Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Mientras que un superávit fiscal es generalmente bueno (no hay que detraer de
la economía privada más de lo necesario), el déficit fiscal puede ocasionar la
falta de liquidez y necesidad de financiación de los gastos presupuestarios, ya
sea mediante deuda (recurso más utilizado), como demorar los pagos, y en
ocasiones, si la diferencia entre ingresos y gastos es grande, una
administración puede ir a la quiebra.
Las principales consecuencias que provoca el déficit fiscal son las siguientes:
Los déficits fiscales a menudo son vistos como malas praxis en las
administraciones públicas, bien porque hayan gastado mucho o porque no
tengan una política fiscal eficiente para recaudar. Los déficits fiscales además
de que suelen incrementar la deuda, pueden incidir directamente sobre los
ciudadanos, ya sea mediante recortes en prestaciones y servicios públicos
como en aumento de impuestos a las actividades privadas