Máster en Tecnología Educativa y

Competencia Digital Docente

Comunicación y Redes Sociales en Educación

Unidad didáctica 6. Redes sociales en la docencia. Del PLE a proyectos

educativos basados en redes
UD 6. Redes sociales en la docencia. Del PLE a proyectos educativos basados en redes ........... 3

6.1. PLE y redes sociales ............................................................................................... 4

6.1.1. ¿Qué es un personal learning environment (PLE)? ................................................. 4

Interacción y conexión en el PLE .................................................................................. 5

Rol del docente en el PLE ............................................................................................ 6

El contexto en el PLE .................................................................................................. 7

Recursos y fuentes de información ............................................................................... 7

6.1.2. PLN, PLE y redes sociales ................................................................................... 9

PLN, PLE y redes sociales (II) .................................................................................... 10

6.2. Proyectos con redes sociales .................................................................................. 11

Proyectos con redes sociales (II) .................................................................................. 12

6.2.1. Refugio para escribir creativamente y leer activamente ....................................... 13

6.2.2. La red social con más alcance ........................................................................... 15

6.2.3. La faceta visual de la educación ........................................................................ 16

6.2.4. Las grandes opciones para aprender con vídeos .................................................. 18

6.3. Redes sociales de profesores ................................................................................. 20

6.3.1. Facebook ....................................................................................................... 21

6.3.2. WhatsApp ...................................................................................................... 21

6.3.3. Telegram ....................................................................................................... 22

6.3.4. Comunicación con las familias del alumnado....................................................... 23

Resumen ...................................................................................................................... 24

Mapa de contenidos ....................................................................................................... 25

Recursos bibliográficos ................................................................................................... 26

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UD 6. Redes sociales en la docencia. Del PLE a proyectos
educativos basados en redes

En esta sexta unidad, «Redes sociales en la docencia. Del PLE a proyectos educativos basados en
redes», se van a tratar los entornos personales de aprendizaje que utilizan las redes sociales para
configurar la mayor parte de sus elementos.

De ahí se pasará a ejemplos prácticos de varios tipos de redes sociales (redes de vídeo, texto e
imagen) y sus posibles usos en los procesos de enseñanza-aprendizaje.

Además, se abordará el uso de redes sociales para la creación de redes entre profesionales y
también con las familias.

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6.1. PLE y redes sociales

Desde hace más de una década, la educación ha intentado hacer todo lo posible por reinventarse
y adaptarse a los cambios tecnológicos del ambiente en el que los jóvenes se desarrollan. Y ya
que no solo es la tecnología la que está en constante cambio, sino la perspectiva educativa de los
estudiantes, han surgido una gran variedad de nuevas estrategias que buscan incorporar todas
estas herramientas que se han convertido en indispensables para la vida juvenil, de manera que
los jóvenes vean cómo pueden usar el poder de la información para un beneficio que va más allá
del estatus social y del entretenimiento, orientado a su potencial para mejorar el alcance del
aprendizaje.

Los métodos clásicos de enseñanza tienden, en algunas ocasiones, a dejar de lado la visión de
los jóvenes sobre cómo les gustaría aprender, y esto en algunas ocasiones puede tener algunas
implicaciones no muy positivas. En este sentido, es importante mejorar los planes existentes e
incluir nuevos enfoques. Para ello, es interesante la implementación de espacios y actividades
que involucren las tecnologías más usadas por los jóvenes estudiantes. Un ejemplo claro de esto
son las redes sociales (Valenzuela-Argüelles, 2013).

6.1.1. ¿Qué es un personal learning environment (PLE)?

Las redes sociales se han incorporado a la vida cotidiana de los jóvenes actuales. Muchos de ellos
han encontrado en las redes un espacio seguro para expresarse y construir una identidad digital,
para comunicarse en tiempo real y con una libertad que, a menudo, no experimentan en el mundo
real. En muchas ocasiones, el desconocimiento hacia estas herramientas ha originado cierta visión
negativa por parte de algunos sectores educativos, interpretando solo los potenciales peligros
que traen consigo e ignorando su atractivo para mejorar el proceso de aprendizaje que se ha ido
presentando y analizando durante el transcurso de la asignatura.

Es importante comprender la realidad y considerar que los jóvenes no van a dejar de usarlas,
sino que, al contrario, serán cada vez más, y a edades cada vez más tempranas, los que las
hagan parte importante de sus vidas. Esto supone una tarea significativa para la educación, que
no solo tiene que acompañarlos para realizar un uso adecuado de estas, sino que también tiene
que incorporarlas en los planes educativos (Millán, 2020).

Es importante también que, aunque los docentes integren las tecnologías digitales en el aula, los
estudiantes sean capaces de aprovechar su potencial para actividades académicas/laborales. Los
personal learning environments (PLE) o entornos personales de aprendizaje recogen las
herramientas que utiliza un individuo en su vida cotidiana permitiéndole hacer una clasificación
de ellas y tomando consciencia de sus potenciales usos en todo tipo de entornos (de ocio, de
trabajo, de aprendizaje…).

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Así pues, se puede considerar que un PLE es un conjunto de herramientas y recursos, variados y
accesibles, que se ponen a disposición de los estudiantes para que sean ellos mismos quienes
decidan cuáles usar, evaluando las que se adaptan mejor a sus necesidades y capacidades
cognitivas. Un PLE está conformado por cualquier tipo de información, conexión, espacio, persona
y herramienta que se utilice para aprender, en interacción con la rutina, hábitos y capacidades
específicas de cada persona, de allí a la parte de personal en el nombre (Dellepiane, 2018).

Este entorno busca impulsar el aprendizaje más allá del aula de clases, fomentando las
habilidades autodidactas de los jóvenes, así como su capacidad de análisis y criterio personal,
proporcionándoles habilidades y valores que los formen como profesionales completos y
ciudadanos admirables. Les da la oportunidad de construir su propio aprendizaje e involucrarse
más en el proceso, motivándolos a convertirse en parte activa y protagonista de su propia
educación; objetivo que el sector estudiantil había estado buscando alcanzar por décadas y que,
gracias a la interconectividad de las redes sociales, finalmente puede ser posible. Estos PLE
necesitan del desarrollo de ciertas habilidades, ya que estos se fabrican desde abajo hacia arriba,
tomando en cuenta los objetivos que el alumno tenga, cómo sepa gestionar su información y
cómo tenga de desarrolladas las habilidades de construcción de su autoaprendizaje (Dabbagh y
Kitsantas, 2012).

Interacción y conexión en el PLE

Otra premisa sobre el PLE trata de la interacción y la conexión entre las partes involucradas. Para
los docentes no es un secreto la cantidad de interacción entre los estudiantes en el momento de
aprender, ya que, usualmente, muchos buscan recargarse en otros compañeros para el
cumplimiento de sus actividades académicas. Este hecho actúa como ventaja en los entornos
personales de aprendizaje, ya que esta interacción —que ha desarrollado preocupación en el
entorno docente— en realidad es un eficiente mecanismo de aprendizaje que tiene gran potencial
como herramienta para la mejora educativa. El intercambio de recursos e información entre los
jóvenes estudiantes también forma parte del PLE, que busca adaptarse a todos los
comportamientos (Llorente, 2013).

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La manera en que interactúan está ligada a su distribución dentro del ambiente educativo. Es una
característica muy común entre el alumnado y se trata de la manera en que sutilmente se dividen
frente a las actividades académicas, respondiendo a su ubicación, nivel de conocimientos previos,
acceso a las herramientas digitales, ambientes sociales y experiencia. Por ello, está más que claro
que no todos utilizan o responden a las mismas herramientas, y no todos interactúan entre ellos.

El PLE trae consigo la resolución de estos aspectos, dándoles la oportunidad de implementar los
elementos que ellos deseen y que estén a su alcance. Esto incrementa su motivación, ya que les
da una sensación de libertad y dinamismo que, hasta antes de los entornos personales de
aprendizaje, solo habían encontrado en Internet y las redes sociales (Casquero, 2013).

Rol del docente en el PLE

A menudo es el docente quien toma el rol dirigente del proceso de aprendizaje, dejando al
estudiante las tareas más básicas o de bajo nivel, haciéndole sentir que no tiene una participación
significativa dentro de su propia educación. La cualidad de autonomía que los PLE proveen permite
organizar y coordinar sus actividades académicas en su propio espacio, moldeando su
responsabilidad, ayudándolos a ser autodidactas, no solo ampliando las barreras de su educación,
sino convirtiéndose en actores igualmente importantes.

Así, se incrementan las posibilidades de conseguir un proceso de aprendizaje exitoso, ya que para
ello se considera la importancia de que todos los involucrados (profesores y estudiantes) se
mantengan enfocados en el alcance de los objetivos establecidos, siendo partícipes de todas las
etapas del proyecto e interactuando constantemente para estimularse mutuamente.

La motivación docente está basada, entre otros aspectos también importantes, en el rendimiento
académico de sus estudiantes y el nivel en que se involucran en los contenidos impartidos; la
mejor manera de dar pie a esto es desarrollar un contexto de aprendizaje que les estimule a
ampliar sus conocimientos, interactuar con sus compañeros y que pueda ser incluido en su rutina.

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El contexto en el PLE

Este contexto está formado por recursos que permiten buscar, organizar, crear y difundir
información (Barroso et al., 2012). En la siguiente figura se puede observar cómo las redes
sociales son parte fundamental de estos PLE:

Figura 1. Recursos de un PLE.

En concreto, para buscar información en un PLE se emplean las redes sociales y los buscadores.
A la hora de organizar información se recurre de nuevo a las redes sociales y a los marcadores
sociales. En la tarea de crear se puede acceder a aplicaciones de escritorio y aplicaciones 2.0.
Finalmente, para difundir información se pueden tomar como recurso las redes sociales.

Todos los entornos personales de aprendizaje son diferentes, ya que cada uno se adaptará a los
criterios del docente y a las necesidades individuales de los estudiantes. Pero sus funciones son
claras y son algo que comparten todos los PLE. Se trata, en un modo general, de la gestión de la
información, que es personalizada y eficiente con el uso de las herramientas digitales más
utilizadas por los jóvenes, así como de la creación y difusión de contenidos educativos por parte
de todos los involucrados.

Recursos y fuentes de información

A partir de lo anteriormente explicado, todos los PLE tendrán una serie de recursos o fuentes de
información que estén al alcance de los jóvenes en diversas maneras, para que cada uno de ellos
pueda acceder y hacer uso de esos recursos a través de los medios que más utilice o los que le
resulten más fáciles.

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Los recursos o fuentes de información están constituidos por toda la información que está a su
alcance en Internet y las redes sociales que resulte de interés para el tema o contenido que se
esté tratando. Pueden ser revistas científicas, blogs, publicaciones, páginas web de otras
instituciones, etc. La diversidad que proporciona la red ayuda a desarrollar una visión más
analítica para los estudiantes, quienes tendrán la potestad y la responsabilidad de decidir la
información que es útil para cada uno de ellos, apoyados en cualquier síntesis o previo análisis
que el profesor haya realizado para ayudarles a aprender consultando fuentes informativas de
calidad (Cabero, 2014).

Lograr información de calidad es de vital importancia no solo para construir en PLE, sino para
cualquier tipo de estrategia educativa. Existe una cantidad incalculable de información en la red,
y puede resultar abrumador realizar procesos como selección, edición, modificación y reducción
de esta. Para ello, el PLE también puede contener herramientas que cubren estas potenciales
necesidades. Las herramientas para implementar y realizar actividades de lectura son de las más
importantes, ya que permiten desarrollar las habilidades para un mejor análisis de la información.
Para ello existen excelentes herramientas en Internet como, por ejemplo, blogs, newsletters,
libros digitales, etc. Estos recursos también dan pie a la investigación y búsqueda de nueva
información por iniciativa de los participantes.

Una vez que se logra seleccionar y sintetizar la información del vasto universo de Internet, se
debe modificar o editar; por ejemplo, realizar un ensayo, una publicación en una red social, un
vídeo, una infografía o mapa conceptual. Estas herramientas garantizan que la persona procese
la información mientras la modifica, y así también la pone en manos de sus estudiantes o
compañeros de estudio, de una manera más didáctica y entendible. Esto conduce al uso de las
herramientas para compartir esta información con el resto de la comunidad que participa en el
mismo entorno de aprendizaje, como las redes sociales o los espacios virtuales.

Figura 2. El PLE es como una caja de herramientas digitales.

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6.1.2. PLN, PLE y redes sociales

Estos entornos irán desarrollando una llamada red personal de aprendizaje, que podría ser un
conjunto de personas interactuando o siguiendo un tema específico en una red social en particular
o consultando la misma fuente de información. Una PLN (personal learning network) también
puede ser un encuentro, digital o en la vida real. Estas redes pretenden conectar a los
participantes de un PLE con otros profesionales y estudiantes de cualquier parte del mundo, a los
que no podrían acceder dentro de un salón de clases. Es ideal para que los profesores estén
actualizados y atentos al avance de las tecnologías y puedan implementar estas herramientas en
sus proyectos de aprendizaje, así como también para los jóvenes estudiantes, que pueden realizar
el proceso de retroalimentación y reflexión de la información, apoyados en otros estudiantes que
estén desarrollando los mismos contenidos en sus respectivos entornos personales de aprendizaje
(Manzano, 2015). En la siguiente figura podemos ver la diferencia entre un PLE y un PLN y cómo
el primero se integra dentro del segundo.

Figura 3. Integración del PLE en el PLN.

Las redes personales de aprendizaje están íntimamente relacionadas con las PLE; de hecho, son
uno de sus componentes más importantes. Es ideal que contengan herramientas que
proporcionen un constante nivel de interacción, como lo son los servicios de mensajería
instantánea o las redes sociales. También, deben mantener un nivel comunicativo que sea
accesible, entendible y afable para garantizar que todos los miembros de la red puedan entender
y procesar la información compartida de manera eficiente. Todo esto puede ser consolidado por
actividades que propicien la interactividad entre los participantes.

Si no se posee una visión clara o los conocimientos necesarios, la concreción de un PLN por
primera vez puede resultar complicada. Lo principal es establecer un tema claro que sea relevante
y del cual se quiera implementar la red. Luego se trata de buscar participantes, conocidos,
compañeros, alumnos o personas que no se conozcan personalmente. Lo importante es que todos
compartan la iniciativa para aprender y compartir contenido sobre el tema (Adell y Castañeda,
2013).

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Esta red puede seguir ampliándose tanto como sus participantes lo deseen. Puede quedarse
limitada solo por participantes de una misma asignatura o institución educativa, pero también
puede extenderse alrededor del mundo, expandiendo las posibilidades de acceder a nuevos
conocimientos y mecanismos de interacción.

PLN, PLE y redes sociales (II)

Por tanto, los PLE pueden ser analizados desde diferentes perspectivas, ya que proveen diversos
beneficios tanto para los estudiantes como para los profesores. Pueden verse como espacios que
promueven la interacción social, pero también la reflexión, el trabajo en equipo, la responsabilidad
y la disciplina (Fonseca, 2013). Además de que pueden adaptarse a cualquier personalidad, que
responde a la constancia y la curiosidad. Si bien no todas las personas responden a las mismas
técnicas de aprendizaje, estas herramientas facilitan el acceso a la información y recursos
personales de otras personas, abriendo más posibilidades para que quienes aprenden con este
método encuentren los mecanismos que les funcionan mejor y les hacen ser más productivos.

Play

En este vídeo se detalla el proceso de diseño y elaboración propio de un PLE.

La facilidad para emplear los entornos personales de aprendizaje aumenta en la misma medida
que lo hace la tecnología. No hace falta promover el uso de los dispositivos móviles como tabletas
o teléfonos inteligentes. Es un hecho que son parte importante de la vida de los jóvenes
estudiantes, así que solo resta tomar su accesibilidad y usarla a favor de la educación. Estas
tecnologías convierten a los PLE en un mecanismo de aprendizaje móvil, continuo y global. Se
puede acceder a estos entornos y sus redes desde cualquier lugar, a cualquier hora, desde una
computadora o un dispositivo de bolsillo.

La conexión existente entre todas las herramientas web garantiza que toda la información pueda
ser modificada, organizada, editada, confirmada, resumida y compartida de manera rápida, eficaz
y segura. No hay pérdida de archivos, porque todo puede almacenarse en la web; las personas
llamadas a participar pueden ser seleccionadas, y se puede saber rápidamente si existen intereses
en común gracias al poder de las redes sociales, que también ayudan a que todo pueda darse en
tiempo real. Es decir, no solo se trata de información organizada y confiable, sino actualizada,
que puede difundirse en cualquier momento, aspecto crucial si se trata de una noticia o un recurso
alusivo a un periodo de tiempo específico (Pérez, 2016).

Como se puede apreciar, son muchas las posibilidades que se ponen a disponibilidad de los
profesores y estudiantes cuando forman sus propios PLE. Internet y las redes sociales han llegado
al mundo no solo para conectar personas y afinar habilidades sociales, sino para facilitar el
aprendizaje y animar a los jóvenes a profundizar sus conocimientos haciendo uso de los
mecanismos que ya emplean para otras actividades.

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De este modo se puede lograr que toda la información sea depurada y debidamente analizada
antes de ser difundida dentro de la red de aprendizaje, convirtiéndola en la versión más adecuada
para ser mejor procesada por los estudiantes, atendiendo tanto a sus necesidades como a sus
aspiraciones específicas. Esto le proporciona al estudiante un rol activo en su proceso de
aprendizaje, lo cual le hace sentir más involucrado y, en consecuencia, le motiva a invertir más
tiempo y esfuerzo en ello. El hecho de dedicar más tiempo y medios implica que se desarrollen
más habilidades que le van a ser útiles en su futuro personal y profesional.

6.2. Proyectos con redes sociales

Las redes sociales ofrecen muchas opciones para desarrollar entornos personales de aprendizaje,
así como para realizar pequeños y grandes proyectos educativos que buscan implementar estas
herramientas novedosas dentro y fuera de las aulas. En este sentido, hay redes sociales creadas
específicamente con fines sociales y/o generales, pero también hay algunas creadas con fines
educativos. Independientemente de su finalidad de origen, todas ellas se pueden aplicar en
procesos de enseñanza-aprendizaje (E-A) si se sabe cómo hacerlo.

Cuando se integran las redes sociales en los procesos de E-A hay que tener en cuenta que no
solamente se van a utilizar en contextos formales, es decir, en el aula, sino que también se
pueden aplicar en ámbitos informales, es decir, fuera de las horas de clase. Normalmente es en
estas situaciones, las informales, en las que jóvenes y profesores hacen un mayor uso de las
redes sociales.

En relación con todo lo presentado, es importante no catalogar los procesos de E-A como un
conjunto de actividades rígidas que responden a un solo propósito e incentivan el desarrollo de
una sola habilidad. El aprendizaje es un intercambio de conocimiento, es la utilización de
mecanismos didácticos que se adapten a la diversidad de los estudiantes y profesores, es un
espacio de socialización, de comunicación y crecimiento personal. Y en efecto, todas estas
cualidades son parte de las redes sociales.

Así, en cierto modo, puede parecer que las aulas presenciales no son algo tan diferente a las
redes sociales o páginas web. De hecho, la diferencia más considerable si se tiene en cuenta la
información presentada es, principalmente, la presencialidad, que a menudo es muy útil para la
aclaración de dudas y la creación de relaciones interpersonales. La virtualidad también presenta
potencialidades en otra dirección, ya que se puede considerar que hay mayor cantidad de
información disponible.

En su origen, las redes sociales fueron desarrolladas para unir y conectar personas que se
encuentran a grandes distancias, alrededor del mundo. Pero también pueden ser importantes
para acortar distancias que ya de por sí son pequeñas, como la de un profesor y su estudiante.
Pueden volverse un punto de encuentro donde una comunidad educativa (de la misma institución,
o de diferentes escuelas, ciudades, países, continentes) se comunique activamente para poder
concertar todas las actividades relacionadas con su asignatura, así que esta es una característica
de la que la educación puede valerse perfectamente (Roig-Vila, 2012).

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En general, los beneficios de las redes sociales son muy claros, pero pueden resultar no muy
atractivos para ciertos profesores e instituciones educativas. Este hecho implica, en cierto modo,
la importancia de recordar la información presentada en las unidades didácticas anteriores. Las
redes sociales permiten canalizar gran cantidad de asignaciones y actividades en un solo lugar,
donde pueden evaluar varios aspectos en una sola estrategia, ahorrando tiempo y reduciendo el
nivel de estrés para estudiantes y profesores por igual. También promueven el compañerismo y
la cercanía entre los miembros de la comunidad educativa, ya que la comunicación por medio de
ellas elimina inhibiciones y aumenta la diversificación de las interacciones.

Este aspecto optimiza el ambiente de trabajo, permitiendo que el estudiante participe activamente
y ayude a fijar los objetivos de las estrategias de aprendizaje; también amplía la visión del
profesor sobre los obstáculos y motivaciones a los que se enfrentan sus estudiantes en el proceso
de aprendizaje.

Figura 4. Para realizar proyectos con los estudiantes no es necesario disponer de un gran equipamiento.

Proyectos con redes sociales (II)

Implementar estas estrategias también aumenta el nivel de aprendizaje y efectividad con el que
los jóvenes hacen uso de las tecnologías de la información y la comunicación, tan necesarias en
el mundo actual para abrirse paso dentro del ámbito profesional; les enseña cualidades
importantes como la responsabilidad, la disciplina y la asertividad en el momento de expresarse,
ya que, al desarrollar una constante comunicación con sus profesores, se practica la costumbre
de pensar antes de comunicarse, de expresarse correctamente, manteniendo lineamientos de
respeto con estos y con sus compañeros (Greenhow y Lewin, 2016).

Esta problemática se puede dejar atrás con cierta facilidad gracias a las redes sociales. Su formato
permite la creación de perfiles, donde los usuarios pueden estructurar sus personalidades y
resumirlas en muy poca información, a través de contenido digital y de sus experiencias. Esto
permite a todos los miembros del mismo entorno educativo conocerse de una manera más
sencilla, accesible y eficiente. Permite que los profesores sepan más de las habilidades
individuales de cada uno de sus estudiantes, y sepan cuáles son las estrategias de E-A más
adecuadas para aplicar a los alumnos, garantizando así que ellos adquieran los contenidos de su
asignatura con disfrute, responsabilidad y dedicación. La educación no debe ser vista como una
obligación, sino como un deleite que puede ser optimizado gracias a los avances tecnológicos que
llenan el mundo conforme pasa el tiempo (Barrios et al., 2018).

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 Play

En este vídeo se pueden ver ideas y razones para implementar las redes sociales en un
proceso educativo.

El uso de las redes sociales dentro de los proyectos educativos puede darse de manera paulatina
para así evitar que su impacto tenga matices negativos, como adicción, uso irresponsable y
presiones innecesarias. Por eso, estas estrategias deben venir acompañadas de consejos y
sugerencias sobre cómo hacer un uso eficiente de estas herramientas, para que se pueda
encontrar el equilibrio entre sus aspectos lúdicos y educativos. Existen infinidad de posibles
proyectos para desarrollar con la implementación de las redes sociales debido a su versatilidad y
a la de los contenidos digitales a los que puede accederse en ellas.

Hay opciones para desarrollar contenidos centrados en la lectura y escritura, pero también en el
arte, el apoyo visual, el trabajo en la comunidad, la disciplina, etc. Por eso se intentará exponer
algunos proyectos que toquen en general los potenciales principales de estas redes que, a grandes
rasgos, pueden ser adaptados a diversas asignaturas.

6.2.1. Refugio para escribir creativamente y leer activamente

A continuación, se facilitan algunos ejemplos de la integración de la red social Twitter en el aula:

Twitter y lengua

Twitter es conocida por promover la lectura y la escritura, ya que su plataforma se basa en la

publicación de frases y textos no mayores de 280 caracteres. Un proyecto atrayente para
estudiantes interesados en la escritura —que puede ser utilizado en asignaturas como Literatura
y Lenguaje— consiste en utilizar la herramienta de crear hilos para contar historias
extraordinarias. Por ejemplo, se puede asignar a cada estudiante la creación de una historia,
cuento corto o fábula que deba tener una envergadura específica, haciendo el uso de un hilo
en Twitter. Los hilos son una secuencia de tuits en una misma publicación que ya es muy
utilizada para contar historias. Los hilos deben ser etiquetados con una etiqueta alusiva a la
actividad, que ayude al profesor a localizar mejor las publicaciones de los estudiantes y a poder
evaluar la respuesta e interacciones que puedan tener. Esta plataforma también ofrece la
posibilidad de que se comenten entre ellos mismos, para así reforzar el vínculo de comunidad
educativa y garantizar que todos lean las historias de los demás (Viñas, s. f.).

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 Twitter e historia

Otro proyecto que puede lograr resultados interesantes es el de crear una especie de hilo, pero
en conjunto. El profesor publica en su perfil un tweet sobre algún acontecimiento histórico
importante, dejando la premisa del evento en sus 280 caracteres. Los estudiantes deberán
comentar esa publicación con un único texto que contenga un aspecto de ese evento, una
opinión, una cita, un hecho, también reducido al límite de caracteres. La información no debe
repetirse y la interacción debe darse dentro de un periodo de tiempo establecido. La limitación
de la extensión del texto de esta red social —que a menudo es señalada como una debilidad—
puede ser usada como ventaja en este proyecto, ya que los jóvenes estudiantes deberán
sintetizar la información de manera exhaustiva, lo cual les motivará a leer y profundizar en la
información (Muñoz, 2012).

Figura 5. Twitter es una de las redes sociales más utilizadas en educación.

Twitter está orientado al uso de etiquetas; esto hace más sencillo para el profesor supervisar y
monitorear la actividad y presencia de sus estudiantes en esta clase de actividades, lo cual
también puede servir como una invitación a que otras personas fuera de la comunidad educativa
se unan y aporten sus conocimientos. Esta red social está llena de personas expresivas que tienen
mucho que decir, por eso es tan positiva para los jóvenes, porque les enseña más sobre su
libertad de expresión y los invita a desenvolverse libremente en un ambiente seguro y lleno de
creatividad. Por tanto, es importante asignar una etiqueta única a cada actividad o proyecto que
se desarrolle en Twitter, para poder hacer el reporte completo de los resultados y localizar más
rápidamente a todos los involucrados en la iniciativa.

Llega más lejos

En esta web se puede encontrar una guía completa para iniciarse en el uso educativo de
Twitter con consejos, vídeos y manuales.

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 Viaja

Hay herramientas, como Tagdef, que permiten hacer monitorización de etiquetas.

6.2.2. La red social con más alcance

A pesar de que muchos piensan que su momento ha pasado, Facebook sigue siendo la red social
favorita de muchas personas y, sin duda, es la selección ideal para alguien que se está
introduciendo en el mundo de las tecnologías de la comunicación y en Internet. Los servicios que
ofrece esta red social son gratuitos y variados, así que proporciona muy buenas posibilidades en
cuanto a estrategias educativas.

Facebook posee la opción de crear páginas sobre un tema específico. Allí se puede compartir toda
clase de contenido digital relacionado con un tema. Un proyecto muy interesante es el de asignar
la creación de una página en Facebook sobre la asignatura en cuestión, al inicio del curso. Se
realiza un itinerario para establecer un pequeño grupo de dos o tres estudiantes que se encarguen
de la página cada semana. Deben añadir contenido relacionado con los temas que se vayan viendo
en clase, complementándolo con datos o hechos nuevos cada semana.

El objetivo de la página es el de reforzar los conocimientos adquiridos, así como fortalecer el

trabajo en equipo y la responsabilidad. Se puede establecer una cantidad de «Me gusta» o
seguidores que conseguir para el final del curso, que no sea muy alto, pero que represente un
reto para los estudiantes, motivándolos a generar contenido de calidad y, así, atraer nuevas
personas a las que les guste la página. Para enriquecer la evaluación, Facebook posee la opción
de acceder a las estadísticas recolectadas de las interacciones de la página: sus comentarios,
reacciones, «Me gusta», publicaciones y flujo de nuevos seguidores (Gómez y López, 2013).

Play

En este vídeo se pueden ver testimonios de adolescentes y profesores que han utilizado
Facebook con fines educativos.

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Este proyecto es especialmente versátil, porque puede desarrollarse en otras plataformas. Se
puede efectuar en Instagram, que a pesar de ser más visual puede cumplir con la tarea, o Twitter.
Ambas son redes sociales en las que se puede medir la interacción, y existe un conteo de las
personas que se unen como seguidores a la página o perfil que los estudiantes creen, para
promover que se esfuercen en hacer lucir la página, en posicionarla, para lo que tendrán que
hacer investigaciones, lecturas y depuración de la información que encuentren. Ya que en las
redes sociales no es bien recibido el plagio, sentirán una presión extra para enfocarse en su
contenido y analizar todo lo que encuentren en Internet.

Si lo que se desea es la interacción de los estudiantes entre sí, sin personas ajenas a la comunidad
educativa, una buena alternativa son los grupos privados de Facebook. Estos grupos se crean
para que solo un grupo de personas específicas pueda unirse a ellos. El profesor crea el grupo y
solo acepta las solicitudes de sus estudiantes matriculados. Se puede desarrollar un grupo con el
objetivo de colgar una pregunta semanal sobre la asignatura; resolver una duda que varios
tengan y que el profesor pueda responder, pero que antes pone como tarea a sus alumnos en el
grupo. Así se abre un debate interno para intentar resolver la pregunta y, posteriormente, el
profesor puede dar una retroalimentación o corregir la respuesta formulada en caso de ser
incorrecta (Gómez, 2016).

Llega más lejos

Facebook tiene un programa educativo oficial en el que permite la creación de comunidades

de aprendizaje para colegios y universidades. Se puede ver en este enlace.

Este tipo de actividades, usando las herramientas de Facebook, permite que los docentes puedan
hacer un seguimiento individual y grupal del avance de sus estudiantes. Pueden realizar
correcciones de escritura, ortografía, plagio, redacción y calidad del contenido. También pueden
complementar toda la información compartida en el grupo, haciendo uso de las notificaciones,
para saber quiénes han comentado sus dudas o aportes, quiénes han visto el contenido publicado,
y quiénes han participado activamente publicando información y/o comentando en las de sus
compañeros (Olivares, 2015).

6.2.3. La faceta visual de la educación

Si hay una red social que se ha ganado su popularidad de manera veloz y escandalosa, es la red
social de fotografías llamada Instagram. Es una red social muy interesante, ya que estimula la
parte más creativa y artística de todos. A menudo es más difícil expresarse en imágenes que en
palabras, y es por ello por lo que la premisa de usar esta red social en estrategias de aprendizaje
es bastante llamativa. Sin mencionar que, Instagram, posee las herramientas de los hashtags o
etiquetas, que sirven para localizar temas y movimientos de una manera más sencilla.

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El poder de esta red social puede ser utilizado en un proyecto que busque rescatar el sentido de
pertenencia de los estudiantes y enseñarles un poco más sobre su institución educativa, ya que
a menudo los estudiantes pasan importantes años de su vida en una escuela o universidad sin
saber realmente nada sobre su origen, la historia que la construyó, las anécdotas detrás de sus
paredes y los ideales que recorrieron sus pasillos.

Para este proyecto se asigna una etiqueta específica también. Se dividen los estudiantes en
grupos y se les propone hacer un acto comunitario por su institución. Puede ser la limpieza
profunda de un aula o la organización de estantes en la biblioteca o la reparación de un escritorio,
cualquier cosa que puedan hacer para mejorar el espacio físico de su casa de estudios. Mediante
el uso de sus perfiles en Instagram, aunque también pueden crear un perfil solo para la actividad,
donde un perfil por grupo será suficiente, deben subir fotografías del antes y el después de su
bondadosa acción para con su institución educativa. En el pie de la foto pueden indicar un dato
histórico o curiosidad sobre esta. Luego de realizar su ayuda comunitaria, pueden hacerlo cuantas
veces quieran, y si no, subir fotos, collages o infografías sobre la historia de la institución. Con
esto se busca promover su sentimiento y cercanía para con su comunidad educativa, además de
que les enseña disciplina y cuidado de todos los espacios y su infraestructura (Vicent Vives, 2020).

Los atributos visuales de Instagram pueden usarse para estrategias más artísticas como, por
ejemplo, la poesía o la escritura en general. Para esto, el profesor asigna una etiqueta, una vez
más, por las razones ya mencionadas. La premisa es que los estudiantes son exhortados a
analizar un texto, ya sea el capítulo de un libro clásico o un poema, y deben plasmarlo de manera
gráfica y visual, en una publicación en Instagram, añadiendo un comentario personal a pie de la
imagen o las imágenes. Esto deja abiertas un montón de opciones, lo cual busca que los
estudiantes desarrollen sus habilidades creativas y analíticas, plasmando su visión del texto en
una forma visual, ya sea con un dibujo, una caricatura, un collage, una foto, una pose, un mapa
mental (Blanco y López, 2017).

Play

En este vídeo se pueden ver multitud de aplicaciones educativas para la red social Instagram
con fotografías.

Así, pueden llegar a entender que el arte es susceptible y depende de la percepción de cada
persona, incluyendo la literatura. Esto realza las virtudes más sensibles de los estudiantes, que a
menudo pueden verse reducidas por los métodos clásicos de enseñanza.

Un proyecto de este tipo es una oportunidad de trabajar una asignatura como Literatura o
Lenguaje desde otro punto de vista, facilitando la comunicación y dando a los jóvenes estudiantes
opciones innovadoras para encontrar los métodos que les ayuden a procesar hasta los temas más
complejos (Blanco y López, 2017). Da una oportunidad de ver y estudiar temas que en clase
parecen tan cuadrados y rígidos, desde una nueva perspectiva, descubriendo cómo muchos de
los detalles y aspectos de ellos pueden retratarse en la vida diaria, porque todo lo que se plasma
en los libros, de una forma u otra, está basado en algo real.

17
6.2.4. Las grandes opciones para aprender con vídeos

Existen muchos jóvenes que por diversas razones no pueden asistir a las clases con la regularidad
que desean, y se vuelve complicado aprender y ponerse al día mediante libros, textos o apuntes.
Para muchas personas, parte de su aprendizaje es muy visual y, por ello, puede ser de ayuda la
asistencia a una explicación en tiempo real, de la mano de un experto en el tema o un profesor.
Por ello, con el paso del tiempo se han vuelto muy famosas las plataformas de vídeos online, que
cada día proporcionan más explicaciones sobre temas académicos que pueden volverse difíciles
incluso si se asiste a todas las clases.

Los profesores tienden a tener solo una forma de explicar las cosas, pero tienen a decenas de
diferentes jóvenes con diversas formas de entender las cosas. Así, es entendible que exista la
gran problemática de los estudiantes que simplemente no comprenden ni responden a las
explicaciones de sus profesores. Es algo bastante común en las asignaturas de ciencias exactas,
como las Matemáticas o la Física. Los estudiantes tienden a acudir a las plataformas de vídeo
para encontrar personas que expliquen los contenidos que ellos no han sido capaces de
comprender por diferentes razones (Duffy, 2007).

El proceso de E-A está marcado por la interacción y el aprendizaje de ambas partes. El que
enseña, aprende. Un proyecto para involucrar la plataforma social de vídeos más conocida del
mundo, YouTube, puede consistir en asignar a los jóvenes la tarea de grabar un vídeo de ellos
mismos explicando un pequeño tema sobre la asignatura en al menos un minuto. Deben hablar
de manera informal, explicando el tema de la forma que ellos encuentren más sencilla, con sus
puntos de vista, comentarios, opiniones e incluso dudas. Los vídeos pueden relacionarse con una
etiqueta, un título específico, o ser compilados en una lista de reproducción, como propone esta
red social. Así, todos los estudiantes podrán considerar otras perspectivas de lo visto en clase y
reforzarán la información ya adquirida al ver los vídeos de sus compañeros y al grabar el suyo
(Marín, 2016).

Otra red social basada en vídeos que ha ganado gran popularidad entre los jóvenes es TikTok. Se
trata de una red social donde los usuarios suben vídeos muy cortos, con transiciones y fondos
musicales. Esta aplicación permite editar vídeos e imágenes, con filtros, stickers, efectos, con
alguna música de fondo (Gómez, 2020). En la actualidad hay tiktoks sobre cualquier tema, sobre
recetas, rutinas, historias, cuentos cortos, entre otros. Su versatilidad viene acompañada de su
atractivo creativo.

Figura 6. En muchas ocasiones es suficiente con disponer de un dispositivo móvil para poder realizar experiencias de E-
A con vídeo.

18
La música es un aspecto importante de esta red social; muchas personas tienden a subir vídeos
bailando o interpretando escenas relacionadas con una canción o tema musical. Desarrollar un
proyecto utilizando TikTok tiene un poco de dificultad al principio, ya que su uso puede resultar
confuso para aquellos que sean primerizos.

Llega más lejos

En esta web se puede ver una guía para iniciarse en TikTok, cómo hacer vídeos, duración y
estilos. De esta manera se puede entender el funcionamiento de la red más de moda entre
los jóvenes.

Para reforzar habilidades académicas mediante esta red social, se puede implementar un proyecto
donde se invite a los estudiantes a realizar un vídeo sobre su método de estudio preferido, el que
más usen y más les funcione, utilizando como música de fondo alguna canción o canciones que
les ayuden a estar en calma a la hora de estudiar. Esto servirá para demostrarles la importancia
de tener adecuadas técnicas de estudio y cómo su efectividad puede tener una incidencia
significativa en su nivel educativo. También, la opción de añadir música va a lograr su
desenvolvimiento en la actividad y ayuda a que expresen una pequeña parte de sí mismos, de su
personalidad, sus gustos y tendencias (Pastor, 2020).

Viaja

Otra de las plataformas de vídeo muy conocidas es Twitch; en ella se realizan directos de
videojuegos.

Evidentemente, no es de esperar que todos estos proyectos e iniciativas funcionen de igual

manera en todos los estudiantes. Lo recomendable es comenzar con tareas sencillas que poco a
poco llamen su atención y los animen a estar más involucrados en todo el proceso de aprendizaje.
Si bien el éxito no será aplastante en todos los proyectos, los resultados serán valorados si al
menos uno de los estudiantes responde positivamente a las actividades con el uso de las redes
sociales. Lo que se busca con estas tecnologías es precisamente eso, que los estudiantes tengan
gran variedad de opciones para aprender, analizar, repasar y complementar un mismo tema o
contenido, para que así su educación sea capaz de adaptarse a su esencia y capacidades
personales.

19
6.3. Redes sociales de profesores

Las redes sociales han entrado en todos los ámbitos imaginables, incluido el ambiente profesional
de los docentes, que se encuentran sumergidos en una constante búsqueda de alternativas para
llevar sus contenidos hacia las mentes jóvenes que parecen alejarse cada vez más del aula de
clase, para acercarse a sus dispositivos móviles y redes. Debido a esto, se han generado cada
vez más espacios educativos orientados por y para profesores, que intentan hacerles más liviana
esta tediosa búsqueda, apoyados en sus propias experiencias, y en la recolección y modificación
de la información, herramientas propias de los entornos personales de aprendizaje (Millán, 2010).

Llega más lejos

En esta web se pueden encontrar listados temáticos de setenta grupos de Facebook

compuestos por docentes.

Es evidente que los PLE están enfocados a cualquier persona que desee aprender, así que no solo
pueden poseer enfoques hacia el estudiantado, sino también para los docentes, que a menudo
tienden a necesitar estos entornos aún más que los jóvenes. Las redes de interacción entre
profesores son cada vez más comunes y funcionan como pequeñas y grandes comunidades que
buscan orientarse entre sí para enfrentar las adversidades del cambiante rumbo de la tecnología.

Existen numerosas opciones para que los docentes construyan sus propios entornos y redes
personales de aprendizaje, que les ayuden a afinar sus habilidades y técnicas de enseñanza, así
como profundizar en los temas de sus respectivas áreas de estudio. Por ejemplo, hay proyectos
que pueden ser aplicables en Facebook. Una idea atractiva es la de la creación de una página
dirigida a docentes de una asignatura en particular. En ella se pueden publicar imágenes, vídeos,
artículos, tutoriales o cualquier contenido digital que provea de información sobre la materia. Para
que este proyecto funcione, se debe tomar la página como parte de un entorno personal de
aprendizaje, para que así todo el contenido disponible en ella haya pasado por los pasos
esenciales de búsqueda, recopilación, modificación y distribución que garantizan información de
calidad, novedosa y útil (Greenhow y Lewin, 2016).

20
6.3.1. Facebook

Facebook no es la única red social en la que puede generarse una comunidad de ayuda de
profesores, sino también en Twitter, por ejemplo, donde pueden acceder a información veraz en
tiempo real, y mantenerse al tanto no solo de los avances de la tecnología, sino de los de sus
propios campos de interés, como nuevos descubrimientos, investigaciones, ensayos, pruebas,
etcétera.

Parte importante del movimiento global que han causado las redes sociales es su propiedad de
conectividad y comunicación en cualquier lugar del mundo. Este aspecto también es muy
importante cuando se trata de construir ambientes de aprendizaje para profesores, ya que
permite que se mantengan al tanto de todas las innovaciones tecnológicas, así como de cualquier
noticia de interés para su campo de estudio. Por ello es adecuado mencionar las opciones para
estrategias de aprendizaje que utilicen las redes sociales con mayor afluencia en tiempo real: los
servicios de mensajería instantánea.

6.3.2. WhatsApp

WhatsApp ha sido durante mucho tiempo la primera red que se menciona al hablar de la
mensajería online. Es gratuito, rápido, eficiente y casi todos lo usan. Ha creado un puente que
comunica a millones de personas alrededor del mundo. En la actualidad es bastante usual que se
originen grupos dentro de esta aplicación, donde los miembros de una misma comunidad
educativa suelen interactuar. Como proyecto de interés, se puede crear un grupo de WhatsApp
para profesores que trabajen en una misma institución, y así estar informados de cualquier
novedad dentro de esta, o compartir estrategias específicas que podrían servir para lidiar con un
grupo de estudiantes específico, o para trabajar en determinada área de la institución. Un grupo
de este tipo no constituye una red de aprendizaje muy eficaz, pero su alcance es significativo
debido a la cercanía de sus participantes que, de una manera u otra, trabajan juntos y se
enfrentan a las necesidades propias y del sector estudiantil (Monguillot et al., 2009).

21
Esta red social es más propicia para pequeños grupos de personas, ya que la plataforma puede
saturarse y existen ciertas limitaciones sobre la presentación del contenido que se comparte en
los chats. Bajo esta preocupación, han surgido otros servicios de mensajería instantánea, de los
cuales es propicio destacar Telegram.

6.3.3. Telegram

Telegram es una plataforma en la que es más adecuado desarrollar un proyecto de un grupo más
general de profesores de cualquier parte del mundo. Los grupos de Telegram están capacitados
para asumir grandes cantidades de personas y disponen de una interfaz más amigable y creativa
para compartir imágenes, las cuales pueden enviarse sin temor a que pierdan su calidad original;
los vídeos pueden ser tan largos como el usuario requiera, a diferencia de WhatsApp, y contiene
toda clase de stickers y emoticonos.

Así, un grupo de profesores en Telegram puede ser una opción más adecuada, ya que se puede
distribuir información de manera más accesible, con la facilidad de una mejor movilidad que otras
estrategias, ya que, con solo acceder a cualquier dispositivo con conexión a Internet, se puede
estar al tanto de gran cantidad de noticias, artículos, imágenes, plantillas, sugerencias, ideas,
otros proyectos. Es una excelente opción para ampliar los alcances de la red personal de
aprendizaje de un docente. Además, en Telegram también se pueden adjuntar enlaces para
acceder a diversas páginas web, artículos, podcasts y vídeos de interés para quienes conformen
el grupo (InternetLan, 2016).

22
6.3.4. Comunicación con las familias del alumnado

Cuando se trata de estudiantes que aún no son independientes, es de vital importancia que el
docente mantenga una estrecha relación con sus tutores o representantes legales. Cualquier
situación generada en el hogar puede influir directamente en el ambiente escolar y en el desarrollo
académico del estudiante. También puede influir la desinformación de los padres respecto a gran
cantidad de asuntos, tanto académicos como sociales.

Mantener a los padres y madres al tanto de todas las estrategias garantiza que se comprometan
a ayudar a sus hijos a cumplir con los objetivos establecidos en el entorno de aprendizaje. Para
ello es bastante normal que se creen grupos en los servicios de mensajería instantánea, donde
intervienen los padres y los profesores. Cuando se crea un grupo de estas características y para
evitar la sobrecarga de información, se recomienda realizar acciones como las siguientes
(Educación 3.0, 2017):

• Crear un grupo por cada asignatura para, así, evitar sobrecarga de información y
confusiones.
• Hay que establecer límites y reglas para que se dé un funcionamiento adecuado.
• Es importante establecer un horario en el que el docente estará disponible para los padres
por ese medio.
• Se recomienda que los padres formen un equipo conjunto a la hora de dirigirse al grupo,
sin especificar de quién se trata, es decir, basta con aclarar que se es el responsable de
cierto estudiante.
• Hay que informar de que la participación en el grupo tiende a ser opcional.
• Exponer la finalidad del grupo; se usa normalmente como un mecanismo para mantener
a los padres al tanto de todos los procesos educativos y tratar temas específicos en casos
extraordinarios.

La efectividad de todos los proyectos y estrategias que incluyen el uso de tecnologías, como son
las redes sociales, dependerá en su mayoría de cómo se adaptan esas herramientas. Si bien las
redes sociales son extremadamente versátiles, sus atributos específicos las hacen adecuadas para
ciertos fines académicos. Lo más importante es asegurar que las estrategias poseen la suficiente
diversidad de información, que permita a los involucrados en el proceso de aprendizaje optimizar
sus habilidades de la mejor manera, expandiendo no solo las barreras de su mente e imaginación,
sino las de las redes tecnológicas que utilizan para nutrirse de conocimiento (Greenhow y Lewin,
2016).

23
Resumen

En esta unidad se ha repasado, en primer lugar, qué son los PLE (personal learning environments)
o entornos personales de aprendizaje. Estos son un conjunto de herramientas, variadas y
accesibles, que se ponen a disposición de los estudiantes para que sean ellos mismos quienes
decidan cuáles usar, evaluando las que se adaptan mejor a sus necesidades y capacidades
cognitivas. Estos entornos están conformados por cualquier tipo de información, conexión,
espacio, persona y herramienta que se utilice para aprender, en interacción con la rutina, hábitos
y capacidades específicas de cada persona. Además, forman parte de las PLN (personal learning
network), redes sociales de contactos donde se conectan los PLE de diferentes personas afines.

Posteriormente, se ha dado una visión general de proyectos educativos en redes sociales con
ideas para implementar en Facebook, Twitter y en redes de vídeos como YouTube o TikTok. Estos
proyectos son todos reales y exportables a distintas aulas.

Para finalizar, se ha visto cómo las redes sociales de docentes con grupos de Facebook, Twitter e
incluso WhatsApp o Telegram son útiles para desarrollar más adecuadamente la práctica
educativa.

24
Mapa de contenidos

25
Recursos bibliográficos

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