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Propósitos

Índice
y alcances

Con la intención de servir de apoyo en el desarrollo de las


competencias de los alumnos, Leo y descubro se ha planteado los
siguientes propósitos.

General:
Favorecer la práctica lectora y ser un recurso para la comprensión e
interpretación de textos.

Específicos:

Impulsar el aprendizaje con los textos y por medio de ellos.
Auxiliar a los alumnos en la reflexión acerca del contenido de los textos.


Promover que los alumnos construyan interpretaciones y juicios
sobre la lectura.

Contribuir al desarrollo de las destrezas lectoras de los alumnos,
medirlas y ayudar a evaluarlas, en lo posible.

Fomentar el hábito de la lectura.

Acercar diferentes tipos de texto a los lectores.

Desarrollar preferencias y gustos lectores.

Favorecer la autonomía lectora.

Estos propósitos se tratan y amplían en los materiales del programa


según el grado escolar y de acuerdo con el perfil de egreso señalado
para cada uno.

Alcances
Para comprender los alcances de Leo y descubro es preciso explorar
algunos conceptos sobre los lectores y el proceso lector.

Los materiales del programa se han desarrollado conforme a dos


orientaciones pedagógicas: el enfoque por competencias, que sitúa
la lectura como un proceso interactivo entre texto (autor) y lector,
y la taxonomía del pensamiento crítico, que parte de los procesos
de percepción para lograr la comprensión, interpretación, crítica y
valoración de diversos textos.

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De acuerdo con ambas orientaciones pedagógicas, “lector” es el
alumno que se apropia del sistema de escritura y se acerca a los textos
con diversos propósitos, desde lúdicos hasta prácticos. La forma en
que se aborda y comprende un texto se llama proceso lector; éste
parte de lo objetivo (el texto y sus componentes), se desarrolla con la
práctica continua (las estrategias de lectura) y finaliza en lo subjetivo
(la construcción individual).

El proceso lector requiere lectores activos que atribuyan significado


a lo que leen. A diferencia de lo que ocurre con los lectores pasivos
—quienes decodifican, pero sólo logran una comprensión parcial—,
los lectores activos son capaces de construir la interpretación, la
reflexión y la crítica de textos.

Al finalizar una lectura, el lector activo se da cuenta de que leer tiene


sentido y sabe lo que el texto le aportó e incluso lo que él mismo
puede aportarle al texto: interpretación, nuevas ideas y un juicio
propio. En ese sentido, un lector activo es un pensador crítico, capaz
de descubrir aspectos esenciales del texto.

Algunos rasgos del perfil de egreso de la Educación Básica que tienen


relación con este enfoque, son los siguientes.

El alumno:

argumenta y razona al analizar situaciones;

identifica problemas;

formula preguntas;

emite juicios;

propone soluciones;

aplica estrategias;
 decisiones;
toma

valora los razonamientos y la evidencia proporcionados por otros, y

puede modificar, en consecuencia, los propios puntos de vista.

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De las premisas anteriores, podemos plantear el alcance más
ambicioso de Leo y descubro: coadyuvar a la formación de sujetos
activos a partir de lectores activos. Lo anterior se inserta en los
estándares nacionales de formación educativa y se articula con las
competencias para la vida en sociedad.

Competencias para la vida en sociedad. Se refieren a la capacidad


de decidir y actuar con juicio crítico frente a los valores y las normas
sociales y culturales.

El desarrollo de las competencias precisa de la intervención continua


del docente, pues el alcance de éstas dependerá de la profundidad
con que el profesor las conozca, la forma en que propicie las acciones
para desarrollarlas, y el conocimiento que tenga para ajustarlas.

Para ayudar al docente en su labor como facilitador y acompañante,


Leo y descubro se ha planteado como tarea principal proveerlo
de material de trabajo y proponer situaciones de aprendizaje que
propicien la comprensión, la interpretación y la crítica de textos, las
cuales se materializan en los cuadernillos de actividades (divididos
en tres momentos: antes de la lectura, durante la lectura y después
de la lectura) con sus correspondientes sugerencias; a ello se
aunan las evaluaciones por libro, y las actividades del catálogo
(ambas disponibles en www.leoydescubro.com) que le permitirán
reforzar el desarrollo de competencias relacionadas con la lectura.
Estas herramientas, con la guía del profesor, le permitirán dirigir el
aprendizaje de los menores y encauzarlos para que se conviertan
en lectores activos, logrando, así el propósito del plan lector.

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