Carlos Alberto Luna Bautista

LA GLOBALIZACIÓN

En estos tiempos actuales, es necesario el conocimiento del fenómeno de la globalización

para entender las nuevas relaciones políticas, económicas, culturales, tecnológicas y sociales que se
dan y se seguirán dando en el presente y en el futuro. Este fenómeno que se da en el marco del
capitalismo, busca una regulación del orden social y la búsqueda del bienestar a través de la
unificación tecnológica, económica, ideológica y cultural como formas de desintegrar el estado
nacional y superar las fallas del capitalismo Fordiano.

Este fenómeno de globalización, tiene un papel importantísimo en el desarrollo de las

sociedades actuales, que no deben ni pueden estar lejos de esta influencia, la cual apoyada por los
nuevos avances tecnológicos y la expansión de las redes de comunicación digital, hacen que lo que
pasa en alguna parte del mundo, no pase desapercibido y afecte, ya sea de manera económica o
política al resto del orbe, tanto así que esos efectos de la globalización llevan a la adopción no sólo
de ideologías sociales políticas y culturales, sino que también trascienden el ámbito económico a
través del intercambio de productos, servicios ofertados por empresas que debido a esta
unificación y libertad de tránsito están accesibles a casi cualquier persona en el mundo.

Podemos decir entonces, que la globalización es un fenómeno que aporta grandes

beneficios a las sociedades actuales, pero haciendo un balance sobre lo bueno y lo malo que aporta
dicho fenómeno, lo primero que tenemos que decir es que esta propone la desintegración del
estado social cambiándolo por capital internacional, lo cual desplaza el reparto social, que afecta
sobre todo a los países menos desarrollados, provocando en ocasiones que las diferencias sociales,
económicas y culturales se agranden cada vez más; Por otro lado es de reconocerse que en este
enfoque globalizador, se ha dado apertura a la sociedad del conocimiento, que gracias a las
modernas redes de comunicación, el saber puede llegar de manera más fácil, sincrónica y
asincrónica a una mayor cantidad de personas en el mundo.

Es muy difícil por estos y otros puntos, tomar una postura sobre si la globalización es buena
o mala, más bien se tendría que decir para quién es más buena o mala, en este caso, la mejor parte
la llevan los países desarrollados por la misma infraestructura y situaciones particulares que estas
poseen, este fenómeno le aporta mucho más beneficios que los que le aporta a países con menos
nivel de desarrollo, en los cuales por las mismas situaciones de carencia y falta de desarrollo para
competir a gran escala, se le dificulta o se hace imposible el que sean beneficiadas con esta política.

Así mismo, de manera individual la globalización nos afecta de diferente manera a cada
persona, repitiéndose en la mayoría de los casos, a ejemplo de los países desarrollados y menos
desarrollados, el impacto de esta en el desarrollo en la vida de cada uno de nosotros, aunque
también es pertinente reflexionar si es posible que, a pesar de las situaciones adversas qué
enfrentemos ¿qué podemos hacer como individuos para sacar mejor partido de la situación en la
que me encuentro y aprovechar de mejor manera la influencia de este enfoque global? Se antoja
interesante, y más aún si este mismo cuestionamiento se lo plantearan los gobiernos en beneficio
de sus representados y no solo para beneficiarse de manera particular, queda ahí la incógnita
personal y social.