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UNACH LICENCIATURA

EN DERECHO, CAMPUS III


EXTENSIÓN TAPACHULA

ACTIVIDAD:
Trabajo de Investigación
“Zoon Politikon Aristotélico”

CATEDRÁTICO:
LIC. Raúl Morales Liévano

MATERIA:
Teoría Política

INTEGRANTES DEL EQUIPO:


Cruz Macias Williams Yarroth
Fong Champo Susel Sou Lyn
García López Daniela Guadalupe
López Galdámez Fernando
Tovilla López Diana Guadalupe
Vazquez Fuentes Miguel Alexander

SEMESTRE: 2do. GRUPO: B

FECHA DE ENTREGA: 07 DE FEBRERO DEL 2023


ÍNDICE:

Introducción:………………………………………………………………………….. 1

Biografía de Aristóteles:…………………………………………………….………. 3

De la Ética a la Política:…………………………………………………………….. 5

Ciudad-Estado:………………………………………………………………………. 6

Regímenes políticos:………………………………………………………………… 7

El eu zen como telos de la polis (el buen vivir como consecuencia de la buena
política):…………………………………………………………………………..…… 9

El ciudadano virtuoso y sus aporías:………………………………………………. 11

La beltiste polis (la ciudad más perfecta) como horizonte de resolución de la aporía
ético-política :…………………………………………………………………………. 13

Conclusión:……………………………………………………………………………. 17

Bibliografía:……………………………………………………………………………. 20
Introducción:

En el presente trabajo de investigación se dará a conocer el pensamiento político


de Aristóteles y como definía al ser humano como un” animal político”. Es
importante la investigación del “zoon politikon aristotélico” en nuestra materia,
ya que su pensamiento fue uno de los pilares para concebir la forma adecuada,
ideal, equitativa y justa de organizar una sociedad.

Para la elaboración de la presente investigación se utilizaron diferentes fuentes


bibliográficas verídicas, en donde se buscaron los temas principales enfocados a
nuestro tema central. Al igual que, se trabajó con armonía, respeto, tolerancia y
responsabilidad por parte de cada uno de los integrantes del equipo.

En primer lugar, comenzaremos con una breve explicación acerca de la vida del
gran filósofo Aristóteles que nació en Estagira en el año 384 a.C., entró a la
escuela de Platón a los 17 años y permaneció ahí durante 20 años hasta la muerte
de su maestro. Fue un filósofo multifacético, ya que aportó sus conocimientos
en diferentes disciplinas.

Entrando en materia, “La Política” fue una de sus obras mas conocidas y de gran
relevancia para el estudio de la teoría política, ya que en esta se tocaban temas
como la ética, la democracia y la justicia, además de cómo se deberían de
organizar las sociedades “la polis”. La ética por su parte, es un campo muy
distinto a las ciencias sociales, para esto Aristóteles usó una metodología diferente
a los demás y gracias a eso escribió dos grandes tratados éticos; la ética
nicomacha y la ética endémica. Esos dos tratados fueron los encargados de
estudiar a la sociedad como un animal político y establecer las diferentes
opiniones del ser humano.

De igual forma, Aristóteles señalaba que pueden existir diversas formas justas de
gobierno, entre ellas: El régimen justo o correcto y el régimen injusto o
degenerado.

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Por último, Aristóteles define en su perspectiva la beltiste polis como la ciudad
más perfecta, es decir, considera a los ciudadanos factores importantes en su
perspectiva de la ciudad más perfecta, siendo los ciudadanos una pieza
fundamental para la existencia de la ciudad, entre ellos se encuentran a los
obreros (banauson) o campesino (theikon) y los esclavos como pilares para una
ciudad perfecta.

Pero dentro de toda su objetividad, entran las virtudes del ciudadano, o sea, los
trabajos necesarios: los que hacen para servicio de uno (esclavos) y los que sirven
a la comunidad (obreros y campesinos). Por su parte, Aristóteles logró suprimir la
posibilidad de que exista una polis en la que el hombre moralmente bueno y el
buen ciudadano puedan coincidir, entonces asistiríamos a un distanciamiento
exponencial e irreversible de virtud ética y virtud política.

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1. Biografía de Aristóteles

Su vida:
Aristóteles nació en Estagira en el año 384
a.C., entró a la escuela de Platón a los 17
años y permaneció ahí durante 20 años
hasta la muerte de su maestro. Fue
entonces cuando Aristóteles dejó la
Academia y se fue a Assos, donde los
discípulos de Platón, Erasto y Coriseo
habían constituido una comunidad filosófica-
política.

El contexto histórico que rodeó la vida y obra de Aristóteles nos remonta a Grecia
en el siglo IV a.C. En este momento, Grecia estaba bajo una débil hegemonía por
parte de Esparta, tras su victoria en la guerra del Peloponeso, después de la cual
Atenas cayó en una profunda recesión económica.

A partir del año 379 a.C. las luchas entre las ciudades griegas Esparta, Tebas y
Atenas se reactivaron y continuaron a lo largo de la primera mitad del siglo, entre
sí mismas y, en el exterior, contra Cartago, Macedonia y Persia. Los atenienses
crearon la Segunda Liga Délica contra Esparta en el año 377 a.C., aliándose con
las islas y ciudades del Egeo, posteriormente Atenas se alió con Esparta en el año
369 a.C., buscando luchar contra la hegemonía de Tebas.

A partir del año 359 a.C. Filipo II unifica Macedonia, abandonando la Segunda
Liga Délica. En el año 342 Aristóteles fue llamado por Filipo de Macedonia para
hacerse cargo de la educación de Alejandro Magno quien, a la muerte de Filipo II,
logró consolidar políticamente a las ciudades y unificar todo el mundo griego. De
acuerdo con Abbagnano (1994), se observa en Alejandro la convicción aristotélica
de la superioridad de la cultura griega y la capacidad para dominar el mundo.

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Cuando Alejandro Magno subió al trono, Aristóteles regresó, después de 13 años,
a Atenas donde fundó su escuela, el Liceo. Cuando en el 323 a.C. Alejandro
Magno murió, la insurrección del partido nacionalista contra los partidarios del rey
puso en peligro Aristóteles por lo cual se alejó de Atenas y huyó a Calcis, donde
poseía una propiedad de su madre. Aristóteles murió a los 63 años alrededor del
año 322-321 a.C. debido a una grave enfermedad del estómago.

Pensamiento y reflexiones en torno a la democracia:

La principal obra en la cual Aristóteles se dedica al análisis del gobierno y la


democracia es la Política (344 a.C.). En esta obra, se observa que la virtud ética
principal es la justicia, sin embargo, Aristóteles no refería a la justicia como una
virtud particular, sino una virtud íntegra y perfecta. Así, el hombre que respeta
todas las leyes es el hombre completamente virtuoso; la virtud no es realizable
fuera de la vida en sociedad, es decir, fuera del Estado. La vida social tiene origen
en el hecho de que el individuo no se basta por sí mismo, no puede por sí solo
proveer sus necesidades y tampoco puede vivir apartado de la disciplina impuesta
por las leyes y por la educación, sin ellas no es posible alcanzar la virtud.

Impacto de su pensamiento en el mundo fáctico:

Aristóteles es considerado como el padre de la lógica, al establecer los


fundamentos de la argumentación y la lógica. En la política contribuyó a las
nociones de estructura, funcionamiento y objetivos de un gobierno.

(CUAIEED, 2020)

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2. De la Ética a la política:

Aristóteles insiste con relativa frecuencia en que las virtudes éticas solo se pueden
conseguir en el seno de una adecuada organización política, ya que, para él, el ser
humano es, por naturaleza, un animal político.

La concepción aristotélica de la política significa, prácticamente, lo contrario de lo


que significa en la actualidad. Así, hoy en día se piensa que el político ha de tener
en cuenta las exigencias de la ética o, dicho de otro modo, que la política debe
encontrarse subordinada a la ética. Por el contrario, la concepción de Aristóteles
supone la subordinación de la ética a la política o, tal vez mejor, la reducción de la
ética a una parte de la política.

Aristóteles justifica su concepción del modo siguiente. La ética se ocupa del bien
individual, en cambio, la política se ocupa del bien en la sociedad. Pero, en primer
lugar, el todo -la sociedad-es anterior y superior a la parte – el individuo-. Y, en
segundo lugar, aunque es digno y admirable ocuparse del bien de uno, mucho
más lo será intentar ocuparse del de todos.

Por otro lado, a lo largo de su ética. Aristóteles se esforzó en resaltar no solo


virtudes sociales como la justicia, la amistad o la liberalidad, sino también la
dimensión social de dichas virtudes. Así, por ejemplo, llama la atención sobre la
estrecha relación existente entre justicia y la ley, la función de la justicia
distributiva o la contribución de la amistad al bienestar de los seres humanos.

Por último, al final de su ética para Nicómaco, Aristóteles subraya con cierto
énfasis que la educación y las costumbres de los jóvenes dependen de las leyes.
Estas, a su vez, se subordinan a las costumbres y a la adecuada organización de
la sociedad. En conclusión, tanto para alcanzar las virtudes éticas o morales como
las dianoéticas o intelectuales es preciso vivir en el seno de una organización
política y social adecuada.

(Mheducation)

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3. Ciudad-Estado:

Para Aristóteles. La forma de organización ideal era la polis o ciudad-Estado,


compuesta de un núcleo urbano y de varias aldeas alrededor.

Para Aristóteles entendía la familia en sentido muy amplio, como una comunidad
de personas y bienes de la formaban parte no solo los diversos miembros unidos
por la sangre o descendencia, sino también los esclavos.

Las aldeas se conformaban por la unión de varias familias, además de que en


estas ya no solo se veían las necesidades cotidianas, sino también, a tendía las
necesidades sociales, es decir, administrativas o de gobierno y culturales.

Las polis (ciudad-Estado) surge a consecuencia que las familias y aldeas no eran
capaces de ser autosuficientes, y con la creación de estas fue posible satisfacer
todas las necesidades humanas.

En el libro VI de su Política, Aristóteles expone su idea de la polis ideal. Según su


concepto del término medio, señala que no debe ser ni demasiado grande ni
demasiado pequeña, porque toda poli debe ser autosuficiente, y si es demasiado
pequeña, no lograra autoabastecerse, mientras si es demasiado grande, será
autosuficiente como pueblo, pero tendrá numerosas dificultades en el
funcionamiento correcto de las instituciones públicas.

En conclusión, un poli debe de estar formada por un número de ciudadanos para


poder ser una comunidad humana autosuficiente, para Aristóteles, ese número
debe de ser entre los 50,000 y 100,000 habitantes.

(Mheducation)

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4. Regímenes políticos:

Frente a la opinión de Platón, la cual admitía una única forma de gobierno


correcto, el gobierno de los sabios o de los filósofos, Aristóteles señala que
pueden existir distintas formas y justas de gobierno.

Es así como todo régimen político consiste en la organización de las diversas


entidades e instituciones sociales para conseguir el bien común, existen diferentes
modos de conseguir dicho bien, luego podrá haber diversos regímenes políticos
justos. A este propósito, Aristóteles distinguió entre regímenes justos o
correctos y regímenes injustos o degenerados

 REGÍMENES JUSTOS O CORRECTOS: Son justos los regímenes donde


se intenta conseguir el bien común e injustos los que se ocupan
preferentemente de los bienes particulares. Como regímenes justos
Aristóteles señala la monarquía o gobierno de una persona; la aristocracia
(clase noble de una nación) o gobierno de los mejores y la Politeia (espacio
público) o gobierno del pueblo.
 REGÍMENES INJUSTOS O DEGENERADOS: Son injustos los regímenes
que se preocupan preferentemente por los bienes particulares. Cuando un
régimen justo se corrompe, da lugar a otro injusto o degenerado.

La monarquía puede degenerar en tiranía o gobierno despótico de una persona; la


aristocracia, en oligarquía (forma de gobierno en la cual el poder político es
ejercido por un grupo minoritario), o bien en plutocracia (situación en la que
los ricos ejercen su preponderancia en el gobierno del Estado) y, finalmente,
la Politeia en democracia, es decir, demagogia (Práctica política consistente en
ganarse la opinión del pueblo con halagos según Aristóteles).

Cada forma de gobierno presenta ventajas e inconvenientes. Así, una persona


excelente y más capacitada que los demás podría ser un buen monarca para
todos, aunque esa misma persona también puede degenerar en un despiadado
tirano. Con la aristocracia puede ocurrir algo similar, pues sus miembros podrían
ocuparse por su satisfacción personal.

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Ante este abanico de posibilidades, parece que Aristóteles defiende un régimen
mezcla de aristocracia y democracia en el que se pueda contar con un amplio
número de ciudadanos libres, con capacidad para distribuir las magistraturas, es
decir, el gobierno entre los mejores. Se trata, pues, de un tipo de aristocracia
moderada sometida a cierto control del Pueblo. Aristóteles elige este tipo de
gobierno, porque se evitarían los extremos. Vemos, pues, que la virtud política
consiste también en un término medio entre dos extremos igualmente viciosos,
determinado por la razón, tal y como lo determinaría una persona prudente.

Señala que los mejores Estados son los constituidos por la clase media, y que las
polis en que los individuos pertenecientes a esta clase son más numerosos y más
fuertes, suelen ser las mejores gobernadas. Resulta curioso pues, observar que la
Política aristotélica concluye señalando que, a la hora de establecer la educación
ideal de las polis debamos tener en cuenta estas tres variables: el término medio,
lo posible y lo conveniente. En otras palabras, Se ha de buscar el término medio,
pero sin olvidar las particularidades y las circunstancias concretas de cada Estado.

(Mheducation)

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5. El eu zen como telos de la polis (el buen vivir como
consecuencia de la buena política):

Aristóteles concibe la teoría ética como un campo distinto de las ciencias teóricas.
Su metodología debe coincidir con su tema, una buena acción, y debe respetar el
hecho de que en este campo muchas generalizaciones solo se mantienen en su
mayor parte.

Aristóteles escribió dos tratados éticos: la ética nicomacha y la ética eudémica. Él


mismo no usa ninguno de estos títulos, aunque en la Política se refiere a uno de
ellos, probablemente la Ética Eudemiana, como "ta êthika", sus escritos sobre el
carácter. Las palabras "Eudemian" y "Nicomachean" se añadieron más tarde, tal
vez porque la primera fue editada por su amigo, Eudemus, y la segunda por su
hijo, Nicomachus. En cualquier caso, estas dos obras cubren más o menos el
mismo terreno: comienzan con una discusión sobre eudaimonia ("felicidad",
"floreciente"), y se vuelven a un examen de la naturaleza de aretê ("virtud",
"excelencia") y los rasgos de carácter que los seres humanos necesitan para vivir
la vida en su mejor momento.

La idea principal con la que comienza Aristóteles es que hay diferencias de


opinión sobre lo que es mejor para los seres humanos, y que para beneficiarse de
la investigación ética debemos resolver este desacuerdo. Insiste en que la ética no
es una disciplina teórica: nos preguntamos qué es el bien para los seres humanos
no solo porque queremos tener conocimiento, sino porque seremos más capaces
de lograr nuestro bien si desarrollamos una comprensión más completa de lo que
es florecer.

La indicación más revelador de este orden es que en varios casos la ética de


Nicomache desarrolla un tema sobre el que su primo eudemiano guarda silencio.
Solo la ética de Nicomache discute la estrecha relación entre la investigación ética
y la política; solo la ética de Nicomache examina críticamente el dicho paradójico
de Solon de que ningún hombre debe ser contado feliz hasta que esté muerto; y

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solo la Ética de Nicocha da una serie de argumentos para la superioridad de la
vida filosófica a la vida política.

Aristóteles cree que todos estarán de acuerdo en que los términos "eudaimonia"
("felicidad") y "eu zên" ("vivir bien") designan tal fin. El término griego "eudaimon"
se compone de dos partes: "eu" significa "bien" y "daimon" significa "divinity" o
"espíritu". Ser eudaimon es, por lo tanto, vivir de una manera bien favorita por un
dios. Pero Aristóteles nunca llama la atención sobre esta etimología en sus
escritos éticos, y parece tener poca influencia en su pensamiento. Considera que
"eudaimon" es un mero sustituto de eu zên ("vivir bien").

(plato.stanford)

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6. El ciudadano virtuoso y sus aporías:

Una de las tareas que Aristóteles se asigna es conciliar la figura paradigmática del
hombre moralmente cabal que realiza en si la esencia racional del anthropos (ser
humano, persona y hombre), con la figura concreta del ciudadano virtuoso de la
polis.

La dificultad teórica con la que el Estagirita se mide consiste en que, si el primero


se caracterizaría por ejercer un poder absoluto en el Oikos (casa), es decir un
poder que es tal, porque se ejerce sobre seres antropológicamente inferiores que
participan de la razón solo en la medida en que pueden y deben obedecer
(esclavos, mujer, niños), el segundo se enfrentaría a un tipo de poder “político”
que se ejerce entre individuos iguales y libres. Así lo defiende el propio Aristóteles.

Se trata de como Aristóteles trata de conducir esta aporía a un poder que sería el
mismo porque ejercido por el mismo tipo de sujeto, pero que a la vez sería distinto
porque en un caso, el doméstico, éste lo ejerce sobre seres antropológicamente
inferiores y en el otro, el político, sobre seres iguales en tanto que dotados de las
mismas cualidades antropológicas superiores. Es saber cómo puede un individuo
legitimado por naturaleza a mandar sobre otros, y que es moralmente virtuoso en
la medida en que en el oikos solo manda y nunca obedece, acabar siendo
mandado y, por consiguiente, viéndose obligado a obedecer en tanto que
ciudadano de la polis.

El buen ciudadano tiene que saber y poder tanto obedecer como mandar, y la
virtud del ciudadano consiste precisamente en conocer el gobierno de los libres
desde ambos puntos de vista». El propio Aristóteles «se elogia el ser capaz de
mandar y de obedecer, y la virtud de un ciudadano digno parece consistir en ser
capaz tanto de mandar como de obedecer bien».

“Un ciudadano que sea bueno no puede no poseer la virtud por la cual es bueno el
hombre”. “Es imposible que la ciudad se componga exclusivamente de hombres
buenos”

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Es imposible que todos los ciudadanos sean iguales y no será la misma la virtud
del ciudadano y la del hombre bueno.

Gracias a todo esto Aristóteles logró suprimir toda la posibilidad de que exista una
polis en la que el hombre moralmente bueno y el buen ciudadano puedan
coincidir, entonces asistiríamos a un distanciamiento exponencial e irreversible de
virtud ética y virtud política.

(Antonio Firenze , 2020)

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7. La beltiste polis (la ciudad más perfecta) como horizonte de
resolución de la aporía ético-política :

La verdad es que no debemos considerar ciudadanos a todos aquellos sin los


cuales no podría existir la ciudad y esto porque no es posible, en efecto, que se
ocupe de las cosas de la virtud. El que lleva una vida de obrero (banauson) o
campesino (thetikon).

En este caso, para llegar al origen de la beltiste polis, tenemos que dar un origen
del concepto de Aristoteles, en por qué habla de la virtud ciudadana y como los
dividida en dos términos como el banauson y el thetikon.

El significado de “beltiste polis” tiene su origen en griego y significa “la ciudad más
perfecta “. Pero como es la ciudad perfecta? Bueno, a lo que describe aristoteles:

“La ciudad más perfecta (beltiste polis) no hará ciudadano al obrero (banauson); y
en el caso de que lo considere ciudadano, la virtud del ciudadano que antes se
explicó no habrá de decirse de todos, ni siquiera de los libres solamente, sino de
los que están exentos de los trabajos necesarios. De los que realizan los trabajos
necesarios, los que los hacen para servicio de uno sólo son esclavos, y los que
sirven a la comunidad, obreros y labradores”.

Entonces, ¿por qué se divide en dos? Pues bien, de la ciudad más perfecta, los
trabajadores manuales, sean estos obreros o campesinos, deberían ser excluidos
del derecho político a la ciudadanía. Estos, en efecto, no pueden aspirar a realizar
ninguna virtud política porque de entrada su propia constitución psíquica está
incapacitada para la excelencia moral del alma.

Debido al tipo de actividad material que llevan a cabo en sus vidas, por
antropológicamente inferior respecto a la praxis política (del griego antiguo πρᾱξις
(práctica) propiamente dicha, están demasiado ligados a los trabajos necesarios.
Son justamente tales funciones serviciales las que los alejan irremediablemente de
la libertad indispensable para la realización de la virtud ética incluso antes de que
se pueda mostrar su posible disposición a la virtud política.

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Los banausoi, de hecho, son literalmente comparables a los esclavos en tanto que
sus vidas se orientan hacia los trabajos necesarios para la conservación biológico-
vital y la autosuficiencia material-productiva, en un caso a favor del oikos y en el
otro de la polis. Dicho de otro modo, el hecho de que el banausos viva en la polis,
tal y como hacen los esclavos pero también las mujeres y los niños, no hace de
éste, como de aquellos, “partes” de la ciudad. Todos ellos cumplen con funciones
necesarias a la conservación vital y material de la polis, pero no por eso se les
puede considerar propiamente ciudadanos.

Los únicos que, con toda razón, pueden considerarse ciudadanos plenamente y
no de modo imperfecto serán, por lo tanto, como hemos visto, aquellos individuos
que, además de tener una naturaleza anímica eminentemente racional que los
hace aptos a mandar sobre los demás seres inferiores, gocen también de una
libertad entendida como libertad con respecto al trabajo necesario, y no tanto
como libertad jurídica contrapuesta a la ausencia de libertad del esclavo.

Aristóteles se preocupaba por aclarar el concepto de ciudadano a secas afirmando


que se debía circunscribir a aquel que ejerce las funciones deliberativas y
judiciales, ahora vemos como en este contexto, relativo a un esbozo sumario de la
polis óptima, esta definición de ciudadano necesite de una ulterior depuración de
significado.

Es este ciudadano libre, que es tal porque no ve mermada su capacidad


intelectual y moral por las fatigas del trabajo productivo quien, en el contexto de la
polis óptima, para Aristóteles sería el único legitimado a juntar en sí tanto la virtud
ética del hombre bueno como la virtud política del buen ciudadano:

«Indudablemente, el hombre bueno, el político y el buen ciudadano no deben


aprender los trabajos de esta clase de subordinados, a no ser para utilizarlos de
un modo completamente personal; de no ser así, dejarían de ser el uno amo y el
otro esclavo».

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el término de esclavo aquí viene a suplantar y absorber el de trabajador manual.
Esta polis óptima, en suma, se deberá caracterizar por la inclusión como partes de
la ciudad de todos aquellos hombres que podrán hacer muestra de merecerlo
gracias exclusivamente a su excelencia moral y a la correspondiente libertad
entendida precisamente como schole, es decir como libertad con respecto al
trabajo material.

Y, a la vez, se deberá fundamentar en la exclusión del conjunto de figuras sociales


que como hemos visto no encajan con este perfil de excelencia tanto moral como
política. Solo bajo esta premisa será posible identificar sin fisuras en la misma
persona tanto la virtud moral absoluta como la virtud política absoluta ligada al
régimen político de la beltiste polis.

“Lo dicho pone en claro si se deben considerar la misma o distintas virtudes del
hombre bueno (aner agathos) y la del ciudadano cabal (polites spoudaios), que en
algunas ciudades el hombre bueno y el buen ciudadano coinciden y en otras no, y
que este último no es cual-quiera, sino el político (politikos) y que tiene autoridad
(kyrios) o puede tenerla (dynamenos einai kyrios), por sí mismo o con otros, en
dirección de los asunto de la comunidad”.

No sólo porque muestra sin ambages que es posible hallar un régimen político en
el que las dos figuras del hombre bueno y del buen ciudadano acaben
coincidiendo (y este régimen es claramente el de la beltiste polis). Sino porque,
además, señala la persona concreta en la que estas dos figuras deberían acabar
coincidiendo: a saber, el político (politikos) y, en general, quien tiene la autoridad-
poder de gobierno (kyrios) o, y este es un detalle de enorme relevancia, quien
tiene la posibilidad de llegar a tener tal autoridad o poder (dynamenos einai
kyrios).

En el sentido de potencialidad-dynamis que se daría eminentemente en el marco


de la beltiste polis, de llegar a ocupar cargos de poder representa un momento

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esencial del argumento aristotélico a favor de la coincidencia del hombre bueno y
del buen ciudadano. Sobre todo, porque parece referirse especialmente al relevo
intergeneracional en los puestos de mando de la polis como vía para solventar la
aporía subyacente a toda su argumentación relativa a la figura del ciudadano y a
su virtud.

“Pero hay cierto mando en virtud del cual se manda a los de la misma clase y a los
libres, y ése decimos que es el imperio político (politiken archen), que el
gobernante debe aprender siendo gobernado, como se aprende a ser general de
caballería sirviendo a las órdenes de otro, y general de infantería sirviendo bajo el
mando de otro y siendo jefe de regimiento y compañía”.

Por eso se dice con razón que no puede mandar bien quien no ha obedecido. La
virtud de estos es distinta, pero el buen ciudadano tiene que saber y poder tanto
obedecer (arquestai) como mandar (arquein), y la virtud del ciudadano consiste
precisamente en conocer el gobierno de los libres desde ambos puntos de vista.
Las dos cosas son propias del hombre bueno.

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Conclusión:

Recapitulando lo antes analizado podemos concluir que Aristóteles fue un gran


pensador y gran aportador a la teoría política. Dentro de sus grandes
aportaciones, está la influencia de la ética como parte fundamental de una
sociedad, por un lado Aristóteles hace referencia a la ética como un bien individual
y a la política como un bien social, ya que la ética busca o se preocupa en
satisfacer las necesidades del individuo ,lo cual lo hace ver menos empático pero
de igual forma no es mal visto por Aristóteles, por el contrario de la política que se
preocupa por los demás y es más empático y mejor visto.

Por otro lado, Aristóteles formuló una teoría de ética, la cual fue dividida en la ética
nicomacha y la ética eudémica. Estás dos obras estaban relacionadas entre sí,
pero eran muy diferentes, la eudémica hablaba respecto a la felicidad en su
entorno social y la excelencia que necesitaba los seres humanos para vivir en
armonía.

El tema de Eû Zên está relacionado con la sociedad y la idea principal que


Aristóteles establecía era que todo comentario que todos los seres humanos
hicieran era importante para las organizaciones sociales, ya que había acuerdos y
así se tomará una Disciplina Teórica. Esto nos aporta al día de hoy para que así,
tomemos en cuenta que los seres humanos tienen diferentes puntos de vista y
deben ser tomados en cuenta y así tener un orden social con buena convivencia y
como se comentaba con una Disciplina Teórica.

Además ,nos dice que fue necesario la creación de la polis (ciudad-estado) en las
cuales ya no solo eran satisfacer las necesidades para la sobrevivencia, sino
también las necesidades sociales, cabe mencionar que la Polis ideal era usar el
Término medio, el cual consistía en que la polis no podía ser ni muy pequeña, ni
muy grande ya o tendrían problemas para autoabastecerse o problemas para el
correcto funcionamiento de las instituciones públicas, la cantidad ideal de
ciudadanos era entre 50,000 y 100,000.

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Personalmente esta idea es muy aceptable ya que al ser un mayor número de
personas, es difícil controlar y organizar de manera eficaz y eficiente a la
sociedad, lo que conllevaría a un desequilibrio.

La importancia de los regímenes políticos radica en que gracias a estos se puede


lograr una buena organización dentro de cada una de las entidades logrando así el
bien común, Aristóteles clasificaba estos regímenes políticos en 2 los regímenes
justos o correctos y los regímenes injustos o degenerados, entiendo al primer
régimen como todos aquellos que intenta lograr el bien común mientras que los
injustos son todos aquellos que se enfocan en los bienes particulares.

De igual forma se dice que los mejores Estados son todos aquellos que están
conformados por la clase media ya que estas suelen ser más numerosas y por
ende son más fuertes, siendo consideradas las mejores gobernadas.

Este tema es de gran importancia e influye mucho en mí ya que así sabemos y


logramos comprender como es que la sociedad es de gran importancia en la
política y así aprender todos los valores, derechos y respeto que debemos de
tener como seres humanos para así lograr una sociedad organizada y fuerte para
lograr vivir en armonía con el resto de personas que conforman nuestra sociedad y
claro saber decidir qué es lo mejor para cada uno de nosotros.

Por último, la beltiste polis (la ciudad más perfecta) nos aporta los pilares
fundamentales de la. Polis como lo son los esclavos, los obreros y los campesinos
en la concepción de Aristóteles. Por lo tanto, aquí podemos afirmar que, en el
caso de la ciudad más perfecta, los trabajadores manuales, sean estos obreros o
campesinos, deberían ser excluidos del derecho político a la ciudadanía. y en el
caso de que lo considere ciudadano, la virtud del ciudadano que antes se explicó
no habrá de decirse de todos, ni siquiera de los libres solamente, sino de los que
están exentos de los trabajos necesarios y los que sirven a la comunidad en
donde el papel del buen ciudadano tiene protagonismo en la beltiste polis y lo
dicho pone en claro si se deben considerar la misma o distintas virtudes del
hombre bueno y la del ciudadano cabal, y en algunas ciudades coinciden y en

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otras no, y que este último no es cualquiera, sino el político y que tiene autoridad o
puede tenerla, por sí mismo o con otros, en dirección del asunto de la comunidad.

Es decir, que necesidades ocupa la sociedad, tu ciudad y que el gobernante debe


aprender siendo gobernado. Por eso se dice con razón que no puede mandar bien
quien no ha obedecido. La virtud de estos es distinta, pero el buen ciudadano tiene
que saber y poder tanto obedecer como mandar y la virtud del ciudadano consiste
precisamente en conocer el gobierno de los libres desde ambos puntos de vista
Las dos cosas son propias del hombre Bueno Y como aporte personal, me deja la
reflexión de que para buscar una ciudad más perfecta para la época actual se
necesitan muchas cosas entre ellas, cambios qué mejoren el país y a nivel estatal,
que sea sumamente conocido, que nuestros gobernantes proyecten una polis
justa, donde el ciudadano tenga un papel fundamental en la mejora de la ciudad,
en la mejora de su comunidad, estado o de la misma ciudad, donde las leyes o las
autoridades sean respetables y sean totalmente buenos, en obedecer pero a su
vez conocedor de su gobierno.

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Bibliografía
Antonio Firenze . (2020). Obtenido de https://doi.org/10.15366/bp.2020.24.009

CUAIEED. (2020). Obtenido de UNAM:


https://arboldelademocracia.cuaieed.unam.mx/autor/Aristoteles#:~:text=Por%20una%20
parte%2C%20Arist%C3%B3teles%20es,y%20objetivos%20de%20un%20gobierno

Mheducation. (s.f.). Obtenido de file:///C:/Users/diana/Downloads/8448166981.pdf

Mheducation. (s.f.). Obtenido de


https://www.mheducation.es/bcv/guide/capitulo/8448166981.pdf

Mheducation. (s.f.). Obtenido de


https://www.mheducation.es/bcv/guide/capitulo/8448166981.pdf

plato.stanford. (s.f.). Obtenido de https://plato.stanford.edu/entries/aristotle-ethics/

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