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De la capacidad

Artículo 1798. Son hábiles para contratar todas las personas no exceptuadas por la ley.

Este artículo se refiere a que las personas pueden contratar siempre y cuando sean por
ejemplo mayores de edad no están privados de sus derechos civiles se encuentran en pleno
uso de sus facultades mentales, o bien no están impedidos al uso de sus facultades
mentales por ejemplo personas enfermas hospitalizadas.

Artículo 1799. La incapacidad de una de las partes no puede ser invocada por la otra en provecho
propio, salvo que sea indivisible el objeto del derecho o de la obligación común.

Este.se entiende a que si alguno de los partes en algún momento de la vigencia del
contrato cayera en el estado de incapacidad, este estado no puede ser aprovechado por la
contraparte para su beneficio.

Representación
Artículo 1800. El que es hábil para contratar, puede hacerlo por sí o por medio de otro legalmente
autorizado.

Este artículo nos hace saber que las personas que se encuentran en pleno uso de sus
facultades mentales y sin impedimentos legales para contratar puede celebrar contratos
en su nombre o en representación de otros.

Artículo 1801. Ninguno puede contratar a nombre de otro sin estar autorizado por él o por la ley.

este artículo indica que No obstante lo señalado por el artículo 1800, las personas que
tienen la capacidad de contratar sólo pueden hacerlo a nombre de terceras personas sin
cuentan con un poder para hacerlo.

Artículo 1802. Los contratos celebrados a nombre de otro por quien no sea su legítimo
representante, serán nulos, a no ser que la persona a cuyo nombre fueron celebrados, los ratifique
antes de que se retracten por la otra parte. La ratificación debe ser hecha con las mismas
formalidades que para el contrato exige la ley.

Si no se obtiene la ratificación, el otro contratante tendrá derecho de exigir daños y perjuicios a


quien indebidamente contrató.

En lo tocante el tema de la representación, este artículo lo que indica es que si se celebra


algún contrato por una persona que realmente no tenía las facultades para celebrarlo
como representante de una tercera persona, el contrato sólo será válido si esa tercera
persona lo ratifica previo a cualquier controversia o efecto legal, y también indica que la
persona afectad Holaa por el contrato que es determinado como nulo por falta de
personalidad jurídica tendrá derecho el pago de daños y perjuicios como si hubiera existido
un incumplimiento de contrato.

Del consentimiento
Artículo 1803. El consentimiento puede ser expreso o tácito. Es expreso cuando se manifiesta
verbalmente, por escrito o por signos inequívocos. El tácito resultará de hechos o de actos que lo
presupongan o que autoricen a presumirlos, excepto en los casos en que por ley o por convenio la
voluntad deba manifestarse expresamente.

Podemos pensar que para el caso de este artículo, estamos ante la figura de los contratos
verbales que tienen validez, estos se pueden considerar de consentimiento tácito y no
expresso o explícito, para el caso de los contratos de consentimiento explícito es lo que
entendemos como un contrato por escrito el cual se firma por las partes quienes
manifiestan a través de esa firma su consentimiento.

Artículo 1804. Toda persona que propone a otra la celebración de un contrato fijándole un plazo
para aceptar, queda ligada por su oferta hasta la expiración del plazo.

en este caso podríamos citar a lo que comúnmente se conoce como cláusulas de la oferta,
en las cuales quien realiza la misma y para esto indica un plazo de aceptación, la ley lo
obliga a respetar ese plazo por ejemplo, hacer una promesa de compra venta e indicar que
el plazo se cerrará al cabo de 30 días, quien haya prometido cumplir este plazo está
obligado a respetarlo ya sea que sea una iniciativa de la parte compradora o vendedora,
por lo que hay que ser muy claro quién genera dicha oferta ya sea la oferta de compra con
la oferta de venta.

Artículo 1805. Cuando la oferta se haga a una persona presente, sin fijación de plazo para
aceptarla, el autor de la oferta queda desligado si la aceptación no se hace inmediatamente. La
misma regla se aplicará a la oferta hecha por teléfono.

para el caso de este artículo, podemos interpretar que esta es una oferta sin fecha
determinada o plazo para cumplirse, por lo que quien hace la oferta puede indicar que la
oferta era válida únicamente el día que se presentó, o puede extenderla según le
convenga. podríamos pensar que en muchos casos en los que dentro del cuerpo del
contrato no se especifica una vigencia de la oferta ésta queda sujeta a las condiciones de
la parte oferente

Artículo 1806. Cuando la oferta se haga sin fijación de plazo a una persona no presente, el autor de
la oferta quedará ligado durante tres días, además del tiempo necesario para la ida y vuelta
regular del correo público, o del que se juzgue bastante, no habiendo correo público, según las
distancias y la facilidad o dificultad de las comunicaciones.

para este artículo se ha incluido la figura del correo público como medio de comunicación
para ser conocedor a las partes del contenido de una oferta, y estipula que la vigencia de
la misma no podrá ser menor al tiempo que transcurra para que el paquete postal pueda
viajar de origen a destino y de regreso, es decir que si se envía un contrato por correo el
plazo de aceptación no podrá ser menor al tiempo que dura en llegar el documento de
regreso a la persona que lo emite.

Artículo 1807. El contrato se forma en el momento en que el proponente reciba la aceptación,


estando ligado por su oferta, según los artículos precedentes.
este artículo indica que en algunos casos en los que se ha propuesto la celebración de un
contrato este se puede dar por formalizado en el momento que la persona que acepta la
oferta Hola lo hace por medio escrito es decir una carta de aceptación de oferta, como por
ejemplo. podríamos pensar en un contrato de apertura de crédito, para el cual la persona
que ha solicitado el crédito firma una carta de aceptación del mismo muchas veces basado
en la tabla de amortización. aunque el ejemplo es un poco superficial, ya para que este
tipo de contratos se complementen existen otros mecanismos que la simple firma en uno
solo de los documentos

Artículo 1808. La oferta se considerará como no hecha si la retira su autor y el destinatario recibe
la retractación antes que la oferta. La misma regla se aplica al caso en que se retire la aceptación.

este artículo indica que en caso de que el autor de una oferta decida cancelar la bastará
con que le notifique a su contraparte que la oferta ha quedado sin vigencia, por lo que
todo acto en consecuencia se consideraría como nulo

Artículo 1809. Si al tiempo de la aceptación hubiere fallecido el proponente, sin que el aceptante
fuere sabedor de su muerte, quedarán los herederos de aquel obligados a sostener el contrato.

este artículo indica que el contrato sigue vigente o surtirá todos sus efectos aun cuando
suceda la muerte de la persona que hizo la propuesta, estos sólo en el caso de que no se les
notifique a la contraparte de qué el oferente ha fallecido, por ejemplo, se va a firmar un
contrato de arrendamiento y este contrato de arrendamiento es firmado por el dueño de la
casa y enviado para su firma al prospecto a inquilino, en ese lapso de tiempo el dueño de la
casa muere y el inquilino el contrato y lo devuelve sin saber que el dueño de la casa ha
fallecido y los herederos del dueño de la casa no se lo notifican, entonces el contrato se
hará válido y conservará la vigencia que se estipule en el mismo

Artículo 1810. El proponente quedará libre de su oferta cuando la respuesta que reciba no sea una
aceptación lisa y llana, sino que importe, modificación de la primera. En este caso la respuesta se
considerará como nueva proposición que se regirá por lo dispuesto en los artículos anteriores.

básicamente este artículo indica que las ofertas son válidas únicamente cuando no exista
una contraoferta o solicitud de modificación a la misma. por ejemplo se genera un
contrato por MXN$ 5,000 y la persona que tiene que aceptarlo hace una contraoferta por
4500, hasta ese punto el contrato no se ha celebrado

Artículo 1811. La propuesta y aceptación hechas por telégrafo producen efectos si los contratantes
con anterioridad habían estipulado por escrito esta manera de contratar, y si los originales de los
respectivos telegramas contienen las firmas de los contratantes y los signos convencionales
establecidos entre ellos.

en el entendido de que los contratos son acuerdos de voluntades, este artículo indica en
que para el caso de los contratos que se celebran a distancia, medios como el telégrafo
pueden ser aceptados sí y sólo sí ese método había quedado indicado dentro del cuerpo del
contrato, hoy día podríamos asumir que este artículo da pie a la aceptación de contratos
vía correo electrónico o facsímil en los que se utilice una firma digital.
Vicios del consentimiento
Artículo 1812. El consentimiento no es válido si ha sido dado por error, arrancado por violencia o
sorprendido por dolo.

este artículo nos hace saber que en caso de demostrarse que contrato fue firmado por un
error involuntario o bien mediante coerción, dicho contrato será considerado nulo por
vicios de consentimiento dolo y mala fe.

Artículo 1813. El error de derecho o de hecho invalida el contrato cuando recae sobre el motivo
determinante de la voluntad de cualquiera de los que contratan, si en el acto de la celebración se
declara ese motivo o si se prueba por las circunstancias del mismo contrato que se celebró éste en
el falso supuesto que lo motivó y no por otra causa.

En este caso podemos asumir que cuando él sustento legal o las bases sobre las cuales se
indica que está soportado son incorrectas el contrato se anulará, y sólo podría prevalecer
en el caso de que al momento de celebrarse se manifestase el error haciendo las
correcciones pertinentes en ese mismo acto. por ejemplo citar erróneamente un artículo
del Código Civil cuando debería citarse un artículo del código de procedimientos civiles

Artículo 1814. El error de cálculo sólo da lugar a que se rectifique.

Este artículo sólo indica crea un artículo no se hace nulo cuando en el hay evidencia de un
error en el cálculo de los importes o datos que como consecuencia de un cálculo numérico
En el asentados.

Artículo 1815. Se entiende por dolo en los contratos, cualquiera sugestión o artificio que se
emplee para inducir a error o mantener en él a alguno de los contratantes; y por mala fe, la
disimulación del error de uno de los contratantes, una vez conocido.

Este artículo por poner la definición de los términos dolo y mala fe, y podemos entender
que el dolor es cuando se provoca que la parte que debe aceptar las condiciones del
contrato sea conducida por error o engaño, y la mala fe puede entenderse como el hecho
de que al momento de conocerse que existe un error una de las partes lo haga parecer
insignificante, podríamos pensar que en un contrato de compra venta de un terreno se
indica que él mismo cuenta con servicios hidráulicos, y que al momento de hacer esta
validación se descubra que esos servicios hidráulicos se encuentran a algunos metros de
distancia, pero se haga creer a la otra parte que simplemente se encuentran a pie de calle
o de banqueta y que el llevarlos hasta el terreno en cuestión no implica dificultad ni
requerirá permisos, cuando la realidad implique que si se requieren grandes inversiones y
permisos por parte de las autoridades.

Artículo 1816. El dolo o mala fe de una de las partes y el dolo que proviene de un tercero,
sabiéndolo aquélla, anulan el contrato si ha sido la causa determinante de este acto jurídico.

Básicamente este artículo lo que indica es que cuando en un contrato se demuestra que
existe mala fe o dolo el contrato será nulo. prevaleciendo el pago de daños y perjuicios
para la parte afectada
Artículo 1817. Si ambas partes proceden con dolo, ninguna de ellas puede alegar la nulidad del
acto o reclamarse indemnizaciones.

Este artículo podríamos decir que invoca al principio de equidad e indica que cuando
ambas partes actuaron con dolo o mala fe el contrato se anula sin embargo ninguna de las
2 partes podrá exigir el pago de daños y perjuicios.

Artículo 1818. Es nulo el contrato celebrado por violencia, ya provenga ésta de alguno de los
contratantes o ya de un tercero, interesado o no en el contrato.

este artículo indica que en caso de existir violencia el contrato no tendría validez toda vez
que podría interpretarse también como un dolo la celebración del mismo, y se asume que
les será aplicable el pago de daños y perjuicios en contra quien resulte responsable por el
acto de violencia o que genere el dolo y mala fe en el mismo.

Artículo 1819. Hay violencia cuando se emplea fuerza física o amenazas que importen peligro de
perder la vida, la honra, la libertad, la salud, o una parte considerable de los bienes del
contratante, de su cónyuge, de sus ascendientes, de sus descendientes o de sus parientes
colaterales dentro del segundo grado.

Este artículo únicamente nos especifica de una manera enunciativa y no exactamente


limitativa las formas de violencia que pueden certificadas para la celebración de un
contrato así como las personas que pueden verse afectadas por estos hechos.

Artículo 1820. El temor reverencial, esto es, el solo temor de desagradar a las personas a quienes
se debe sumisión y respeto, no basta para viciar el consentimiento.

En algunos casos podríamos pensar que por usos y costumbres las personas tienen temor o
demasiado respeto que puede ser mal interpretado como miedo cuándo se va a celebrar
un contrato, por ejemplo ante una persona de alto rango, una persona pública o bien
podríamos pensar una persona del clero. este artículo indica que aún cuando estas
circunstancias se presenten no implica que no existe el consentimiento para la celebración
del contrato, en todo caso tendría que demostrarse que haya existido violencia para la
celebración del mismo.

Artículo 1821. Las consideraciones generales que los contratantes expusieren sobre los provechos
y perjuicios que naturalmente pueden resultar de la celebración o no celebración del contrato, y
que no importen engaño o amenaza alguna de las partes, no serán tomadas en cuenta al calificar
el dolo o la violencia.

En este caso podemos considerar que el artículo indica que los temores infundados aun
cuando éstos sean manifestados, no podrán ser esgrimidos para la nulidad del contrato ya
que no existió dolo mala fe engaño o amenazas

Artículo 1822. No es lícito renunciar para lo futuro la nulidad que resulte del dolo o de la violencia.

este artículo indica que no se puede renunciar a los derechos que establece la ley cuando
se demuestra que en un contrato existió dolo o violencia para celebrarlo
Artículo 1823. Si habiendo cesado la violencia o siendo conocido el dolo, el que sufrió la violencia o
padeció el engaño ratifica el contrato, no puede en lo sucesivo reclamar por semejantes vicios.

esta cláusula da pie a que la persona que fue víctima del dolo mala fe o violencia durante
la celebración de un contrato siente que sus derechos o privilegios fueron restaurados y
ratifica el contrato, por esta simple acción estará impedido hacer reclamaciones
posteriores que por los vicios de consentimiento pudieran surgir.

Del objeto y del motivo o fin de los contratos


Artículo 1824. Son objeto de los contratos:

I. La cosa que el obligado debe dar;

II. El hecho que el obligado debe hacer o no hacer.

Se indica que los contratos pueden darse por productos o servicios, es decir cosas que se
entregan y reciben, así como trabajos que una persona realiza en beneficio de otra.

Artículo 1825. La cosa objeto del contrato debe: 1o. Existir en la naturaleza. 2o. Ser determinada o
determinable en cuanto a su especie. 3o. Estar en el comercio.

Este artículo indica que si un contrato es sobre una cosa ésta debe ser cierta tangible y
estar constituida legalmente para su comercialización, no pueden celebrarse contratos
para la compra venta de artículos prohibidos por la ley, como por ejemplo armas Y
estupefacientes.

Artículo 1826. Las cosas futuras pueden ser objeto de un contrato. Sin embargo, no puede serlo la
herencia de una persona viva, aun cuando ésta preste su consentimiento.

Para el caso de este artículo ampararía por decirlo así, la producción de una fábrica o los
productos y materiales elaborados de una persona que serán producidos en un período de
tiempo y entregados en el futuro, y excluye de estos hechos aquellos artículos que le
puedan ser heredados a una persona obligada a un contrato.

Artículo 1827. El hecho positivo o negativo, objeto del contrato, debe ser:

I. Posible;

II. Lícito.

Un precepto de la ley indica que nadie está obligado a cumplir lo imposible, por lo que para
el caso de los contratos, sólo pueden comprometerse productos y actos posibles de
realizarse y que tengan un objeto lícito. por ejemplo no se le puede pedir a una persona
trasladar Hola cuestas a un animal salvaje bueno ya que ese sería un hecho imposible de
realizar o como ya se dijo previamente no se pueden celebrar contratos por ejemplo para
la comercialización de armamento de uso exclusivo del Ejército

Artículo 1828. Es imposible el hecho que no puede existir porque es incompatible con una ley de la
naturaleza o con una norma jurídica que debe regirlo necesariamente y que constituye un
obstáculo insuperable para su realización.
Este artículo manifiesta que sólo pueden ser objeto de contratos los hechos y cosas reales y
que por ende son compatibles con cualquier norma jurídica.

Artículo 1829. No se considerará imposible el hecho que no pueda ejecutarse por el obligado, pero
sí por otra persona en lugar de él.

Este artículo es aclaratorio, toda vez que indica que los actos, llamemos los servicios, a los
que una persona se compromete a través de un contrato, son válidos cuando son
materialmente realizables por cualquier individuo independientemente de que la persona
que haya firmado el contrato no tenga la capacidad física o intelectual para llevarlo a
cabo, tal vez en un ejemplo muy burdo podríamos pensar que no se puede argumentar
invalidez de un contrato cuando éste se firma para la elaboración de tortillas y la persona
que lo firma se encuentra discapacitada físicamente para el trabajo No obstante cualquier
otro ser humano podría llevarlo a cabo.

Artículo 1830. Es ilícito el hecho que es contrario a las leyes de orden público o a las buenas
costumbres.

Este artículo podría ser equiparable a que se firmase un contrato en el cual se obliga a una
persona a realizar actividades que son contrarias al orden público y a las buenas
costumbres como por ejemplo que una persona sea contratada para llevar acabo actos de
vandalismo en la vía pública bajo cualquier argumento o finalidad.

Artículo 1831. El fin o motivo determinante de la voluntad de los que contratan, tampoco debe ser
contrario a las leyes de orden público ni a las buenas costumbres.

En este caso el artículo indica, lo que coloquialmente podría decirse como el fin no justifica
los medios, arte a una persona aún cuando esté de acuerdo en realizar una actividad,
siesta no es legal el contrato se considera nulo, este artículo podemos pensar que previene
la trata de personas aún bajo su consentimiento.

Forma
Artículo 1832. En los contratos civiles cada uno se obliga en la manera y términos que aparezca
que quiso obligarse, sin que para la validez del contrato se requieran formalidades determinadas,
fuera de los casos expresamente designados por la ley.

Nuevamente bajo el concepto de que los contratos son acuerdos de voluntades, este
artículo indica de que las personas al estar de acuerdo en los términos plasmados en el
contrato se obligan a estos términos sin que el contrato pierda validez aún cuando algunas
de las formalidades de los contratos no sean plasmadas en el mismo. no olvidar que sí
deben estar presentes los requisitos mínimos de un contrato.

Artículo 1833. Cuando la ley exija determinada forma para un contrato, mientras que éste no
revista esa forma no será válido, salvo disposición en contrario; pero si la voluntad de las partes
para celebrarlo consta de manera fehaciente, cualquiera de ellas puede exigir que se dé al
contrato la forma legal.
Este artículo indica que para algunos tipos de contratos existen ciertas características que
deben ser explícitamente integradas en el cuerpo del mismo y que en caso de que esos
características fantasean entonces el contrato será nulo sin embargo si ambas partes
manifiestan expresamente que esa formalidad o característica no esté presente en el
contrato el contrato puede existir y cualquiera de las partes puede exigir que esa
formalidad se integre al mismo.

Artículo 1834. Cuando se exija la forma escrita para el contrato, los documentos relativos deben
ser firmados por todas las personas a las cuales se imponga esa obligación.

Si alguna de ellas no puede o no sabe firmar, lo hará otra a su ruego y en el documento se


imprimirá la huella digital del interesado que no firmó.

Este artículo hace alusión de que los contratos deben tener la característica de
consentimiento de ambas partes y que uno de los elementos esenciales del contrato es la
firma, por lo que se pone de manifiesto que todos los documentos que forman un contrato
sin importar el tamaño del mismo deben ser firmados o rubricados y que en el caso de que
una persona no sepa firmar la huella digital ahora las veces de firma.

División de los contratos


Artículo 1835. El contrato es unilateral cuando una sola de las partes se obliga hacia la otra sin que
ésta le quede obligada.

Para el caso de este artículo podemos referirnos a contratos muy específicos como el de
donación, en los que sólo una parte está obligada a entregar un bien o servicio a la otra
parte sin una contraprestación, bajo esta figura también tenemos los contratos en
comodato a título gratuito. (préstamo de artículos sin pago por ese préstamo)

Artículo 1836. El contrato es bilateral cuando las partes se obligan recíprocamente.

La mayoría de los contratos se consideran bilaterales debido a que las partes tienen
obligaciones unas con otras de manera recíproca por la entrega de un producto o servicio
así como por la recepción de una contraprestación por la entrega de ese bien.

Artículo 1837. Es contrato oneroso aquel en que se estipulan provechos y gravámenes recíprocos;
y gratuito aquel en que él provecho es solamente de una de las partes.

Este artículo nos permite identificar a los contratos sobre los cuales una persona recibe una
contraprestación económica y por la cual se obtiene un beneficio estos son conocidos como
onerosos, Y de igual manera nombra aquellos contratos que no implican una
contraprestación económica para quien entregue el bien o servicio y que se conocen como
gratuitos

Artículo 1838. El contrato oneroso es conmutativo cuando las prestaciones que se deben las
partes son ciertas desde que se celebra el contrato, de tal suerte que ellas pueden apreciar
inmediatamente el beneficio o la pérdida que les cause éste. Es aleatorio cuando la prestación
debida depende de un acontecimiento incierto que hace que no sea posible la evaluación de la
ganancia o pérdida, sino hasta que ese acontecimiento se realice.

Este artículo nos presenta la división de los contratos onerosos indicando que son
conmutativos cuando el beneficio económico que éste representa es percibido de manera
inmediata, incluida la pérdida que éste pueda causar Por su incumplimiento o cancelación,
y la clasificación de aleatorio se le da aquellos contratos en los cuales no es posible
determinar con certeza el monto de los beneficios o en su caso de las pérdidas sino hasta
que un acto se lleve a cabo, podríamos pensar como un ejemplo aquellos contratos con la
figura de comisionistas, en los que la contraprestación está determinada por porcentaje
que tienen como base un monto de ventas que puede ocurrir o no.

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