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TÉCNICA SACROCRANEAL
CONTENIDOS
CONCEPTOS BÁSICOS 5
Contraindicaciones
Concepto de lesión
La fascia corporal
Las llamadas de atención
EL CRÁNEO 25
Neurocráneo 26
Frontal 28
Temporal 30
Parietal 32
Occipital 33
Esfenoides 33
Lesiones de la SEB 35
Etmoides 38
Viscerocráneo 41
Vómer 43
Nasal 45
Lagrimal 46
Malar 47
Maxilar 48
Palatino 50
Mandibular 51
Suturas 55
SACRO Y CÓCCIX 61
PARES CRANEALES 69
I. Olfatorio 73
II. Óptico 75
MOTORES OCULARES
III. Oculomotor 78
IV. Troclear 81
VI. Abducens 83
V. Trigémino 85
VII. Facial 90
VIII. Vestibulococlear 94
IX. Glosofaríngeo 95
X. Vago 97
XI. Espinal 99
XII. Hipogloso 101
CONTRAINDICACIONES
Fracturas craneales no consolidadas.
Riesgo de accidente cerebrovascular (menos de 18 meses)
Durante los 4 primeros meses de embarazo.
Esto incluye una tendencia a la rotación externa o interna, o una tendencia hacia la flexión o
extensión. O una preferencia del líquido cefalorraquídeo (LCR) por la inhalación o por la
exhalación.
LA FASCIA CORPORAL
La fascia corporal es una unidad de tejido conjuntivo (principalmente fibras de colágeno) que
envuelve y protege cada estructura, permitiendo su independencia y su deslizamiento, entre
otras cuestiones.
La fascia corporal está perforada por microtúbulos que transportan el LCR por todo el cuerpo. La
fascia nos transmite las llamadas de atención.
En general, estas llamadas son generadas por las tensiones de un trauma físico, emocional o
energético, que se transmiten a través de la fascia corporal.
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TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO Y
NORMALIZACIÓN
TÉCNICAS DE DIAGNÓSTICO
Escucha: Palpación realizada con las manos, cuya principal característica es la pasividad.
Requisitos:
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TÉCNICAS DE NORMALIZACIÓN
NORMALIZACIÓN DIRECTA
La menos usada: enfoque biomecánico. Consiste en obligar con la intención a la estructura a
que salga de su patrón lesional y vuelva a tener un comportamiento fisiológico.
NORMALIZACIÓN INDIRECTA
Se mantiene un diálogo con la estructura lesionada:
DESANUDAMIENTO O DESENROSCAMIENTO
El desanudamiento es una normalización indirecta adaptada a estructuras complejas o con
muchas tensiones. Se sigue el movimiento de la estructura, acompañándola en su recorrido,
físicamente si es necesario.
Cuando la estructura llegue a la máxima expresión de la lesión, se le indica que espere. Cuando
pare, esperamos a que inicie de nuevo su movimiento fisiológico.
IMPULSO FASCIAL
Indicado especialmente al inicio del tratamiento sobre los diafragmas. Se ejecuta un empujón
o compresión intencional sobre la estructura, para estimular a la estructura a expresar su patrón
lesional.
LIFT (LEVANTAMIENTO)
En el lift, se sugiere a la estructura (sobre todo en los huesos del cráneo) que se separe de sus
huesos vecinos, moviéndose hacia el exterior del cuerpo, siguiendo un movimiento determinado
que dependerá de las suturas craneales. Una vez que llegue al final, se espera a que exprese el
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movimiento que necesite, y una vez que terminemos la maniobra, SIEMPRE hay que devolver
la estructura a su posición original.
Con el lift generamos espacio en las articulaciones del hueso a tratar, y en el caso del
neurocráneo, además, liberamos las tensiones provocadas por las membranas intracraneales
que hay debajo del hueso tratado.
SEPARACIÓN
La separación es la maniobra de normalización típica de las suturas, pero puede usarse con
cualquier estructura. Pretende aumentar el espacio en una articulación, por ejemplo. Se ejerce
una tracción ÚNICAMENTE en el sentido contrario a la de la tensión.
Puede realizar con contracturas musculares, colocando una mano en el origen y otra en la
inserción muscular. Se realiza una escucha de la estructura con carácter previo a la maniobra, y
después se tracciona con la intención hasta el límite elástico del músculo.
DISPERSIÓN EN V (V SPREAD)
La dispersión en V pretende disolver puntos de tensión que otras maniobras no pueden disolver,
por la situación de la tensión o por ineficacia de otras maniobras:
Se coloca una mano sobre la tensión, dejándola en el vértice de una “V” que se hace
con la forma de los dedos.
Con la otra mano, se apunta con el dedo índice sobre el punto diametralmente opuesto
al punto de tensión.
Se dirige un rayo de energía desde el dedo índice hacia el punto centrado en la “V”,
notando en la mano receptora el comportamiento de la tensión.
Se puede cambiar el enfoque de la técnica, sustituyendo la dirección de energía por un
impulso en el líquido que hay entre las dos manos. La mano emisora, por medio del
índice, hace la intención de iniciar un impulso sobre el líquido contenido en la estructura
que se encuentra entre las dos manos. Y la mano receptora monitoriza la llegada de las
ondas de fluido y su efecto sobre el foco de tensión.
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Maniobra diagnóstica: hace visible disfunciones escondidas, para su tratamiento
posterior.
Maniobra de fijación de correcciones: después de tratar lesiones importantes.
Último recurso: cuando la terapia ha llegado a un punto muerto, para que el cuerpo se
exprese.
Sutherland: “Maniobra del perdón”.
Se ejecuta al final de la exhalación (llenado del sacro de LCR)
PUNTO DE EQUILIBRIO
El punto de equilibrio se usa para neutralizar un foco de tensión existente entre más de una
estructura, por regla general huesos.
Maniobra
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EL MECANISMO RESPIRATORIO
PRIMARIO
INSPIRACIÓN ESPIRACIÓN
Enroscamiento hacia delante, Desenroscamiento
ENCÉFALO acortamiento antero-posterior, Alargamiento antero-posterior
ensanchamiento transversal. Estrechamiento transversal
Alargamiento Acortamiento
MÉDULA
Se estiran sus curvas Acentuación de sus curvas
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4. MOVILIDAD DE LOS HUESOS DEL CRANEO
Todos los huesos del cráneo se mueven, principalmente empujados y controlados por
las membranas intracraneales. Las suturas permiten un movimiento que oscila entre las
15 y las 30 micras.
Impulso Rítmico Craneal (IRC) Cadencia de 6 a 14 ciclos por segundo (3-7 seg cada
hemiciclo)
Marea Media. Movimiento de 2,5 ciclos por segundo (12 seg cada hemiciclo)
Marea Larga. Un ciclo cada 100 segundos (50 seg. Cada hemiciclo)
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FISIOLOGÍA DEL LÍQUIDO CEFALORRAQUIDEO (LCR)
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Fluctuación del LCR
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LAS MEMBRANAS DURALES
El SNC se encuentra protegido por un conjunto de capas de tejido conjuntivo, las meninges:
Duramadre:
• Craneal
Perióstica
Meníngea
• Espinal
Aracnoides: delgada y muy delicada, con estructura de tela de araña. Entre ella y la
piamadre encontramos el espacio subaracnoideo.
Piamadre
Capas durales
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DIVISIONES DE LA DURAMADRE
Movimiento en inhalación:
En general, desciende y se acorta su diámetro anteroposterior.
La inserción en la crista galli, se mueve hacia posterosuperior.
La sutura sagital se desplaza hacia abajo.
La inserción occipital se desplaza hacia posteroinferior.
Movimiento en inhalación:
Desciende y se mueve hacia delante y lateralmente.
En la inserción en las clinoides se mueve hacia superoanterior.
En los bordes superiores de las porciones petrosas del temporal, se mueve hacia lateral
y anterosuperior.
El diafragma de la silla:
Porción de duramadre que cubre la silla turca. A través de esta membrana pasa el infundíbulo
de la pituitaria. En inhalación, se mueve hacia arriba junto con la silla turca.
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MEMBRANAS INTRACRANEALES
CAVIDADES CEFALORRAQUIDEAS
El SNC está completamente inmerso en LCR, el cual llena las cavidades del propio SNC. Hay
cavidades internas (ventrículos) y externas (cisternas) y todas ellas se comunican entre sí a la
altura del cuarto ventrículo.
El cuarto ventrículo posee dos aperturas laterales o agujeros de Luschka; y una apertura medial
denominada agujero de Magendie. A través de estas aperturas, el LCR sale a las cistermas y al
espacio subaracnoideo, para bañar el SNC.
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Cavidades cefalorraquídeas
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Senos durales y venas del cráneo
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TRATAMIENTO DE LOS DIAFRAGMAS
Son zonas en las que existe una ordenación transversal de las estructuras, por lo cual acumulan
gran cantidad de tensiones. Sirven de contención a las presiones tanto superiores como
inferiores. Su mal funcionamiento incide de manera notable sobre la fascia corporal. Para su
tratamiento usaremos, sobre todo, el desanudamiento y el impulso fascial.
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TRATAMIENTO DE LOS DIAFRAGMAS
DIAFRAGMA ESTRUCTURAS Y PROBLEMAS RELACIONADOS
Ano, uréter, vagina, próstata, vejiga, útero, ovarios, colon ascendente,
PÉLVICO
descendente, sigmoides, y recto.
PLEXO SOLAR Pulmones, corazón, esófago, estómago, intestino delgado y grueso.
Cervicales inferiores, dorsales superiores, hioides, musculatura
infrahioidea, ECOM, escaleno, trapecio, angular, esófago, tráquea,
TORÁCICO
tiroides, corazón, pulmones, nervio frénico, nervio vago, ganglio
estrellado, vena yugular interna y arteria carótida interna.
Drenaje venoso deficiente del craneo > estenosis de la vena
yugular interna: cefaleas, pesadez en la cabeza, afectación
pares craneales.
Alteraciones de la escápula > relación omohioideo (o viceversa)
Compresión carótida > hipertonía muscular.
HIODES Afectación tienda del cerebelo > lig. y musc. estiolohioideo.
Opresión en la laringe > hipertonía muscular: hueso de cereza.
Trastornos tiroideos > hipertonía infrahioidea.
Problemas deglución y voz > hipertonía infrahioidea.
Sintomatología lengua > musc. hiogloso y condrogloso.
Desequilibrio estática de la columna.
Lesiones de la SEB: torsión, flexión, extensión y lateroflexión.
Estenosis del agujero yugular: afectación drenaje venoso del
cráneo, y pares craneales IX, X y XI.
Afectación del par craneal XII (Hipogloso)
CRANEAL Afectación movilidad primeras costillas.
Afectación columna cervical y arteria cervical.
Disfunciones de la hipófisis.
Disfunciones tiroides y paratiroides.
Problemas del hioides.
Hioides
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Músculos de la faringe
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EL CRÁNEO
Escama Occipital
reflejo nauseoso.
Porción petrosa Parietal
Par X (vago): disfagia, disnea, disfonía,
Apófisis mastoides Malar
reflejo nauseoso, arritmia, problemas
Apófisis cigomática Mandíbula
digestivos.
Fontal (o no)
Par XI (espinal) ECOM y trapecio
superior.
Insuficiencia reflujo venoso en seno
Esfenoides sigmoideo o en el seno sagital superior
PARIETAL
Escama
Parietales Afectación par XII (agujero hipogloso)
Porción basilar
Temporales Impactación sobre el atlas al nacer.
Masas laterales
Atlas Lesiones de las membranas, sacro y
pelvis.
Afectación pares I a VI : olfatorio, óptico,
Temporal
ESFENOIDES
Esfenoides cribiforme.
Perpendicular Palatinos
Frontal Drenaje de la mucosidad de los senos.
Lám. Cribiforme Lagrimales
Maxilares Movimiento correcto de esfenoides y
Masas laterales Nasales
vómer.
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Escucha general de los huesos del cráneo
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HUESO FRONTAL
28
Movimientos del frontal en inhalación
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HUESO TEMPORAL
30
Movimientos del temporal en inhalación
31
HUESO PARIETAL
32
HUESO OCCIPITAL
33
Inserciones musculares en el occipital
34
HUESO ESFENOIDES
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LESIONES DE LA SINCONDROSIS ESFENOBASILAR (SEB)
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Lesión en strain lateral Lesión en strain vertical
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HUESO ETMOIDES
38
Movimientos del etmoides en inhalación
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HUESOS DEL VISCEROCRANEO
PARTES ARTICULA CON: ALTERACIONES RELACIONADAS
Malformaciones del paladar o del tabique
Placa bilaminar Esfenoides nasal > tensiones durante el nacimiento.
VÓMER
Maxilar Frontal
Etmoides Otro nasal
Etmoides
Maxilar
Concha
Frontal
inferior
Sinusitis > hace de puente entre los senos
frontales y los maxilares.
Temporal
MALAR
Vómer
Apóf. Frontal Frontal Migrañas.
Etmoides
Apóf. Palatina Incisivo Después de ir al dentista.
Malar
Superficie orbitaria 8 dientes Malformaciones del paladar duro.
Palatino
Borde alveolar Esfenoides Problemas ganglio esfenopalatino.
Concha inf.
(o no) Problemas nerviosos que acorten los
maseteros.
Problemas relacionados con los ojos.
PALATINO
Ansiedad, estrés.
Cuerpo
Después de ir al dentista.
Ramas Temporales
Disfunciones de la ATM.
ascendentes 16 dientes
Dolores de cabeza o migrañas.
Cóndilos
Problemas cervicales (sobre todo Occ-c3)
Disfunciones de los temporales.
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Escucha general de los huesos de la cara
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HUESO VÓMER
43
Esquindilesis entre el esfenoides y el vómer
44
HUESO NASAL
45
HUESO LAGRIMAL
46
HUESO MALAR
47
HUESO MAXILAR
48
Movimientos del maxilar
49
HUESO PALATINO
50
HUESO MANDIBULAR
Vistas de la mandíbula
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LESIÓN POSTERIOR DEL MENISCO MANDIBULAR
El cóndilo mandibular está luxado por delante del menisco. El paciente puede abrir pero no
puede cerrar la boca. La posición del menisco en el fondo de la cavidad y la tensión del
ligamento anterior del menisco temporal impiden el cierre.
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LESIÓN ANTERIOR DEL MENISCO MANDIBULAR
El cóndilo mandibular está luxado por detrás del menisco. El paciente puede cerrar pero no
puede abrir la boca más allá de un ángulo de algunos grados. La apertura se ve impedida hacia
atrás por el contacto del borde posterior de la rama ascendente del temporal y, hacia delante,
por la tensión del ligamento posterior menisco-temporal.
Si el paciente presenta una lesión unilateral, la mandíbula está desviada hacia el lado de la
luxación.
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SUTURAS
Son las uniones articulares de huesos craneales, en las cuales las superficies articulares casi
contactan directamente, y el tejido conjuntivo interóseo es escaso.
Las tensiones intraóseas también se tratan de la misma forma que las suturas. Son tensiones
localizadas en zonas de hueso que no se corresponden con ninguna sutura, sino que se hallan
en el propio cuerpo del hueso.
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Separación y dispersión en V sobre sutura metópica
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Principales suturas craneales
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Base del cráneo (adulto)
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SACRO Y CÓCCIX
El sacro es un hueso impar, del tamaño de una mano, compuesto por cinco vértebras soldadas,
formado por hueso cortical y esponjoso.
El cóccix es un hueso impar, situado en el ápex del sacro, compuesto por un número variable de
vértebras soldadas, que oscila entre tres y cinco.
El sacro articula con los dos iliacos, con la quinta vértebra lumbar, y con el cóccix, quien a su
vez sólo articula con el sacro.
Las partes más destacadas del sacro son: base, porciones laterales, cresta medial, agujeros
sacros y ápex.
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El sacro se mueve de la misma manera que el occipital. Se verticaliza su base hacia posterior en
fase de inhalación, mientras que el ápex se anterioriza hacia abajo, en torno a un eje transversal
a la altura de S2.
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SENOS VENOSOS CRANEALES
La práctica totalidad de la sangre venosa de la cabeza es drenada por las venas yugulares
internas y externas.
Las venas yugulares externas drenan la mayoría de los vasos del cuero cabelludo, de la cara y de
la región superficial del cuello. Estas dos venas yugulares descienden por los laterales del cuello,
superficiales al músculo esternocleidomastoideo, por debajo del cutáneo del cuello, y
desembocan en las venas subclavias derecha e izquierda.
Las venas yugulares internas recogen la sangre del encéfalo, las meninges y las regiones
profundas de la cara y el cuello. Toda esta sangre, recogida por venas cerebrales, cerebelares,
oftálmicas y meníngeas, se vierte a los distintos senos venosos craneales, para pasar a las venas
yugulares internas, que bajan por el cuello adyacentes a la arteria carótida común y al
nervio vago, las tres estructuras en una sola vaina carotídea, que pasa por detrás del
esternocleidomastoideo.
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Vías de drenaje de la sangre de la cabeza y el cuello
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PRINCIPALES SENOS VENOSOS CRANEALES
Seno sagital superior: seno impar, situado a lo largo del borde superior de la
hoz del cerebro. Solo tiene una abertura inferior, que drena normalmente hacia el
seno transverso derecho.
Seno sagital inferior: seno impar, situado en el borde inferior de la hoz del cerebro. Tiene una
única abertura que drena en el seno recto.
Seno recto: seno impar, situado en la unión de la tienda del cerebelo con la hoz
del cerebro. Es la continuación del seno sagital inferior, y drena normalmente en el
seno transverso izquierdo. También se conoce como el “fulcro de Sutherland”, el
punto de referencia del sistema de membranas.
Confluencia de los senos: no es un seno, pero se trata como tal debido a su importancia. Es
el punto en que confluyen el seno sagital superior, el recto, los transversos y el occipital.
Seno transverso: seno par, que comienza en la protuberancia occipital interna, en la
confluencia de los senos, y avanza hacia lateral y anterior, recorriendo el margen externo de la
tienda del cerebelo. Al llegar a la porción mastoidea, se curva para formar el seno sigmoideo. El
derecho es la continuación del seno sagital superior, y el izquierdo, la continuación del seno
recto, normalmente.
Seno sigmoideo: seno par, continuación de los senos transversos, con forma de S. Drena en
las venas yugulares internas.
Seno cavernoso: seno par, situado a ambos lados del cuerpo del esfenoides, descansa sobre
las alas mayores del mismo, y se comunican entre ellos a través de los senos intercavernosos.
Seno occipital: seno impar, situado en el borde posteroinferior de la hoz del cerebelo, pegado
al interior del cráneo. Posee dos vías de salida, una superior y principal, que drena a la
confluencia de los senos, y otra secundaria, que drena en el plexo venoso vertebral interno.
Limpiar de tóxicos el riego sanguíneo del cerebro (toxicidad por fármacos, sobre todo)
Ayudar a la correcta circulación de retorno a la sangre venosa del cráneo, con lo que
pueden mejorar cuadros de cansancio o pereza.
Las contraindicaciones del drenaje de los senos durales son las mismas que las de
cualquier otro tratamiento sacrocraneal.
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Senos durales
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PROTOCOLO PARA EL DRENAJE DE LOS SENOS VENOSOS CRANEALES
1. Tratamiento del diafragma torácico.
2. Liberación de la base del cráneo.
3. Tratamiento del agujero yugular.
4. Drenaje de los senos transversos.
5. Drenaje de la confluencia de los senos.
6. Drenaje del seno occipital.
7. Drenaje del seno recto.
8. Drenaje del seno sagital superior.
9. Drenaje del seno cavernoso (descompresión de la SEB)
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Drenaje del seno recto y variante
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PARES CRANEALES
Los pares craneales son los doce pares de nervios que salen del encéfalo y atraviesan los huesos
del cráneo. Están numerados del uno al doce en función del orden en que emergen del cráneo,
desde anterosuperior hasta posteroinferior.
Los dos primeros no pueden considerarse nervios propiamente, pues son extensiones del
cerebro, y emergen de los hemisferios cerebrales. El resto, del III al XII, salen del tronco
cerebral. Además de esto, todos los pares, excepto el X (Neumogástrico o Vago), prestan servicio
a estructuras que se encuentran en la cabeza o en el cuello.
Se trata de nervios altamente especializados, cuyas fibras pueden llevar información sensitiva,
motora, o mixta.
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SALIDAS CRANEALES DE CADA PAR
PAR NERVIO SALIDA
I Olfatorio Lámina cribiforme del etmoides
II Óptico Foramen óptico del esfenoides
III Oculomotor Fisura orbitaria superior del esfenoides
IV Troclear Fisura orbitaria superior del esfenoides
Trigémino
1. R. Oftálmica Fisura orbitaria superior del esfenoides
V
2. R. Maxilar Agujero redondo mayor del esfenoides
3.R. Mandibular Agujero oval del esfenoides
VI Abducens Fisura orbitaria superior del esfenoides
Meato auditivo interno, canal facial y
VII Facial
agujero estilomastoideo
VIII Vestibulococlear Meato auditivo interno
IX Glosofaríngeo Agujero yugular (occipital y temporal)
X Vago Agujero yugular (occipital y temporal)
XI Accesorio Agujero yugular (occipital y temporal)
XII Hipogloso Canal hipogloso del occipital
Desde el punto de vista de la terapia craneal, existe una particularidad anatómica que podemos
usar en el tratamiento: la dura craneal recubre todos los nervios craneales en su salida por los
agujeros del cráneo, fundiéndose con su epineuro.
En el caso del nervio olfatorio, lo recubre por completo, y proporciona una vía de drenaje del LCR
hacia la cavidad nasal.
En el caso del nervio óptico, la dura craneal también lo recubre completamente, y se fusiona con
la esclerótica. Esta vaina dural puede usarse para tratar las tensiones de las membranas
intracraneales desde el nervio óptico (desanudamiento del ojo)
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PAR NERVIO TIPO FUNCIONES PRINCIPALES
I Olfatorio Sensitivo Sentido del olfato.
II Óptico Sensitivo Sentido de la visión.
III Oculomotor Motor Movimientos del ojo.
IV Troclear Motor Movimientos del ojo.
Trigémino Mixto
Sensaciones del ojo, cuero cabelludo y parte alta
V1. Rama oftálmica Sensitivo
de la cara.
Sensaciones de la cavidad nasal, senos, paladar,
V2. Rama maxilar Sensitivo parte media de la cara y piezas dentales
V maxilares.
Músculos de la masticación y tensor del
tímpano. Sensaciones de la barbilla, sienes,
V3. Rama mandibular Mixto cavidad oral, lengua, ATM, piezas dentales
mandibulares, oído y propiocepción de la
musculatura masticadora.
VI Abducens Motor Movimientos del ojo.
Músculos de la expresión facial,
VII Facial Mixto estapedio. Sentido del gusto en la porción
anterior de la lengua.
VIII Vestibulococlear Sensitivo Sentido de la escucha y equilibrio.
Sensaciones de la orofaringe, porción
posterior de la lengua, cuerpo y senos
carotídeos.
IX Glosofaríngeo Mixto
Sentido del gusto en la porción posterior
de la lengua.
Músculo estilofaríngeo.
Músculos de la laringe y la faringe.
Sensación de la laringe, hipolaringe,
X Vago Mixto
corazón, pulmones, vísceras
abdominales.
XI Accesorio Motor ECOM y trapecio superior.
XII Hipogloso Motor Músculos de la lengua y suprahioideos.
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CONSIDERACIONES GENERALES PARA EL TRATAMIENTO DE LOS
PARES CRANEALES
Debería incluirse siempre el tratamiento de los senos venosos craneales. Todos los
nervios, salvo el vago, tienen su recorrido principal en el interior del cráneo. Por tanto, se
ven afectados por un aumento de la presión intracraneal.
Realizar un recorrido virtual por el nervio, desde el origen hasta el final (en el
caso del nervio vago, hasta el órgano que creamos está afectado por un mal
funcionamiento neurológico) percibiendo las diferentes tensiones que se manifiesten
durante el recorrido, con el fin de tratarlas.
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I. NERVIO OLFATORIO
Las fibras nerviosas del nervio olfatorio ascienden desde el epitelio olfatorio, que tapiza el techo
de la cavidad nasal, el cornete nasal superior y el tabique nasal, y en la zona del receso
esfenoetmoidal atraviesan la lámina cribiforme del etmoides y la duramadre, y llegan a los
bulbos olfatorios, situados sobre la misma lámina cribiforme, donde se originan los tractos
olfatorios, en la superficie interior del lóbulo frontal, sobre la placa orbital del hueso frontal.
Tracto olfatorio
Las maniobras apropiadas para tratar una patología del nervio olfatorio dependerán de las
estructuras involucradas. En cualquier caso, sobre todo intentaremos generar la sensación de
espacio suficiente de todas estas estructuras, para posibilitar un funcionamiento neurológico
correcto.
73
Las maniobras más comunes en un tratamiento sintomático del nervio olfatorio serían:
74
II. NERVIO ÓPTICO
Nervio sensitivo, que transmite la información visual desde la retina, proporcionando el sentido
de la vista.
Las fibras nerviosas del nervio óptico emergen de la parte posterior del globo ocular, abandonan
la órbita por el canal óptico, situado en el ala mayor del esfenoides, y entran en el cráneo, donde
se unen al nervio opuesto en el quiasma óptico.
En el quiasma óptico, algunas fibras nerviosas de cada ojo se separan y se dirigen al hipotálamo,
donde influyen en el ritmo circadiano (reloj biológico) Del resto de las fibras nerviosas,
aproximadamente la mitad de cada uno de los ojos se separa y se cruza para unirse a la otra
mitad que no se ha cruzado del otro ojo, formando los tractos ópticos, que al final de su
recorrido, llegan a ala corteza visual primaria, la cual se encuentra alrededor de las fisuras
calcarinas, situadas cerca de los polos posteriores de los lóbulos occipitales (zona cerebral de
mayor procesamiento de la información visual)
Cualquier tipo de trastorno visual: visión en túnel, pérdida del campo de visión lateral o medial
de un ojo, visión borrosa e incluso falta de visión en uno o en los dos ojos.
El origen de estos síntomas, desde el enfoque sacrocraneal, se halla en la compresión del nervio
óptico en cualquier tramo de su recorrido, por presión de los senos esfenoidales, etmoidales
o cavernosos, por una lesión de la SEB que comprime el nervio, o por tensiones del occipital
que afectan a las áreas de visión primaria.
En el tratamiento de las patologías del nervio ocular, sobre todo buscamos sensación de
espacio, dada la gran cantidad de estructuras que se encuentran dentro de la órbita del ojo, o
formando parte de ella.
75
Maniobras para el tratamiento sintomático del nervio óptico:
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MOTORES OCULARES (PARES III, IV Y VI)
Son tres parejas de nervios que se tratan como uno solo, aunque poseen orígenes diferentes.
Los tres salen del cráneo por la fisura orbitaria superior del esfenoides. Los tres llevan señal
motora a los músculos extrínsecos de los ojos.
Esquema de las inervaciones musculares de los nervios motores oculares (III, IV y VI)
77
III. NERVIO OCULOMOTOR O MOTOR OCULAR COMÚN
Motor somático, que inerva a 4 de los 6 músculos extrínsecos del ojo: recto superior,
recto inferior, recto medial y oblicuo inferior, además del músculo elevador del párpado
superior.
Motor visceral: inerva a los músculos intrínsecos del ojo: constrictor de la pupila y
ciliar (control del cristalino)
El nervio oculomotor sale de la parte anterior del mesencéfalo, perfora la duramadre y entra en
el seno cavernoso, por el que pasa a su largo de su pared lateral, por encima del nervio troclear
(IV) y continúa hacia anterior, atravesando el cráneo por la fisura orbitaria superior del
esfenoides.
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El tratamiento será el mismo que para el nervio óptico, salvo que no se trata el occipital:
o Drenaje de los senos venosos craneales, para reducir cualquier posible aumento
de la presión intracraneal por un drenaje deficiente.
79
Acción de los músculos oculomotores
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IV. NERVIO TROCLEAR O PATETICO
Nervio motor que proporciona ínervación motora al músculo oblicuo superior. Es músculo
mueve el ojo hacia abajo, y también en intorsión y abducción.
El nervio troclear surge de la parte posteromedial del mesencéfalo (desde el lado contrario al
músculo que va a inervar) y discurre anteriormente alrededor del pedúnculo cerebral para pasar
entre la arteria cerebral posterior y la anterior cerebelosa superior, por fuera del nervio
oculomotor. Perfora la duramadre en el ángulo de los bordes libre y fijo de la tienda del cerebelo,
entra en el seno cavernoso (junto con los pares III, V1, V2 y VI, abandona el seno y entra en la
órbita a través de la fisura orbitaria superior del esfenoides.
Es el más fino de los pares craneales, y además es el de más largo recorrido dentro del cráneo.
Esto lo hace altamente susceptible a las tensiones producidas por un aumento de la presión
inatracraneal.
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Clínica del nervio troclear:
Extorsión del ojo afectado, que provoca diplopía vertical. La persona lateraliza la cabeza
hacia el lado sano para que el ojo sano adopte la misma postura (extorsión) que el
lesionado y ver bien.
Debilidad al mover el ojo hacia abajo.
El daño a nivel del núcleo troclear afectará al ojo contralateral, mientras que el daño en
el nervio afectará al ojo ipsolateral.
El tratamiento será igual que en el caso del oculomotor, haciendo especial hincapié en el
tratamiento de la tienda del cerebelo:
o Desanudamiento del ojo, por su conexión directa con la dura craneal, posible fuente
de tensiones, y para tratar directamente las tensiones que almacene el oblicuo superior.
o Comprobación de tensiones en los huesos que forman parte de la órbita del ojo:
Esfenoides (visualización del canal óptico esfenoidal, salida al exterior del nervio)
Frontal.
Etmoides.
Maxilar.
Lacrimal.
Palatino.
Malar.
o Drenaje de los senos venosos craneales, para reducir cualquier posible aumento
de la presión intracraneal por un drenaje deficiente.
o Tratamiento completo del sistema de membranas, con especial interés en la tienda
del cerebelo desde la posición de los temporales, para reducir tensiones que afecten al
paso del nervio por la tienda del cerebelo.
82
VI. NERVIO ABDUCENS
Nervio motor que proporciona inervación al músculo recto lateral, cuya acción sobre el ojo es
la abducción del globo ovular.
El nervio abducens sale de la cara anterior del tronco encefálico, avanza anteriormente y perfora
la dura en un punto por fuera del dorso de la silla turca del esfenoides, continúa entre la
duramadre y el vértice de la porción petrosa del hueso temporal, donde hace un giro brusco en
ángulo recto para entrar en el seno cavernoso, situándose lateral a la arteria carótida interna, y
medial a los pares craneales III, IV, V1 y V2, continúa hacia anterior y abandona el seno
cavernoso para atravesar el esfenoides por la fisura orbitaria superior.
Estrabismo medial convergente que produce diplopía horizontal. La persona puede mover el ojo,
lateralmente, como mucho hasta la mitad, pero no más allá. Para ver bien la imagen, la persona
gira la cabeza apuntando con el mentón hacia el lado de la lesión.
83
El tratamiento será el mismo que el del nervio troclear:
o Desanudamiento del ojo, por su conexión directa con la dura craneal, posible fuente
de tensiones, y para tratar directamente las tensiones que almacene el oblicuo superior.
o Comprobación de tensiones en los huesos que forman parte de la órbita del ojo:
Esfenoides (visualización del canal óptico esfenoidal, salida al exterior del nervio)
Frontal.
Etmoides.
Maxilar.
Lacrimal.
Palatino.
Malar.
o Drenaje de los senos venosos craneales, para reducir cualquier posible aumento
de la presión intracraneal por un drenaje deficiente.
o Tratamiento completo del sistema de membranas, con especial interés en la tienda
del cerebelo desde la posición de los temporales, para reducir tensiones que afecten al
paso del nervio por la tienda del cerebelo.
84
V. TRIGÉMINO
Nervio mixto, que proporciona inervación sensitiva a gran parte de la cara, y motora a los
músculos de la masticación.
• Rama oftálmica: puramente sensitiva, inerva la parte superior de la cara: globo ocular,
conjuntiva, glándulas lagrimales, mucosa nasal, senos paranasales, piel de la frente,
párpado superior y nariz.
• Rama maxilar: puramente sensitiva, inerva la parte media de la cara: párpado inferior,
costado de la nariz, labio superior, mucosas de la nariz y nasofaringe, senos maxilares,
amígdalas, paladar duro y blando, encías y piezas dentales superiores, y la piel de la
parte media de la cara.
La rama oftálmica sale del ganglio trigeminal hacia la porción petrosa del temporal, y avanza
por la membrana dural que recubre la pared lateral del seno cavernoso, entre los nervios III y IV,
y entra en la órbita a través de la fisura orbitaria superior del esfenoides, donde se divide en tres
ramos: lagrimal, frontal y nasociliar. Antes de entrar en la órbita, del nervio oftálmico salen unas
fibras que forman la rama tentorial (inerva la duramadre tentorial)
La rama maxilar sale del ganglio trigeminal y avanza bordeando la porción petrosa del
temporal, pasa sobre la sutura temporesfenoidal, sigue a lo largo de la pared lateral del seno
cavernoso y sale del neurocráneo por el agujero redondo del esfenoides, hacia la fosa
pterigopalatina, donde atraviesa el ganglio esfenopalatino. Dentro de la fosa sale del nervio
maxilar una rama, la zigomática, y las dos juntas avanzan hasta pasar por la fisura orbitaria
inferior, después de la cual el nervio maxilar cambia el nombre por el de infraorbitario. Pasado
este punto el nervio infraorbitario da lugar al nervio alveolar superior, que inerva los dientes
maxilares y sigue su camino para inervar la piel de la cara.
La rama mandibular surge del ganglio trigeminal y sale a través del agujero oval del
esfenoides.
86
Recorrido del nervio trigémino
87
Clínica del nervio trigémino común a las tres ramas:
o Rama oftálmica:
Pérdida del reflejo corneal.
Dolor ocular.
La rama tentorial, división de la rama oftálmica, puede hacer que el exceso de
tensión en la tienda del cerebelo se manifieste como dolor detrás de los ojos.
o Rama Maxilar:
Dolor de las piezas dentales maxilares.
Dolor ocular.
Alergia primaveral.
o Rama mandibular:
Dolor de las piezas dentales mandibulares.
Hiperacusia y problemas de audición por afectación del músculo tensor del
tímpano.
Clínica de la flexión de la SEB, por acortamiento crónico del pterigoideo lateral.
Pérdida de la sensibilidad somática (capacidad de sentir presión, contacto) de la
porción anterior de la lengua, por afectación del nervio lingual.
Síntoma de las paperas, inflamación de la parótida que produce tensión en su
cápsula, inervada por el nervio auriculotemporal, lo que produce dolor local y
referido de oído.
Desplazamientos de la mandíbula por debilidad de los músculos de la
masticación.
Afectación del hioides por un mal funcionamiento del digástrico o del
milohioideo.
88
Debido a la gran extensión sobre la cual se distribuye el trigémino, y la cantidad de estructuras a
las que afecta, se indican a continuación las estructuras a tener en cuenta para el tratamiento
en caso de disfunción del trigémino:
o El ojo: desanudamiento del ojo si se afecta alguna de las ramas que llegan a la
órbita.
o Huesos de la órbita del ojo (esfenoides, etmoides, frontal, lacrimal, palatino, malar,
maxilar)
o La SEB: el esfenoides es la vía de salida del cráneo de las tres ramas; además, las
ramas oftálmica y maxilar pasan por el seno cavernoso.
o Los temporales: las ramas oftálmica y maxilar pasan por la porción petrosa.
o Maxilares y palatinos, en caso de afectación de los nervios que pasan por la fosa
pterigopalatina.
o ATM y mandíbula, en caso de afectación de la rama mandibular.
o Cervicales, si el problema está en relación con la ATM o la mandíbula.
o Desanudamiento de la lengua, si existe afectación de los músculos linguales
inervados por la rama mandibular.
o Hioides, si existe afectación de los músculos hioideos inervados por la rama
mandibular.
o Malar, en caso de afectación de la piel de la cara que inerva el nervio zigomático.
o Lacrimal, en caso de afectación del nervio lacrimal.
89
VII. NERVIO FACIAL
Es el nervio craneal más propenso a la parálisis. Está formado por dos partes bien diferenciadas:
El nervio facial, con sus dos raíces ya diferenciadas, sale del tronco encefálico, cruza el espacio
subaracnoideo y entra en el conducto auditivo interno, en la porción petrosa del temporal,
atraviesa el hueso y se aloja en el canal facial, en donde aparece el ganglio geniculado, al que
llegan la información del gusto de la lengua, la sensitiva del oído interno, del conducto auditivo, y
la superficie interna del tímpano.
El canal facial continúa sobre la cavidad timpánica y gira caudalmente hacia el agujero
estilomastoideo, a través del cual el nervio abandona el cráneo y se ramifica en sus ramas
terminales de la glándula parótida para inervar a los músculos de la expresión facial.
90
El nervio petroso mayor, el estapedio y el cuerda del tímpano nacen en el interior del canal
facial.
Del ganglio geniculado nace el nervio petroso mayor parasimpático, que avanza hacia
anterior atravesando el agujero rasgado del esfenoides hasta el ganglio pterigopalatino, y
lleva la información motora visceral a las glándulas lagrimales, de la mucosa nasal y de
paladar.
91
Clínica del nervio facial:
Las maniobras más adecuadas para un tratamiento del nervio facial serán:
Ganglio esfenopalatino
92
Aferencias del ganglio esfenopalatino
93
VIII. NERVIO VESTIBULOCOCLEAR O ESTATOACÚSTICO
Son dos nervios distintos, pero albergados dentro de la misma vaina de tejido conectivo. Los dos
nervios transportan señales sensitivas especiales. El nervio vestibular transporta la señal
relacionada con el sentido de la posición y el equilibrio, y el nervio coclear transporta la señal
del sentido de la audición.
Ambos nervios tienen sus terminaciones nerviosas en unas estructuras que se encuentran
dentro de la porción petrosa del temporal, en el oído interno. Desde ahí, ambos nervios discurren
juntos por el conducto auditivo interno hasta el bulbo raquídeo, aunque el nervio vestibular envía
algunas fibras al cerebelo.
Dado que ambos sistemas se encuentran contiguos, alojados en el mismo espacio, los
desórdenes cocleares pueden afectar al sistema vestibular, y viceversa.
94
IX. NERVIO GLOSOFARÍNGEO
Los quimiorreceptores del cuerpo carotídeo controlan las cantidades en sangre de oxígeno,
dióxido de carbono y PH de la sangre circulante. Los barorreceptores del seno carotídeo
controlan la presión arterial. Y ambas señales las envía el nervio glosofaríngeo al hipotálamo
para dar las respuestas reflejas adecuadas para la respiración, la presión arterial y el volumen de
sangre.
El nervio glosofaríngeo es el más pequeño de los nervios craneales. Emerge del bulbo raquídeo y
abandona el cráneo a través del agujero yugular, junto con los pares craneales X y XI (vago y
espinal), momento en el que aparecen los ganglios glosofaríngeos superior e inferior. A medida
que atraviesa el agujero yugular da lugar a seis ramas terminales: timpánica, carotídea, faríngea,
tonsilar, lingual y muscular.
95
Recorrido del nervio Glosofaríngeo
o Tratamiento de la SEB.
o Trabajo completo de los temporales y el occipital (SEB), por conformar entre los dos
el agujero yugular, tratando evidentemente el agujero yugular.
o Tratamiento completo del hioides, por la relación que posee el nervio glosofaríngeo con
toda la zona anterior del cuello.
96
X. NERVIO VAGO O NEUMOGÁSTRICO
Es el nervio craneal con una distribución más amplia por el cuerpo, ya que no se limita a las
estructuras de la cabeza, sino que se extiende por el cuello, el tórax y el abdomen, desde el
tronco encefálico hasta el ángulo esplénico del colon.
El nervio vago sale del bulbo raquídeo y abandona el cráneo a través del agujero yugular (junto
con los pares IX y XI) Antes de salir al exterior aparece el ganglio sensitivo superior (yugular),
situado en la porción petrosa del temporal, en la fosa yugular, que contiene el glomus de la
yugular, una estructura similar al cuerpo carotídeo que controla las concentraciones de oxígeno,
dióxido de carbono y el PH de la sangre circulante. Después de salir del cráneo, aparece el
segundo ganglio sensitivo, el inferior (nodoso), y sigue su recorrido hacia la parte inferior del
cuerpo.
97
Las maniobras más adecuadas para un tratamiento de cualquier patología del nervio vago
serán:
Nervio Vago
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XI. NERVIO ACCESORIO O ESPINAL
El nervio accesorio emerge de la sustancia blanca lateral de la médula espinal, para ascender
por el espacio subaracnoideo y paralelo a la médula espinal hasta el agujero magno, por donde
pasa por detrás de la arteria vertebral y entra en la fosa craneal posterior, donde se une al nervio
vago y sale por el agujero yugular, junto con los pares craneales IX y X y la vena yugular. Al salir
pasa por la parte interna de la apófisis estiloides, desciende de manera oblicua y entra en la
porción superior del esternocleidomastoideo. Parte de las fibras terminan aquí, y el resto lo
atraviesan para cruzar el triángulo posterior del cuello por encima del angular de la escápula y
llega al borde anterior de la porción superior del trapecio.
Las maniobras más apropiadas para un tratamiento del nervio accesorio son:
99
Nervio accesorio o espinal
100
XII. NERVIO HIPOGLOSO
Nervio motor que proporciona inervación motora a tres de los cuatro músculos extrínsecos de la
lengua: geniogloso, estilogloso e hiogloso, y a todos los músculos intrínsecos de la lengua.
Los músculos extrínsecos de la lengua son aquellos que tienen uno de sus extremos inserto en
la lengua, y el otro no. Su función principal es mover la lengua dentro de la boca y sacarla fuera.
El nervio hipogloso emerge de la superficie anterior del bulbo raquídeo, y abandona el cráneo
a través del agujero hipogloso, en las proximidades del agujero magno, en el hueso
occipital, para pasar medial a los nervios IX, X y XI (glosofaríngeo, vago y espinal) y bajar hasta
hacer un asa hacia delante por encima del asta mayor del hioides, dirigiéndose hacia la zona
submandibular, donde inerva los músculos de la lengua.
Las maniobras más apropiadas para el tratamiento de una patología del nervio hipogloso
serán:
101
Nervio hipogloso
102
ÍNDICE DE MANIOBRAS
AGUJERO YUGULAR
Posición:
El primer dedo de cada mano se apoya sobre el borde interno de cada oreja.
Los dedos restantes toman contacto con la espina occipital (sin elevar la cabeza del
paciente)
Se realiza una escucha del agujero yugular desde esta posición.
La lesión se escucha como un acercamiento del temporal y el esfenoides,
estenosando el agujero yugular.
Normalización directa:
El primer dedo sobre la oreja inicia un movimiento hacia nuestro codo y hacia abajo
(como en el caso del lift del temporal)
El resto de los dedos se llevan el occipital hacia caudal y anterior.
Al terminar, NO se devuelven las estructuras a su posición original.
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CARA
Escucha General de los huesos de la Cara.
CRÁNEO
Escucha General de los huesos del Cráneo.
CÓCCIX
1. Igual que en la posición del sacro, pero prestando atención al cóccix.
2. En prono, se toma contacto mediante el tercer dedo con el cóccix, para realizar la
escucha.
106
DESANUDAMIENTO O DESENROSCAMIENTO
Normalización indirecta adaptada a estructuras complejas o con muchas tensiones
(diafragmas, por ejemplo) se trata de dejar que la estructura exprese sus tensiones y las
vaya soltando conforme lo necesite.
Si la estructura en cuestión no inicia un movimiento, o éste es muy lento, se puede
hacer una intención de tracción sobre la misma, o se genera sensación de espacio a su
alrededor, o bien se ejecuta un impulso fascial para posibilitar la expresión de su
movimiento.
Una vez iniciado el movimiento, se acompaña el mismo hasta donde la estructura lo
necesite, donde llegue a su mayor expresión de la lesión.
En este punto le pedimos que se pare, y esperaremos a que reinicie el movimiento.
La maniobra termina cuando notamos que la barrera de restricción ha cedido y la
estructura inicia un movimiento más cercano a su normalidad.
DESANUDAMIENTO DE LA LENGUA
Posición y Maniobra:
Se toma la lengua con la pinza con una gasa con la mano en forma de pinza.
Se solicita al paciente que relaje la lengua y el resto de la boca.
Desde esta posición se siguen los movimientos de la lengua, tanto con la intención como
físicamente, si es necesario.
DESCOMPRESIÓN DE LA SEB
SEB.
DIAFRAGMA CRANEAL
Liberación de la base del cráneo.
107
DIAFRAGMA PÉLVICO
Posición:
La mano caudal se coloca en el sacro, y la mano craneal se coloca sobre el abdomen,
con el primer dedo haciendo contacto con el pubis.
Escucha y Normalización:
Desde esta posición, se realiza una escucha de lo que nos queda entre las manos, es
decir, de la pelvis.
Una vez esto, ampliamos nuestro campo perceptivo para escuchar todas las estructuras
que forman parte del diafragma o se ven afectadas por éste.
Lo más adecuado es realizar desanudamientos para tratar las tensiones que
encontremos.
108
DIAFRAGMA TORÁCICO
Posición:
La mano craneal se sitúa debajo del cambio cervicodorsal, con las últimas cervicales
entre las eminencia tenar e hipotenar, y las primeras dorsales sobre los dedos, los
cuales apuntarán a los pies.
La mano caudal se sitúa sobre la caja torácica, con el primer y el segundo dedo sobre
las clavículas.
Escucha y Normalización:
Se realiza una escucha de las estructuras que tenemos entre las manos, y vamos
progresivamente ampliando el campo perceptivo para abarcar otras estructuras
adyacentes.
Lo más adecuado es realizar desanudamientos para tratar las tensiones que
encontremos.
DISPERSIÓN EN V
Maniobra usada para disolver puntos de tensión que o bien no son tratables con otras
maniobras por su situación, o bien no son resueltas con otras maniobras.
Se coloca una de las manos sobre la zona de tensión, dejando el foco propiamente
dicho entre los dedos formando una “v”.
Con la otra mano, emisora, se apunta con el dedo o con la palma sobre el punto
diametralmente opuesto al foco de tensión.
Se dirige un rayo de energía desde la mano emisora a la mano receptora, en la “v”
donde se halla el foco de tensión.
Se escucha el comportamiento de la zona tensional, hasta que cambie el
comportamiento de dicha zona.
La emisión del rayo puede sustituirse por la intención de ejecutar un impulso fluctuante
entre la mano emisora y la receptora, como un líquido que discurriese entre ambas
manos, desde la mano emisora hasta la receptora, para disolver el foco de tensión
109
DRENAJE DE LOS SENOS VENOSOS
Se realizan las siguientes maniobras, siempre siguiendo el orden que se expone a continuación:
1. Tratamiento del Diafragma torácico.
110
6. Drenaje del Seno Occipital.
Con las manos entrelazadas como en el drenaje de la confluencia de los senos, y desde
la posición del drenaje anterior, las deslizaremos un poco hacia caudal, ejerciendo los
índice la presión sobre el seno. Esta posición dura unos 30 segundos, o hasta que se
note un reblandecimiento de los tejidos.
Volvemos a deslizar las manos hacia caudal y volvemos a esperar un cambio en el
tejido.
Cuando lleguemos a las cervicales, colocamos las manos en el occipital, con los dedos
apuntando al agujero magno, haremos la intención de unir los codos, para liberar
tensión en el seno occipital.
111
Drenaje del seno sagital superior
EQUILIBRADO PÉLVICO-MENTONIANO
Posición:
A un lado de la camilla, se toma contacto con los dedos meñiques de cada mano. La
mano craneal con el mentón, y la mano caudal con la sínfisis púbica.
Escucha y Equilibrado:
Hay que escuchar y seguir los movimientos de ambas estructuras, hasta que alcancen
un ritmo equilibrado una con respecto a la otra.
112
ESCUCHA GENERAL DE LOS HUESOS DE LA CARA
Posición:
Se coloca el primer dedo de cada mano sobre el nasión, el segundo dedo sobre el
maxilar, el tercer dedo sobre el malar y el maxilar, y el cuarto y quinto dedos sobre la
mandíbula.
Escucha:
Prestar atención a los movimientos de cada uno de los huesos palpados directamente,
para posteriormente fijarnos en la relación de éstos con los huesos que no palpamos
directamente.
113
ESFENOIDES
SEB.
ETMOIDES
Posición:
Con el primer y el tercer dedo en forma de pinza cerrada, se colocan sobre el
nacimiento de la nariz, un poco más abajo que el nasión, sobre los nasales. El 2º dedo
se coloca sobre el nasión.
La otra mano puede colocarse sobre el frontal o el esfenoides, a modo de referencia.
Escucha y normalización:
Se trata de una escucha especial, al no estar en contacto directo con la estructura a
escuchar. Hay que obviar el movimiento de las estructuras sobre las que nos
encontramos (nasales y maxilares) y poner nuestra atención en los movimientos que hay
por debajo, donde se sitúa el etmoides.
FRONTAL
Posición:
Posaremos suavemente las manos sobre la frente del paciente, sin intentar que toda la
palma haga contacto.
Escucha:
Prestar atención al frontal, teniendo en cuenta
que se comporta como dos huesos articulados
por la sutura metópica.
Lift:
Hacer la intención de movimiento hacia anterior,
hacia el techo.
Si aparecen tensiones una vez separado el
frontal, hay que desanudarlas.
Al final, SIEMPRE hay que devolver la estructura
a su posición original. Escucha del frontal
114
HIOIDES
Posición:
La mano craneal abraza el cuello, por debajo de las cervicales medias.
La mano caudal, con el codo apoyado, hace contacto en forma de pinza con el primer y
el tercer dedo en los laterales del hiodes, por debao del ángulo de la mandíbula.
Escucha y Normalización:
Sobre todo, delicadeza: gran acumulador de tensiones emocionales (como todos los
diafragmas)
Escucharemos primero todos los movimientos del hiodes.
Luego, ampliar el campo perceptivo para prestar atención a todas las estructuras que
puedan estar afectadas por el hioides, o que puedan estar afectando a este último.
La mano craneal monitoriza las cervicales en todo momento.
IMPULSO FASCIAL
Maniobra especialmente indicada al inicio del tratamiento de los diafragmas
transversales, aunque también puede usarse en otras estructuras.
Se trata de ejecutar un empujón o compresión sobre la estructura, siempre con la
intención, que hará posible que la estructura se empiece a mover, expresando sus
patrones de lesión.
LAGRIMAL
Posición:
Con el primer y el segundo dedos de una mano en forma de pinza abierta, los
colocaremos a ambos lados de la nariz, apoyados prácticamente sobre el lagrimal del
ojo.
Es importante que los dedos se queden en la parte más posterior de la nariz, para no
situarnos sobre el maxilar.
La otra mano puede colocarse en el esfenoides o en el frontal, y nos servirá como
referencia para el movimiento.
Escucha y normalización:
Se hacen ambas desde la posición descrita.
115
Escucha de los lagrimales
116
LIBERACIÓN DE LA BASE DEL CRÁNEO
Maniobra de normalización de la charnela cráneo-cervical, cuyo propósito principal es el
tratamiento de las tensiones durales que se transmiten desde el cráneo hasta el raquis,
además de la relajación de toda la musculatura suboccipital y la apertura de los espacios
articulares entre Occ – C1 – C2.
Posición y maniobra:
Sin que el paciente mueva la cabeza, la elevaremos y colocaremos las dos manos con el
dorso apoyado en la camilla y los dedos a 90º con respecto a la palma.
La punta de los dedos resbalará sobre el reborde occipital hasta llegar a contactar con
C2, que suele ser la primera vértebra cervical que se puede palpar.
A partir de aquí pediremos al paciente que relaje la cabeza, ya que de lo contrario puede
hacerse daño en el cuello.
Si el paciente consigue relajar lo suficiente la cabeza, ésta iniciará un movimiento hacia
posterior, cayendo hacia la camilla. Es importante resaltar que el movimiento que debe
realizar la cabeza es un movimiento simple de descenso hacia la camilla, sin
componente de flexión posterior, signo de que habríamos apoyado los dedos sobre unas
cervicales demasiado bajas.
En todo momento estaremos atentos a los cambios que se van produciendo en los
tejidos, así como a los posibles movimientos de otras estructuras que se vean afectadas
por esta maniobra.
Mantendremos la posición hasta que la cabeza haya llegado a su posición más
posterior, los tejidos se hayan relajado y los cambios en las estructuras hayan cesado.
Como final de la maniobra, desde la posición del occipital, se realiza una intención de
tracción sobre cráneo, tratando las tensiones que surjan.
Y al final, se puede realizar la maniobra de apertura de los cóndilos occipitales, haciendo
la intención de untar los codos desde la posición del occipital.
Variantes:
1. En el caso de niños, o de personas que no confíen lo suficiente como para dejar caer la
cabeza con soltura.
Se sitúa la mano con los cuatro últimos dedos rectos y en perpendicular a la cabecera
de la camilla.
El segundo dedo resbala sobre el reborde occipital hasta que contacte con C2.
Con la otra mano sujetamos el occipital, para regular la caída de la cabeza.
Una vez que todas las estructuras se hayan calmado, seguimos con la tracción y la
apertura de los cóndilos.
2. En el caso de bebés o personas con patologías cervicales de severa importancia.
Se sitúan las manos en forma de copa, y la cabeza descansa sobre ellas.
Las puntas de los dedos apuntan hacia la articulación occipito-atloidea, haciendo una
ligera presión que en ningún momento puede llegar a ser molesta. De hecho, ésta es la
clave de esta variante, la persona con la cabeza reposando en nuestras manos no debe
sentir dolor ni encontrarse incómoda con la posición de la cabeza.
Desde esta posición, sugeriremos una intención de movimiento con la punta de nuestros
dedos en diagonal, hacia craneal y anterior, buscando con la intención la articulación
entre el occipital y C1.
Mantendremos esta intención mientras notamos cómo los tejidos van cediendo y las
demás estructuras siguen reaccionando.
117
Una vez que todas las estructuras se hayan calmado, seguimos con la tracción y la
apertura de los cóndilos.
LIFT
Esta maniobra, que se suele usar con los huesos del cráneo, se realiza colocando
suavemente las manos sobre el hueso a tratar, y con la intención, sugerimos al hueso
que se separe de sus vecinos, moviéndose hacia el exterior del cuerpo siguiendo
nuestras manos.
El movimiento exacto dependerá de las uniones suturales que tenga con sus huesos
vecinos.
Para terminar, SIEMPRE devolveremos el hueso a su posición original.
MALAR
Escucha y Normalización Intrabucal:
Se introduce el primer dedo entre el labio y la encía, con la yema pegada al labio, y en
dirección al malar, hasta que se conecte con él.
El segundo y el tercer dedo de la misma mano se colocan sobre el malar por la parte
exterior.
La otra mano puede colocarse sobre el frontal o el temporal como referencia.
Escucha y Normalización Externa:
Si sitúan los tres primeros dedos sobre los malares, aprovechando su forma.
También puede colocarse la mano recta sobre el hueso malar, contactando con los
dedos segundo y tercero, mientras el resto de la mano toma referencia de los demás
movimientos.
118
Escucha de los malares (externa)
MANDÍBULA
Escucha y Normalización Intrabucal:
Se agarra la mandíbula con ambas manos, contactando con los pulgares dentro de la
boca, y el resto de la mano desde exterior, tomando como referencia con los segundos
dedos de cada mano el ángulo de la mandíbula.
Escucha y Normalización Externa:
Desde la cabecera de la camilla, se colocan las manos planas, contactando la
mandíbula con los dedos.
Opcionalmente, las eminencias tenares pueden tomar referencia en la ATM, y la palma
sobre el temporal.
119
MAXILAR
Escucha y Normalización Intrabucal:
Se introducen el segundo y el tercer dedo de la mano sobre los premolares superiores, e
iremos deslizándolos hasta llegar a los últimos molares.
La otra mano puede colocarse sobre el esfenoides o el frontal, y nos servirá como
referencia.
Escucha y Normalización Externa:
Has dos formas:
1. Con los dedos en forma de pinza abierta, el primer dedo hace contacto sobre un
maxilar, y el resto de los dedos sobre el otro maxilar.
2. con los cuatro últimos dedos en forma de “V”, primero y segundo escuchan un
maxlar, y tercero y cuarto escucha el otro.
La otra mano puede colocarse sobre el esfenoides o el frontal, como referencia.
NASAL
Posición:
Con el primer y el segundo dedo en forma de pinza cerrada, los colocaremos sobre el
nacimiento de la nariz, un poco más abajo que el nasión.
Es importante que los dedos se queden en la parte más anterior de la nariz, para no
situarnos sobre el maxilar.
La otra mano puede colocarse sobre el esfenoides o el frontal, como referencia
120
Escucha y Normalización:
Ambas desde la posición descrita.
NORMALIZACIÓN DIRECTA
Consiste en obligar, con la intención, que una estructura, por ejemplo un hueso en
lesión, salga de su patrón de lesión e inicie un comportamiento más cercano a su
movimiento fisiológico.
Es el tipo de normalización menos usada.
NORMALIZACIÓN INDIRECTA
Se mantiene un diálogo con la estructurada lesionada.
Se acompaña a la estructura en su movimiento de lesión.
Cuando llegue al final, le sugerimos que pare ahí, y esperaremos por si aparecen
patrones lesionales que antes no se apreciaban.
Esos patrones se trataran de la misma manera, siguiéndolos hasta el final, y sugiriendo
que se pare.
Al final, escuchamos para comprobar si existe mejoría en el movimiento de la estructura.
OCCIPITAL
Posición:
Se sujeta la cabeza del paciente (sin su ayuda) con las dos manos, y las colocamos en
forma de copa, paralelas una respecto de la otra, dejando descansar las manos sobre
ellas
Las puntas de los dedos quedan a la altura de las cervicales medias.
Escucha y Normalización:
Ambas en la posición descrita.
Aunque el occipital no se suele tratar por sí solo, sino como parte de la SEB, hay veces
que, debido sobre todo a tensiones musculares del suboccipital o por tensiones
intraóseas, conviene hacer un trabajo previo sobre el occipital para posteriormente hacer
una escucha sobre la SEB y trabajar sobre ella.
121
Escucha del occipital
PALATINO
Posición:
Se desliza el tercer dedo dentro de la boca, por el paladar duro, tomando como
referencia los molares, hasta el palatino (última parte del paladar duro)
Una vez colocado el dedo sobre el palatino a escuchar, el paciente relaja la boca y la
mandíbula.
La otra mano realiza la escucha del esfenoides, para tener una referencia del
movimiento.
Escucha y Normalización:
Ambas desde la posición descrita.
PARES CRANEALES
Hay que tener en cuenta algunas maniobras que deber realizarse en el tratamiento de
cualquiera de los pares craneales:
El Drenaje de los Senos Venosos.
Incentivar la sensación de espacio en todas las estructuras involucradas.
El tratamiento exhaustivo de la SEB, ya que está presente en el recorrido de un buen
número de pares craneales, y además, de su buen funcionamiento depende el buen
movimiento de todos los huesos del cráneo.
Es interesante realizar un recorrido virtual por el nervio, tal y como se describe en el
Tour de Minnow.
Aumentar la sensación de espacio.
122
PARIETAL
Posición y Escucha:
Las puntas de los últimos cuatro dedos de cada mano entran en contacto con el lateral
del parietal de su lado.
El primer dedo de cada mano entra en contacto con la parte superior del parietal de lado
contrario.
Lift:
Desde la posición de escucha, se sugiere una intención de tracción sobre los apriétales
hacia nosotros, hacia craneal.
Trataremos todas las tensiones que surjan.
Al final, SIEMPRE hay que devolver la estructura a su posición original.
PUNTO DE EQUILIBRIO
Inicialmente habremos detectado un foco de tensión, por ejemplo en la rodilla.
Situaremos las manos sobre la estructura, lo suficientemente separadas como para
dejar espacio entre ambas para poder ajustar la posición de las mismas. Haremos una
escucha e iremos acotando la tensión acercando las manos, dejando siempre en medio
el foco de tensión y colocando cada una de las manos en uno de los extremos de la
tensión.
Entonces se inicia una intención de tracción enfrentada entre las dos manos, con el
propósito de ir neutralizando poco a poco la tensión hasta que desaparezca o cambie lo
suficiente como para dejarlo o tratarlo con otra maniobra.
No se trata de eliminar la tensión, como haríamos con una separación, sino encontrar el
equilibrio en el que la estructura, momentáneamente sin la tensión, puede empezar a
moverse, iniciando un proceso recuperatorio.
Es muy normal que a partir de aquí la estructura inicie un movimiento de
desanudamiento con el que podremos trabajar.
123
SACRO
Posición:
La mano se sitúa bajo el sacro, intentando que la cresta media quede encajada entre
dos dedos, y que la mano no sobrepase la base del sacro, para evitar confusiones con
los movimientos de L5.
Escucha y Normalización:
Prestaremos atención en primer lugar a los movimientos que vayan apareciendo en el
sacro.
También puede prestarse atención a la fase de exhalación, en la que la presión de la
fluctuación del LCR nos “llena” la mano.
También desde esta posición trabajaremos las tensiones que surjan.
SEB
Posición y Escucha:
Las manos se colocarán abiertas a ambos lados de la cabeza del paciente, con los
primeros dedos de cada mano en contacto con las alas mayores del esfenoides, y el
resto de los dedos abrazan la cabeza, de manera que por lo menos el quinto dedo de
cada mano haga contacto con la escama del occipital.
Normalización:
Desde la posición descrita, podemos sugerir a la articulación que haga el movimiento de
la lesión, o de las posibles lesiones que creamos que tiene la estructura. Así, el
movimiento de la lesión será más largo o más facilitado, y además encontrará mucha
oposición a la hora de realizar el movimiento opuesto.
Variante:
Una de las manos, en forma de copa, sujeta la cabeza por el occipital, y la otra, en
forma de pinza, hace contacto con los dedos primero y tercero con ambas alas mayores
del esfenoides.
Descompresión de la SEB
Desde la posición de escucha, sugeriremos un movimiento de ascenso (hacia anterior)
sobre las alas mayores del esfenoides, notando en todo momento los posibles tirones y
otras reacciones que se puedan producir en las estructuras implicadas.
Los dedos en contacto con el occipital sugieren un movimiento hacia posterior.
No hay un momento específico para ejecutar esta maniobra.
124
Conforme vayan surgiendo patrones de lesión, los iremos tratando, de manera que
hagamos un desanudamiento de la SEB.
Al final, dejaremos a los huesos en una posición confortable.
Escucha de la SEB
SENO CAVERNOSO
Drenaje de los Senos Venosos.
SENO OCCIPITAL
Drenaje de los Senos Venosos.
SENO RECTO
Drenaje de los Senos Venosos.
SENO TRANSVERSO
Drenaje de los Senos Venosos.
TEMPORAL
Posición:
Se introduce el tercer dedo de cada mano en el meato auditivo externo de cada lado,
mientras el primer y el segundo dedos sujetan a modo de pinza la apófisis zigomática
del temporal.
Escucha y Normalización:
Ambas desde la posición descrita.
Variante:
Colocar los tres primeros dedos de cada mano alrededor del meato auditivo externo.
Al estar más al borde del hueso, la sensación de movimiento es mayor.
125
Lift:
Se realiza desde la posición de escucha, o bien haciendo una suave pinza sobre las
orejas del paciente.
Se sugiere una intención de tracción sobre las orejas, dirigida en diagonal, hacia
nuestros codos y hacia el suelo.
Una vez que los temporales inicien el movimiento sugerido, comenzarán a manifestarse
movimientos reflejo de las tensiones de las membranas internas.
Seguiremos todos esos movimientos hasta que cesen.
Este movimiento de los temporales puede ir en dirección contraria al movimiento de
tracción sugerido, así que en lugar de luchar contra la estructura, seguiremos ese
movimiento de huida hasta donde la estructura lo necesite.
Al final, cuando cese el movimiento y las tensiones se relajen, SIEMPRE hay que
devolver la estructura a su posición original.
TOUR DE MINNOW
Se trata de realizar un paseo virtual por el recorrido de una estructura, con la intención
de localizar los puntos de lesión, en forma de restricción, de estrechamiento, de
“suciedad” o de cualquier elemento que esté generando una restricción en la expresión
del IRC.
Originariamente se trataba de una maniobra creada por Sutherland para recorrer el
sistema ventricular, pero es muy útil para chequear otras estructuras, como los pares
craneales.
V SPREAD
Dispersión en V.
126
Maniobra:
Se inicia una intención de tracción sobre el reborde occipital, hacia craneal.
Intentaremos averiguar si las dos manos sienten igual la reacción de la membrana a
nuestra tracción. En el caso de que no sea así, nos centraremos en el lado restringido
para afinar sobre el origen y situación de esa restricción.
Haremos una estimación de a qué altura se encuentra la restricción, teniendo en cuenta
que cuanto más tiremos, más lejos estará.
Podemos ampliar nuestro campo perceptivo sobre la zona de restricción, con lo cual nos
haremos una ideal más fiel sobre cómo esa restricción afecta a su entorno o és afectada
por éste.
Una vez localizada la restricción, se trabaja, o bien proyectando nuestra intención y
realizando un desanudamiento, o bien yendo físicamente hasta la restricción y
trabajando desde allí como creamos más conveniente.
VÓMER
Posición:
Se coloca el primer dedo sobre la espina nasal.
El tercer dedo, intrabucal, se coloca en contacto con el paladar, sobre la mitad del
paladar duro.
La otra mano se coloca realizando una escucha de los maxilares, o el esfenoides, o el
frontal, como referencia.
Escucha y Normalización:
Ambas en la posición descrita.
Prestaremos especial atención a cómo el vómer se desliza entre los maxilares y a cómo
articular con el esfenoides y con el etmoides.
127
ZIGOMÁTICO
Malar.
128
ÍNDICE DE TRATAMIENTOS
SINTOMÁTICOS
A
Acúfenos Temporal, par VIII.
130
Atlas, Occipital, liberación base cráneo.
Impactación
B
Boca Par VII: disfunciones de las secreciones salivares.
Brazo Par XI: imposibilidad de elevar el brazo por encima de los 90º
Bruxismo Maxilar (por impactación sobre el maxilar por hipertonicidad del masetero),
mandíbula.
C
Cabeza, SEB, lesión en flexión: dolor frontal, dolor sordo.
Dolor de SEB, lesión en extensión: dolor intenso.
SEB, lesión en compresión: dolor irreductible.
Maxilar y palatino: dolor centrado en los ojos), mandíbula, senos venosos.
Par V, acortamiento pterigoideo lateral > flexión SEB: dolor frontal, dolor sordo.
131
Par VII: asimetrías en la expresión facial por parálisis musculares totales o parciales.
Columna, Hioides.
estática
132
D
Deglución, Hiodes (hipertonía infrahioidea)
problemas
E
Endocrinos, > Hipófisis
Problemas
Equilibrio, Temporal.
Problemas de Par VIII: vértigos, desorientación.
Escápula Hiodes.
Par XI: campaneo interno.
133
Escoliosis SEB, lesión en torsión: con dolor de espalda y cuello asociados.
F
Fármacos, Drenaje de senos venosos (limpiar de tóxicos el riego sanguíneo del cerebro)
Exceso de
G
Ganglio Maxilar, palatino.
esfeno
palatino
134
H
Hidrocefalia Drenaje de senos venosos
Hombro Par XI: falta de fuerza en la elevación del hombro contra-resistencia, hombro caído
I
Intestinales, Par X.
Probemas
135
L
Lagrimal Lagrimal.
Maniobra del conducto lagrimal.
Par V: afectación del nervio lagrimal.
Par VII: disfunciones en las secreciones lagrimales.
Laringe Hioides (hipertonía suprahioidea)
Lengua Hioides.
Par V: pérdida sensibilidad somática de la porción anterior de la lengua.
Par XII: dificultades al mover la lengua, hablar comer.
Par XII: al sacar la lengua, se desvía hacia el lado de la lesión.
Par XII: pérdida de tono en la musculatura lingual al apretar la lengua contra el
paladar.
M
Mandíbula > ATM
Mareos Temporal.
136
N
Nariz Par VII: disfunciones de la mucosa nasal, rinitis alérgica.
O
Oído Par V: dolor referido de oído: síntoma de las paperas por inflamación de la parótida.
Par VII: dolor de oído, disfunciones en la escucha, hiperacusia, dolor en el conducto
auditivo.
Par VIII: alteraciones en la escucha: sordera, hiperacusia, acúfenos, tinitus, etc.
Ojo, SEB, lesión en torsión: fallo en abducción, dificultad en seguir objetos, dificultad en
Problemas percibir la profundidad de campo.
motores SEB, lesión en strain lateral: déficit visual y problemas motores oculares.
Par III: imposibilidad de mover el ojo hacia arriba, hacia abajo, medialmente.
Estrabismo lateral o divergente que causa diplopía horizontal. Nistagmo. Imposibilidad
de enfocar objetos cercanos.
Par IV: extorsión del ojo afectado que provoca diplopía vertical (lateralización de la
cabeza hacia el lado sano); debilidad al mover el ojo hacia abajo.
Par VI: estrabismo medial o convergente que produce diplopía horizontal. La persona
puede mover el ojo, lateralmente, como mucho hasta la mitad. La persona gira la
cabeza apuntando con el mentón hacia el lado de la lesión.
137
Ovarios Diafragma pélvico.
P
Paladar Maxilar y palatino (malformación paladar duro), vómer (rodete palatino, paladar
duro) SEB.
Paperas, Par V: inflamación de la parótida que produce tensión en su cápsula, inervada por
Síntomas de el nervio auriculotempoal, lo que produce dolor local y referido de oído.
Par I Membranas , SEB, senos venosos, Tour de Minnow, etmoides, complejo maxilar,
frontal (tensiones hoz cerebro – crista galli)
Par II Membranas, SEB, senos venosos, Tour de Minnow, desanudamiento del ojo,
huesos orbitales, occipital – C1 – C2.
Par III Membranas, SEB, senos venosos, Tour de Minnow, desanudamiento del ojo.
Par IV Membranas, SEB, senos venosos, Tour de Minnow, desanudamiento del ojo.
Par V Membranas, SEB, senos venosos, Tour de Minnow, desanudamiento del ojo,
temporales (rama maxilar y mandibular > porción petrosa)
Maxilares y palatinos: si hay afectación de alguno de los nervios que pasan por la fosa
esfenopalatina.
ATM y mandíbula: si hay afectación de la rama mandibular.
Desanudamiento de la lengua: si hay afectación de los músculos linguales inervados
por la rama mandibular.
Cervicales: si el problema está relacionado con la ATM y la mandíbula.
Hioides: si hay afectación de los músculos hioideos que inerva la rama mandibular.
Malar: si está afectada la piel de la cara que inerva el nervio zigomático.
Lagrimal: si está afectado el nervio lagrimal.
Par VI Membranas, SEB, senos venosos, Tour de Minnow, desanudamiento del ojo.
Par VIII Membranas, SEB, senos venosos, Tour de Minnow, temporales y separación cadena de
Huesecillos (desanudamiento), tienda del cerebelo.
Par IX Membranas, SEB, agujero yugular, occipital, temporal, senos venosos, hioides,
138
Tour de Minnow
Par X Membranas, SEB, agujero yugular, occipital, temporal, senos venosos, hioides,
Tour de Minnow, diafragma torácico y plexo solar, comprobación yugular-visceral.
Par XI Membranas, SEB, Tour de Minnow, agujero yugular, occipital, liberación cráneo,
desanudamiento del cuello, temporal, senos venosos, diafragma torácico.
Par XII Membranas, Tour de Minnow, diafragma craneal, occipital (agujero hipogloso),
liberación base del cráneo, apertura de los cóndilos basilares, desanudamiento de la
lengua, SEB, senos venosos.
Parietal Parietal.
Parótida Temporal
Par V (síntoma de las paperas por inflamación de la parótida que produce tensión en
su cápsula, inervada por el nervio auriculotemporal, lo que produce dolor local y
referido de oído.
Par IX: alteración de la secreción de la glándula parótida.
139
R
Recto Diafragma pélvico.
Reflejo Temporal.
nauseoso Par IX.
Par X.
S
Sacro Occipital, diafragma pélvico.
140
T
Tabique Vómer.
nasal
U
Uréter Diafragma pélvico.
141
V
Vagina Diafragma pélvico.
Vértigos Temporal.
Par VIII.
Visuales, Par II: visión borrosa, en túnel, pérdida del campo de visión lateral o medial:
Trastornos
Y
Yugular diafragma torácico, senos venosos
142