EL ENSAYO

HISPANOAMERICANO
DEL SIGLO XX
}OHNSUuus
(compwatlor)

. [¡]
AHIJIU,BO
PONDO DI! CULTIJRA F.CONóMICA
MIXICO
 ESTE CENTAURO DB LOS céNEJta;

E,,..,._ Analop>.t--= (....ain) pr-.a•

pmmento, lnlenlo. Ool lottn _,,...., (,-bce) .....
de peoar; (wrbo) meditar. - i n . , la propia_,,...

BI.ORICl!N de la palabnl puede a y u ~ a abordar una de I• forma,

m6t proleol de la UleralllrL l!I erwayo ea una meclltadón -,rila en
•tilo lltarvlo; • La lit_,.,. de icleN ~ muy • mer,udo, lleva la Im-
pronta penonal del autor. Ea proea. pero no n 6crl6n. El fruús Ml·
chol de Montalgne, pedtt del maayo moderno, dio una inOexión aulo-
biogrA!lca y eubjetlva • .... Eoui• (1580) y puao en dttulacl6n el
tkmino •-ro• en eale ¡>Maje inmorul:

l!ICo • .,......_ 11.,_J'O de - lacullaclN MNruM, 'f -

-,, de lao adc¡ulridM; y quifflqulon qu,t-""Prenda on ~ nada
_, aboolu-;:;•;::.:
1

- 1loo...,_, yo. 'l"" no-, -i-blo ni .....,.-acho

ha de 1,-,-ml. puot cllftdlmonleaerla J'O-i--We por mil ldoM
po, ....
an1e mi mio-. A c¡ulont¡uloft qoae buoque el conoc:1n,-,. oeale ~ t i-
do l)flWlo donde kll! hlbltt; no llly nada qua yo ptdlN IIIIIICi. é.la.
... m1oi--.po, ... aaaiM-dorU11 _ _ ..,.,.,dei..co-
- . olnodeffll-
Radlcalmmle dlfennle m N aniepción ea el pac1,-1ro del nw&)'D
modemo, Sir Pranda 8acnn. El gran -plritta de lrlglal,erT• no ~e~~­
mmot que pr«JYffll' un ~ o concia<>, •pamúe1N!~ objeti-
vo, c:lllrwnlnk imper--1. a la ~ cuatianN fDoe6flmo de la
humanidad -eomo m "Sobre la Muerte•, •5om la ~ d • , en •u•
Eo..y, (159'1 , 1617.. 1625). Bacon proporciona un modelo altonativo a
la clacla-,,da l\lbjeltvldMtde Manlalgne.
El ueo del lfl1nlno •awayo• ee mucJ,o ma. ~ . . , IM culturu
hisp6nicat que en la b,gl,sa y la &anc-. Mtdardo Vdier eeftala que la
palabn rÍD hae ...S. en la critica llltraria aino hada fws del ligio XIX.•~.,• ,
Leopoldo AIM, al comentar Arid (1900). el erwayo de Rod6, eterlbló ,._.
que el libro •no es una nowla ni un libro didloctlco; eo de - ~
lnlmnedloquecon tan biaen hito cultivan loe francmes, y que en &-
9

10 EITl!CEHTAIIRO DI! LOS OÉHEROS l!ITS Cl!NTAUIIO DI! LOS oáfEaoS 11

pella II cael ct-x:inoddo". El problema en 1bnplonwnce de '°""lno- ¡,u.-puednthallanelalm!Mn,nlaobrMde~....yoepottla,e"-lo..~

logla en la HlJpanoamtri<a del llglo m. dado que a l a - de loe mú
granc!M eocrltora de - periodo eran íecundoe tnMyielal: Sum.len-
lo, Bello, Monlalvo, Mart1, Hoetoe, Conz.tltt Prwla. Sua lloo lb&looo oe
apftiklab., Quevedo, ~ . Jown..-, C..CW.0.
SI Milarnoe""" de - 1lgloe de1de lafpocade M ~ y de Ba-
" " " - ~ a otra pan¡., opuala de modoalmilar a ~ en
1- letru erpal\olae del aiglo xx: ~ y C.- y U,-uno. 1!n el
!,-.••••-pr6'°80 de .... Mlflíllldonn ,Id Q11J~, JoH Ortega y C..t _ , .
,,;::.:;r que •et ..,_yo .. 1a dmcia. .,,.,_ la p,,at,a explldla". El -,,1e11,
de acuerdo con Ortegii. euprime laa notas a ple de p6glna y ~ t,,..
gaje acadffl\la> pan, " - eurgir " la ttpa,wim del Intimo calor con
que loe pera■mientoe ~ penoadoo". A posar deeole~ o,.
11" en ""' proploa erH)'OI 1"'918 ffl6I ilendón a la radol\allclad, la -
lructura 1ógka y la ~tura en 1 - pe,-. que I l a ~
:;;;;-.;.- inlimldad. Miguel de Uramuno timde al •ilallnno imdonal, la pet'l>-
doja yel •yo• domlnanteeneu eoc:rltura. Unoexplk11; el ocroaeconne-
ta. Ambot quieren penuadirnoe da 1111 P'DIIOI de vio ta; amboe ocaelo-
nalmente hacts\ uoo del ie....., artletia). ~ . oido, compm,olblemen~. admlndorn dol """ literario de loe filóoo-
..1.~~".':'"' Conleaan.e, penuadir~ ~r~ c....- attr. cierta combnd6n d~
- cuall'o inlioncloneo W.11:■1 habri d1.,,,cocot,a.N ...,1a, obrae de la
mayor1a de loe a.aylli. ~ deHlopanoam&;ca""' el •iglo xx.
Y cllgo ennyiotao lllemrios, porque loe -..yoe no literario& -que
ab.u>dan m peri6dlcoe y -litas- ealiJ, eocluidoa de eato eetudlo: de
~•~ ...,-aqul ffl adelanl,, ee enlenderi pcw ~el.....,., lilmrrio. AlfoNo
. ,.,........~ . en E/ Mfli,,_, diltingua "llter11un en pureaa• y "lllaatura an-
dlar" ~ modo tal que la mayor parte de loo-yoa deberiana>Nlde-
, _ Uldlans", ..1o.., loo elemen1o1 lilerarioe eolin prnladoe on
":" .,,,..yo, cuyo tema y prop<,.ilo no 10ft b6aÍCamftlle Ul1'rarioo. Par
e,m,P!'>, la praoa de Hari llagton • btiolmmont,e ~ ¡,no -
, ,,..,. por6cb,~mente bri111 pcw euaie,üo lllltnlrio. ~ proporciona ladaw
_,.,,. .._,..J>UII ou 1nterpmadcln del - ) ' O cuando llama•- centauro de loo
"'"',L .. . . - . donde hay de lodo y cabe todo, p,oplb hijo capnd,oeodeú,.
c,ultura que no P'-d• ya rnponder al orbe dn:ular y cerrado de loo
1 anitguoa, 1lno a la curva~ al procao e n ~ al •J!~•.••
1 El""'-•aqul. de acuerdo con Raya,,. la u.atura mitad llrb, mi-
• lad dontUl<a. El - y o de Rey.,t "Vl116n de An6huac (1.519)" puede
oer un b u ~ ~ de eale meetlzaje litenrlo de irlonnadón w,.
dadffa e 1111plnorión ~ Empero, loo eJC1- en oue forma mio
como "Huela-", que no not dice c•i nada aco,rc:e del aconledmlento
hiolórla> en túmlnOI analltlcoo; y pn:,A puramenm c:ientffica como la-..i.4 "'·
obn de critica literaria El -'iMr. en la aaal lae ....,,_ y loe pura- ...,
foe .. ~ oecamente nw:neradoo para mantener u n ~ Debe 1ubn-
ya-. t"Oeetoedoeejmlploe,queel lem&nodelennira~
el l8tilo lllerario: enel primer-yo. Raywa d-=rtbe la tliltoria JUti·
camft\te; en el airo, analiza c:lentlfkamen11' la llleratura. En eeo •triba
la difem,da nendal en1n loe -)"00 ■obre lilll'at\lra y lae obno d~
critb titermia. Para mrioar el llicttmf de Ortop ■obre ft -yo. puede
declne que la a-ltlca lilefaria uaa W\ tMtodo dmtlllco, _, "ta prueba
explldia".
M a r i a n o ~ -.ria da a&:'.Uerdo con la tmria d~ ~ de Ja (' ,. , ~.
mezdagen&ra en el-yo. pero" vul matrimanlode la poeell con•- •-..·•
la lllooofll -11\'8 bien que con la "lilerahlra dmtlfica" - en el er..yo,
el cual "tiende un ectnfto puente entte el mundo de lae ~ y el
de loe concep101•. loa doe aw.yietM h i l ~ del 1lglo XX
que con lNl"" txlto han -=rito fila.olla con un aabor limarlo han
foo franceM9: Kerri Berpon. Me miero a }oH Enrique Rodó, en tocio '~'1:'
eu eeplendor modemilta y• )oo6 V ~ ol maeatro de la olntmle .,.._.,
broma;--~
artútlca en fi1oaofla. Joop Lula llor8II M lncomparabile haciendo lo ..•tv
contrvla. lna,rpor•ldo concq,to1 filoe6llcoo en !a fia:ión. en eon de
flloe6(lcoo eirwncomoclawa pan ftllender
IUI a,.,ntoe, Molftlell • Proloo, de Roció, y la E,Utiar, de \IMconceloo,
pueden contane enln la obne de 6loaolla""' 'bellamfta-,,ltM en .
IM lma~ . La unidad de propóeiloe yel tamallode .
ntoe doe tomoe p,u-1an oolkUarel lffinlno "tratado•, mlentraa que
una dara pr,eferend,a por la fr.« ~ mM i¡ue por la eetruchml
rlguroea loe cal&añacomo "mAyoo".
Si la Ulera!Ura pueda cllvldlneen t n . ~ b!Wtoa -1""'9", pee-- r.,.,.
ola y drama - , entoncee ft eNaYO • un Nbgfreo ele la pn:lA a ...,i~-
bar, prooa deno,lb:~ quecon ÍftaM!nciaae ecen,a a• tknlcae ~ ~....,
tkii, l o o ~ de la lla,j6n y."""......-.ª""' CÍt'd08 dra-
mAIEOI. Xavier Vlllaurrutia IIOltienr la idea de que o! ...ayo no• un
~ e n 11 mlarnocuondo Nftalaque no tiene rog)a-nnM 1""1-lae
que puedan guiar la mano del nwayilta, e n ~ ron la -iflca.
dón a 1M obrM de teatro._Eeenclalmffll• poeta, Wlaumalia omllecu•
 . ---oo=- T
riolammte la dimennón ~tica polttdal en el eaoayocuando ~
que eoti "@q\lldistani., del periodismo y del 1;.tem,, fibóñco•. Loe
opueotoe polares, aqul. ntAn ttladonad01 con olTU cuaJldada de la
acritun. Pttiodilmo: concttto, muy contemportneo en ,... temao,
.
\
pr,orupado por problffllal urpnll!I o tópia» da intem hwnano ~
nen!, flexsole en estructur., pero ron limitadonet de npado. Plloeo-
11a: abltracti,. abtlnlsa, preocupada por lal coi-.tant inmortalee de la
exiotenda h ..
"dad bruma~ rlgurooa ~ - . . , _ lendifflle hada 111\11 vnbo-
11 a . por un vaca prop,o como lal ciendal exa.,tas
Y lal denclu ~ - La mayor P8m de k» -YOI hilpar,oan,eríQ-
1101
•
~-
bl.., como :m
son""' periodlstkol que filooóflC'OI, pero hay excepciaNa nota-
tiempo circular"', de Jorge Luia Borge1, Y "La rebelión
del ho~btt , de ErneitoSilbato, cada uno de lol cuales m11e1tra rigor
' a<ad6nuco y sobriedad de estilo. ·
OeopuÑ de aplicar la lupa a lal cualidad.. gen&i<u del ensayo, te-
nemoe que llegar loda_vla a W\11 defWción precila. l!nrique Anderaon
lmbert omce una definición aproxlmada: "el en1ayo,.. una «x>mpoli-
dón ':" P.,,.._ dllewtiva pero artlltica por 1u riqueza de ankdota y
deoa,pcianee, lo butante bttve para que podamoo leerla de ,una oola
llffltada. con un ilimitado registro d e • - inlerpre!adOI en tod01 101
t0n01 Y con ffllera llherhld desde un punlO de villa muy penonal". El
punto mM diaculible en Nla definición eo la exlenlión del ennyo.
leer de una oola oentada la Ruiog,,,Jü, ,k 11,,..,,,., de i!J,equlel Ma,:li-
nez &trada, re1Ulta extremadamenle íatlgOlo. En el otro extmno, E,.
"' · NIio S6bato es afecto ■ eocriblr pe,wamienlol bftwa de unce pocoa
púrafOI, algunu Yl!C8 de lólo U IIM poca. oraciones, da manen,_que,
por la brevedad, ae aproxima al aforiamo.
El h«ho que importa .. que muchos e,uaym hispanoamericanos
rnodt!!m01 lnd~ld01 en IJbrOI tienen entre cinco y quince P'glnu de
exlenlión porque fueron e9Crilol originalmente_pan peri6dico,, 0 ,..
viotu, de modo que llenaron una o dos columN11. La bttvedad e1 una
'¡ virtud en el periodiomo, que prefiere el eoqllffllll a la exp011dón com-
pleta. Pueden anotarse " " - influenclu del periodilmo en el eaoayo
hispanoamericano del siglo xx. El tftulo del ensayo periodlstico debe
~. ser leductor, vendible (la liter■lllnl 1e comerdaliZ>I, ae proelituye), La
mirada del lector .. caplada por ·y la carne que tienta con 1111 ~
racimoo" (Luis Alberto 5'nchez) o "El prog,no 1uicida" (Arturo Ualar
Pietrl). Una vez que el lector ha 1ido tentado, 111 curl01idad debe man-
I◄ ESTBCl!NfAUIIO De LOS CJl!Naos
- - • pudlttamoo vomo., hablamaol._ Cuando uno_,,_.
ncriblr."' 11, _ _ adaleoc:enc:la. •I ~ .. ha0ene eorudl■rda 10Cb
a c:i6n ae emplean ■ veoes en la no-flcdón del en1ayo. PU,,den alladine
Y por media de lo pluma. r.,., llop fpoca a\ que N pmlfre nfonr la quo
•• lll!nle y pie,N. alglln eoplrltu OICO¡lda., ~dela <harla inlllu,.
Ubre dot vanlclacla u...._ y de "roo¡,.too " " -"· ,
Rodó toca aqw 11na de lal caractenolicM predominante, del ennyo:
IU ~no COnwrudonaJ. IU 811fl0 por la IÑafota peraonal, la nea!li•
dad de .,..,.._. el propio c:aricter <18de dentro. Haota aquf 1e ha tra-
tado el imput.o por " ' " " - · . ,obre la importancia de la mano human■ en la literalllra, la hlttorla, la.
,0 La acUtud penuaoiva en el eaoayo literario se eneuentra en la expo.
., •• •ldón de ldeu, oplnionl!e y '-'las, con la tnlffld6n de ganar adeptoo.
Diacuno., cartas abiert.. y artlcwOI perlodlltkxll polbnJa» revelan a
menudo el papt!I doctrinario y critico del erwayilta. l!l anarquista ~
, , . ~ Manuel Conz61ez Prada habla a un 11ndica1o de panaderos en
Lima y predb la alianza radlcal del trabajador y el 1nlelectuaI con un
lenguaje vivido qu~ 1111 humíld.,. oyen1.,. pueden en6ender. Vuconce-
loo ha<e un llamado moralista a la juventud.peruana para la coopera.
ción internacional y la reforma oodal. Alfo,uo Roya, el hu.manilq,
no1 ruega estudiar I• d v l l ~ de 1■ Greda y la Roma dllslcas.
Siempre alenlo a la nordomnnÍII, Rodó incita a la juventud de A~rica
~ a hacer inventarlo de tu propia herencia cultural y de"" pro.
p101 valores, m el et.leo Arid. Cada uno de e1lol eocril0tt1 tiene 011
causa favorita, y ..pera Influir en tu público con un lermón. f ! l - .
dote secular subo a 111 p61pito al etc:nllir talet enoayo1.
l!I propósito ntflico a un denomlnador común de lodao 101 en.a-
yos literariae, opu..10 a 101 muchoe artlNlOI no litervi01 que pueblan
el mundo perlodlltiro. La belleza y el d•leite 10n 101 objetm,o; la ha-
bilidad artlotica y el artifldo son mod01 del entretenimiento I"'"' loo
cultivadoe. Con la vista pu..ta en - linalldad.., el """'}'ltta ha to-
mado preotadu lknna de 101 otroe gé,,ffl,e llterarioe. Por ejomplo, el
eaoayo puede a - •proxim.,.., formalmente al cuento. Jorge Luia
Bors•. maglltral ewcritor de cuentos, compone 1u en1ayo •ta muralla
y loe libro1" contánd.,._ 111\11 hlatoria verdadera del pM&do chino;
luego, conjetura oobre lal diferentes intupretacionel p01fbl.. de 111
•lgnilicado. Cuando conduye que la forma .. mAa 1igniflcatlva que el
contenido conjetural, señala uno de 101 motlvao búkxll del e9Critor 11·
terario: el ..miro. &ta concluoión • su en1Ayo e1 el equivalente d el
~ en un cuenlO. AII, IM tknica, namilivu comu,- a la flc.
--00~- .
~ 1\1 d ..eo de llegar al dlmax debe oer ..timutado por el artifi.
do del 01Ctitor. &, por 111pue11o, la problem.itica de cualquier obn de
arte de caricter temporal, - la mÚlica o el cine.
Tópi<o de ~poca. problemu contem~, cuntl~ dooElmtftft ¡..
•
h ~ ~ llenan Ju t d ~ de peri6ditol y rrvBtas. en1a- ¡,·
}'lita del siglo x_x tiende.ª.deacn~ y enundar pr_oblell\M, no a ":""¡. ,.
verl01. La OC>lución •• d.,. a k» c,,enlt!icol, 10110C1ólog01, econom»tu
y pollticOI. En el •is]o xx, muchoo en1ayi,tas han tratado de aer cronls-
tu de 1111 IOciedad.. mM que ttdent0tt1. Al contrario, 101 en1aylst10
hiapanoamerianol en el ,iglo XIX.., Hntlan mis tqlll0I de 11 millm01
al proponer programu de reforma. Sarmiento, llchevema, Alberdi,
Bello t-wetol Lastarrta, Montalvo, Martl y otros 111vteron que cumplir
papeÍ.,. dobÍes como lidera polltico1 y corno eNAyistas. Conúlez
l'rada (1844-1918) y Vuconcel01 (1882-1959) llenaron el perfil de tw01
bullCIMlora decimon6nicol de la utopla rMjor que la mayorla de 111t
contemporAneoe en el siglo xx. No obltantr, loe ......y;.1a1 del siglo JCX
act1lan tam!Mn como ..ladiotu, polltú:01, conferendstu, educadora,
aca<Umicol, editores, directorN de publicaclonel y periodilllal. Quie-
ren producir un Impacto en la 10e~ad, pero eluden hat'tt 101 diaellol
de Ja ulopla en la era de k» esp«ialiatu y Jo. tecnócrata.
He 1ugerido cuatro impu1- básicos en el en1ayo: cont......., per•t
suadir, informar, crear ane. Lo máll dtbil en lal letrao hiapancam,,rica•
na1 del olglo JCX e■ la urgencia por con(...,... pObllcamenl.,, Hay Ira ._
~ notabltw. Rub6n Darlo eocribló1u \/ida; Pablo _N ""'~ ....:;
Memoria: Omjiffo q,u, ht vivido; y Jol6 VakOnCeloe, "" UllltS criollo, el f
primero y el mejor de ~tro volúmene1 en lol cual.. ':"tjn enlrelua-
d01 la ■uiotriogra/ia lntuna del autor y loo uuntoe p6blia>1 de Mblco.
La nostalgia impregna esa literatura oonl..lcmal. El exiliado gu■temaJ.
t,eco Luis Cardoza y An1gón confleu ,u no1talgia en "Dije lo que he
vivido" como concl111ión a ou leltimonlo de una ~ en la h~toria
de 111 patria. Su retrato penoNII y hwnano de una nación e1 evld~~
""'"°·.
por el titulo: Gw,IDllll/a -La 11,..,., d, 111 Si lao confesionel p•Wi-
cm de valor literario en las letru hllpanoamencan.u son poc~, lao ~
vadM son mú abundantn en íorma de c:anu.~no de lol artiatu "P•
tolarel ma. amblcloeOI y elegante, fue J• l!mque Rodó. En una carta
■ Miguel de Unamuno, ae lamentaba:
¡Uotlma ~ .. forma acrila no .. r...ie a .. e<panoidl'I llimltada . . .
<Drlvenadón. do 11 ~ til,,t./llcf ¡Cu/lnlO ydeaántuCONl<:On-
ES11!Cl!HTAr.0lll!LOS08EltOS IS
fragmentoo de di6logo entn, per90n&jea para mantener inlereMdo al
lector. A!fONO Reya in)"'da una buena porción de di61ogo en"" en• Q.,
Ayol para proyectar la inmNIJalft del temperamento humano, en ...
pedal en 1A vt.,,._ dt Esp,,ia. SI el hlllna!Últa mexicano puede nc:rl•
bir enMYOI como cuentoe, puede ~ CN!lll' lo contrario: c:uent01
con elementoo en1aylltlcol. Unbuen ejemplo podria oer •ta mano del
comandante Arando". Reya inicia ...ta hiotoria con un er,oayo brrve
.,..,,,, la teologla. la blologla y la etnograf1a. detllwnbrando al lodx>r
con 111 erudición. De ahl paea a la historia de una mano deomembrada
y autónoma que N niega a.,...., t111 actividades: ea.- una fontana con
varios antecedenlel en la lltontura de la Qviliz■ci6n Ocxidental. R..
)'l!I termina dramlotlcamenl,t, en un resplandor del lenguaje ~ .
eco lejano del inicio en,aylltico del cuento. Del ....yo al cuento o del
cuenlo al en1ayo, el uwúD.,. el mllnno: Reyes m11e1tra la fKil conver-
tibilidad de e11a1 forma1 llterarla. Podrla hablane de mocnenlol de~:._
flcdón en Jo. en1ay01 (I• par6bolu de J• P.nrique Rodó, lol fr■g•
mentol de diilogo empleadol por muchoo erwayíotas) MI corno de
momentoo enoaytstioos en la flcdón (Ju digr81ora de Tol1toi tobre la
historia en Gllfflll y P,u, o el dilcur10 lll0161ico de Plo Baraja en ~ mi•
tad de la novela, El '""" de l• citncin, o la fi!Olofla de la hlatori■ hilpa-
nomexlcana en r.,... /1/oolN de Carie» Fuent.., o paeaje,, de Los , - -
pml/Aos, novela de Alejo Carpenlier, tomadao de 111t vlejoo e,way01,
publicad01 en El NM:lmw de Caracas).
Quid, el m111, expmmontal al incorporar trllcol narraliv01 en 1111
e,wayoe aea Jullo Cortúar, fiel a ,u vocación de escribir narrativa. La
lde. d e Reyes oottt el Cffl,.,_ IÚ /01 gme,o, puede muy bien apllcane
al a,11,rgt de génerol lilerarloo e i1111tradonee en Último""'"" y 1A wtl•
111 ,,¡día.,. odtfflla mundo>, de Cortuar. El lngeniooo arll'""tino trata de
mantener un dWogo irónico entre el narrador y el lector. l!n III enayo
"Turiamo aconaejable", la oorpr... final (ingrediente crudal en. el
cuento) 1e produce por una revelación inelpen,da sobre la penpec:hva
narrativa Luil Alberto 5'nchn construye el tlpico IUlpffllO de un
cuenlO d~tectlvNCO en111 en1ayo • Aniltomlade uncrimen", exdtando .
nU8tra cwiooldad, desde el principio, OC1!rCII d e la e&lltB de un ....¡.
nato que recibirt una merdón paNjera un poco anlel del~ • ~~-
bargo el d...,,Jace pua • un1egundo plano frenle al mer»aie didkti-
co deÍ ennyiata: a .,.be,, que la pre,wa ■b...._ en tal.,. hwtoriao de
 16 ES'TE Cl!NTAURO DI! L0S OÉNEROS
detecti-, de un aerwacionalirmo ~ - lróalc:amen-. Luir AJ-
1-to ~ ha sido capu de sacar wntaja de nuestra curioeldad
m o ~ pan introducir cima indlgnadón moral m la Jeciw.. ,in_
ciar nUfStra, e x ~ - con el remate de la trama pdidacL En s--
ral, el eocritor 1e rn1nn.. • la dif,culta,d de llegar a un dlmax en el en-
r ayo tan ellcumente corno en la ficción. l!I equivalente m,ayt,llro del
dlmax terfA""" bien. con frecufflda, un sumario, una declaraó6n de
la tetla o una meU!ora particularmente podero11L
.,. ,. , ,. I!I mtayo p u e d e ~ • la poetla tanto como a la flcdón m pro-
1
~ • · Un cuo e1plfndldo e1 El mono ,,.,,.,,lit:o, de Octavlo Paz. NI novel.a
ni tratado fUotóñco, lll una narración poftica, una aónica lffllOriill,
un cuaderno de •pu"'" de q,ifuda,, una Dlt!diladón ,obre, el leigua-
je, el t~po, _el eepedo, el m>tismo, el sujeto y el objeto, pe,t'epdot,.,.,
~ r w , ~ - imag~-todoeUo teflido por el.,.,._..
auento indottAmco. Hay un llfflhimte (la lndi, 111 paisaje, fil arte y ,u
uqultectura, su religión), hay penonajlll (el "yo• y fil cornpai\l!nl fe,.
menina, l!aplendor) a quierw 0a1rrtt1 coou, pero ¿tiene t:nuna7 c:.--
ce vedaderamtt1111 _d ~ ella. Su equivalente et la dirwnica del percibir,
dd penoar, del etcr1bir. Un dllpo,itivo narrativo para indtar al lector,
para crHr tenlló,\ e, la beuiqueda del "flndel camino", pero• ron:luye
!8
que p<>l!lfa n o ~ el fin del eamino. La roncepcl(ln y la e1tnactura
de El mono grRmlflia, '°" eeencwmente ~licaa, • ~ puedm b-
cerae analogiM con elementos de la prosa narrativa.
Un autor pUNe ir nw a!U del de.linde de la prosa ~tic-a y cruzar
loo llmltea del poema en prosa. Con eita finalidad, Gonzt1e:t Prada ex-
perimentó a,n la creeri6ri de p0lllla liberada de la forma del VffllO pero
aCan rica en ritmo e lmigcne,. Ea cueetión de fflfalla y de loo ~ t o ,
MrTativos del eicritor. Neruda no puede evitar una retahJla de freec88
mettforas y aliteracioan en 011 prota.
::';, Mucho meno, comOn que laa dimerwionN poftícaa • el ~ o
~ elemento, INtnlee en el l!nA)'O. AlfoNo R,ye,,, en "Notao sobre la
11\tellgmcla americana", utiliza el teatro c!Asico ccmo una me!Mora
para la rep,aentación dr-amitla de la civilización latinoamericana,
con puesta en....,.,_ roro y un personaje principal. A medio camino
. entre la obra de teatro y el ensayo eeti el dWogo dicUctico, con , 11,
retpet•blea origenel en Platón. La e,cposidón de dacirinu en lae letru
hitpinoamericanM, por medjo de la utilización de un dWogo 1ottenl-
do entre vario, pe,aonajet, fin embargo, tuvo un renacimiento con Jo,
panlleto, moralista, de Pernindez de LlzardL Eata íonn11, muy popu-
1• llSre CElfTAURO DE LOS aéJcatos
chingada", 11e del taca grandemente en la b6squeda por Octavio Paz de
una Identidad mexicana. La múcara, una de la, mettforu favoritas
de Par. tiene ct11l siempre otra mMCara debajo, cuando n unncada:
otra meW'ora. otra mMCan. otro mito. No olvldnno, que lo, mitoe
tienden • _, una mnda de hiatorla e lm11ginad6n. Mar!Ategw y Pu
han echado luz 10bre problanM del siglo xx por medio de ou cr-ee-
d ó n / ~ de un pasado mltico/hlol6rico.
En fil erwayo neobanoco U- In loorrilw, Sebao!Un Sal.azar Bondy
ha tratado de hac1!r, con la d udad capital del Peno, Uena. de tndld6n
colonl.al •ptdlola. lo que Pu hizo con Mbioo en fil ror;unio en El 111-
btrinto de i.
gul. "°"""'
'°""""·Salazar Bondy 111\ade tam""n la le9it de Mmáte-
dd papel opreoivo de lacla,e dlrlgmte colorúal; a-a, a,f un
tono def - remlniooenle de las dlatrlbM de Gonúlez Prada oobre
la decadencia de #m Urna antiguo•.
En Arp,ntina, Euqu.lel Martfnez l!strada combinó tamb!M el enfo-
que paico-cultural, t'el'ltral en El lllbmnto • l a ~ con ldeM antica-
pitaliotat soln la exploladón eainómlca de un gnapo por otro, geo-
grificamente definido como lae d udadee malwiallatu y europeiradaa
en contra del campo empobrecido y nativo. RMllog..¡r. M i.,,.,,,,,. y ÚI
~ 1k Goliillh enfocan una IOciedad arpnt1na del olglo xx enraizada
en su historia: el primer eN&)'O dia«ciona la palque del campo; el '""
gundo, Buenoo Alrlll. Martfnu &trae!-. debemoe ,upane,10," David
apuntando la honda y lal plodru de ou severa critica a ste Golialti.
- pretunlo glganlll! patológico llamado ArgantinL mpeelmlomo de
Martfnu !!airad. huele a autopsia """ que a un dlagn6stko ¡mecrip-
livo, reílejo de la Dq,re,ión Económica de loo treinta durante la cual
-.ibi6 lot do, l!nAyot. A fin de cuentas, Ñ actitud tllbjÑ!Va y ~ -
ca anonada 1ua met4foraa ~ . tlplcamente clenlUlcao. &tamo,, en
contado con la ideologfa de un hombre brillante y ape,adumbrado,
mú que Oll\ la ciencia 90dal, en nto, do, enuyo, de Ezft¡uie1 Marti-
na llatrada.
l!n conlrMte con el i-imiuno de Martfnez &trae!-. N!Nlta, como
o..~ una danza rftmn el lnpnio,o humor de Femando Ortiz m ,11 inter-
..., pret11el6n de la cul.tun alro-c,ubana. Su iangu.¡.- lleno de n,truka-
"°' y alua""- culturala en ú,n,,.,,.,,,,.,cu/Jwino ltf ,-., y a azllc,,,; al
mi1mo ~ •ta obra no, informa oobre realldads antropológka.
eodológica,, ei:on6mlca, y ,obre la agricultura. El tabllCo. y el azácar
detumlnan el ntUo de vida de muchae cubenot. Las zafra, a su Vt'Z
ES'1l! CllNTAIJRO De LOS CEelOS 17
lar durante la Duatnd6c,. no praenció ninguna revitaliz.:ión impor-
tante en el 1lglo xx. H•ta cierto punto, el taao brechliano, con ,...
perentorioe mensaje,, polltlcot, la ha remplazado. Los m,ayoe )' la,
obras tatralea comparten ahonl el eecenario pano 1a reforma. la rno-
ludón o la oimple reacción IIOcial en H l o ~
RADIOclLUIAS DiL!IICID ICX
Corlesa,., penuadlr, ~ art@, informar: de eelot cuatro impul1ot
búia» del mNyo hitpanosmmcllno del olglo XX. el 61timo -el infor-
m11tlvo- ha producido 11N1 Hrie de radlogrúlao acen:a de varias cul-
tura, naclonalee. Loe diagrúticoa de lae idenlidadet culturales y loe
problemas contem~ han oldo caol tan nllffll!rOeOf como oua
..U,tu. La me!Mon IMdb de loo rayo, X Implica una objetividad
dentlflca. pero a menudo la botu pretación p-e,upone nw bien valo-
' " oubjetM,o. Conlideremoe a vario, ...ayiotat que inlmtan una in-
lel pretac:ióo, toa! de ,ua nadonel. Joaé Carlol Mariitegui. en IUI Sitie""'
fflM)W M l111t>¡ntlllódh llt la rlllliMII ~ - pugna por la objetividad••
a bale de dtat stadltticat y un tnfulo marxista ,obtt el íactor econó-
mico de la hiotoria. s.. oilica literw m1e¡a 1o, Olnlenidot aodalee y
polllicOI: Jo, auton,s y 1111 actitudea ton anallladot en ~ de da·
• aocial y de ideolopa. La • • principal de Siete ,-i,w • la explota-
ción econ6mlca del indio peruano• tnv• de un rlgiclo oirtema de da-
""· E.ali úirmada m6o 1uclntamenk en otro mAyo de Mariiteguk "El
h«ho econ6mico ffl la historia peruana".
Mariilegui y 0:tavlo Pu oon cMI diamebalmente opue,toa en ,ua
~ a flll rap«tivu rulturu. Bn El l,ikr/n/o 1k "'· ~-t:
Paz anallu lo IMldcano por la vla de la historia rultural y ,,.,mltfp,& • •
mIMlodo • intuitivo y oin~lico; el lffl8U•ie, ~1100. Mientras que
Pu ahonda en laa actltudet poi~ulturalee, Marl6tegul no. Marlá-
teguí pone el acento en la economla; Paz no. Pero arnboo, Paz y Ma-
riitegul. recunen a loo mltoo. Bl mito de un pasado utóplro del co-
munlamo inca en Siek ~ . llene una función ideológica frente al
futuro, al■ manera de George Sottl, a quiffl Mari6tegul admiraba. Laa
miNrlu culturaln del lndlo peruano 10n ~ con la oocledad
Inca. presuntamente ideal. deetruida por la Conquilta l!opallola. todo
lo cual concluye con un dneo de volver al puado romunilta. En El
lnbmnlo 1k 1• roWa,I. el trauma de la ConqllÍlta y de - "1ujot de la
l!fl1! Cl!NTAIJllO DE LOS ol!NBllos 19
uwnenc:ualidad• humanM, en el ennyo de Femando Ortlz, para an-
tietenemot e lNtrulmoa.
J• de Onlo ha llamado al .,,...yo hispanoamericano "una Uteratu-
"' funcional": eat6 cleflnlda por el contenido 11\M que por la f ~ y
-conlenidosupueatamMte •tAcomprometldocon la ba. p.ttad.6n
de nurnerooaa y fluctuantea realidadea de d l l p ~ Ciermú\
Arctnieglll eetarla de acuerdo con etta definición .....,,ttca,para ti. •eti...,.
problema de n11e1tra ~ n oingularúlmo. y ohett un campo de E,.,
eetucüo que literalmenle oólo cabe en el ennyo#. Pero Ardnlepo va
m6o all6: • Ahl huta la• novelu 1e vuelven enaayoa. Y 1a hlatona. Y el
teatro.• l)ld,o de otra manera, podrlamoa llamar erwayoa a la, noft-
lu, cuento, y obr111 de teatro que lnterptttan #pro1,temu• y #reall-
dadea" de la aocledad. ¿Ooña 8'rlolN y El ~ c o m o ennyoa?
La defu\lclón del m,ayo por au tema e, Mdu<ton pm> extravapnla.
Aspecto, de la-jm,u, ensayo pueden- ldentlfioidot mM fKilmente
en alguna novelu de Alejo Carpenúer que m la, de R.imulo Gallt!-
goo; mientras que la obra de teatro El , _ ,,_,,/no,de Rotar1o C..
tellanoo, quin - MM emayitlica. en tu tratamllnlo dlocunivo y dl-
d6ctko, que lae obru de Rodollo UoiglL
J~ de Onle y Germ6n Arcinll!gu colnddlr1an ffl q ue Bartoloml! de
Las Cano y Simón Bollvar fueron .....yiotu. Y Alejo Carpenllff ella-
ria de acuerdo C0C1 la irwplradón de MontaJgne en loe primerol lnfor•
mili de loo cronlota colonialn en Am&iCII; IIOlo que Carpentler, que ,e
CONidera a 11 mltmo""" nowllota que enaayista, ve en la Hlo/orla...,..
dlldtm de I• ainqrásta de 1' N11- E,p,m11, de Bemal Olaz del CaotUlo, •ta
primera novela de cai.Deria real de tod01 loo tiempo,•. Pw otra parte,
GermAnArdniegaa -mM-ylataquenove&ta- sugiere queenlu
crónic• coloniala hay que hallar el orfaen del erwayo hiapanoa,Mri-
cano rnodamo. en varioa de t11a proplotenaayo,, AJciniegM ,_...ia ,u
enidición hlotórlca citando exterwamenlC! a lol cronlo!M colonlalee. Su
Antiriol. liant finn, o 111 Biop,/ía MI Otrik (hlotoria de una reglón he-
cha Intima, llllO lll, ......yúliai) podt1an igualmenle calalopne "°'110
cr6nicao o .....yo,. l!n , 111 .,,_yo, perlodillialt, m6o bNwl, An:inle-
gas 11e convierte en cronlota de 111 propia ~ tett:iso del ~ oo-
dal m et tlglo :,ex. Por ejemplo, m -e automOVíl-, obNrva li bnpado
denta mloquina en loo h.6bltot aoclalea y lat tomw d e ~
to: un avance tlpico de esta eL
La crónica conternpoñnea da la bifflvenlda a un nuevo estilo de
anililio 10f11ticado e lngeniota diversión en loo erway,,, de Cario,
 20 l!ITII C!!lffAURO De LOS OéNEROI
MoNlvü. o.e.cribe y demuda ante la mirada ~bllca. a una g,,nera-
dón eepedal de la juwntud malcana •enajenada# (1966-19'12) en •ta
natunlaa de la Onda•. La denaldad de 101 nombres (gente, candonee,
cultoa) alrller6 a aquellol 1101t61gi<x» de una fpoca que vivieron. mlen·
tru que loe no lnldadoe en la Onda -incluidos loa lectoree del elglo
xxu- • 1eu1t.,11. (1) o bien·i,oynm en un ambiente bohemio tan extra-
110 como el de Mata Hui, o bien (2) hlltorladoree IOCWei exhumando
polvorienlm y valbce documentos de una ~ • primitiva. En D(as
• p.,-, Mon1tv61t c:ultiva un ntllo m'8 viaual de organlzadón y
lipog,afta que lo vlneula con la generación de Marshall Mcluhan (su
c:ullo: El__, o d - ~ ).
A - pmlulo, de Monllrila, prnenta a un grupo de nueVOI ricoe
mexlcanoa en un feettval cinemalogrAfico de palabra cuyo eetilo artie-
tlco funde la crónb con el retrato individual. Gabrlela Mistral pinta
un retrato igualmente importante de un tema anónimo y col«tivo en
•snueta de la indJa mex1c:-•. El retrato literario ee rnM impreeiorústa
y mAa IW'Nl'io que la blograffa; el biógrafo entttteje culdadoeamente
la hiltorla documental y el ensayo lllttarlo, en tanto que el retraliata ,e
contenta con la evooadón agradable. Cuando la ocasión 1!11 i" l'llffllO-
ri,an, enl0ncel tenemm el tipo 1!11pecial de ~ t o -ylltlco conoci-
do romo~ como el •Jod Mutf• de Rubtn Oarlo, obr-a m.atra en
IU tipo.
De la definición ttmAtica de loe ensayoe que abordan problema y
lftlidads ~ . a 1- crónlcM, N!lrato1 y eleglu - tod01
loe cu... .. definen m6a bien por IU contenido que por IU fonna-
hmnoe trazado un drculo completo hMta regresa, a la. pregunta m6a
Importante: ¿c:uAlee IOft loe temM contempor4neos a dlacemir en n~-
lrM nlllioa,-,.ro, panuer menos c:UnÍCOtl, ¿cu6les 1on 101 princípal1!11
'~ +I RfflAI com- a loe eneaym hiepanoamericanm dal 1i;glo XlC?
""~• Algunos enaaylltu noe advierten eobre la devutadó:n del ambiente
a mano, de la humanidad -preocupación que H ha vuelto un lugar
com6n en el •lglo lOt. Al observar a vuelo de p6jaro la geografl.s de 1u
Colombia natal, Eduardo Caballero Calderón ve c:ómo 1a tierra ha 1ido
apiada poi' loa cultiVOI y planhldones no rotatorioe, la• tknlcal de
tumba y quema, la tala de boaqun ,in una adecuada rcforeeladón. ¿La
tecnologla puede ayudar a reeolver eetoa problemaa7 ~ acuerdo con
Enrique Andenon lmbert, la tecnologla engendra nuev01 probl~
mu: el ~ o de armamentoe, w explo■iona demogrAfi-
cae, la contamlnadón del alN! y el agua, y un dsequilibrio 8Uicida en-
ESTl!Cl!NTAIJRO DE LOS 08IEROS 21
trt! la vida biológica y el medio amblen• ff■lco -mM agudanwnte en
laa ciudade:a. Arturo Ullar Pietri afirma que. e n ~ redenla, el pro-
grao ha ndo auicidarnente dstructlvo, lln naolwr la miNria y la■ pri-
Vidones. Y sin embargo atas milmu fuenu de la ffl10iud0n lnd111-
trial por1m l• 1emillu del progteso y Lt ~ 111 tan eólo fueran
cultivadu.
¿Hay o ·n o progTe•o7 ¿Cu61 ea au madón con la tecrdogfa? ¿La
m6quinas hansldo montad• para Lt plenitud del homln mM que para
su IOjuz.Samlenlo? Eatm grande■ terna, i - a u apaddónenel enea-
yo lúapanoamericllno del 1lglo xxcon el J\rid (1900), del Roció. Loe B■·e..J
tadoa Unidos, admite Rodó, le han dado •al mundo en la caldera de ';_,~
vapor y m el dinamo elktrico, billonet de e■clavoe invilibiee que cen- ·
tuplican, par• Joervir al Aladino humano, el poder de-la 1'mpara mara-
vílloaa •. La ciencia, entonce., puede ■ervlr a la humanidad, pero Rodó
bunblén observa el grave peligro de volverJoC 1iervo9 del materialismo
utilitario como fin principal en la vidL Para el ll\M8tro un1guayo, cul-
tura y étlca, e■piritualldad y ntétlca, l()ft ~ para la ,...u...dón
del hombre. José Enrique Rodó se .apega muy pRlN0 a un fuhlrilmo
optimista: .ambaa tendenciu, el materialiemo productivo (ldenttftcado
con la ideologf.a p01itivi1ta) y la expreelón cultural. (Nlacionada con
una herencia greco-latlno-crl1tiana de Am&tca l..ltiu), te abrazan
en una 1lnh!lia idetll m el futuro arielilta.
Poco. eruiaylataa hispilnOllmerÍCanOI dPlde 1900, dade la dedlra·
dónde la fe positivista en el prog.-. .,vdutivo, han mo■trado 1iqule-
ra el cautelo10 optimismo de Rodó. En Mjxjco, loa miembros del Ale-
neo de la Juventud, entu,iumado■ por la apotec»la arlel11ta del
esplritu, la cultura y la ética crietiana del compartir; rechazaron a 101
viejos dlolel de la denda. el orden y el prog¡tBO --deidada mandJla.
dae por eu relación con la dlctadura de Poc fil lo Dtu y un poaldv1alo
que oUan a ,tatw quo en una época en que Mfxlco .taba a punto de
eet:allar en una revolución. Un atenellta, J01t Vuconatlo■, habria
de m01traree ambivalente N!lp«to deÍ prograo durante la d«ada de
1920. lnflu.ldo por el peneamiento indoetánico, poee(do por una blH-
queda eapíritual, llegó a exclamar que• el progreeo terreetre PI una ilu-
sión pua¡en·. llunblén utilizó la prome■a del prosr1!90 para inlplrar
a aua ■eguidoree m el N!nacimlento educativo y cultural de Mblco
durante el inicio de 101 al\01 wlntr. el pro¡¡rao, concntamente, requ.-
rfa de la educación pr6ctka y tknka y de la refonna agram, eodoeco-
22 IIST1!Cl!NTAURO C11 I.OSoéuos
nómica. Vaioca, ab, 110 obotanle, no equipara lbnplemmte el progn,-
'°con la lndustrlallzacl6n. De hecho, condena la glorlficaci6n de la
m6qulna e n ~ altamenle lnduatriallzadM como la Unión So-
YMtica y loe S.tadc» Unldoe.
BI .,..yi.ta peruano Jod c.arloe MarWegui habña estado de acuer-
do <.'Qf\ el mnHjt de Jott VaKoncelot • /1 loa ethldimta de 'ItujllJo·
en que la alianza del dictador oon 101 granda lalilundlalM N un ot.-
16c:ulo clave pera el progreeo ,m América Latina. Mlanin. Maril,tegul
nalta la homlnela Inca y condena el pülldo colonial espal\OL VMron-
c:eb ..tt<qUDoeo de 1u cultura hilpano-nwtm y del papel d vlllzador
de 101 mlsioMr<» católkoe npallolae de la Colonia. No obotante, como
111 contempo"1,eo mexicano, Marl.ititgul cree que hay una neceeidad
Nplrltual en el hombtt que no pued• - limada eó1o por la clenda.
&iu IOI\ lae palabru dol heterodoxo muxilta peruano:
Ni la razdn ni la Ciencia pueden atlofacff toda la necnldad de lnlinllo
'IIM hay.., el hoalbft.•• No N - ~ aln una CONllpddn me-
taflllc:a de la YXla. El miflD IIIIMft III hombre .., la hileoria.• La hlltorla la
hace, loo hmDbne poNldoo • lkamlNdoe por uno creencia aupertor, por
..... eeperm,za ~ - Le» mollvol ttll¡IOloo 1e han dnpla%ado
d.i delo. a lll derra. No eon di-,""" humanoo, ""' ■ociala.
Vaac:ancelae y Mariitegui hacen la obeerv11eión obvia de que, en loe
tlempoe modemoa, la mllqulna ha reemplazado al caballo. ¿Pero Nto
ha •lgnlficado progrNO7 Para el caballo si, de acuerdo con Vuro~
101: el caballo ya no N el trabajador Nclavo que era, ~ lo en la a,.
rreru. Aun cuando el reemplazo del a,ballo por la miquina, MatWe-
gul nota muy poco progreeo frente a la explotllción de una casll, el
conqulltado Indio andlno. Si el conqulttador apallol y el latihlndilta
colonial UIUU\ el caballo como un lnltrumento de don:ljnad611. hoy el
Indio peruano el lodavfa IU lirviente. Hablando 1lmb6liaunente, ha
lido - NUbicado como el conducu en el automóvil del pa-
trón. La Invención del autom6vil y el tractor no le ha tnldo proeperl-
dad a loa And11. Seg6n Mari61egul, ee necaarlo el cambio radical en
la eelnlctura polltlca, aodal y ecan6mlca. Ardniegao, fiel a III vocación
de cronista IOdal mú que de critico ndlcal, "'-"'• cómo el wtomó-
vll ha tranefonnado 1M C<lllwnbra eodalee y el Umnpo de recreación,
dtndole una nueva libertad al conductor. (Nota: .. tu. oboervacionn
2A llSTECENTAURODELOSCJáEtos
Ocddente, - ndaNlizadón para el JI.atado lndmtrial. De modo si-
milar, el lci..l da modemldad Nti tan grabado aun en la J>C-Ú ocd-
dmtaL aegQn Paz, que la ruptura can la tradición pesada 1e ha oonver•
tldo en una norma e111kl<a: en una tradldón poética. El poeta " Slrifo
que lleva cada vez !NI arriba loa Umlla de Innovación en nombre de
la rnodmúdad, eólo para deec:ubrlne • 11 mllmo Imitando tradiciones
olvidadu. ¿Puede hablarte de ¡,rogr-, en el arte? Bnw9to 5'beto ....
tarfa de acuerdo con Pu: No, hay ónlcammte model01 div,noe, aun-
bianla. Pu ali lncócnodo can la apllcadón del titrmlno - 1ubdaano-
llado• a la cultura latinoamericana, mlentru que M;arlo BenNletfl
IOltiffle que la literatura latinoamericana, hiet6rlcunenle atraAda por
tratar de ponene al dla con Europa. ha alcanzado finalmente un nue-
vo plano de aw:1a% originalidad e independencia hada la eegunda mJ.
tad del siglo xx. Para 8enedetti, eetimulado por el orgullo ten:ermun-
llili.. dew diatinguinc m1n: imilllción e ~ r.a
Pu. tratar
de hacer - dilltlndOn rewla l a ~ ilueoria de la modemidad.
Gabriel z.id, haciendo KO a Pu. satiriza el concepto de progreeo en la
aalhlra: • t.. c:ultu.ra moderna crece a tal wloddad que noe vuelve,
penonalmnli., cada dla 1N1 Inculto■• la incultun, la bwufidmda, el
■ubde.arrollo, l0C\ produdo■ dlrtttol del progreeo.• Bn eele enu~,
"Tiempo o COAI•, Zald plantea la -ichKI de elegir fflttt el matena-
llamo (extttlvo) o el tiempo (lihtt) para ver J1MU 1ae nubee, e■to "'•
para dWrutarde la vlduimpleyratural.Somo■ felmo tnfellcea eeglln
nustra■ upectatlvu y modelo■ relativo■. ¿Puede haber relativllmo en
la econornla mmo en la cultura y la l'ltica 7 ¿Loo abor!genn de Auetra-
lla 10n ralmente INI felba que la burgueela latinoamericana, como
111glett Zald irónlcmnenle? Lo nufiditNe y !o-ivoen ~ mate-
rialn ..,_,.ala definldOn de la mayorla de ,--ao, -y,ew. a«-
tarnente hay neceeidadN fillbe mlnimal, ¿pero ~ e■t4 •tjefec:ho
con lo mfnhno excepto el ignonnte bienaventurado1 Al,jO C...pen!itt
poetu1a una lay palcológb: • l!J gran trabajo del ~ b e eo~ ~ tie-
rra ronaiate en querff mejorar lo que el. Su, medio■ eon limitado■,
pero eu ambición es grande.• e.te mundo e■t4 ha,ho de Don Quijote,s
y Sancho Panizaie. ¿O e■tl coacebldo por V-llhna. y Mayas? Occiden-
te y Oriente ~ en contrapo■ición. ¿El lianpo e■ dclico (e Implica
no-progreao), º" lineal (hacia adelante o hadaatrú)? Martina l!atra-
da,. fundamenta1menl peslmlata, p1en1a que la era lnd..trlal ha cau-
sado la mecaniz.adón del hombre y la dNhumanizadón --.u degffll-
ndón patológica- empujAndolo hacia atrú en la evolución.
ESTBCEHTAIJRO DI! 1.0SOl!Nelol u
han ■ido hechu .,.. en N~a York y en Londtee que en Popay6n o
Puno.)
¿Ser6 que la méqulna e1 la ralz de lodce loe malea oontempcrineo■7
l!nrlque Andl!rlOn lmbert no lo p1enN .i: el dilema.e■ que la humani-
dad no ha pn,gn,oado mental o monlmenle lo eufldente i - a - ·
dtt 111 ~•- del 111118w. So!8(in el argentino, el peligro e■ pollilco: ,u
nombre ea tecnoct"IICÚI. que po■tula que d.¡e,no. a la m6quina ,-,!ver
nueetro■ prob1m,M ~oel Uderugode undUte. Anderaon lmber_ t 1u-
pre que podrla haber progreso •I un pObllco demoa-Allco e ln■truido
dedd.lna c,ontrolar la tec:nologla en lugar de convertlne en mm,
engranaje de la gran maquinaria de la lnduetrlallzadón. Cuando la
temologfa ee convierto en un aparato controlado y finandado por el
Estado, ~ c.arpentier ten. que la aaltura del hombre coman ae
enajene de lu rnaravlllae del avance dentlfico. Miguel Ar..,i A.tuna,
luego de rwutar en un ensayo la Idea d., que cultura y tecnologla eon
inoompatibla, tennlna empero can WUI lronla cómica: "i lo■ diOIII,
grandes N!cnlcol, hlderon al hcmbn de p1'1t1co.• Si rechazar la tec:no-
logla 1lgnlflca volved., la espalda al futuro, n:late por otro IA<lo 1a IM•
tación de volverle la Npalda al puado, a la tradición. R.alph Waldo
Emenlon decía que el hombre ea inexplicablr •in 1u historia. O en 1-
omlno■ae palabna de Ceorge Sanllyana: quien elige olvidar el puado
Nté condenado a repetirlo. l!n 1874, Enrique JOR Varona eacribió Nte \/,
trozo de abiduria pooilivltta: •0ebemoe ir 1ianpre adelante; pero Dv
volviendo con frecuencia la cabna hada atrM. P.ata e■ la noción que
tengo del progreeo humano.• Hacia 1917, con 1- cicatrica de la pri-
""'"'Guerra Mundial ante 1u1 ojee, Varona bromeó: •t..o malo• que
muchol .., han c¡uedaclo con el cuello inftnioiblemente torcido.• La
gente perdió la fe en el progn,so de■pum de la primer,.; la eegunda
1
Guerra M\lndlal eerfa 1m1 devutadora para al fiel creyente en Lá habi-
lidad del hombtt de mejorar 1u dtuadón. Loo modeloe de pogrwo
para 101 poeltivi■tes decimonóniros latinoamericano e■taban en lnp-
terra, en Francia, en loe Eetadoe Unidot. l!1 delenCIUllo con la historia
europea d,el ligio xx y el miedo a qut, ae <eXlendÚ!ra en Latinoam6rlca
la lnvuión de loe amo■ de ·l a tllcnologfa. loe JI.atado■ Urúdo■ o la URSS,
1M AlfflUlnlas o el Japón, contrlbu~ a n:pllcar el eeceptlcilln1<1 genera-
lizado entre loe en■ayistaa contempor6neo■ de Hlepanoamttlca aobre
el progre■o o, para uHr un tttmino 1""I moderno, el 4_,,.,,n,,_
Para Oetavio Par. .,¡ concepto dt, tlatmollo '" una tupentldón del
l!STI! CENTAURO DI! LOS aéNERQe
Martin,,z P.atrada ha llldo un revisionista po1nn1co del pemamiento
de la Argentina en mM de un aentido. Conleltó la maniquea dicoto-
mia de Sumlento de la dvílm,dón en la■ dudads europeizad• y la
barbarie en el campo de lo■ caudillo■. ~ t a y ocho al\OI median en-
tre la pubücadón de Facuntlo (18'5) y ~ • ' - " fHl1l1Pd (1933): en
eae tiempo. IOI ewopeoe poblaron la Argentina. La e1peranza de Sar-
miento y Alberdi de l"l!llolver el caoe polltico y IIOllRÓl1\JCO de la Arg.n-
tina a trav~ de WUI corrienlle de inmigración para poblar el deeierto
no 1e realizó, eeg6n Euqui<eL profeta de la ruina de au nación, f,el • su
nombre bfflllco. Bueno• All"1!II le ha vuelto l.a e■palda a la aulffltica na·
dón, lae provindal empobreddae, al apegaru • alguno■ hib muy
fr6gllee que la ligan a Europa. La definición de Martinn. l!elrada de la
ciudad contra el campo no N eólo psico<ultural; CONilte en la explo-
tación pol:!lica y económica por parte de la fal■a Coemópolis. Cul
eomo en una retribución blhln, Martlnft &lrada dlagnmtn cómo
loo cosmopolita. de Bueno■ All"1!II .., e116n envenenando en la jungla
de ufalto, y sufren una alm6a de loo cinco Mnlido■•
Ernesto5'bal0extlende laopo■idónde la dudad y del campo a una
aerie de dualidad'" por medio de lae cualee loe ,ocialistas rom6nticoe
y utóplcoe del •iglo xx han adoptado lo Individual por encima de lu
mua■, el puado ,obre el futuro, el t"ampo IObre la dudad, la naturale-
za eobre la mllqulna: 111 disgusto con la brutalidad de la q,oca de la
méqulna 101 ha llevado a rebelarH de eeta manera inteloctual contra
la cimc:ia y el a,pitalilmo. El ■odaliemo cientlfico de Karl Marx y la
glorifinción de la méquina por parte de alguno■ de ■UI convence en
el eiglo xx han tldo echad01 a un lado por otro■ rebeldee roméntlco■ y
exiltencialÍllal, como WU1 variación de la m.,,,. dnilu■ ión del pn>-
greao. En eu eNayo ·1.,¡¡ urbe y el campo•, Mmitegul vuelve II punto
de partida de la confianza de Sarmiento en que 111 dudad• eon ol
•iento de la dvilladó11. redefinida corno la vanguardia de la revolu-
ción y la modernidad ("La velocidad II una inv"""'1ón urbana, una
ro■a moderna...•¡, mientra■ que el campo N un butión de loe reeccio-
r
nerlol, eeg<u\ el pensador peruano l!1 campesino vive monótona y
lentamente...•¡. Andtto Bello y Allon10 Reyff, d01 humanletu conno-
polllM, l'IO etlltWI de acuetd« amboi haoffi ""° de Vlrgillo al ~tar.
ante 1111 lec.-toree urbano■, b valotts rústico■ del campesino.
Pero la dudad no carec:e de admiradora. En IU pasión por la alite-
ración y lu imigenea. "-blo Neruda revela que e.tj enamotado de

ESTl!CEHTAlMO DE LOS CENEll06
Val~ÚIO aituada entre- monlallle Y 81! mar tan cercanoe al con.-
zón del poeta. Alejo Carpenlier, menoe lft'ltimenlal. pero inclslvo f,-.
te a la hietoria cultural ele La Habana, recorre con su mlnda de arqui-
tecto loa deleit• de •1..a d udad de laa columnu•, maayo en que
dl!9CribR l.o capital cubana de ,u juventud. Nen.ida y Cupenlier reve-
lan Wllo de si mámoo cuanto ele t. ciudad• que llln biM conoc:ffl.
Solpl'Cho qu@ un erwayo de Neruda IObrr La Habana y uno de Clll-
pentier ,obre Valparaoo hubieran creado lmAse,- totalmente dif~
renle9 de l!IIU 11UA11M dudada.
Otro lfflla del enoayo hispanoamericano ea el viaje. 1M aclltudee de
loa c:ronlstas pu.den variar entre el turilmo y la acullunleiól\ enlre el
discriminador punto de vi,14 extran¡ero y el del viajero que oe ha
adaptado• loo lugaret tan enlffamenlt!, que~ entiende yac~ la
cultura for'11ea detde dentro. Conriderenoe laa re.:cionea dü-,te,
de Julio Cortúar y Octavio Paz anle ,,.,. experimciae en la India. En El
,,_ogrmn,4tia>, PIZ estj fuánado por el per.eamlenlo y la arquitectu•
ra hlnd6a; proyecta el aura de haber eecai-fo del ,entido ocddental
del tiempo y el progreeo. f!l narrador de E:J ,nono g,wmAtkD ~ indi-
ferentt a lol sigra de miaerla y nwrmedad en la India que. como un
yogu~ acepta como pute de una realidad que no ea la realidad m6s
impor-. Cortwr, en su ensayo "Turismo aconoejabte•, ea repelido
por el tremendlamo de la pobrtt.a y el su!rimiento en las calleo ele Cal-
cula. Utllín la ironla en la tradición de la • Modesta propoaición• de
Jonalhan Swift como un arma para expoNT esa horrible lnhunwú-
d.od . Al mltmo tiempo,enau .,..yo parec:eno ptteiblrn.inguna delas
httmoaa facetas ele la dvillzación hlndO. Paz y Cortmr, puea, ven la
nmma 10CÚ!<lád desde péripéélivas dilttérúés -la orlénlal y la occi-
dmlal-, deede dentro y deede fuera.
¿Pueden 101 latinoamtricanoa que viajan por la América Latina """
su cultura dalle 4ffl¡,., y lntk fwrn a la vez? Gabriel Zald, un mexica•
no con la dls~ del extranjero y el conocimiento del nativo, o/rece
una 9'tira ele doble filo de la induatria turlltlca; M "Pala x•¡1..ao Visi•
tU- de loe gringo, a México} y de la elaborada imitación que " - t loa
mexicanos del American ay o/lifo ~• ronaiclerarse aceptables. La in-
venión irónica provoca carcajadas m jo capa de un anonim11to de
klp-Marl: loa Eabldoe Unidoa han decidido copiar • al pala que ha he-
cho del aubdeaarroUo una especialidad profealonal que lo dilllngue en
el concierto de las naci'onM, y cuyo nomln, por razorw militatta, d~
bemos ocultar".
21 l!llTE a!/ffAIAIO DE LOS oáaos
Mario Benedeltl co.menta. en •Subdesarrollo y letrN de OA.U.•,
que la literatura latinoamericana ha llegadt a la madurez y ha ck!jado
atrú eau novelal traidJdonale1 con una teaia en blanco y negro, o
aquellas otru con el corwabido tema del indio, el campeeino, el peia.¡e
o el reglonaliarno. Moneda corriente (Jo, ronfllctol manlqufOI del bien
y el mal) han dado .-,, recientemen~ a la profundidad psicológb;
a la experimentación en eetilo, forma y lenguaje; a una abundancia ba-
rroca de autmtlco d$11illmo; a la pro)'lttlón aimbólica de una geo-
grafta lcaal (Macondo romo rnlc:rorosmoo de Latinoamfrlca, Comala
como purgatorio). Benedetti roincidirla con Carpenller en que *escri-
bir et un medio de acción•; el 8Critor lalinoamericatlocontemporúieo
debe ll!l'Vlr a la comunidad 1!9Criblendo una literatura dedkada al re-
trato autintíco de 1190Cicdad, sin -=rificar la elaboración de pmona-
;es compiejoa y convina!nllea. Pero la cuestión eatriba en li el nowlista
puede competir por un público oignífbtivo, o t i lu pellculu han
reemplazado a la novela en el aiglo XX. ul aimo la INC¡Uina reemplazó
al caballo. Carpentier e,iente que el novelitta. en la aegunda mitad del
•iglo XX. no ha sido capaz de ponene al dia con la exploai6n de cono-
dmienl01 en 1aa denci. y la tec:nologf.o y, por lo tanto, corre el rieego
de perder la aulffltidd.ad de au eKritura frente al reto ~atog,jfi-
co. Muategui hubiera eetado de acuerdo, ya que en 1928 O>Nideró
q.- ÚI ,¡111,,,cn dd OPI!, la pel.lcula de Charle, O,aplin. habla captado la
época IMjar que ta, obru de H. G. Wells y George 'Bffnard Shaw. Aal
,e de~ menci0nar el profundo impacto de Tu,npo, mo4tr1IOI, ~
de Oiaplin. en el cine y en I• actitud• popularea anle la en indus-
trial Cuarenta alloe después, Bettdettl tiente que la n o v e l a ~
ricana de 101 úlOI _ . eatA mdis llena de vilalldad y oudJa que man-
ca: ee la era dorada dttQuda M6rquez y Fuentes, Cortmr yCar~
Varg¡,,s Lba y Roa Butoa, d 111.
t.o. novelillal y poeta con frecuencia usan el ensayo en - dlwr-
- formu para expraar un mentaje perentorio con may« imi-tc,
inmediato~ lo~ püdla't leñtt el\ UN olri dé ÍIOCÍ6n o de poesl.a.
AII Carda M ~ Elena Poniatowalca. Octavlo Paz y otroe eearito-
ree contemporÚll!Ol lndtan el cambio al documentar la repnsión poU-
tica o la fa114 de una polllica ad«uada de control de natalidad o de
abono en I.Alinoiunmca. Al exponer loa malea de su época medlanle
ractiog,all.u mtant6neM, el enaayilta •ume el papel del intelectual
comprometido.
ESTl!Cl!HTAURO OO I.OScén!Ros n
Miguel ~ Aaturiaa debe - considerado un turista cuando vial-
ta Bolivia y dt«ribe el alma indlgena como ai eatuvien encantado con
la novNad. f!l eacrltor guatemaltecoª" fiUllDlarindo con la cultura
indlsena de su llttra Ntal. de modo que pt>babiemenle siente una afi-
nidad apecial con el indio boliviano a pee• de la exótica geografla.
~ eeta tensión de a,ombro y familiaridad hace IU crónica
tan f-inante. Germ6n AldniegM, el coamopollta colombiano, parece
diatante de 101 lndlgenu de su propio pala cuando~ pinta en el coló-
rido ambienle de au ensayo •Bodegón con granadillu y naranjas", Ar·
cinJegas no íotogralla; hace una serie de pintur. que cuelg¡u\ mlln.'O
tras marro, a Ira~ de loa dlferenllea perioc101 de la hlaloria, en una
suerte de gale:rla """bal. El ingenio del colombiaft> lo ayuda • mante-
nene por encima de su tm,a; Aatwial, en c:ambio, parece impelido en
su eiwayo aobre Bolivia a la identificación con ésU.
1!1 papel del 1!9Crilor en la IOCiedad hilpanoamerlcana ha eldo otro
tema notable de comentario para nueelrOI enoayiam. Rodó aee en el
ocio para una élite cultunl que reflexione aobre laa grandes cueetionet
de la •tétlca y la ética; en t11le grup<> aelecto ettarlan loa eteritores, que
ae han aislado a al núamoa en una to rre ele marfil para contribuir al
avance de la dvlllzadón. Rubffl Ovlo, que ligue a Rodó en la tenden-
cia elitista de modernismo, se revela romo un ano•
condaamdienll!
que preferirla aer parillieNe pero que ae da cuenta que debe incliNne
halla cÍl!r1D punto a loa deHOO de sus l«torel de lengua eepallola. De
ahl su deaaf1o en•A Rooen-ett• y su advwtencia aobre el imperialiamo
cultural en el prefacio de Cantos tk vida !l llPffll'WL Manuel Gonziln
Praidll. poeta imovador que rompe con la tradlci6n IUJW\lial. critica
eapedficarnenle a e101 poltblS que no ae preocupen por rompromtltt·
se con loe problemu de ms lectores. Senala la Irania de que tale& i--
tu, sin emhugo, gu,tan de desnudar sus almas frente al mundo, como
ai el mundo eatuviera lntffl!Udo en ello. Por , upuealo, aun González
Prada OICila. en au propia poeala. entre el eacapiamo modernista y el
rompromiao aoclal. Bn au• ensayoa, Hom ü ludllt y Propaganda y •ta-
qw, epitomiza al eecritot comprometido ron el cambio 90cial. econó-
mico y polllico a Ira~ de una critica ,evera d el f lffll qua, Alejo Car-
penlier también tiene fe en el eecritor comprometido, pero ~ mismo
no blande la pluma de la p r o ~ y el ataque. :en cambio. se define a
el mismo, en •Papel eoclal del nowllala", como un testigo de lu rali•
dadee oocialea de su época. en eapec:lal de la épica<lOl«tiva de las mane.
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