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ENSAYO: EL TALENTO HUMANO UNA ESTRATEGIA DE ÉXITO EN LAS

EMPRESAS CULTURALES

JEISY YASMIN ACOSTA RAMÍREZ -5200748


DAVID ALBERTO MARTÍNEZ TORRES -5200744

Ensayo sobre la lectura: El talento humano una estrategia de éxito en las


empresas culturales. Lozano Correa, Luz Janeth. Revista Escuela de
Administración de Negocios, núm. 60, mayo-agosto, 2007, pp. 147-164.
Universidad EAN. Bogotá, Colombia.

Asesora: Ing. MSc. Diana Patricia Díaz Velandia.

Universidad Católica de Colombia


Facultad de Ingeniería
Plan de Estudios de Ingeniería Industrial
Bogotá
2021
El talento humano en las organizaciones es un pilar fundamental, y por ello se
vuelve importante distinguir los intereses y aspiraciones personales de cada uno de
los colaboradores dentro de la organización, buscando fomentar el sentido de
pertenencia para lograr el éxito sostenido en el tiempo. La definición de talento o
actitudes sobresalientes pueden variar de una compañía a otra en cuanto a su
significado, dependiendo de los requerimientos de cada organización en particular.

El avance actual de la globalización exige a los gerentes ser capaces de liderar y


motivar a las personas que trabajan a su cargo, brindándoles oportunidades de
mejora, capacitando y potenciando sus habilidades y fortalezas, para que se
involucren con su organización y esto conlleve al cumplimiento de las exigencias
que demanda el mercado. La forma en que se ha de motivar a las personas es tan
variante como la misma definición de talento, lo que funcionó en una compañía no
tiene porqué funcionar en otra, se requiere que el gerente conozca lo que podría
funcionar con su grupo, y esto puede ser desde lo más simple pero significativo y
eficaz para lograr mantener motivado y comprometido al personal.

Reconociendo que cada persona tiene un valor irremplazable y que para tener
grandes talentos dentro de la organización se deben comprometer con la búsqueda
de ellos y la formación que tienen implícita. Es muy importante además conocer los
procesos psicológicos que influyen en el comportamiento organizacional de las
personas, sus competencias y el autoconocimiento que ayuda a identificar quiénes
son, así como sus fortalezas y debilidades para mejorar el desarrollo laboral y la
productividad, obteniendo un desempeño exitoso en la labor que realicen. Se debe
entender que el colaborador es un ser que por naturaleza tiene la necesidad de
verse involucrado en la acción que desempeña, y que buscará sentirse valorado y
reconocido. El aprovechamiento de esta manera de ver a las personas usualmente
lleva al éxito o al fracaso de las organizaciones, ya que esto genera un valor
agregado a la compañía y la vuelve más capaz de cara a un ambiente competitivo.

En la mayoría de las organizaciones culturales su recurso fundamental son las


personas ya que son estas las encargadas de lograr el cumplimiento de objetivos.
Y para lograr lo que se planea, la gerencia debe tener ciertas destrezas y
habilidades tales como, actitud resiliente, inteligencia emocional, capacidad de
adaptación, trabajo en equipo y liderazgo, esto con el fin de inspirar a sus
colaboradores para obtener un mejor desempeño laboral, teniendo presente el
desarrollo del talento individual para generar resultados óptimos en equipo, también
es responsabilidad de la gerencia brindar herramientas adecuadas de trabajo y
capacitación para que hagan las tareas correctamente, por último y no menos
importante es que se reconozca el trabajo bien hecho que realizan. Los gerentes
deben ser capaces de crear expectativas positivas y productivas acompañando a
las personas con quienes trabajan, comunicando cuales son los resultados que se
desean obtener, reconociendo e incentivando el esfuerzo que desempeñan en la
organización para que se sientan más motivados.

Las organizaciones deben ser abiertas a sus empleados, garantizando que existan
canales de comunicación efectiva y asertiva que permitan expresar las ideas de
quienes tienen más experiencia, para enseñar e instruir a más personas hacia los
objetivos claves de la organización. Es importante considerar el tener una
compatibilidad entre las necesidades de la organización y los empleados para
conseguir un beneficio mutuo y lograr también una conexión con su labor y
organización. Por otro lado, otro término importante es la responsabilidad social de
las organizaciones, su compromiso con las comunidades, lo que también permite
tener un vínculo con el personal, estimulando así la relación con la organización y
agregando valor a ella.

Por otra parte, para desarrollar el talento se necesita capacidad, compromiso y


acción, los tres aspectos se deben emplear simultáneamente ya que el mercado
demanda talento de manera acelerada. Una estrategia funcional en el desarrollo del
talento es realizar un análisis interno donde identifiquen sus fortalezas, actitudes,
aptitudes y debilidades, complementado al mismo tiempo de un análisis externo,
entendiendo que el entorno influye tanto de manera positiva como negativa en
nuestro comportamiento.

Finalmente, para retener el talento las organizaciones deben gestionar procesos


que favorezcan el desarrollo, formación y capacitación por medio de coaching
impulsando su compromiso e innovación. De igual forma el gestor del talento debe
visualizar y seleccionar profesionales competentes en su ser y hacer, identificar el
valor que aportarán a la organización, entendiendo las causas o razones por las que
no se logran los resultados, en ocasiones, para reubicarlo hasta tener claro el lugar
donde si se desarrollará de la mejor manera, a modo de involucrar a todo el personal
y no desecharlos al primer error, sino tratando siempre de comprender y reconocer
al único y complejo ser humano dentro de la organización.

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