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“Flor y Canto”

Muestra Itinerante y Colectiva de Artes Plásticas

El Taller Los Confines de la Tinta, vio nacer la luz del día hace poco más de una
década en un aula destinada a las artes plásticas, del entonces Centro Regional de Cultura
Toluca, ubicado en la calle de Pedro Ascencio #103 norte, en pleno Centro Histórico de la
ciudad. Como espacio público, fue punto de encuentro para diversas personas; entre
talleristas con cierta experiencia, artistas locales, jóvenes en formación, adultos aficionados
o especializados, gente de la tercera edad y público general que visitaba las instalaciones,
ya fuera para tomar algún otro taller artístico que ofrecía el Centro Regional, o simplemente
como espectadores, pues ahí mismo tuvieron lugar varias exposiciones durante un periodo
de poco más de un cuarto de siglo, aproximadamente.

Resulta singular mencionar la labor cultural que de ahí emerge, pues esa clara
convergencia social, tiene un efecto metafórico que remite de manera exacta al efecto que
produce el polen sobre las flores, proceso fundamental para la reproducción de la semilla
que luego dará fruto. En este sentido, la Muestra Itinerante y Colectiva “Flor y Canto”, da
testimonio de lo que el tiempo y los años resguardó en forma de un arte plástico genuino,
que busca el acercamiento a la vida cotidiana, a través del sincretismo poético reflejado en
costumbres y tradiciones que conforman y denominan su propio carácter comunitario.

La concepción cosmogónica más relevante del antiguo pueblo nahua, “In Xóchitl, In
Cuicatl”, representa esa reminiscencia al pensamiento filosófico-poético con que la vida
humana y sus múltiples problemas, cobran continuidad a través de la muerte. La palabra
hecha “flor” que es “canto”, tradicional concepto de la poesía que renace, origen y destino
que refiere a lo que hoy se puede considerar como Arte; conformado en aquel tiempo, por
la danza, la música y la escritura pictórica, incluso se ha encontrado ejemplo de lo que el
contexto novohispano trasmitió como teatro; cuya clara diferencia antropológica ilustra el
desuso ritual del Arte occidental y ha dado motivo a estudiosos para indagar en su
genealogía. Finalmente, esta insistencia temática da nota del arraigado oficio artesanal de
un pueblo que reproduce el pensamiento y concibe la existencia propia bajo el cuidado de
la cultura como versión originaria.

En manos de Manuel Barranco, Arturo Cáceres, César Alejandro Hernández,


Jhonatan Tobal , Sofía Arizaga, Rocío Sánchez, Erika López, Nicole Ortíz, Andrés Hernández
y la que aquí suscribe Estefanía González; artistas que conforman la presente muestra, se
extiende la importancia de aquel sentido esencial y cosmogónico que no deja de perdurar
gracias al oficio, que entre el espacio, enmarca a la ilustre tinta a manera de patrimonio.

Toluca, México;
Otoño 2022.

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