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CONFERENCIA ELECTRÓNICA DE

FAO/OMS/OIE EN SALUD PÚBLICA


VETERINARIA Y CONTROL DE
ZOONOSIS EN PAÍSES
EN DESARROLLO
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 75

LISTA DE SIGLAS

AIEA Agencia Internacional de Energía Atómica

AMV Asociación Mundial Veterinaria

API Acción Participativa en Investigación

BSE Encefalopatía Espongiforme Bovina

CDC Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (USA)

MASSE Metodología Adaptativa para la Sustentabilidad y Sanidad del


Ecosistema

PC Computadora Personal

CD Disco Compacto

FAO Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la


Alimentación

OIE Oficina Internacional de Epizootias (Organización Mundial de Salud


Animal)

OMS Organización Mundial de la Salud

ONG Organización No Gubernamental

OPS Organización Panamericana de la Salud

HACCP Puntos Críticos de Control y Análisis de Riesgo

PCR Reacción en Cadena de la Polimerasa

PIO Procedimientos Industriales Óptimos

PT* Países en Transición

PVD* Países en Vía de Desarrollo

RADISCON Red Regional de Vigilancia y Control de Enfermedades de los Animales


para África del Norte, Medio Oriente y Península Arábica.

SPV Salud Pública Veterinaria

TCSA Trabajador de la Comunidad de Salud Animal

TCP Proyecto de Cooperación Técnica


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TIC Tecnología de Información y Comunicación

UE Unión Europea

*El uso de los términos “Países en Vía de Desarrollo” y “Países en Transición” puede
ser ambiguo. En base a la nomenclatura utilizada por el Banco Mundial, un país en
vía de desarrollo se define como un país de bajos y medianos ingresos (64 y 93 países
respectivamente) en donde la mayor parte de las personas tienen un bajo estándar
de vida con un menor acceso a bienes y servicios comparado con aquellas personas
pertenecientes a países con ingresos elevados. Por países en transición se entiende a
aquellos países en los cuales la economía solía estar planificada centralmente por el
gobierno pero actualmente están transformándose en economías dependientes del
mercado.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 77

ANTECEDENTES DE LA
CONFERENCIA

En 1999, la Organización Mundial de la Salud (OMS) convocó una conferencia


de expertos pertenecientes a 18 países industrializados, en vía de desarrollo y en
transición. La conferencia fue realizada en Teramo, Italia, en colaboración con la
Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO)
y la Oficina Internacional de Epizootias (OIE). El propósito principal fue considerar
en qué medida los programas de Salud Pública Veterinaria (SPV) podrían contribuir
globalmente a la Salud Pública, con particular énfasis en los países en vía de desarrollo.
En la conferencia realizada en Teramo, se definió a la SPV como:
“Las contribuciones al bienestar físico, mental y social de los seres humanos
mediante la comprensión y aplicación de la ciencia veterinaria”.
Esta nueva definición reemplazó la originariamente expresada en el informe técnico
de FAO/OMS realizado en 1975 (OMS, 1975) en la que se refería a la SPV como
“un componente de las actividades de la Salud Pública consagrado a la aplicación de
destrezas, conocimientos y recursos profesionales para la protección y mejoramiento de
la salud de los seres humanos”. Se entendió que la nueva definición, era más consistente
con la definición de “Salud para todos en el siglo XXI” de la OMS.
El alcance de la SPV es claramente multidisciplinario, involucrando no solamente
a los veterinarios de sectores gubernamentales y no-gubernamentales, sino también
a otros profesionales de la salud, científicos y aquellos quienes tratan, controlan o
previenen enfermedades de origen animal. Un tema recurrente de la Conferencia fue
que el trabajo en equipo para resolución de problemas, investigación, programas de
control y comunicación era esencial para asegurar que la contribución veterinaria sea
significativa y sustentable en el mejoramiento de la salud humana.
La FAO auspició la conferencia electrónica, en colaboración con la OMS y la OIE,
con el fin de publicar las discusiones y recomendaciones de la Conferencia realizada
en Teramo a una mayor audiencia, así como para centrar la atención primariamente en
los países en transición y en los PVD. En general, las actividades de SPV en estos dos
grupos de países varian y limitadas en alcance y distribución. Las áreas priorizadas para
el mejoramiento de la salud animal y humana difieren significativamente de los países
desarrollados. En los PT, además de la escasez de recursos, los problemas son diferentes
de los que se presentan en los países desarrollados. Sin embargo, no solamente se puede
aprender de países desarrollados sino que también existen grandes oportunidades de
colaboración a diferentes niveles. Los problemas referidos a seres humanos y animales
están substancialmente ligados. Los problemas de salud no están limitados a regiones
específicas, tampoco respetan fronteras internacionales y pueden extenderse a diferentes
regiones étnicas y políticas. Al efecto, se preparó una publicación resumiendo las
reflexiones y recomendaciones de la conferencia realizada en Teramo para ser discutida
en el ámbito de una Conferencia electronica en el servidor de la FAO (FAO, 2001). La
Conferencia electrónica, fue anunciada en ProMED (International Society for Infectious
Disease, 2001) y otros servidores de importancia. Los participantes fueron invitados
a inscribirse y a enviar sus contribuciones al Moderador quien las editó y reenvió a
todos los participantes. La Conferencia se llevó a cabo en base a una serie de reglas
preestablecidas. Los participantes autorizaron a los patrocinadores a hacer referencia,
resumir y citar toda o parte de las contribuciones presentadas en este resumen. Las
contribuciones posteriormente se publicaron en el sitio de la Conferencia electrónica.
78 Antecedentes de la conferencia

Se inscribieron en el evento, aproximadamente 700 profesionales, recibiéndose aportes


de 60 participantes que representaron 80 países, incluyendo muchos PVD y PT.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 79

OBJETIVOS DE LA CONFERENCIA Y
TEMAS DE DISCUSION

El principal objetivo fue el de proveer un foro abierto para la planificación de


estrategias de desarrollo ó restablecimiento de los servicios de SPV para mejorar
la salud humana y animal. Se entendia como necesario que estas estrategias fueran
técnicamente adecuadas, rentables, disponibles equitativamente y que tomaran ventaja
de las economías asociadas a la distribución de servicios provenientes de los ingresos
públicos. Tradicionalmente las actividades de SPV incluían (OMS, 1975; FAO, 1990):
• diagnóstico, vigilancia, control, prevención y erradicación de zoonosis;
• riesgos relacionados con el trabajo y enfermedades asociadas con animales vivos y
sus subproductos;
• producción y desarrollo de productos biológicos;
• control de poblaciones de animales que pueden servir como reservorios o ser
nocivos;
• prevención y control de enfermedades transmitidas por los alimentos de origen
animal;
• inspección ante-mortem y post-mortem de carnes y productos avícolas;
• participación en la investigación de brotes de enfermedades;
• actividades relacionadas con el medio ambiente incluyendo estudio de vectores,
agua, vida silvestre y uso de animales trazadores;
• investigación biomédica;
• manejo de emergencias incluyendo catástrofes naturales y de aquellas provocadas
por el hombre;
• aspectos sociales en catástrofes naturales y provocadas por el hombre;
• aspectos sociales incluyendo servicios relacionados con animales y nexos entre
humanos y animales.
Durante la conferencia, se desarrollaron 19 temas de discusión bajo cuatro
encabezamientos generales:
• SPV en el siglo XXI.
• Tendencias futuras que desafiarán la SPV en el siglo XXI.
• Organización y dirección de programas de SPV.
• Educación, entrenamiento y extensión en SPV.

NOTA: Todas las contribuciones fueron publicadas en el sitio de la Conferencia


electrónica en Red (FAO, 2001), http://www.fao.org/waicent/FaoInfo/Agricult/
AGA/AGAH/VPHeconf/Home.htm
80 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

A. SALUD PÚBLICA VETERINARIA EN EL SIGLO XXI

1. Adónde debieran dirigir los esfuerzos los programas de SPV y los veterinarios en
países en vía de desarrollo para optimizar los resultados?
El principio básico de los programas de SPV en PVD (Dr. D. Allard et al., contribución
38) debería ser el de dirigir los programas de Salud Pública directamente al individuo,
grupos pequeños ó comunidades. Los programas, deberían incluir principios básicos de
higiene, cuarentena, aislamiento, bioseguridad y vacunas económicamente accesibles, así
como opciones más complejas tales como sistemas de vigilancia, capacidad diagnóstica
y opciones de tratamiento.
Los programas deberían evolucionar en complejidad técnica y alcance a medida que
se desarrollan en el tiempo. Se considera que las propuestas coherentes y coordinadas
son siempre más apropiadas. Lo ideal sería el control de enfermedades zoonóticas y la
implementación de programas de seguridad alimenticia que eduquen al individuo en
métodos y prácticas que pueden ser llevados a cabo con costos bajos y con el mínimo
de equipamiento y materiales. Estos programas podrían requerir de considerables
recursos humanos pero mínimas inversiones monetarias, especialmente si los recursos
humanos provienen de comunidades locales. El entrenamiento de los recursos humanos
podría realizarse a través de agencias externas.
Las características geográficas del país, el estado de desarrollo y la situación actual de
las zoonosis son los factores que deben considerarse en el establecimiento de objetivos
y prioridades que influenciarán el desarrollo y efectividad de los programas de SPV
en PVD. Se deberán considerar también las exportaciones/importaciones de animales,
productos animales y alimentos de origen animal (Dr. A. Panin, contribución 36).
En cualquier programa de control y erradicación de una enfermedad zoonótica la
probabilidad de éxito es el factor más importante a tener en cuenta (Dr. R. Jackson,
contribución 40). Los pre-requisitos para el éxito incluyen:
• métodos efectivos para frenar o reducir la transmisión del agente;
• grado de importancia socio-económica;
• aspectos epidemiológicos adecuados para la correcta detección de un caso;
• óptima vigilancia para medir el progreso y para proveer información que pueda ser
utilizada para realizar los cambios que se requieran.
Los programas que tendrán mayores probabilidades de éxito son aquellos que
más fácilmente conseguirán financiamiento. Un programa con éstas características es
más atractivo al público, veterinarios y trabajadores de la salud. Existen solo algunas
enfermedades que cumplen con los requisitos arriba mencionados en la mayoría
de los países. De este modo la decisión de cual de éstas debería tener prioridad es
generalmente fácil de tomar y no requiere de un sofisticado análisis económico.
Aunque el financiamiento puede ser de gran utilidad en el comienzo del programa, el
objetivo final debería ser el de obtener financiamiento sustentable dentro del propio
país. Existe una necesidad real y urgente de desarrollar opciones de bajo costo para
programas de control en PVD. Aunque existe una tendencia a elegir técnicas y métodos
más sofisticados, éstas solamente son viables en países con industrias ganaderas muy
bien desarrolladas y subsidiadas. También es un pre-requisito esencial realizar pruebas
piloto para evaluar la viabilidad de los programas de gran escala.
El Dr. Jackson también propuso que la equinococosis es una afección ideal para la
realización de un programa nacional de control en PVD. El praziquantel es una droga
eficaz y económica que se usa en los huéspedes definitivos, y la experiencia demostró
que la concientización y participación pública pueden ser fácilmente incorporadas en
los programas de control. La vigilancia epidemiológica puede realizarse eficientemente
utilizando en forma racional las técnicas costosas. Mientras que la erradicación total
de la equinococosis no es un objetivo factible en algunos países, el logro esperado
en la mayoría de las situaciones debería ser el control razonable en animales y
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 81

la reducción significativa de casos en humanos (especialmente en niños). Una


enfermedad zoonótica como la equinococosis quística (con los perros como huéspedes
definitivos), ha incrementado el interés para los programas de control al igual que otros
problemas de SPV como la rabia. La toxocariasis humana puede ser incorporada en un
programa integral de control para la obtención de beneficios adicionales con costos
insignificantes.
El Dr. Jackson también argumentó que otros programas de control de enfermedades
zoonóticas de alto perfil en PVD, como aquellos para brucelosis (especialmente debido
a B. melitensis) obtuvieron logros variables. Probablemente se hizo mayor énfasis en
el desarrollo y mejoramiento de vacunas, que en epidemiología básica como medio
esencial de control. Se debería prestar más atención a los indicadores claves para
monitorear el estado de las enfermedades y a factores que influencian la transmisión, así
como en la recolección de información para determinar la efectividad de intervenciones
específicas. El análisis de los datos de vigilancia local provee de valiosos conocimientos
de la epidemiología de la enfermedad dentro del país.
Finalmente, el Dr. Jackson sugirió que es el momento oportuno para que los PVD
abandonen gradualmente los programas regulatorios de control de enfermedades y se
dirijan hacia una propuesta de mayor respuesta basada en análisis de riesgo y manejo
(Murray, 2002; Hathaway, 1991). Desafortunadamente estos programas han sido
usados por muchos años y están firmemente asentados en la profesión veterinaria.
Como ejemplo se citó la vigilancia de residuos químicos usados en PVD, a pesar que
éstos se consideran de bajo riesgo comparados con otras preocupaciones en SPV.
El Dr. H. Mainzer (contribución 22) opinó que si los programas de SPV se enfocaran
únicamente en zoonosis, existiría el riesgo de que esta sería la única contribución de
los veterinarios en el mejoramiento de la salud pública. El Dr. Mainzer también
opinó que los brotes de enfermedades zoonóticas siguen ocurriendo a pesar que
siguen manteniéndose las mismas recomendaciones. La vigilancia y el diagnóstico
de las enfermedades no las frenan la aparición de las mismas, sino que sólo permiten
identificarlas. Las emergencias de Salud Pública son consecuencia de fallas en la
prevención. Es necesario que los veterinarios se involucren en todos los aspectos
de la tríada causal: agente/huésped/medio ambiente. Solamente de ésta manera
pueden ayudar a identificar y desarrollar evaluaciones lógicas, designar sistemas de
intervenciones y estrategias efectivas de prevención. En Estados Unidos los veterinarios
están involucrados en salud ambiental, programas de prevención de enfermedades
mediante vacunación, evaluación de catástrofes, enfermedades crónicas y aspectos
nutricionales, salud ocupacional, control de perjuicios, problemas relacionados con
alimentos, drogas, agua y residuos, terapia de animales de compañía, concientización
de VIH/SIDA, docencia y manejo de programas y organizaciones de Salud Pública.
Los veterinarios no solamente deberían abocarse a enfermedades y daños de origen
veterinario sino también a su ocurrencia dentro de los sistemas y procesos de la Salud
Pública.
El Dr. P. Schantz (contribución 45) presentó una historia breve de SPV en los
Estados Unidos. En los últimos 50 años, el Centro para el Control y Prevención de
Enfermedades (CDC) se ha establecido como la principal agencia de salud pública de
epidemiología y prevención de enfermedades de los Estados Unidos. Los veterinarios
constituyeron una parte integral del programa desde su principio y el CDC fue un
socio activo definiendo el ámbito de SPV y desarrollando programas y normas.
En 1947 se creó una División separada de SPV que a lo largo de 28 años realizó
importantes contribuciones en las áreas de enfermedades transmitidas por los alimentos
y enfermedades zoonóticas como rabia, psitacosis, triquinosis, cisticercosis, ántrax y
leptospirosis entre otras tantas. Esta División también condujo investigaciones a
campo, asistió a distintos estados en la inauguración de nuevos programas y suministró
apoyo de técnicas de laboratorio en todos los aspectos de enfermedades de los animales
82 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

transmisibles a humanos. La División también brindó apoyo a países extranjeros y a la


OMS para la asistencia en exploración de programas de SPV. En 1975, todos los grupos
de CDC fueron reubicados en grupos multidisciplinarios encargados de enfermedades
relacionadas. Mientras que algunos percibieron esto como una reversión y una amenaza
para SPV, en la práctica esto permitió a los veterinarios a considerar un mayor rango
de posibilidades en la carrera en el CDC. En la actualidad, los veterinarios son elegidos
y seleccionados para que puedan desarrollar exitosamente sus tareas en base a sus
capacidades e intereses. Actualmente existen 70 veterinarios en el CDC asignados a 10
centros diferentes, institutos o programas. Además de desempeñarse activamente en
investigación y control de zoonosis, están trabajando en VIH/SIDA, en el programa
nacional de inmunización, y en sanidad ambiental, ocupacional e internacional.
Muchos de los veterinarios anteriores de CDC se encuentran actualmente trabajando
como veterinarios estatales en Salud Pública y mantienen un enlace con CDC a través
de la Asociación Nacional de Veterinarios Estatales de la Salud Pública. Aún cuando las
responsabilidades actuales de los veterinarios de CDC no incluyan temáticas de salud
animal o de medicina veterinaria, ellos afirman que sus experiencias educativas has sido
apropiadas preparándolos para sus tareas actuales.
La orientación veterinaria en “sanidad del rodeo” es una metáfora de la salud
comunitaria. El CDC también creó vínculos con el Departamento de Agricultura y
el de Administración de Alimentos y Fármacos de los Estados Unidos (USDA). Esto
fue de gran ayuda para la investigación de enfermedades transmitidas por los alimentos
como por ejemplo el rastreo de carnes incriminadas en un brote, investigación de
enfermedades zoonóticas emergentes y coordinación de la Vigilancia Nacional de
enfermedades transmitidas por el agua y los alimentos.
Mirando hacia el futuro, los desafíos en Salud Pública en los próximos 50 años serán
diferentes a aquellos del pasado. Los veterinarios están preparados y están dispuestos
a trabajar con colegas de otras disciplinas para responder a estos desafíos y para
desarrollar programas efectivos para continuar mejorando la Salud Pública.
Comentarios del Moderador: Se espera que en el futuro, estos enfoques
multidisciplinarios se expandan a los PT y los PVD. Sin embargo, en muchos PVD la
mayor presión se encuentra en las actividades de control de las zoonosis tales como
rabia, brucelosis, equinococosis, y reconocer brotes de enfermedades de los animales
que pueden ser centinelas de riesgos emergentes de la salud ambiental (Stephen y
Ribble, 2001), además de mejorar la inocuidad de los alimentos de origen animal. Los
programas de SPV tendrán éxitosos si se demuestran éxitos tangibles desde el inicio de
los proyectos.

2. ¿Deberían los países o regiones establecer objetivos para reducir infecciones


zoonóticas específicas en relación a la carga de la enfermedad?
Para estimar la carga de una enfermedad la OMS utiliza modelos matemáticos y
análisis, arribando a resultados de medidas de mortalidad e incapacidad producida por
enfermedades específicas (Murray y Lopez, 1996). Si bien esta metodología tiene ciertas
limitaciones se sabe que a nivel mundial, aproximadamente el 90% de las enfermedades
e incapacidades debidas a causas múltiples ocurre en las regiones del mundo que
se encuentran en vía de desarrollo. Sin embargo, precisamente en estas regiones, se
gasta solamente el 10% del total de los fondos para el cuidado de la salud. Se espera
que la prevalencia de las enfermedades contagiosas con excepción de VIH/SIDA y
tuberculosis, disminuya para el año 2020. Seis categorías de enfermedades (neumonía e
influenza, SIDA, diarreas, tuberculosis, malaria y sarampión) son responsables del 90%
de las 13,3 millones de muertes en menores y adultos jóvenes debido a las principales
enfermedades infecciosas y parasitarias (Meslin et al., 2000). Los agentes zoonóticos
contribuyen en varias de éstas categorías. La rabia es la causa principal de muertes
debido a zoonosis y es responsable de 40.000 a 60.000 muertes por año, mientras que
otros agentes zoonóticos como la viruela de los simios ocurre a niveles bajos: 500
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 83

casos reportados desde 1992. La vigilancia de varias zoonosis en PVD está expuesta
a errores de estimación especialmente relacionados con bajos registros de infecciones
endémicas.
Existe un consenso general entre los participantes de la conferencia con respecto
al desarrollo de objetivos específicos para la reducción de la incidencia/prevalencia de
enfermedades zoonóticas, con la salvedad de que éstas deben ser de real importancia
pública dentro del país.
Por ejemplo, se manifestó (Dr. D. Allard et al., contribución 38) que sería más
conveniente determinar un objetivo como el porcentaje de reducción de la tasas de
varias zoonosis reportadas actualmente en el país, con establecimiento de objetivos
prioritarios influenciados por nivel de riesgo (probabilidad x severidad) a la salud
humana, sanidad animal e impacto económico. Aunque riesgo, y en cierta medida
prevalencia, son parámetros muy importantes, se debería considerar la facilidad
de implementación y sustentabilidad de los programas a lo largo del tiempo. Los
programas que dependen de la participación y financiamiento externos a largo plazo o
indefinidamente, tienen menor probabilidad de ser sustentables.
Comentarios del Moderador: En aquellos casos en que los presupuestos para el
cuidado de la salud en PVD son escasos, es crítico que los fondos sean utilizados en
donde se obtenga el mayor beneficio. Un reciente ejemplo de Tanzania (The Economist,
2002) demostró que para determinar las muertes e incapacidades y sus sintomatologías,
en lugar de recoger datos de salud de las clínicas, se realizaron encuestas puerta a puerta.
Se desarrolló un perfil de carga de enfermedad y usando ésta información los gastos de
salud fueron redirigidos a la carga real que las comunidades estaban experimentando.

3. Qué tipo de asistencia necesitan los países en vía de desarrollo de agencias


internacionales como OMS, FAO, OIE y de donantes bilaterales para mejorar/
expandir sus programas de SPV?
Un gran número de participantes se refirió a este tema y mencionando la necesidad de:
• Asistencia en la priorización, apoyo, e implementación de los programas de control
y erradicación de las zoonosis de gran importancia para la Salud Pública.
• Organización de encuentros regionales y talleres referidos a zoonosis.
• Apoyo para investigación aplicada mediante proyectos de cooperación técnica
(TCP) para proveer entrenamiento y otras habilidades.
• Asistencia en el diseño e implementación de sistemas de información de salud.
El Dr. A El Idrissi (contribución 44) comentó que las autoridades de la Salud
Pública en la mayoría de los PVD se interesan en las zoonosis solo cuando los índices
de incidencia/prevalencia alcanzan niveles altos ó durante epidemias. También notó
que mientras que FAO/OIE/OMS organizaba frecuentemente grupos de expertos para
obtener recomendaciones en estrategias y pautas para el control de zoonosis, había
muy escasas iniciativas comunes o de cooperación entre estas organizaciones para
desarrollar programas cohesivos de SPV en países en PVD. Puntualizó al efecto, que
se deberían desarrollar programas científicos inter-regionales incluyendo profesionales
médicos y veterinarios de instituciones relevantes en grupos de países con problemas
epidemiológicos similares. Se debería dar prioridad a programas de control integral
de rabia, brucelosis, tuberculosis y enfermedades transmitidas por los alimentos. Otra
área en la cual las organizaciones internacionales pueden cumplir un rol activo es el de
asegurar la educación y transferencia tecnológica para programas de SPV y en el apoyo
de su adaptación para satisfacer necesidades locales y regionales en PVD.
También se notó que además de la Organización Panamericana de la Salud (OPS),
la OMS no tiene actualmente expertos en Salud Pública veterinaria en sus oficinas
regionales.
Mientras que se demostró que algunas zoonosis (por ejemplo: brucelosis,
hidatidosis) son erradicables en países desarrollados, en donde existe un gran apoyo
público y una infraestructura administrativa eficiente, esto no es posible en PVD. El
84 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

Dr. M. Lightowlers (contribución 1) argumenta que organizaciones internacionales


tales como FAO y OMS así como donantes bilaterales, deberían identificar y promover
avances científicos que tienen el potencial de lograr mejoramientos genuinos en el
control y prevención de zoonosis. Citó el ejemplo de hidatidosis quística (Echinococcus
granulosus) y cisticercosis bovina (Taenia saginata) en las cuales se desarrollaron
vacunas eficientes y prácticas basadas en la identificación de antígenos recombinantes
con una buena protección del huésped (Lightowlers, 2002). El desafío no sólo será
el de establecer procedimientos industriales óptimos (PIO) para la producción de
éstas vacunas sino también establecer un mejor uso práctico que reducirá la carga de
enfermedad en humanos en PVD. La comercialización del producto será finalmente
requerida. La evaluación consistirá en determinar si estos productos pueden conferir
una protección a largo plazo y a un costo razonable.
El tipo de asistencia necesaria para cada PVD puede ser similar en algunas áreas y
muy diferente en otras (Dr. J. Calder, contribución 19). Es necesario tanto el apoyo
técnico como el apoyo profesional. Sin embargo las necesidades de cada país y/o región
tienen que determinarse a nivel regional o a nivel país con la participación local. Las
personas que han tenido experiencia en países desarrollados tienden a implementar la
tecnología que aprendieron en sus países, pero desafortunadamente en muchos casos,
estos países carecen de infraestructura para implementar esta tecnología. De este modo,
antes que se le dé asistencia a los PVD, deberá evaluarse si existe en ellos infraestructura
capaz de implementar el tipo de ayuda que se les brindará. Otros participantes dieron
ejemplos de laboratorios de zoonosis que fueron armados con ayuda internacional pero
que nunca se completaron, ni se equiparon o amoblaron adecuadamente y que además
carecían de personal debidamente entrenado.
Las redes son ejemplos de trabajo en conjunto entre países desarrollados y PVD
enfocándose en algún problema particular de SPV. El Grupo Informal de Trabajo en
Equinococosis (Dr. P. Schantz, contribución 23) fue creado en 1985 bajo el auspicio de
OMS para promover el intercambio y la cooperación científica en la investigación de esta
zoonosis parasitaria. Actualmente este grupo consiste en una red variada de individuos
de varios países dedicada a áreas de investigación e intervenciones seleccionadas de
acuerdo a las necesidades e intereses de los participantes; también representan las áreas
prioritarias de investigación en aquellos países más afectados por la enfermedad. Los
temas de las redes actuales incluyen: desarrollo, evaluación, y estandarización de los
métodos de diagnóstico en huéspedes animales y humanos, opciones de tratamiento,
evaluación de vacunas en huéspedes intermediarios y estimación de costos. A pesar
de que las actividades de las redes y de la investigación no están directamente
subvencionadas por la OMS, el grupo juega un rol importante definiendo prioridades,
coordinando actividades y promoviendo la comunicación.
El Dr. S. Sandor (contribución 13) describió la forma como la OMS y la Unión
Europea (UE) respaldan el programa integral para controlar y prevenir la equinococosis
quística y alveolar en Rumania. En el futuro se prevee incluir otros países del Sudoeste
de Europa y Balcanes. El Dr. M Kachani (contribución 37) indicó que hace algunos
años se inició una propuesta similar en Marruecos y que se esperaba incluir otros
países de Mahgreb en el futuro. Otras áreas en donde las organizaciones internacionales
podrían prestar su apoyo es desarrollando y distribuyendo material educativo acerca
de temáticas en SPV. Por ejemplo el material educativo acerca de equinococosis
(hidatidosis) escrito en árabe y francés, y desarrollado en Marruecos, podría ser
utilizado en todos los países del norte de África (Mahgreb) en donde la situación de la
enfermedad es similar.
Todas las agencias internacionales han producido una variedad de publicaciones
disponibles que pueden ser utilizadas por aquellos responsables de SPV y control
de zoonosis en los PVD. Desafortunadamente estas publicaciones pueden no estar
disponibles, estar agotadas o en ciertos casos ser económicamente prohibitivas. Una
solución es hacer éstas publicaciones accesibles a través de Internet o mediante discos
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 85

compactos (CD). Las agencias internacionales podrían hacer modelos genéricos de


simulación y sistemas de información epidemiológica/geográfica más accesible a
aquellos que trabajan en temáticas de SPV en los PVD (Centers for Disease, Control
and Prevention, 2001; Computer-aided Learning in Veterinary Education, 2001). Esto
incluiría entrenamiento y cursos designados a fomentar el uso de bases de datos para
reportar las enfermedades en forma regular, análisis de la tendencia de las enfermedades
y evaluación económica de costos y beneficios.

B. FUTURAS TENDENCIAS QUE DESAFIARÁN LA SALUD PÚBLICA VETERINARIA


EN EL SIGLO XXI

Identificar métodos que podrían mejorar el suministro de programas de spv a los


países en desarrollo en las siguientes áreas generales

4. Acceso a información científicamente fundamentada, especialmente aquella que


“es necesaria saber”, y su rápida transferencia
El Dr. D. Allard et al. (contribución 38) enfatizó la necesidad de herramientas
electrónicas que no requieran alta tecnología informática o líneas veloces de Internet,
tales como:
• listas de correos electrónicos de grupos de discusión o conferencias
• cartel electrónico de anuncios con mantenimiento de temas de discusión
• acceso a lectura online de documentos de SPV (no publicados aún)
• presentaciones en PowerPoint adecuadas para conferencias, etc.
El Supercurso multilingüe “Epidemiology, the Internet and Global Health”
(Pitt. Edu, 2001) y “Emerging infection of International Public Health Importance”
(Universidad de Washington, 2001) son buenos ejemplos de sitios de educación a
distancia.
El Dr. E. Jette (contribución 3) manifestó que en PVD y PT debería apuntarse al
mejoramiento del acceso electrónico, el sistema de redes y el acceso consolidado a la
información. Este acceso afianzaría no sólo el profesionalismo técnico veterinario en
estos países sino también su infraestructura administrativa, ya que el mismo no podría
funcionar en el vacío. Se sugirió que el personal del Servicio de Sanidad Animal de
FAO podría mantener un sitio interactivo de Internet donde se pudieran preguntar
y responder cuestiones relacionadas con la SPV en un tiempo aproximado de 48hs.
Habría también una urgente necesidad de paquetes de entrenamiento electrónico en
zoonosis, inspección de alimentos, etc. Sin embargo, hubo una manifiesta preocupación
(Dr. B. Gummow, contribución 4) ya que hasta el presente, especialmente para muchos
países africanos, el acceso a Internet es dificil en términos de demora y costos. No se
prevee resolver estos problemas a corto plazo por lo que no se debe dejar de lado el
material educativo basado en textos escritos suplementados por CDs.
Varios participantes de la conferencia plantearon cómo hacer que la información
importante y actualizada en SPV esté fácilmente disponible para aquellos con una
“necesidad de saber”. Por ejemplo el Dr. R. Jackson (contribución 40) citó el ejemplo
del recientemente publicado Manual de Equinococosis en Humanos y Animales de
la OMS/OIE (Eckert et al., 2001). Esta es una recopilación exclusiva y actualizada de
todo lo ahora conocido acerca de esta enfermedad. A pesar de estar disponible para
la compra, dadas las dificultades para aquellos que trabajan en los PVD para obtener
moneda extranjera, debería estar disponible online (como con todas las publicaciones
de OIE) en el sitio de red de la OIE.
El Dr. A. El Idrissi (contribución 44) advirtió que las bibliotecas técnicas y
científicas en los PVD no estan en condiciones de mantener subscripciones a muchas
publicaciones. Las cuales pueden llegar a un valor tan alto como US$ 1500 por año.
Mientras que algunas publicaciones relacionadas con la SPV están actualmente online
86 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

sin cargo (FreeMedicalJournals.com, 2001) otras limitan el acceso de los números


actuales a los subscriptores y otras no son accesibles electrónicamente.
Varios participantes plantearon el tema de cuán actualizada y exacta era la información
en sitios de red específicos de enfermedades zoonóticas. Este problema no está confinado
solamente a estos sitios. La información frecuentemente es requerida rápidamente y
hay muy poco tiempo para reveer la literatura original. En general, los sitios de red
gubernamentales y pertenecientes a universidades tienden a ser más confiables que
otros sitios. Se espera que en un futuro, un proceso de revisión científica como el
utilizado para las publicaciones, será eventualmente aplicado para la categorización de
sitios en red. Las publicaciones originales usualmente no están disponibles ni tampoco
son inmediatamente aprovechables para su aplicación práctica.
Actualmente existen listas de servidores que proveen información valiosa y
actualizada en SPV y zoonosis. Algunas tienen membresía restringida mientras
otras son abiertas al público general. Probablemente la más ampliamente reconocida
sea ProMEDmail multilingüe (International Society for Infectious Disease, 2001),
establecida para difundir y alertar sobre la prevención temprana de enfermedades
emergentes en humanos, animales y plantas, así también para actividades de
identificación de enfermedades ocasionadas por armas biológicas y actividades bio-
terroristas. ProMED posee un número de categorías específicas de listas incluyendo
ProMED-Ahead la cual está focalizada a salud animal y enfermedades emergentes
en animales. ProMED posee la ventaja distintiva de inmediatez, de la cual carecen las
publicaciones impresas. También se enumeran en este sitio de red una lista de vínculos
con otras listas de servidores y sitios de red reportando informes de epidemias a medida
que se presentan.
En síntesis, las habilidades en la administración de la información deben reemplazar
la memorización y la intuición en la toma de decisiones en SPV.

5. Programas coordinados y sustentables para vigilancia humana y veterinaria de


zoonosis y peligros relacionados a animales
La epidemiología debe ser claramente usada como una guía primaria para las políticas
de SPV basadas en la prevención. La vigilancia es uno de los temas claves y es definido
como el “examen anticipado de todos los aspectos de presentación y propagación
de una enfermedad pertinente al control efectivo, la prevención y la erradicación”.
Desafortunadamente en muchos países, la recolección de datos de animales y humanos
relacionados a zoonosis son llevados a cabo casi independientemente y con resultados
previsiblemente insatisfactorios.
Los sistemas de vigilancia en muchos PVD se caracterizan por:
• Intento de recolección de demasiada información acerca de muchas enfermedades
y condiciones
• Carencia de uniformidad y mucha complejidad en formularios
• El personal local tiene una vaga idea, o no la tiene, acerca de la utilización de los
datos de vigilancia por falta de retroalimentación en la información
• Es posible que el personal local acepte enfermedades endémicas como parte del
“status quo” y no las reporte. No obstante ellos deberían reportar inmediatamente
cualquier cambio en dicho “status”
• Los datos son agregados y tabulados pero rara vez son analizados o interpretados
para la información específica necesaria en la práctica de SPV
Las dificultades en la obtención de información correcta, actualizada y reportes
sobre situación de enfermedades (transfronterizas y zoonóticas) en regiones de África
fue bien descripta por el Dr. S. Hailemariam (contribución 6) quien presentó dos temas
de particular consideración:
1. La obtención de información básica.
2. La pobre comunicación entre los Ministerios de Salud y Agricultura.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 87

Es necesario que la información sobre enfermedades zoonóticas sea de alta


prioridad en todos los niveles de la cadena administrativa y que sean establecidos un
entrenamiento consistente y una estandarización en el reporte de la información. Otra
barrera que desalienta la transparencia es la percepción de que el reporte de potenciales
brotes de enfermedades zoonóticas puede resultar en la prohibición del comercio de
ganado o afectar el turismo.
La recolección de datos epidemiológicos puede ser una tarea frustrante en los
PVD, especialmente si no existe una red de información real. Tal vez sea mejor limitar
las investigaciones a áreas donde existan equipos de trabajo que puedan operar con
eficiencia. El intento de expandirlos más allá del alcance de su eficiencia podría poner
en peligro la exactitud de las observaciones (Dr. E Rapoport, contribución 12).
El Dr. J. Crowther (contribución 8) comentó sobre el Proyecto de Cooperación
Técnica que la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) ha desarrollado para
la vigilancia de peste bovina en África. Este proyecto involucra todos los aspectos de
Tecnología de Información y Comunicación (TIC) comenzando con la enseñanza de
agentes entrenadores a través de paquetes específicos desarrollados para Internet y en
formato de CD. Este proyecto ha propiciado la recolección de buena información, ha
alentado equipos de trabajo, ha identificado la localización geográfica exacta de personas
y ha proporcionado un valor de tiempo real sobre los datos. El proyecto es también
apoyado por medio de implementos electrónicos de gran alcance así como también
tele centros donde el foco central es la enseñanza, el desarrollo y la diseminación de
la información. Este modelo pudo obviamente ser desarrollado y modificado para la
vigilancia de enfermedades zoonóticas.
El Dr. D. Allard et al. (contribución 38) enfatizó que un punto importante en
el intercambio de información en vigilancia de enfermedades, es asegurar que se
está utilizando un criterio similar en la recolección y recuento de datos. Esto es
establecido por el consenso y la aplicación de definiciones estandarizadas de casos,
brotes, incursiones, etc. y de modo similar para estadística descriptiva como razones,
proporciones, porcentajes, etc. Esta armonización se logra mejor mediante la adhesión
a estándares desarrollados por organizaciones internacionales tales como la OIE y la
OMS. La capacidad de desarrollo para una vigilancia coordinada como el reclutamiento
de personal, entrenamiento, equipamiento, redes y coordinación es también crítica y
usualmente será necesario un contribuyente financiero internacional/bilateral.
El objetivo primario de la vigilancia en los PVD debería ser la detección de
incrementos significativos en la incidencia/prevalencia de enfermedades, como
también de enfermedades emergentes y re-emergentes. La información procedente de
unas pocas fuentes confiables en lugar de una amplia cobertura proveniente de aportes
menos confiables generalmente permitirá que la vigilancia alcance estos objetivos.
Debido a esto, los recursos y el entrenamiento deberían concentrarse en unas pocas
áreas estratégicamente localizadas y estos centros deberían entonces probar y construir
sus redes basadas en las condiciones locales.
Varios participantes identificaron la carencia de epidemiólogos entrenados, quienes
son personal crítico para el funcionamiento de cualquier sistema de vigilancia conjunta.
Los servicios orientados y los programas ministeriales de entrenamiento en el campo
epidemiológico podrían contribuir a la solución.
El Dr. Joshi (contribución 2) apoyó la amplia utilización de programas informáticos
tales como Epi Info y Epi Map los cuales están disponibles sin cargo y son también
accesibles en varios idiomas (Center for Disease Control and Prevention, 2001). Estos
programas pueden ser fácilmente adaptados para vigilancia local, nacional y regional.
Ejemplos de enfermedades zoonóticas que fueron citadas donde la vigilancia
coordinada debería ser valiosa incluyen: hidatidosis, encefalitis B japonesa y otras
infecciones arbovirales, leishmaniasis, brucelosis y tuberculosis. Además, deberían
continuar las tentativas de vincular los datos de sanidad animal y seguridad en alimentos
(Dr. Joshi, contribución 2).
88 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

Comentario del Moderador: Un buen ejemplo de epidemiología participativa


basados en la vigilancia en zonas con rabia en Kenya (Kitala et al., 2000) demostró que
el sistema tradicional de vigilancia pasiva subestimó la prevalencia de rabia en perros.
Después del asesoramiento de directores locales, una persona residente que trabajaba
en rabia fue contratada para publicitar el sistema. Se organizó una red de tratamiento
post exposición al virus de la rabia y esto alentó la continua participación del público
en el reporte de casos sospechosos. También se contrataron escolares para conducir un
censo canino.

6. Investigar temas (y potenciales fuentes de financiamiento) donde el conocimiento


de la biología y epidemiología de las zoonosis (especialmente emergentes y re-
emergentes) y otros problemas relacionados a SPV son inadecuados
La investigación de los impactos de las interacciones humanos-animales-medio
ambiente y el mejor entendimiento de las múltiples interfaces entre esas tres áreas
fue apoyada por varios participantes de la conferencia. El concepto de “ecosistema
sano”, su relación con la SPV y zoonosis y la actual necesidad de investigar fue el tema
presentado por el Dr. Waltner-Toews (contribución 20). Esta metodología adaptable
para la sustentabilidad del ecosistema y salud (AMESH) involucra trabajar con
comunidades locales para definir grupos de interacción de temas tales como medios
de vida, medio ambiente, Salud Pública y economía general del desarrollo (Waltner-
Toews, 2001).
Los méritos de una metodología “vertical” sobre una “horizontal” para el control de
enfermedades zoonóticas fue un tema de considerable discusión, utilizando como un
ejemplo la equinococosis quística. La metodología vertical, considera la equinococosis
quística, como una infestación parasitaria con un agente causal (Echinococcus
granulosus), un huésped definitivo (el perro) y huéspedes intermediarios (usualmente
ovejas y también otros animales en pastura). La metodología horizontal definida por
el Dr. A. Mantovani (contribución 32), considera a la equinococosis quística, como
un complejo en el cual intervienen muchos componentes, además del agente causal
y los huéspedes, incluyendo el medio ambiente adecuado y las condiciones sociales
necesarias para la perpetuación del ciclo biológico. De esta forma, la metodología
horizontal tiende a ver los problemas en un contexto global, incluyendo la educación
sanitaria, diagnóstico, control, mejoramiento sanitario, inspección de alimentos y
cuidado de la salud primaria. El Dr. Schantz (contribución 41) planteó que mientras
que la metodología horizontal para el control de enfermedades zoonóticas siempre es
beneficiosa y reduce la transmisión, no ha sido efectiva en la reducción permanente
de la infección en huéspedes humanos y animales. El argumenta que las metodologías
verticales directamente apuntan al parásito, utilizando poblaciones de perros controles
y tratamientos sustentados por educación para la salud en la comunidad, y que éstas
han sido exitosas en algunas situaciones. Por ejemplo la equinococosis quística ha sido
esencialmente eliminada de Nueva Zelanda y Tasmania, y reducida significativamente
en Chipre, Uruguay y regiones de Chile y Argentina (Eckert et al., 2001).
Desde que los programas anteriormente citados comenzaron, los resultados de
las investigaciones, han mejorado ampliamente la tecnología para el control de esta
zoonosis. Existen drogas efectivas para tratar estadios adultos del parásito en perros
infectados, así como tratamientos eficaces para casos humanos. Se ha desarrollado una
vacuna efectiva para la prevención de estadios larvales de la infección en huéspedes
intermediarios para animales y humanos (Dr. M. Lightowlers, contribución 1).
El principal crédito en el progreso de la investigación debiera darse al Grupo Informal
de Trabajo sobre Equinococosis creado en 1985 bajo el auspicio de la OMS, que tuvo
como objetivo la promoción científica, intercambio y cooperación en investigación y
métodos de control. A pesar de no ser directamente financiada por la OMS, el grupo
permitió que profesionales de muchos países con un enfoque progresista para la
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 89

discusión y coordinación de la investigación pudieran interactuar. Este es seguramente


el modelo que podría ser usado en otras zoonosis de importancia.
Algunos participantes indicaron que los PVD no deberían ser excesivamente
influenciados por los problemas actuales de los países desarrollados, sino más bien
dirigir sus investigaciones a problemas prácticos de su propio país o región.
Se aconsejó (Dr. D. Joshi, contribución 2) que donde sea posible se aplique la
metodología de Acción Participativa en Investigación (API). La misma aspira a escapar
de las relaciones de dependencia y restituir a las personas la habilidad de transformar
su propio mundo. Están implicados: la investigación colectiva, la recuperación de la
historia, la apreciación del folklore cultural y la difusión de los nuevos conocimientos
en forma escrita, oral y a través de imágenes visuales. Este es solamente uno de los
varios ejemplos de participación usado en investigación y extensión agraria en los PVD
(Scoones y Thompson, 1994).

7. Programas prácticos y realistas para mejorar la seguridad de los alimentos y el


agua de contaminaciones causadas por patógenos zoonóticos
Mientras algunos países desarrollados cuentan con datos adecuados acerca del impacto
de las enfermedades transmitidas por alimentos, es dificil hasta el momento obtener
estadísticas similares en los PVD debido a la falta de recolección de datos confiables,
por la carencia de un sistema de vigilancia. Sin embargo desde que los PVD comenzaron
a participar en el comercio internacional de alimentos, debieron desarrollar sistemas
de seguridad de alimentaria científicamente fundamentados, los cuales terminarán
beneficiando a sus propias poblaciones.
La Asociación Mundial Veterinaria ha adoptado recientemente la siguiente política:
(Dr. H. Scheneider, contribución 14): “los proyectos o acciones orientadas a la
reestructuración de los servicios de Salud Pública, deberían considerar que veterinarios
con conocimientos en SPV e higiene son capaces de llevar a cabo importantes servicios
en el área de higiene y seguridad de los alimentos”.
Una sugerencia fue que tanto los talleres regionales como nacionales deberían
organizarse solamente con participantes locales, para de esta forma poder identificar
sus necesidades y prioridades. De estos talleres deberían desarrollarse proyectos con
responsabilidades específicas fijadas para intereses individuales. (Dr. Joshi, contribución
2). Los talleres son también necesarios para quienes toman decisiones con el objeto de
poner la SPV en el plano de la Salud Pública. Se citó un ejemplo del exitoso concepto
“de la granja al tenedor” que se está usando actualmente Nambia, para exportar carne.
Uno de los comentarios fue que en muchos de los PVD la responsabilidad de
la inspección de la carne y los alimentos es una función del Ministerio de Salud. El
entrenamiento de los inspectores sanitarios, especialmente aquellos empleados por
autoridades municipales locales, es frecuentemente mínimo o ausente en áreas generales
de seguridad de alimentos en SPV.
Los Códigos de buenas prácticas de elaboración, Puntos Críticos de Control y
Análisis de Riesgo (HACCP) y otros sistemas similares de auditoria están siendo
introducidos ampliamente en los países desarrollados y también para los sectores
exportadores de los PVD. Su objetivo primario es reducir la contaminación de patógenos
transmitidos por la carne tales como Salmonella y E. coli O 157:H7. El desarrollo e
implementación de sistemas HACCP es costoso y requiere habilidad, entrenamiento
y organización. En algunos países desarrollados donde la faena, la inspección y los
sistemas de procesamiento están precariamente organizados y dirigidos, los programas
de HACCP a nivel de procesamiento son difíciles de desarrollar e implementar. En estas
circunstancias, el Dr. J. Butterweck sugirió que la implementación de esos sistemas a
nivel de las granjas en los PVD sería aún más dificultoso, especialmente si los incentivos
son insuficientes. No obstante, varios participantes indicaron que de todas formas, en
los PVD deberían hacerse los mejores esfuerzos para educar a los granjeros acerca de
90 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

los códigos de “buenas prácticas” en la granja y en los canales de comercialización para


ganadería, aves de corral y pesca.
El Dr. McCrindle (contribución 17) claramente recalcó las dificultades experimentadas
en el mejoramiento de la seguridad de los alimentos en áreas rurales, peri-urbanas y
asentamientos de Sudáfrica. Las enfermedades diarreicas son generalmente prevalentes
en niños de áreas en desarrollo y rurales. En este caso es difícil estimar cuanto puede ser
atribuido a la ingesta de leche o carne contaminadas. La mayoría de las veces concurren
a clínicas locales, donde los tratamientos son suministrados por enfermeras y son muy
pocos los casos que quedan registrados. Las causas de muertes humanas en zonas
rurales, no son frecuentemente investigadas, así como los exámenes post-mortem no
son culturalmente aceptables y también existe un alto nivel de VIH/SIDA.
Generalmente menos de un 50% del ganado es faenado en mataderos y esta carne es
vendida a través del sector minorista o exportada. Para esos mercados, los estándares de
HACCP deben ser apropiados, pero en el circuito informal donde se faenan animales
(especialmente pequeños rumiantes) tanto en los hogares como en las carnicerías
locales, las carcazas generalmente no son inspeccionadas y los animales pueden ser
consumidos aún después de haber muerto por otras causas. Los granjeros tienen pocos
incentivos para unirse al sector de comercialización formal de carnes, ya que los gastos
pueden llegar a alcanzar hasta un 22% del precio de venta. El Dr. McCrindle mencionó
que el principal enfoque debe apuntar a la vacunación contra el ántrax, la prevención
del consumo de animales que murieron de otras causas y una adecuada cocción de la
carne.
El Dr. D. Waltner-Toews (contribución 20) cree que hay razones teóricas y prácticas
para prestar atención a otros sistemas aparte de los HACCP etc. en el circuito informal
de alimentos en los PVD. Comentó que ha desarrollado una metodología adaptativa
para el sustento del ecosistema y la salud (AMESH) en la cual las comunidades locales
son asistidas para definir grupos interactuantes en temas tales como el medio ambiente,
la Salud Pública y economía del desarrollo.
En los PVD, las enfermedades zoonóticas contraídas a través de la ingesta de
derivados de la carne de animales que murieron de ántrax es reconocible, pero agentes
zoonóticos como E. coli O157:H7 o Campylobacter sp. que no son necesariamente
patógenos para los animales, no son reconocidos ya que el vínculo con los humanos no
queda claro. Actualmente el estado de estos patógenos en la mayoría de los PVD no está
adecuadamente documentado. Por ejemplo: un reciente estudio de campilobacteriosis
en PVD (Cooler et al., 2002) demostró que la infección fue primariamente confinada
a niños de menos de dos años de edad, a menudo acompañada por otros patógenos
entéricos y no era estacional. Los factores de riesgo para los más jóvenes fueron: la
exposición, la higiene inadecuada y la proximidad a los animales. Se puede predecir
una elevación de los casos de campilobacteriosis en individuos adultos VIH positivos
en PVD.
El Dr. Klinger orientó su discurso a la temática de las matanzas no inspeccionadas
o ilegales de animales en PVD. Las causas de las mismas son variadas e incluyen los
hábitos alimentarios de una población (gente que suele alimentarse solamente de sus
propios animales y no confía en nadie más para que los faene). Otra razón se refiere a
las religiones islámica y judía cuyas leyes requieren que los animales sean sacrificados
de acuerdo a métodos ya establecidos. Por último la carne proveniente de faenas ilegales
es menos costosa que la carne que ha sido inspeccionada. La solución a estos problemas
no es sencilla pero debe incluir:
• La ejecución de las leyes veterinarias
• La compra por parte de la población de carne inspeccionada e identificada por
establecimientos autorizados
• Educación en Salud Pública respecto a agentes infecciosos comunes, residuos de
drogas, metales pesados y otros contaminantes del medio ambiente.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 91

8. ¿Cómo la toma de decisiones en los programas de SPV puede hacerse más


transparente y consistente con los valores sociales en contra de la complejidad, la
incertidumbre y la diversidad de la opinión científica?
Varios profesionales sugirieron que tanto las organizaciones no gubernamentales como
las universidades deberían tener un rol activo en la toma de decisiones. Se observó que
estas entidades están mejor informadas acerca de cómo se debería trabajar a nivel local
y cuáles serían las posibles fallas. La toma de decisiones siempre debería involucrar
comunidades representativas, quienes deberían ser invitadas a los eventos científicos
donde se demuestre la importancia y las consecuencias de las enfermedades además de
la necesidad de un control justificado. Para auxiliar a este proceso en áreas rurales la
comunicación a través de redes es verdaderamente necesaria.
El Dr. D. Allard et al. (contribución 38) citó un informe canadiense (Science Advice
for Government Effectiveness, 1999) en el cual se definieron varios principios que
pueden mejorar la toma de decisiones científicamente fundamentadas. La “Asesoría
científica” se define como un valor adicional para la conducción derivado de teorías
científicas, datos, hallazgos y conclusiones proporcionados para informar sobre
políticas y regulaciones en la toma de decisiones. A continuación se resumen los
siguientes seis principios:
• Identificación: se refiere a la identificación temprana de una situación en la cual se
requieren recomendaciones científicas.
• Cobertura: Es necesario que las recomendaciones científicas provenientes de fuentes
externas e internacionales sean seleccionadas a partir de un amplio rango de recursos,
incluyendo el conocimiento tradicional de los habitantes locales. Si es necesario,
podría apelarse a agencias independientes y paneles asesores, especialmente en
casos significativamente inciertos, donde hay diversidad de opiniones o si hay áreas
sensibles donde son importantes las políticas confidenciales.
• Ciencia cierta y Asesoría científica: Es necesario construir dentro del proceso
de asesoría científica: calidad, confiabilidad y una mirada crítica. Los asesores
científicos deberían contribuir con información científica verdadera y no alterada
por otras consideraciones políticas.
• Riesgos e incertidumbre: La política científica pública siempre contiene algunas
incertidumbres y frecuentemente un alto grado de riesgos, los cuales deben ser
evaluados, comunicados y controlados. Como tal, es importante adoptar una
metodología del manejo de riesgos.
• Transparencia: Se espera que los gobiernos democráticos adopten el proceso de
toma de decisiones de manera transparente. Esto implica una clara articulación en
la forma en que son tomadas las decisiones, cómo las políticas son presentadas en
foros abiertos y cómo el público tiene acceso a los hallazgos y recomendaciones
científicas de manera temprana.
• Revisión: Esta debe incluir dos elementos a) revisiones secuenciales de decisiones
científicamente fundamentadas, para determinar si los recientes avances en
el conocimiento impactan la ciencia y los consejos científicos utilizados para
informar la decisión, y b) evaluación del proceso de toma de decisiones.
Una vez que las decisiones han sido tomadas y adoptadas su adhesión y
responsabilidad deberían ser monitoreadas así como también su efectividad.
La adopción de estos principios en el total de toma de decisiones en SPV puede
significar un desafío en PVD, donde es común un proceso de toma de decisiones
centrales y jerárquicas. No obstante, los veterinarios deberían asegurarse que sus
consejos sean propuestos y escuchados.

9. La necesidad de una justificación económica atinada para programas de control


y erradicación de enfermedades zoonóticas
Los programas de control de enfermedades del ganado en PVD y PT son frecuentemente
establecidos basándose en su importancia económica. El resultado de un programa
92 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

de control de una enfermedad zoonótica puede que no sea seriamente considerado,


especialmente si ésta no representa aparentemente un impacto sobre la sanidad animal
y la producción. Existe claramente la necesidad de definir mejor el impacto económico
de las zoonosis y otros problemas en SPV.
El Dr. Sharma (contribución 24) aseveró que hay una verdadera necesidad por parte
de los PVD de desarrollar justificaciones económicas para sus programas de control
de zoonosis. Donde hay limitados recursos financieros, deberían utilizarse modelos
informáticos flexibles para estimar las pérdidas económicas directas e indirectas,
incluyendo también el efecto sobre las poblaciones animales y humanas. Estos modelos
deberían estimar índices de “costo-beneficio” y “tasa interna de retorno”. Los modelos
deberían ser también lo suficientemente flexibles para incorporar variaciones en las
prácticas de manejo animal y otros parámetros similares. Aquellos quienes toman las
decisiones, los prestamistas, y la población en riesgo deben estar siempre informados
de las pérdidas actuales causadas por enfermedades zoonóticas, especialmente si la
cooperación se extiende a largo plazo.
El Dr. J. Zinsstag (contribución 28) afirmó que la producción de ganado es mucho
más que un tema económico. El mismo requiere ser considerado más ampliamente
dentro del plano ecológico, etológico, social y ético (Zinsstag, 2001). Si los veterinarios
en SPV, están para evitar incidentes en un futuro como el de BSE, deberán jugar un rol
significativo en la formulación de nuevos conceptos de producción ganadera.

10. Dado el rol integral que la participación comunitaria tiene en la determinación


del éxito o el fracaso en las actividades de SPV, cómo pueden ser efectivos estos
programas a nivel local?
El Dr. J Boomker (contribución 26) utilizó la cisticercosis humana (T. solium y T.
saginata) para ejemplificar aquellas zoonosis en las cuales los problemas básicos son
culturales más que cuestiones técnicas. Se citaron ejemplos de lugares donde a pesar de
haber sido dadas demostraciones sobre la cocción de la carne y el uso de los primitivos
baños, nada cambió seis meses después cuando se visitó nuevamente el lugar. También
se describieron otros ejemplos de fracaso en la educación sanitaria. Obviamente estos
fracasos indican que las metodologías de extensión necesitan ser reconsideradas. Las
actitudes y prácticas intuitivas de cualquier comunidad con respecto a una determinada
enfermedad zoonótica probablemente lleven al fracaso. La Acción Participativa en
Investigación o técnicas similares descriptas anteriormente (pregunta 6) son necesarias
para corregir estas deficiencias. A menos que las personas quieran cambiar e intenten
que ello suceda, ninguna mejora ocurrirá.
Se han hecho varios intentos para proveer servicios de sanidad animal y humana
simultáneamente a personas nómades, porque a menudo los servicios de sanidad
animal, tales como campañas de vacunación, parecen tener una mejor cobertura. Al
mismo tiempo pueden llevarse a cabo encuestas coordinadas acerca de infecciones
zoonóticas en poblaciones aisladas (Zinsstag et al., 2000; Schelling et al., 2002).
Se recomendó la iniciación de proyectos piloto utilizando comunidades implicadas,
así como también una cuidadosa revisión y evaluación de los mismos antes de su
implementación a gran escala (Dr. D. Allard et al., contribución 38).
Varios participantes afirmaron que los niños y especialmente los jóvenes deben ser
informados de las actividades de SPV y entrenados donde sea apropiada su participación.
Los diferentes conocimientos en hombres y mujeres acerca de la producción ganadera
y la manipulación de alimentos pueden incrementar la efectividad de los programas de
SPV a nivel local. Este tema es discutido más detalladamente por el Dr. B. Miller en
respuesta a la pregunta 18 (contribución 37).
Comentario del Moderador: las comunidades deben ser informadas regularmente
acerca del progreso y los logros alcanzados por los programas de SPV utilizando los
medios de comunicación locales. Si ellas están informadas, son parte de la acción y
contribuyen a la misma. También aumenta la posibilidad de la existencia de controles.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 93

Mientras la participación de la comunidad es ampliamente promovida como un


importante rasgo para contribuir en proyectos de PVD, el resultado no ha sido del
todo exitoso. Los proyectos que alientan una participación interactiva y la inherente
movilización de los recursos, seguramente serán sustentables (Catley y Leyland,
2001).

11. ¿Cómo pueden prestar un mejor servicio los centros de colaboración,


corporaciones universitarias e institutos de investigación a las necesidades en SPV
de los países en desarrollo?
El Dr. Joshi (contribución 2) recomendó que problemas específicos en SPV en PVD
que requieren ser investigados, deben desarrollarse en universidades (tanto dentro
del país como fuera de él) en conjunto con organismos no gubernamentales. Podría
entonces apelarse a potenciales donadores para el financiamiento de proyectos. Una
vez que el proyecto es financiado, la facultad y los estudiantes de la universidad pueden
trabajar conjuntamente con los pobladores locales. Él citó el ejemplo de su propio país
(Nepal) donde se llevaron a cabo proyectos que involucraron a las Universidades de
Tufts, Washington State, Colorado State y Guelph de América del Norte.
El Dr. J. Zinsstag (contribución 28) sugirió que probablemente sea óptimo el
desarrollo de estrechas sociedades de investigación Norte-Sur, donde los investigadores
del Sur trabajan con grupos de investigación del Norte por cortos períodos sin
desestabilizar los lazos sociales e institucionales en sus propios países. De este modo
investigadores con menor infraestructura, podrían fomenta y mejorar el trabajo en su
propio países.
El Dr. M. Kachani (contribución 41) identificó las siguientes áreas donde los centros
de colaboración, corporaciones educativas e instituciones de investigación podrían ser
más efectivas:
• Conducción apropiada de la investigación aplicada para responder a cuestiones
prácticas que sirvan a las necesidades de PVD.
• Remisión de los proyectos en desarrollo propuestos sobre programas de control y
erradicación a organizaciones internacionales y donatarios.
• Provisión de expertos para resolver problemas técnicos de áreas particulares.
• Organización de programas de extensión en conjunto con servicios de extensión
local.
• Entrenamiento de miembros locales de organizaciones no gubernamentales y de
trabajadores de la salud pertenecientes a la comunidad en actividades relevantes y
prácticas necesarias de acuerdo a los riesgos y necesidades de la población local.
• Organización de conferencias y talleres para actualizar el conocimiento científico
involucrado en los programas de SPV.

C. ORGANIZACIÓN Y DIRECCION DE PROGRAMAS DE SALUD PÚBLICA


VETERINARIA

Dado que la SPV es esencialmente una actividad de “bien público”, definida como
“las contribuciones al bienestar físico, mental y social de los seres humanos mediante
la comprensión y la aplicación de la ciencia veterinaria”

12. ¿Cómo pueden los gobiernos, que están privatizando activamente sus servicios
veterinarios, ser persuadidos para retener los servicios básicos para asegurar
que las comunidades estén protegidas de enfermedades zoonóticas, infecciones
transmitidas por agua y alimentos y otros problemas del medio ambiente que
pueden ser asociados a animales o a la producción ganadera?
Los bienes públicos son aquellos de los cuales todos se benefician y a nadie puede ser
negado su acceso. Estos incluirían actividades tales como la cuarentena, la vigilancia de
94 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

enfermedades e inspección de carnes y alimentos, que es la actividad mejor suministrada


por el Estado. Los bienes privados son aquellos de los cuales se benefician solamente
individuos o grupos de ellos y no son experimentados por el total de la comunidad.
Los servicios clínicos son un ejemplo de bienes privados porque el único beneficiario
es el propietario del animal que recibe la atención médica. No todos los servicios de la
sociedad pueden ser claramente categorizados como bienes exclusivamente públicos o
privados. Por ejemplo la vacunación de perros contra la rabia, no solamente protege al
perro, sino también a otros animales y humanos.
Aquellas funciones que proveen las herramientas y medios necesarios para la
protección de la salud de las personas de un país y de sus animales salvajes y domésticos
no deben ser privatizadas. (Dr. D. Allard et al., contribución 38). Sin embargo
parece haber un acuerdo generalizado en que los servicios clínicos veterinarios,
especialmente para la ganadería en PVD, continuarán siendo privatizados, como
también suministrados por cooperativas pertenecientes a los propios granjeros. Los
ahorros en recursos financieros y mano de obra deberían ser usados para consolidar
la administración y el servicio de entrega de infraestructura (actividades de bien
público). Estas podrían incluir programas para el control de enfermedades, servicios de
vigilancia epidemiológica, control de calidad y registro de biológicos. Hubo también
opiniones acerca de que los servicios de investigación deberían ser llevados a cabo por
instituciones gubernamentales, preferiblemente en colaboración con universidades y
organismos no gubernamentales.
La Asociación Mundial Veterinaria (contribuciones 21 y 25) adoptó una política de
reestructuración de los servicios de Salud Publica en que interviene la ciencia veterinaria.
Esta política reconoce la contribución vital que los veterinarios pueden hacer a la Salud
Pública especialmente en el área de seguridad de alimentos. Reconoce también que el
control de las enfermedades en las fronteras y la seguridad de los alimentos son “bienes
públicos” porque tienen alcance multidimensional y en PVD no pueden delegarse a
los sectores privados con fines de lucro. De todas maneras los veterinarios privados
así como las asociaciones veterinarias pueden tener un rol importante en programas
de control de enfermedades en las fronteras, reportes coordinados de enfermedades,
distribución de información y desarrollo profesional.
Los servicios veterinarios básicos como diagnóstico de tuberculosis y brucelosis,
inspección de carnes y cuarentenas no deben ser privatizados (Dr. J. Calder,
contribución 19).
El Dr. H. Schneider (contribución 14) enfatizó que como muchos países africanos
derivaron algunas de sus funciones a los veterinarios privados, existe una oportunidad
para emplear estos individuos para que trabajen media jornada en la inspección de
carnes u otras actividades de SPV y de esta manera ampliar sus ingresos.
Se recomendó para los gobiernos de los PVD la siguiente publicación: “Guiding
Principles for Planning, Organization and Management of VPH Programmes” (FAO,
1990).

13. ¿Cómo puede tornarse más activa y beneficiosa la colaboración a niveles


nacionales, provinciales y locales entre ministerios de salud y agricultura,
incluyendo a médicos y veterinarios?
Existe un consenso general para proponer que los Comités de Control de Enfermedades
Zoonóticas deberían ser multidisciplinarios incluyendo a médicos, veterinarios,
epidemiólogos, sociólogos y otros profesionales como así lo requiera tanto el gobierno
como las ONG. Otra condición deseable es que la comunidad se sienta representada. La
importancia de los Sistemas de Investigación en Salud y de la colaboración intersectorial
con la SPV fue destacada en un reporte de Asesoramiento de la OMS (OMS, 1989).
Mediante la introducción de leyes o regulaciones para el control de las enfermedades
zoonóticas, los propietarios de animales, los fabricantes de productos animales,
los veterinarios y médicos podrían ser más responsables en los PVD. Mediante la
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 95

introducción de grupos de trabajo formados con representantes de los gobiernos


central, local y provincial, quienes tienen un interés participativo en la SPV y zoonosis,
la expectativa sería que todos ellos trabajaran de una manera productiva y en plena
colaboración (Dr. G. K. Sharma, contribución 24). Se sugirió conducir un “experimento
piloto” con cooperación técnica de un organismo internacional como la OMS o FAO,
cuando se encuentren dificultades en la preparación de programas de SPV ya sea dentro
del Ministerio de Salud o de Agricultura (contribución 27, Dr. G. Togo).
El Dr. B. Gummow (contribución 4) atrajo la atención a la situación en Sudáfrica
donde los Departamentos de Salud y Agricultura raramente trabajan en forma conjunta.
Él también cita el ejemplo de un reciente reporte del Municipio de Investigación
Médica que muestra que el 40% de las personas reproductivamente activas son VIH
positivas. Aún no parece haber ningún plan claro para asegurar que las políticas de
SPV son incorporadas dentro de los programas de control y prevención del VIH.
El entrenamiento de los estudiantes de medicina para reconocer zoonosis comunes
como la brucelosis, la fiebre Q, la fiebre producida por la picadura de garrapata, la
leptospirosis y psitacosis, es mínimo y todas estas enfermedades pueden ser fácilmente
confundidas con el diagnóstico de malaria.
Otra complicación es que las autopsias raramente son llevadas a cabo. Es muy
probable que en el futuro haya más infecciones zoonóticas. Esto es porque casi el 50%
de las poblaciones de los PVD vive en áreas rurales donde el contacto con los animales
es mucho más esperado. Ellos viven bajo pobres condiciones socioeconómicas y están
inmunocomprometidos a causa de infecciones con el VIH.
Otro ejemplo de falla de comunicación entre los Departamentos de Salud y
Agricultura es la usual situación de las personas que reciben el programa completo de
profilaxis de post exposición a rabia a pesar que los perros en cuarentena permanecen
sanos después de 10 días de observación. Estos son sólo dos ejemplos de la urgente
necesidad de cooperación entre las profesiones médica y veterinaria.
Los Ministerios de Salud en los PVD tienden a enfocar la atención en la prevención y
cuidado de la enfermedad como por ejemplo las vacunaciones infantiles y el VIH/SIDA.
Las zoonosis a menudo no captan la atención a menos que haya una gran epidemia.
La construcción de asociaciones efectivas con individuos en diferentes ministerios y
con diferentes disciplinas que puedan ocuparse de enfermedades específicas (como la
plaga, la rabia o la hidatidosis) es recomendada como un excelente comienzo (Dr. D.
Waltner-Toews, contribución 31). Más tarde estas iniciativas pueden ser expandidas y
erigidas para asegurar que el esfuerzo no es restringido a una enfermedad específica y
que ellas son usadas para reafirmar más el apoyo a la SPV. El uso eficaz de los medios
por profesionales que trabajan en SPV es altamente recomendado.
El Dr. A. Benkirane (contribución 34) sugirió que la acción más inmediata a
ser desarrollada en los PVD (donde las prioridades tienden a evitar que médicos y
veterinarios concentren sus esfuerzos en temas de SPV) es crear una sinergia entre
todos los involucrados. Una interfase bien identificada debe ser establecida en cada
país en desarrollo para que traten específicamente con estos problemas dentro de
su particular infraestructura administrativa. Tal interfase debería también existir
físicamente y ser organizada por el Ministerio de Salud o Agricultura o existir como una
entidad independiente. Otros Ministerios como el de Educación pueden también estar
involucrados si los escolares fueran un grupo destinado para un programa de SPV.
La FAO y la OMS, como así también otras organizaciones internacionales
involucradas en SPV, deberían trabajar en estrecha colaboración para asistir a gobiernos
de los PVD. Ellos deberían ayudarlos en preparar importantes unidades de SPV y
posiblemente conectar en red estas unidades sobre una base subregional o regional. La
Red Regional de Vigilancia y Control de Enfermedades de los Animales para África
del Norte, Medio Oriente y Península de Arábica (RADISCON) fue citada como un
ejemplo bastante exitoso de una organización de vigilancia en el área. Enfermedades
pilotos pueden ser investigadas durante el lanzamiento de unidades nacionales de
96 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

SPV, usando rabia e hidatidosis como modelos representativos. Estas enfermedades


son también más probables de utilizar para motivar a los médicos. Para alcanzar una
unidad de SPV completamente operativa, los recursos deberán ser reunidos y solamente
liberados si los que toman las decisiones responden a los más altos niveles.
Se sugirió que la comunicación y el compartimiento de información entre la
medicina humana y veterinaria podría ser alentada teniendo un centro de información
focal de enfermedades zoonóticas, así como también un servidor y un sitio en red (Dr.
K. Sato, contribución 10). El Dr. Allard y colaboradores (contribución 38) sugirieron
que los cursos de zoonosis y enfermedades transmitidas por los alimentos sean
enseñados conjuntamente por médicos y veterinarios y que las clases sean tomadas
en forma conjunta por estudiantes de medicina y veterinaria. La expectativa sería el
fortalecimiento de las relaciones laborales entre los dos grupos profesionales. En PVD,
también se sugirió que la cooperación entre los dos grupos podría ser alentada en áreas
rurales mediante la realización de campañas conjuntas de vacunaciones humanas y
veterinarias.
Otro ejemplo de la urgente necesidad de una colaboración más activa es la actual
controversia en relación al uso prudente de antibióticos por ambos profesionales.
Mientras en los países desarrollados la evidencia de resistencia a los antibióticos de
microorganismos de origen animal que infectan a humanos está tornándose más clara,
en la mayoría de los PVD la situación es desconocida. En esta área la Asociación
Mundial Veterinaria (AMV) ha tomado la delantera (Dr. J. Edwards, contribución 21)
al propugnar que los antibióticos terapéuticos deberían ser usados bajo la supervisión
de un veterinario, y solamente en aquellas situaciones donde un agente infeccioso
susceptible a terapia sea probable que esté presente.

14. Identificar recursos en países industrializados que podrían ser aptos para
mejorar los alcances de SPV y la construcción de instituciones en PVD
La contribución 29 del Dr. N. Neils-Ole Bjerregaard es un innovador ejemplo de
cooperación bilateral gubernamental y no gubernamental. Siguiendo a la recuperación
de su independencia en 1991, la Asociación Danesa Veterinaria ayudó a la profesión
veterinaria en Latvia mediante apoyo y contribuciones para la realización de una revista
veterinaria latvia, una conferencia anual veterinaria y el entrenamiento de veterinarios
de Latvia en Dinamarca. Este entrenamiento incluyó SPV. En casi todos los países
desarrollados existen organizaciones veterinarias bien organizadas que tienen los
recursos para colaborar con colegas de PVD al ayudarlos a estructurar la profesión y
mejorar donde sea necesario. Esto es especialmente crítico en países donde la seguridad
alimentaria es a menudo un problema, no obstante sea una precondición para el
comercio internacional de alimentos y suministros.
Fue también sugerido varias veces que las compañías que producen vacunas,
productos farmacéuticos y de diagnóstico para su uso en programas de control de
enfermedades zoonóticas deberían haber alcanzado a determinar si ellos serían capaces
de desarrollar una capacidad de SPV en PVD donde ellos pueden también vender sus
productos. Estas compañías ya han jugado un rol más importante, especialmente al
patrocinar campañas de extensión. Las organizaciones con expertos en comunicación y
la elaboración de materiales educativos son también recursos potenciales.

D. EDUCACIÓN, ENTRENAMIENTO Y EXTENSIÓN EN SALUD PÚBLICA


VETERINARIA

Dado que muchas escuelas de veterinaria en países en vías de desarrollo son


inadecuadamente financiadas, inadecuadamente provistas de personal y poco
equipadas para enseñar salud pública veterinaria tanto a nivel estudiantil como de
grado y que además participan en programas de extensión de la comunidad:
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 97

15. Sugerir cómo esta situación podría ser mejorada especialmente para incluir
los principios básicos de seguridad alimentaria, control de zoonosis y la salud
ambiental/de la comunidad
Mientras el plan de estudios de las escuelas veterinarias se encuentra cada vez más bajo
presión para incluir más material, la preocupación fue expresada en cuanto que no se
le dio suficiente alta prioridad a la SPV, especialmente en los PVD. Los profesores
invitados por veterinarios experimentados en varios campos de SPV deberían ser
alentados a ampliar las perspectivas profesionales de los estudiantes. Existe una
creciente aceptación de que no todos los estudiantes de veterinaria necesitan idéntica
educación. La inserción de los estudiantes en disciplinas de salud que es de su particular
interés, les ayuda a resolver el problema de la sobrecarga de información. Les permite
a los estudiantes modelar su educación en relación a sus aspiraciones y las expectativas
de las comunidades donde ellos trabajan.
Un número de participantes de la conferencia indicó que los programas de
intercambio de facultades entre universidades de países desarrollados y PVD deberían
ser emprendidos o expandidos. Programas como estos se comenzaron informalmente
hace varios años al usar una variedad de fuentes de financiación tales como las becas
Fulbright de Estados Unidos.
Se sugirió que el plan de estudios para la educación en SPV al nivel de estudiante
sea revisado y desarrollado sobre una base regional porque se reconoció que el énfasis
adecuado puede variar dependiendo de la región geográfica (Dr. G. Nasinyama,
contribución 18).
Una dificultad citada por un participante (Dr. B. Gummow, contribución 4) fue
que los estudiantes de veterinaria a menudo fallan en comprender la importancia de
su rol en controlar las enfermedades zoonóticas. Mientras ellos ven las enfermedades
clínicas animales, no ven rutinariamente los casos humanos asociados. Es por eso que
los estudiantes deberían estar en condiciones de diferenciar un caso de rabia en un
niño o un caso de tuberculosis en un adulto. Las autoridades médicas de enfermedades
infecciosas deberían considerar dar clases en su contraparte de veterinaria y viceversa.
El Dr. C. Wilks (contribución 22) describió un innovador método que es usado en
la enseñanza de SPV en Australia. Sobre la suposición que la SPV fue “la aplicación de
la ciencia veterinaria a la protección y promoción de la salud humana y el bienestar”, se
tomó la decisión de presentar un curso ampliado de SPV a partir de los 4 años de todo
el plan de estudios. Tradicionalmente el curso de SPV fue focalizado principalmente en
la inspección de la carne, pero ahora ha sido ampliado para incluir:
• control de calidad de productos de origen animal para cumplir con las expectativas
del consumidor;
• conocimiento de las causas, epidemiología y control de las enfermedades zoonóticas
y de las enfermedades emergentes;
• efectos adversos de la agricultura y otras actividades humanas sobre la calidad
alimentaria, el bienestar animal, la salud humana y el medio ambiente.
El modo de impartir el curso ha cambiado a un pequeño número de clases formales,
tutoriales y visitas de campo, que son utilizadas más para guiar a los estudiantes que
para instruirlos. Los objetivos específicos de aprendizaje son determinados para cada
año y los enlaces con otras materias que proveen el principal material son identificados.
Los estudiantes son estimulados para que usen determinados sitios de red. Bajo esta
nueva metodología, se requiere que los estudiantes reúnan una carpeta electrónica que
bosqueje, analice y discuta la información que se necesita para alcanzar los objetivos
anuales de aprendizaje. En un momento determinado, estas carpetas son revisadas y
evaluadas por un miembro responsable de la facultad. Las carpetas son desarrolladas
y ampliadas a lo largo de los cuatro años y en la graduación, proveen un documento
dinámico que puede continuar actualizándose y ampliándose de acuerdo a los intereses
del estudiante/veterinario y de las necesidades profesionales. En resumen, la SPV
debería ser vista por los estudiantes como una parte integral de la responsabilidad
98 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

veterinaria y de la educación. Es también considerado vital que los estudiantes


desarrollen habilidades para localizar, identificar, evaluar y cotejar información.
El Dr. B. Miller (contribución 37) propuso que el componente crítico de la SPV es
interactuar y entender las poblaciones humanas y sus relaciones con los animales. Una
población frecuentemente pasada por alto son las mujeres, ya sea como productoras
de ganado, como madres y como profesionales veterinarias. Está bien establecido que
los mensajes educacionales dados a los hombres relativo al trabajo de las mujeres son
raramente exitosos, por lo que el personal de SPV necesita de políticas, estrategias y
entrenamiento que alcancen tanto a las mujeres rurales como urbanas de los PVD. En
los PVD más del 40% de la mano de obra son mujeres. Esto significa un programa
educacional de SPV que incluya un mejor entendimiento del contexto social y un
examen del pensamiento del “género neutral”, en el cual el productor es asumido que
es hombre, culto y tiene la autoridad de tomar decisiones. La SPV es la rama de la
medicina veterinaria más relacionada con la sociología, a pesar de eso los veterinarios
graduados, tanto aquellos con o sin explícito entrenamiento en SPV, a menudo se
apartan de pensar sobre las dinámicas internas dentro de la familia y la comunidad,
temiendo incitar controversias. El personal de SPV es el agente para el cambio en los
PVD, y debe actuar responsablemente en ese rol.
La percepción de roles diferentes de hombres y mujeres en la producción de
ganado y manipulación de comida puede incrementar la efectividad de las campañas
educacionales de SPV. Por ejemplo, la campaña de equinococosis en Marruecos
apuntó a grupos de mujeres existentes para el entrenamiento en el manejo de carcasas
y saneamiento. El entrenamiento técnico del Proyecto Vaquillona en producción
lechera en Uganda es asignado para toda la familia, por lo que tanto las mujeres como
los hombres pueden asistir. Los mensajes sobre sanidad y pasteurización pueden ser
directamente transmitidos a las mujeres, quienes pueden implementarlos.
En todo el mundo el porcentaje de mujeres que ingresa a la profesión veterinaria
ha ido incrementándose a lo largo de la última década. Las mujeres profesionales
tienen una gran responsabilidad al contribuir con la SPV no sólo como veterinarias,
sino también como investigadoras, enfermeras veterinarias y como técnicas. Ellas
pueden proveer nuevas perspectivas e incrementar los servicios comunitarios a las
mujeres productoras. Sin embargo muchas mujeres encuentran dificultoso trabajar
en instituciones designadas para hombres, por lo que políticas relativas al cuidado de
personas, horarios flexibles, seguridad y hostigamiento, pueden ayudar a instituciones
de SPV y organizaciones a encontrar y retener mujeres profesionales. En resumen,
aunque el desafío de la SPV en los PVD es grande, la inclusión de la mujer es una forma
accesible de incrementar la efectividad de los programas.
El Dr. B. Olugasa en su contribución 30 describió un ejemplo de un curso de SPV
titulado “Introducción a la Salud Comunitaria”, usado en Nigeria. Esto fue dado en el
cuarto año de un programa de seis años y puso énfasis en los sistemas de SPV de ese
país. Los temas incluyeron la definición de SPV y discusiones sobre las zoonosis, el rol
de los mataderos, las pequeñas clínicas, los campos ganaderos y de aves y los grupos
familiares para la recolección de datos y estudios epidemiológicos, etc.
Comentarios del Moderador: Un ejercicio exitoso ha sido usado por muchos años
en la rotación clínica de SPV en la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad
de Minnesota en Estados Unidos. Donde todos los estudios se presentan junto con
un “verdadero” problema. Los estudios se basan en circunstancias en las cuales se les
pide asesoramiento a los profesores en situaciones que involucran Salud Pública ó
exposición a una fuente animal. Se espera que los estudiantes preparen una respuesta
escrita en forma de carta y defiendan sus consejos en presentaciones orales ante los
profesores y compañeros. Estos ejercicios basados en estudio de casos despiertan más
interés y participación de los estudiantes que cursos formales.
Se ha desarrollado recientemente un modelo para SPV/ Medicina Preventiva para
los colegios de medicina veterinaria de los Estados Unidos basado en una publicación
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 99

de la OPS “A Competency Based Curriculum for VPH and Preventive Medicine”


(Association of Teachers of Veterinary Public Health and Preventive Medicine, 1999).
No obstante, los colegios de veterinaria de PVD son estimulados a desarrollar un
programa de SPV para sus estudiantes que refleje las necesidades actuales y futuras en
sus propios países.

16. Cómo pueden los veterinarios que desean o están actualmente trabajando en
programas en SPV expandir sus conocimientos y experiencias a través de estudios
de posgrado o educación continuada?
Es crítico que cualquier tipo de curso que se desarrolle deberá estar bien planificado y
designado con una serie de objetivos de aprendizaje hacia las necesidades del individuo,
así como aquellas de su actual o futuro empleador. Otros principios para maximizar la
efectividad de la educación/entrenamiento deberá incluir:
1. La provisión de una asistencia financiera adecuada basada en la habilidad,
compromiso y la necesidad financiera.
2. Un compromiso de aprendizaje continuo del candidato, institución educacional
e institución de apoyo.
3. Un requerimiento para demostrar una necesidad y un plan para ser aplicados a
nivel básico antes de avanzar a un nivel más técnico.
4. Una obligación del candidato para ser catalizador de los cambios y mejorías de
la comunidad desde la perspectiva de SPV.
5. Una evaluación del rendimiento de un individuo.
6. Los participantes deberán hacer una crítica de los cursos ó programas para
asegurar se relevancia.
7. Se deberán desarrollar programas online o en Internet para asegurar la máxima
cobertura.
Tradicionalmente los veterinarios con interés en SPV y zoonosis han ido a América
del Norte, Europa ó Australasia para obtener un título profesional ó estudios a
nivel graduado. Se publicará una lista de instituciones educativas que ofrecen estas
oportunidades educacionales en el sitio de la red de la Conferencia (FAO, 2001).
La Dra. K. De Balogh (contribución 33) describió como ejemplo un curso de
Producción Animal y Salud Pública Veterinaria con duración de 3 meses que es
ofrecido por los profesores de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad
de Utrecht en Holanda (Ultrecht University, 2001).
Los participantes provenían de PVD y de Europa. Se hizo énfasis en proveer un
repaso intensivo y amplio de los diferentes aspectos de SPV, primariamente mediante
estudios de resolución de casos, presentación de tareas en grupos, y discusiones en
mesas redondas. Además de esto, y para alentar una mayor armonización del programa
de estudios de la carrera de Medicina Veterinaria, se desarrolló un módulo europeo en
SPV con una compilación de estudios de casos con otras 6 universidades europeas con
el financiamiento de la UE. Estos casos cumplen con un formato específico e incluyen
guías para estudiantes y profesores. Se desarrolló también un curso en SPV de 2 semanas
de duración a través de un trabajo en conjunto de 3 facultades europeas y 3 de África del
Este en un formato “entrenando los entrenadores”. Los programas de estudio en SPV
deberán tener la flexibilidad de poder utilizar los materiales/módulos que se encuentran
disponibles e introducir nuevas temáticas a medida que surjan. El programa WebCT
(WebCT.com, 2001) permite la creación de una clase virtual. Siguiendo la epidemia
de la infección del virus del Este del Nilo (VEN) en los Estados Unidos, un grupo de
estudiantes holandeses fueron contactados con profesores de la Universidad de Florida
para desarrollar un sitio para una red del VEN en Europa del Norte. Se hicieron otros
contactos con facultades de África del Sur, Brasil, Italia y Portugal mediante e-mail y
WebCT. Se organizaron incluso sesiones de conversación electrónica vía WebCT. Este
tipo de experiencias educacionales pueden ser desarrolladas sin necesidad de mayores
recursos y dependerá de la cooperación existente entre varias instituciones.
100 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

Mientras que hay un gran número de publicaciones excelentes en áreas generales de


SPV y zoonosis, muchas son inaccesibles para los veterinarios de PVD, primariamente
debido al costo. En el pasado las publicaciones de FAO, OMS y OIE estaban disponibles
para las universidades de los PVD en forma gratuita, pero esto aparentemente caducó.
Se adjuntará al sitio de la red de la Conferencia (FAO, 2001) la bibliografía de
publicaciones actuales, fuentes y disponibilidades.
El Dr. M. Abo-Shehada (contribución 15) describió lo exitoso que fue el curso que
se realizó en Jordania de una semana de duración en el cual se entrenó a veterinarios
y científicos biomédicos en el uso de la técnica de reacción en cadena de la polimerasa
(PCR) para diagnóstico. Esta es una técnica muy útil, de bajo costo para el diagnóstico
de zoonosis en PVD y que requiere equipamiento de laboratorio modesto.
El desarrollo de un Centro Nacional de Zoonosis con laboratorios asociados,
además de actuar como un recurso valioso del país, puede también servir como centro
de aprendizaje y desarrollo para veterinarios de programas de SPV (Dr. B. Olugasa,
contribución 30). Se pueden organizar además seminarios regulares y talleres que se
enfoquen en hallazgos epidemiológicos y medidas de control en situaciones tanto
rurales como urbanas.

17. ¿Cómo pueden ser aplicados programas de educación a distancia o técnicas


similares en países en vía de desarrollo?
Muchos participantes comentaron que las ayudas electrónicas para enseñar son muy
útiles y versátiles, y brindando respuesta a necesidades claramente definidas, pueden
realizarse incluso con las más modestas instalaciones. Actualmente se encuentra
disponible un amplio rango de software y recursos online acerca de SPV. Ejemplos
de esto incluyen el “Supercurso” de epidemiología (Computer-aided Learning in
Veterinary Education, 2001) y “Emerging Infections of International Public Health
Importance (Pitt.edu, 2001) descripto previamente. La Asociación de Profesores en
SPV y Medicina Preventiva de los Estados Unidos (ATVPHPM) también enlistó varios
recursos educacionales en su sitio de red (ATVPHPM, 2001).
En aquellos sitios en donde Internet no existe o se encuentra mal distribuida, el
escaso material puede almacenarse en discos movibles como CDs y así pueden ser
distribuidos e intercambiados.
El Dr. Abo-Shehada sugirió en la contribución 15 que cursos de SPV presentados en
CDs con la colaboración de organizaciones internacionales deberían estar disponibles
para instituciones educacionales en PVD. Algunas instituciones utilizan estas ayudas
interactivas como cursos completos. Los estudiantes o veterinarios deben acceder
a este material para obtener créditos y sólo ven a los tutores en la evaluación. Esta
metodología permitirá la participación de expertos de todo el mundo en la producción
de cursos en SPV y zoonosis. Estos cursos pueden ser almacenados en un sitio en
Internet de dominio público como FAO u OMS, para ser descargados cuando se
requieran. A largo plazo también se necesitarán versiones traducidas
Otras sugerencias incluyen establecer sitios de Internet específicos en donde pueden
ser dirigidas preguntas relacionadas a SPV y donde Internet puede ser usada para
realizar conferencias y programas de educación continuada, etc.

18. Dado que la necesidad primaria en la mayoría de los países en vía de desarrollo es
dirigido al cuidado de la salud humana y animal a nivel básico de las aldeas, ¿cómo
puede ser mejor utilizado un profesional entrenado para proveer estos servicios?
Varios PVD, ONGs y organizaciones cooperativas establecieron buenas infraestructuras
y ganaron la confianza de propietarios pobres y analfabetos de animales en sus áreas.
La participación de estas organizaciones en programas de SPV aparentemente incluiría
iniciativas de extensión y educativas para crear conciencia a niveles básicos. Esto
facilitará la participación de productores en estos programas. Estas organizaciones
desarrollaron una nueva clase de paraprofesionales: los trabajadores de salud animal
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 101

basada en la comunidad (Sherman, 2002). Estos individuos, con entrenamiento


apropiado, pueden tener un rol en extensión de SPV a nivel local. Se deberá poner
énfasis en la propuesta”entrenar a entrenadores”, teniendo en cuenta los hábitos socio-
culturales y costumbres del área.
El Dr. Sharma (contribución 24) sugirió que los servicios de los trabajadores pueden
ser mejor utilizados para proveer cuidado humano y animal a nivel básico de la aldea.
Esto puede ser realizado debido a sus conocimientos y entrenamientos en vacunación,
diagnóstico presuntivo y reporte a veterinarios ó médicos oficiales. La recolección de
datos podría también lograrse y por sobre todo, lograr la educación de los propietarios
de los animales acerca de la importancia de SPV, los riesgos involucrados y qué pasos
deben tomarse para evitarlos. La educación de los propietarios de los animales y de los
productores de productos animales es de importancia crítica porque sin un cambio de
sus actitudes y prácticas no se logrará nada substancial.
El Dr. Allard et al. (contribución 38) sugirió que los trabajadores para la salud de
las aldeas pueden recibir conocimientos y experiencias adicionales en el diagnóstico
y control de las zoonosis más prevalentes en PVD. Estos trabajadores tendrían
conocimientos biológicos necesarios para captar la información, y su accesibilidad a las
aldeas sería una ventaja para la identificación temprana y control de zoonosis no sólo
en humanos sino también en animales domésticos.
El Dr. E. Rapoport (contribución 43) recomendó que el entrenamiento de
productores y comunidad en PVD sería mejor si se llevara a cabo en forma lenta,
de manera que los receptores pudiesen asimilar más fácilmente los principios y otros
conceptos de manejo moderno. Los cambios necesarios son relativamente simples y
no necesitan de equipamiento electrónico ó técnicas sofisticadas. Son mejor llevadas a
cabo mediante la observación del instructor en sitios modelos como establecimientos,
frigoríficos, tambos, carnicerías, hogares, etc. Generalmente es necesaria al menos una
temporada de servicio completa (más ó menos un año entero) antes de que los métodos
nuevos sean bien asimilados en establecimientos ganaderos.

19. Dar ejemplos de comunidades innovadoras basadas en programas de SPV,


especialmente aquellas que involucran el acercamiento de las poblaciones rurales?
El Dr. Olugasa (contribución 30) describió un programa de SPV desarrollado
específicamente para identificar infecciones zoonóticas y riesgos para menores (entre
9 y 16 años de edad) que trabajan como aprendices en los frigoríficos en Nigeria.
Corresponderían hasta el 12 % del total de los trabajadores. También se incluyó la
evaluación de la calidad de los residuos líquidos de los frigoríficos como medida de
polución ambiental.
Comentario del Moderador: El Dr. Sherman describe en su libro recientemente
publicado”Tending Animals in the Global Village-A guide to International Veterinary
Medicine” (Sherman, 2002), los elementos críticos para los programas de salud animal
basados en la comunidad. Se enfatizó la importancia de la medicina veterinaria étnica
definida como”el conocimiento de personas locales pertinente a sanidad animal y
producción”, derivada de largos períodos de tiempo de asociación estrecha entre las
personas y sus animales. Se deberán incluir en estos programas el conocimiento de la salud
humana y actitudes referentes a zoonosis y otros riesgos relacionados con animales.

E. OTROS TEMAS DE DISCUSIÓN

20. Si usted desea plantear otros temas o problemas relacionados con SPV y control
de zoonosis en países en vías de desarrollo que no han sido tratados en los temas
previamente expuestos, hágalo por favor en este item.
En la contribución 39 los Drs. A. Mantovani y R Borrini plantearon el problema de
la preparación para situaciones de catástrofe en SPV. Las principales situaciones de
102 Objetivos de la conferencia y temas de discusión

catástrofe que pueden ocurrir u ocurrieron en PVD incluyen: inestabilidad civil y


guerras, epidemias, desastres naturales tales como sequías, inundaciones y terremotos.
Todos pueden resultar en una pérdida masiva de ganado y otros animales resultando
en hambre. En ciertas instancias el riesgo a enfermedades zoonóticas como por
ejemplo Fiebre del Valle de Rift se exacerba debido a un evento geográfico como las
inundaciones. Los PVD están especialmente en riesgo porque la ganadería es esencial
para la supervivencia tanto humana como económica. Se enfatiza la participación de
la profesión veterinaria para preparar tales eventos y se detallan ejemplos a través de
medidas planificadas llevadas a cabo por los servicios veterinarios oficiales italianos.
Para poder repasar y obtener recomendaciones deberá remitirse a la publicación
de la OIE:”Emergency management of disasters involving livestock in developing
countries” (Heath et al., 1999).
El Dr. G. K. Sharma (contribución 24) sugirió que ciertos problemas de SPV que
se presentan en países desarrollados incluyendo zoonosis pueden no estar presentes
en PVD. La gran mayoría de los PVD se encuentran equipados para diagnosticar y
prevenir la entrada de tales problemas de SPV. Como si fuera una obligación social, los
países desarrollados no deberían generar situaciones que tiendan a introducir nuevos
problemas de SPV a PVD. Las agencias internacionales como FAO/OMS/OIE pueden
cumplir un rol importante en prevenir la dispersión de problemas de SPV entre los
países.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 103

CONCLUSIONES

Existe un común acuerdo en que las necesidades actuales y los futuros desafíos para
la entrega de programas efectivos de SPV en PVD serán muy diferentes de aquellos
en países desarrollados. Estos últimos poseen las infraestructuras públicas adecuadas
para hacer frente a los desafíos de infecciones zoonóticas emergentes ó re-emergentes
y también para amenazas bioterroristas con agentes zoonóticos.
Las iniciativas de SPV en PVD deberán enfocarse a nivel comunitario y elegir
también programas priorizados basados en la carga de enfermedad, epidemiología y
riesgo y que posean una razonable probabilidad de éxito y sustentabilidad. El éxito se
logrará si los veterinarios toman su lugar como miembros de un grupo de salud en vez
de ir por su cuenta.
Hasta que la asistencia internacional estuviera disponible y varios participantes
describieran ejemplos de proyectos cooperativos, no se logró alcanzar las necesidades
de ayuda técnica así como asistencia financiera. Las agencias internacionales necesitan
lograr que sus publicaciones estén realmente disponibles y deberán también considerar
expandir su personal particularmente a nivel regional y de este modo lograr mayor
apoyo. Se deberá expandir información electrónica para aquellos con una “necesidad
a saber”.
Se notó un número de defectos en los programas de vigilancia en PVD y se
desarrollaron bases de datos de salud humana y animal de infecciones zoonóticas.
Estos requerirán entrenamiento y compromiso extensivo especialmente a nivel local
para que sean exitosos.
Mientras hubo una abundancia de conocimiento y experiencia en cómo controlar
y prevenir enfermedades zoonóticas en países desarrollados, fue azaroso transferir
esto directamente a PVD a menos que la investigación participativa de campo hubiera
identificado conocimientos y actitudes locales que pudiesen presentar barreras para su
implementación. Un buen ejemplo es la seguridad de alimentos en PVD. Los nuevos
sistemas de control de calidad que se adoptaron en la higiene de la carne en países
desarrollados, en donde virtualmente todos los animales son faenados e inspeccionados
en los frigoríficos, son de valor limitado en donde la mayoría de la carne deriva de
animales sacrificados en carnicerías locales ó son faenados en forma casera. A medida
que aumenta la comercialización global de productos de origen animal, los PVD
deberían beneficiarse de la necesidad de lograr estándares de exportación.
Mientras que hubo una percibida necesidad de los PVD de desarrollar una
justificación económica para los programas de control de zoonosis, varios participantes
notaron que se debe prestar atención a problemas ecológicos, etológicos, sociales,
éticos y psicológicos.
Se presentaron un gran número de ejemplos de programas de SPV que involucran a
la comunidad. Estos van desde el mejoramiento de la vigilancia, entrega de programas
de salud humana y animal combinadas, especialmente a comunidades aisladas, y la
participación de mujeres y jóvenes en educación de la prevención. En PVD, la salud
humana y animal están interrelacionadas especialmente porque la mayor parte del
alimento es producido y consumido localmente.
Se hicieron un número de sugerencias para asegurar que los servicios de ‘bienes
públicos’ de SPV no sean eliminados porque muchas administraciones veterinarias
en PVD transferían sus servicios clínicos al sector privado. Mientras que en algunos
casos ONGs y cooperativas agrarias podrían proveer algunos de los servicios de SPV,
104 Conclusions

el Estado debe retener la responsabilidad de vigilancia de enfermedades, control de


enfermedades zoonóticas de fronteras y seguridad de carnes y otros alimentos.
Muchos autores dieron ejemplos de colaboración muy limitada entre los Ministerios
de Salud y Agricultura en todos los niveles administrativos. Desafortunadamente este
problema no está solamente confinado a PVD. Una solución sería que una interfase
bien definida debería establecerse en todos los PVD dentro de un Ministerio o
como entidad independiente. Los problemas que afrontan los PVD son demasiado
importantes como para ser dejados de lado por rivalidades interprofesionales o por
falta de comunicación.
Distintas tendencias innovativas, se reportaron al efecto de mejorar la enseñanza de
la SPV en colegios de veterinaria. En este sentido, se mencionó la reducción de las clases
formales y el aumento de visitas a campo con los profesores. También se promovió
un mayor uso de ejemplos de problemas cotidianos en la enseñanza. Se identificaron
problemas específicos de aprendizaje para cada año y los estudiantes fueron alentados
a usar sitios de red y a desarrollar sus propias agendas de datos electrónicos.
El aumento de mujeres estudiantes presenta muchas oportunidades en los PVD ya
que en muchas zonas rurales, las mujeres son las que manejan el ganado. La educación
en higiene básica y otras medidas preventivas son generalmente más efectivas si son
dadas por mujeres directamente.
Las oportunidades para educación a nivel de grado o continuada en SPV en los PVD
son limitadas a no ser que el financiamiento provenga de América del Norte, Europa
o Australasia. Sin embargo, varias iniciativas fueron descriptas involucrando vínculos
inter-universitarios y aprendizaje a distancia via Internet. Dado las dificultades y el
costo de acceso a Internet en PVD, se recomendó un mayor uso de CDs en varios
idiomas, si bien se reconoce que el material disponible en el presente es muy limitado.
Se promovió una mayor participación de agentes de la salud a nivel comunitario, para
la difusión de SPV en la prevención especialmente de zoonosis a nivel de comunidades
pequeñas... A estos agentes se les debiera enseñar las técnicas básicas necesarias
para aconsejar acerca de las zoonosis más comunes. Este material didáctico debiera
suministrarse como un suplemento de al conocimiento existentes en la comunidades
locales más que como un reemplazo.
Finalmente, también se resaltó la importancia del manejo de las emergencias en la
ganadería después de la catástrofe naturales efectuándose recomendaciones específicas
basadas en experiencias previas.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 105

AGRADECIMIENTOS

Se agradece la colaboración brindada por el personal de la División de Producción


y Sanidad Animal de la FAO, Dres. C. Eddi, W. Amanfu y D. Ward. También se
agradece al Dr. Scott McEwen, University of Guelf, Ontario, Canadá; al Dr. David
Hird, Universidad de California, Davis, California, Estados Unidos y al Dr. D. Cordes,
Nueva Zelanda, por haber revisado el documento.
Conferencia en salud pública veterinaria y control de zoonosis en países en desarrollo 107

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