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UNIVERSIDAD DEL VALLE DE PUEBLA S.C.

LICENCIATURA EN CRIMINOLOGIA
SISTEMA ESCOLARIZADO
PENOLOGIA
MTRO. RUBEN BLANCA DIAZ
GRUPO 2CM
SESION 8

EL DERECHO PUNITIVO: UTILIDAD FINES Y


FUNDAMENTOS JURIDICOS Y CRIMINOLOGICOS
DE LA PENA EN MEXICO
TEMA AMPLIADO HORAS INDEPENDIENTES DE
LECTURA DEL ALUMNO
Derecho Punitivo
• El Estado es el ente titular del Derecho Punitivo y
tiene como finalidad primordial, entre otras, procurar
el orden común de una sociedad, garantizando así la
seguridad pública, para que el individuo o gobernado
disfrute de sus garantías individuales previstas por la
Constitución.
• Esta Seguridad Pública desde el punto de vista de un
conjunto de prerrogativas para el individuo; el Estado
como ente coercitivo para mantener esta Seguridad
Pública respecto a la comisión de actividades ilícitas o
delitos, a los que corresponde una sanción de
acuerdo con las leyes penales de nuestro país
• Las leyes penales declaran los principios sobre la
orientación punitiva del Estado, que corresponde una
pena o medida de seguridad frente a la comisión de un
delito o conducta ilícita.
• El Estado bajo la pretensión de proteger las situaciones
públicas respecto de la lesión de los bienes jurídicos,
mediante el derecho penal asegura estos bienes
penando su lesión en determinadas condiciones.
• Como se explicó en las Teorías Mixtas, respecto al
Derecho Penal, el Estado ejerce por una parte la
función represiva al castigar las infracciones jurídicas
cometidas y por la otra, realiza la misión previniendo
infracciones jurídicas de comisión futura.
• La pena esta definida como un medio de control
social que ejerce el Estado de su potestad punitiva
(ius puniendi) frente al gobernado, para cumplir con
sus fines, asimismo ésta no debe ser excesiva ni
escasa, es decir solamente sirve como una medida
punitiva y preventiva, justa y útil.
PENA Y MEDIDA DE SEGURIDAD
Cabe destacar que entre la pena y las medidas de seguridad
no existe distinción, salvo que la primera es personal y las
segundas tienen que ver con la colectividad, a decir de
Emiliano Sandoval, pena y medida de seguridad no sólo
coinciden en los fines de prevención especial, sino que es
evidente que la medida también realiza funciones de
prevención general. En ocasiones, como es el caso de la
reincidencia, la pena cumple la función de prevenir la
peligrosidad del autor.
(SANDOVAL Delgado, Emiliano, et. al. “Individualización Judicial de la Pena”, Ed. Ángel Editor,
México, 2000)
Finalidad de la Pena
La Pena descansa en principios de racionalidad por
lo que los referidos dispositivos solo son una guía.
“La Pena es la manifestación más violenta del
poder del Estado que se manifiesta sobre las
personas”
En atención a la prevención especial positiva, el
tratamiento tiene un objetivo distinto del de la
mera retribución, finalidad principal de la pena. La
finalidad de asegurar al ciudadano un tiempo
determinado de sanción con la posibilidad de que
la autoridad aplique indefinidamente una
privación o restricción.
MEDIDAS DE SEGURIDAD
Las medidas de seguridad están destinadas a
controlar al individuo a neutralizar su estado
peligroso, a modificar sus disposiciones
delictuosas y a cesar hasta obtener tal cambio.
La Pena tiene su profunda funcionalidad
destinada al control de los encerrados en
prisión.
La pena y las medidas de seguridad tienen como
finalidad en forma general como ya se explicó en
sesiones anteriores, la prevención:
1. PREVENTIVA GENERAL,en el momento de la
amenaza
2.RETRIBUTIVA,en el momento de la
individualización de la pena
3. PREVENTIVA ESPECIAL,en el momento de la
ejecución de la sanción
El castigo (pena) en el momento de la punición,
cumple una doble función:
a) Castigar para prevenir la futura comisión de
delitos por parte de la comunidad y el
infractor (prevención general).
b) Pero también la concreción del castigo, sirve
para satisfacer una necesidad social de
justicia o de que la justicia se aplica y en este
sentido la pena es una retribución que se
entiende como justa por la comunidad, y a
veces, por el propio infractor.
Fines de la pena
El fin de la pena tiene que partir de la función
compensatoria de la pena, en cuanto la pena
sirve a la justa retribución del injusto y la
culpabilidad, sin perjuicio de que ello satisfaga
también las exigencias de la comunidad. Pero
también satisfacer las necesidades de
prevención especial, esto es, el tribunal ha de
considerar a la pena como medio para
reconducir al reo hacia una vida ajustada a la
ley y ordenada.
Principio de Proporcionalidad de la Pena:

Lo que motiva al juez para determinar una pena


justa al delito cometido, es la proporcionalidad
entre los límites mínimos y máximos previstos
para cada delito, el actuar ético-jurídico del
juez radica precisamente en la discrecionalidad
de la pena entre los mínimos y máximos de
acuerdo con su función judicial.
• La Pena y el Delito no es una dualidad perfecta, sino
un binomio indisoluble, toda vez que ambos han sido
previstos por el legislador en las leyes penales, sin
embargo, establecer la calidad y la cantidad de la
pena adecuada a cada delito, si depende de la
valoración y prerrogativas previstas por la ley y a
consideración del juez.
• La proporcionalidad de la pena debe garantizar su
función compensadora de la culpabilidad
(comprensiva del contenido de injusto y la
culpabilidad stricto sensu).
Este hecho se deduce de los artículos 51 y 52 del
Código Penal Federal y 72 a 74 del Código de
Defensa Social para el Estado, en los que se alude a
las circunstancias exteriores de ejecución y
particulares del delincuente, así como la gravedad
del ilícito y el grado de culpabilidad.
• En conclusión respecto del principio de
proporcionalidad de la pena, ésta debe ser
proporcional al delito cometido. Se exige la
proporcionalidad de los delitos y las penas, no en
aras de la retribución o de la expiación, sino de la
misma prevención general. Más eficaz que la pena
dura y cruel es la pena cierta, pronta y
proporcionada al delito y con el sólo interés de la
justicia, situación que en el momento de legislar se
debe considerar.
PRINCIPIO DE CULPABILIDAD
La culpabilidad como fundamento legitimante de la pena.
Kant decía que “el efecto jurídico de un delito es la pena.”
“Culpabilidad es el resultado del juicio por el cual se
reprocha a un sujeto imputable haber realizado un
comportamiento típico y antijurídico, cuando le era
exigible la realización de otro comportamiento diferente,
adecuando a la norma.”
La culpabilidad es determinada y calificada por el juez en
el momento de la emisión de su resolución jurídica en la
que tendrá que justificar todas aquellas circunstancias de
calificación.
• El artículo 9 segundo párrafo del Código Penal Federal y su
correlativo en el CODEFSOC, señala que “Obra
culposamente el que produce el resultado típico, que no
previó siendo previsible o previó confiando en que no se
produciría, en virtud de la violación a un deber de cuidado,
que debía y podía observar según las circunstancias y
condiciones personales.”
• Es decir, el principio de culpabilidad presupone la
imputabilidad del inculpado, o sea que debe referirse a un
sujeto con capacidad suficiente para querer lo que hace y
entender lo que quiere, habida cuenta el principio de que
los inimputables no son sujetos de proceso penal. Pero
además, alude a que pudiendo haberse motivado el sujeto
activo para realizar su conducta delictiva, aún así no
renunció a ella e, incluso, a sabiendas de la existencia de
una pena por su realización, la ejecuta.
Por otra parte, la culpabilidad como criterio regulador
de la pena, dice Roxin que el principio de que la pena
no puede traspasar, ni en su gravedad ni en su duración,
el grado de culpabilidad, sirve para limitar el poder de
intervención estatal. Función limitadora de la pena que
tiene el principio de culpabilidad.
• El Sistema Penal Mexicano esta previsto por la
Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, en los artículos del 14 al 21
constitucional, mismos que señalan el tipo de
penas, los procedimientos, las condiciones y
prerrogativas que se deben determinar y
enmarcar las penas y medidas de seguridad, que
serán consideradas por la autoridad judicial al
momento de determinar la pena o medida de
seguridad justa y útil, que retribuya el daño
causado como consecuencia de la justicia social.
• El artículo 21 párrafo segundo prevé que la
imposición de las penas, su modificación y
duración son propias y exclusivas de la
autoridad judicial.
• El artículo 24 del Código Penal Federal y 37 del
Código de Defensa Social para el Estado
establecen las penas y medidas de seguridad
que la autoridad judicial podrá imponer de
acuerdo al delito cometido.
• “Las penas y medidas de seguridad son:
• 1. - Prisión.
• 2. - Tratamiento en libertad, semilibertad y trabajo en favor de la comunidad.
• 3. - Internamiento o tratamiento en libertad de inimputables y de quienes tengan el hábito o la necesidad
de consumir estupefacientes o psicotrópicos.
• 4. - Confinamiento.
• 5. - Prohibición de ir a lugar determinado.
• 6. - Sanción pecuniaria.
• 7. - (Se deroga).
• 8. - Decomiso de instrumentos, objetos y productos del delito
• 9. - Amonestación.
• 10. - Apercibimiento.
• 11. - Caución de no ofender.
• 12. - Suspensión o privación de derechos.
• 13. - Inhabilitación, destitución o suspensión de funciones o empleos.
• 14. - Publicación especial de sentencia.
• 15. - Vigilancia de la autoridad.
• 16. - Suspensión o disolución de sociedades.
• 17. - Medidas tutelares para menores.
• 18. - Decomiso de bienes correspondientes al enriquecimiento ilícito.”
• De acuerdo con lo previsto por el artículo 52
del Código Penal Federal, corresponde al juez
fijar las penas y medidas de seguridad que
estime justas y procedentes dentro de los
límites señalados para cada delito, bajo ciertos
principios jurídicos, tales como:
• La gravedad del delito
• El grado de culpabilidad
• Elementos sujetos a la individualización de
sanciones que el juzgador deberá considerar
para la cuantificación de la pena, tomando en
cuenta la decisión lo más justo posible, así
como también los elementos de valoración.
Clasificación de las Penas
• a) Por su autonomía las penas pueden considerarse :
principales o accesorias

• Principales: Son aquellas que se imponen preferente e


independientemente de cualquier otra no requieren ir
acompañadas de otra pena, por ejemplo la prisión,
reclusión o la muerte.
Accesorias: Son aquellas que no pueden aplicarse en
forma autónoma o independiente sino que dependen
de otra (principal) a la cual van ligadas y puede
cumplirse durante la ejecución: de ésta o bien después
de concluida, por ejemplo: multa, suspensión de
ciertos derechos, inhabilitación.
• b) Por su duración, es decir en cuanto al tiempo
que duran sus efectos, pueden ser:

Perpetuas: Son aquellas que como su nombre lo


indica, sus efectos permanecen durante toda la
vida del sentenciado, por ejemplo: cadena
perpetua, mutilación, pecuniarias. (teórico)

Temporales: Sus efectos sólo duran un


determinado tiempo y no pueden prolongarse
por más tiempo del fijado por la autoridad. por
ejemplo: Prisión, reclusión, arresto.
• c) Atendiendo a la posibilidad de ser fraccionadas o no,
bien en cantidad o bien en tiempo, se considera que las
penas pueden ser divisibles o indivisibles:
Divisibles: Este tipo de penas se pueden fraccionar, de
ahí su divisibilidad.
Divisibles en cuanto al tiempo: la prisión, actualmente
y debido a los beneficios que se proporcionan a todo
sentenciado a esta pena; la han convertido en
extremadamente divisible, con la remisión parcial y con
el denominado tratamiento preliberacional.
Indivisibles: cuando definitivamente no es posible
fraccionar la pena por ser su ejecución de una manera
total o completa, y el mejor ejemplo de ellas es la pena
de muerte.
• d) Atendiendo al fin que se proponen, las penas pueden ser:
• Corporales: Son aquellas que causan una afrenta en el cuerpo del
sentenciado, pe golpes, azotes; marcas, mutilación.
Las penas a su vez son infamantes, porque causan vergüenza pública.
• Eliminatorias: Pretenden eliminar al delincuente de la sociedad, se aplica
preferentemente en sujetos verdaderamente nocivos para la sociedad, pe
muerte, cadena perpetua, destierro.
• Reparadoras: Se pretende con ellas que el delincuente pague por su
conducta delictuosa el daño causado al ofendido, pe reparación del daño.
Dentro de esta clasificación podemos incluir al trabajo forzado y la
publicación de sentencia. La primera tiene como finalidad ocupar la mano
de obra (gratuita) en bien del estado, al mismo tiempo que sirva como
castigo para eI delincuente. La segunda va dirigida especialmente para las
personas morales y tiene como finalidad al causar una vergüenza pública
ante la sociedad pues el hecho de que se dé a conocer dicha sanción les
estará exhibiendo públicamente lo cual le traerá un descrédito con graves
consecuencias económicas.
• e) Atendiendo al bien que afecta directamente al
delincuente:
• Pecuniarias: (relativo al dinero) estas penas repercuten
directamente sobre el patrimonio del delincuente. pe
multa, reparación del daño, decomiso.
• Cada una de estas penas cuenta con características
muy propias: la multa será destinada para el Estado
(obligación del sentenciado para pagar una
determinada cantidad de dinero fijada e impuesta por
la autoridad judicial) y la reparación del daño al
ofendido (pago obligatorio que debe hacer el
responsable de un delito, a la persona que daño con su
conducta delictuosa), decomiso (recae sobre los
instrumentos con que en concreto se ha cometido el
delito y sobre los objetos o productos del mismo).
1.- Multas: Suma de dinero que la ley impone como sanción
al responsable de un delito.
2.- Decomiso: Pérdidas de los instrumentos o efectos de un
delito de propiedad del responsable de éste.
Instrumentos del delito: Son los medios materiales de que
los autores se valen para perpetrar el delito.
Efectos del delito: Son los objetos materiales sobre los que
ha recaído la acción delictiva o que sea producto de ello.
3.-Caución: Pena que consiste en obligar al sentenciado a
presentar un fiador que responde:
- O que cumplirá las medidas de aseguramiento impuestas
por el juez
- O de que cumplirá su condena.
El fiador se obliga a satisfacer, para el caso de
incumplimiento de parte del penado, la cantidad que el
tribunal haya fijado, La caución es siempre pena accesoria.
• Restrictivas de la libertad de traslación: Son
aquellas en las que solamente se les restringe su
libertad al individuo, sin que quede recluido en
una institución pública, suelen ser aplicadas por
razones de seguridad del propio delincuente para
evitar alguna venganza o bien una reincidencia,
aunque en ocasiones se confunden con una
medida de seguridad, pe. prohibición de ir o de
residir en determinado lugar, el confinamiento.
Las penas privativas de la libertad

Las penas privativas de la libertad, como su


nombre lo indica, consisten en privar de la
libertad al sentenciado, internándolo en un
lugar o institución especialmente para ello y
sometido a un régimen de custodia o castigo o
de tratamiento rehabilitatorio, según las
últimas teorías penitenciarias.
El arresto
• El arresto consiste en una privación de libertad
por muy breve tiempo e incluso se ha usado mas
como una medida de carácter administrativo que
como pena. Por lo regular el tiempo máximo que
se ha fijado para la misma es hasta de tres días,
salvo algunas excepciones se llegó a establecer
como pena hasta por dieciocho meses.
• Lo grave de esta medida, es que nunca se
construyeron los lugares especiales para su
ejecución y por consecuencia quienes eran
sentenciados a ella, quedaban, recluidos en los
mismos establecimientos para la prisión.
LA CARCEL
• El concepto de cárcel probablemente tiene su raíz en la
palabra "coercere" que significa encierro forzado.

• Se afirma que las primeras cárceles que surgieron


datan desde la antigua Roma y varios autores las
ubican durante el reinado de Tulio Hostilio (670-620 A.
de C.) y posteriormente: en época de Apio Claudio.
Esta idea originaria de la cárcel permaneció, durante
varios siglos y para su aplicación se utilizaron
horrendos edificios que ofrecían la máxima seguridad y
desolación de los ahí recluidos.
• Presuntamente es hasta la Edad Media cuando aparece como pena
en el derecho canónico destinada a castigar a los clérigos que
hubieren infringido las reglas eclesiásticas así como también a los
herejes juzgados por la jurisdicción canónica.

• El objetivo dentro de este derecho; era el arrepentimiento del


culpable y tiene el carácter de penitencia. Este es el punto de
arranque del concepto de la prisión como "pena privativa de la
libertad".

• Es a mediados del siglo XVI y cuando ya la población empezaba a


crecer desordenadamente y la pobreza hacía estragos en aquellos
ejércitos de pequeños desarrapados que emanaban de las grandes
ciudades y que iban de un lado para otro cometiendo pequeñas
raterías, pues de algo tenían que sobrevivir, pero eran tantos que
no era posible castigarlos a todos ni mucho menos ahorcarlos,
además que era mayor su pobreza que su maldad por lo que
tuvieron que crearse establecimientos correccionales destinados a
vagabundos y mendigos principalmente, para mantenerlos
ocupados y castigarlos al mismo tiempo.
• En conclusión podemos decir que los orígenes del internamiento
obligado surgido durante el siglo XVI, en el que se recogían vagos,
ociosos, ladrones, prostitutas, delincuentes menores, mendigos,
etc., no era tanto debido a una idea de castigo o sanción, sino más
bien la utilización de mano de obra gratuita y barata para la
naciente industria que empezaba a generarse y que en los siglos
XVII y XVIII alcanzaría su máximo desarrollo fabril en los países del
centro de Europa, adelanto que mucho tendrá qué ver con la
transformación de la idea original de la cárcel.

• Coincide en esas fechas, la repulsa que empezaba a generalizarse


contra la pena de muerte y mucho se decía que debería ser
reemplazada por una pena menos cruel y más humana, así se
piensa que la prisión puede llegar a convertirse en esa solución y
efectivamente se le da tal carácter, empezando la construcción de
grandes fortalezas de piedra, frías y lúgubres para mantener seguro
al delincuente privado de su libertad y que mediante la soledad de
su celda expiara su pena.
• Bibliografía:
• Rodríguez Manzanera, Luis, Penología, 3ra
edición, México, D.F, Editorial Porrúa, 2003.
pag.161-215
• OJEDA VELÁZQUEZ, Jorge. “Derecho Punitivo,
Teorías sobre las Consecuencias Jurídicas del
Delito”. Ed. Trillas, México, 1993.
• MULTA. COMO SUSTITUTIVA DE LA PENA DE PRISIÓN, CUANTIFICACIÓN DE LA. La multa sustitutiva no es una sanción
pecuniaria impuesta en forma directa por la comisión del ilícito. En efecto, debe precisarse que no todas las multas son de la
misma naturaleza; en materia penal se deben distinguir dos hipótesis, que obviamente no tienen igual trato legal, la primera
es cuando el juzgador impone pena de prisión y multa, o bien sólo ésta, como pena, en cuyo caso deberá atenderse a los
mínimos y máximos que establece la ley, con base al grado de culpabilidad en que el reo sea ubicado, para que tanto la pena
privativa de libertad como la accesoria de multa, sean fijadas en esa medida, sin que en estos casos la multa, como pena
adicional a la de prisión, o bien como sanción autónoma, pueda exceder de quinientos días multa, según lo preceptúa el
artículo 29 del Código Penal Federal en vigor, pero, se itera, dentro de los mínimos y máximos legales; la otra hipótesis, es
cuando en primer término se aplica la pena de prisión y luego se sustituye por multa, es decir, la primera se conmuta por la
segunda, lo cual es un beneficio en favor del inculpado pues la pena de prisión incide directamente sobre su persona, en
tanto que la multa afecta sólo a su patrimonio, pero no restringe el bien jurídico consistente en su libertad, de lo que se
sigue que la sanción económica le es más benigna, constituyendo por ende un beneficio aplicable siempre y cuando se
reúnan los requisitos que la propia ley impone; la palabra sustituir, en el lenguaje jurídico, significa cambiar una cosa por
otra, es decir, que en esta segunda hipótesis, tratándose de la pena, se cambia la naturaleza de una sanción privativa de la
libertad por una de tipo económico, a diferencia de la primera, en que se impone como pena originaria la multa, bien
autónoma o en adición a la prisión; en este orden de ideas, si la pena originaria es la de prisión y es sustituida por multa, de
acuerdo con una recta interpretación de la parte final del artículo 29 del código sustantivo de la materia, la medida de la
sustitución será entonces, de un día multa, por un día de prisión, que incluso puede rebasar los quinientos días; de ahí que
la autoridad responsable actuó correctamente al cuantificar la multa sustitutiva de la pena, tomando como base los días que
constituyeron la sanción de que fue objeto el quejoso.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL TERCER CIRCUITO.
Amparo directo 298/95. Adán Santiago Martínez. 25 de enero de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Óscar Vázquez
Marín. Secretario: Ernesto Antonio Martínez Barba.
Amparo directo 2/96. Óscar Armando Hernández Casillas. 31 de enero de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Óscar
Vázquez Marín. Secretario: Ernesto Antonio Martínez Barba.
Amparo directo 20/96. Ernesto Rangel Gutiérrez. 29 de febrero de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Homero Ruiz
Velázquez. Secretario: Francisco Javier Villaseñor Casillas.
Amparo directo 51/96. Alfredo Palacios del Río. 20 de marzo de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Hugo Ricardo Ramos
Carreón. Secretario: Joel Sánchez Cortés.
Amparo directo 121/96. Raúl Flores Flores. 9 de mayo de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Hugo Ricardo Ramos
Carreón. Secretario: Joel Sánchez Cortés.
Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Novena Época. Tomo III. Junio de 1996. Tribunales Colegiados de Circuito. Página 652.
• MULTA, INDEBIDA SUSTITUCIÓN DE LA, POR MENOS JORNADAS DE TRABAJO EN FAVOR DE LA COMUNIDAD. Al
sustituirse la multa por jornadas de trabajo en favor de la comunidad, es evidente que esas jornadas de trabajo se
imponen como pena por la autoridad judicial y, por ende, en nada se refieren a una relación laboral con el Estado,
como equivocadamente lo sostiene la autoridad responsable, pues el sistema para sustituir la pena pecuniaria por
jornadas de trabajo en favor de la comunidad que establece el quinto párrafo del artículo 29 del Código Penal para
el Distrito Federal en Materia Común y para toda la República en Materia Federal, es claro al señalar que las
jornadas de trabajo que sustituyen la multa impuesta, deben ser equivalentes, o sea, en la misma proporción al
totalizar el monto de la sanción pecuniaria, es decir, que debe tomarse en consideración únicamente el salario
mínimo vigente en la época de la comisión del delito, pues tomar como base al realizar la sustitución, el salario
mínimo vigente en el momento de pronunciar sentencia, obliga a conceder el amparo para que se reduzca la pena
pecuniaria y sea equivalente por las jornadas de trabajo que correspondan, existiendo con tal actuación violación
de garantías por inexacta aplicación de la ley penal en cuestión.
TERCER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL PRIMER CIRCUITO.
Amparo directo 696/91. Juan Mateo Cruz Teófilo. 13 de septiembre de 1991. Unanimidad de votos. Ponente:
Carlos de Gortari Jiménez. Secretaria: Martha Yolanda García Verduzco.
Amparo directo 990/91. David Bretón Pozo. 16 de octubre de 1991. Unanimidad de votos. Ponente: Guillermo
Velasco Félix. Secretario: Tereso Ramos Hernández.
Amparo directo 1469/91. José Luis León Torres. 14 de noviembre de 1991. Unanimidad de votos. Ponente: Carlos
de Gortari Jiménez. Secretaria: Marina Elvira Velázquez Arias.
Amparo directo 1683/91. Juan Castañeda Ibarra. 15 de enero de 1992. Unanimidad de votos. Ponente: Carlos de
Gortari Jiménez. Secretario: Víctor Manuel Estrada Jungo.
Amparo directo 1696/91. Jesús Moreno Franco. 16 de enero de 1992. Unanimidad de votos. Ponente: Manuel
Morales Cruz. Secretario: Rafael Zamudio Arias.
Semanario Judicial de la Federación. Octava Época. Tomo XII. Agosto de 1993. Página 220.

Registro No. 163655

• Localización:
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXXII, Octubre de 2010
Página: 2978
Tesis: I.1o.P.110 P
Tesis Aislada
Materia(s): Penal

• CULPABILIDAD. PARA DETERMINARLA NO DEBE TOMARSE EN CUENTA EL PRONÓSTICO DE READAPTACIÓN SOCIAL DEL SENTENCIADO
(LEGISLACIÓN DEL DISTRITO FEDERAL).
• De la interpretación de los artículos 5, 70 y 72 del Código Penal para el Distrito Federal, se obtiene que la fijación del grado de culpabilidad se
encuentra regida por el criterio del reproche de culpabilidad del autor y no por el de su peligrosidad o temibilidad; a diferencia de éste, aquel criterio
descansa, básicamente, en la idea de que la recriminación debe recaer sobre el autor del ilícito sólo por su conexión con la conducta delictuosa, bajo
la premisa de castigarlo por lo que ha hecho, no por la forma de llevar su vida, por lo que es o por lo que se crea que vaya ser o hacer. Así, la
cuantificación de menor a mayor de esa culpabilidad -también denominada grado de culpabilidad- y que determina el quántum de la pena, depende
de la ponderación que haga el juzgador de los diversos factores enumerados en el citado artículo 72 en cuanto sirvan para reflejar la gravedad del
ilícito y la conducta del sentenciado en relación con ese hecho específico, de modo que los relativos a sus peculiaridades, enmarcados en las
fracciones I a VIII de ese precepto, sólo deben ser tomados en la medida en que sirvan para mostrar su personalidad en relación con el hecho
cometido, entre otras cosas, su ámbito de autodeterminación en la ejecución del ilícito. Y la menor o mayor probabilidad de readaptación social que
tenga un delincuente -revelada por indicios o por prueba pericial- no contribuye a esa finalidad porque no refleja sus circunstancias especiales
vinculadas al delito o al momento en que lo cometió, sino sólo, potencialmente, una conducta futura relacionada con la ejecución de la pena, la
manera en que la cumplirá y su reinserción en la sociedad, lo cual no se desconoce que podría ser útil para determinar si se imponen o no otras
penas distintas a la de prisión (por ejemplo: tratamiento en libertad, semilibertad, trabajo en beneficio de la víctima del delito o a favor de la
comunidad), algunas medidas de seguridad (por ejemplo: la supervisión de la autoridad o la prohibición de ir a un lugar determinado u obligación de
residir en él) o conceder los beneficios de sustitución de penas o suspensión condicional, pero no lo es para la cuantificación de su culpabilidad con
base en el delito que ha cometido.
PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL PRIMER CIRCUITO.
• Amparo directo 450/2009. 28 de enero de 2010. Unanimidad de votos. Ponente: Juan José Olvera López. Secretario: Benito Eliseo García Zamudio.
Amparo directo 127/2010. 20 de mayo de 2010. Unanimidad de votos. Ponente: Juan José Olvera López. Secretario: Benito Eliseo García Zamudio.
• Registro No. 163723

• Localización:
Novena Época
Instancia: Pleno
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXXII, Septiembre de 2010
Página: 23
Tesis: P./J. 86/2010
Jurisprudencia
Materia(s): Constitucional, Penal

• SUSPENSIÓN DE DERECHOS POLÍTICOS. CONTINÚA SURTIENDO EFECTOS AUNQUE EL SENTENCIADO SE ACOJA AL BENEFICIO DE LA
SUSPENSIÓN CONDICIONAL DE LA EJECUCIÓN DE LA PENA.
• El artículo 18 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece que las autoridades organizarán un sistema penal
encaminado a la readaptación social del delincuente, mediante instituciones y medidas que orientan la política criminal y penitenciaria
del Estado a ese objetivo, lo que deriva en beneficios que pueden o deben otorgarse cuando proceda. Así, el Código Penal para el
Distrito Federal regula dos beneficios para quien sea condenado por la comisión de un delito: 1) La sustitución de lapena de prisión, y 2)
La suspensión condicional de la ejecución de la pena; instituciones cuyo fin es evitar la reincidencia y los perjuicios que acarrea para los
delincuentes primarios el ejemplo de los habituales. Ahora bien, respecto de la suspensión condicional de la ejecución de la pena se
puntualiza que: a) Es un beneficio que el Juez puede o no conceder atento a ciertas condiciones, las cuales incluso cumplidas
formalmente, pueden no inclinarlo a otorgarla (peligrosidad manifiesta entre otras); b) La garantía fijada busca asegurar la presentación
periódica del sentenciado ante la autoridad y el logro de las demás finalidades previstas en la ley penal; y, c) Garantiza la sujeción del
beneficiado a la autoridad por el término y en relación con una sanción ya impuesta. Por tanto, cuando se opte por dicho beneficio,
atendiendo a la naturaleza accesoria a lapena de prisión de la suspensión de los derechos políticos, debe entenderse que, como
la pena privativa de libertad no se modifica, atento a lo dispuesto en la fracción III del artículo 38 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, permanecen suspendidos los derechos políticos del sentenciado hasta en tanto no se extinga aquélla.
• Contradicción de tesis 15/2010. Entre las sustentadas por el Cuarto y el Noveno Tribunales Colegiados, ambos en Materia Penal del
Primer Circuito. 22 de junio de 2010. Mayoría de diez votos. Disidente: Margarita Beatriz Luna Ramos. Ponente: Olga Sánchez Cordero
de García Villegas. Secretario: Jorge Roberto Ordóñez Escobar.
El Tribunal Pleno, el seis de septiembre en curso, aprobó, con el número 86/2010, la tesis jurisprudencial que antecede. México, Distrito
Federal, a seis de septiembre de dos mil diez.
• Registro No. 164121

• Localización:
Novena Época
Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito
Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta
XXXII, Agosto de 2010
Página: 2258
Tesis: VI.2o.P.131 P
Tesis Aislada
Materia(s): Penal

• CONMUTACIÓN DE LA PENA. UNA VEZ EJECUTORIADA LA SENTENCIA QUE LA CONCEDE, CORRESPONDE AL


EJECUTIVO DEL ESTADO Y NO A LA AUTORIDAD JUDICIAL PRONUNCIARSE RESPECTO DE LA SOLICITUD DE
SUSTITUCIÓN DE AQUÉLLA (LEGISLACIÓN DEL ESTADO DE PUEBLA).
• El párrafo segundo del artículo 109 del Código de Defensa Social del Estado de Puebla es puntual al definir que el
gobernador de la entidad podrá autorizar la conmutación de las sanciones después de impuestas en sentencia
ejecutoriada, conforme a las disposiciones correspondientes en lo conducente. Esto es, una vez que causa ejecutoria
la sentencia, ya no corresponde a la autoridad judicial determinar lo relativo a la conmutación de las sanciones, pues
el legislador consideró que tal tarea debe recaer en el Ejecutivo, quien es precisamente el encargado de ejecutarlas.
Por tanto, si una vez que ha causado estado la sentencia en la que se concedió uno de los beneficios contemplados
en el artículo 100 del mencionado código, el sentenciado beneficiado pide directamente a la autoridad judicial que
modifique lo resuelto, a fin de que sea sustituido el beneficio concedido por otro que contemple el aludido
dispositivo, es inconcuso que no puede pronunciarse al respecto, pues se insiste, hay prevención que indica que al
causar ejecutoria la sentencia condenatoria, su ejecución pasa a la autoridad administrativa, por lo que, en su caso,
sería esta última la facultada para proveer sobre la referida solicitud.
SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA PENAL DEL SEXTO CIRCUITO.
• Amparo en revisión 32/2010. 18 de febrero de 2010. Unanimidad de votos. Ponente: Diógenes Cruz Figueroa.
Secretario: Francisco Marroquín Arredondo.
Tarea
• Concepto de individualización de la pena

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