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FACULTAD DE DERECHO Y HUMANIDADES

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO

TEMAS:
CLASIFICACIÓN DE LOS PRINCIPIOS DEL PROCESO
LABORAL

ALUMNO:

VALLE SALVATIERRA HEINS ROLAND

DOCENTE:

Dr. HAROLD ARTURO BELLO CALDERON

CHIMBOTE - 2022
CLASIFICACIÓN DE LOS PRINCIPIOS DEL PROCESO LABORAL

Gamarra considera dos tipos de principios: (…) los principios fundantes como
inspiradores de toda la legislación laboral, y los principios operacionales o reglas del
derecho procesal del trabajo como la oralidad, inmediación, etc..

A su vez, Romero considera que no todos los principios tienen la misma importancia, y
al respecto afirma:

No todos los principios procesales tienen la misma jerarquía. Algunos de ellos


constituyen el fundamento de la existencia del proceso laboral, mientras que los demás
tienen que ver con el cumplimiento de esos principios fundamentales. A los primeros,
podrían llamarlos principios-fines del proceso y a los otros principios-operativos del
proceso. Aquellos justifican o hacen posible la existencia del proceso; los últimos
marcan el comportamiento del proceso.

LOS PRINCIPIOS DE ORGANIZACIÓN

El Artículo I del Título Preliminar de la NLPT establece que son principios que inspiran
el proceso laboral los principios de inmediación, oralidad, concentración, celeridad,
economía procesal y veracidad.

Estos principios constituyen postulados que señalan el procedimiento de cómo debe


desarrollarse el proceso laboral para lograr sus fines.

Al respecto Priori nos dice:

Los principios de inmediación, oralidad, concentración, celeridad, economía procesal y


veracidad, enunciados en el artículo I del Título Preliminar, constituyen, en la
perspectiva de la teoría general del proceso, principios del procedimiento, es decir,
postulados que sirven para describir la naturaleza y contenido del sistema procesal
adoptado en la NLPT, que como quedará demostrado al explicar cada uno de los
principios, es un sistema procesal publicístico cuya finalidad primera es otorgar
efectivamente la tutela jurisdiccional requerida para la reivindicación de los derechos
laborales, en el marco del Estado constitucional. Para que sea posible una mayor
precisión, se puede identificar a estos principios como principios estructurales, en tanto
establecen el contenido esencial del cómo se lleva a cabo el proceso.
En las líneas siguientes analizaremos de manera sucinta cada uno de los principios
de organización contenidos en la NLPT.

Principio de inmediación

El principio de inmediación conjuntamente con el de oralidad y el principio de


concentración son los pilares del nuevo proceso laboral peruano”.

García Vara, resaltando la trascendencia del principio de inmediación en el proceso


laboral venezolano, sostiene lo siguiente:

Junto con la oralidad es la columna vertebral del procedimiento oral. Estrechamente


ligado a la oralidad, el principio de inmediación garantiza que los actos procesales del
juicio oral se van a realizar en presencia del juez o magistrado que presidirá el acto; por
la inmediación, el juez tiene la posibilidad de oír a las partes directamente —no por
medio de un intermediario—, escuchar sus alegatos y defensas, obtener de viva voz el
decir de quien habla, porque los actos se realizan en presencia del juez.

Principio de oralidad

Este principio, destaca la predominancia del uso de la palabra hablada sobre la escrita
en el desarrollo de las diligencias judiciales, sin que ello signifique la desaparición de
las actuaciones escritas.

García Manrique y otros resaltan lo acertado de este principio en los términos


siguientes:

Las bondades de encontrarnos frente a un proceso concretamente oral son las siguientes:
a) Mayor celeridad; b) Le da mayor vigencia al principio de inmediación; c) Mayor
publicidad del proceso; d) Favorece el poder de la dirección del proceso por el juez; e)
Evita, en mayor medida que el proceso escrito, la inconducta procesal; y f) Favorece el
principio de concentración.

Principio de concentración

Este principio persigue que las actuaciones procesales se realicen en el menor número
de diligencias y por consiguiente el juicio dure menos.

Según el autor venezolano Mora:


Este principio consiste en que debe concentrarse en una misma audiencia, tanto la
persona del juez que va a dirigir el debate y producir la sentencia como la
comparecencia de las partes y la evacuación de todas las pruebas en la misma audiencia
o la siguiente en caso de ser necesario, todo esto con el propósito de evitar retardos
innecesarios y a fin de garantizar por parte del juzgador un conocimiento personal,
directo y actual del debate procesal y poder obtenerse así una sentencia inmediata y con
base en la percepción que el juez haya tenido del juicio.

Principio de celeridad

De acuerdo con este principio, los procesos deben diligenciarse en el menor tiempo
posible; expidiendo los jueces sus fallos dentro de los plazos previstos en la ley,
contribuyendo de esta manera a eliminar las trabas que perjudiquen el acceso a la tutela
judicial, a través de trámites simples, plazos breves, términos perentorios, entre otros.

Sobre este principio, Gamarra afirma lo siguiente:

La celeridad es uno de los principios básicos del derecho procesal del trabajo porque
constituye el objetivo principal que se persigue en el proceso laboral para buscar la
rapidez a través de la simplificación de los trámites, limitación de los recursos
impugnatorios, brevedad de los plazos, limitación de las instancias, la perentoriedad de
los términos, etc.

El principio de economía procesal

La NLPT incluye expresamente el principio de economía procesal en el entendido que


el ahorro en el gasto económico, así como la disminución en el tiempo de duración y el
esfuerzo dedicado son fundamentales para que el proceso laboral se desarrolle
normalmente.

Sobre el principio de economía procesal, Romero afirma lo siguiente:

La economía del gasto busca que los costos no sean un impedimento para que el
proceso se desarrolle con la urgencia que exige la realización de la justicia. Es decir, el
costo excesivo podría dilatar el trámite del proceso antes de agilizarlo. Por la economía
del tiempo, se busca que los procesos se desarrollen en el menor tiempo posible, lo cual
es consustancial a la celeridad procesal. La economía del esfuerzo busca, como afirma
Podetti, la supresión de trámites superfluos o redundantes, reducir el trabajo de los
jueces y auxiliares de justicia. En conclusión, porque la justicia es urgente hay que
economizar, gasto, tiempo y esfuerzo.

Principio de veracidad

De acuerdo con el principio de veracidad, el juez debe buscar a través del proceso la
verdad de los hechos entre lo que manifiestan los litigantes.

Respecto a los alcances de la verdad en el proceso, Herrera nos explica lo siguiente:

“(…) La búsqueda de la verdad material única y auténtica es, como afirma Mario Pasco,
un desiderátum de todo proceso, incluido el proceso laboral, y la verdad que fluye del
proceso es inevitablemente relativa, siendo un tipo de verdad distinta de la absoluta pero
válida, y las proposiciones al interior del proceso pueden ser admitidas como
verdaderas. La consciencia del límite del conocimiento humano no hará sino hacer más
riguroso y exigente el método para la obtención de la verdad”.

Referencia bibliográfica:

Vela, J. A. (2019). Los principios del proceso laboral. Lex-Revista de la Facultad De


Derecho y Ciencias Políticas, 16(22), 253-270.

Leopoldo Gamarra Vílchez, Doctrina y análisis sobre la Nueva Ley Procesal del
Trabajo. Primera edición (Lima: Academia de la Magistratura, 2010), 48, 49.

Francisco Javier Romero Montes, El Nuevo Proceso Laboral. Segunda edición (Lima:
Editorial Grijley, 2012), 38.

Giovanni F. Priori Posada, Comentarios a la Nueva Ley Procesal del Trabajo (Lima:
Ara Editores, 2011), 38.

4Juan García Vara, El procedimiento laboral en Venezuela (Caracas: Editorial Melvin,


2004), 27.

Álvaro García Manrique y otros, El Nuevo Proceso Laboral. Primera edición (Lima:
Gaceta Jurídica S. A., 2011), 12

Omar Alfredo Mora Díaz, Derecho Procesal del Trabajo. Primera edición (Caracas,
2013), 135.
Leopoldo Gamarra Vílchez, “Importancia y necesidad de los principios en la Nueva Ley
Procesal del Trabajo N° 29497”, en Doctrina y análisis sobre la Nueva Ley Procesal del
Trabajo (Lima: Academia de la Magistratura, 2010), 60

Francisco Javier Romero Montes, El Nuevo Proceso..., 53.

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