se intenta inhalar.
 Escuchar ruidos respiratorios audibles como estridor, quejidos o sibilancias, tos,
ronquera o incapacidad de digerir la saliva.
 Valorar la perfusión de la piel: color, palidez, cianosis, observar signos de
hemorragia dentro la piel, petequias o manchas púrpuras.

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