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Textos Universitarios
Libros deLUZ

El Vicenectorado Académico de la Universidad del Zulia, consciente

H.acu uNA Enc,a EcoúGICA

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DESDE I,N TIVTNNCULTTTRALIDAD

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aportes, icar el acer-
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Universilartos se hace impon-
derable y permite bl úayecto infinito de
la búsqueda del saber. Wilde Leer un libro es
leernos a nosotros mismos. Y es esta una noble y extraordinariatarea.

Profa. Judlth Aular de Durón

Vlcerrector¡ Académlca de l¡ Unlversld¡d del Zulla

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 H,acu uNA Ertc.a EcoñGICA
DESDE NA TIVTNNCULTURALIDAD

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Eo¡c¡ox¡s ogl VrcEnlgcronr¡o AcrpÉuIco

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@ Hwia ww Ética Ecológica desdq la In¡ercakuralidad.

Btárniz $A¡re[Dz- Prngri : '

Colección Textos Universit¿rios ,

Ediciones del Mcerrectorado Acadánico

Universidad del Zulia
Dnotcrroru,n
Primera edición, 2011.

Dlseño y culdaüo do edición:

Consejo de Publioaciones de la Universidad del Zulia - Jannieliz Leal
Ala memoria de
Mamá Blanca
Impreclón: Mujer bañada en las
Producciones Editoriates C.A. alas de la mariposa reinita.
proodito@gmail.com - 027 4-417 .M.60 / M16-67 4.35.57
Mujer poseedora de la magia
Mérida - Venea¡ela
de la palabra,
Hecho el Depósito de I*y:
DEpósito Legal; LF t 85201 1 1004233
ISBN: 978.980"/;02-A74-2
Roservados todos los dotucüos

Eitelibro ha sido arbitrado por las instarlciq corrcspondientes.

@ de ests edición
Ediciones del Vicerrectorado Ac¿démico
UniversidaddelZtúta'l ,r '

ImpresoenVenezuela ,, ,:'
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 f¡'tnrcn

DeDlcAroRrA...... 7
Epfcnlrus...... II
OnecIóN Auenr¡on...... 1 I
Yo coNocl Los Ansolrs...... 13
INrnoouccróN...... 17

Cerhu¡.o I...25
I¡nencur,n:n¡¡-IDi\D Y Fnosorfl Snmóuce...... 27

Cmfruro II......39
Le TrBnne: Nrf,{rRIz Ecoloclsre On¡annnre'.... 41

C,cPfTwo III......59
DesAFfos DEL eLJEHAcER ru.oséRco eN Lmruo,l¡'tÉn¡ce...... 61
. LeAuezoxh: Pu¡¡ro DE ENcuENrRo on Lmn*oeuÉn¡c¡...... 65
. Inrrecn: Gnr¡o ns LA ......77
l.¡AruRAtEzA
. El Aou¡.: Denncno Nmur¡¡, DBL sER nt¡rtleNo...... 91

Cnrhuro IV......103
VrsroxnNoo t o, Énco Ecou5qct Lern¡on"mruc.lr.rA A PARnR or m vtslóq
»r Frósonos v Ft¡ó§oms...... 105

E¡¡ruque Dusser.: Eucn ps Ln LBTRAc¡óN....'. 105

Fnexz Hrxrrr,rurrurnr: Éuco orI, BEI.¡ CoMúN...... 109
LroN.mno Borr: Énce os LA DIcNIDAD pT LA TreRRA...... 113
ENp¡qus Lrrr: Énce AMsr¡r.ne1...... 1 I I
G¡,on¡l Co¡assAñl: Étrcn, GÉNnno v NAruRALEZA...... 122
Ivoxe GTSARA: Ecorrunusuo ...... 127
MARÍA Nmws R¡co: GÉNeno YAlour.¡rs......132

Crplnro V......141
Hrc¡r o,rno Ono¡x ps t¿Vp1...,.. L43
Bm¡mnr¡tr...... 159
 Epfenqrns

OrucIóx AunnrNnrl
Oru, GntN Espfrura

Cuya voz oigo en el viento

y cuya respiración da vida al universo entero,
¡escrlchame!
Soy pequeño y débil; necesito de tu fuerza y tu sabiduría.

Haz que camine en la belleza

y haz que mis ojos contemplen siempre
el rojo púrpura de la puesta del sol.
Haz que mis manos respeten las cosas que has creado
y agtdiza mi oído para oír tu voz.
Hazme sabio para entender
las cosas que has enseñado a mi pueblo.
Haz que aprenda las lecciones que has escondido
en cada hoja y cada roca.

Pido fuerza, no para ser más grande que mi hermano,

sino para combatir a mi mayor enemigo -yo mismo.
Hazme estar sientpre dispuesto para ir a ti
con manos limpias y mirada franca,
de modo que cuando la vida se apague,
como cuando se pone el sol,
mi esplritu llegue a ti sin tener que avergonzanne.
Yo Cotvoci t os Annoms

Yo conocí los rárboles

Talveznadie quizá sepa
Que una vez existieron
Y tampoco sepan
Qué era un árbol
Yo presencié su muerte,
es cierto,
¡
Terriblemente cierto !

Pero prirnero quiero explicades

cómo eran.
Es muy diflcil describirlos
Pues, incluso, el color que tenian
Ya no existe.
Ellos inventaron ese color.
Y ellos se 1o lleva¡on con la muerte,
El oxígeno qr¡e nos permite vivir
Lo produjeron ellos
Cuando aún esta estrella helada
En tonro a la que giramos
Tenla fuego,
Hoy 1o traemos de las
galaxias más lejanas
En capsulas atómicas.
Estas rocas ennegrecidas tienen
Aún las huellas grabadas
de sus formas extraflas...
Estaban asidas a la tierra y se movían
Con el viento como unas bailarinas
Y su color es fosforescente
Y üodos los años se llenaban
De mil colores
Como chispas eléctricas
Cuando chocan los rayos láser
E inundan el aire
De mágicos perfumes.
Enbncog, no tcnlamo¡
oror,findra! do ámb¡r
 Beerruz SÁNcsez Pn¡m
y podlamos besarnos en la boca.
Después, cuando venla el verano
podíamos comer unas formas extrañas
y llegaban volando naves vivas que
se movían como nuestros vehículos celestes.
Esas naves eran como nosotros
Unas diminutas con alas transparentes
Y otras radiantes y veloces que compartían el mundo
Con nosotros...
a los árboles tan solo se les oía
cuando los movía el viento...
Después, no sé cuiándo, alguien inventó
el hacha
después el fuego...
Y ya no nos comíamos lo que nos daban,
sino que comenzamos
a tumbados, a darles fuego,
Hasta que un día
unos que eran dueños de todo,
decidieron para cuidar sus fiibricas
todo lo que hablan inventado
y robado a otros,
lanza¡ la bomba de neuüones
que sólo acaba con la vida.
...Apenas tuvimos
tiempo de enterrarnos vivos
de meternos bajo estas rocas negras
Y con estas mismas escafandras
logramos volver a salir ofravez
sobre el planeta.
En{onces, no habla nada viviente,
todas las fábricas intactas
con cerebros electrónicos movidos
desde un planeta hueco, artificial
a control remoto,
en manos de aquella pandilla de asesinos.
...Los que quedamos no podíamos vemos
las caras, pues
Nuestras ca¡etas de cristal
estaban empañadas de lágrimas
y a los que iban naciendo
Itr
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
yo les dije: - Entonces, era hermosa la vida
cuando yo conocí los ¡árboles
- pero aún más doloroso,
No contentos con haber automatizado
LaTierra
quisieron saltar a otra galaxia
fue así como estalló la tierra,
en una inmensa bola de hidrógeno
igual al Sol que conocí cuando era niño...
...Hoy ya no existe y estas palabras
que oyen los seres de algún planeta lejano
donde estas condiciones para
la vida se haya dado,
Son de una grabación que flota perdida
En el espacio cósmico
De pronto, oigo unas carnpanas al vuelo
y una sinfonía de cantos extraños
me llena de una inmensa alegría...
Siento que no puedo abrir los ojos
porque una luz irisada me encandila
y un aroma de eucaliptos y jazmines
me llena los pulmones,
Una algarabla de risas de niños que corren
tras una mariposa, me despierta.
Salto a la ventana
Toco todas las hojas.
Miro el verdor de Terepaima
Tomo a mis hijos
y por enfre los helechos de Dafrre
Grito: - ¡Estamos vivos!
Miro entre los cerros, que
unos niños descalzos
y harapientosjuegan en una cha¡ca
Y veo que ahora más que nunca
tiene más sentido mi vida
Luchar hasta vencer.
Fnuro Vry¿,s
 fNrnooacctóN

"Quetemos poder imaginar el mundo

tal como nunca ha sido."
Pessoa

Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad es

un estudio que surge a partir de todas aquellas inquietudes que
nos perturban cada día, cuando pensamos en el futuro de nuestro
planeta. Es una reflexión sobre los tiempos del origen del amerindio
y los tiempos presentes de nuestro mundo en agonla latente, lo cual
es una estela encendida que forma parte de nuestra§ vidas como
seres humanos en un mundo que lastima.

Un grito ronco y profundo retumba de risco en risco,

desciende rodando de la montarla y se desvanece en la lejana
oscuridad de la noche. Es un estallido de pena salvaje e insolente,
y un cántico de desprecio por todas las adversidades de este
mundo.l

Nuestro objetivo a partir de esta investigación es contribuir

con los estudios de la filosofia latinoamericana y ecológicos que
apuntan hacia una litica Ecológica para lo cual creemos que
debemos pafir del pensamiento ancestral, estableciendo un diálogo
desde la Filosofia Intercultural en la vía del diálogo filosófico hacia
oho orden de la vida, en su relación con el pensamiento ético en
el contexto latinoamericano y, con fundamental atención en el ser
humano en comunión con la nafixaleza.

En este horizonte nuestra investigación se enmarca desde los

postulados de la Filosofia Intercultural, la cual da muestras de ser
una voz que se levanta para decirle a la humanidad que hay un
pensamiento latente en nuestro continente que es importante conocer
y reconocer, pues los tiempos han llegado para nuesüa realidad
fi losófi ca latinoamericana.

. I Aldo l¡oDold, Un¡ Étlo¡ d¡ l¡ llorr, 2000, p. I17.

t
I

¡ro, I ¡r ia .i:E,r¡ .c,' tt'

 Brerruz SANcnsz PTRELA
La filosofia intercultural es, pues la filosofia que brota de la
actitud de un pensamiento que, sabiendo de sus límites culturales,
no solamente tolera otros pensadores sino que se solidariza con
ellos, porque precisamente por reconocerlos como mundos
propioi, e§ consciente de que es con la ayuda de esos universos
iomo puede abrirse a lo universal. La filosofia intercultural
quiere ier, en una palabra, una filosofia que se practica desde la
mutua asistencia.2
Es el momento para que los estudiosos de la filosofia
latinoamericana reconozcan la manifestación filosófica de las
culturas amerindias y despierten de su letargo histórico para ir más
allá del parámetro filosófico establecido por Occidente. Desde la
diferenclalidad del pensamiento se van abriendo §urcos para dar
paso a offos horizontes para la filosofia latinoamericana, pues la
particularidad del pensamiento amerindio le da la distinción que é1
mismo posee porque se trata de una filosofia que es abordada desde
el sujeto vivo, es decir, donde lanafixaleza tiene la particularidad de
ser sagrada, por lo tanto, tiene como centro filosófico el origen de la
vida misma, partiendo del principio de un mundo de armonía plena
enfte el ser humano y lanaitraleza.
Entonces es remarcable que la ética ecológica latinoamericana
será estudiada desde el pensamiento amerindio, pues éste parte de
un principio, es decir de la naturaleza, c:uya particularidad ética
está radicalizada al percibir la natt¡raleza como sujeto viviente,
generalmente representada en potencias divinas.
En esta perspectiva hemos interpretado algunos textos literarios,
mitos del origen, que plasman los saberes amerindios, partiendo a
analizarlos desde los elementos de interpretación que nos proporciona
la hermenéutica. "El término «hermenéutica» remite a la tarea del
intérprete o fiaductor, que interpreta y comunica algo que resulta
iniomprensible porque estrá dicho en una lengua extraña, aunque sea
en la lengua de los dioses, hecha de señales y signos."3
Vale resaltar que el mensaje amerindio ha sido interpretado
basiindonos en la hermenéutica filosófica de Gadamer, quien
crítica el discurso dogmático que no da cabida al lenguaje de la
interpretación, el cual es objeto de nuestro estudio. "Ahor& estamos
2 Rarll Fomet-Betancourt, Interculturalidad y Globalización, 1998' p. l5l.
3 Hans-Goorg Gadamer, Verdad y Método, 1999, p' 635.
rht f¿
Hacia una Éfica Ecológica desde la InterculturalidaC
en condiciones de comprender que este giro del hacer de la cosa
misma, del acceso del sentido al lenguaje apunta a una estructua
universal-ontológica, a la constitución fundamental de todo aquello
hacia lo que puede volverse la comprensión.l'a De tal manera, la
hermenéutica según Gadamer nos devuelve su propia universalidad
apartir de la interpretación, en tanto que determina a ésta un sentido
universal al lenguaje, tal como el lenguaje del arte, el lenguaje de las
cosas, el lenguaje de la naturaleza que en todo caso es el lenguaje
del mito.
Desde el mito podemos interpretar el pensamiento mítico como
la manifestación de una racionalidad que expresa la palabra de los
dioses. "El mito deviene un problema filosófico en la medida que
expresa una orientación originaria del espíritu, una manera entre
otras para la conciencia de organizar el mundo."5 Es decir, el mito
nos remite al problema del origen, lo cual a su vez nos conduce a la
nattraleza en su cualidad de sujeto primordial.
También fundamentarnos nuesffa investigación en la Teoría
del Género: "Los estudios del género poseen una perspectiva de
análisis de las diferencias en general, que denuncialalógicabinaria
con que se perciben."6 Así mismo consideramos importante acotar
que el sentido de la construcción social forma parte de nuestro
planteamiento. "Otro rasgo de la categoría género para tener en
cuenta es que se trata dt t:rira construcción histórico-social, o sea que
se fue produciendo ylo largo del tiempo de distintas maneras."T De
tal manera que la ferspectiva del género nos permite visionar una
sociedad más justa establecida desde la igualdad. En esta dimensión,
hacemos referencia al Ecofeminismo.
La perspectiva ecofeminista nos abre hacia un referente
de la eiperiencia humana, más amplio e inclusivo que el
transmitiéo corrientemente por nuestra cultura. Ese referente
debe ser pensado entonos los niveles de nuestro conocimiento y
en el propio rnodo en que lo pensamos.s
4ldem. p. 5ó7.
5 Ernst Cassirer, La Philosophie des Formes Symboliques (tome II), 1912, p. 18
(Ttaducción propia).
6 Mabol Burin c lrene Moler, Género y Familia, 2001,p'20.
7ldom, p, 21,
t lvono Oob¡¡r, Intuiclonor Ecofomini¡tas, 2000, p'35.
l,
 Belrnz SÁNcHsz P¡REre
Así pues, encontramos que el ecofeminismo es una visión ética,
en tanto que pasa por asimilar la igualdad y la justicia social en
el mundo, partiendo de algunos de sus principios, es decir, la vida
misma, en tanto ésta es una de las vías de establecimiento pam una
conciencia más humana, por supuesto, percibida desde una moral
ciudadana de justicia e igualdad.
En este orden, también nos fundamentamos en la Teoría Crítica
o Social, en la medida que visionamos un cambio de mentalidad hacia
una conciencia ecológica a fin de labrar una ética que contribuya a
salvaguardar la vida.
La teoría social está relacionada con las alternativas
históricas que amenazan a la sociedad establecidas como fuerzas
y tendencias subversivas. Los valores ligados a las alternativas se
convierten en hechos al ser trasladados a la realidad mediante la
práctica histórica. Los conceptos teóricos culminan en el cambio
social:"e
La sociedad industrial ha contribuido en desarrollar un llamado
progreso fundamentado en la tecno-ciencia que ha llegado a
conformar todo un sistema de poder y de dominio, basado en la mega-
productividad que ha generado la destrucción de la naf;.raleza.
La unión de una creciente productividad y una creciente
destructividad; la inminente amenaza de aniquilación; la
capitulación del pensamiento, la esperatza y el temor a las
decisiones de los poderes existentes; la preservación de la
miseria frente a una riqueza sin precedentes constituyen la más
imparcial acusación: incluso si estos elementos no son la raison
d'étre de una sociedad sino sólo sus consecuencias; su pomposa
racionalidad, que propaga la eficacia y el crecimiento, es en si
misma irracional.ro
'Las sociedades del mundo pennanecen inertes ante la inminente
necesidad de conciliarse entre ellas mismas paxa conservar la vida
humana a partir de la naturaleza. Por lo cual se impone la necesidad
de emanar cambios cualitativos desde una real voluntad política
para el logro de un cambio social y político. Un cambio radical es
lo que podría generar un cambio social donde el ser humano y la
¡atrxaleza sean un binomio común, para gestar otras formas de vida
9 Herbert Marcuse, El Hombre Unidimeneional,1969, p.22,
l0 Horbort Marcueo, Idem. p. 23.
á ll
Haciq una Ética Ecoló§ca desde la Interculturalidad
donde la existencia humana desa:rolle su pensamiento hacia estilos
más avanzados para una vida mejor y más digna.
Hemos desarrollado nuestra investigación a partir de cinco
capítulos. El primer capítulo, Interculturalidad y Filosofla
Simbólica amerindia, donde se expone algunos elementos de
la filosofía mltica desde la interculturalidad, tomando como
punto central el lenguaje simbólico del mito, en virtud de
descubrir en el pensamiento amerindio desde su cosmogonía,
una matriz ecológica, lo cual a nuestra manera de ver expresa
una "ética ecológica", puesto que en su imaginario, la naturaleza
constituye un ente sagrado, por lo tanto de respeto, siendo esto
una muestra de una conciencia viviente. De hecho, encontramos
que generalmente la tierra es simbolizada como la Madre Tierra,
por ser la productora y reproductora de toda vida.
En el segundo capítulo, La Tierra: Símbolo Sagrado en
las Sociedades Amerindias, encontramos una matriz ecológica
originaria, interpretada en el mensaje mítico a partir de algunas
mitos amerindios para resaltar precisamente esa figuración
humanizada y divinizada, que se nos presenta en su cosmogonía
como un legado ejemplar que queda pua la posteridad como
modelo ético a seguir, lo cual serla necesario tomar en cuenta como
un elemento mafriz en el diálogo filosófico referido a una ética
ecológica latinoamericana. Además, esto se manifiesta en la praxis
y en la organización social que expresa una postura filosófica sobre
la vida, centrada en el respeto y en la armonía con la nattxaleza.
Desde allí se aprecia el ideal comunitario predominante, en tanto
que la naturaleza para el amerindio es un bien comunitario que pone
de manifiesto el ideal colectivo por encima del individual que es el
que prevalece en los diversos postulados de la ética en la filosofia
occidental.
El tercer capítulo constituye una reflexión sobre el rol que juega
la racionalidad tecnológica que choca con la ecologí4 desde el visor de
los desafios octuales del quehacerfilosófico, en un momento donde
la humanidad está en peligro. Desa:rollamos este punto a través de
hes subcaplfulos, primeramente nos referimos a laAmazonía como
una de las regiones más importante del planeta que comparten varios
palseB latinoamericanos, llevando a cabo proyectos desarrollistas
y de cxplotación dc la naturaleza sin tomar en cuenta la fragilidad
 Brernz SANu¡Bz P¡nnr,e Hacia una Ética Ecológica desde la Inrerculturalidad

del ecosistema arrnzínico ni la riqueza cultural de las sociedades orden ecológico para una vida más humana, a partir de Bateson,
amerindias que allí habit¿n milenariamente. Segundo, tratamos el Varela, Maturama, Lovelock, quienes desde una visión científica-
caso de Imataca, para exponer a manera de demostación, sobre filosófica interpretan la importante relación ambiental y ecológica
hechos que acontecen en la Amazonia venezolana. Estos hechos con el ser humano bajo una visión verdaderamente más humana,
los hemos relacionamos con la obra de Jean Boudrillard, El Crimen teniendo como principio el respeto al planeta. Es decir, propiamente
Perfecto, como muestra de la inconciencia y la desidia de nuestros la ética en si misma está referida a guardar toda vida, fundamentada
gobernantes. En el tercero, abordamos el tema referido al Agua, en el bien y en la justicia en el mundo.
iniciando éste desde la interpretación de esta figura en algunas
Así pues concebimos a la filosofia desde una concepción social,
sociedades amerindias, que llegó a constituir un símbolo sagrado.
polÍtica y cultural para cultivar el diálogo de saberes firosóficos
Partiendo de esta interpretación hemos analizado lo que representa que no es más que el encuentro de ideas vivas, tan necesarias en
el agua como elemento vital, además como derecho natural del ser
este momento cuando la humanidad se encuentra sumergida en un
humano, pues este preciado líquido está en la mira de muchos países,
conflicto mundial que construye las bases para generar un mal mayor
pero como mina de explotación desde la perspectiva economicista.
que luego sólo nos quedaría lamentar.
En el cuarto capítulo, hemos abordado la visión ética, desde
destacados filósofos y filósofas que interpretan el pensamiento
Estamos en una era que nos obliga a buscar otras vías para
latinoamericano, entre ellos: Enrique Dussel, quien desde una conciliar y llegar a desarrollar una conciencia ecológica que
contribuya a evitar el desorden universal.
visión liberadora concibe la Ética de la Liberación, tomando
partido por los olvidados de la tierra. Franz Hinkelammert, desde el Desde este particular consideramos que la filosofia tiene un rol
pensamiento marxista y la teología de la liberación visiona la Ética protagónico en la medida que lo ético es propiamente el
del Bien Común. Leonardo Boff, quien desde un plano espiritual comportamiento como una de las manifestaciones que descubren al
teológico y social visiona la Ética de la Dignidad de la Tierra. ser humano en su real condición de humano.
Enrique Leff, quien desde la concepción de la educación ambiental
plantea h ÉticaAmbiental, partiendo de lo autosustent¿ble como una
vía para abordar la gravedad ecológica del planeta y además aboga
por una epistemología ambiental que está referida a una concepción
ética basada en el diálogo de saberes tradicionales en base a estudios
críticos ambientales. Gloria Comesaña, quien desde la Filosofia del
Género nos conduce a encontramos con una concepción Ética en
su relación con la natwaleza que interpreta la igualdad y la justicia
enfre hombres y mujeres, a partir del pensamiento arendtiano
relacionando el tema del género con la situación de explotación de
la naturalezaAsí mismo, se destaca lvone Geba¡a, quien visiona una
concepción ética en el respeto y la conservación de la nafixaleza,
partiendo del Ecofeminismo y María Nieve Rico, también desde
la filosofía del género nos plantea una Ética del Ambiente desde
los derechos humanos, incluyendo un ambiente más sano como r¡n
derecho de los hombres y de las mqjeres.
En el quinto capítulo, que hemos denominado Hacia oho Orden
I de la Vida,.en{ocamos como perentoria necesidad histórica otro
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 I¡,¡rnncat naRALIDAD v Fruosori¿ Sru¡óttc¡ Attnru¡'tou

"Yo vengo a traer lasflores. Y que no vayan q caer rnás

sus hojas! En verdod, nuestra madre en medio de las
flores de plata y entre el viento de oro nos trajo."
Canto kuna

La cosmogonía amerindia conforma un universo de signifi cados

de la naturaLeza que se nos presenta como un libro escrito
simbólicamente. Desde la palabra mítica, la natl.valeza juega un
rol protagónico que va definiendo el origen y la existencia de todo.
En esta perspectiva hemos interpretado el pensamiento de algunas
sociedades amerindias, a fin de descubrir en su cosmogonía una
matriz ecológica, la misma expresa una "ética ecológica," puesto
que en el imaginario amerindio ella constituye una conciencia
viviente.
La cosmogonía amerindia plasma de una forma simbólica
elementos filosóficos que no están a simple vista, por lo tanto,
para llegar a su comprensión es necesario sumergirse en el análisis
hermenéutico para llegar hasta el lenguaje mítico del pensamiento.
"En el pensamiento prehispánico, la blaboración de una cosmogonía
ofrece el más valioso elemento dentro del pensamiento mitológico
para descubrir la cosmovisión y los elementos filosóficos de su
pensamiento que, obviamente, se encuentran envueltos en el mito."lr
Esto 1o podemos apreciar cuando analizamos el mensaje mltico
que resalta precisamente esa figuración humanizada y divinizada
de la nafuraleza, por ello consideramos que es perentorio tomar en
cuenta este elemento como base en las investigaciones y reflexiones
referidas a lo ético ecológico latinoamericano.

Esta dimensión mltica también se manifiesta en la praxis y en

la organización societaria que resguarda una posh¡ra filosófica sobre
la vida, centada en cl respeto y en la armonía con la naturaleza. Así
mismo se aprecia en el ideal comunitario predominante, es decir del
bien común, que pone de manifiesto el ideal colectivo por encima
del individual que prevalece en los diversos postulados de la ética
en la filosofia occidental.

II Kr¡lo¡ Ncvsno y Blr¡it Gomctomborg, Intoducción a la Historia dol

Pon¡¡mlonto Lrtinormcrio¡no, 2002, p. 5,
I
I

¡h ',ffi,, §
 Bnern¡z SANcHsz PrREr,e
El pensamiento mítico es develado a partir de la narrativa
literaria que se manifiesta bajo un principio espiritual que inspira
la naítraleza, donde ella actua bajo una posición protectora pero a
veces también destructora, pues allí se concenka la idea del principio
y fin. Es decir, son los dioses, quienes generan la vida y la protección
pero también la muerte, el vacío, la tada. "Por ello constituye la
obra de la creación un modelo ejemplar diseñado y creado por los
dioses."l2
Llamaremos ética ecológica amerindia a aquellos elementos
filosóficos que se radicalizan en el pensamiento mítico desde
su concepción del origen. Esto 1o iremos demostrando a lo largo
del desarollo de este trabajo, para lo cual partimos del análisis e
interpretación de algunos textos míticos amerindios, puesto que los
mitos como expresión cultural se caracteriza¡ pot su modalidad
propia:
Habría que aprender a superar, sin sentirse incómodo o con
mala conciencia, los límites de nuestra cultura escrita, para oír y
darle su lugar también a otras fuentes trasmisoras de pensamiento,
cuyas voces no objetivan su decir en la escritura, sino que lo
transmiten en su específica cultura oral.r3
La naturaleza es la esencia y presencia de la vida. Por ello
fue venerada como ente sagrado, fue respetada por todos, siendo
estimulado dicho respeto por chamanes, sacerdotes y rninistros
comunitarios. Dejando huella testimonial oral o escrita en los
cantos, en la poesla y en los mitos de la creación.
Lapalabra simbólica es la palabra originaria como voz genuina
del espíritu, en este sentido, entramos a descubrir el carácter y
la orientacióri básica de la conciencia mitológica, a los fines de
interpretar el pensamiento mítico-étnico que se mantiene noble en
sú propia modalidad.
Se equipara a una escritu¡a cifrada que sólo resulta legible
y comprensible para aquel que posea la clave de ella, esto es,
para aquel a quien los contenidos particulares de esta conciencia
fundamentalmente no son sino signos convencionales de "algo
más" que no está contenido en ellos. A partir de aqul resultan
12 Mircea Eliade, Traité d'Histoire des religions, 1977,p.46 (traducción propia).
!
13 Raúl Fornet-Betancourt, Hacia una Filosofla Intorcultural Latinoamorlcana
1994,p.47,
t
& {¡.¡
Hacia una Etica Ecológica desde la Interculruralidad
las distintas modalidades y direcciones de la interpretación de
los mitos, los intentos para poner en claro el sentido teorético o
moral que ocultan los mitos.',ra
Es allí en esa escritura simbolizada donde están presentes
las distintas modalidades del mito que para asimilarlas debemos
sumergirnos a interpretarlas a fin de comprender y conocer'la
conciencia mítica. Este tiene un estilo específico qr" ,á fundamenta
en su propia "lógica" puesta de manifiesto en la particularidad del
mito. Esta particularidad tiene sus propios dominios que rompen
totalmente con el paradigma de la racionalidad occidental. se úata
pues, de una ética de la vida, presente en los valores culturales y
ambient¿les.
La natwaleza o _la ecología es semejante a la ética porque
pone en_claro que toda la vida está relacionada de modo integral
dentro de una sola comunidad, que ra caridad de la vida depeirde
d:_qyg se respeten y mantengan relaciones que posibiliien la
vida.15
Abordar la narrativa literaria mítica para comprender el lenguaje
simbólico, es pues, el inicio del diálogo filosóficó enffe las ..rii*u,
étnicas y las no étnicas. Dicho diálogo nos lleva a conocer otros
saberes desde la interculturalidad.
La filosofia intercultural y, dentro de ella, la etnofilosofia, no
son más que rostos de una filosofia liberacionista, la que tiene, eitre
otros de sus objetos, aquellas reraciones entre cultura. y átniu.,
pero también y primariamente, enfrentar el patriarcalismo como
categoría omnicomprensiva de todas las formas de dominación y
subordinación humana. t6
En este caso, nos referimos a la filosofia intercultural que
indudablemente visiona e interpreta a los pueblos étnicos. Esto
es expresado a través de la oralidad, en la medida que desde el
imaginario étnico exponen sus valores espiritualás, morales,
familiares, comunitarios, ecológicos y fundamentalmente éticos.
La palabra amerindia desde la interculturalidad estudiaría las
particularidades del pensamiento étnico, al mismo tiempo que
14 Ernst Cacsirer, Filosofla dc las Formas Simbólicas (Tomo II), 199g, p.62.
15 Roy H. tr,tay, Etice y Modio Ambion to,20K, p. 47 .
Artr¡rc Rol¡, Crmlnor dr l¡ Filo¡oftr Lrtinormoripan¡, 2001, p.
16 l0l.
 Bemr.¡z SANmBz PnBLe
sentarla las bases para la liberación del ser humano, en tanto que
sería el rompimiento de las cadenas colonialista que gestaron la
construcción del pensamiento filosófico desde el ángulo de la
dominación que determinó las relaciones de poder sobre nuesffo
continente.
Esta dimensión de la palabra esüá expresada desde la liberación
del pensar, en razó¡ de ser ésta la que trasciende desde el sujeto
diñ V pir.*roru de su propia dignidad. A esta 1a denominamos
"{ttca-eóológica" latinoamericana, lo cual se evidencia en su
particularidaá espiritual, en su cosmogonía, qae la interpretamos
desde la diversidad cultural que expresa el ideal societario como
una causa común pero imbuida en la especificad de los saberes
tradicionales.
La diversidad cultural en el mundo es un hecho, y es un
hecho que plantea problemas particulqmente agudos en el mundo
iberoamericano. Li gran mayoría de los países latinoamericanos;
y los países ibériós, están constituidos por muy . diversas
tadiciones culturales que han confluido en el pasado y que
coexisten hoy en día. Déntro de esta pluralidad, muchos grupos
étnicos consiitoyen minorías con formas de vida peculiares que
suelen ser diferéntes de los que se han vuelto dominantes en cada
uno de nuestros países. como cuestión histórica, esto requiere
de una elucidación alaluz de teorías sociales que expliquen y
permiten comprender esos fenómenos.l7
Aunque 1o ético como categorla es una creación netamente
occidentai, encontramos que en el pensamiento amerindio está
presente, evidentemente. No está definido sino que lo.enconffamos
il partir de |a interpretación hermenéutica en sus na¡raciones mlticas,
lo- cual expresa que existen claros postulados de éticas diferentes
en oüas sociedades, de acuerdo a sus formas culturales' '?or
cierto: se hata de éticas no tan elaboradas, donde los problemas de
fundamentación no han estado en un primer plano y donde sobre
todo existe una dependencia manifiesta-dc la étioa con re§pecto a la
religión."18
1a conciencia amerindia se abre a la reafirmación de un
pensamiento filosófico, tan golpeado históricamento, pues se tfata
del reconocimiento a su pensamiento, el OUel eng6nüamos reflejado
en el mito.
,.El mito se convierte en urn problema'filosófico en
ffica y Diversidad cultural, lgg7, p. 5.
18 David sobrevilla, Ética Etnocéntrica y Ética univere¡I. En León Olivc, Ética
y
Diversidad Cultural, p. 61, pp. 59'70.
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
la medida que se expresa en él una orientación del espíritu, una
manera entre otras para la conciencia de organizar el mundo."le
Evidenciamos que el mito trasciende la razón para hacerse
eco de un argumento que explica el fenómeno de la creación y su
relación con la existencia y todo 1o que representa la presencia de
Dios en su relación con la vida, instancia sagrada, significada en
el pensamiento mltico en otra dimensión delaruz6n, es decir, de
la raz6n filosófica Amerindia. "Propiamente, la filosofía hoy se
concibe a si misma como una reflexión sobre la cultura, siendo
el comportamiento ético y político una de las manifestaciones
culturales talvez más necesitadas de mayor reflexión."2o
Desde la filosofia intercultural encontramos elementos que nos
permiten fundamentar filosóficamente al pensamiento amerindio.
Uno de estos elementos radica en laparticularidad cultural, donde lo
espiritual es significado en lo sagrado que representa la naturaleza.
Podríamos dudar de la visión filosófica de pensamientos
expresados en este estilo del indio Seattle "Esto sabemos: la
tierra no pertenece al hombre, el hombre pertenece a la tierra.
Esto lo sabemos. Todo va enlazado, como la sangre que une a
una familia."21 Esto evidencia una concepción de trascendencia
muy específica de ellos, pues se trata de una visión ética donde la
naturaleza es percibida como sujeto. Para nosotros esto cobra una
dimensión de particular importancia porque se manifiesta centrada
en una filosofía de la vidq pues los elementos que nos brinda la
natl.xaleza son tomados con mucho respeto.
Desde la interculturalidad se da paso al diálogo filosófico para
conectarnos con los saberes de otras sociedades, saberes que se
corresponden con una filosofia de la vida como base de la sabiduría
ancestral étnica que aún estiá escondida bajo el manto de la historia
de la conquista, ouya manifestación mrás digna la encontramos
en la convivencia y en el diálogo comunitario, del cual tenemos
mucho que aprender, en virtud que cada día se apodera de nosotros
el individualismo, donde el otro no cuenta, ni casi se percibe
el "nosotros" como elemento principal de la convivencialidad.
19 Ernst Cassirer Op. cit. p. 18.
20 Victoria Camps, citada por Marla del Pilar Quintero, Tesis Doctoral,
Dosoolonización, Educación Intercultural y Cultura de Paz, Universidad del Zulia.
Doctor¡do dc Cicncia Humütrr,2008, p, 58.
2l Jcfo lndlo §ortrlo, cüt¡ (1t54).
il
 Br.qrp¡z SANqcz Pnrue
Entonces la filosofia intercultural desde el reconocimiento de la
filosofia amerindia contribuiría a regenerar el respeto perdido a estas
culturas.
Una filosofia intercultural, debería, a ngegtro juicio, conju-
gar los puntos de vista, que redundaría, sin duda, enbe-neficio de
íquelloi valores culturales étnicos que han de ser defendidosy
rescatados por parte de las mismas etnias. Más, esto será posible
únicamente a partir del momento en que todos comenc€mos a
ver las relaciones "cenúo-periferia" como históricas, y las des-
pojemos de hipqstasiaciones, esencializaciones absolutizacio-
nes, destemporalizaciones y sacralizaciones."22
El diálogo filosófico desde el pensar amerindio generaria
un encuentrJ de saberes, en la medida que la conciencia étnica
se afianzaría en sus particularidades culturales como centro
fundamental de la interiulturalidad, lo cual sería la reafirmación
como latinoamericano o individuo inserto en una sociedad, portador
de una especificidád cultural y de valores que generalmente son
desconocidos.
También cuando hablamos del diálogo nos referimos al
encuenffo filosófico de nuestras culturas, lo cual es uno de los
fundamentamos de la filosofia intercultural como una vía para
llegar al compartir filosófico en el ánimo de la transformación de
h íisión latinbame¡icana desde el reconocimiento y aceptación de
la filosofIa amerindia hasta propiamente lo que es en si mismo 1o
latinoamericano.
Hablamos, pues de una transformación de la filosofia que
llamamos, en reiumen, contextual e intercultural; porque, como
hemos intentado explicar, se plantea desde lugares concretos y
memorias culturalei liberadoras que "recolocan" la reflexión
filosófica desde sus universos históricos y desde la voluntad del
intercambio entre los mismos.23
, Se eüdencia, entonces, las razones por las cuales concebimos
ona razón dJ iéiáetá fitosofia latinoamefrcana, la cual cobrarla vida
propia desde la filosofia intercultural.
La filosofia intercultural e§, pues la filosofia que brota
de la actitud de un pensamiento que, sabiendo de.sus límites
culturales, no solamente tolera otros pensares sino que se
solidariza con ellos, porque precisamente por'reconocedos
22 Arfixo Roig, Caminos de la Filosofia Latinoamericana, 2001, p' 102'
23 Rsúl Fomct-Báancourt, Tha¡rsformación Int$sultt¡r¡l dc l¡ Filo¡oflC 2001, p.
&,,
ia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
como mundos propios, es consciente de que es con la ayuda de
esos universos como puede abrirse a lo universal. La filosofía
intercultural quiere ser en una palabra, una filosofia que se
practica desde la mutua asistencia cultural.24
No sólo se trata de comprender, de conocer y de interpretar
bajo el respeto el pensamiento amerindio, sino percibirlo como un
brazo fuerte en la liberación de los pueblos de nuestraAmérica india
y no india. Esto implica dejar de percibir como seres excluidos al
indígena, al negro (a), a la mujer, al campesino (a), lo cual sería
el fundamento de que ellos no sigan siendo victimas en nuestra
sociedad.
Mas por esta misma raz6n de que se hata de una
transformación que formula desde otras voces que se alzan, la
se
protesta de esta transformación no es ni simple oposición ni queja
iesentida por el reconocimiento ni, acaso mejor dicho "lücha
por el reconocimiento" por parte de la memoria hegemónica,
sino que representa más bien un movimiento programático
constructivo para reescribir el mapa de la filosofia desde esos
lugares -que-dan verdad y sus voces propias portadoras de
memorias alternativas hasta ahora perifericas'¿s
El pensamiento mítico filosófico amerindio asume la
naturaleza como sujeto, por lo tanto no sólo es una voz propia
sino que en su seno posee principios éticos que muchas veces
no son reconocidos. Todo esto contribuye a que desde la niñez
llegan a sentir vergiienza étnica, y en su crecimiento van dejando
a un lado valores ancestrales vitales, gestándose así un proceso
de aculturación compulsiva a partir de la enseñanza escolarizada.
Esto ha generadq graves problemas socio-culturales, pero lo más
resaltante es la desvinculación con los indígenas mayores de la
comunidad, quienes resguardan valores éticos-morales, pero se
confrontan con los de los jóvenes que han pasado por su formación
escolarizada.
Estamos ante el desaflo de la liberación que debe germinar
desde la formación del ser humano, evidentemente, esta no
puede estar concebida en la dimensión tradicional de la filosofla
occidental, pues ella resguarda una concepción negadora de la
filosofla amerindia como una filosofia específica, pues la filosofia
occidental, propiamente está fundamentada en la racionalidad
occidental que atenta contra otros pensamientos.
24 Fomot-Bot¿ncourt, R¡úI, Int rculturalidad y Globalización, 1998, p. I5L
25 ldonr, p. ló.
17.
a.
lt
a
Bnunv SÁ¡qmz Plnsle
El reconocimiento de una especie de "tronco" común que se
debe plantar en offos suelos, y que-de esta sue¡te debe además
dar fiutos propios: pero que nopara fomentar, consiguientemente,
la actitud abierta ese decir propio; esto es para que sea' en su
fondo mismo decir contrastante."26
La conciencia étnica posee un orden universal que a su vez
equivale a un orden particuiar en cada sociedad. Ésta se manifiesta en
lasformas internas que caracterizanelmundo mltico espiritual, que
guafda intrínsicos valores éticos en consonancia con la naturaleza.
Áhí encontramos relevantes elementos de una ética que eleva la
natu¡alezay por ende a la vida en su dimensión más humana, la cual
analizamos a los fines de dar a conocer una concepción filosófica
que no§ permita avalar una visión de la vida más digna'
En este sentido, consideramo§ oportuno referimos al pensamiento
mltico apartir de algunas sociedades tradicionales." De vr&vezpafa
siempre it
rrito ha formulado el modelo perfecto de todo ser en
el mundo. De tal suerte, la tuea del hombre consiste en volver a
representaf el comportamiento ejemplar de los héroes míticos."27
Esle modelo lo podemos observar en la estructura societaria y en
los estilos de vida de los pueblos étnicos de nuestro continente que
han conservado én su esplendor a la naturaleza hasta que el hombre
"civiLizado" llegó con sus proyectqs "civilizadores" genocidas y
ecocidas, poniendo en peligro regiones muy frágiles'
Nuestro continente americano está indignamente en peligro
porque los países que 1o comparten están convencidos que es más
importantetchar a andar u¡ asesino progreso antes que establecer
*u ,on.rp.ión conservacionista y protectora de la naturalezay de
los pueblos que la habitan, simplemente polque lo principal es la
vida que se está escaPando de allí.
' Precisamente, estas prácticas culturales tradicionales de
estos pueblos se fundamentan en el principio de amor a la tierra
que constituye un paradigma digno de análisis, en virtud de
evidenciar piincipios éticos que nos descubre formas radicales
conservacionistas.
Las culturas precolombinas del trópico indoámericano de-
sarrollaron civiliiaciones basadas en una relación íntima con
26ldem.p.66.
27 Georye Gusdorf. OP, cit,P.29.
Sr": d,
Hacia una Éfica Ecotó§ca desde la Interculturalidad
lanab¡raleza. Estas culturas generaron prácticas sofisticadas y
creativas de uso múltiple y sostenido de su medio. Por ello los
espacios étnicos de las culturas andinas, mediante sistemas de
cooperación y complementariedad, desarrollaron sofisticadas
estrategias de adaptación y producción sostenida."2s
Latiena es concebida por el amerindio como la "Madre Tierra"
y como tal aparece en sus mitos de la creación; por ende, no sólo
es una visión sino que es una filosofia de respeto a la natwaleía.
"Así, la cultura ecológica debe fomentar el rescate de esas prácticas
tradicionales, como un principio ético para la conservación racional
y sostenido de los recursos."2e
Se evidencia que la nattraLeza es percibida por el amerindio en
su carácter divino, lo cual constituye una categoría que da muestra
del pensamiento ético amerindio. Esto lo podemos interpretar en la
cosmogonía, donde los fenómenos naturales son seres divinos que
hacen posible que el milagro de la vida sea un hecho palpable. Un
ejemplo de lo antes planteado 1o interpretamos en lo que representa
la tierra, es decir, en el bien que brinda a los seres vivientes y
especialmente al ser humano que le sirve de bienhechora.
En las culturas tradicionales, el conocimiento, los saberes y
las costumbres están entretejidos en cosmovisiones, formaciones
simbólicas y sistemas taxonómicos a través de los cuales
clasifican a la naturaleza y ordenan los usos de sus recursos; la
cultura asigna de esta manera valores significado alanatrxaleza,
mediante sus formas de cognición, sus modos de nominación y
sus estrategias de apropiación de los recursos.30
La cosmogonía amerindia está intrínsicamente ligada a la
conciencia espiritual y religiosa, desde la concepción sagrada
que es asignada a la misma nat'lr,:aleza,lo cual es una forma de
manifestar la óomunión de los dioses con el ser humano.
Para el hombre religioso, la naturaleza no es nunca
exclusivamente "natural": ella está siempre cargada de un
valor religioso. Esto se explica, puesto que el cosmos es una
creación divina: salido de las manos de los dioses, el Mundo
queda impregnado de sacralidad. No se fata de una sacralidad
28 Enrique LefI, Ecologla y Capital, 1994,p.290.
29ldcm.
30 Enriquc Lefr, E¡paclo, Lugar y Tiempo, En Nueva Sociedad, No. 175,
Sethmbro-Octubro, 2001, p. 32,
r;ffirÉ- #
1
BBernz SANc¡rnz Pnr¡.a Hacia una Etica Ecológica desde la Interculturalidad

comunicada por los dioses, por ejemplo, la de un lugar o de un diferencias."3a La pérdida de las sabidurías ancesffales desde el
objeto consagrado por una presencia divina. Los dioses han punto de vista de su originalidad es algo tan deprimente que si lo
hecho más: ellos han manifestado las diferentes modalidades de estudifuamos desde los elementos que nos brinda la hermenéutica
lo sagrado en la estructura misma del Mundo y de los fenómenos
cósmicos.3r
para lograr penetrar y comprender sus mensajes quizás nos
asombraríamos de la fundamentación ética que allí prevalece.
La conciencia mítica equivale a desarrollar los principios de En esta dimensión estudiaremos en el siguiente capltulo el
ecodesarrollo, en la medida que expresa una actitud ecológica con
significado mltico de la tierra como símbolo sagrado en algunas
claros indicios de un soberano respeto por la ¡afi,raleza "Estos
principios del ecodesarrollo se expresan cada vez más como sociedades amerindias.
demandas de las propias comunidades indígonas y campesinas, las
cuales luchan por conservar y restablecer sus valores, culturales,
asociados con la reapropiación de la nattxaleza, sus recursos
y su espacio vital."32 Ese espacio vital que hoy es trastocado por
las tecnologías bajo el visor occidental racional y positivista, se
ha posesionado de la tierra y de todos sus recursos, en el norte
mercantil.

Nuestros espacios culturales se deben reconsiderar desde la

filosofia intercultural, la filosofia del género y la teoría crítica, puesto
que estamos frente a frente a un modelo de civilización construido
desde el mundo tecnológico, por ende, donde inexiste la conciencia
ambiental, por ello nos conducen en el rumbo de la destrucción.
"La cuestión ambiental plantea la necesidad de normar los procesos
económicos y tecnológicos que sujetos a la lógica del mercado,
han degradado el ambiente y la calidad de vida."33 Lo cual ha dado
lugar al síndrome de la desnaturalizaciíny la materialización de la
concepción de la naturaleza
No obstante, la naturaleza en el pensamiento mítico fue concebida
como un ente divino, esto se pone de manifiesto en la armonía, el
respeto y la convivencialidad con su ambiente, en contraposición
al carácter de dominio desplegado sobre la naturaleza, que
sufgió a partir de la filosofia positivista, transformada luego en
una mentalidad mercantil y desarrollada a partir de un equivoco
maquiavélico de la ciencia que es cada vez más estnrcturada en
la modernidad a través de la tecnologia. "Trágicamente el mundo
está perdiendo la originalidad de sus pueblos, la riqueza de sus

31 Mi¡cea Eliade, Traité d'Histoire des Religions , 1977 , p.46 (taducción propia).
32 Enrique Letr Op. cit.290.
33 Idenl P.291. 34 Emo¡to Slbrto, L¡Allan¡tlvt, 2000,p.47.

,.',1 t'ffi:s=* t
 Cepiruto II
L,e Twnn t:
M¿rruz §cot oeart OruetNtru,t

:riir¡r::rill. ii,.1 ,r¡x4.;¡,¿ qm¡fd Si

1

L,e TDRRA: M.nrruz Ecot oetsru Ontemtru.t

"Pintaremos (lo que pasó antes de la polabra de Dios,

Antes del Cristiqnismo; lo reproduciremos porque no se
tiene (ya más) la visión del alba, de la llegada de ultramati
de nuestra (vida en la) sombra, la visión del alba de la vida',.

Popol Vuh

Encontramos que la visión en los tiempos de la creación está

concebida desde un rángulo muy particular y específico de un
mundo de üda cultural donde la naturaleza es representada por
deidades que determinan su participación en el tiempo del origen,
lo cual nos conduce a interpretar el significado de la naturalezaparu
el amerindio.
Más de 2 millones de años vividos por el hombre en plena
integración a la naturaleza, generando su dieta con relación al
medio, creando una tecnologla propia acorde con sus necesidades,
fabricando herramientas y promoviendo invenciones como la
cerámica, descubriendo los procesos del cultivo y las formas
de domesticación de los animales, son para la historiografia
'tradicional meras tareas manuales que no podrlan compararse con
el descubrimiento de la palabra escrita.3s

Desde esta dimensión, en cuanto a lo que representa la natu¡aleza

para el amerindio, basamos nuestro análisis interpretativo del
pensamiento mltico para comprender lo que significa la Tierra como
símbolo sagrado en algunas sociedades.

Primeramente podemos notar lo simbólico del lenguaje ancestral

a partir de las actuaciones de las divinidades que actuan en los mitos
del origen. Precisamente alll hay momentos históricos que marcan
una pauta en el tiempo del origen, por lo tanto distinguen aquello que
simboliza cada divinidad como r¡n legado a la posteridad societaria.
En este sentido, en el pensamiento Quiché-Maya la Diosa
que representa la Tierra -Ixquiq-, en su condición de divinidad
nos escenifica una concepción de la justicia en el momento que
deciden sacrificarla. Esto es mostrado a partir de su desaouerdo
con la tradición de los sacrificios humanos que era llevada a cabo

35 Lul¡ Vlhlo, Hroir rn¡ Hl¡todr dolAmbiontc cnAmórica Lctina, 1983, p, 32,

*h. ,:;trá**&l, .¿"#*¡: tl-'

1
Brernrz SANcHez PIFGLA.
por las divinidades del inframundo (Xibalba). El discurso de la
Diosa, cuando se dirige a los cuatro ejecutores que la sacrificarían
por mandato de los señores de Xibalba, evidencia claros conceptos
de la justicia, que la caracterizan como divinidad terrestre, que va
en contra de los dioses de la oscuridad. "Muy bien. Este corazón
no puede ser de ellos. Vuestra casa no puede tampoco estar
aquí."36 Las palabras de la diosa señalan repudio por la situación
de injusticia al ser decretada su muerte, simplemente por haber
quedado embarazada del árbol que se encontraba en el centro del
mundo.
A partir de las palabras antes mencionadas interpretamos la
manifestación de un código ético Quiché-Maya, expresado en un
lenguaje simbólico finamente tejido desde la condición humana
femenina.
Así pues, el análisis hermenéutico nos permite interpretar y dar
cuenta de la fuerza de la dimensión ética en relación a la justicia,
justamente para enconfrarnos con esta visión filosófica argumentada
por la deidad terrestre, lo cual evidencia principios éticos que
distinguen a la Tierra por su discurso de una elevada dignidad, a
partir de la defensa que hace la diosa, Ixquiq, por su vida, damos
cuenta de la presencia de un inconfundible elemento filosófico sobre
lo que representa la vida para quien es receptora y reproductora de
la vida.
Este corazón no será quemado ante ellos. Poned el fruto del
árbol, dijo la joven. Y roja, la savia del árbol salió y fluyó en la
copa; se hinchó alll y se volvié bola en reemplazo del corazón.
Brotante salió la savia del arbol rojo; semejante a sangre, apareció
brillante, rcjiza, en bola, en la copa.37
Nos encontramos frente a frente a una particularidad ética que
establece el derecho a la vida, en la medida en que la divinidad
terreshe es portadora y dadora de la vida de las deidades que salvarían
a la humanidad maya. Por lo tanto, la Madre tierra deja un legado
de justicia al decretar el respeto por la vida. "La justicia es un bien
genuinamente universalizable."3s Podría decirse que es un modelo que
se erige como tal desde los tiempos del origen.
36 El Libro del Consejo, p. 51.
37 ldem.
38 León Olivé (Compilador), Op, cit. p. ll,
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
También interpretamos esta relación ética en el rol de representar
a la Madre-Tierra, el cual es muy significativo, pues el nombre de
Ixquiq significa: "sangre, savil, raza, progenie, vida."3e Ella como
diosa de la vida se materializa en el proceso de producción y
reproducción del Dios-Maiz, Guotnatz, que adernás de simbolizar
el nacimiento y renacimiento de la planta de maí2, es el modelo
ejemplar de inteligenciay fierza fisica.
Vemos que la divinidad terrestre, Ixquiq simboliza en la
cosmogonía Quiché-Maya a la figura femenina, madre nutricia
universal, por ende, la fertilidad y la procreación se relacionan con
la idea de percibir la tierra como un sujeto viviente, ella es símbolo
de grandeza y de fertilidad humana. "El prestigio mágico-religioso y,
por consecuencia, el predominio sooial de la mujer tiene un modelo
cósmico: la figura de la Madre-Tierra."a0
Así pues el maiz que nace de la tierra nutricia es la sustancia
primordial de la cual es creado el ser humano perfecto en el tercer
ensayo de la génesis Quiché-Maya, lo cual evidencia lo que
representa para esta sociedad la dignidad de la tierra.
De acuerdo a lo antes planteado, interpretamos un radical
razonamiento sobre la sacralidad de la naturaleza, en virtud de
manifestar una ética de trascendencia muy particular y específica,
a la cual nosotros sólo nos aproximamos en esta oportunidad,
para expresa¡ la vital importancia que cobra el pensamiento
amerindio, en estos momentos parala humanidad. Por cuanto, los
seres humanos creados del maiz, son creados de los dioses que
representan la naturaleza, como muestra de la sacralidad absoluta,
lo cual interpretamos como la manifestación de un radical respeto
que existe en el pensamiento amerindio a la nattxaleza.
En nuestro contexto latinoamericano se deben tomar en cuenta
estas experiencias milenarias que nos muestran conocimientos
ecológicos ligados intrínsicamente a un modo de vida que percibe
a la natutaleza como sujeto.
También se aprecia en el modo de vida de algunas comunidades de
ascendencia Maya y Aymara, donde la relación: tierrao maiz, vida,
conforma una dialéctica de la vida en comunidad, nos referimos en
39ldom. p. XLI.
40 Mircor Eli¡do, Lo Srorú lt Lo Prof¡no, 1965, p. I25.(raduoción propia),
':ffiiJ * i a¡
 B¡ernz SÁNcrmz P¡nsle Hacia unq Éfica Ecológica desde la Interculturalidad

"La tierra es nuestra resguardar la vida de nuestra América y del planeta a partir de la
este caso a los Choles, quienes se plantean.
y debemos cuidarla con todo nuestro amor'"4l En otras cosmovisión amerindia y sus modos de vida en cuanto a la relación
madre
palabras, la relación de ellos con la tierra es propia de la vida,
por con la tierra.
a ellos por
io tanto, para ellos, la relación económica es extrarla En cuanto al rol que juega lanatvalezaen la mentalidad amerindia
cuanto la tiena que hace nacer la vida resguarda el sentido mítico nos parece fundamental resaltar un elemento básico para nuestra
del misterio de la creación. interpretación referida ala"ética amerindia," en relación a la vital
En base a este elemento, la tierra, se forjará toda la concepción
figura que representa el maiz.
del mundo de los choles: la tierra brota del ombligo de ch'ujtiat, La función central de la milpa en la vida campesina se basa
en la tierra vivimos, volvemos al seno de la tierra; en la tierra
nos
en el concepto del maíz como la sustancia mítica que dio origen
renovalnos como las flores, como cada nuevo ciclo agrícola; tierra
es
al ser humano. Es el símbolo de la fertilidad, de la belleza y
nuestra piel, el olor de nuestras mujeres, su flujo menstrual también de la unidad humana. Los seres humanos son de maiz, y dondé
y
es del color de la tierra y, finalmente, de la tierra brota crece
el germina elmaí2, germina la vida y domina la armonía. Así como
maíz,
,.nuestro su§tento".
¿cómo, pues, podrían los Choles vivir sin elinaiz es bello, de igual manera la vida es bella. La humanidad
pelear y dar la vida por latiena?42 vive en relación simbiótica con la milpa y en ella se descubre
la tierra, sin
el equilibrio de la vida. Por eso, a todá costa, respetan la tierra
EvidentementequeparaelamerindiodeascendenciaMayaé1 como fuente de la vida, pues sin tierra no hay malz.4
es descendiente del bioi-Mrír, por ende, la relación con la tierra
De tal manera, la tierra que ellos pisan y el maíz que ellos
va más allá de ser simplemente material, pue§ ésta es concebida cultivan conforman en la mentalidad maya un slmbolo sagrado.
como un sujeto del cuaise genera la vida y por la cual se mantiene
Por cuanto el sustento alimenticio más importante proviene de la
la vida. Esto es mantenido similarmente tal como sus antepasados tierra, porque representa la sustancia y la esencia de una divinidad
mayas, en tanto que fue de la tierra y a través delmaíz como ellos
se
la cit¿ del Libro suprema simbolizada en la planta de maiz de la cual se generó la
oriiinaron. Esto 1o podemos observar claramente en
vida humana. o'El maíz así acogido y cultivado viene a presentarse
deiConsejo, donde se expresa para la posteridad que la formación como sacramento originario: es la mediación o lugar de encuentro
de la primera madre y del primer padre es delmaiz.
fuerte, siempre renovado, entre dioses y humanos. El relato lo ha
Oidlo: dicho con toda claridad."a5
Elmaiznuestra vida.
el que se pone de pie, é1 es el que se
É1 es
No es casual que aún muchas comunidades a lo largo del
Mueve, él es e[que se alegra, el que se rle continente antes de extraer cualquier elemento de lattena, eligen una
El que vive; oración para pedir a lanattraleza lo que necesita, la más adecuada,
Elmaiz.a3 para tomar de ella lo que les permita subsistir. El indígena que va
quedando cadavezmásrezagado en nuestros territorios, sólo toma
Es importante, resaltar que esta relación del amerindio con la
de la naturaleza lo necesario para vivir, otros, aún piden permiso
tiena significa agradecimiento por la vida, pues, es una concepción,
hasta para arar la tierra. ¿Acaso se podría dudar de los elementos
se trata de percibir la tierra como sujeto viviente. En estos
específicos que ponen de manifiesto la profundidad ética del
momentos de intenso peligro para el planeta, sería el punto central
a Amerindio se percibe y se relaciona con la nattralezaen su calidad
de una dialéctica que genere una ética ecolégica que contribuya
de sujeto? Vearnos esto a través de una oración Chol:

41 Anita Brenner, citada por Jesús Morales Bermrldez, Antigua Palabra

Narrativa
Indlgena Chol, 1984, P. 28.
42 Jesus Morales Bermúdez, Op. cit. p' 28. ffimbicnte, DEI, san José, 2004, p, ó2,
p' 45 Plcrzr Xrvlor, Homb¡o y Mt{or on lar Roligionos, 1996, p. 15.
43 Adrián Rocinos, sit¡do por Joorlr Moralo¡ Bornrridoz' Op' ait' 116'

ritffiÉe iE
Fl
BB^mn¡z SANcruz PInsr"A
Oh, Dios, mi madre, mi padre, señor de los montes y de los
valles, de los grandes árboles, señor bosque tened paciencia
conmigo, pues estoy por hacer lo que mis antepasados siempre
han hecho. Ahora hago mi ofrecimiento (de incienso de copal) a
vosotos paxa que sepaís que estés para molestaros infinitamente,
pero os ruego lo sufrais. Voy a ensuciaros -a destruir vuestra
hermostra- voy a habajaros para que obtenga que comer...y no
sufrais que el hacha ni el cuchillo me corten,.pues con todo mi
corazón voy a habajaros.a6
Estamos convencidos que la conciencia mítica amerindia
tiene su asidero en la sacralidad de la tierra, lo cual aún vive en
el campesinado y contempla una visión ética de la tierra, que
bien serviría de fundamento básico para determinar los principios
ecológicos latinoamericanos.
Veamos que tarnbién enconffamos esta misma particularidad en
los Quechuas y Aymaras de los Andes, es decir, la Madre Tierra se
instituye en modelo sagrado. Sobre este particular, plantea Roy H.
May, que allí se guarda un concepto mítico-religioso del espacio.
"Pacha significa el lugar de mráxima seguridad en el presente
y se identifica con el ayllu o la comunidad tadicional, con sus
casa, campos de cultivo y pastizales. Mama, como lo femenino,
matenaliza la pacha que se manifiesta como la tiefia"a7 Igualmente
para los Quechuas y los Aymaras la tierra es la madre nutriente, ella
es Pachamama, ella es generadora y protectora de la vida a partir de
la tierra fértil. Pacha significa, tiempo, espacio, mientras que mama
significa tier::a.ooPachamarna es una palabra para hablar de la madre
Tierra, de los brazos amantes de la Tierra, pero además, del cosmos
que nos rodea, del espacio vital, concreto, material, pero también
espiritual."4s
'Anuestra manera de ver, esta forma de expresarse el ame¡indio
de la Tierra pone de manifiesto una ética ecológica, fundarnentada
en el sentido de conservación, de respeto, de cuidado y de amor
alatierra, donde el indígena sólo toma lo que ella le provee y la
engendra.
46 Oración Chol, citada por Jesús Morales Bermrldez. Op, p. I I 8- l I 9.
47 May H. Roy, Ética y Medio Ambien te, 2004, p. 62.
48 Juan Jacobo Tanca¡a Chambre, escrito Aymara, Agonda Latinoamorican¡ 2010'
p.44
L r-.
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
"Vivimos en el cuerpo de la Pachamama."4e Por lo tanto, la
Tierra para el amerindio no puede ser interpretada desde una ética
del discurso porque ella es propiamente la éttca en si misma. A
manera de demostración hemos incluido el siguiente poema:
La Tierla es la carne de la Pachamama, donde podemos
sembrar.
Los cerros son la cabeza de la Pachamama.
Los antigales son los oídos de la Pachamama
Donde llevamos nuestras ofrendas.
Las plantas son los vestidos de la Pachamama.
El monte, los bosques, son el cabello de la Pachamama.
Los habajos, pensamientos y sabiduría que nosotros
generamos, son las manos de la Pachamama.
Los años son los pies de la Pachamama.
Los productos alimenticios frutas, maí2, papas, son
Los pechos de la Pachamama, porque de ella nos
alimentamos.
La vida que ella nos regala -y por eso estamos vivos-,
Es el vientre de la Pachamama.
Las enfermedades son los desechos de la Pachamama.
Las semillas son la fertilidad de la Pachamama,
Su feminidad.
La muerte son las uñas de la Pachamama.
Las semanas son los dedos de sus manos de la
Paohamama.
Los meses son los dedos de los pies de la Pachamama.
Los lagos y los mares son la boca de la Pachamama.
Los cerros nevados son los dientes de la Pachamama.
Las piedras y las rocas son los huesos de la Pachamama.
El arco iris es la wiphala de colores la bandera de la
Pachamama.
Los animales silvestres son sus criaturas queridas.
Las aves son las mensajeras de la Pachamama.
Los seres humanos somos los hijos más queridos de la
Pachamama.so
Desde la palabra étnica podemos apreciar una recia moral en
relación a la Tierra como ente sagrado, por esta razónelindígena le
solicita permiso cuando tiene que tomar de la tierra lo necesario para
49 Carlos Yujra, Yatiri Aymara, de la Paz Boliüa. Recogido en Yavi por Manuel
Pliogo, nanado por Victor Bas-copa, indlgena Kolla. En agenda Latinoamericana
2010, p.45.
50ldcrn.
 Beern¡z SÁNcrtnz Pn¡re
vivir; por ejemplo, un árbolo los árboles necesarios para construir
su casa, su canoa o 1o pertinente para sus necesidades. "Para los
pueblos originarios la tierra no es un simple medio de producción.
Es una prolongación de la vida y del cuerpo. Es la Pacha Mama, la
Gran Madre que todo lo genera, alimenta y acoge."sr
En este orden de ideas también encontramos una visión ética
en la concepción de armonía con la tierra en la sociedad Kuna,
en la medida en que la na1uxaleza es la fuente inagotable de la
conservación de la naitraleza:
En un principio de la creación Napguana (Madre Tierra
o Naturaleza) reinaba la tranquilidad, la armonía entre todos
los seres de la tierra. Paba (Padre) y Nana (Madre), vio la
necesidad de la existencia de un Mudup Igar, para sus futuras
generaciones, con el fln de que ellos conozcan la armonía y el
equilibrio que debe prevalecer entre el hombre y la natrxaleza
(una naturalezaintegral con su medio ambiente).52
Esta realidad cultural donde predomina la Tierra como un ser
divino, evidencia la presencia de la virtud de la armonía, en lo
referente al equilibrio del ser humano con la nabxaleza, enrazón
de percibirla como un ser con potencias únicas para $ear la vida y
regenerarla, además de nutrir y alimentar a todos los demás seres.
La Tierra es nuestra rnadre y es también cultura. En ella
nacen los elementos de nuestra cultura...todos los alimentos
que consumimos en las fiestas tradicionales; los materiales que
nuestros artesanos emplean y que utilizamos para construir las
casas, todos proceden de las montafias. Si perdiésemos estas
tierras, no habría ni cultura ni a1ma.53
En el plano filosófico la Tierra en su dimensión sagrada
constituye en el pensamiento mítico amerindio una categoría que
debemos estudiar con mayor concentración, pues esta concepción
engierra en su esencia una ética de la vid¿ que v¿Imos perdiendo en
el contexto de nuestras vidas, pues nuestro modo de vida occidental
en el presente se sintoniza fundamentalmente bajo la concepción de
un tramado progreso que percibe a la naturaleza como objeto, lo cual
rompe con la concepción en plena convivencia con la nattxaleza.
5l Leonardo Ecología: Grito de la Tierra, Grito de los Pobres, 2002,p. 16l,
Bofl
52 Artinelio ltremández, Mudup Igar: Un canto a la Naturaleza, en ONMAKED,
No. 7. 1997. P.4.
53 Leónidas Valdéz (Cacique Cuna), citado por Leonardo Bofr, Eoologla: (hito do
i
la Tiena, Grito de los.Pobres, 2002,p.161.
.t
L
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
No obstante, en las culturas amerindias hay una dimensión más
auténtica, en la medida que para ellos es un ser sagrado dador y
procreador de todo. "Las culturas campesinas e indígenas tienen un
aprecio hacia la tierra que no tenemos los citadinos, por lo que es
preciso dialogar con estas culturas."sa Esto nos obliga a repensar lo
que significa la Tierra para la conciencia amerindia. Además nos
conduce a conocer nuestras culturas milenarias a fin de establecer
un diálogo abierto no sólo para ser conocedores de las sabidurfas
amerindias, sino para interpretar la profundidad de su filosofia que
está cenfrada ñrndamentalmente en una íntima relación entre el ser
humano ylanattxaleza.
La cosmogonlaWayuu* también es plena de acciones que se van
desarrollando a partir de la actuación humanizada de los diferentes
elementos que intervienen en el cosmos. El rol de la Madre Tierra
al lado de Juyass. Estos simbolizanlapareja cósmica por excelencia
que interpretamos como seres generadores de vida a todo ser sobre
la tierra, 1o cual es una muestra de lo que ambos representan en la
particularidad del pensamiento Wayuu.
Esto se interpreta desde el carlcter ontológico que hemos
analtzado a lo largo del análisis de sus mitos del origen. Allí se ha
fundido lo sobrenatural con el mundo natural, siendo la nattxaleza
la figura principal convertida en deid¿d que rige la vida de todo
ser que integra el universo indígena, pues la natt¡raleza es potencia
garante del bienestar y de la vida de todos los seres."La consistencia
ontológica del universo primitivo reside, sin duda, en el hecho que
el mito proyecta directamente en términos humanos. Y convierte en
historia, las principales exigencias del ser en el mundo."56 Descubrir
esa consistencia ontológica en la conciencia mítica indígena es
conocer su visión y concepción del mundo, de la vida, pero no
precisamurte desde la visión colonizadora, sino desde su específica
concepción filosófica.
54 José Francisco Gómez Hinojosa, Hacia una Filosofia Intersubjetiva, en Pasos.
No,82, 1999,p.21.
r Ehia ubicada enüe Venezuela y Colombia de origenArawak.
55 Pa¡a mayor información al respecto véase el capltulo referido a Juya y Pulowi
(hipóotasir dc la tiena) cn la obra de Beahiz Sánchez Pirela, Pensamiento Mftico
Wryuu 2008.
56 Ocol¡o O¡¡do4 Mlto y Mrt¡fltlo¡, 1960, p. 37.
fl
Bnarr¡z SANc¡¡ez Pn¡u
El pensamiento mítico Wayuu es fuente de una realidad fi losófi ca
que aunque carece de los niveles y parámetros de la filosofía
occidental, pues parte de otra forma de expresarse. Esta responde al
estilo étnico el se cual ha mantenido de generación en generación,
preservando los valores éticos y morales que prevalecen como una
figuración legada por los dioses.
Entonces, la comprensión del lenguaje del mito nos traslada
a la iqueza genuina de la lengua indígena que por momentos es
incomprensible, dado que el pensamienúo occidental ha desa:rollado
barreras que impiden interpretar sus categorías específicas.
La fecundidad del lenguaje fue y sigue siendo que el hombre
sabe despertar la intuición en palabras y frases por medio de
su capacidad más propia, la de la expresión lingüística ¿Cómo
podría converger esto con conceptos básicos tales como sistema,
principio, fundamentación y derivación, que han dominado,
siguiendo el modelo de Euclides, el pensamiento filosófico de la
modernidad?57
Toda sociedad no occidental mantiene en su lenguaje simbólico
un legado que para conocer debemos estudiar en su relación con
el pensamiento, pues allí está concebida la historia sagrada, la
etnohistoria, es decir, la voluntad de sus antepasados bajo una visión
y una concepción que descubre la palabra ancestral y la base cultural
e histórica de la misma
La historia mitica es sinónimo de etno-historia, la misma
trasciende el espacio y el tiempo de la colonización europea que
rompió con muchas de las singularidades culturales, sociales,
religiosas y filosóficas de una diversidad de sociedades y pueblos de
este continente.
Si dejasen de existir hombres de edad madura, depositarios
de esos mitos sagrados y capaces de recitarlos en el momento
apropiado,, el grupo estáría iondenado a la extinción, porque
los jóvenes ya no podrían recibir a su vez ese conocimiento.
Entonces las especies animales y vegetales, de las que viven
los indígenas, desaparecerían:58
En este sentido, nos damos cuenta que el pensamiento amerindio
es fuente de una concepcióu conservacionista que no se toma en
57 H. J. Gadamer, Mito y Razón, 1997,p74.
I
58 Bruhl-Lévy, Pensamienüo Primitivo, 1978. p. 130.
* ;¡ii*ffi ¡
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
cuenta, dicha concepción prevalece desde la palabra del origen.
Esta se pone de manifiesto en la historia sagrada donde los dioses
van tejiendo la trama de la vida indlgena. "El mito cuenta una
historia sagrada: relata una historia que ha tenido lugar en el tiempo
primordial."se Dicha historia es un testimonio filosófico de lo que
representa el principio, es decir el surgimiento de la vida.
En sus mitos se relaciona la creación, conjuntamente con el
mundo espiritual y las normas consuetudinarias que regirían la vida
societaria en consonancia con las virtudes que desarrollarían en el
tiempo y en el espacio cultural. "El mundo de los dioses míticos,
en cuanto que estas son manifestaciones mundanas, representa los
grandes poderes espirituales y morales de la vida."60 En momentos,
inclusive, el mito no es sólo una analogía o una interpretación
simbólica de la existencia humana sino que es en si mismo la propia
idealidad plenamente identificada con la nabtraleza.
El pensamiento mítico Wayuu manifiesta la presencia de una
hierofanía cósmica, en cuanto a la relación del cielo (Mannuuya),
que es una parte escindida de Juyaa (Lluvia), simboliza una divinidad
generadora de la vida, semen universal, mientras la Ma (Tierra),
representa la fecundidad de la tierra-mujer.
Los mitos y los ritos de la madre-tierra expresan sobre todo
la idea de fecundidad y de riqueza. Se trata de ideas religiosas,
pues los múltiples aspectos de la fertilidad universal revelan, en
suma, el misterio del alumbramiento, de la creación de la vida.ór
Observamos que la concepción de la Ma-Tierra es muy similar a
la de otras antiguas sociedades, en la medida que se le atribuye a ella
el ser que genera y reproduce la vida. 'ola madre sería la gran diosa:
el signo del poder originario visto como donación de la vida. Ella
estaría vinculada a los poderes pacíficos e igualitarios del cosmos,
expresados por la agricultura."62 Veamos que en lengua Wayuu MA
significa Tierra, en sus mitos aparece como la personificación de:
"La GRAN MADRE NUESTRA, es decir, la generadora de
todas las cosas que sobre ella existen. Suelo. Territorio. Lugar"0r
59 Mircea Eliade, Mito y Realidad, 1983,p. 12.
60 Gad¿mer, Op. cit. p. 21.
6l Mircea Eliade, Le Sacré et le Profane (traducción propia), 1965,P. 127.
X¡vior Picaza, Hombrc y Mujer en las Religiones, 1996, p. 15.
62
63 R¡món Prz lpuanr, Mltor, Loyondao y Cuontos Gu¡jiros, 1976,p.293.
;#. s
 Belrnz SÁ¡orez PEEre
Es precisamente en la divinización de la Tierra, que es una
constante en el pensamiento amerindio, donde encontramos una
concepción "ética" ecológica de trascendencia, muy determinante
para tomar en cuenta en los estudios de la filosofia latinoamericana,
por
-de
cuanto la sacralidad de la tierra es el símbolo más genuino
respeto y amor para protegerla en la concepción original de
preservar la vida. Asl pues, la tierra es considerada la más antigua
madre, por lo tanto es fuente de fecundidad y vida; entonces ella es
símbolo de toda realidad.
Evidenciamos, primeramente que se distingue un valor ético-
moral bajo un orden cosmogónico, lo cual para nosotros tiene una
figuración ético-ecológica, por cuanto, la idea de la Madre-Tierra
guarda precisamente la visión de respeto. Jamás se osaría tomar
de ella lo innecesario para la vida. Segundo, impera una normativa
divina y ancestral legada a la posteridad Wayuu, pues allí se aprecia
que Ma-tierra representa la virginidad como símbolo de pvreza
divina, modelo de respeto que marca un elemento decisivo para
la posteridad. "Toda historia mítica que resalta el origen de algo
presupone y prolonga la cosmogonía... Al ser la creación del Mundo
ia cráación por excelencid, h cosmogonía pasa a ser el modelo
ejemplar para toda especie de creación."s
El pensamiento Wayuu nos muestra que todas las cosas que
conformarían el medio ambiente se genera desde la primera
generación partir de la relación manimonial ente la lluvia y la tierr¿
bien a partir de ellos como figura central o bien desde sus hipóstasis.
En otras palabras, el mito Wayuu no sólo expresa la visión
de la vida desde el momento de la creación sino de la existencia,
sus hábitos, costumbres y otos valores culturales y societarios,
simbolizados en el orden del cosmos. Sirviendo la cosmogonla
de modelo ejemplarizado en las divinidades como potencias de la
natrtraleza, cuyo rol central lo tiene la mujer, en virtud de ser ellas
la base fundante de la sociedad Wayuu.
' El hecho de que la mujer sea productora y reproductora a
partir de su propio cuerpo, ha permitido segtramente concebir
desde este fenómeno la proximidad de la naturaleza a la mujer
y al hombre: 'oasociado a la "cultura"; los elementos femeninos
ligados probablemente a los mitos de la creación atestiguan en la
"Diosa Madre'la reiteración de la creación del mundo viviente, y
es entonces que a partir de su fecundidad, un sincretibmo las r¡ne
simbólicamente a la reproducción de la vida animal y vegetal.65
64 Mircea Eliade, 1983, p. 28.
lit , !?ffi*ffi
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
En este sentido, hacemos notar que la mujer Wa¡ru, es percibida
en íntima relación con la gran Madre tierra. Por esa razón la mujer en
su primera menstruación es sometida a ciertas reglas de iniciación,
es decir, el Blanqueo, ritual femenino que significa la castidad y la
purificación, ademiís está asociado al nacimiento de la nueva mujer,
es la etapa de transición de niña a mujer saliente del vientre de la
Madre-Tie¡ra, por 1o tanto, el encierro, la oscuridad, el ayuno y el
embellecimiento de la mujer simbolizan un segundo nacimiento. F.s
el momento cuando la gran matiz Ma-Tierra recibe ala nifla para
que renazca convertida en mujerWayuu.
PAIT: Sala. Aposento cerrado. Sitio donde blanquean las
muchachas entradas en desarrollo. Simbólicamente el PAIT
representa en los ritos de iniciación de la mujer, El Claustro
Materno. EL VIENTRE DE LA MADRE. Desde donde la púber
tendrá que volver a nacer para luego adquirir responsabilidades
en la vida como mujer adulta.66
El vientre de la mujer Wayuu se relaciona con el vientre de la
madre tierra, en este sentido, podemos observar en el mito que nos
ocupa que entre otras cosas alll está simbolizado el nacimiento de
una planta de pequeñas flores amarillas (Manna), se deja plasmado
en el mito que ésta alegra siempre la vista del transeúnte, además
que es vital para el ecosistema guajiro. "Desde entonces, la Guajira
se llenó de abrojos al asombro de las nieblas invernales."6T Los
fenómenos en la conciencia amerindia dan razón del nacimiento
de cada uno de los elementos que conforman la nairaleza, pues
todo alll tiene un sentido, en este caso nos muesüan el fenómeno del
nacimiento y renacimiento vegetal.
Así observamos que todo fenómeno que va naciendo desde el
pensamiento mltico nos va mostrando las razones internas del mito
en cuanto el respeto a la naturaleza, lo cual a nuesfua manera de ver
representa para el amerindio una ética radical de la vida. Damos
cuenta, que en este mismo orden van naciendo todos los fenómenos
que conformarían el mundo, bien sean cósmicos o terrestres, así
como también la existencia de normas, hábitos, costumbres, etc.
Esto explica por qué las deidades tienen su razón de ser en
cuanto a la unión de las deidades terrestres con las celestiales, al
65 Lelia Delgado, Seis ensayos sobre Estética Pre-hispánica en Venezuela, 1989,
p. 132.
66 Rrmórt Prr lpuna, 1976, p. 297.
67ldnn,
i§.-ffi:,' ,tt
 BsATRtz SÁNcrBz Prner"A.
simbolizar el nacimiento de fenómenos tan fundamentales para la
existencia del ser humano.
La cosmovisión, tomada en su sentido lato, es larrattxaleza
misma captadapor la observación directa, sin mayores esfuerzos
mentales ni métodos precisos para luego ser interpretada en su
más amplia dimensión. Es la forma teológica y animista que por
medio de las creencias mágico religiosas trata de explicar los
fenómenos de la naturaleza y sus elementos de continuó devenir,
procesada en el tasfondo de su alma.68
En el pensamiento mítico Wayuu se reafirma esta manifestación
cósmica donde la relación enhe el cielo y la tierra representan un
rol decisivo, desde una trama simbólica, cuyo punto intermedio es
el ser humano.
Podemos apreciar que en el relato mítico las leyes que emanan
de la naturaleza son personificadas en deidades que determinan las
normas societarias para la posteridad. En otros términos, el amerindio
modela su ideal de humanidad a partir de un plano sobre-humano.
No se es hombre completo hasta haber trascendido los límites de la
existencia, es decir [évar a cabo los ideales de un modelo de vida
que prefiguran las potencias divinas, representadas generalmente
por la tierra, la luna, el sol, la lluvia.
El pensamiento mítico Wayuu nos descubre un emporio mágico
simbólico que va más allá de la lógica del pensamiento formal, pues
la representación descansa eqla significación, que es una modalidad
en la manifestación del pensar amerindio. Pues, el decir étnico es
la forma del decir del símbolo, el cual se hace presente en su forma
interna como una modalidad originaria del mundo espiritual étnico.
"Del vientre de "Mna" -la tierra- germinó ".NÜÜ"; la semilla, la
-
primera simiente de Ia cual nacieron los Wa¡ruu".6e
Entonces, tenemos que la concepción de la vida se origina a
partir de latierra, pues Maleiwa después de formar a los'humanos
de lp tierra, introdujo tanto a la mujer y al hombre en el vientre de la
!
i
Madre Tierra (Ma), la dadora de la vida, para los primeros Wayuu
La Gran Abuela para la segunda generación.
¡
La tierra constituye un símbolo inminentemente sagrado y
ontológico, por cuanto, el Wayuu es creado de esta sustancia y nace
I
I
del vientre de la Madre Tierra tal como todos naceriín del vienfre de
I
una mujer.
'.
t 68 Ramón Paz lpuana, 1987 , p. 76.
il 69 Ramón Paz lpuana,. 1976, p.196.
h fl r.*fllffi,
Hacia una Etica Ecológica desde la Interculturalidad
A nuestra manera de ver el símbolo sagrado de la Tierra
es importante porque significa una ética de la tierra, lo cual no
podemos obviar, por cuanto esto define la relación y la importancia
vital que tiene para el amerindio la tierra donde vive, que pisa,
que siembra y que les da todo.
En el plano filosóflco interpretamos que la visión de la tierra
como la Madre Universal expresa una declaración de respeto que estiá
plasmada en los mitos de la creación parula existencia étnica. Esta
es expresada en una especie de escritura que para entenderla hay
que conocerlapara lograr comprenderla y aceptar la trascendencia
moral que ocultan los mitos en relación a la natttraleza.
No obstante, no enconfiaremos en el decir amerindio una definición
sobre la ética, mucho menos sobre la ecología, pues ellos vivifican
lo ético en el respeto que muestran ante la nattxaleza. por lo tanto,
para ellos el respeto y la protección de la naturaleza no está en
la definición, ni en el discurso, sino en su filosofía, manifiesta en
la palabra mítica, en la visión cosmogónica, es decir en el orden
del universo cósmico y en la concepción sagrada de la vida, de la
naturaleza,lo cual se manifiesta en su praxis societaria.
En la cosmogonía amerindia notamos que la naturaleza tiene
su real dimensión, pues se trata del orden cósmico que es parte
de la enseñanza a los hijos, puesto que la tierra forma parte de
sus ancestros, porque es la madre originaria. Aquí se evidencia
una ética de la vida, lo cual forma parte del mundo amerindio. En
este sentido, llamamos ética ecológica porque encierra todos los
elementos de conservación en el respeto y en la concepción de
percibir la tierra como un ente divino, además de tratarla como un
sujeto, por cuanto, la tierra es el ente protector de la vida.
El reconocimiento a otros saberes nos conduciría a otos
y horizontes del conocimiento, generadores del rompimiento con el
paradigma tecnocrático que tanto daño ha causado a nuestra casa
común. Pues ha sido abono fértil para que el mundo siga marchando
al ritno de quienes lo dominan.
Lo trascendental de pensar éticamente en es que en si mismo
también encierra en si misma un mundo depaz, donde la industria
bélica no tendrla razón de existi¡ pues las guerras involucran la
inversión de altas sumas de dinero que podrlan ser consideradas
para la protccoión dol planota y para poncr I producir más tierras
 BeAf,Rrz SÁNcurz Pnma Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad

desde la perspectiva del consumo de alimentos para los más Veamos que se reunieron en Cochabamba (Bolivia) para celebrar
pobres. la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre el cambio climático.
Ellos, conscientes de la realidad estuvieron presentes (35.00
Las guerras no sólo nos violentan en el plano espiritual sino personas, mayoritariamente indígenas, campesinos, pescadores,
que además nos dejan sin oxigeno en el planeta, sin amor, sin
miembros de organizaciones ambientalistas, de mujeres, de
esperanzas. Por ello debemos luchar por un mundo de paz, puesto
movimientos sociales, etc.). Allí se habló profundamente de las
que ésta sería la expresión de la convivencia ética. "Esa ética
agresiones a la Pachamama.
mínima presupone la aceptación del otro como otro, el respeto por
su singularidad y la disposición atna aliat:za duradera con é1."70 Sobresale entre las propuestas una Declaración Universal de
los Derechos de la Madre Tierra., partiendo del principio que es
Un mundo sin violaciones a los derechos humanos y sin "donde reproduce y realiza la vida" y'tiene derecho a que se respete
explotar irracionalmente la nattraleza sólo es posible cuando no integralmente su existencia y el mantenimiento y regeneración de
existan los tecnócratas, los amos del mundo, que ellos asimilen
sus ciclos vitales, estructura, funciones y procesos evolutivos." 73
y comprendan que sin planeta ya no tienen ninguna posibilidad Desde esta dimensión, la nattxaleza es percibida como un valor por
de vivir ni de seguir saciándole ganancias a la naturaleza, pues ya
si misma, por lo tanto, toda persona, comunidad pueblo o nación
no habría hombres ni mujeres ni nada que pueda ser explotado y podría vglar por el cumplimiento de los derechos de lanaf¡raleza.
ultrajado.
La conciencia amerindia es una voz viva que interpretaríamos a
Unaconciencia éticaesunreto paranosoffos como latinoamericanos
la luz del diálogo de saberes porque hay allí una sabiduría ancestral
y latinoamericanas; 1o cual en primera instancia nos lleva a que que aún no han podido borrar y despierta para establecer un diálogo
pensemos en el otro y en la ota como seres humanos, sujetos todos
de comunión desde la filosofia latinoamericana, abriendo nuevos
protagonistas en la humanidad. "Una ética ambiental ha de unir horizontes en el conocimiento.
o'pueblo", o'campo" y
"tierra" y "ciudad", con el propósito de sostener
Sin embargo, no es precisamente lo que queda de esta conciencia
un entorno en donde la relación metabólica entre la nafiiralezay la
amerindia lo que se ha tomado en cuenta en Latinoamérica, como
vida humana pueda florecer:"7r El florecimiento de una conciencia
muestra de ello abordamos en el siguiente capítulo 1o que podríamos
que exija protección, conservación y restauración, entonces exigirá
denomina¡ una anti-ética, por lo cual, también es un desafío en el
romper con el paradigma productivista, mercantilista y rentista que
quehacer fi losófi co latinoamericano.
recae sobre la naturaleza para dar paso a modelos alternativos de
sistemas de producción e incluso de distribución.
Se orientará hacia el futuro y las generaciones venideras. Esta
afirmación, fundamento de la sostenibilidad, no le resta
importancia al presente, sí bien nos recuerda que no tenemos
derecho de quitarles las posibilidades de vida a per§onas futuras
' (como tampoco tenemos derecho de quitarles las posibilidades
de vida a los miembros de la comunidad actual). El simple hecho
de que las generaciones futuras no están entre nosotro§, no nos
da permiso para negarles la vida.72

En el presente, el mundo indígena comienza a hacerse sentir

en cuanto a su preocupación por 1o que le hacen a.la Tierra.

70 Leonardo Bo[ ürtudes para oüo mundo posiblet, 2006,p. 126. 73 Proyocto de Doclaración dc los derechos de la naturaleza que tiene sus
7l Roy H. May, Ética y Medio Ambiente, 1998, p.I I L entocodont$ on la Nuov¡ Con¡titución de Ecuador. Tomado de Guetavo Duch
72ldem.p,ll2. Ouillot, http://blog¡ publioo, otl 1993 I -dorochos-do-la-natunloz¡/

li¡i i t
 C.ErÍruto III
Dns¿nfos DEL OUEHACER
F ruosó r t c o L tnxo,tME Rr cANo
 Drs¿.rÍos DEL euEHACER Frlosórrco
Larn¡oaMrRrcANo

Sagrado.es el nombre de las cosas y

relaciones que tienen relevancia en
nuestravida. Sagrada es la belleza que
atraviesa todas las cosct§...
¡Sagrada es la vida!
Ivone Gebara

Nuestro futuro común está en peligro porque seguimos el

camino equivocado. La situación mundial es de cuidado, pues
los seres humanos explotan y se explotan así mismos similarmente
como lo hacen con la naítralezasin importar lo que puedapasar, lo
cual ha generado crisis de todo tipo. La ambiental está acompañada
de una crisis espiritual que comienza a manifestarse negativamente
en la humanidad, en la medida en que predominan los ideales
materialistas. Esto es, hoy en día, una "necesidad absoluta" que
sirve de elemento aislante del principio espiritual que nos une a
la vida.
La ideología racionalista que prevalece nos conduce al
individualismo, a la destrucción, es decir, nos conduce a la nada,
en la medida que prevalece una anti-ética que precisamente está
siendo fomentada por la irracionalidad tecnológica y especialmente
por los medios de información-mass media- que sirven de apoyo
a las llamadas leyes del mercado que contribuyen a desvirtuar los
patrones de vidas de las sociedades, generando crisis en todo tipo
en el mundo.

Basta simplemente observar como el racionalismo ha juzgado

lo supuestamente no racional para darse cuenta de cuán necesario
es comprometerse en un proceso de segunda secularización. En
nombre de la racionalidad basada en el progreso, la civilización o
el desarrollo, ha sido destruida lanattxalezahastá haber llegado a
la situación que hoy estamos viviendo: la de los límites ob3divos
de sobrevivencia de la humanidad.Ta

Estamos en presencia de un alto grado de destrucción del

ambiente, percibido enel aire querespiramos, en latierraquepisamos

74 Fomando Miroc, Ls ¡rvolr¡ción que nadic soñó o la ota posünodemidad, 1996,

p. 9ó

. f i,I
: ,i¡;", .:.:
Éii r : r.*, ..,; "*
 BB.rynu SANcnsz PREI"I Hacia una Etica Ecológica desde la Interculturalidad

y en el agua que consumimos. Tambiénpeligra lavida submarina de
ríos, de mares y de océanos, pero sobre todo, es impresionante como
es maltratada la tierra, pues ella es saqueada toda a 1o largo de su
extensión. "Todo lo que de acuerdo con relaciones de poder pasaba
a determinarse como no racional, o natural, ha podido ser explotado,
saqueado o destruido."7s
En otras palabras nos desenvolvemos entrn modelo de destrucción,
pues se juegá al fin, al caos total, alanad4 al princi-pi-o. El ser humano
frta uttápuáo en la fuerzadel dominio y en la sed de poder que han
generadó 1¿s sociedades industriales. Esto lo podemos apreciar en la
ñriseria y en el hambre que sufren los pobres del mundo, que no es
más que la lastimosa consecuencia de un modelo de desarrollo que
r" upóyu en la tecnociencia. La misma no sólo destruye la naturaleza
rirro u i* diversas minorías que por fradición viven de la tierra. E[las,
generalmente son obligadas a dejar sus dominios, debido a que los
políticas
frogru*us y los planei gubernamentales que responden a
économicisias, eiigen laentrega de estas tierras a las trasnacionales
para la explotación de los recursos naturales.
El sueño de uncl@imiento ilimitado ha producido el
subdesarrollo de dos tercios de la humanidad, la voluptuosidad
ái h utilización óptima de los recursos de la Tierra ha llevado
al agotamiento dé los sistemas vitalgs y .a-.la desintegración
del éouilibrio ambiental. Tanto en el socialismo como en el
capitaiismo se ha deteriorado labase delanqueza,que es siempre
latiena con sus recursos y el trabajo humano.76
Lanaturaleza pasó a ser parte de un proyecto de dominio, donde
ella representa un recurso bueno para demostrar productivamente
el progreso a partir de la consecución tecnológica cada vez más
sofisticada.
Hoy en dia la tierra se encuentra en fase avatuada
agotamíento y el trabajo y la creatividad,.debido a la revol'sló¡
' tónológica, ia informátiáactíny la robotización, son dejados de
lado y los trabajadores excluidos hasta del ejército. d9 rqs.erva
del trábajo explotado. Ambos, tierra y trabajador, estan heridos y
sangran peligrosamente.TT
política ecológica de defensa y de protección de la nattsraleza
para proteger aquellas regiones vitales, para preservar la vida
humana. Un ejemplo de ello lo podemos observar en relación a la
Amazonía, este importante y vital territorio no sólo para nuestra
América sino para el resto del mundo, hoy en día, está sometida
a serias intervenciones y explotaciones a propósito de los planes
y programas para explotar sus recursos naturales (Brasil, Bolivia,
Colombia, Ecuador, Peru y Venezuela).
La Amazonía pese a ser considerada el patrimonio vegetal del
mundo, también es el objetivo número uno de los EEUU y otros
países, que están muy interesados en apoderarse de los fecursos
que por milenios allí han estado y que únicos del ecosistema
amazónico.
La explotación de las riquezas naturales, tanto de la Amazonia,
como de otras zonas vitales se hace a partir de programas
desarrollistas de los Estados latinoamericanos, para responder
a las exigencias del neoliberalismo y de la Banca Internacional.
Estos programas contemplan la entrega de miles de hectiáreas de
tierras parala explotación de la madera y de los recursos mineros,
también pagamos deuda por naturaleza. Las consecuencias de los
mencionados programas ya son mortales, muchos ríos han sido
contaminados de mercurio, muchas cabeceras de los ríos han sido
deforestadas, por supuesto ya se empieza a nota¡ la desertiflcación
de grandes extensiones de tierras. Pero lo más increíble y penoso es
como los antiguos pobladores naturales de laregión deben abandonar
sus tierras, muchos se van a las ciudades a conformar los cinturones
de miseria. ¿Seguiremos pagando deuda por el oxigeno, el agua y el
ambiente amazónico?
de

América Latina es parte fundamental de esta crisis como parte

de la realidad ambiental mundial, en la medida que no existe una

75 Femando Mires, Op. cit. P. 96.

76 Leona¡do Botr, Op. cit' P.22'
TTLeonardoBoff, Op. cit. P.22,

I ,¡:iid§re&,., ¡*th*, ft
F
I

L,t AMAzoNfa: Purro IIE ENCTTENTRo EN

'
L.lrruo¡,rvrÉRrcA

Tenemos que los bosques del mundo se están acabando a un

ritmo de 20 millones de hectáreas por año. Entre 1500 y 1850
fue eliminada una especie cada diez años. En 1850 y 1950 fue
eliminada una especie por año. Pero lo más increíble es lo que
nos presenta las estadísticas de 1990, allí nos alerta que para esa
fecha desaparecieron diez especies por día. Mientras en el 2000
desapareció una especie por hora. Entonces desde 1975 hasta
el 2000 ha desaparecido el 20% de todas las especies vivas. La
desesperanza nos alcanza cuando se ha perdido Ia quinta parte de
la superficie cultivable, y de los bosques tropicales en el mundo.

Veamos que en este mundo todo es posible, así tenemos que

América latina representa el lZYo de la superfrcie de la Tierra. Ella
solamente posee los dos tercios de todas las especies vegetales del
planeta. Se ha destruido ya el 5Yo de la selva amazónica. Otros
hablan del l2Yo. Pero nada más desorientar que usar aquí los
personajes. El l% de la Amazonla equivale a 40 mil kilómetros
cuadrados, o sea, 4 millones de hectáreas. En 1970 ya estaban
deforestadas 5 millones de hectáreas. De 1970 a 1988, por tanto,
en 18 años, la deforestación fue de 20 millones de hectiáreas. El
área afectada coresponde a toda la extensión plantada de soja,
maizy trigo en Brasil.
a Franz Hinkelammert, los grandes crímenes
Parafraseando
se cometen cumpliendo la ley. También dice Baudrillard que la
perfección del crimen reside en el hecho de que siempre está ya
r ealizado -perfectum-.

¿Acaso no es criminal que cada día haya más pobres y que se

queden sin sus tierras; que se conviertan en indigentes, más niños
desnutidos y muertos por las carencias vitales?
En estos momentos de lo que se trata es de reorientar el proceso
de desarrollo bajo un paradigma verdaderamente humano, donde
la naturaleza y el ser humano a¡:nonicen. Donde se conciba tomar
de la naturaleza lo fundamentalmente vital y necesario para la
vida.

r+lr' , ,*flft, :,É*8.,::

r Bp,rynz SÁNcrmz Prn¡¡.e
En esta perspectiva, el legado cultural de los indígenas en
Latinoamérica aparece como una parte integral de su patrimonio
de recursos naturales, definido a través de las relaciones
simbólicas y productivas que han guiado la coevolución de
la nattraleza y la cultura a través del tiempo' La otganización
cultural de las etnias y de las sociedades campesinas tradicionales
establece un sistema de relaciones sociales y ecológicas de
producción que da soporte a las prácticas de manejo integrado
y sustentable de los recursos naturales.T8
En el presente, la vida de los habitantes milenarios de la
Amazonía está mucho más afectada que hace quinientos años,
pues ahora atacar- a la naturaleza: envenenan los ríos, explotan
la madera y las riquezas minerales. También se extraen especies
animales y vegetales, generando un mal ecológico irreparable, pues
también se violenta la vida humana, entonces se les está matando
paulatinamente porque al desaparecer la naturaleza es una muerte
segura para ellos. Es preocupante que esto flo sea un impedimento,
pues ni la natutaleza ni la vida humana se toma en cuenta para
llevar a cabo los planes de explotación:
Vemos al indio como un ser inferior, con una cultura inferior.
Pero cuando se trata de vivir en laAmazonía, él es muy superior,
pues enffa en perfecta armonía con todo el sistema ecológico. La
tragedia es que, siendo el indio una de las claves principales para
una adecuada ocupación de laAmazonía, esté desapareciendo, y
con él sus vastos conocimientos.Te
LaAmazonía esrica en especies animales y vegetales, que son
aprovechadas ecológicamente por las comunidades indlgenas. No
obstante, ellos deben enfrentarse al racismo y a la discriminación,
e incluso a la ignorancia de nuestros gobemadores que desconocen
la realidad cultural de las comunidades asentadas allí. Ellos ignoran
la presencia de una sabiduría milenaria que camina por toda la
Amazonia, mientras que la avasallante sociedad tecnocrática
enarbola y establece planes de explotación para imponer las
estrategias dominantes a través del mercado, en la medida que
desarrollan programas de explotación'sin medir las consecuencias
venideras. Todo esto para darle continuidad al desa¡rollo de un
modelo de vida cadavezmiás tendiente al mero consumQ y al falso
78 Enrique Leff, Espacio, Lugar y Tiempo, en: Nueva Sociedad, No, 175,
Septiembre-octubre, 200 L p.30.
79 S, Davis, citado por.Leonardo BofL 2002, P,160.
**¡#frq"
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
confort, inducido por la publicidad, todo lo cual rompe con el mundo
real que tiene una íntima relación con lo ecológico.
La Amazonla es el lugar donde Gaia muestra la exuberante
riqueza de su cuerpo. Y es también el lugar donde más violencia
sufre. Si queremos ver el rosto brutal del sistema capitalista/
industrialista, visitemos la Amazonía brasileña. Allí se cometen
todos los pecados capitales (alavezpecados mortales y pecados del
capital). Allí se manifiesta sin tapujos el gigantismo del esplritu de
la modernidad, lo racionalizado de lo irracional y la lógica diáfana
del sistema. Alll queda también patente la clara contradicción entre
capitalismo y ecologla.so
LaAmazonía, enla actualidad, percibida por las estrategias
estrá
económicas mundiales iónio la región miás rica en recursos naturales
de la tierra. Lo cual es abordado por los Estados Nacionales,
fundamentalmente Brasil, Venezuela y Colombia, como una fuente
de recursos que ofrecen para la explotación. Estos países les dan
concesiones de muchas hectiireas de tierras a las multinacionales que
se encargan de explotar la región sin tomar las medidas ecológicas
previsivas. Estas empresas multinacionales le declaran la guierra a
muerte a los árboles, a los ríos y a las poblaciones autóctonas que
habitan la región. No obstante, los Estados nacionales no cuentan
con programas de protección ambiental, mucho menos con guardias
forestales que protejan la Amazonía de la depredaciín a la cual está
sometida.
Más que un modo de producción amazónico, lo que tenemos
ante nuestros ojos es un modo de destrucción amazónico, puesto
que los grandes proyectos instalados allí «han provocado la
destrucción social, cultural y económica de poblaciones nativas,
sean indígenas o no». Por esta razónla Amazonía es el lugar
en el que se revela la urgencia de un desarrollo alternativo para
toda la humanidad, que parta de una posición central ecológica y
que asuma a partir de ella lo económico, 1o cultural y las demás
instancias de una sociedad civilizada.8t
Se trata de la globalización, a partir de la cual se practica
el exterminio paulatino y sistemático del planeta, sólo toman en
cuenta alguna tímida alternativa para que nuestros recursos duren
más tiempo, para que sean explotados por la industria, sin visionar
que de lo que se ffata es de conservar el planeta en las mejores
condiciones para preservar la vida.
80 Loonardo Boff, 2002, p.l 13.
tl ldom, P. l13.
,* 3
 Beernz SANc¡rez PREr,e
Este orden mundial y las estructuras de poder prevalecientes
condicionan la emergencia de una racionalidad económica
descentralizada y una desconcenfación del poder que apuntan
hacia una democratización de las formas de apropiación de la
naturaleza, de la vida política y de los procesos productivos.82
En el presente, un gran peligro se cierne contra la humanidad,
ella se centra fundamentalmente en la dominación del ser humano
a partir del mercado con cara de muerte, de hecho sobresale la
industria bélica, cuya política mercantil, sólo es eso, una política
de destrucción.
¿Cuál es el precio que tenemos que pagar por todos los
bienes recibidos, el precio de esta cómoda servidumbre, de todos
estos logros, que se nos hace pagar a la gente que está muy lejos
de la mehópoli y dista muchlsimo de su opulencia? ¿Tiene la
sociedad opulenta conciencia de lo que está haciendo, de cómo
está propagando el terror y la esclavitud, de cómo está luchando
contra la liberación en todos los confines del globo?83
juega con la vida del planeta, en la medida en que el ser humano
Se
despiadadamente muesta un estado de inconciencia. Hasta se llegan
a planificar las guerras, esto es lo que los Estados industriales con
EEUU como líder mundial están llevando macabramente a cabo. Se
decretan las guerras para apoderarse de los recursos naturales, para
inhoducir la necesidad de bienes de consumo que siempre han sido
innecesarios para algunas cultu¡as. Esta se basa en la industria bélica,
pues l¿ts annas construidas, gracias a los conocimientos cientlficos,
son anti-vida. Pues las armas son de desfucción masiva, incluso
ahora las fabrican con inteligencia, todo esto gracias a la ciencia
técnica que nació ideológicamente para el dominio. Evidentemente,
los efectos son mortales para la humanidad.
La irracionalidad puesta de manifiesto en la ciencia-técnica
que, ha sido conducida para producir y reproducir el mal en la
tierra, cuando es utilizada para ejercer una hegemonla, de la mano
con el dominio de los países industrializados sobre el resto del
mundo. La ciencia-técnica es utilizada para consumar un fin, es
decir la destrucción del ser humano y su hábitat.
El método científico que lleva a la dominación cada vez más
efectiva de la naturalezallega a proveer así los conceptos puros
82 Enrique Leff, 1994, p. 328.
83 Marcusc, Citado por Enrique Dussel, Filosofla dc la Libcración, 199t, p.
It rIffi
ia una Éfica Ecológica desde la Intercultutalidad
tanto como los instrumentos paxa la dominación cada vez más
del hombre por el hombre de la dominación de lanattxaleza.u
Asl pues, el poder generado por la tecno-ciencia desarrolla la
dominación absoluta, incluso por encima del poder político. Así
tenemos que los principios de la ciencia-técnica fueron desarrollados
desde sus inicios como instrumento de dominación expansiva.
El operacionalismo teórico llegó a corresponderse con
el operacionalismo práctico. El método científico que llega a
la dominación cada vez más efectiva de la naturaléza llega a
proveer así los conceptos puros tanto como los instrumentos
para la dominación cada vez del hombre por el hombre de l¿
dominación de la naturaleza."ss
Ciertamente, la dominación en el presente es mucho más
efectiva en virtud de ser proveniente de la esencia misma de la
propia ciencia. "Latela de araña de la dominación ha llegado a ser
la tela de araña delarazón misma, y esta sociedad está fatalmente
enredada en ella."86 Esta ha sido concebida en la racionalidad
teórica y ejecutada en la operacionalidad ideológica, consumada
a partir de los medios de información, para legitimar el dominio y
el poder. Esto se manifiesta hoy en día en plena expansión, la cual
parte del descubrimiento de la natttraleza.
La dominación cada día es más efectiva, porque la ciencia
genera todos los conocimientos para forjar una tecnología que
socava la vida del planeta. Sin tomar para nada en cuenta los
derechos fundamentales del ser humano de contar con un ambiente
sano, lo cual nos demuestra que la ciencia-técnica se ha convertido
en un poder de dominio y de atentado sobre la vida. "La racionalidad
tecnológica protege asl, antes que niega, la legitimidad de ta
dominación y el horizonte instrumentalista de la raz6n se abre a
una sociedad racionalmente totalitaria."sT
Sobre este particular, entonoes se puede decir que la ciencia técnica
es un medio pera consumar un fin, es decir el dominio y la opresión
en el mundo, dado que para ello se ha utilizado, afirmando asl que
la ciencia y la técnica, en si ellas misma son ideologla. Sobre este
84 Herbert Marcuse, 1984,P.147.
85 ldem.
t6 Horbort Marcuoo, 1969, p. 196.
6!, 87ldom.
e
 Bpmp¡z SÁNcnez Pn¡m
tema nos advierte Habermas sobre el poder de la ciencia técnica,
ya que ésta ha llegado desplegar una conciencia tecnocrática, ctya
intención no está realizada en ninguna parte ni tan siquiera en sus
pasos iniciales, pero por un lado, sirve como ideología para una
política dirigida a la resolución de tareas técnicas que pone entre
paréntesis las cuestiones prácticas y, por oüa, responde en cualquier
caso a ciertas tendencias evolutivas que pueden llevar a una lenta
erosión de lo que élllamaria marco institucional.
Habermas plantea que la ciencia técnica ha alcanzado un poder
de tal magnitud que el mismo Estado con todo su poder político
ha sido prácticamente reemplazado por las coacciones que llegan
a la manipulación de una administración técnico-operativa. 'oEn la
conciencia tecnocrática no se refleja el movimiento de una totalidad
ética, sino la represión de la "eticidad" como categoría de la vida."88
En otras palabras, para Habermas la racionalización adquiere
desde la ciencia técnica una conciencia positivista articulada con
la conciencia tecnocrática que en la modernidad asume el papel de
ideología que sustituye a las ideologías burguesas.
Se refiere Habermas a la racionalidad del dominio que se
ha convertido en un peligro colectivo, en la medida que es una
amenaza a la vida, todo lo cual se podría liberar a partir de una
formación política de la voluntad colectiva ligada a una discusión.
"La racionalización del dominio sólo cabe esperarla de un estado de
cosas que favorezca el poder político de una reflexión vinculada al
diálogo. Lafuerzaliberadora de la reflexión no puede ser sustituida
por la difusión del saber técnicamente utilizable."8e
Ante esta realidad, estamos convencidos que debemos construir
espacios paxa que los pueblos retornen a la eticidad, practicada
por ellos ffadicionalmente por convicción, en la práctica de la
convivencialidad, en íntima comunión con lanaturaleza,enel orden
de tomar de ella 1o que necesitamos paru la vivir en aras del bien
común. Pues, las necesidades creadas por el mercado estián centradas
en el despilfarro y en la muerte lenta, pero segura de las regiones
vitales para el planeta.
Estamos en el punto más álgido de la banalización'de las
necesidades, mientras tanto, el ser humano es victima de un
88 Jurgen Habermas, Ciencia y Técnica como ldeologla, 1994, p. 99.
89Idem. p.129.
,m i i ÜÉt
Hacia unq Etica Ecológica desde la Interculturalidad
sistema que lo sumerge en la enajenación absoluta, donde él es
programado para consumir y en momentos llega a ser un objeto
más de consumo. Esto forma parte del sistema económico que se
fundamenta en el despilfarro y en la eficiencia de la nattraleza.
Esto es solo una muestra del neoliberalismo económico reinante
como parte principal del fenómeno de la globalización, cuya
manifestación no sólo es ecocida sino que también es genocida,
pues se trata de un derroche de la naturaleza, ctya consecuencia es
el sacrificio de la vida huma¡a a la eficiencia del mercado.
Si tomamos en cuenta que los pobres cadavez son más pobres,
mueren niños y niñas cada día de hambre y de desnutrición, se trata
del sacrificio que les exige el sistema económico, el nuevo Dios que
se erige sobre la tierra. Los excluidos se quedan sin tierras, sin la más
mínima opción de regresar a ella porque el neoliberalismo exige a
los gobiernos las mejores tierras para su explotación, prácticamente
se paga tierra por deuda, incluso vida por deuda, pero es muy
alto el precio que pagamos para rendir tributo a la eflciencia en el
neoliberalismo.
"No puede sorprender que el neoliberal encuentre las
razones de la destrucción del medio ambiente justo en lapolítica
para protegerla. Si no hubiera ninguna protección del medio
ambiente entregándolo sin límites a las fuerzas del mercado, no
habría nlnguna destrucción de la natural eza".e0
La eficiencia va de la mano con la irracionalidad, lo cual genera
un fureversible peligro a la humanidad, puesto que éstas se centran
fundamentalmente en la dominación del mercado que desarrolla sus
propias leyes basadas en el despilfarro eficiente. Bien enfatiza al
respecto Win Dierckxsens lo siguiente:
Desde el punto vista de la eficiencia tenemos la paradoja
de que cuant¿ más riqueza natural se despilfarra para la
valorización del capital, más desarrollo tenemos y más riqueza
contable se produce. La disminución de la vida media sociál de
los valores de uso significa, por otro lado, su retorno al medio
ambiente como desechos. Al dejar de ser portadores de valor,
los productos pierden su verdadera misión en una economía
monetaria y retoman al medio ambiente bajo la modalidad de
desechos, contaminando la naturaleza y degradando el medio
ambiente."el
90 Franz Hin*ol¿mmsrt, El Orito del Sujeto, 1998, p. 240,
. .
'. -.-,.1
.dF..ád#re. t*
 BBernrz SANcroz Prnsr"¡.
Evidentemente que lo planteado por los autores es una patética
realidad en nuestro contexto, de tal manera que una ética ecológica
latinoamericana no puede basarse en la eficiencia del ambiente,
mucho menos en la explotación de lanattxaleza, sino que pasa por
un rompimiento con las estructuras de poder dominante, basadas
en un economicismo fr¡ndamentado en la apropiación y en la
explotación de la naturaleza que deja daños irreparables, hambruna
y miseria humana sobre la tierra. Sobre la eficiencia del mercado
dice rema¡cablemente Hinkelammert:
La eficiencia del mercado se mide por el mercado. Los
efectos sobre la realidad no son considerados. Luego, la
acción humana es eficienk si el mercado es total. Los efectos
desfructores total sobre los seres humanos y la naturaleza están
excluidos del juiciq. e2
El compromiso con la filosofia es generar un camino hacia
una ética ecológica, 1o cual es una exigencia urgente y decisiva que
vaya más allá de un mero discurso filosófico, pues en si misma la
ética a la que hacemos referencia se relaciona con la filosofía de la
educación, política y cultural. También es importante resaltar que
la voluntad política de compromiso con el ciudadano va más allá
de planes y programas ambientales sustentados en la eficiencia de
la naturaleza, pues ya los daños so¡ irreversibles, lo cual exige un
cambio de conducta, un rompimiento con las políticas económicas
internacionales y sobre todo una voluntad política nacional que
reintegre al ser humano a su íntima relación con la nattraleza.
Hoy en día se han desarrollado nuevas formas y estilos
de explotación basados en modelos meramente productivos
radicalizados en la eficiencia, ücho estilo se basa en un modelo
que,va en contra de la vida y de la calidad de vida del ser humano,
puesto que se explota la naturaleza hasta arrasarla para obtener de
ella la maximización de la ganancia que más bien tiende de esta
forma a la destrucción.
Las acciones de dominio sobre la naíralezason depredadoras
y predomina el sentido rentista y mercantilista, lo cual acenfua cada
vez más las desigualdades sociales, por cuanto ésta va acompañada
9l Win Dierclorsens,
Los Llmites de un Capitalismo ein Ciud¡danla, 199E. p 239.
9?F¡anz Hinkelammer{ Op. cit, p.240.
t ,,'
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
con la consumación de una ideología que domina e impera en el
mundo. Dicho dominio duplica la reproducción de los valores,
normas y formas de dominación social que incluyen, crisis social,
cultural y ecológica, como efecto de la i¡racionalidad instrumentada
sobre la base de las leyes del mercado como si se tratara de una ley
de la vida heredada históricamente.
Al definir las leyes del mercado como una ley metaflsica de
la historia, ella se arroga el derecho de aplastar a la humanidad
en nombre de su ilusión utópica. Se trata de la peor fomra de
destruir a la humanidad y a la propia tierra.,,e3
En este sentido, en el mundo ya se ha estimado la presencia
de un ciclo de crisis, de totalitarismos, de guerras, a propósito de
los fines del imperio mercantil, respaldado por la tecnocracia que
no es más que la antitesis de una ética de la vida. Como sustento
de lo antes dicho miremos a nuestro alrededor, en nuestro medio
social y urbano y sobre todo miremos más allá, con ojos críticos,
el fenómeno de las guerras. Tomemos como muestra sólo desde
Vietnam hasta la invasión de Irak ¿Acaso esto no pareciera
que estuviésemos como espectadores del teatro del absurdo?
Evidentemente, cabalga por el mundo un movimiento anti-ético
que se manifiesta fundamentalmente en las leyes del mercado.
Las leyes del mercado no tienen deberes con nadie, pero si
se atribuyen todos los derechos sobre la vida del planeta. Es así
como se extrae la savia a la nafuralezay a los seres humanos se
convierten en victimas de la injusticia social y política generada por
el neoliberalismo que capaz de inventar sus propias griour, .on lu
aceptación de los gobiernos de turno. Mientras, se desvanecen en
discursos y promesas de paz ante los organismos internacionales
que son sólo discursos.
También, tenemos que la nattxaleza al servicio del ser humano
sirve para pagar la deuda pública. Para lo cuales sometida a la más
irracional explotación, para ello, generalmente se deja al indlgena y
al campesino sin tierras, quienes pasan a la indigencia y púamuchos
es una muerte segura.
En una publicación de 199L, la CEpAL da cifras que
permiten visualizar el mecanismo que siguen estas conversiones
o caqies de la deuda. Instituciones u organismos extranjeros
93 Fnnz Hinkol¡mmort, Cultura dc la Esperanza y Sociedad sin Exclusión, 1995,
p.342.
 Bnmnz SÁxqm,zPnsLA Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad

compran títulos de la deuda externa a los bancos acreedores. se Latina y del Tercer Mundo ahora pagará lo que dejó esta piratería."
ftatade títulos de un deter,minado v¿lor nominal, que los bancos eTComo muestra de los antes
dicho pas¿¡mos a caracteizar parte de
venden a precios reales en los mercados secundarios de la deuda, estos males ecológicos.
precios que suelen estar por debajo del valor nomin¿l' La-CE?AL
analiza nueve caso§ de canje por naturaleza en América Latina.q

Esta conversión de deuda por naturaleza es, a nuesfa manera de

ver, un atentado a los derechos humanos, además que da muestra
de la arbitrariedad de la banca internacional y de los gobiernos
latinoamericanos que aceptan übhas medidas. Esto es una muestra
de la comrpción y la ineficacia de los Estados, que son tan
irresponsablás que muchas veces llegan hasta a aceptar basura tóxica
y hasta radioactiva por deuda. "Luego, el Estado se corrompe desde
ios dos lados: para [a burguesía, como fuente de ingresos, muchas
veces illcitos; y para el pueblo, como paliativo para el desempleo y
la pauperización."es

En cuanto a la deuda impagable en América Latirra, dice

Hinkelammert que es asl como se revela una.crisis del sistema
financiero intemacional, que logró hacer surgir una deuda sin
que hubiera una razón econó:rrica real. Para el mencionado autor,
la solución al pi:oblema de la deuda debe ser tan radical como el
problema mismo.

No se trata simplemeute de una anulacién de la deud¿, ni

es eso lo más importante. Cualquier anulación o moratoria no
puede sino ejercerpreiión para lograr replantear todo un orden
Lconómico mundiáL partiendo de un replanteo del sistema
' fi rianciero internacionáI.tr

La deuda no §e considera pagada, de acuerdo, a las §es

financieras, pero si miramos hacia la triste realidad doAmérica Latina,
evidentpmente que ya se ha pagado tiple, con la muerte de miles de
niñós y niñas, de mujeres y hombres, es decir de familias 9on{yidas
a la miseria e incluso a la indigencia, debido a la explotación de
los recursos naturales exffaldos del medio natural donde habitan
indígenas y campesinos, quienes se han visto en la necesidad de
abandonar sus tierras debido a la exigencia de la demanda de pago
por natttralez.a. "La muerte de millones de inocentes de América

9l4lnformedelacEFAL,cihdoporF. IlinkelaÍrfieft,ElGribd€lst{ieto, l99E' p. l0l'

95Idem. P. 104.
96 ldern, P. 48. ,
97 ldor¡. P. t?,
i

'¿;,Idit,r{itrj;rr1::§.J¡!,,1*il ,::,.,.#*,,¡;,1!i,¡.¡ j. il¡*:t.l ,',,;¡ ;:i:i',iil;,'.¡ ,, .,.,¡,#l&- !¡,;.¡,;i*i#ft*'¡ *',' ,."..*{,, i É ¡il¡{
 Ilr¿rlcl: Gnrro DE LA NATURALEZA

Nos parece muy oportuno plantear la crisis ecológica en

nuestra región venezolana en su íntima relación con el grito
de los pobres, de los olvidados de la tierra, quienes luchan para
ganarle tiempo a la vida. Al respecto, nos apoyamos en la obra de
Jean Baudrillard, El Crimen Perfecto, en analogía con el crimen
ecológico de Imataca, ya que nos parece que ésta es una realidad
que el autor mencionado plasma muy certeramente, en cuanto al
peligro galopante que existe hoy en día. En un lenguaje irónico nos
va despejando lo que él considera la historia de un crimen perfecto,
cuya victima de asesinato es la humanidad. Nos abre los telones de
un teatro fatal que representamos todos como espectadores ante el
paroxismo de una vida de apariencias.

Nos fundamentamos en esta obra para conüastar el pensamiento

del autor con la realidad venezolana, hoy, en plena amenaza de ser
victima de los planes y prognmas inspirados en un mal concebido
progreso. Muy similarmente se encuenffan zonas muy frágiles que
estiín en la mira p¿ra ser explotadas las riquezas mineras que ahí
yacen, así como otros minerales de mucho interés para las empresas
exüanjeras.

En este sentido, afirmamos categóricamente 1o siguiente:

Cuando los gobernantes del mundo cobren conciencia que gobernar
un pals no es poner en regalía a la naturaleza, mucho menos
seguirla sometiendo a la más irracional explotación, pues se trata
fundamentalmente de pensar la vida del ser humano, entonces, en
ese momento,tendremos paz y annonía sobre la tierra.

Observamos con asombro que en nuestro pals hay indicios

de un homicidio culposo, nos referimos específicamente a la
Amazonía, a las claras se aprecia que es un crimen sin criminal,
sin móvil, porque pareciera que no importara la vida de los seres
humanos que viven de los árboles, de los animales y de los ríos,
parece que la tierra, la vida, sólo fuese una mera apariencia.

Estaba convencida que llegaría un momento en la historia

donde Venezuela sería más sensible ante la situación ambiental del
pals, sin ombargo los planes y programas desarrollistas anunciados
y llovodor a cabo hsota el momento hablan por sl solos. Para muesüa
r.¡ dc cllo bnomü h "rontoncia do muertG" o el ascsinato do la

,,.&i,¡,,.*,,¡r,;,:,;:';i1,'¡¡;:1,i.',¡':¡,.i'ii*¡i*;¡ir,;¡*;-l*r'¡,.ri..*;s.¡ii.r.:¡ ':',rr:¡€kfft i¡:,:ii{,,i:,i#iiffi*¡¡¡Íf¡f¡}li -.: ,, ,. .: :: , +ri,,


reserva forestal de Imataca. Esto como oonsecuenoia del Decreto
minero-forestal, que en nombre de 1o sustentable ha sido aprobado
en Consejo de Ministros del 7 de septiembre 20A4, a partir del cual
se entrega a las empresas nacionales y trasnacionales el62%o de
lmatacapara el uso forestal y el 12% para el uso minero. Se trata
del nuevo plan de Ordenamiento y Reglamento por el cual se rige
nuestro país.
Es importante saber que el espíritu del Decreto original que
data del 40 1o señala como Reserva Forestal, fundamentado en la
conservación y protección de los recursos hídricos, por ser fuente
de energía hidroeléchica, así como en la protección de la flora y la
fauna.
Actualmente, la Reserva Forestal de Imataca al igual que la
faja bituminosa del Orinoco forma parte de los planes y progrcma§
desarrollistas de este gobierno, lo cual pone en evidencia la falta
de sensibilidad ambiental, al no tomaxse en cuenta la importancia
de zonas vitales para el país y para el planeta. Por cuanto, se
compromete un patrimonio común de todos los habitantes de este
planeta, evidenciando que no se esttí tomando en cuenta el respeto
por la vida, en tanto, que se impone conservar los espacios vitales
intactos, porque son una especie de reservorio natural para toda la
América es mostrar respeto a la vida misma.
Esta situación es común con los otro países que comparten
el Amazonía, puesto que es un olvido voluntario de la condición
ambiental de una zona clasificada por los científicos como de alta
fragilidad que además compromete a los habitantes naturales de la
zona que los llevaría al total exterminio o a la más infeliz carestía
de sobrevivencia.
Por lo tanto, es vital oír el grito no sólo del ambiente sino de los
seres humanos, los indígenas, que allí han habitado hace milenios
de años. En el decir de Leonardo Boff, cuando se ha planteado 1o
imperativo de oír tanto el grito de los pobres como el grito de la
tierra que sustenta la vida.
El grito de la tierra ya ha empezado a escucharse, cuando se han
quedado desérticas y sin recursos hldricos hectareas y hectáreas de
tierras en el planeta, zonas que antes eran selváticas y hrlmcdas y
formaban hermosos bosques plenos de latento vida animal' vogotal
i¡L. J-Éili4Btl
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
y humana. El grito de la tierra se manifiesta en tantos ríos secos
sobre el planeta, que han dejado a las familias que la habitaban en
la más cruel pobreza, al respecto pasemos la mirada por muchos
pueblos del continente africano.
Más aún, el grito de los pobres es patético a lo largo de todo el
planeta, manifestrándose en la inügencia y en la pobreza de grupos
humanos que antes vivían de la tierra y hoy prefieren dejarla para
venirse a las ciudades a formar los grandes cinturones de miseria.
Se han venido buscando el mundo feliz que ofrece la conciencia
industrial, mientras que lo que generalmente logran es dejar de
existir.
Sí, este es el precio que la humanidad promete pagax porque
nos hemos olüdado de las bondades de la tierra, evidentemente que
ya nos encontramos tan desaraigados de ella, que no nos damos
ni cuenta que el grado de deterioro en el cual estamos es como si
pisoteáramos su dignidad, al dejarla sin protección para la vida de
todos los seres que la habitan.
Todo esto ocurre justamente por el desatino y la falta de
responsabilidad de una real conciencia política mundial que a tavés
de la protección a la nattxaleza se permita decir únicamente sí a la
vida.
Ciert¿mente, es esa falta de voluntad política y de responsabilidad
la que contrastamos con el grave problema ecológico puesto que se
despliega en Imataca, al igual que la sierra de Perijá y otras regiones
en el planeta van en camino de ser victimas de un asesinato, tanto
es así que se estitn amparando en el nuevo Plan de Ordenamiento
y Reglamento de Uso. Un ejemplo de ello lo constituye el Decreto
Forestal minero para explotar los bosques de Imataca.
Los organismos ecologistas sostienen que el valor
económico total de un ecosistema incluye el no uso (del
bosque), el cual en muchos casos es superior al extractivo,
por lo que la entrega de este territorio de casi 4 millones de
hectáreas a empresas nacionales y trasnacionales madereras
y mineras, definitivamente convierte al actual gobierno en un
posible depredador de bosques, eliminando ta posibilidad de
obtener de este pulmón vegetal la mayor rentabilidad para el
pals.eE
98 Documonto dcl &rpo toolfulco AMIORANSA, on
,QUESTION, Z}M, p. 47 ,
¿ffi&i,
 BsArPJz S,iNcmz Pr¡¡-e
No se trata acaso de la historia de un 'ocrimen perfecto" cuya
victima es Imataca, muy similarmente como lo es el resto de la
Amazoniavenezolana, toda ella a lo largo y a lo ancho del territorio
es rica en recursos naturales que estián a la mira del ojo del satélite
estadounidense y de otros países industriales, para negociar su
explotaciórr, sin medir las consecuencias ecológicas y humanas, ante
la mente obnubilada e irresponsable de nuestros gobernantes.
Sólo entendemos por "mayor rentabilidad" la sustentabilidad
como una altemativa para respetar el modo de vida de armonía
con la ¡afrxaleza que allí prevalece, por parte de sus habitairtes
naturales Pemones, Yanomamis, Kariñas, y Waraos, enfre otros.
Además, se cuenta la preservación de especies únicas en el mundo,
la conservación del recurso hídrico y minero.
Se trata de una zona considerada como uno de los principales
pulmones vegetales del país, por lo tanto su diversidad biológica no
tiene precio, en la medida que allí radica la protección de los suelos
y de las aguas que se constituyen en reservas hídricas únicas en el
mundo, 1o cual debe ser tomado en cuenta por cualquier gobernante
i con previsiones futuristas que aprecie que se trata de una de las
:
principales reservas forestales más importantes de Suramérica.
?
No obstante, la Sierra de Imataca constituye la historia de una
muerte anunciada, por cuanto hay estudios científicos que constatan
t
la tenible realidad ecológica de la mencionada región. De acuerdo al
documento presentado por el grupo ecológico AMIGRANSAee. Así
mismo, tenemos el informe de la Universidad Central de Venezuela
:
!,t
y el Ministerio del Ambiente y de los Recursos Renovablesrm,
I advierte que los bosques tropicales están desapareciendo, por lo
i;
t'
cual no se deben exceder en la extracción de los recursos, en tanto
i: la renovación natural del bosque es muy lenta. A esto se suma los
impactos sobre el suelo, la hidro grafra,el microclima, la vegetación,
I
la fauna, la diversidad biológica.
$
En otras palabras, la vida se siente así misma y lazona forestal
de Imataca está viva. Segun F. Capra el ambiente es un sistema
vivo, por 1o tanto, los recursos que sean extraídos de nuestros
99 Informe del Grupo Ecológico Amigos de la Gran Sabana, presentado ante el
Congreso Nacional, 2004.
100 Informe del Instituto de Zoologla Tropical de la UCV y ol Minirtorio dol
Ambiente y de los Recursos Renovablcs, prcecntado en Diciombrc dol 2002,
L lf,. !a¿,' ."-'i:.ffi
Hacia una Etica Ecológica desde la Interculturalidad
bosques tropicales deben estar zujetos a una disposición ecológica
de la región o zona, pues así como peligra Imataca también peligra
la Amazonfa, pese a la advertencia de científicos, ecologistas y
otras organizaciones preocupadas por nuestro futuro ambiental,
preocupados por un provecho más solidario, más humano y más justo
de la naturaleza. "si no existieran las apariencias, el mundo sería
un crimen perfecto, es decir, sin criminal, sin victima y sin móvil.
Un crimen cuya verdad habría desaparecido para siempre,'y cuyo
secreto no se desvelanapor falta de huellas.,,r0r La preocupación del
autor antes mencionado es para señalar la falta de conciencia en el
ser humano, quien cabalgan ciego hacia su propia destucción.
Entonces, el atentado que existe confua la naturaleza se
podría considerar un crimen perfecto porque alll se conjuga una
realización incondicional de todos los datos, en la transformación
de todos nuestros actos, en ohas palabras se frata de la exterminación
de lo real a manos de la irresponsabilidad que campea en la que
pretende rcntabilizar y explotar sin medir las consecuencias
irreversibles que puedan ocr¡¡rir a mediano y a largo plazo.
Es tan diferente el pensamiento étnico sobre lo que significa
la natvralez.a, de la cual sólo toman de ella ro necesario para vivir,
porque esto se corresponde con su cosmovisión y su filosofia de la
vida, donde la Madre-Tiera es sagrada.
Cada parce_la de esta tierra es sagrada para mi pueblo, cada
-brillante
.--
mata de pino, cada grano dé arená
en hs playas, cada
gota de rocío en los bosques, cada altozano y hasla ál sonido
de cada insecto es sagrado a la memoriay'al pasado de mi
pueblo.ro2
Los seres humanos simplemente han olüdado su propia
natnralezao para rendirle culto al progreso; han pretendido quala
ciencia y la técnica resolvieran todos los males creados poiellos
mismos, incluso los ecológicos.
En este sentido, Murray Bookchin nos remite a la necesidad
de una ecología social, en tal sentido enfatiza que la misma no
puede ser paisajlstica ni tecnocríúica, puesto que ella lo que busca
es definir el lugar que verdaderamente le corresponde a la nafuraleza
l0l ldom. P, ll.
102 Cüt¡ dcl l¡dlo sortrlc, ltj4.
,'fr#"ffiffi*:*
 BB.rrp¡z SAHcHnz PnsLA
para los humanos, 1o cual -según él- no significa retoma¡ a la época
de las cavernas, sino de darle un uso social a la naturaleza, es decir,
ella para servirnos y alimentarnos de ella racionalmente, desde una
concepción integralmente asociada a las comunidades en armónica
convivencia con la nattxaleza.
No obstante, se persiste en darle a la
naturaleza un uso
mercantil, de irracional explotación, de saqueo, de penuria y
muerte: "Contaminen sus lechos y una noche perecerán ahogados
en sus propios residuos."lo3
En este momento la realidad ecológica venezolana al igual que
el resto enAmérica Latinaest¿l en una etapa cntica,pues está siendo
explotada de una forma desenfrenada. Esto es un acto criminal que
deja una huella muy honda, quizás sin vuelta atrás, pues se trata de
la destrucción del ambiente que a su vez conffibuye con la muerte
del planeta. Dice Baudrillard:
La perfección del crimen reside en el hecho de que siempre
está ya realizado -perfectum-. Desviación, desde antes de
t que se produzca, del mundo tal como es. Por tanto, jamás
será descubierto. No habrá juicio final para castigarlo o para
absolverlo. No habná final porque las cosas siempre han ocurrido
ya. Ni resolución ni absolución, sino desarrollo ineluctable de
I ias consecuencias. Precesión del crimen original -¿Cuya forma
I irrisoria fal vez se encontraría en la precesión actual de los
r simulacros?-. Nuestro destino, a partir de ahí, es la realización
tr de ese crimen, su desarrollo implacable, la continuidad del mal,
la continuación de la nada.l@
Si nos descuidamos o seguimos en la posición de espectadores
ante el gran Teatro del Absurdo de seguro que presenciaremos el
I crimen perfecto de lmataca,ella como victima sería la consumación
de ese crimen para darle Paso a la nada, sin juicio final, por cuanto
no habrá sino victimas sin victimarios, pues el desarrollo nos
sirve de gran simulacro y los gobernantes los conducentes a la
realidad aparente son sordos, mudos y ciegos. No podríamos dejar
de parafraser a Gandhi, cuando se ¡efirió al Hombre en el seniido
de ser artífice de su propio destino, en el orden categórico que él
es libre para escoger la manera y el uso que dará a su libertad.
103Idem.
104 Baudrillard, Op, Cit. p. 12.
r';¡8" ,,¿i§&,
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
Pero también nos advirtió muy sabiamente que el resultado puede
escaparse de las manos porque el ser humano teje la trama de su
propia destrucción.
Si nos destruyen lmataca, también estarían destruyendo
la Amazorúa, 1o cual sería un hecho que lamentaríamos, pues
entoRces estaríamos contribuyendo con u".l"r* la agonia"rotOgiru
yambiental que corre en c¿urera desbocada en la humanidad,
por cuanto estaríamos galopando en la continuidad del mal,
peor aún sería el comienzo para el retorno al caos, principio
del origen, o simplemente "la continuación de la nada.,,105
La naturaleza y el planeta estiín en manos de las leyes del
melcado y bajo el poder de la ciencia y la tecnología que fomenta
el dominio del ser humano contra el ser humano. Ella de la mano
con el liberalismo económico pone en la mira las regiones más ricas
en recursos, pero también las más frágiles, lo cual no sólo genera
muerte sino alteraciones climáticas y desertificación. Es la visión
mítica del crimen original,la de la alteración del mundo en el juego
de la seducción y las apariencias.
¿Estamos ante una realidad o en una apariencia que nos brinda
el mercado. Donde la realidad es la búsqueda de que no exista nada
o la apariencia es la ilusión de una vida sin dolidos ni dolientes? De
lo que se trata es de la puesta en escena de la ausencia de las cosas
por las vacías, plásticas, artificiales y artificiosas. En palabras del
autor en estudio es:
_ El.equivalente de un objeto puro, de un objeto que no lo es.
La equivalencia armoniosa de la nada por la naáa, del Mal por el
Mal. Pero el objeto que no lo es nos obsesiona sin parar cbn su
presencia vacia e inmaterial. Todo el problema consiste, en las
fronteras de la nada, en materializar eita nada, en las fronteras
del vacío, entrazar la filigrana del vacío, en las fronteras de la
indiferencia, en jugar de acuerdo con las reglas misteriosas de la
indiferencia.r06
Podríamos enunciar pensamientos y discursos de alerta, de
esperanza para hacer volver una mirada dolida de respeto hacia
nuestro ambiente, recordando que la voluntad determina los
principios vitales de todo ser humano como son el respeto y la
justicia.
105 ldom,
l0ó ldom. p. 17,
,,{E*§lE}ñÉ*,'
 Beern¡z SÁNcrrez PrREr,e
De acuerdo a Baudrillard la voluntad se interpreta como el
"fantasma de la voluntado" en virtud de la ilusión radical que se
produce desde el principio original, desde donde el mundo habría
sido alterado, entonces, el mundo sólo ha existido a partir de esta
ilusión, produciéndose éste desde allí, sin que jamás haya sido real
ni idéntico a él mismo. De tal manera que el mundo ha existido y
existe gracias a esta ilusión, lo que para este autor no es más que
el juego de las apariencias, "El lugar mismo de la desaparición
incesante de cualquier significación y de cualquier finalidad. No
sólo metafisica: también en el orden fisico, desde el origen, sea el
que sea, el mundo aparece y desaparece perpetuamente.roT
ooAlteración"
En este orden de ideas también hace referencia a la
del universo, entendiéndose por ésta aquella que se reabsorbe en la
"información creciente," es decir, la que termina siendo "información
absoluta," 1o cual no es más que "la equivalencia del mundo al mundo,
la ilusión final, la de un mundo perfecto, conducido perpetrado,
consumido, llegado al colmo de la existencia y de la realidad, al
mismo tiempo que al extremo de sus posibilidades."l08 Desde este
horizonte, vislumbramos a Imataca como una ilusión final, puesto
que siendo parte de este mundo perfecto, es también perfecto, en
su ecosistema ambient¿l y humano así fue creado, mientras que lo
imperfecto esta perpetrado y consumido por el ser humano, quien
está llegando al colmo de su existencia, pues es él mismo quien
acelera la "Alteración" e incluso el proceso de exterminio de esta
región. "esta es la esencia del crimen: si es perfecto, no déja huellas.
Así pues, lo que nos asegura la existencia del mundo en su carácter
accidental, criminal, imperfecto. Por eso, sólo puede sernos dado
por ilusión."1@
La alteración del mundo no es una ilusión sino una triste realidad
que se evade en la apariencia del Dios dolarizado. "Retroproyección
de una causalidady de una inteligibilidad fantasmal, de un orden
excepcional que no hace sino confirmar la regla del desorden
occidental, de que no es sin duda más que un episodio."rlo
Para Baudrillard nos movemos entre una ilusión y una verdad,
ambas son insoportables ya que nos orientamos hacia la "voluntad
de apariencia". Donde prevalece la "ilusión", el "engaño" o la
ilusión de cambio. Todo lo que ocrure al mundo no es más que
l07Idem. P.20.
l08Idem.
l09Idem. P.21.
ll0ldem.
T ,,#ffiS;
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidod
una voluntad sin voluntad, no tenemos una ética de la vida porque
ésta ha quedado en la nada, en tanto es pura ilusión. Por lo tanto,
la alteración del mundo proviene según el autor desde su origen,
cosa que en la modernidad toma una dimensión de incalculable
peligro. "Ante la inestabilidad, la reversibilidad natural del mundo.
No sólo la trasgresión, sino la misma destrucción, está fuera de
nuestro alcance."lll
La realidad venezolana no es una falsa ilusión en tanto que
puede sobrevenir un acto de destrucción que de hecho ya está allí
latente. Sí la destrucción del mundo está inscrita en la trayectoria
de las partículas y en las 'oturbulencias caóticas", de los sistemas
naturales, evidentemente ya estamos en presencia de ellas. F.sto
lo podemos apreciar ya en la desestabilización ambiental, en la
hambruna que deambula en el mundo, en la miqeria creciente, en
la caótica mendicidad, en la apocalíptica violencia, las guerras que
cabalgan en el mundo y donde el ser humano mata por la inmundicia
que ha producido la alteridad personal.
Bien enfatiza Baudrillard que el accidente final escapa tanto a
nuestra incumbencia como el accidente inicial. "Tampoco en este
caso hay que soñar. No añadiremos nada a la nada del mundo, ya
que formamos coparte de ella. Pero tampoco añadiremos nada a su
significación ya que no la tiene."tr2 Quizás se podrla catalogar las
palabras del autor de un agudo pesimismo, pero cuando ni las utopías
revolucionarias han logrado generar una conciencia, ni han logrado
cultivar el camino de una ética ecológica latinoamericana como el
despertar de una conciencia que contribuya a evitar la destrucción
de la tierra.
Esto no es ilusión, véase que en.la tierra muere un niño cada
minuto, desaparecen especies vegetales y animales cada segundo,
el recalentamiento, las lluvias ácidas y la contaminación de ríos,
lagos, mares y océanos, tampoco es una ilusión ni una apariencia
sino los efectos de un desarrollismo viciado de la modemidad. Bien
nos advierte Edgard Morin que si la modernidad se define como
una fe incondicional del progreso, en la técnica, en la ciencia y en
el desarrollo económico, entonces esa modernidad esüá a punto de
fallecer.
III ldom. P. 23.
l12 ¡üm. P,2r,
, ii'{+#¡ññ¡ ,,,,
g
 BB^qrRrz SÁNcnBz PInru
La modernidad representa un atentado para la humanidad porque
se ha desarollado bajo un excesivo abuso de poder, violentando la
natt¡ralezay alterando las relaciones humanas cuyo efecto es que las
mujeres y los hombres se desvanecen en la impotencia. En palabras
de Baudrillard "Nuesffa voluntad es como un embarazo nervioso,
o como una prótesis artificialmente inervada."lt3 La alteración del
mundo llega a la cumbre de lo grotesco, como prueba de que el
saber-ciencia se constituyó en un abuso de la tecnología. Veamos
que el poder de la guerra es la voluntad que gobierna el mundo. El
poder de los demás de disponer de nuestras vidas es ya una realidad
que galopa en el mundo. "Pero el derecho y el deber pata cada
uno de nosotros de disponer de noso-fros mismos todavía es más
peligroso."lla
Los países industriales le han puesto una condena de muerte a
nuestro planeta, para ello se ocupan de invadir nuestra soberanía.
Ellos mantienen sus satélites sobre nuestras regiones más ricas en
recursos: hídrica, petrolífera, minera, para luego ofrecernos la "gran
oportunidad" de vigilar, pero lo que ellos vigilan es la ilusión de
una voluntad. "La voluntad está atrapada por la libertad ilimitada
que se le ha dado, y se presta a ello gracias a la ilusión de una
determinación propia"rls. Para el autor esto es la no voluntad, en
tanto que nada ni es real, todo queda en la nada, e¡razónde lo cual
de qué sirve pretender reconciliar el orden de la voluntad y el orden
del mundo, si lo que predomina es la nada porque nada significa
nada, simplemente el mundo es una ilusión radical'
En relación al conocimiento tenemos que en la modernidad ést¿
se ha convertido en estrategia de poder y de dominio. En el decir
de Baudrillard, estamos a punto de volatilizar las huellas de nuestra
existencia, incluso hurtando las pruebas de nuestro mundo sensible.
Esa falta de sensibilidad hacia la existencia nos remite a precisar
una carencia filosófica hacia el milagro de la vida y a apreciar la
perfección de la naturaleza en su más viva. expresión.
^ Es importante puntualizar aquí que el autor haoe referencia a
que las huellas del pasado se han "vuelto virruales", mientras que
el presente está entiegaáo a la simulación, por ende lo virtual no
sól,o nos hace entrar como espectadores ala"era de la liquidación
l13 Idem. P.23.
l14ldem. P. 25.
ll5Idem.
a.
Hacia una Etica Ecológica desde la Interculturalidad
de lo Real y de lo Referencial"rl6, sino que también entramos a
la era del exterrninio del otro, esto equivale a una diversidad de
formas de alteridad, pues hemos entrado simultáneamente al pase
del exceso como soberano del mundo. Mientras el simulacro se
convierte en lo verdadero, lo verdadero se convierte en simulacro.
Lo más excesivo y patético que ocrure en el mundo no sólo es
que pretendan convertir el mundo en un mundo virtr¡al sino que se
trata de no percibir al otro en su propia existencia, radicando allí la
concentración de no ver al otro, entonces afirmamos que estamos
en "la era del exterminio del otro."rl? Baudrillard, en este sentido
menciona las formas de alteridad presentes que patentizan el crimen
perfecto:
La de la muerte -que se conjura con la terapia de
mantenimiento artifi cial.
La del rostro y el cuerpo, que es acosada por la cirugía
estética.
La del mundo, que se borra con la realidad virtual.
La de cada una de nosotros, que sera abolida un día con la
clonación de las células individuales."il8
De tal manera, que la consumación del asesinato del mundo está
centrada en los inventos magnificados de la ciencia, por lo tanto,
todo lo que acontece en el mundo está finamente justificado ante
la ilusión que representa la vida para convertirla en el exterminio
de la vida misma en el planeta, lo cual no es una ilusión sino la
indiferencia extrema que marcha en contra del mundo. "El aura de
nuestro mundo ya no es sagrada. Ya no existe el horizonte sagrado
de las apariencias, sino el de Ia mercancía absoluta."lre
Lo sagrado inexiste en la modernidad y cuando
está presente
aparece como un icono vacío en el objeto de consumo, así vemos
con malicia como los japoneses colocan el nombre de divinidades
a los objetos industrializados, sumándose a occidente al exterminio
total de la idea original de lo sagrado. Es así como todo pasa a ser
una efimera verdad, es decir una ilusa realidad que es la que nos
l16Idem,
llT ldcm. P. 149.
llt ldom.
ll9 ldom P. 103.
.¿#re*r tlt
f' Brerp¡z SANcasz PFoLe
obnubila y nos deja sin conciencia critica, por ello el mundo es un
crimen sin dolientes ni dolidos, es perfecto.
i
i: No nos cabe la menor duda que la idea de exterminio de zonas
§
vitales para Venezuela,paraAmérica Latinay para el mtrndo, no es
$ una ilusión ni un simulacro, sino que es la más patetica realidad,
ella es parte del plan de exterminio que se mantiene contra toda el
Amazonia,lo cual se interpreta como un peligro para Latinoamérica
sino despierta de su propia trampa. Lo más grave es que las
consecuencias allí pueden ser perpetuas, porque ésta se encadenaría
con el fin de otras vidas.
Ya no se necesita una conciencia crítica para ofrecer al mundo
el espejo de su doble: nuestro mundo moderno ha engullido a
i su doble alavez que ha perdido su sombra, y la ironía de este
§
doble incorporado estalla a cada instante en cada fragmento de
nuestros signos, de nuestros objetos, de nuestros modelos."r2o
t el maniqueísmo lace¡ante que persiste en las políticas de
t Ya no se necesita una sensibilidad hacia la vida, pues adorando
t
el objeto de consumo es como perdemos la identidad hacia lo que
acontece en el mundo, por ello ya no tenemos sensibilidad hacia 1o
que ocüTe al otro, no hay comunicación enhe nosotros, pues no§
preparamos panla nada. El fin es tergiversado a través de la idea
de un "Un mundo feliz",lo cual no es mas que la búsqueda de un
vacío absoluto que tiende a la ilusión de un mundo modelado."Si el
mundo debe ser perfecto, hay que fabricarlo."r2l
En este sentido, interpretamos que la conciencia latinoamericana
debe levantarse enlazada en un problema común, comulgar en un
propósito humano social y ecológico para proteger y defender el
Amazonía. Para nosotros el camino hacia una ética ecológica
latinoamericana radica en el rescate de una moral que proteja la vida
como un elernento primordial, como un punto cenfral, es decir la
ética'de la vida.
En la actualidad el ser humano aún no ha desarrollado una
conciencia de responsabilidad en relación al peligro que se cierne
sobre y contra la humanidad. Una muestra de esto se manifiesta en
las exigencias de la deuda externa, la cual condiciona el bienestar de
América Latima.Además, esto va mucho mas allá de lo que aparece
120Idem. P. 61.
12l ldem,
¡l ,tr*i&&;
Haciq una Éfica Ecológica desde la Interculnralidad
a simple vista, porque de lo que se trata es de un movimiento anti-
ético porque atenta contra la vida misma.
Veamos cómo las políticas económicas exigen la entrega de
la naturalezaparqser eiplotada irracionalmente, ion la acepáción
de los gobernantos de turno, sin prever ni medir las consecuencias
ambientales, nos van enmarañando en sus decisiones políticas, en la
medid¿ que éstas sonplanteadas como si fuese una decisión nacional,
como si cada uno de los ciudadanos y ciudadanas estuviésemos de
acuerdo con las decisiones de un grupo muy reducido del gobierno
que decide como si se ffatara de su propia hacienda.
Esto cada vez se torna más complejo para la sociedad civil
lo cual es aprovechado por los gobiernos, pues es así como se
despliega una política de desinformación y de confusión de
la sociedad civil. Ella muchas veces no peicibe ni comprende
desinformación que mantienen al individuo en un estado que va
más allá de la enajenación, pues es un estado de inconciencia
individual y colectiva que deja a las sociedades a merced del
mercantilismo productivo a escala irracional.
Esto ha servido parula prosecución de la inconciencia del ser
humano, que lo convierte en una victima y victimario del sistema.
Por lo tanto, de lo que se trata es de romper con la ideología
legitimadora de un orden económico que no toma en cuenta el
orden ecológico tan necesario parala vida. Es precisamente, con
ese rompimiento donde cabe conskuir los ideales de una ética
ecológica latinoamericana abrazada por su acción liberadora,
por un fln de bienestar común, de respeto y de preservación a la
naturaleza.
Consideramos oportuno decir que en el presente se impone
aunar esfuerzos para que haya una conciencia ecológica que dé
paso a la ética ecológica latinoamericana cuyo principio es aupar
una acción liberadora, desplegada a partir de políticas sociales que
tgngan como fin el bienestar común en armonía con la naturaleza.
Eticamente hablando, la salvación o la preservación de la tierra,
debe ser proyectada como objetivo vital entre naciones.
En América Latina la decisión política debe partir de una acción
mucomunads do dofonsa por las regiones vitales, por ejemplo, la
Amazonfa, dorida bdo¡ los palees que comparten t¿n importante
.afi-*§Éffi1',
r BSATPJz SANcHsz PREL,{
región deben pautar geopollticamente y con un verdadero sentido
de responsabilidad los planes y progrcmas de un espacio tan vital
para el planeta.
Cadavezmás se impone lanecesidad de un gobiemo central
-ronvergencia hacia un consenso en la diversidaó- a fin de
gestionar las cuestiones que atañen a toda la humanidad, como
son las de la defensa del planeta, de la alimentación, del hambre,
de la enfermedad, de la vivienda, del derecho de los pueblos, de
lapaz,del futuro común, etc.r22
De tal manera, la visión de una ética ecológica pasa por hacer
valer un alto grado de conciencia como ser humano, que sólo podría
ser encaminada por una voluntad política internacional, abierta
al diálogo, que rorrtpería con el modelo de desarrollo basado en
la eficiencia de la natwaleza. La misma requiere romper con la
economla de mercado para propiciar un modelo de economía más
humano.
Este modelo al cual nos referimos es aquel donde lanaturaleza
no sea explotada irracionalmente y donde el ser humano trabaje para
vivir en pazy ro para enfregar su vida a las economías de mercado,
ni al imperialismo de poder que se yergue en el presente, donde
se mueven los intereses de acumulación de capital. Este tema será
tratado más adelante.
Tior¡. Orito do lo¡ Pohta,3000r p, ló9.
122 Loonardo Bofi, Ecologla: Grito dc la
*:ffi,
Er, Acu¡.: I)nnacno NATuRAL DEL sER HrrMANo
Una gota de agua contiene el milagro de la vida. Esta
particularidad del agua es universal, de hecho mÍrca una pauta
filosófica en las sociedades que pueblan el mundo. En Grecia, a
partir de Tales de Mileto, filósofo de la naturalezay qurizá.s uno de
los primeros racionalistas griegos quien se adelantó en concebir
el agua como el generador de toda vida. Es decir, el origen para
él radicaba en el agua, de lo cual no estaba errado, pues hechos
cientlficos han demosüado que a partir de la humedad proviene y se
genera la vida.
La complejidad de nuestra existencia tiene su punto de partida
en el agua, de ella se origina la vida, para dar paso a otras vidas
que son elementales para conformar las cadenas ecológicas que
preservan la vida en la tierra.
En el pensamiento mítico amerindio la naturaleza marca una
pauta filosófica de frascendencia ética, en la medida que representa
un ser divinizado que contiene el don de la vida."Podríamos decir en
slntesis que las aguas simbolizan la totalidad de las virtualidades; son
fons et origo, maftiz de todas las posibilidades de la existencia."l23
Es decir, el agaa es el ser que abriga la vida.
En este orden de ideas para los Wayuu, la lluvia (Juya) constituye
una divinidad que simboliza el prodigio de la vida al unirse a Ma,
la tierra, para que nazca Maleiwa, divinidad que crea al hombre y a
la mujer, él liga la tierra con el agoaparu conformar la sustancia del
origen. También es el ser sagrado que contribuye a generar vida en
la Madre Tierra, pues el agua llega a constituir una especie de semen
celestial.
Para la sociedad úadicional Añú, el agua representa la sustancia
original a partir de la oual es creado el hombre y la mujer. "Ariyuu,
después de haber creado el cosmos y organizado la tierra, se dedica
a cteat al hombre y ala mujer, estos formándolos del agua, como
principio de la vida, pero mezclados con la arena."l2a Se videncia
al agua como el ente originario de toda vida. Vemos que para este
123 Mircea Eliade, oitado por Angel Luengo, Op,cit. p. I 14.
124Angcl Luongo, Le Comogoltla Al$, on Rwista UNICA, Volumen 10, No.l,
Eno¡o.Abril, 2009, pp 105.127, p, I 17.
,,*j#Sffi&i *
 Bn¡rnz SANcr¡ez Pn¡ur
pueblo "el agua desde la perspectiva cosmogónica, es reconocida
como la Madre; para los Añú, la Madre es el agua del mar, el agua
celeste, en todo caso es saludable parala comunidad."r2s
En este sentido, interpretamo, qrr. .r, la cosmogonía Añu el
agua constituye la esencia de la vida, por ende, queda simbolizado
el origen a partir de la relación agua del agua con la existencia. Esta
particularidad del pensamiento míüco amerindio nos da una muestra
de la complejidad del pensamiento desde la pluralidad cultural,
lo cual nos permite comprender la diversidad de la visión de los
saberes, los mismos generalmente están enlazados a la sacralidad,
donde los fenómenos de lanaturaleza,tales como latierra, el agua, el
fuego, el aire, son divinidades que inspiran la palabra mítica, palabra
de respeto, palabra de rituales, palabra del origen.
En la cosmogonía, en el mito, en el ritual, en la iconografía,
las aguas desempeñan siempre la misma función, cualquiera
que sea la estructura de los conjuntos culturales de qu9 formen
parte: preceden a todas las formas y son soporte de todo lo
creado.126
La concepción amerindia referida a la sacralidad de los
fenómenos de la naturaleza comporta una concepción que ha sido
erróneamente interpretada históricaméhte como de una conducta
salvaj e. No obstante, es el fundamento principal para cuidar el espacio
que les ha correspondido habitar, convirtiéndose en guardianes de la
mtsma.
Estos discursos están hechos de palabras: palabras que habrá
de llevarse el viento para diseminarlas por el mundo; palabras-
concepto que forjan nuevos sentidos teóricos y nuevas formas de
ser en el mundo; palabras-savia que arraigan en la tierra y que
consffuyen territorios de vida; palabras-idea que se hacen sangre
, y came de nuevas identidades, que se incorporen en el ser de las
personas; lenguas de los pueblos, lugares para habitar el mundo
y soñar el futuro, profecías realizables en la construcción de un
mundo sustentable.r2T
La carencia de argumentos filosóficos que nos permita comprender
el significado del agua como ente originario para la generación y
125 Angel Luengo, Idem. p. 119.
126 Mircea Eliade, citadoporAngel Luengo, Op. P.114.
127 Enrique Leff, Discursos Sugtontablos,2008, p. 19,
;illffiÉ
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
regeneración de la naturaleza semeja un eslabón perdido en nuestra
conciencia humana.
El agua para el amerindio era sagrada,incluso en el presente deja
de ser un bien común para convertirse en un propósito mercantil,
puesto que 1o han convertido en un bien comercial. El precio que
tenemos qug pagar es muy alto, incluso a costa de la vida de los
más pobres, lo cual está generado un problema de magnitudes
incalculables. Pues, el agua que desde los tiempos del origen era
parte del orden del mundo, ahora es un bien privatizado, rentable,
vendible y mercantilizado a un elevado précio. "El agua se ha
convertido en un gran negocio para las corporaciones-globales,
que ven me-rcadgs ilimitados en la creciente escasez y ilemanda
del agua."t28
La proaiedad del agua que antes estuvo controlada por la
comunidad, 1o cual implicaba que ésta era manejada como un
recurso comunitario para garantizar su sustentabilidad, comienza
a sufrir un cambio, pues los gobiernos que abordaron su control
de urr tiempo para acá, ahora permiten que se vaya desarrollando
paulatinamente un proceso de privatización que pone en peligro a
la humanidad.
Las consecuencias del agua embotellad¿ van más allá del
de precios y su insalubridad. La industria embotelladora
incurre en un alto costo por residuos ambientales. En los
años setenta, 300 millones de galones de agua embotellada se
vendieron en contenedores de plástico no renovable. Para 1998,
esta cifra rebasaba los 6.000 mil millones.l2e
Es indudable el grave problema que tenemos, pues por un lado
se paga un alto precio por tan preciado líquido y por offo lado, se
contribuye con la degradación del ambiente, en la medida que los
envases donde se vende el agua no es biodegradable y se coñvierte
en basura tirada por todos lados, convirtiendo en un símbolo
de la insalubridad. También es un indicador de la inoperancia
gubernamental que impera en el mundo.
Por lo antes dicho se infiere que aumentan los niveles de
degradación del ambiente, al mismo tiempo que contribuyen a dejar
sin agua a los pobres de la tierra, pues la privatización dél agua los
deja sin derecho a este vital liquido, lo cual es como dejarlos sin
derecho alavida.
Las aguas y los saberes demandan su derecho de ser. Dejar
ser al ser, significa dejar que las aguas coran y escrrrran en un
128 Vandr¡u §hlvr, L¡¡ Ouonas del Agua, 2007,p 107.
129 Vrnd¡o¡ thlvr, Op, P, I 10,
=€@ gt
r BB¡rr¡z SANcnsz PIREI"a
diálogo libre de saberes. Que los saberes sorban el agua y las
aguas se embeban de saberes.r3o
Dejarnos sin derecho al agaa es clarameflte un deterioro de
los derechos humanos sobre el agua, lo cual en el presente es un
fenómeno global, puesto que la privatización no sólo afecta el
derecho histórico y democrático de los pueblos al agta, sino que
también los dejan sin derecho a subsistir.
Las aguas de este planeta corrieron libremente irrigando sus
territorios de vida, abriendo cauces y cuencas, para desembocar
en mares que se extienden hacia nuevos horizontes. Las nieves
de sus cimas bajaban por las laderas de las montañas; el agua
llovía sobre el follaje de los árboles que suavemente se la
sacudlan rociando pausadamente la tierra que la absorbía en sus
mantos freáticos como reservorios de fertilidad.r3t
No sólo se está llevando un.proceso para inhabilitar el derecho
de los pueblos al agua sino que esto constituye un atentado cultural,
por un lado, tenemos sociedades que aún visionan el agua como
un ser sagrado, también tenemos que muchos pueblos no pueden
seguir desarrollando sus economías de subsistencia, en cuanto a la
agricultura, el pastoreo y la pesca. Pues, simplemente no pueden
acogerse al derecho universal que representa el consumo del agua e
incluso un derecho histórico.
El agua es un bien comunal porque constituye la base
ecológica de toda la vida y porque su preservación y distribución
equitativa dependen de la cooperación entre miembros de la
comunidad. Si bien el agua se ha manejado como bien comunal
durante la historia de la humanidad y en culturas diversas, y
no obstante que la mayoría de las comunidades administran
los recursos hídricos como propiedad común o tienen acceso
al agua como un bien público compartido por todos incluso
en la actualidad, la privatización de los recursos hldricos está
' cobrando auge.r32
El agua es el líquido a partir del cual somos, pues toda nuestra
vida depende de tener acceso a é1. Por lo tanto, es un bien común
que debemos proteger, 1o cual, es competencia de los gobiernos
regionales y nacionales velar porque el agua no se privatice y
130 Enrique Leff, Op. p. 228.
l3lldwlp.226.
132 Vandana Shiva, Op, cit. p.37.
il , r#ffe
Hqcia una Etica Ecológica desde la Interculturalidad
además debe mantenerse en vigilancia por el buen suministro de
este servicio porque sin éste bien común los pobres se convierten en
más pobres. También es competencia de los gobernantes del mundo
frenar el fenómeno de la privatización, de lo contrario tenemos en
puertas una hambruna universal a propósito de las crisis ambientales
generadas y que repercuten directamente en la vida de los olvidados
de la tierra.
La crisis ambiental y su articulación retroalimentante
con la pobreza, la violencia organizada y las migraciones
compulsivas mueshan a las claras que el fenómeno capital de
nuestro tiempo, denominado globalización, es un fenómeno que
contiene ingredientes autodestructivos, pero al mismo tiempo
contiene también los ingredientes que pueden movilizar a-la
humanidad parala búsqueda de soluciones planetarias basadas
en la necesidad de una antropolítica.t33
El agua simboliza el reservorio de la vida, es el recurso mráximo
para preservarla, sin éste la vida es violentada seriamente, por
cuanto es arrancarles los elementos básicos para producir los
alimentos necesarios para el consumo cotidiano. Así, el monopolio
de la tierra, en manos de una industrialización compulsiva, conduce
a los que viven de latierr:a a subsistir, sin medios y sin posibilidades
de tener acceso al consumo hídrico, convirtiéndolos en seres sin
esperanzas para vivir.
De esta manera, ecosistemas enteros son mutilados por el
hornbre. Se ataca la biodiversidad. Con la desaparición acelerada
de los bosques se da simultáneamente la "evaporacién" de las
zonas húmedas, al mismo ritno. Estas zona, que acumulan agua
durante las precipitaciones y le permiten distribuirse durantá h
temporada de secas, son una tras otra drenadas y saneadas para
transformarlas en zonas agrícolas. Evidentemente, el objetivb es
loable.la
Ciert¿mente, la agricultura es una de las actividades económicas
más importantes en el mundo, pues de ella depende la producción
alimentaria. Sin embargo, la agricultura es la mayor cónsumidora
de ag_ua, además que por las nuevas prácticas de cultivo expulsan
fes99h9¡ de aguas contaminadas en los suelos (insecticidas,
herbicidas y otros abonos ricos en nitrato), que finalmente
contaminan las fuentes naturales de agua dulce.
133 Bdgu Morin, Bdt¡c¡r on la era Planetaria, 2003, p.ll0.
134 Mlohcl Crmdorru y ohror, Agua para todor, 2006, p. 23.
r¡,l-#á#§Éiffi*i#¡ ¿" i-"
r Brernz SANcuez Pnr¡.¡.
De acuerdo con el World Resources Institute, casi 66%o de
i
las tierras agrícolas fueron dañadas en diversos grados por la
t erosión, la salinización causada por un riego excesivo én las
zonas donde el drenaje es malo, las degradaciones biológicas, el
agotamiento de los suelos o la contaminación. Pero no sólo los
agricultores son culpables de estos errores. Se les ha incit¿do: era
t necesario aumentar la producción, alimentar una población que
crece exponencialmente. 135
En Latinoamérica tenemos problemas de contaminación que
empiezan a tener graves consecuencias en las regiones más ricas en
agua. Vale destacar una vez más la Amazonía, por constituir ella la
región que guarda el mayor potencial hídrico del mundo, solamente
I
el rfo Amazonas tiene 6.992 krll.., además el cauce de ríos y tipos
¡
de agua conforman distintas condiciones geológicas, topográficas
t (este punto fue tratado en el punto anterior a partir del caso de
I
I
y geomorfológicas que generan diferentes ambientes acuáticos.
Entre las cuales se destacan las consideradas aguas claras o de alta
transparencia, bajo PH y baja productividad. Estas se caracterizan
por los suelos arenosos y que se originan en las zonas más antiguas
I de la cuenca (escudos del precrámbrico y paleozoico).
Una muestra de la falta de conciencia ecológica la tenemos
en la situación ecológica y ambiental en la Amazonía a pesar de
la importancia de esta riqueza hídrica, tenemos que los gobiernos
que la comparten no la protegen sino que la explotan de una forma
irracional e incluso sin medir los impactos ambiéntales a los ríos
que son provocados por el desaforado manejo de la zona. Entre
estos tenemos la deforestación masiva producto de la explotación
maderera y la explotación del oro y el diamante. "Los proyectos
de destrucción de los bosques amazónicos se apoyan en premisas
ideológicas que a veces pueden parecer convinceqtes. Por de pronto,
la mayoria de los empresarios se apresuraJárr a aducir "razones
hutnanistas"l36
Tenemos que la contaminación por hidrocarburos es alarmante
debiáo a los relaves mineros y otos desechos contaminautes que
entran en contacto con el suelo, generando un proceso de evaporación
y penetración que altera el intercambio gaseoso del manto vegetal de
la atmósfera. Además que hay una ñ¡erte contaminación a la fauna
marina que es uno de los principales medios de subsistsncia de las
comunidades indígenas y campesinas aledañas.
l35Idem. P.25.
136 Mires Femando, El Discurso de la Naturaleza Ecologla y Polftlor atAmérica
Latina, 1990, p,
133.
,"íHmE:
Hacia una Etica Ecológica desde la Interculnralidad
A esto se suma, la indiscriminada manera de extracción del
oro en el estilo más despreciable para la naturaleza, especialmente
los ríos. Tenemos que para obtener un grano de oro Je utiliza de
gno a lres gramos de mercurio, además de cianuro y detergentes,
implica glre se arrojan cerca de 24 kilos de mercurio por
!g- 9ual
kilómetro cuadrado de río. Estos agentes químicos aumentari la
concentración de nitratos que propician el crecimiento de algas y la
euffoflzación de lagos y áreas de inundación, que afectan el iestó de
organismos de los ecosistemas acuáticos. Los seres microscópicos
que participan en el proceso de formación y oxigenación del iuelo
mueren instantáneamente, por ejemplo, en los ríos la comunidad
ecológica afectada es el plancton que muere por asfixia.
La tala indiscriminada y sin programas de reforestación
Imataca) tiene serias consecuencias para el recurso hídrico, puesto
que la deforestación constituye una amenaza creciente para la
disponibilidad de agua, por cuanto afecta el acido hidrológico.
Asi tenemos que la sedimentación es grave debido a la intensa
deforestación, principalmente en las vertientes de piedemonte
andino, cuya sedimentación está acelerándose en loJ ríos de la
llanura amazónica, favoreciendo desbordes asl como la alteración
de su curso y la dinámica fluvial.
También se agregan los tóxicos que van a pdrar a los ríos a
consecuencia de los químicos que utilizan en el mercado de la droga,
nos referimos a la conocida como cocaína que pata su elaboración
utilizan una pasta básica que genera un promedio de dos toneladas
de precursores químicos (acido sulfiirico, cal, gasolina, kerosene,
permanganato de potasio y amoníaco), que son arrojados a los ríos
amazónicos por hectiárea de coca procesada una vez utilizados estos
elementos tóxicos.
Por otro lado, la mayoría de las localidades amazónicas no
cuentan con red de alcantarillado, por lo tanto, las aguas servidas
son arrojadas al río sin previo tratamiento, por lo tanto esto
constituye una fuente de contaminación parala fauna, la flora e
indudablemente a los seres humanos.
56lo 46% de la población tiene acceso a este servicio.
Por lo tanto, aguas para consumo humano estiín contaminadas
debido en buena parte a que casi 70% de los vertederos de
residuos sólidos son a cielo abierto. Se calcula que llegan a los
rlos 1.700.000 Uaflo de desechos y 600l/s 6s 1¡*¡r¡u6ol.trz
:,'*&F#¡
 Bpernrz SANcruz P¡ner.¡.
La evidencia no está en la sustentación de nuestra exposición
r sino ante la situación planteada, donde la Amazonía es la muestra
innegable de una latente realidad, puesto que además hay carencia
de programas de protección ambiental de esta región, pese a que
una diversidad de estudios científicos han demostrado la vital
importancia que tiene esta región para la conservación del planeta.
Nos llama a reflexión la ausencia de una conciencia ecológica,
la misma, perdida a partir del proceso histórico de nuestras
sociedades que entraron a un llamado desarrollo sin medir las
consecuencias, sociales, culturales y ecológicas. También en la
medida que nuestros gobernantes latinoamericanos se han sumado
a la descabellada posición de ofrecer nuestra naturaleza para ser
explotada irracionalmente por empresas trasnacionales que no les
importa nada los daños irreversibles que causan al ambiente.
Veamos, como muestra de lo antes planteado otro caso, nos
referimos específicamente a lafaladel Orinoco, la misma, pese a ser
uno de los mayores reservorios de agua dulce en América Latina,
será explotada masivamente por empresas trasnacionales entre las
cuales encuentran empresas de Francia, India, Argentina-Uruguay,
EEUU, Rusia, Brasil, Irán, Chile, Ecuador, Japón, China, España,
Vieüram, Portugal, Malasia, Cuba, Noruega y Bielorusia. En este
sentido, dice el Presidente Chánez:
Aquí hay pehóleo para los próximos 200 años, por la
magnitud de las reservas probadas que tenemos en la Faja.
Daremos un salto importanúe a finales de arIos, cerca de 300 mil
bdp y otro salto en 20l4,lo que nos va a acercar a un millón de
r38
barriles adicionales.
La explotación de laFaj a del Orinoco sólo estráreferida aproducción
y a ganancias, incluso se han fijado metas. "La producción de la
Faja estará cerca del millón de barriles"l3e Sin embargo, para nada se
menciona la existencia de algun progftrma de atención y de impacto
amb'iental. Esto podrla generar en los próximos treinta años un clima
de tensión porque el impacto ecológico puede ser irreversible para
la Amazonía en particular y para nuestro país en general, máxime
cuando tenemos la presencia de informes cientlficos que advierten
sobre la ftagilidad del ecosistema marino y terrestre en la región.
137 Información tomada de Google Amazonas-Agua.
138 Panorama, 3l de mayo, 2010, Sección Economla, p.4.
l39ldem.
\, :.; *¡ir' ,ffi
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
Hay voces de alarma que pueblan el mundo para anunciamos
que el agua será más importante que el petróleo. Esto no es una
miíxima, ni una sentencia, sino que la realidad es que hay muchos
países, entre los cuales se destaoa EEUU que tiene mucho interés en
la prodigiosa región amazónica. Por lo tanto la cuenca amazónica se
podría constituir enzona de conflicto por el control del agua.
Con sus cientos de afluentes, el amazonas recoge las de una
cuenca de mas de seis millones de kilómetros cuadrados, la mitad
de Brasil y el resto repartida
entre Perú, Ecuador, Colombia,
Bolivia yVenezuela. Se estima que el Amazonas descarga
entre 34 y 2l millones de litros de agua por segundo y deposita
diariamente, unos tres millones de toneladas de sedimentos cerca
de la desembocadura. Los aportes anuales del río suman una
quint¿ parte de toda el agua dulce que desemboca en los océanos
del mundo entero.rao
Cuando la vida humana depende de la complejidad ambiental,
entonces se impone categóricamente una voluntad política que sea
vigilante de los recursos naturales. Por supuesto, esto nos lleva
a exigir que los gobernantes latinoamericanos cumplan con su
responsabilidad y que se comporten como líderes en cuyas manos
esíá el futuro del mundo, donde se requiere ser personas de primer
orden.
Tenemos que sólo Brasil posee el 60% detienaamazónica, siendo
esto verdaderamente preocupante por ser éste unos de los países
más agresivos en conquistar y desaparecer áreas plenas de vida
en la mencionada región amazónisa.
La red hidrográfica de la Amazonía con sus más de 7.000
mil ríos posee el 20%o de las reservas de agua dulce del planeta.
La importancia estratégica de esta riqueza se acrecienta por dla
en la misma proporción el deterioro ambiental. El agua potable
es ya un recurso escaso en la naturaleza causante de muchos
conflictos actuales. lal
Si nuestros gobernantes suramericanos no establecen una
estrategia geopolítica de verdadera integración y de defensa de
la Amazonía, sino buscan desarrollar una conciencia ecológica
a partir la educación, sino fomentan programas de economías
140 Google, Ecoestratcgia.com, Foro Económico y Ambietal. Especia Amazonla:
La Cucnca dol Amazon¡r: Pooible zona de conflicto por el contol del "oro azul",
l4l ldom.
''ffi.' ¡*19,
 Bnernz SANc¡cz Prnru¡, Hqcia una Etica Ecológica desde la Interculfuralidad

I
autosostenibles, sino paran las intervenciones y la explotación de Estamos conscientes que en el presente un nuevo orden debe
nuestros recursos nattnales por empresas exüanjeras, er¡ide,ntemente surgir para salvaguardar la humanidad debe partir de la ecología,
que como dice Braudillard serían partícipes de la perfección del poniendo pri4cipal atención a la tierra y al agta, al ser humano y a
crimen. Estarlamos frente a frente ante un hecho abominable, en la todos los seres vivos que pueblan el planeta, pues se trata del deber
medida que el agua de la Amazonía es un recurso estratégico para ser, fundamentaknente de responsabilidad para desarrollar una
los países suramericanos. protección a la vida del planeta. "Es nuesfra esperanza que ésta sea
la semilla para un nuevo compromiso de cuidar el agua como el
El suministro y la calidad del agua dulce será crítica en el
recurso más precioso y elemental".l4s Sin aguapotable no podríamos
siglo XXI. Actuabnente, existe un 20 por ciento de déficit de agua
en referencia a la población mundial, elevrindose en un 30olo su desplegar nuevas razones para concebir la vida, pues sin agua no hay
acceso antes del año 2025, con lo cual afecta aproximadamente condiciones para la vida.
a 50 países del mundo.ra2
El agua nos remite al origen desde una interpretación teológica,
Para hablar de ética ecológica, secuencialmente, antes filosófica e incluso científica, para repensar la vida. Pues sino
tendríarnos que partir de la presencia de una conciencia ecológica, la repensamos la vida no tendremos la posibilidad de dar cuenta de la
cual encontramos que se ha ido perdiendo a partir de la penetración existencia para los tiempos venideros
y aceptación de un paradigma desarrollista que raya en 1o irracional.
Por lo tanto, la acción determinante en el presente radica en unión
de la voluntad política suramericana, que se erija en defensor de la
Amazonía, como bien común de las comunidades que pueblan el
mundo.
El agua de consumo humano en laAmazonía por el momento
se puede catalogar de recurso natural renovable y abundante; pero
esa connotación puede cambiar ostensiblemente en el mediano
plazo por los procesos productivos y extractivos que inciden en
el ciclo hídrico, al continuar con la din¡ámica de deforestación en
la Amazonía y al generarse impacto sobre el ciclo hidrológico,
con ello se limit¿ a las actuales y futuras generaciones de su
contemplación, usos y manejo a libre albedrío.ra3

A pesar de los agravios irreversibles a la naturaleza, hasta

el momento, creemos que aún se pueden desarollar programas
de atención a los impactos ambientales en la región Amazónica
pa.ra salvarla y restituir ésta en condiciones verdaderamente bajo
protección ecológica, pues éste no sólo es un patrimonio de la
humanidad sino que es la obra maestra que rinde tributo de la vida en
el planeta. "Es nuestra sagrada obligación con el planeta, con GAIA,
modifica¡ nuestros valores para que nuestra primera ocupación sea
purificar las aguas, proteger las tierras y cuidar de los árboles:"r4

142ldem.
l43Idem.
l¿14 John Todd, Un ordcn oconómico eoológico, on Gaia, 2006, p. 139, 145 ldcm, P. 139.

,'dS .{dry, ;¡ffik ,101

 C,npiruto IV
VrtotvqNoo uNA Éorn Ecotóetc.t
L,enxo,erunruc,ev.r
 Vrsrox¿.N»o *n Érr"o Ecor,ócrc¡, LrrrxorvrrRrcANA

"La tierraestá preñada de dolor tan profundo

Que el soñador imperial meditabundo sufre
Con las angustias del corazón del mundo"

Rubén Dario

Abordamos la üsión ética desde el pensamiento de filósofos y

filósofas que piensan lo latinoamericano desde un contexüo mrás justo
y más humano, es decir, desde lo que significa la üda, partiendo de
un planteamiento ético que bien se podrla desplegar en el mundo
como se ha expandido la moral religiosa para resguardar valores
espirituales y resguardar la vida familiar y social, así de manera
similar, creemos en el despertar del ser humano para defender la
tierra y protegerla desde todas las sabidurías.

En esta perspectiva interpretamos lo ético en relación a la

dimensión ecológica desde el visor filosófico de algunos
pensadores y algunas pensadoras que despliegan su preocupación
por el futuro de la humanidad.

E¡rruout I)ussp¡,: Errca on r¿ Lmnnlcrón

Para Dussel, la realidad social impone lo ético, porque en si

mismo es un problema, primeramente de responsabilidad del ser
humano para con el otro, lo cual lo obliga al deber ser, creando
concie¡rcia del grave problema que se ha generado en la humanidad.
Se trata pues de crear conciencia de que la industria pesada ha
creado un daño ineparable y si seguimos en la política del desarrollo
tecnológico, gntonoes es conducente al camino de la destn¡cción
total del planeta.

En su obra Ética Comunitaria, el autor en estudio, plantea:

"Toda egta "ética comunitaria" es un camino que se comienza."ltr
En efie orden de ideas, el autor plantea que el pobre reclama las
noeosi&dcs dc él como oprimido, por la lucha conha la dominación,

11óBnrlquo Dunol fuoCorurtrertr. p. 10.

.'gff&¿ ¡f- .¡;*

 Brern¡z SANcnnz Pr¡m
las estructuras y las relaciones establecidas. En este sentido refiere:
Lo ético es así trascendental a lo moral. Las morales son relativas:
hay moralidad azteca, hispánica, capitalista, comunista. Cada una
justifica la praxis de dominación como buena. La ética es una; es
absoluta: vale en toda situación y para todas las épocas: la ética es
sarrta."t47 El planteamiento del autor se basa en una filosofia de la
liberación, para lo cual se funtlamenta en una praxis de liberación
del oprimido por la ideología y por las prácticas distorsionadas
que le otorgan al hombre el poder de decisión, es decir, "prácticas
machistas, pedagógicamente alienado y todo encerrado en un
fetichismo idolátrico. "1a8
Dice Dussel que la llamada filosofia de la liberación va más
allá de un saber teórico, por cuanto estii articulado a la praxis de la
liberación de los oprimidos, lo cual es precisamente la piedra angular
de este autor. Es por ello que arremeté contra la filosofia fradicional,
afirmando que ésta es acrílica de la opresión y del esclarecimiento
de la pra:ris de liberación. En este sentido, es recurrente alertar a la
humanidad de la responsabilidad auto conciente:
La conciencia étic¿ de la humanidad se transformará a corto
plazo en la ultima instancia de una especie en riesgo de extinción,
ya que los conholes auto-organizados de su corporalidad o
pasan por la corrección de una responsabilidad auto conciente
(y crítica, del deber ser) o no tendrrán ya otros recursos, porque,
como hemos dicho, el instinto animal no podrá evitar el suicidio
colectivo.rae
De lo que se trata según Dussel es de un inminente compromiso
que tiene el ser humano de desarrollar una conciencia crítica gestor¿
de su responsabilidad en relación al planeta, lo cual para el autor
es un problema de compromiso, en la rnedida que es referente a una
ética áe h üda, donde el ser humano tenga autoconcie,ncia de su
debú h cuat es lo rlnico capazde frenar la destrucción, porque lo que
aún queda de la natural ezaesun reservorio de vida, para preservar la
vida. Por lo tanto, estamos comprometidos con un deber ser donde el
ser humano mismo sea protagonista de su propia liberación.
147 ldem.P.62.
148 Enrique Dussel, Praxis latinoamericana y ñlosofla do l¡ Libcroión, p, 31,
Liboración, 1998, p.
149 Bnrique Dussel, Teologfa de la 140,
t¡r¡¡ . ,iffi§Éaá¡
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
Por su parte, el principio-liberación entrncia el deber-ser que
obliga éticamente a realizar dicha transformación, exigencia
que es cumplida por la propia comunidad de victimas, bajo su
responsabilidad desde la existencia de un cierto poder o capacidad
(el ser) en dicha victima.rso
Ciertamente, se impone una ética ecológica latinoamericana
que responda a una ética de la vida bajo un caúrcter universal que
encierre como principio una acción liberadora, desplegada a partir
de políticas sociales que tengan como fin principal un bienestar para
todos y para todas. De lo contrario, sería casi imposible evitar la
hetacombe mundial que se desplaza a una escala sin precedentes,
prácticamente podemos decir que la acción del ser humano es
violenta y es sistemática en la medida que la naturaleza se explota
sin medidas y sin planes de protección, lo cual es una acción
irracional en contra de la naturaleza.En virtud de ello se ha de
tomar conciencia de la situación del planeta en el presente, pues
sin el planeta, simplemente nos quedaríamos en el vacío, en el caos
original. Enrique Dussel es muy explicito en su planteamiento en
relación ala ética en el plano de la responsabilidad social.
La Etica cumple la exigencia urgente de la sobrevivencia
de un ser humano autoconsciente, cultural, autorresponsable.
La crisis ecológica es el mejor ejemplo: la especie humana
decidirá <<corregir»» ética o autorresponsablemente los efectos
no intencionales del capitalismo tecnológico devastador o la
especie como totalidad continuará su camino hacia el suicidio
colectivo. La conciencia ética de la humanidad se transformará
a corto plazo en la última instancia de una especie en riesgo
de extinción, ya que los controles auto-organizados de su
corporalidad o pasan por la corrección de una responsabilidad
autoconsciente (y crítica, del «deber sen») o no tendrán ya
otros recursos, porque, como hemos dicho, el instinto animal
no podrá evitar el suicidio colectivo.lsr
Se trata pues, de una ética que está viva pues guarda los más altos
valores morales para proteger la vida. Ésta interpreta la urgencia
de proteger el planeta, frenando los patrones del poder dominante,
a los fines de romper con la perversa agresión alar:m;tt¡ruleza, además
de atentar contra la calidad de vida. Para evitar así la desaparición
150 ldcm. p.. 553.
I5 t Enriquo Dussol, Étlot do l¿ Libcración en la Edad de la Globalización y de la
Bxolu¡lón, 199t, p. ltCI,
,,1s,
r BsArRrz SANquz Ppou
F.
t
t de especies y plantas vitales para el ecosistema. De disminuir los
índices de contaminación de las agua, de los ríos, mares y océanos.
Se impone frenar la degradación ambiental y la deforestación
compulsiva para salvar millones de niños y niñas que mueren
diariamente en el mundo por hambre y desnutrición, situaciones
como éstas evidencian un conflicto con la ética, pues se violenta la
vida y con ella la justicia.
El conflicto ético comienza cuando üctimas de un sistema
formal vigente no pueden üvir, o han sido excluidas violenta
y discursivamente de dicho sistema; cuando sujetos socio-
históricos, movimientos sociales (p.e ecológico), clases (obreros),
marginales, un género (el femenino), razas (las no-blancas), palses
empobrecidos periféricos, etc.1s2
El autor se refiere a que se surja una conciencia éticay crttica
que vele por la humanidad en peligro, por efectos de la irracionalidad
capitalista, lo cual para el autor podría generar un suiciüo colectivo.
"La acción crítica, entonces, "transforma" el proceso de la
praxis."l53
Sería el surgimiento de un paradigma más humano, bajo el
imperativo ético fundamentada en el principio de la vida. "Por
ello, el principio ético es "transformativo", desarrolla la vida y
no sólo la mantiene."ls4 Un cambio para un mundo mejor sin el
temor a la destrucción del planeta, bajo la concepción de una ética
de la responsabilidad por una humanidad en plena paz merita el
desarrollo ético para una transformación.
Dicho desarrollo como transformación con factibilidad
crítico-ética es el proceso histórico de liberación, no como mera
emancipación de ilustración (en el orden del conocimiento, la
, ciencia y aún de la Teoría Crítica), sino como dicha emancipación
integrada en un proceso, siempre también material, corporal,
cultural, de contenidos, que tiene momentos autorregulados, con
intervenciones auto-conscientes de discursividad crítica, y cuya
materialidad formal llamamos liberación.tss
152 Idem p. 540.
153 Idem. p. 536.
154 Idem.
l55Idem. P. 537,
fl .
Hacia una Etica Ecológico desde la Interculturalidad
De lo que se trata es de retomar los principios originarios éticos
que forjaron la conciencia humana que üsionó la naturaleza en el
norte de la conservación y del respeto, donde hombres, mujeres, niños
y niñas vivían en consonancia con las necesidades fundamentales,
para que la vida alcance su verdadero sentido y su inestimable
valor.
En este sentido, dice Dussel que el "Principio Liberación,,
expresa el momento deontológico, lo que significa el deber ético-
crítico de la transformación como posibilidad de la reproducción de
la vida de la victima, y como desarrollo factible de la vida humana.
_ Este principio subsume a todos los anteriores principios.
Se trata del deber de intervenir creativamente en el progreso
cualitativo de la historia. El principio obliga a cumplir por deber el
criterio ya definido, es decir, es obligatorio para todo ser humano,
aunque frecuentemente sólo asuman esta responsabilidad los
participantes de la comunidad crítica de las victimas, transformar
por reconstrucción negativa y nueva construcción positiva las
noÍnas, acciones, micro estructuras, instituciones o sistemas de
eticidad, que producen la negatividad de la victima.r56
La conciencia ética desde la visión de Dussel está concebida
desde la reinterpretación de la vida, donde cuenta principalmente el
otro, entendiéndose por el otro (a) a aquellas personas en condiciones
de victimas, por lo tanto dejaría de existir victimas por cuanto dejaría
de haber victimarios, en virtud que prevalecería el pensamiento
crítico, es decir, un ser humano abierto a la autoconciencia y a la
auto responsabilidad de la situación planetaria, partiendo de la
recuperación del planeta y repensando la convivencia humana en
armonía con la naturaleza apartir de una voluntad política que vele
por todos y por todas como seres en el mundo.
Fuxz HrNxnr,nuunnr: Éuce or¡, Brox CoruúN
Hinkelammert, en su obra, Cultura de la Esperanza y Sociedad
sin Exclusión,planteaque el culpable de la debacle ecológica actual
se hace presente en nombre de un capitalismo de mercado total,
que es defendido con el nombre de globalización de los mercados y
homogenización del mundo. "Su valor central es la competitividad,
lJó ldom. P 559
,:?i§ffiÉB;-.,.¡ ,l0e
r Bnmruz SANcHsz PrREr,A.
I y el sujeto central, alrededor del cual gira nuestra sociedad, es el
sujeto que calcula su utilidad en términos cuantitativos derivados de
los precios del mprcado."r57
El autor nos explica qüe la globalización de los mercados
se realiza en nonrbre de un sujeto que maximiza sus utilidades,
calculándolas de forma cuantitativa, 1o cual significa que es la
competitividad un valor central y el sujeto calculador del mercado se
correspondería con el resultado inminente como lo es la eficiencia.
Esta eficiencia estií flrndamentada en un sistema de mercados que
no se somete a correcciones y mantiene una relación nefasta frente a
los conjuntos interdependientes de la división social del tabajo y de
la naturaleza. Dichas relaciones interdependientes actuan sin criterios
de orientación.
El sistema de mercado resulta ser un sistema compulsivo. Si
se lo deja operar según las indicaciones de su mano "invisible,"
obliga a la catástrofe. Las oportunidades del mercado y
su aprovechamiento son compulsivas, pero tienen que ser
calculadas fragmentariamente. O se pierde en la competencia,
o se participa en la destrucción de los fundamentos de la vida
de nuestro planeta. Para ganar en la competencia, se destruye
las fuentes de riqueza.r58
Se evidencia que los argumentos que favorecen la destrucción
compulsiva de la naturaleza son falsos y son utilizados para engañar
al públicq por cuanto la competencia desmedida nmrca las relaciones
de mercado y transforma las condiciones de sobre vivencia de la
humanidad, por cuanto en esas condiciones no se puede respetar
la naturaleza. Para Hinkelammert, todo esto ha conducido a la
"esquizofrenia" de los valores, puesto que son reducidos los valores
positivos frente al ser humano y a la naturaleza, enla medida que la
competencia de la eficiencia de la nat:.xaleza conduce a la muerte.
"Es la eficiencia del suicidio colectivo."lse Así mismo, en su obra,
El Grito del Sujeto,nos expone Hinkelammert reconocer al otro en
la lucha a muerte. Este reconocimiento está orientado a explicar la
condición del ser humano que pasa a la categoría de enemigo, lo
cual se expresa en la lucha a muerte, "aniquilamiento" a la cual es
sometido.
157 Franz Hi¡kelammert, Cultura de la Esperanza y Sociedad sin Exclusión, 1995.
P.213.
l58Idem. P. 216.
l59Idem, P. 217.
# ffi
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
Esta mlstica del amor expresado por la lucha a muerte es
elaborada en los años veinte por Emst Jtinger, y expresa muy
bien el sentido profirndo de la mística del fascismo. Sin embargo,
en la sociedad del Capitalismo cínico de hoy, vuelve esta misma
mística que ahora corresponde al antihumanismo universal, con
el cual ha vuelto el pensamiento que acompañó el fascismo en
la primera mitad de este siglo. Es la mística de la lucha a muerte
entre enemigos, que es a la vez expresión de un gran amor, que
deja atrás cualquier flaqtrcza o debilidad que se imputa a todos los
pensamientos de un reionocimiento entre sujetos vivientes.r@
En otras palabras, para este autor el humanismo se ha tornado
en una lucha a muerte, lo cual no es más que la negación de
todos los humanismos y de quienes son portadores. En virtud
de esto considera que de lo que se trata es de un pensamiento de
aniquilamiento. "El aniquilamiento de aquellos que se oponen y de
aquellos que no caben en esta lucha."r6r La relación del ser humano
y la naturaleza, etr el plano de una ética ecológica latinoamericana
con fines de proteger el ambiente, este autor plantea una Ética del
Bien Común. Esto significa una estrategia de resistencia ante la
amenaza de la vida humana y de la natu¡aleza.
La ética del bien común surge como consecuencia de esta
experiencia de los afectados por las distorsiones que el mercado
produce en la vida humana y de la naitraleza. Esto significa: si
las relaciones mercantiles no produjeran tales distorsiones en la
vida humane y de la naturaleza, no habría tampoco ninguna ética
del bien común; la ética del mercado sería suficiente.r62
Para Hinkelammert la ética del bien común surge o se propone
como una salida al totalismo del mercado, por lo tanto, se trata
de una ética que es necesaria, más no es opcional. "El concepto
común de la ética hoy considera a toda ética como opcional,
inclusive como cuestión de gustos. Si no se tiene ninguna ética, se
cree poder vivir sin ética".r63
Enfatizael autor que la ética del bien común es una opción
necesaria que opera apartir del interior de la realidad que produce
valores. Es decir, se refiere a los valores de respeto al ser humano,
a su vida y de la naturaleza.'oDe otra manera, estamos en las redes
160 Franz Hinkelammert, El Grito de Sujeto, 1998. P,251.
16l ldcm, P.252.
162ldom. P.275.
163 ldcm. P, 27J,
-..i.Éffii ,,, l;L*
 Bnernrz SANcHez PrREr.e
de un fantasma y jamás alcanzamos ni libertad ni realidad. Y el
grado en el cual se requiere ir más allá del máximo, para poder
ir más allá del capitalismo, se tiene que discutir en una discusión
t libre."1fl
La ética del bien común tiene su inspiración en la tradición
aristotélico-tomista, la cual antecede a la sociedad que expresa las
leyes de la naturaleza en el transcurso de las sociedades, la misma
se considera por encima de cualquier ley positiva, por lo tanto se
percibe como un saber absoluto por aplicar. Sin embargo, hoy en
día vemos atónitos que se desarrolla una anti-ética, donde incluso
la vida htrmana y la naturaleza se ven afectadas por las üstorsiones
generadas por el mercado.
l La ética del bien común es algo así como un juicio sobre
la historia que actua en el interior de la realidad misma. La
inmanencia es el lugar de la trascendencia. La ética del bien
común opera a partir del interior de la realidad; no es una ética
exterior derivada de ninguna esencia humana o de algun extraño
Sinaí, parq ser aplicada a la realidad posteriormente".l6s
Asíptes,la ética del bien comúnparts deurnrealidad sociocultural
que se aplica a ella en la direccionalidad de hacer el bien. "El
supuesto para que opere efectivamente el principio del bien
común es el reconocimiento de que nadie puede vivir si no puede
I vivir el <<otro>».r6 Así pues, una Ética Ecológica se vislumbra en
la concepción del bien, de la solidaridad y la convivencialidad.
Ésta no sólo estaría dada en ñ¡nción de la armonía del ser humano-
naturaleza sino üsionada en toda su dimensión en el respeto al ser
humano, lo cual tiene implícito romper con un modelo de desarrollo
que violenta las leyes de la naturaleza,la vida del planeta, y que
üa a dia acrecienta más los males sociales y la miseria en los
pueblos.
En este sentido, interpretamos que Hinkelammert pieosa en un
bienestar social, de seres humanos liberados de la opresiónn de la
pobrez.a, es decir de la exclusión. Por lo t¿nto se convierte en urr
pilar de resistencia que surge desde el interior de la realidad de cada
sociedad.
164Idem. P.286.
165 Franz Hinkelammert, Cultura de la Esperanza y §ocicd¿d sin Bxchuión, 1995,
p.282.
166 Ftz¡z Hinkelammert, citado por Wim Dierckxscm, La rut¡iclóm hrcle ol
postcapitalistro, 2fi)6, p 56.
¿t&
Hacia una Éfica Ecológico desde la Interculturalidqd
Lrox.lnno Borr: Érrcn un r,l I)rcNrDAD DE r,l Trnnnn
De acuerdo a Leonardo Boff, lo ético es el camino de la sociedad,
lo cual va mucho más que la moral, pues se hata del comportamiento
justo y la manera correcta de relacionarse el ser humano con la
nafiraleza. Estaría relacionado con el rescate de la Dignidad de la
Tierra,lo cual para el actor significa inaugurar *u ,ru"rou alianza,
con la tierra consiste en la recuperación de la dimensión sagrada
de la tierra. Su planteamiento está cenüado en una concepciórt
ecológica-teológica que para él exige, primeramente recuperar lo
sagrado de la naturaleza, lo cual equivale a que si no se empieza
por esto la explotación de sus potencialidades no permitiría lograr el
objetivo de salva¡ la tierra. "Lo sagrado constituye una experiencia
fl¡ndanüe. Es el que subyace a las grandes experiencias sobre las
que se construyeron las culturas en el pasado y la misma identidad
profirnda del ser humano?'.167 Segun el autor antes mencionado los
estudios realizados sobre lo sagrado se fundamentan en el cosmos
como referencia esencial, por ser este el lugar de nacimiento. Al
transformar el universo en un sacramento (espacio y tiempo), como
'omanifestación de la energía que ataviesa todos los seres, en la
oportunidad de la revelación del misterio que habita la totalidad de
las cosas."l6
Esta nueva alianza con la Tierra que nos plantea Boff sólo es
una tregua para que la tierra se recupere de sus heridas, a propósito
de las agresiones y violaciones a las cuales ha sido sometida. Esto
sólo sería una tregua, si no se cambia el patrón de relaciones, ni
se ha tansformado la mente humana, entonces, nada impediría una
hetacombe mundial. "Por consiguiente, el primer paso que hay que
dar es el de la recuperación de la dimensión de lo sagrado de la
Tierra, del reencantarniento y de la veneración del universo."r6e
En esta alianza tenemos que sembrar muchos millones de
árboles para crear un sistema de protección en nuestras comunidades.
Hay que poblar de árboles la vida urbana, para conharrestar el
recalentamiento de la tierra producida por las grandes autopistas por
167 Leona¡do Bofi Eoologla: Grito de la Tierra. Grito de los pobres. Trotta. 2W2,
p. 149
168ldom. P. 149.
169ldom, P. 149.
llt
r Bpernz SANcunz Prn¡r.e
i donde transitan miles de automóviles. Recuperar las condiciones
máximas de la vida que posee el planeta es un derecho de todas y de
§
todos, incluso de la tierra. 'oHay un derecho humano y social como
hay un derecho ecológico y cósmico. No tenemos derecho a destruir
1o que nosotros mismos hemos creado."17o
t religación con todas las cosas. Son los qué, aunque vivan
Refiere Leonardo Boff que erróneamente se ha creído que las
regiones pobladas por indlgenas se han mantenido intactas porque
ellos no las han intervenido, sin embargo, no es así, la realidad es que
sus intervenciones de milenios de años responden a intervenciones
fundamentadas en sabidurías ancestrales de preservación
conservación.
I Las sociedades indígenas han modificado el medio
ambiente, promoviendo la diversidad biótica simultiíneamente
con la promoción de «islotes de recursos>», creando condiciones
favorables para el desarrollo dominante de algunas especies
vegetales muy útiles (p. ej., el bacagu)... Al menos un 1,18% de
las selvas de tierra firme de la Amazonia brasileña pueden ser
consideradas selvas antropogénicas... en especial las dominadas
por palmeras, bosques de bambú, bosques con alta densidad
de castaños (castañares), islotes forestales en terreno cercado,
caatrngabaja, matorrales de cipó y otras.l7r
El autor, en estudio, reafirma en los postulados de una ética
ecológica, por cuanto la tierra es sagrada por ser la obra de Dios.
I Es precisamente en la recuperación de 1o sagrado como una alianza
.on lu Tierra donde fundamentamos nuestra reflexión de la
construcción de una ética ecológioa latinoamericana donde el
pensamiento amerindio sirva de paradigma, tomando en cuenta, las
diferencias culturales de las diversas etrias de nuestro continente
y los modos de relación de respeto a la tierra, como una práctica
relacionada a sus formas de vida.
Por el confuario, tenemos que las zonas donde viven
sociedades que milenariamente han vivido cuidando la taturaleza,
precisamente porque la consideran sagrada, son las que en su
mayoría son violentadas en su modo de vida por los diversos planes
y progr¿lmas de explotación de los minerales y de la madera. Todo
esto sin prever algún programa de protección ambient¿I, lo cual
tiene como resultado que la degradación del ecosistema empobrece
170 Leonardo Boff, La Dignidad de la Tierra, 2000, p. 39.
l7l Edgar Morin, citado por Leonardo Boff, Ecologfa: Grito dc la Tlorn, Orlto do
los Pobres, 2002, p, l6Q,
,s
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
la tierra y las consecuencias son nefastas para los habitantes que allí
habitan en plena armonía con la natt¡raleza.
En todas las regiones de la Tierra existen todavía pueblos
primitivos que viven la dimensión de lo sagrado y la de la
en nuestro tiempo (sincronía), no pe hallan al mismo nivel
de evolución qle nosotros (contemporaneidad). En su gran
mayoría se hallan todavía en el estadio de las aldeas- del
neolítico, .pero son portadores de un significado importante
para la crisis ecológica y para animar altemativas al tipo de
y de
relación que nosotros hemos establecido con la naturaleza. Ellos
nos muestran cómo podemos ser humanos y profundamente
humanos sin precisar pasar por la racionalidad crítica de los
modernos ni por el proceso de dominación de la Tierra llevado
a cabo por el proyecto de la tecnocracia.rT2
En este sentido, coincidimos con el autor al plantearse que los
ciudadanos desde sus tradiciones es una contribución para lograr
un estado de vida más humano, pues aún para ellos la naturaleza
está cargada de sacramentalidad y veneración. Ellos no perciben la
tierra con la intención de que los haga ricos y cargados de poder y
dominio sobre ella, mucho menos para explotar irracionalmente sus
riquezas.
Así pues, cuando Leonardo Boff nos refiere a la Dignidad de
la Tierra, nos está remitiendo a un mundo más humano, lo cual
significa la dignificación de la tierra, nos está invitando a percibirla
sagrada, pero ante todo concibe la naturaleza como un todo. La
tierra como ente en su dinámica de producir y reproducir la vida
en si misma, portadora de energías primordiales en sus formas más
complejas de vida.
las Su preocupación está centrada en que todos los seres que
pueblan la tierra esfán amenazados y atropellados, comenzando
fundamentalmente por los pobres que se encuentran marginados,
dadas las circunstancias en las que viven. Debido al riesgo que todos
corremos todas las prácticas humanas y todos los saberes se deben
redimensionar partiendo de la ecología para salvaguardar la obra
creada por Dios, es decir, la Naturaleza. En este sentido, Leonardo
Boff se postula por el desarrollo de una perspectiva ecológica que
sirva de protección a la naturaleza.
l72ldom, P. l5t,
a*ffi¿*,.
/
BsArPJz SANc¡rnz Pm¡u,
I
Es importante proceder a una autocrftica severa: en
qué medidá un determinado saber constituye un factor de
desequilibrio ecológico y una determirfada política significa
una degradación de medio ambiente o unlmodelo de desarrollo
constituye un instrumento de pillaje de la naturaleza. Yendo
l más al fondo, en qué medida los propios saberes deben
elaborarse ya dentro de una perspectiva ecológioa, de tal forma
que signifiquen un poderoso factor de protección, respeto y
promoción de la naturaleza.Es esta la reconversión que hoy se
nos impone a todos.r73
Así pues, todos debemos crear conciencia de que la tierra no es
I una pertenencia de nadie, Bien decía Mahama Gandhi: "La tierca
satisface las necesidades de todos, pero no la voracidad de los
consumistas."lTa
Nos llama la atención cómo los grupos empresariales elaboran
y ejecutan sus planes y programas de acuerdo a la maximizaciónde
los beneficios en complicidad con el poder gubernamental, es decir,
l sólo se mueven en función del beneficio económico. Mientras que
los gobiernos imperantes son coautores de esta conducta irracional,
en la medida que se nos conducen a una política de desarrollo mega
industrial a costa de la agresión del ecosistema marino y terrestre,
sin medir las consecuencias humanas.
Esto nos pone en evidencia ante una cruel realidad y es que
I los detentadores del poder polltico y el poder económico poseen
también el poder de destrucción de nuestros ecosistemas vitales
para la vida del planeta, por lo tanto nos afrevemos a decir que las
trasnacionales y el empresariado nacional y los gobernantes del
mundo han hecho una alianza de muerte, pues ellos atentan contra
la vida del planeta.
En este sentido, Boffen su obra líric a Planetaria desde el Gran
Sur,plantea la vital necesidad de un Ethos Mundial, apoyada'en la
verdad concreta y en lajusticia irrenunciable. En oras palabras, dejar
a un lado el engaño a lo pobres sobre nuestra situación económica
y social, la cual incluye decir la verdad sobre las c&usas reales de
la pobreza y de la exclusión social (muerte prematura de nuestros
hijós e hüa$ y sobre el peligro que nos amenaza a todos. Pues,
173 Leonardo Bofi, La Dignidad de la Tiena ,20ñ, p, 24,
174 M. Gandhi, ciado por L. Boff, La Dignidad do la Tiorq 2000, p, 32,
.,, JtlE :,.:siɧ&*
Hacia unq Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
la justicia es irrenunciable, va más allá de las teorías académicas,
porque plndría fin a todos los abusos que se han tejido en todos los
ordenes de la vida.
La mencionada ética mundial esüá üsionada bajo el consenso
brásico, incluso sin diferencias religiosas, pese a las diferencias
dogmáticas.
Por debajo de las diferencias religiosas se encuentra el
ser humano, que testimonia la presencia de un mismo ethos
básico. Este ser humano está conquistando de forma colectiva
la conciencia de que sólo tiene este planeta para vivir y que es
responsable del destino común. Paragarantizar la supervivencia
común necesita de un consenso sobre valores y actitudes
irrenunciables. De lo contrario todos pueden perecer.rTs
Un ethos mundial para Leonardo Boffrepresenta la cristalización
de la nueva conciencia ecológica y planetaria en la perspectiva de un
nuevo paradigma ciülizatorio. "De entrada, parte de una visión ética
integradora y holística, considerando las interdependencias entre
pobreza, degradación medioambiental, injusticia social, conflictos
étricos, paz, democracia, ética y crisis espiritual."r?6 Nos recuerda
BoS que estos son los principios éticos - valores y principios para
un futuro sostenible - sobre la cual fue concebidaLa Carta de la
Tierca.t17
Los fundamentos éticos de la mencionada carta descansan en la
concepción de un orden mundial. Estos son: Respeto y Cuidado de
la Comunidad de la Vida: Integridad Ecológica; Justicia Social y
Económica; Democracia, no Violenc ia y P az. La Carla evidencia la
esperanza en la responsabilidad de todos y de todas las personas por
salvar el planeta. Veamos esto en las elocuentes palabras que están
plasmadas a manera de conclusión en la Cartz de la Tierra.
Que el nuestro sea un tiempo que se recuerde por el despertar
de una nueva reverencia ante la vida; por la firme resolución de
alcanzar la sostenibilidad; por el aceleramiento en la lucha por la
justicia y lapaz y por la alegre celebración de la vida.t78
175 Leonardo Boff, Ética Planetaria desde el Gran Sur, 2001, p 55.
176ldem.P.62.
177 LaCafia de la Tierra, la misma está concebida como un cédigo universal de
conducta quc sirva do pilar para guiar a los pueblos y a las naciones para lograr la
rogonoración do la ticna con miras a un futuro comr¡n sostenible, San José de Costa
Rior, 1999.
l7t ldom.
,,;; #¡,¡ r¡'

B¡ern¡z SÁNcHez PIFJLI
Si tos gobernantes del mundo asumieran la Carta de la Tierra,
estarían comprométiéndose con la humanidad para desarrollar
una ética de la vida, 1o cual evidentemente contribuiría a cambiar
la conciencia de desastre por una conciencia ecológica, basada
en la ética de responsabilidad como un compromiso vivo con la
humanidad.
La nueva fase de la historia tiene por centro a la Tierra y
a la Humanidad, indisolublemente unidas. Para comprender tal
unidad hemos de redescubrir la Tierra, identificar nuestras raíces
comunes (cósmicas, terrenales, biolégicas, antropológicas,
históricas, sociales y espirituales), olvidadas en los discursos
y en la praxis de los pretendidos regidores del mundo actual,
óentradoi exclusivamente en el poder, ejercido como dominación
sobre los demás y sobre la naturaleza, rehenes de un tipo de
comprensión reduccionista y empobrecedora del ser humano, de
un tipo de cultura, de modo de producción y de diálogo con la
rrattttalezai"rle
Si los científicos, el mundo universitario, los gobernantes del
mundo y los ciudadanos no toman conciencia de la realidad ecológica
del planeta y las consecuencias que se avecinan, si no se despliega
una ética por la vida, partiendo de una política de responsabilidad
mancomunada internacional, entonces nos estrán diciendo que no
estád en capacidad de comprender el grado de compromiso que
tenemos con la humanidad. Entonces están jugando a perder la
preciosa vida que resguarda el planeta tierra.
Exnreus Lprr: Ér,"n AurnE¡crAL
Este autor nos introduce al tema de los saberes ambientales,
en relación al rompimiento histórico del saber científico con los
sabeles ancestrales. El saber científico ha contribuido a acelerar
la degradación arÍrbiental, cuyas consecuencias ya las estamos
viviendo, peor aún hasta podría esperarse, incluso, un colapso
ecológico que no sólo nos deje sin ambiente para bien vivir sino
que además ya está generando pobreza extrema y desigualdades
sbciales que evidencian claros indicadores de las consecuencias de
la revolución científica técnica que en el presente se agudiza con
el fenómeno de la globalización, es decir, la tecnologización y el
sentido economicista y mercantilista de la naturaleza.
179 Leonardo Bofi, Virfudes psra otro mundo poriblo, 2006' p, 33,
fi i¡- .
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
El ambiente es ese saber que se vierte sobre la engañosa
transparencia de los signos del mercado globalizado y del
iluminismo del conocimiento científico y moderno, de la eficacia
de la tecnologia y la racionalidad instrumental, precipitando
sus saberes subyugados. Es el prisma que recibe el rayo
concentrado de luz que proyecta este mundo homogeneizado
de la ciencia, del progreso, de la globalizacióri,pararefractar un
haz de luces divergentes de colores y matices diversos, donde
se enlazan tiempos ontológicos, tiempos históricos, tiempos del
pensamiento y tiempos subjetivos. r80
Estos saberes van emergiendo a partir de las identidades
múltiples que fluyen para concebir nuevos modos de vida y para
hacerle frente a las manipulaciones del progreso, también para
expresar un No rotundo al yugo del dominio que surge para someter,
fundamentalmente, al que vive en consonancia con el trabajo de la
tiena, nos referimos al campesino y al indígena. Surgen los saberes
como respuesta al sometimiento y a la degradación del ambiente
para solventar la crisis ecológica generada por la irracionalidad
humana.
El ambiente emerge como un saber reintegrador de la
diversidad, de nuevos valores éticos y estéticos, de los
potenciales sinergéticos que genera la articulación de procesos
ecológicos, tecnológicos y culturales El saber ambiental ocupa
su lugar en el vacío dejado por el progreso de la racionalidad
científica, como síntoma de su falta de conocimiento y como
signo de un proceso interminable de producción teórica y de
acciones prácticas orientados por una utopía: la construcción de
inmundo sustentable, democrático, igualitario y diverso. rEr
En cuanto a saberes, se refiere Leff al encuentro del tema
de la ética ambiental relacionado con otros saberes que tienen
sus implicaciones éticas desde la razón misma del respeto a la
nattraleza. En contraposición del saber científico que cada día
se deshumaniza y nos insensibiliza." Los paradigmas científicos
apresaron el saber para encauzar el conocimiento en las vías
del progreso."r82 Reconocer estos saberes sería un logro para
la humanidad, por cuanto. contribuye a romper con viejos
180 Enrique Leü, El SaberAmbiental, p.10.
l8l ldom. P. 17.
I E2 Enriquc l¡fr, Dhounor §u¡tontablcs, 2008, p, 227 .
¡ r'áffi@ §t
r BeArRrz SrrNcruz Pnsle
i paradigmas, ya envejecidos por el tiempo, ya obsoletos porque
se han constituido en discursos estériles. En este sentido este
autor nos remite a los postulados de la ética ambiental.
La étiea ambiental vincula la conservación de la diversidad
b biológica del planeta con el respeto a la heterogeneidad étnica
y cultural de la especie humana. Ambos principios se conjugan
en el objetivo de preservar los recursos naturales e involucrar
a las comunidades en la gestión de su ambiente. Se enlazan
I aquí el derecho humano a conservar su cultura y hadiciones,
el derecho a forjarse su destino a partir de sus propios valores
y formas de significación del mundo, con los principios de la
r gestión participativa para el manejo de sus recursos, de donde
I
las comunidades derivan sus formas culturales de bienestar y la
satisfacción de sus necesidades.ls3
La diversid¿d cultural y su íntima relación con la ética
ambiental nos traen a colación el tema del respeto a la diversidad
que intrínsicamente acoge el valor humano en lo ecológico que se
manifiesta en el manejo de los recursos naturales.
Al respecto, cabe mencionar que en los capífulos anteriores
tocamos una parte muy íntima enlarazón del pensamiento mltico
amerindio, justamente para dar a conocer cómo estas sociedades
desde lo más íntimo de su filosofla, estructuras socio culturales, sus
modos de producción y prácticas productivas estián intrínsicamente
relacionados con lo simbólico y lo espiritual que representa para
ellos la nafinaleza.
Esto se aprecia en los lazos que los une con el aspecto cosmogónico,
lo cual en algunas sociedades amerindias constituye su base
ancestral e incluso en torno a esto desarollan saberes y creencias
que conforma un sistema donde la naturaleza es el núcleo principal
en sus modos de vida, lo cual indudablemente se traducen en noÍnas
consuetudinarias referidas al uso de la naturaleza.
En este sentido, los principios y valores ambientales
siendo sistematizados por conceptos y teorlas que se articulan con
las bases materiales de una nueva racionalidad prodlrctiva (de una
productividad ecotecnológica), a través de instrumentos.técnicos,
nonnas jurídicas, políticas ciQntíficas, movimientos sociales y
l83Idem. P. 81.
Irü ,:,'ir'iff-:ili
Hacia una Etica Ecológica desde lq Interculturalidad
estrategias políticas, que constituyen los medios de una racionalidad
ambiental, orientando la reapropiación social de la naturaleza y la
gestión ambiental del desarollo. re
Vale decir, al respecto que Enrique Leff aborda el tema de
la epistemología ambiental resaltand-o la diversidad cultural y el
prodigio de oftos salere¡, lo cual nos pÍrece muy oportuno poique
el tema ambiental, desde- esta perspeótiva enciérra la concepción
ética, lo cual vendría a formar parte del rescate de la concüncia
ética perdida sobre nuestra realidad planetaria, para dejar a un
lado definitivamente el antropocentrismo que ha pre-valecido
históricamente.
Más bien busca comentarlos, viajar por las arterias que
articulan el cuerpo de sus argumeniaciónes, estabrece. ios
vínculos enfre la osamenta de suséntretejer el tejido cartilaginoso
y los líquidos linfláticos que los vinculan, para aejarnuir ta sírria de
un pensamiento que busca abrir nuevasionexibnes que irrizuen
el territorio de esta naciente epistemología ambient¿l'rs
El tema del ambiente desde el visor epistemológico lo ubica Leff,
en el campo filosófico no sólo porque viene a conformar el desarrollo
de estudios críticos y cientlficos sino que incluye los resultados e
impactos de la ciencia tecnica sobre el ambiente, en la medida que:
La epistemología ambiental conduce este camino
exploratorio, más allá de los límites de la racionalidad que sostiene
a la ciencia normal para aprehelder el saber ambiental, par-a ir
consfuyendo el concepto propio del ambiente y configrando
el saber que le correspondé en la perspectiva deia raciJnalidad
ambiental.ts6
Destacamos que la epistemología ambiental en si misma
estiá concebida bajo una concepción ética de trascendencia, no
sólo porq¡e ubica a la naturaleza en su condición del origen sino
porque además ésta emerge de la preocupación por h aóción de
exterminio a la cual estií expuesta el pÍaneta, a propósito de la
est¿ín
actitud descabellada del ser humano qué a partir di r¡n concebido
"logocentismo teórico" que se ha desárrollado fuera del círculo de
la racionalidad de las ciencias, tenemos una situación ambiental de
considerable magnitud.
It4 IdGÍr. P. 82.
185 Enriquo Lofr, Avontunr do la EpietomotoglaAmbiontrl, 2007, p. I L
18ó ldom. P, 14.
 BsArpJz SANcnez P¡nru¡.
Gr,onr,l Corunslñl Slxur,IcBs: N.lrr¡nmrz¿., Étrc.o v GÉxpno
Interpretamos desde el pensamiento de Gloria Comesaña la
concepción ética a partir de la relación natttraleza y filosofia del
género, en la medida que allí se desarrolla una concepción ética,
referida a la protección de la natwaleza que contiene una radical
preocupación por la destrucción del planeta tierra. En este sentido,
presentamos el planteamiento de Gloria Comesaña, quien interpreta
la obra de HannahArendt desde lo que representa lanattxaleza.
LaTierra es lamisma quinta esencia de la condición humana,
y la naturalezaterrena,según lo que hacemos, quizás sea la única
án el universo con respecto a proporcionar a los seres humanos
un hábitat en el que moverse y respirar sin esfuerzo y artificio.
El artificio humaño del mundo separa la existencia humana de
toda circunstancia meramente animal, pero la propia queda al
margen de este mundo artificial y, a través de ella, el hombre se
empárenta con los restantes organismos vivos'187
El punto de partida de Comesaña está fundamentado en una
crítica a la racionalidad creciente en la modernidad como punto
central de la falta de relación del ser humano con la tierra. "El aspecto
quizás más notable de la transformación que sufre la condición
humana en la Modernidad es la creciente alineación con respecto a
la Tierra.lE8 Resalta en el análisis el crecimiento tecnológico a partir
del avance de la ciencia, 1o cual ha permitido que los humanos no se
sientan ligados alatiel::a, lo cual se traduce como la falta de valor
por el suelo que nos cobija.
Desde este punto de vista resalta la autora, que esto hace
que el ser humano conciba las cosas como algo temporal y desde
una perspectiva lineal y no cíclica, cobrando todo un sentido
individualista, ctryo sentido individualista prevalece en el carácter
patriarcal mismo que ha prevalecido históricamente.
Mientras que en la nafrxaleza, la vida de las especies,
repetitiva y ciélica, parece ser siempre la misma, con- cada
espécimen formando simplemente parte de una cadena, de una
toialidad que es lo que verdaderamente importa. Este concepto
de procesó, que pasa entonces de lo histórico humano
187 Hannah Arendt, Citada por Gloria Comesaña; Hannah Arcndt: Ecologla y
Educación, Estudos da educagao, VoL 6, 2004, p.12.
188 Gloria Comesaña,.Op. cit. P,12.
re&&
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
biológico, introduce en el ámbito de lo natural algo así como
un elemento de acción, de libertad, cuando es en realidad el ser
humano el que está interviniendo y transformando la naturaleza,
desencadenando en ella procesos que nunca puede saber a dónde
van a conducirnos.l8e
La dimensión ética de la tierra desde la visión de Comesafla
cobra su trascendencia a partir del análisis de la racionalidad,
abordando lo ecológico y la filosofia del género para descubrirnos el
fenómeno histórico de la religión judaica que le asigna a la mujer y
a la naturaleza el roldel pecado original.
La tierra, pues, estii según esta visión, al servieio del hombre,
él puede y debe dominarla, explotarla y extraer de ella todas sus
riquezas. La mujer, asimilada a la naturalezay ala tierra, y con
el agravante de ser la causante de la caída del hombre, de que
entrara al pecado en lo creado, en el paraíso en lo creado, en
el paraíso, es también entregada al hombre como un ser pasivo
más, apenas un poco superior a los animales, pero sin alcanzar
nunca.el rango masculino de la perfección.tm
Resalta Comesaña que la situación histórica y religiosa en el plano
de la injusticia se ha desarrollado en tomo a la mujer, en su relación
con la actitud anti-ecológica referente a la tiena, tiene un punto de
relación en cuanto a que prevaleció el dominio y la explotación con
un sentido de pertenencia, bien de la tierra, como un bien de uso o
bien de la mujér, quien es enfegada al hombre como una pertenencia
en el matrimonio.
Hay quienes consideran que el Dios monoteísta masculino
de los judíos y cristianos es un concepto hostil que racionaliza
la enajenación de la tierra y la indiferencia hacia ella. Gaia
debería reemplazar a Dios como objeto de.nuestra adoración.
Estoy de acuerdo con gran parte de esta crítica, pero creo que la
simple reacción de sustituir una deid¿d trascendente masculina
por una deidad inmanente femenina no basta para resolver el
problema de Dios.tel
Es importante destacar que la posición de Comesaña no
contempla a la naturaleza en su relación con la tierra desde la
perspectiva sagrada, sino que tiene su asidero en una concepción
política-filosófica que tiene como base principal la.justicia bajo el
a lo
lE9ldom. P, 13
190 Glori¡ Comoullr, Do Métodos y Filosofla Fcminieta, 2008, p -131.
l9l Rorcmrry R.dford Ruothor, cltada por Gloria Comosaña, Op. p,134,
{ü
r Bnerp¡z SANc¡rez PrREr.e
'
principio de brindarle al ser humano un planeta sano para garantizar
la vida y los logros del ser humano.
A diferencia sin embargo de la ecologla contemporánea,
que, sacralizadora de nuestra relación con la Tierra es holística,
pananimista o pantelsta, la preocupación ecológica arendtiana
l busca solamente garurfinr al ser humano el basamento planetario
en el cual se asientan su vida y sus logros. El planteamiento
ecológico de Arendt no es sin embargo ingenuo.re2
Desde la visión arendtiana que desarrolla Comesaña, resalta
el homo faber como una aspiración imperialista y soberbia, muy
perjudicial, en la medida que el ser humano en su condición de
explotador no reconoce que si acabala tierra no podría producir lo
que produce.
Pero el gran problema de la Época Modema, y más aún de
I nuestra contemporaneidad, no reside sólo en el predominio de
los modos y formas de vida del homo faber, sino en la superación
y asfixia de estos por la labor, y en el ascenso del animal laborans
y el consiguiente auge de los valores de la vida biológica. En
efecto, la Modernidad destacó entre todas las características del
trabajo muy particularmente la productividad. Conduciendo
' merita de ser educada, lo cual evidencia la imperiosa necesidad de
así a una carrera acelerada en pos de la acumulación de bienes
(abundancia), carrera en la cual la confusión entre el trabajo y la
labor se hizo cada vez más grande, en detrimento del primero.
Esto trajo también como una de las felices consecuencias la
I emancipación de la labor y el aumento de su dignidad, pero sólo
para propiciar a su vez otras formas de alienación.te3
El pensamiento de Comesaña, inspirado en la filosofia arendtiana,
contempla una fuerte critica a la racionalidad, lo cual demuestra su
preocupación por la situación del ser en el mundo. Desde la visión
de la productividad compulsiva y la acumulación de bienes como
efecto de la alienación, destaca que la relación de trabajo que se
desatrolla es particularmente desde la productividad lo cual ha tenido
como efecto, la adquisición y acumulación de bienes, generando un
desmedido consumismo en la socied¿d.
Sin embargo, lo que prevalece, es como dice Arendt,
esa terrible mezcla de las características del animal laborans
con las del homo faber que nos conducen, si, por'el camino
preponderante de la búsqueda de la satisfacción material de
192 Gloria Comesaña Hannah Arendt: Ecologla y Educación, 2994, p.ló,
193 Idem.
:"-i¡fr
Hacia uno Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
los aspectos más biológicos de nuestra realidad, mediante un
consumo desenfrenado y destructivo, pero además un deseo
obsesivo de acumulación de todo, desde objetos banales hasta
riquLeza económica y propiedades: mueblés e inmuebles e
inmensos fragmentos de la geografia mundial.rea
Vale destacar que la autora plantea que lo único que importa en
la modemidad es el individualismo, quien se ha encargado de negar
la vida comunitaria que da muestra de una pluralidad que nos hace
plenamente humanos, para emprender el camino de la adquisición
de bienes materiales, para ello, se apodera de la naturaleza.
Si esto es así, mucho menos tendní el individuo conciencia
de formar parte de un todo mucho más amplio que la propia
especje, de un todo que va más allá incluso de la naturalezay ae
todo lo que constituye la Tierra, de un todo que se remonta a lo
que llamamos universo, hacia el cual tratamos de escapar dejando
el planeta, como si éste nos quedara pequeñores
La capacidad de destrucción del serhumano la interpreta la autora,
partiendo de su capacidad de huir o evadir la responsabilidad de lo
que representa nuestro planeta. Esta errada actitud del ser humano
desarrollar un trabajo educativo sobre nosotos mismos, "y es allí
donde la educación, de una manera sistemática y a todos los niveles
tiene un importantísimo papel."1e6
Desde esta perspectiva, la autora, en estudio partiendo del
pensamiento arendtiano, despliega r¡na propuestapara la enseñanza
de la ecología, basada en la natalidad. "Con cada nacimiento algo
absolutamente nuevo entra en el mundo. Cada niña o niño es único
e irrepetible, y será fuente de acciones totalmente originales en un
mundo persistente, que puede verse amenazado por esa absoluta
novedad."leT
Desde esta particularidad de la natalidad, dice Comesaña que
la educación se podría constituir en alternativa necesaria paru la
preservación de la tierra, pertinente a la infanciay ala familia,
garantizarlael equilibrio entre la tradición y lacreativa novedad. Así
l94Idem. P- 17.
195 ldcm.
l96ldom,
l97ldom.
,,,*iH¡f*jftffiiñü&s,

Bpem¡z SANor¡z PrnnL¡,
a las nuevas generaciones se les debe proveer las condiciones para
que se desarrollen en un mundo "viejo", con aportes de lo nuevo.
"Se trata pues de determinar y respetar 1o que corresponde en este
caso a 1o público y 1o que corresponde a 1o privado, para lograr e1
desarrollo normal del niño, y a la vez de salvaguardar el mundo
creado por los adultos y por las generaciones anteriores.r:le8 |e f¿l
manera, la autora se plantea un cambio de comportamiento a través
de la educación para preservar el equilibrio ecológico de la tierra:
Debe ser entonces una prioridad el incluir el tema ecológico
en los currícula de todos los niveles del aparato educativo, pero
además de ello, madres, padres y docentes, deben ser ejemplos
fundamentales de una nueva forma de relacionamos con la Tierra,
nueva forma en el cual se debe desarollar el aspecto del carácter
sagrado del planeta, y su carácter matnz nutricia y protectora
debe ser llevado a un primer plano.le
La autora en estudio plantea el rol tan importante que juega el
tema ecológico en la educación escolarizada, a fin de lograr una
forma más idónea de relacionarse con la tierra, sin dejar de lado el
sentido sagrado que tiene la tierra.
En este sentido recordamos unavez más que en los primeros capítulos
hemos dejado un testimonio de lo que representa la naturaleza como
ente sagrado en el pensamiento amerindio como una muestra para
regodearnos en conocer y reconocer, pues esta perspectiva, para
nosotros es una postura ética ante la vida. La ética ecológica no
puede ser sólo un discurso sino la plenitud de nuestra existencia
cotidiana, pues de 1o que se trata es de desarrollar una moral que
descubra nuestra conciencia ecológica que sirva de protección y
conservación de la naturaleza para preservar la vida de todos los
seres que integran el ecosistema universal.
' Hablar de una Ética partiendo del plano ecológico, no
puede significar caer en ilusiones románticas, esperando
voluntariamente en una transformación de la humanidad como
consecuencia de una evolución indetenible, o suscribir a utopías
muy hermosas pero sin asidero ninguno en la realidad.2oo
l98Idem. P. 18.
199 ldem. P. 21.
200 Gloria Comesaña, Reconciliarse con Gaia en un mundo dominado por la
razón tecnológica, en Utopía y Praxis Latinoamericana/Aflo 15. No. 51, 2010, Pp,
127-140.p.132.
**ffisÉ
Hacia una Etica Ecológica desde la Interculturqlidad
La arrogancia del ser humano nos ha conducido a una situación
de desastre ecológico que predomina en el planeta tierra como una
muestra irreparable de la racionalidad tecnológica, lo cual a su vezha
engendrado injusticia y dominio para doblegar al mundo, dejándolo
frente a frente a su propia y terrible destrucción.
'?ero de lo que se trata es de entender que nuestro camino
está errado porque hemos de redescubrir el orden intemo de las
cosas para derivar de allí una ética que llamaremos ecológica.
Como dijimos antes una Etica que nos permita reconciliarnos
con el origen."2ol
La ceguera histórica ha sido predeterminada por la inconciencia
del hombre, quien se ha erigido en el mundo como el centro de todo,
donde fundamentalmente sobresale é1, en calidad de dominador y
subyugador de los seres que generan y reproducen la vida.
En este orden de la p alabraseguimos analizandonuestra realidad
en el mundo desde la concepción Ecofeminista para abordar la
relación mujer y nat.traleza.
IvoNr Gnrmn: Ecorpurxrsuo
En este orden, también abordamos la relación mujer-naturaleza
desde el Ecofeminismo según Ivone Gebara, quien desde una visión
política y teológica percibe la tierra en una dimensión sagrada. Esto
es enfocado a partir de la teoría feminista que surge en Pro de la
defensa del ambiente, es decir, el Ecofeminismo. El mismo tuvo sus
inicios en Francia al final de los años setenta, extendiéndoso luego a
los países de Europa, América y África. Al respecto, es importante
mencionar como una de las iniciadoras a la socióloga Frangoise
D'Eaubonne, su finalidad estaba orientada a mostrar la alianza dela
lucha hacia el cambio de relaciones entre hombres y mujeres para
transformar el cambio de conducta entre hombres y mujeres con el
ecosistema. "La cuestión planteada por esta autora se situa en el
nivel político-ideológico, de las luchas sociales y de las relaciones
nacionales e intemacionales entre los diferentes grupos humanos,
ante el creciente desastre ecológico al que asistimos."2o2
201 Gloria Comesaña, Reconciliarse con Gaia en un mundo dominado por la
razón tecnológica, en Utopla y Praxis Latinoamericana/Año 15. No. 51, 2010,
Pp. 127-140.
202 M, Mior y V Shiva, citadas por Ivone Gebara, Intuiciones Ecofominist¡s,
2000,p, ll,
utl
 BBernz SÁ¡¡cn¡z Pnsre
El ecofeminismo es abordado por Ivone Gebara como pensamiento
y como movimiento social, referido fundamentalmente a la
conexión ideológica manifiesta entre la explotación de lanaitraleza
muy similar a la explotación y a la degradación de las mujeres, 1o
.rul ti.rr" su asidero en el sistema jerárquico y patriarcal en el cual
vivimos. Plantea Merchant:
La degradación de la mujer y de lo animal a un escalón
inferior dJla vida humana, se basa en la marcada diferencia
entre naturaleza y cultura establecida en disciplinas como la
historia, la literatura y la antropología, diferencias que es, para
dichas disciplinas, un fundamento indudable.2o3
En este orden de lamzónpatriarcal se opone el ecofeminismo,
el mismo es concebido como una sabiduría que busca recuperar al
ecosistema y a las mujeres, puesto que: "Éstas fueron relegadas por
el sistema patriarcal, y particularmente por la modernidad, a ser
fi¡erza de reproducción de mano de obra -"vientres benditos"- en
tanto la nattralezase tornó objeto de dominación para el crecimiento
t]'
del capital."2u
i
r
t
i
La influencia del ecofeminismo en América latina no ha
!r sido tan trascendente como en Europa, pero si es un hecho, así lo
a
I I'
demuestra el pensamiento de Ivone Gebara, entre otros y otras. Nos
frrndamentamos en la idea de justicia y de respeto que prevalece
I en el mismo, pues, la presencia filosófica allí est¿i al servicio de
i
las sociedades. Es precisamente, allí donde interpretamo§ que
! lucha por la üda, lo cual tasciende el discurso cosificado de la ética,
se resguarda el principio filosóflco ético-ecológico muy digno de
conocer en el presente.
Ante el deplorable cuadro institucional que üvimos y su
complicidad flagrante con los procesos destructivos de grupos
humanos e indígenas, nue§tras acciones - como el desarrollo de
'un pensamiento alternativo * §e dan a través de minorías que
aceptan el desafio de comprender el mundo, y a sí orismas, a
partir de otros paradigmas.2os
El gran desafio de la filosofia en la actualidad está infínsica¡nente
relacionada con la recuperación de la dignidad de la vida, lo cual
ffiando Mires, ül Malestar en la Barbarie, 1998,
p.97.
204 Ivone Gebara, Intuiciones Ecofeministasn 2000, p' 18.
205Idem. P.32.
.-a¡
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
está íntima¡nente ligado con vivir la vida en plena amronía con la
nattxaleza, lo cual nos obliga a pensarla desde el plano ético, justo
parapensar ésta desde el respeto de la acción creadora y reproductora
de la vida. Hecho éste con el cual históricamente se ha relacionado
a la mujer desde el pensamiento mítico tradicional hasta hoy en día
cuando es revitalizado por la filosofia del género.
El ecofeminismo busca su derecho de ciudadanía * en la
pluralidad de pensamientos - en el interior de las instituciones
sociales y religiosas. Quiero acompañar los desafios no solo
del mundo postmoderno como dicen los filósofos y cientistas
sociales sino también del mundo de aquello y aquellas que
regionalmente no tuvieron acceso a la modernidad. Se t":ata de
un pensamiento ligado especialmente al mundo de los pobres, de
los hambrientos y analfabetos, de los sin tierra, de los que viven
en suelos sembrados de tóxicos y radiaciones nucleares.2tr
En este o¡den de ideas, descubrimos una ética ecológica en
el pensamiento de pensadoras latinoamericanas que piensan en la
naturaleza. En la medida que se sienten los impactos ecológicos
de un amanera directa a la propia vida. Al respecto evidenciamos
otra ética que sustituye la ética individualista: la ética egocéntrica,
nos referimos a la ética ecológica, considera que todos los
elementos que integran al planeta tienen una relación sistémica y de
interdependencia.
Lavoz unida de las mujeres en Latinoamérica ha conforrnado
un movimiento de lucha por la salud del planeta tierra, es decir es la
para convertir éste en una ética ecológica, viva y dinámica. "Estoy
convencida de que con muchos otros grupos buscamos la salvación
del cuerpo sagrado de la Tierra, cuerpo prostituido, vendido y
comprado en virtud del lucro fácil y de la acumulación de riquezas
para una minoría'zm
Los postulados del ecofeminismo se destacan en un plano ético
en la medida que se postula por la protección de la tierra y la lucha
por la justicia social de la mujer y del hombre, desde la igualdad,
puos la mujer constituye el ser dador de la vida que va más allá de
la dimensión religiosa para aposentarse de una posición política, en
el orde¡r de la amronía social y ecológica:
206ldom. P. 32,
207ldom. P. 32,
Ef,
 BeArRrz SANcrrBz Prei-l
Una postura ecofeminista paramí es una postura política
crítioa, qüe tiene que ver con lá lucha antirracista, antisexista
y antiilitista.Laé mujeres, los niños, las poblaciones de
árigen africano e indígéna son las primeras víctimas Y2 por- lo
án?o, tos primeros en-ser excluidoi de los bienes producidos
É Tieha. Son ellos también los qúe .gcupan los lugares
ñi
-á. u-.ruzados del ecosistema. Son ellos los que viven
más fuertemente en el cuerpo el peligro de muerte que el
desequilibrio ecológico les impone. Estas aflrmaciones
puedén ser verificadás a simple vista. si nos tomamos-tiem-po
iaru andar por los barrios pobres de las grandes ciudades
latinoamericanas.2os
nuestra manera de ver, el ecofeminismo planteado por la
A las grandes ciudades latinoamericanas, por los barrios industriales,
pensadora latinoamericana Ivone Gebara, se da la mano con los
principios de una ética ecológica latinoamericana, en la medida en
que ésta se postula por un cambio de una voluntad polltica, que en
iatinoamérica restituya a la mujer su condición de ser humano en
plena igualdad con el hornbre y que vele por un mundo mejor, sin
contaminaciones irreversibles que afeclan los ecosistemas marinos
i
I teniendo como principio la preservación y conservación de nuestros
I y terrestres, por ende, porque afecta directamente la alimentación
áe los seres humanos, el alimento y el agua que §e consuÍte' "La
I problemática ecológica tiene que ver con lataza, el sexo y la clase,
y por consigulente no puede ser estudiada como disciplina aislada de
I
rr
It'
i la problemática social mundial en la que vivimos'"2oe
La postura de Ivone Gebara e§ una poición política en íntima
relación con la fllosofia y la teología paru al}at:Ejat una vida más
humana, sin llegar a sacraliz8I- la naturaleza, ni a las mujeres, sino
gue se trata de una búsqueda de caminos alternativosde convivenciat
§on alternativas para mejorar la calidad del aire y del agua, siendo
las mujeres las que más están comprometidas en el barrio para vivir
en mínimas conáiciones de salubridad
, Los seres humanos, los animales y la naturaleza en general
tanto pueden ser fuente de destrucción como de creación' En
ellos muerte y vida se enftelazan pafa indicar !a inseparabilidad de
estos polos án el interior mismo de la comp§aestructura de la
vida. §omos parte de un destino común y, en cierto'rranera, la
Iucha ecológióa, la lucha de las mujeres y do tantos oüo§ grupos
alternativos-frente al sistema establecidó, tienen que vcr con la
preservación dti la vida.'1210
208Idem. P. 25.
209 Gebara, p, 25.
2l0ldem.
, ¡;if*
Hacia una Ética Ecológicq desde la Interculturalidad
Interpretarnos desde el pensamiento de Gebara principios éticos
que exigen mantener viva la conciencia crítica, para contribuir con
el bienestar y la igualdad enüs mujeres y hombres, para levantar
lavoz solicitando lajusticia social, es decir, donde prevalezca el
principio de la vida, sin agresiones y sin violaciones. Así naturaleza
es relacionada con la condición de la mujer, según Gebara, esto
tiene su asidero en el hecho de ser los seres que más fuertemente
sienten el peligro que causa los desequilibrios ecológicos ya
que son ellas las que ocupan los lugares más amenazados del
ecosistema. "Estas afirmaciones pueden ser verificadas a simple
vista si nos tomamos tiempo para andar por los barrios pobres de
por los caseríos de las zonas rurales."2ll
El planteamiento de la autora en estudio se fundamenta en
la justicia política, social y cultural que todos debemos buscar
para restablecer el orden del mundo, lo cual equivale a romper los
tradicionales esquemas de la exclusión, para abrazar la inclusión,
ecosistemas, en la busqueda y fomento de ofros modelos de desarrollo
que impidan los agravios irreversibles a la naturaleza con el fin de
disponerse a desarollar una vida más digna.
La perspectiva ecofeminista nos abre hacia un referente de
la experiencia humana, más amplio e inclusive que el transmitido
corrientemente por nuestra. Este referente debe ser pensado en
todos los niveles de nuestro conocimiento y en el propio modo
en que 1o pensamos.2l2
En este sentido, la autora, nos remite a repensar los elementos
nuevos que aportan a nuestra tradición cognitiva, en la medida que
también ésta ha sido entorpecida por los dogmatismos construidos a
1o largo de la historia, donde el pensar y los aportes del conocimiento
no aparece en la ciencia oficial.
Nuestra grantarea es contribuir a crear conciencia, por lo tanto
el rol de la filosofia está en ayudar en la construcción de la verdad.
"y eso signiflca no permitir jamás que la energía inquisidora de la
mente se duerma, no dejar jamás de cuestionar lo que aparece como
obvio y definitivo."213
2ll ldem.
212 ldom. n 35.
213 Lorok Kolüowrkl, ol[dr por lvonc Ooban, . p.35,
á&t:
r Bnern¡z SANcruz Pm.nra Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad

La situación de nuestro planeta, evidentemeRte, requiere de Desde esta perspectiva su planteamiento sobre el ambiente estii
revisar el paradigma del conocimiento, el cual ha sido finamente
^
lirndamentado en una vlsión crítica del género, cuya reración con
L tejido para procrear el síndrome de la irracionalidad. '?ara nosotras, lo ético radica en los principios de Ecoferminisáo, én ros ..ruiir s.
I mujeres, la invitación a que movafnos las aguas patriarcales en fpdamenta y a partir_ d9 lá cual interpretamos ún phnteamiénto
t ético que se basa-en la igualdap v. la justicia de la inujer y de la
todos los niveles del saber, se impone hoy más que nunca como una nattraleza,lo cual encierra en si mismo una responsatiti¿ad por la
r
B
x
exigencia de justicia hacia nosotras mismas y hacia la humanid ad."2t4 vida, por la afinidad de la mujer con la nattxaleziy por Ia.upuiidud
I Este planteamiento sería vital para preservar la vida del planeta, lo de protección que histórica y culturalmente ha tenidb con elia..
¡ cual nos obliga a mantener un diálogo abierto con otas culturas y
B En este sentido, nos explica la autora que la corriente conocida
I otros saberes que han sido históricamente discriminados. "Esta es la
como mujeres y medio ambiente se inspira en la línea de pensamiento
grantarea de la filosofía con relación a la naturaleza."2ts
y acción en "mujeres en el desarrollo", centrándose en lás mujeres y
t en sus necesidades como individuos y grupos.
t
I
Esta es una postura abierta al diálogo enüe culturas, en virtud
I de la cual se podría llegar a despertar las conciencias adormecidas o El problema central de sostener la existencia de una relación
casi muertas de los seres humanos que en este mundo están inmersos especial entre las m¡rjeres y la naturaleza es el hecho de ignorar
I
I en él sin tomar conciencia de lo que representa conservar la vida, lo el contexto, por ejemplo, las distintas estrategias cotiáianas
i cual nos permite decir que esto no es una preocupación o un deber de sobrevivencia, la variedad de objetivos q:ue se asocian
I
ser de unos cuantos sino de todos los seres en este mundo.
al uso y manejo de los recursos am6ientalesi las relaciones
t {1foder, y fundamentalmente las relaciones de genero que
diferencian a vaxones y mujeres en los procesos de priducción y
M¡,nf¿, Nmvrs Rrco: Gúnnno yAnrrnNrn reproducción.2r7

I En ohas palabras, la relación Género, Medio Ambiente y

Desde la filosofia del género que en si misma conserya un ^sustentabilidad, se basa en las distintas estrategias cotidianas dé
l,r sobrwive¡cia, la variedad {e- objetivos que se asocian al uso y
i planteamiento ético en relación a la igualdad y a la justicia, hemos
interpretado a Mrana Nieves Rico, quien aborda la situación Tuo::o de _los recursos- ambien4les, las-relaciones de poder, y
r fundamentalmente las relaciones de genero.
ambiental en Latinoamérica, planteando que las mujeres son un
potencial fundamental. para salvar el medio ambiente, no obstante "Los postulados de "género, medio ambiente y desarrollo
I
ha prevalecido una negación hacia la participación que ellas han sustentable" permiten identificar las diferencias exiitentes entre
luchado por legarnos. las mujeres enfatizando el ca¡ácter socio histórico y cultural de los
t procesos de subordinación y negociación en los que se encuentran
En América Latina se reconoce que las mujeres han sido insertas.2rs
"administradoras invisibles" y cotidianas del medio ambiente.
¡ En consideración a esto, en algunos casos se ha apelado a Desde esta particularidad, se comprende que las crisis
'su rol como soporte ambiental y educadoras ambientales, energéticas son básicamente asumidas por las mujeres, en virtud, de
valorando sus aportes derivados de los roles que desempañan ser ellas las administradoras cotidianas de los recursos en el hogar.
sin contra:restax su situación desventajosa producto del sistema En este orden de ideas, argumentaNieves Rico sobre lapresencia de
de género dominante.2r6 dos realidades que para ella son ineludibles:

."a.- Las
ryujer-es. pobres se encuentran sobreexplotadas y
sobrecargadas de trabajo, lo cual se refleja en su salud y en el poco
2l4Idem.p.36.
tiempo del cual disponen en su autodeterminación como personas.
215 José Francisco Gómez Hinojosa, Hacia una Filosofia Intersubjetiva, en Pasos,
No. 82, 1999,p.33.
216 Marla Nieves Rico, Género, Medio Ambiente y Sustentabilidad dol Dc¡rno. 2l7ldom.P.24,
llo, 1998. p.21. 2lE ldoñr. P,26,

¡*e,: .+.¿.ffi+. ,¡, §l*tu

 Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
BgATRIZ SANqrrz Prt¡rt

ejemplo, si el trabajo y el conocimiento de las mujeres rurales

b.- La posición de subordinadas que ocupan en nuesffa sociedad, se utilizan en la reforestación para controlar la erosión, pero no
de acuerdo al sistema depoderque regulalas relaciones de género".2le tienen ninguna injerencia sobre el uso, el manejo y la propiedad
I
de los rírboles y de la tierra recuperada, solo se beneficia¡an de
I
I
Desde esta perspectiva señala la autora que no todas las mujeres manera marginal y no de acuerdo al esfuerzo realizado."12|
perciben la degradación ambiental, ni los problemas ambientales,
I
de igual marrera. Hay relaciones particulares que dependen de los Con 1o antes planteado, la autora en estudio, resalta que a las
i
I
i
estilos de vida de la estructura social a la cual pertenecen, en este mujeres no se les puede tomar como si fuesen un recurso porque
I
no esjusto dada su condición de sujeto. Esto genera discrepancias
i
orden, menciona a las mujeres étnicas, quienes desde su condición
t,
I

prácticas y estratégicas, por los requerimientos de preservación del

I
de victimas han soportado los impactos negativos del ambiente'
i medio ambiente a partir de las políticas publicas. Además, se suma
I
Desde esta corriente su participación no sólo está caracteizada la concepción del género que se enfrenta alatenaz irracionalidad
I
en su lugar de "víctimas" de los cambios ambientales dada la del hombre.
vulnerabilidad diferencial de varones y mujeres a los impactos
negativos do estos cambios, sino también como conocedoras, En tanto, por una parte implica reconocer, valorar y potenciar
usuarias y consumidoras de los recursos naturales, asl como los papeles que desempeñan las mujeres en cada contexto especifico
sujetos de experiencia y creatividad en el trabajo comunitario, y y sus aportes al desanollo y, por ofa parte, superar la rigidez de
por lo tanto, en su carácter de propositoras de mecanismos que la división de los roles y la exclusión y subordinación que las
i
l
conduzcan a la sustentabilidad.22o afectaparapoder alcanzar la equidad y la sustentabilidad.zz2
I Esta corriente, denominada género, medio ambiente y
I Se propone, entonces, que se tome en cuenta el género con
desa¡rollo sustentableo también busca contribuir metodológicamente
un sentido diferencial para planificar el manejo de los recursos con la planificación e implement¿ción de programas y proyectos de
ambientales, anivel local, pero también con las tendencias globales,
t
[, desa:rollo. Así mismo, destaca la autora que la necesidad de estos
!l¡ pues la perspectiva del genero contribuye a la interpretación de
procesos deben tener un carárcter consultivo y participativo, donde
i
los cambios que van surgiendo en las relaciones genero medio mujeres y hombres contribuyan a elaborar diagnóstico y propuestas
i ambiente, tomando en cuenta a los procesos económicos y políticos, para desarrollar un compromiso con la sustentabilidad, desde la
t así como a las negociaciones y con§ensos que se establecen.
diversidad, económica, social y ambiental. La sustentabilidad, según'
I
t
En esta dimensión, Nieves centra su enfoque desde el Nieves, es una propuesta que abarca todas las esferas políticas:
t
punto de vista de la justicia, considerando el protagonismo de
El concepto de desarrollo sustentable abarca virtualmente
l
las mujeres en el sector económico y como consumidoras de todas las esferas de formulación política. A su vez, tanto el
recursos, y la forma en que §e ven afectadas por los fracasos de
¡
sistema de género como el medio ambiente debido a su amplitud,
I las políticas ambientales y por los diversos problemas generados son temas transversales y suelen considerarse como problemas
I que atañen a todos los sectores de la planificación del desurollo,
I por los mercados.
además de tener relación entre sí. Este hecho demanda la
t
En este sentido, en la concepción e implementación de adopción de enfoques multisectoriales y multidisciplinarios.
t pollticas sobre género medio ambiente en el contexto de Frente a esta situación, el desafío consiste en identificar, para
ün proceso de sustentabilidad, las mujeres no deberían ser luego priorizar, las áreas en que estas temáticas se podrían apoyar
consideradas como un "recur§o'o paru la conservación y recíprocamente.223
mejoramiento del medio ambiente, para la transmisión de una
nuéva cultura ambiental o para el éxito de los proyectos. Por
221 ldem. P.28.
222(dcm,P.29.
2l9Idem.
223 ldcm. P,31,
2201dem.P.27.

i:i+iJú.1
.;.f,ÉreÉi#-a- ¡tt
r Bsernz SANcI¡Bz Prnrue
La propuesta, delaautora en estudio, tiene su funda¡nento en la
I diversidadiconómica, social y ambiental de Latinoamérica. Desde
I este punto de vista argument¿ que la riquieza ambiental que nos
caruitei^ se relaciona con los asentamientos humanos, los servicios
t e infraestructuras correspondientes y los patrones socio productivos
!
de desarrollo.
r
En este sentido, resalta Nieves la presencia de una pluralidad
l de situaciones en las que se destacan las mujeres y los hombres
¡
I
t de las regiones, desde donde se construyen y se reproducen las
I relaciones de género y las interacciones con el ambiente. "Lo
anterior plantea importantes problemas al momento de priorizar
F
a nivel de toda la región áreas de acción pública comunes para el
r
diseño e implementación de políticas y programas ambientales con
perspectivas de géneto."22a
i
I
De tal forma, menciona que existen factores que ponen en
I
entredicho los procesos de sustentabilidad del modelo de desarrollo
adoptado, los cuales aparecen como centrales en todos los países,
peró sin embargo, éstos no toman en cuenta la pobteza en la cual
vive la mayor parte de la población, además de los obstiículos a los
cuales se tienen que enfrentar los distintos segmentos sociales, y
particularmente las mujeres, para lograr participar activamente en
los procesos de adopción de decisiones y de poder.
L el principio de responsabilidad que prevalece en un sentido común,
Al respecto, menciona la importancia que tiene diselar
estrategias y adoptar insür¡mentos para revertir y evitar el dEterioro
I
ambiental, para lo cual se requiere que los políticos yplanificadores
obtengan informaciones fiables sobre las condiciones arnbientales,
t
las présiones a las cuales ha estado sometido el ambiente, el origen
de éstas y los impactos que han tenido sobre la población Señala
Nieves liico, que es fundamental una política de generaciones de
I
conocimientosy de información que tome en cuenta la interrelación
entre género y medio ambiente. Así pues, señala principales
t
obstrículos que se han presentado continuamente:
i) el aprovechamiento restringido de los recursos infomativos
provénientes de los censos, encuestas de hogareq y oilar-firemtes
éstadísticas; ii) la falta de comunicación y de coodinación
entre las instituciones y organismos que han llevado a cabo
los estudios; iii) objetivos no definidos de manera estatégica;
iv) falta de inversión y de recursos disponibles; v) im-portantes
lagunas de información y aspectos arln no explorados.¿5
224ldem.
225[dem.P.32.
rl¿ '1"*;ffi
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
Nieves Rico se postula por la implementación de políticas
basadas en la información y en estudios ernpíricos y cientificos de
carárcter interdisciplinario que aporte datos que posibilite políticas
eficaces y programas ambientales con perspectiva de gérüro, que
permitan establecer una metodología adeóuada para abordar el
sistema de género y la situación ambiental de manera combinada.
Asimismo, desde este criterio es necesario contemplar las
políticas gubernamentales que apuntan directamente a relucir la
brecha existente entre varones y mujeres, y por lo tanto producir
cambios en sus relaciones, tales como los-planes de iguáldad de
oportunidades, más aún cuando éstos conflévan la coñsideración
del medio ambiente como área eshatégica para, a través de
objetivos c-oncretos, impulsar la igualdaá de oportunidades en
los países.226
El pensamiento de Nieves Rico no menciona expllcitamente el
discurso ético como tal, no obstante interpretamos que lo ético estrá
impllcito a lo largo de su planteamiento, lo cual se constituye en
una contribución para Latinoamérica desde la filosofia del género,
basada en la sustentabilidad como una vía para proteger nuestro
ambiente.
Se abren surcos desde la teflexión, pensando en lo ético desde
donde mujeres y hombres en los términos de igualdad y de respeto
trabajanan unidos para proteger la vida en el planeta
Les pido ese coraje que nos sifua en la verdadera dimensión
del hombre. Todos, una y otra vez, nos doblegamos. pero hay
algo que no falla y es la convicción de que -Iúnicamente_ los
valores del espíritu nos pueden salvar de este terremoto que
amerraza la condición lrumana.»j
La ciencia en manos de la tecnocruciahagenerado mecanismos
muy poderosos para hacer del consumismo una praxis intemalizada
en nuestro medio social y cultural. Es bien sabido por especialisks
que el efecto que nos produce la televisión es ideológico, elemento
éste que lo conseguimos en todas partes, aún para saborear un cafe
tenemos que compartirlo con el ruido que nos produce tanto daño a
los oldos y tanto maleskr a la vista, pues la violencia, la guerra es el
tema fundamental en las series y filmes estadounidenses.
226ldom. P.36.
227 Bmotb §lhtor Lr Rc¡iÍoncia., p. 13.
. ,. - .,i-,-i-
.iÁ.lr..r§!tr ,, .r , rtt,,
r
B
f
ti Bperp¡z SANcmz Pm¡u
i Hacia una Ético Ecológica desde la Interculturalidad

t Esta es una realidad muy patética, pues la TV llega a invadimos

E
hasta en la intimidad de nuestra existencia, pues esüá allí, como
,n compromiso con la humanidad para proteger ecológicamente
nuestro planeta como bien común en lugar de estar al servicio de los
I un huésped principal con toda su carga de violencia que penetra,
I grandes consorcios industriales?
que nos impide tener lucidez sobre el fenómeno de la alienación
I a la cual estamos expuestos, además, de predominar la fealdad y la Definitivamente pareciera que el ser humano es más amigo
I deshumanizaci6n. "Si nos volvemos incapaces de crear un clima de de la_destrucción que de la conservación sin reparar en
lo que
I
belleza en el pequeño mundo a nuestro alrededor y sólo atendemos a significa la tierra."Tenía ante mí toda la rica tierrá, y sin embaigo
las razones del trabajo, tantas veces deshumanizado y competitivo, tan sólo miraba hacia lo más humilde y lo más pequeño.
¿Dónde
I ¿cómo podremos resistir?228 estaríamos los pobres hombres si no existiera la tierra fiel?,
¿qué
tendríamos si no tuviéramos esta belleza y bondad?231 Hasta el
I La actitud irracional y explotadora del ser humano, en el momento la naturaleza nos protege aunque por momentos se
presente, contrasta con los valores comunitarios sobre la base de
r sacude agresivamente, repercutiendo mortalmente en los seres
I
la convivencialidad y la solidaridad que nos distingue por nuestra
i
humanos.
condición humana. "Había épocas buenas y épocas calamitosas,
I

i, pero dependían de la naturaleza, de las cosechas; el hombre no

sentía que debía obrar siempre y en cualquier momento para
I controlar el acontecer de todo, como lo que cree hoy en dia'" 22e
I
La vida en nuestro planeta merece ser reflexionada desde el
I
visor de 1a filosofia porque hemos perdido valores fundamentales que
I nos relacionan con lanaitaleza, en este caso, se ignora que la tierra
iii
cumple con una función en lo que respecta la fecundidad de la vida.
"La Madre Tierra cuidaba tanto de las semillas como de los muertos,
ya que estos últimos, como los granos que habían sido enterrados,
regresarían a la vida recubiertos bajo una nueva forma."230 Los
errores del ser humano fundamentalmente se han creado a partir
del conocimiento positivista, donde los avances tecnológicos han
asumido una dimensión tecnocrática que tiene cara de muerte, por
cuanto ya está afectando incluso la biosfera, cuyos desequilibrios
ecológicos son una muestra de una latente realidad.

Me pregunto ¿Hacia dónde nos conduce la apatra política por

la vid'a de los ciudadanos que habitan el mundo?; ¿Qué será de
nuestras vidas sin los árboles que nos protegen como madres a sus
hijos?, ¿Qué pasaría si se detiene e[ cauce de los ríos que corren
como signo de la perfección de nuestro planeta para proteger el
milagro de la vida?; ¿Por qué el conocimiento científico no asume

228ldem. P. 18.
229ldem.P.4l.
230Idem. P. 48.
231 R. Walrcr, oltrdo por Bmo¡to Sábato, L¡ Ro¡i¡tCncia, p, 37.,

L- lflL,*: .r¿.:.... :¡*F&a.:**¡ ,t#iÍ

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C,apirum V
Vtsruxnv»o n*t Eocn Ecoíoioice
LeruNoertnwcANd :
r
i
Hlcu Orno On»px DE LA Vr»¡,
i

I EI gran mar
Me ha dejado a la deriva,
I

i
Me mueve como al alga de un gran río,
i
i
La tierray el magnífico tiempo me mueyen,
I
Se me han llevado,
y mueyen mis partes internas con alegría.
t
i

I Mujer Chaman Inuit

l'

Offo orden de la naturaleza nos remite a una filosofia de la vida,

'
donde el ser humano y la naixaleza establezcan una relación de
comunión. Una Ética q-ue vele por la vida, enfocada desde la buena
I
razón, hacia una vida más digna es el tema que nos ocupa en este
i
capítulo, no obstante el mismo será abordado desde el sujeto vivo,
I
es decir desde la conciencia del ser humano en relación al otro, a
I la otra, desde la dimensión que tiene elnosotros, en tanto lo ético
I
! 1o entendemos a partir de la solidaridad, la comunicación, pero
I sobre todo la responsabilidad y la tolerancia para un mundo de paz
l
I
absoluta.
Para lo cual iniciaremos el tema desde el pensamiento de
I Gregory Bateson, en el momento cuando denominó una de sus
i conferencias Zos hombres son hierbdrl Es decir, la metiáfora y el
b
mundo del proceso mental, marcando asl un hito entre lo que es
I la poesía de la vida y la üda misma desde el mundo científico.
I

I Tenemos entonces que este autor nos demuestra a partir de una

t.

t metiáfora llevada a un silogismo una realidad patética de los seres:

La hierba muerta. Los hombres rnueren. Los hombtes son hierba.
I Bateson que fue más allá de la biologíapara llegar a relacionar la
mente y la naturalezu: "la metiáfora no era solamente bonita poesía,
I
no era ni buena ni mala lógica, siüo que, de hecho era la lógica sobre
la cual se había qonstuido el mundo biológico'.233
En este orden de ideas, Francisco Varela, nos rdmite al tema
mente y naturaleza, redimensionando así las teorías de,investigación
tradicionales para conducirnos a pensar con dignidad.

232 Grogory Batomo, OAIA, 2006, p. 37 (discruso de apertura de la rounión anual

do lor miombru¡ do Lindi¡f¡mo dcl 9 de junio de 1980).
233ldail, P, «t,

& , u, ,,, r, .¡¡S+-t,.ii:r r\;ii,,r¡ iiri't:.::. I,*iirt;*¡iásisilifliilEÉ ,., i* ' I*

r BeATRtz SANcHBz PInSL¡
Para mí la posibilidad de sobreüvir con dipidad en este
planeta depende de la adquisición de una nueva mente. Esta nueva
mente se debe forjat entre otras cosas, con una epistemología
radicalmente distinta que informani de acciones pertinentes. Por
lo tanto, además de su belleza intrlnseca, considero que estos
meandros epistemológicos son vitales.234
La visión transformadora de la concepción científica desde
una biología más dinámica nos llevaría a pasos más firmes para
responsabilizarnos de la vida del planeta, pues es mrás integra y
más digna en cuanto a lo que se concibe tradicionalmente de la
naixaLeza.
Una manera simple, aunque precisa, de expresar lo que yo veo
como el eje de la transición de la antigua (medio siglo) biología
a la nueva, es la siguiente: en lugar de tratar principalmente de
unidades heterónomas que estan relacionadas con su mundo por
medio de la lógica de la correspondencia, la nueva biología trata
de las unidades autónomas que firncionan por medio de la lógica
de la coherencia.23s
En todo caso, la biología como ciencia no debe seguir separada
de la sociedad, pues debe estar más sensiblemente unida a la vida y
a lo que es la vida con todas sus complejidades y movimientos que
la caracteizan e incluso que la representan, por cuanto este tiene
consonancia con una filosofia de la vida.
En otras palabras, veamos el sistema como un sistema
perceptivo autónomo: una colección de estructuras activas
que se auto-corrigen, capaces de informar (o determinar) su
entorno circundante en un mundo, a través de una historia de su
acoplamiento estructural con é1.236
En este mismo orden tenemos a Maturana, quien hace
referencia al error de pensar en las explicaciones científicas como
las salvadoras, en el sentido que las mismas habitualmente son
vistas como que tienen que ver con la previsibilidad, por cuanto se
parte del hecho de conocer el fenómeno y por lo tanto la explicación
que proporcionan es determinante.
I 234 Francisco Varela, GAIA, 2006,p.48.
235Idem. P.49.
I
236 ldem. P, 51.
t ¡rÍ¡¡:i1'l
Haciq una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
Es decir, no puedo proporcionar una explicación científica
para sisüemas que no admitan hipótesis experimentales
mecanicistas. De modo que si quieren que propbrcione una
explicación qle tenga que ver con algo que tragaá los sistemas
vivos, como la conducta adecuada, rne eiUn pi«liendo que tate
el organismo o el sistema vivo como un meánismo, c'o*o un
sistema determinado por su estructura.23T
Para Maturana el problema radica en el peso que tiene
pensar en que los sistemas vivos no pueden estar estructurados
mecánicamente y esto se debe demostrar apartfu de la situación
de un organismo en un medio que funciona adecuadamente
de acuerdo a sus necesidades, puesto que el medio selecciona
el camino de transformación estructural que experirnenta un
organismo durante su ciclo de vida.
Desde la escuela nos enseñaron la composición de nuestro
planeta, la misma estaba sujeta a una descripción de acuerdo a las
leyes fisicas químicas, jamás se nos ocurrió dudar de la palabra
científica o que podía haber algo más, en el sentido de concebirla
como un ser mltico, sagrado o bien como un ser con vida propia.
Sin embargo, han surgido nuevos planteamientos, al ,".p..to,
Edgar Morin nos remite a los desafíos de la era planetaria.
_ Es decir, hay que comprender la vida como emergente de
la historia de la.tierra y a É humanidad como emergeíte de la
historia de la vida terreshe. La relación del ser rrü"-uno-ro,
la naturalera y el planeta no pueden concebirse de un modo
reductor ni separadamenúe, cémo se desprende de la noción
do glob¡lirariór- porque la Tierra no es lá suma de elementos
disjuntos: ol planeta fisico, más la biosfera, más la humanidad,
sino que es la relación entre la Tierra y la humanidad que
r debé
coacebirse como una entidad planetariá y biosfédca.zs
§i ¡o Eeimilamos la importancia de la vida, jamás podríamos
comprender su siguificado, mucho menos podríamos entender ni
consiCIffiar l¿ fntima rolación que hay desde el principio entre el
sar htmano y la naturaleza, secomprende por unidad a todos los
olffintos que integran el planeta, como entidad compleja.
En la definición de Lovelock la tierra constituye .trna entidad
conplpJc qrn abarca la biosfera, la atnósfera, los océanos y la tierra
2?1ldatrn.P,73,
23t EdSü Moül¡, Bdüoü on lr En Pt¡not¡ria, 2ü)3, p, 79,
*
r Bnunz SÁ¡csrz Ppou.
firme; todos esos elementos constituyen un sistema cibernético o
de realimentación que proporciona un medio fisico y químico
óptimo parala vida en este planeta."23e Por lo tanto, la vida tiene
una conexión cósmica que significa la superación o la supresión del
caos, de donde emerge el proceso de complejidades de la materia
para que surgiera la tierra.
La vida es una expresión de esa organización del caos.
Representa la auto-organuación de la materia cuando ésta se
encuentra un nuevo equilibrio dinámico, auto-organizativo y
auto-regenerativo. Legada a un determinado grado bastante
elevado de complejidad, la vida emerge como imperativo cósmica.
Y ello en cualquier parte del universo donde tal complejidad
haga presente.2ao
El daño que le hacen a la tierra directamente se lo están haciendo
a la humanidad. En este sentido la ciudadanía estiá llamada a exigir
i
el respeto que merece la vida, en razón que el camino hacia una
I
ética ecológica es la víaparu desarrollar una conciencia ecológica
I
prira preservar Latiena y ella como matriz universal está muy bien
I
concebida por el pensamiento amerindio como la madre de todo ser
viviente. "Es la más bella criatura del universo conocido, la criatura
t más encantadora que la evolución haya producido jamás, a la vez
vigorosa y tierna, ftágil y, hasta ahora, indestructible."2al
I Concebimos como un deber para con la humanidad y un
I Esto conlleva a desarrollar todo un proceso para una vida
t compromiso con el planeta cuidar la tierra paru el logro de una
I vida más hermosa y verdaderamente humana, pero se trata de
I
emprender un cambio de conducta que nos conduzca con carácter
de urgencia a cambiar el patrón de industrialización compulsivo
que tanto ha perjudicado ala humanidad.
I aprehender a la tierra como sistema vivo, donde la vida se desarrolle
Todo el planteamiento desarollado hasta el momento nos
t sin excluidos (as), ni victimas, con un objetivo común, es decir, de
conduce a hablar sobre el rol de la ciudadanía, puesto que no sólo
t está en crisis nuestro ambiente sino ella misma. Para la construcción
de otro mundo, todo es posible si estamos conscientes que es un
I derecho y un deber de todos cuidar nuestro hábitat, nuestra casa
común en un clima de total tolerancia polltica.
t
tf,, 239 James Lovelock, teorla GAIA, citado por Leonardo Boff, Virtudes para
mundo posible , 2006, p. 43.
f
I 240Idem.
lI 241ldem.
I,
I}
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
Tolerancia política es la expresión de la responsabilidad en lo
referente a la autonomía política del ciudadano, en una democracia,
con respecto a la mayona y las minorías. Por eso, la tolerancia es un
criterio ético para determinar la capacidad de tradición de la actividad
politica."2a2
Partimos de la idea que la ética ecológica que por si misma es
una ética de responsabilidad, para con el otro y con la otra, pero al
mismo tiempo para con lanattxaleza. percibida como zujeto porque
íntimamente en ella impera el bien común. Desde este punto de
vista la tolerancia política constituye el primer eslabón para concebir
y desa.nollar una filosofia de la vida, cuyo principio es la vida misma
se
a partir de los saberes tradicionales y no tradicionales fundados en
la idea de una vida mejor.
Nos descubrimos como miembros de la gran familia
humana y miembros también de la comunidad de viáa, hermanos
y hermanas, primos y primas de otros representantes-plantas
y.animales- de la inmensa biodiversidad que caracteriza ala
biosfera, ese fino y sutil estrato que rodea la fierra constituyendo
el sistema-vida. Ciertamente, es algo más que una tenue
membrana de vida, pero es tan sólo la parte más visible del
propio planeta Tierra, entendido como §uperorganismo vivo,
Gran Madre, Pachamamay Gaia.2a3
más fraterna que encierre ideas, conocimientos, saberes, aciertos,
programas educativos y tecnologías más solidarias o más
apropiadas para profeger el ambierrte. "La tecnología apropiada
tiene un concepto endógeno, autogestionario, biológico, que crece
de adentro hacia fuerza."2aa Estamos en el momento preciso de
salvar a la humanidad.
Apreciar el milagro que representa la vid¿ nos lleva a pensÍr
y actuar para la consolidación de una conciencia ecológica que
piense en la vida como el punto central de la existencia misma.
Debemos emerger como seres humanos diferentes, unidos en una
oto
242 lnng Fotsohor, La Tolorancia, 1996, p. 137.
243 Loon¡¡do Bofr, Vlrtudo¡ para otro mundo poeiblc, 2006, p, I E.
2¡14 Fruto Vlvm, C¡ütlor¡ do le Roboldl¡ y cl srbor?opul¡r, 200g, p, l j2.
# *ar,
r Bpernz SANcsBz Pn¡uq
aliatlza común por la humanidad. Esto tendría su asidero en cuaffo
fundamentos; la paz,la tolerancia, la solidaridad y el diálogo.
Estos cuatro puntos cardinales son elementales para desarrollar una
ciudad¿¡nía diferente, más humana
Las identidades pasadas, nacionales y regionales, que tantos
conflictos y tensiones han producido, no deiarián de existir, pero
ya no serán ellas las que definan individualmente el futuro.
Éste será moldeado por todos, así como por aquellos elementos
comunes que vayan siendo identiñcados y asumidos,2as
La Tolerancia es un elemento determinante paralaparticipación
ciudadana, también es perentoria en el futuro de nuestra situación
ambiental, pues se trata del reconocimiento al otro y alaotra, de sus
diferencias y de su derecho a ser diferentes. Los grandes crímenes
de la humanidad han sido cometidos por ser intolerantes a las
diferencias y a la diversidad.
Pero ¿Cuál puede ser la base de la tolerancia enfre los
miembros de diferentes culturas y pueblos, religiones y posturas
filosóficas, si ya no lo es la convicción de la naturalezaracional
común a toda la humanidad? Ami juicio, hay dos características
que unen a los hombres, sea cual fuere la cultura a la cual
pertenecen: la capacidad de comunicarse entre sl a través del
lenguaje y la conciencia de la propia finitud y de su dependencia
de la Naturaleza, qte hace posible todavida.M
Entonces, conservar la vida del planeta y la de todos los seres
que la pueblan equivaldría desplegar un principio común a todos, es
decit la tolerancia. Esta ha sido definida pof Iring Fetscher como
de "pequeña virhrd", no precisamente por considerarla pequeña sino
porque depende de otras virhrdes y de las condiciones institucionales
que la hace adquirir más valor, de hecho es considerada por este
autor como de una actitud que debería ser practicada por todas las
instancias sociales, lo cual serla un elemento de peso para ordenar
los coriflictos de intereses buscar el bien común.
La tolerancia está muy ligada a la solidaridad, casi podríamos
decir que una no funciona sin la otra. En este sentido, nos referimos
a la solídaridad para asumir la protección de la vida del planeta bajo
este principio, pues es un problema de atención de todos y de todas
en el mundo.
I
245Idem. P. 19
246 Fetscher, Iring, La Tolerancia, 1 996, P. 1 59
L ,t{
Hacia una Etica Ecológica desde la Intercalturalidad
Obviamente, esta solidaridad de que hablamos es universal,
!o cua! significa qu€ traspasa las fronteras de los grupos y de
los países y se extiende a todos los seres humanos, incluidas
las generaciones futuras. De donde surge la percepción de tres
nuevos valores al menos: la paz, el desarrollo de los pueblos
menos favorecidos y el respeto al medio ambiente. Estos valores
requieren solidaridad universal.2aT
La solidaridad tiene otras implicaciones, pues se trata de hacer
sólido un rostro más humano para esta humanidad que galopa hacia
su propia destrucción, por ello partimos de un principio, es decir, del
ético ecológico, pues esto nos llevaría a desplegar una conciencia
ambiental, tan vital para desarrollar una voluntad implicada en
resolver todas las injusticias que se han apoderado de la razón de
ser y de hacer de los seres humanos.
Y es que la fuerza de la ética no procede de una voluntad
abstracta, que desde el Olimpo se decide por una cosa u otra,
sino de una voluntad implicada hasta las cejas en el sufrimiurto y
el gozo, sacudida por la precariedad; una voluntad atenta, capaz
de descubrir fuentes de transformación, donde los indolenteJno
ven nada.2a8
Entonces, no sólo se trat¿ de una voluntad sino de un compromiso
que desarrollemos apartir de una voluntad política fundamentada en
la solidaridad con los otros y las otras. Esto equivale a desarrollar
una experienciaética bajo el principio de la solidaridad que traspase
los intereses religiosos, políticos, económicos y culturales para
anteponer lo humano en pro de la humanidad. Cuando hablamos del
diálogo nos referimos al camino a la gestación de un compromiso
entre naciones, entre ciudades, entre personas que se logra a partir
de la comunicación, nos estamos refiriendo precisamente a: ,,La
capacidad de comunicarse porlapalabra es labasepara que elhombre
se oriente según reglas obligatorias para la convivencia pacífica
y para la recíproca tolerancia."24e La situación actual del mundo
requiere una fuerte y radical voluntad política mundial dispuesta a
desarrollar la tolerancia y la solidaridad a partir del diálogo, donde
la palabra se hace poder para dar paso a lapaz en el mundo.
247 AdelaCortina, Ciudadanos del Mundo, 1999,p.246
248ldom.
249lrlq F.tohü, Op, Clr. p. 16l.
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BEArRrz SANcn¡z P¡nsle
"
Porlotanto,lasolidaridaddesdeeldiálogoesconcebidacomo
un valor ético que lleva consigo como el bien común'
El diálogo es entonces un carhino que compromete en
.o toiátiau¿ í lu p"t.oru de cuantos lo emprenden porque' en
cuanto se introdücen en é1, dejan de ser meros espectadores'
p..-.Ñá.tirse en protagoniitas. de una tarea com-partida'
i"".. tizu"u áoé ru*ál"*' la búsqueda comn-1Xi{1f1to
üerdadero y lo ""
justo, y la resol' 1cióljusta de los contltctos que
van surgiendo a lo largo de la vida'"'
la
El diálogo en el norte del entendimiento es la primacía de
convivencialidad, en todos los planos de la existencia
humana,
radical
desde el respeto, es posible .uurrfuo hay un reconocimiento
de la diversidad cultural con el fin de dar paso la
interculturalidad.
y la
Hemos mencionado: la tolerancia, la solidaridad, el diálogo
la vida' cuyo
paz que intervienen en la construcción de otro orden de
hn üir.rru es retribuirle al ser humano la dignidad perdida..Esto
tiene como principio el respeto a la vida y ala natlxa|eza
misma,
pues es *ruiliun icon los hombre y las mujeres entre si y para si' 1o
cualintrínsicamenteesético,pofqueeslaacciónmismadelineada
potlavoluntaddehacerelbien,pueselbieneslarazír.deser'pues
por el ro1 rector
ia ética es un orden en la actuación humana creada
que juega el ser humano desde su naturaleza propia'
La naturaleza humana existe hoy únicamente -in potentia'
partera la
.orno *u posibilidad por nacer, en áspera de-que la
saque, no antes de un É¡so q-abajo y agudos$ototesi1¡1,f9' t'a
potenclal; un
naiuralezahumana "todavía" no es tal; es sÓIo su
potenciali"u"utu¿opero_1omásimportante_inacabableporsí
ffi;';ii.1a;y"á; d"i" razÍny de qúienes portan latazón;'2sl
El diálogo no es más que el encuentro entre hombre y mujeres
para llegar á entendimiento a la comprensión. "El diálogo es
el
el qnctlentro amoroso de los hombres que, mediatizados.por
transfoñnan y, transformándolo'
mundo, lo "pronuncian," esto es, 1o
1o humanizan, Ptr& la humanización de fedes'"252 Entendemos
el diálogo como un principio para lograr el entendimiento y la
el otro
convivencialidad en el mundo como una viaparapemar en
y la otra en la consecución de poner mas atención a la vida"
250 Adela Cortina, OP. Cit. P. 248'
251 Zygmunt Bauman' Ética Posmoderna, 2005, p' 34'
252 Paulo Freire, Extensión o Comunicación,1979,P'
46'
Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
Por lo tanto, cuando nos referimos a la ética ecológica, surge el
imperativo del bien común, en el sentido que nuesfro espacio común,
latiena, es el lugar de todos los seres que pueblan nuestro planeta.
Para ello, partimos de cuatro elementos básicos: la tolerancia, la
solidaridad, el diálogo y la paz. Nos referimos a la paz universal
como pacto de una conciencia de responsabilidad para lo cual es
inminente desplegar los pasos hacia una conciencia ecológica,
partiendo de la dimensión sagrada que guarda la Tierra que en sí
misma es una categoría que cabe reflexionar y repensar.
De tal manera, cuando hacemos referencia al pensamiento mítico
amerindio, a su cosmogonía que encierra valores espirituales, éticos-
morales y consuetudinarios, expresados en el lenguaje simbólico,
donde sobresale la nattxaleza representando el ro1 central como
una manifest¿ción de poder y símbolo de justicia, entonces, no lo
presentamos como un modelo que se debe seguir, sino que es una
invitación a pensar y
a reflexiona¡ el presente mirando el pasado
ancestral.
Por qué nos referimos a la cosmogonía amerindia como una
referencia para pensar y reflexionar, pues precisamente porque en
el pensamiento mítico la naf;traleza tiene una relación sagrada que
se manifiesta en el mundo espiritual, el mismo está representado
en figuras, tales como, la tierra, el sol, la luna, el maiz, el agua, la
Lluvia, que son elementos sagrados de la existencia étnica. Lo cual
nosotros interpretamos como de una concepción ética ecológica
originaria.
Esta mahiz ética ecológica estiá expresada en la relación de
armonía con lanaítralez4 1o cual en el marco de la interculturalidad
nos pone frente a frente a la manifestación de una filosofia propia
y específica, cuyos elementos están resguardados en las formas
intemas del mito que descubre una modalidad filosófica propia de la
conciencia amerindia.
Desde lamodalidadfilosóficade losmitos de origen los esh¡diosos
de la filosofia latinoamericana tendrían un camino abierto para
desentrañar aquellos elementos filosóficos aún no tomados en
cuenta, en la medida que aún estamos sumergidos en la raeón
colonialista, donde pennanece el sentido europocentrista, negador
de nuestras propias categorlas filosóficas.
:,r¿#flnru*E
 Hacia una Ética Ecológica desde la Interculturalidad
BeArRIz SANcHBz PnsLA'

Esto requiere de una esffecha relación de cooperación entre los

capítulos damos,cuenta
De hecho, a 1o largo de los primeros países industrializados paraponer fin al sistemático exterminio de la
una narración' sino que
qr. r"iii.t"*a míticaindíg""u áo sólo es
tierra. Que rompa básicamente con la política de poder y la ideología
ést¿ cobra vlaa propil,
se trata de tu
*.":3 dtl "-19:"
de dominio. "Esta ideología postula una relación de equivalencia
""*¿" que allí está implícita una visión
de ra creación, al misino;i"*p" la enhe los conceptos de industrialización, modernización y desarrollo
filosófica sobre la doo¿" la naturaleza es et centro de
social y tecnológico a la que ya se ha aludido como la ideología de la
*ruru "*i'i""io,
específicos
il;;; ,. allí, en eimito' en una relación con industrialización'r.2s4 Esta es, por ejemplo, la ideología que legitima
fundamentos filosóficos' la continua prosecución del crecimiento económico, poniendo todo
amerindia como postulado su énfasis en la producción, mas bien que en la distribución, de la
Encontramos en la cosmogonía iqueza, también trata de explicitar y determinar el funcionamiento
de la tierra' evidenciando
filosófico que toda "iá t'"" y"'"'ut" ala
el deber ser del n n¿amentado en respetar y tatar de la sociedad exclusivamente en términos operacionales, esto por
"*..iJio, a la tierra como la Madre
lririiiiy.rp""intu*áte
Tierra
'
en supuesto niega la relación de las consideraciones de las políticas
es esencial para la vida de todo ser intemacionales y las nacionales que conciernen a la distribución de
la medida que ella como sujeto
ecológica que -se plantea poder y de control social.
vivo. Dando muestra de una conciencia
al ambiente bajo el principio
como principio.rni'enaf el respeto La prosecución de la explotación social y de la enajenación
de responsabilidad. del ser humano es ideología, que legitima en primera instancia la
productividad y la eficiencia apartir de los avances técnicos.
Esasícomounaéticaecológicalatinoamericanapasaprimeramente
po, lJrr..fro lapaz' desde el Aeger ser f1t]]il: ?s
a la vida, a Los logros técnicos de la sociedad industrial avawaday la
y se basa como pnnclplo manipulación efectiva de la productividad ment¿l y material han
una salida para preservar la liumanidad
fundamental ru,rüon*¡ilidad sobre lavida' Esta se particulariza traído consigowrdesplazamiento en la clave de lamisttficaciÓn.
"o sobro la base de una razón más Tiene sentido decir que la ideologíallega a estar incorporada en
en el deber ,"r, po,InJt, se erige el mismo proceso de producción, y también puede tener sentido
¿"1 pensarniento universal' bajo
humana, urto .orr"iJ't' y'ene*ia sugerir que, en esta sociedad, lo racional más que lo irracional
el respeto de las p"nitJ*idu¿ts
culturales' "El vivir §e mnsforme llega a ser el más efectivo vehículo de mistificación.2ss
en una origencia étioa: en el
así de un criterio d"-;;td"d práctica
Esta situación del llamado progreso es desleal al ser humano,
deber - vivir"253
en virtud de haber generado crisis en el sistema planetario, al
Por supuesto, los panimetros de una étic¡ ecoló$g desarollarse firndamentalmente en contra del ser humano y de la
que tenga como pnncrpio la vida y la calidad dc
latinoamericana naturaleza. Prevalece la irracionalidad y domina larazót a partir de
u una r€alidsd ¡ociocultunl
vida, no est^á sujetaa * ñit*ut*o' tino laracionalizaciónideologizantedelatécnica.
rcspalde lo conocn¡¡ción
y a una decisión p"fi'i* **Aal que
y ia-oroteccióu original dc l¡¡ Se impone una ética ecológica bajo el principio de la
del planeta, partieíJo ¿er re§peto
Oi la realidad sooiocqltmt'
sociedades tradicioráie, .n.i"uo*ito
interculturalidad que abrigue una acción liberadora, desplegada a
partir de una razón de respeto a la diversidad cultu¡al que tengan como
LavalidezdenuestroptanteamientoestádadoCInt0doa{rpllo ptledo fin la armonía con la natwaleza en rlras del deber ser; 'oel principio
que respeta yprrr* ta vi'da del planet*' por lo tanto' ésta nomucüo - liberación enuncia el deber - ser que obliga éticamente arcalizu
natunlistn'
concebirse en los términos de un rormndciemo dicha transformación, exigencia que es cumplida por la propia
posiciones polftica§ quo dntc'tmiro (ier
menos mercantilisti;i;;;,
para qu§ la vida sea vc'Ídad§rameotÉ
ht¡psnfl"
las bases
it 254 D¡vld Diol¡oa, Tocnologla Alternativa, 1980, p'165,
255 Hütcrr Mrmuo, Op. oit, p. 217.
ñl-t*.¿o Botr, OP'cit;" P' 139'
l,
;x%,
 Hacia una Ética Ecológica desde la Intercuhuralidad
Be^trnz SÁ¡¡crrnz PIneLe

hablando lapreservació1 de La visión ética desde una racionalidad ecológica, pasa por pensat
comunidad de victimas,,.256 Éticamente
en base a acueldos y en la complejidad de la naturaleza eL su relación más profunda con
la vida en el planeta es vital entre naciones' el ser humano, desde su existencia pero, hay que desechar el carácter
entre los grupos de-poder económico
y las políticas
;;;;;;t sentido ideológico de la racionalidad imperante, pues no concuerda con lo
á.iÉr,u¿o u oüos sirt",iut ¿" gobit*o' con
un verdadero
a los fines de que significa la vida. De hecho, si se pensara en la vida y en lo que
á"-roponruuilidad y de un radical nivel de decisión
ella significa no se explotaría a la tierra tan descaradamente. No se
preservar la riqueza de la tierra'
percibiera la naturaleza como el centro de todas las acciones que
que la adquiere
El ser humano tiene sed de poder y en la medida violan su estado natural.
nuevos niveles
va desarrollando nuevos proyectos para alcanzar porque La violación de las leyes de la nafixaleza es un atentado a la
á; ;ñri;. Ésta es una sed insaciable que 1o caracteriza
por el hombre' de la vida humana y a la vida vegetal y animal, puesto que impera la
se instrume ntalaa en el dominio del hombre
vivo que puebla el planeta' irresponsabilidad, la cual por si misma es anti-ética, ya que no exige
mujer, de los niños y niñas y de todo ser
de Ia tazót técnica ninguna atención para con el otro. Como ejemplo de esto veamos
.ort itoyrndo así u *u
pátgrosa-utilización
ni programas ambientales tendientes a la
qr" a.rtt po' ello se ha convertido en su peor
Ve la natural"ia,
que no se aplican ni planes
protección del ambiente.
enemigo.
Notamos que hay mucha fragilidad para proteger las regiones
Connosotroscomienzanlasfisuras,nosotros.abrimoslas el
se vierte sobre vitales, tales como, la Amazonía, pese a ser la misma una zona
brechas, u t ur¿. ¿t las cuales nuestro veneno
¿._ru ¡attxatezaen cloaca de los fundamental común a varios países. Cuando no se piensa en lo
;ñü,;Ñrrt;;J;ü;üiidu¿
que se han invertido los frentes. Más
seres human"r.'ñ;r"*; que representa la Amazo¡ía para la vida, sino todo 1o contrario,
de nosotros' que-anosotros de
bien debemo. ñ;"ñ;lát'ti*o
In¿, peligroso^s-_para lanat:uralezade lo
que fundamentalmente se toma en cuenta pero para sacarle provecho
¿i. Ñ;1"-"r'*.1t3 económicamente desde una visión meramente materialista.
áiiu¡u*¿r lo ha sido para nosofos'257
propia razónde ser' lo cual No hay una conciencia ecológica que nos descubra una relación
La sed de poder del se¡ humano es su
a de armonía con la naturaleza, enrazón de la cual es que hablamos
,o a, *¿, qrr,*u descabellada o absurda manera de conducirnos
nafirraleza de una actitud que responda a una ética ecológica, que piense la
* ¿"Jirro sin destino, pues al dejarnos sin la savia de la
segura' naturaleza, es decir, la vida como un milagro excelso que es tan
sólo nos queda el camino de una muerte
frágil y maltratado por el ser humano que se hace necesario pensar
que pensemo§ en nuestro
Los tiempos presentes nos conducen a en ella como sujeto para preservar la vida.
de un modelo
futuro en §omún, Jesde el ángulo de un carnbio Una ética ecológica es sinónimo de una conciencia ecológica,
con fines pertinentes
científico técnico que en sí miimo fue creado que no da paso a la exclusión, por 1o tanto, la participación de
para dominar' Es en este se impone pensar éticamente desde
'ángolo mujeres y hombres sin distingo de raza ni de color, es decir desde
irru.*".p"ión más integral del ser humano con la naturaleza' la igualdad debe ser un principio ético en el desarrollo de una
En el futuro, tendremos que formular en términos
conciencia ambiental
diferente de la
explícitos *i'?']lu;*',.f'on"au*tnte
*íig"r, n r¿"¿. "riiJ"ái"ié ¿t tu naturale4q por la ciencia
Nuestro continente latinoamericano debería desplegar una acción
;i;?éát." silÑ;stel carácter indisociable de la relación
mancomunada para generar una conciencia ecológica, la cual es en si
se apoya en un nuevo
Lombre-naturaleza no ós inteligible si no misma descansa en los cimientos de una ética ecológica intercultural,
Paradigma.258 pues hay una situación de degradación ambiental muy grave e
irreversible, tan similar en el mundo, pues los planes y programas de
256 Enrique Dussel, OP. cit' P' 553 desarollo cjocutadoe tienen la tendencia de explotar irracionalmonte
y oüoo Diálogos' 2001' P' 123'
257 HansJonas, Más cerca del Perverso Fin la natur¡loza, cuya consocucncia cs la contaminación del ¡irc, la
25g Jacques Theys y Bcmard Kalaors, La
Ticna ultqiadt, 1996' p' 53'

,,:¡ffihke,, la
t BeArRrz SÁNqmz Pnm¡.
tierra, los ríos, lagos y mares, generando un exterminio paulatino
de los ecosistemas marinos y terresfres. Desde esta visión nuestro
punto de vista de una ética ecológica no se basa en la imposición
de la misma sino en una mancomunada voluntad política, social y
cultural que dqsarrolle un paradigma de desarrollo más humano y
basado en la protección y atención a la naturaleza, donde su mayor
aliada sea la educación.
El rompimiento con el paradigma de la racionalidad de la
ciencia técnica, sería el renacer de una razón filosófica donde la
atención a la vida sea el centro de la conciencia ecológica, lo cual es
competencia del mundo capitalista y del mundo socialista, asl como
de las universidades que determinan el conocimiento, las cuales
deberían generar espacios de intercambios e investigaciones desde
la interdisciplinaridad, desde la diversidad y la interculturalidad,
para el aporte de saberes afin de establecer el diálogo filosófico para
contribuir a establecer principios para un mundo más humano, a
partir de saberes y conocimientos al servicio de la humanidad.
El mundo de la filosofla desde la interculturalidad al servicio de la
humanidad establecería wnalianza con el mundo científico y desde
una sola voz establecerían los elementos necesarios para desarrollar
una visión ecológica que sirva de protección a la naturaleza. Pues se
trata de concientizar al mundo de lo que ella representa para el ser
humano y para las sociedades en general, es decir un bien común al
servicio de todos los seres vivos.
Una filosofia que nos haga conscientes de nuestra situación
como hombres ente hombres, como pueblos entre pueblos. Una
filosofia que nos muestre cómo esa ciencia rigurosa, esa lógica
precisa, esa técnica originada en ella, puede también estar a
nuestro servicio; puede, también ofrecernos el confort, el modo
de vida, qué ya se hace posible en otros pueblos.25e
La filosofia al servicio del ser humano bien podría poner sus
conocimientos a1 servicio de la humanidad para repensar la vida con
eticidad. "Después de todo es algo instrumental, un instrumento al
servicio del hombre, pero del hombre que primero ha de encontrarse,
expresarse y afirmarse."260 Entre estas contribuciones al servicio
del mundo estaría la de proponer vías altemas para una tecnologla
l,
259 Leopoldo Zea, La FilosoflaAmericana como Filosofla sin Más, 1980, p.61.
260(dern.p.62.
L rt*t.
Hacia una Éfica Ecológica desde la Interculturalidad
menos nociva, para el ambiente en consonancia con un proyecto
mancomunado mundialmente cuyo objetivo sea preservar ra vida en
la tierra desde la tolerancia, ra solidaridad y rapaz-""áiui.
-
!n gste sentido, destacamos que es imperante un cambio radical
en relación a la ciencia técnica como factoi determinant e
huqrana.p¡res ella ha ajustado_las bases para desarrolrar "nliraron
dominio y
go-der "El hombre, en tal sentido, es el centro ordenador y regisiáaor
del universo y todos los entes der mismo se hallan r" *:.i",
potestad de sus designios."26r por lo tanto, la ratio téciica "
es ra
manifestación de la voluntad
{e dom'-uo y poder del ser humÁo que
pone en peligro la vida en el planeta, lo cuaidebe ser redimensionado
hacia una meta más justa y más dignaparael mundo.
El fin de la ciencia técnica tiene como norte una deslear
explotación de la naturaleza paru a través de ésta someter al ser
humano, dejándolo en un total abandono ante el mundo. .,La
mundanidad del mundo será entonc es trazada por la técnica y la
técnica colocará en sus manos la posibilid.ad dé crearcu, nu.uo,
"mundos"'262 Estos nuevos mundos son conducentes a vivir
en un
consagrado confort que se caracterizapor la adquisición de bienes
materiales que sr¡mergen al ser humano en la alienación compulsiva,
en la medida que desarrolla un estilo de vida artificial Más grave
aún, le hace perder su total vinculación con la naturaleza,piesto
que pierde por completo el sentido de estar en el mundo.
El hombre, viviendo entre el confort de sus productos,
no tendrá entonces necesidad de recurrir ni de compenetrarse
con la naíxaleza. pl :
ryof y el impulso hacia ella que sólo
pueden prosperar allí donde esa naturaleza sea requeridl por
el
hombre y pueda ser vista como exponente de alguna peiiá"i0,
- tenderán a ser sustituidos por
él culto de ló técnico y por
aquella forma de existencia "tecnificada" donde el honrbre
reinserta en una "supra-naturaleza,, creada y diseñada poi et
mismo ad usum necessitatis vitae. Ero e. iínto*a innéguut"
que tran-sparenta su creciente alienación y extrañamiento ón
tal
sentido.263
La alienación se fortalece en la medida en que la ciencia
técnica se desarrolla en íntima relación con una ideología de.
26 I Ernesto Mayz Vallenilla, Critica de la Razón Técnica, 1974, p, 17.
262ldom.P,79.
263 ld.m, P, 79,
 Br,crR\z SÁNcrrez PREI-I

poder, de dominio y de necesidades creadas

por los tecnócratas' De BrcuoenerÍ,n
de
;;il, el mundo vá hacia una caída vertiginosa al desvincularse
ha perdido la visión de 1o que
la naturaleza porque el ser humano
ella representa' Aoe¡rDe Lern¡oemruceNa, Sar.vÉuoNos coN rt, Pr,aNrre, SeN JosÉ n¡
Cosm Rrc¡.,2010.
Entalsentido,laéticaecológicainterculturalabord¿dadesde
latinoameric"nu ,oJ brindarla una plataforma
de
la filosofia AÑANDON, Jevnn I.(1998), Rueros »r re Selve RxsprexoncrcNr¡,
otras ráreas de la
investigación y de reflexión donde convergerlan SCEZ, Menc,cA.rBo.
De 1o
¡ilffi; Éilu', rofri.u, Cultural, Anropológicadey laNaturaleza.
vid4 que no es BAUDRILLARD, JeeN (1996). Er Crurr¡nN Prnrucro, ANecnane,
sobre la plenitud
;;" "t trata es de reflexionar humano con el ser humano y éste con Meoruo.
il; ;"; conciliación del ser
lrir¡rrut"ra apartir de un cambio de actitud más ético' BAUMAN, ZycuuNr (2001). EN Busc.e DE LA Poriuce, FCE,
que sea o lo Ancr¡¡rnq¡,.
Lo decisivo en la ética no es lo que queremos
que conseguimos imponer-mediante el poder (ror aii se crean (2005). Énc¡, Posr"rooem,ra, Srcro XXI, MÉxco.
misma dice y exige
las diversas moiut..)i.iro lo que la reali-dad
que ponen a su escucha y en sintonla con BECK, Ur,nrcu (2003), Le I¡¡nrunuauzecróN, Pr,roos, BencrloN¡,.
d" ;"d" uno de los se
ella.2e
BERMÚDE Z,M ,Jrsús (1984). Avncue P¡,r.e¡ne Nmnerrva I¡¡olcnNe
de la vida'
Cuando nos referimos a ir hacia un nuevo orden Cuoq UNAM, MÉxco.
desde un despertar
nos referimos a construir nuestro mundo ético' BOFF, LroNaroo (2002). Ecolocle,: Gnno or r¿, T¡Bnn¡. Gnrro or ros
delaconciencia,dondelassociedadesindustrialesimplementen
cambios desde una visión más humana, de igualdad
y de justicia PosPGs, Tnorre, M¡,pruo.

en la búsqueda del bien para un futuro mejor

en consonancla con (2000). Ll DraNm¿¡ or r¿ Tmnn¿,. TRorrA, M¿»no.
la tierra. (2001). Érrce PreNrrARrA DEsDE rr GnaN Sun,
Es evidente que tal como se están presentandg' los
hechos Tnorrn, Meonro.
los desasffes ecológicos' 1o cual
ambientales, donde prevalecen (2000). E¡. DBsprnren om Ácuna,, Tnorr.c, Mepnn.
que formular
eJ¿ avata¿o por iniormes científicos, tendtemos (2006). Vnruoes IARA orRo MUNDo Posmlr, Sar-
té.*ino. eiplícitos una ética que vaya más allá- del diicurso' Tenner, S¿r.¡reNoen.
de la
piorundu*.nte diferente de la antigua, fundada en la virtud
"r,
no en el dominio BOOKHIN, Munnav, (197S). Pon uN¡ Socmoeo Ecolóoce, Gusmvo
conciliación del ser humano y de la natutaleza,pero
indisociable-de la
de la natural eza por la cienóia y la técnica, sino Gn r, Benceloxe.
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una vida con
servicio del ser humano es la justa medid¿ para vivir
la que nos obliga a concientizar y
áig"iá"¿, p"es es el valor de la vida BURIN Mensl v MELER InnNn (2001). GÉNeno Fer,ru-n, Pernos,
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