Gabriela Ontiveros Roa

Electiva en Talento Humano

Trabajo social
8vo semestre

Importancia de las personas en las organizaciones

La globalización es un fenómeno que ha obligado a que las

organizaciones deban ser innovadoras, con mano de obra especializada, con

un servicio más humanizado y que se preocupen por el bienestar laboral de sus

colaboradores. Esto se debe a que los consumidores son cada día más

exigentes y buscan productos y/o servicios de la mejor calidad. Y esto solo

puede ser posible con la ayuda de colaboradores cada día más comprometidos

e identificados con su empresa.

En este sentido, se puede decir que las personas son el recurso más

valioso para una organización, por lo que una buena gestión del talento

humano llevará a alcanzar metas en beneficio de la empresa y a cambio en

buenas oportunidades para los colaboradores.

De ahí la importancia de hacer que las personas se sientan parte de la

empresa, la cual debe proporcionarles oportunidades de crecimiento personal y

profesional para que estos se puedan desenvolver dentro de la misma y aportar

también a la sociedad.

En Colombia, muchas empresas no cuentan con un trabajador social o

un departamento de Talento humano, por lo que no existe ningún tipo de

motivación, ni un plan de capacitación que permita el sostenimiento y desarrollo

de un equipo de alto desempeño, lo que repercute en sus emociones, haciendo

que no se sientan comprometidos con la empresa, faltando liderazgo,

capacitación, motivación y compromiso de su parte, lo que a su vez

desencadena una alta rotación de personal en poco tiempo, afectando así el

normal desarrollo de las operaciones, reflejado en quejas y reclamos de sus

clientes o usuarios hacia la organización.

Entonces, de lo anterior se puede afirmar que el éxito de una

organización actualmente se logra mediante el trabajo en conjunto de un

equipo totalmente comprometido e identificado con los objetivos de la empresa,

lo cual se logra a través de la motivación y beneficios que se le brinden al

personal, ya que sin duda alguna y como se mencionó anteriormente, son el

activo más valioso y por el cual toda empresa u organización debe valorar sus

fortalezas y encaminarlas en oportunidades para el éxito de la misma.

Así pues, las organizaciones deben buscar un equilibrio entre sus metas

y satisfacer las necesidades de las personas. Por lo que estas tienen la

obligación de propiciar un clima laboral agradable, atender a sus

requerimientos y ofrecerles oportunidades de crecimiento.

Según Chiavenato (2009), son las personas quienes “pueden aumentar

o disminuir las fortalezas y debilidades de una organización dependiendo de la

manera como se les trate”. En este sentido, son precisamente las personas

quienes tienen la posibilidad de posicionar a la organización entre las mejores y

más competitivas del sector, pues a medida que esta se ocupe de la formación

y bienestar de las personas, va a obtener mayores beneficios.

Para concluir, se puede decir que en la actualidad el activo más

importante que tienen las empresas son las personas y que ese papel se ha

venido transformado a lo largo del siglo, ya que las personas aportan ventajas

competitivas a la empresa, las cuales son las que permiten diferenciarse de la

competencia porque cada persona es única y cuenta con capacidades y

habilidades diferentes. Las organizaciones dependen de las personas para que

las dirijan, controlen y para que operen y funcionen. No hay organización sin

personas. Toda organización está constituida por ellas, de quienes depende

para su éxito y continuidad.

Referencias bibliográficas

Chiavenato, I. (2009). Gestión del talento humano. Ciudad de México,

México: McGraw-Hill.