Utilización del habla en una clase de Lenguaje.

Universidad Alberto Hurtado.

Departamento de Antropología.
Profesor Felipe Trujillo.
Ayudante Dalí Araya.
Viernes 7 de octubre del 2002.
Elisa Monsalve Pfeng.
El texto presentado a continuación es una etnografía realizada en una sala de
clases, para esto utilizaré la estructura de introducción y contexto de lo que se
relatará, para luego desarrollar la narrativa de lo observado, finalmente hay un
apartado con los aspectos teóricos que se relacionarán con la experiencia
etnográfica. Este escrito es solicitado por el profesor Felipe Trujillo y el ayudante
Dalí Araya en la cátedra de Antropología Lingüística de la carrera de Antropología
en la Universidad Alberto Hurtado.
Realicé la etnografía en la clase de lenguaje y que me interesa observar cómo es
la relación de los profesores con les estudiantes y como se presentan distintos
conceptos de la Antropología lingüística en una sala de clases, donde es esencial
la comunicación y transmisión del conocimiento; podremos observar la actuación,
la deixis y la participación en el siguiente relato, lo que al final se explicará
detalladamente.
La presente etnografía fue realizada en el Colegio Antártica Chilena, en el curso
sexto básico B el día viernes 7 de octubre. Este Colegio esta ubicado en la
comuna de Vitacura de Santiago de Chile, es un establecimiento municipal y fue
fundado en 1965. En este informe se evidencia la interacción entre dos profesores
de lenguaje, Juan y Pamela, y los estudiantes de dicho curso en el contexto de la
sala de clases en el horario de 15:30 horas a 15:59 horas.
Al entrar a la sala de clases (a las 15:00 horas) les estudiantes conversaban y una
mujer estaba parada frente a ellos al costado de la pizarra, ella estaba sentada en
silencio observándolos, el profesor Juan, que entró junto a mi me presentó a la
mujer, llamándola “profesora Pamela”, él le explicó mi presencia en la clase y ella
sin decir una palabra asintió con la cabeza mientras me miraba haciendo una
mueca con la boca que no logré interpretar, ya que mi parecer su expresión
demostraba extrañes pero después entendí que demostraba amablemente que no
había problema, no era una expresión común para mí.
Luego de esto el profesor me solicitó presentarme ante les alumnes, lo hice y les
expliqué el porqué de mi visita, estos guardaron silencio, y algunas niñas me
saludaron haciendo un gesto con la mano. Me senté junto a Pamela y comencé a
escribir en mi libreta. Percibí que he ingresado a la mitad de la clase ya que les
estudiantes estaban trabajando en una tarea mientras ambos profesores estaban
en silencio.
Lo primero que llamó mi atención fue la sala de clases y su orden, ya que estaban
organizados los asientos en grupos de a seis estudiantes; las paredes eran de
color turquesa; y había repisas en donde había mochilas y en otros estantes
trabajos que supuse eran de la clase de artes. También me sorprendió la pizarra,
no era común para mí, tenía unos rieles que hacían que está pudiera deslizarse
hacía los lados.
Mientras observaba el salón, se escucha al profesor Juan explicar a les
estudiantes la tarea, diciendo “Tienen que hacer un parafraseo del texto o una
síntesis, no se queden pegados en las diferencias de la síntesis con el parafraseo,
las dos son un resumen del texto”. Luego de esta explicación comenzaron a
conversar les estudiantes a un volumen que al parecer del profesor no fue
adecuado, ya que procedió a decirles que se queden en silencio.
Un alumno mostró su tarea a la profesora Pamela (a las 15:36 horas), quién lo
felicitó diciendo “¡Que rápido avanzó Tomás!” dirigiéndose al profesor Juan, quién
repitió está frase a un volumen de voz en el que el resto de les compañeres
escucharan. Como la conversación entre estudiantes seguía al mismo nivel de voz
que el profesor llamó a silenciar, un alumno le pidió a Juan “Profe les puede decir
que se callen”, y el profesor procede a decir “¡Les queda un minuto!”, indicando
que debían terminar su trabajo en dicho tiempo, luego de esto se siente silencio en
la sala.
El profesor Juan se encontraba de pie frente a les estudiantes, al medio de la
pizarra, mientras la profesora Pamela se mantiene en la esquina del pizarrón. Un
alumno se acerca a Juan y el profesor lee su trabajo, luego comenta que “No
alcanza a ser un resumen, debes poner las cosas más importantes del texto”.
Mientras la profesora llamó a una niña que está sentada al otro extremo de la sala,
le pide que traiga su tarea y la alumna no lo hace, a lo que la profesora reacciona
diciéndole “No has hecho nada, lo mismo de todas las clases” y la estudiante con
una expresión a mi parecer de timidez observa a la profesora, luego se fue a su
puesto.
Un grupo de estudiantes me miraron al parecer con curiosidad, yo les sonreí y
ellas se rieron y me preguntaron mi nombre, les contesté, y ellas volvieron a reírse
y me explicaron que se habían confundido, me habían llamado Lisa en vez de
Elisa. Cuando la profesora se percató de las risas les dijo “Las que no prestaron
atención cuando se presentó ¿Han avanzado?” las niñas riendo contestaron
“Estamos empezando” y Juan respondió “Empezando el título”, la conversación a
mi parecer fue con sarcasmo, y todes sonreían.
La conversación se vio interrumpida por un grito desde afuera que yo no logré
escuchar (a las 15:43), pero la profesora Pamela preguntó a les estudiantes que
se sientan junto a la ventana que han gritado, nadie responde y solo se
escucharon risas y murmullos, a esto Pamela reaccionó saliendo de la sala y
diciéndole al curso que ella sabe quien es, que lo conoce y sabe que reaccionará
haciendo como si él no ha sido. Volvió a la sala y se mantuvo en la puerta
observando.
El profesor Juan caminaba por la sala, pasando por los asientos de los estudiantes
y respondiendo preguntas de ellos (a las 15:50 horas). Luego de esto se detiene
frente al curso, en el centro de la pizarra y dice que harán un cierre de la clase,
leerán algunos trabajos y los comentarán entre todos. Pregunta quién quiere
comenzar, y un alumno lee su trabajo “Esta es la historia de un niño que trabajaba
en las noches para ayudar a su padre, al papá no le gustaba pero después eso
cambió”, el profesor lo corrige explicando que es muy corta la respuesta y que se
necesita más contexto para luego relatar la historia, luego el niño lee su opinión
del texto, “Me pareció muy bonito y creo que algunos se pueden poner en el lugar
del niño”, el profesor agradece su lectura y da la palabra a otres estudiantes.
Se escucha que alguién toca la puerta desde afuera (a las 15:55) y la profesora
que ya estaba cerca de la entrada sale a ver que ocurre, después de conversar
con alguien sin que se escuche dentro de la sala lo que dice, ella vuelve a la sala y
explica a les estudiantes que no era quien ella pensaba el alumno que había
gritado por la ventana, menciona que siempre ese alumno siempre “Hace cosas y
no dice que fue él, le hecha culpa a sus compañperos” algunas niñas le comentan
algo que no logro escuchar a Pamela, a lo que ella responde “Yo sé como es él,
siempre hace lo mismo, ustedes tienen que aprender igual a no ser como él y
asumir cuando se equivocan”, el profesor Juan apoya esto repitiendole al curso la
importancia de asumir los errores.
Otras estudiantes leen sus trabajos y reciben comentarios del profesor, luego Juan
comienza a hacer una reflexión final para terminar la clase, dice “Me gustó que
engancharán con el texto y que respetarán y guardaran silencio mientras lo
leíamos, fue muy bueno que trabajen y participen”, después de esto Pamela dice
que esta de acuerdo con lo dicho por Juan y se despide de les estudiantes y de
mi, y se va de la sala de clases. Les estudiantes empiezan a hacer ruido mientras
toman sus mochilas y cuadernos, a lo que el profesor reacciona diciendo
“Sientense y callense en tres segundos, uno, dos, tres”, les niñes se sientan pero
no guardan mucho silencio según mi percepción, luego el profesor se despide y
suena el timbre del colegio (a las 15:59 horas), en ese momento permite que les
estudiantes se vayan de la sala.
Aspectos teóricos.
Del relato anterior podemos analizar distintos conceptos de la Antropología
lingüística, tal como la actuación, la deixis y la participación. En primer lugar, se
encuentra presente la actuación en el relato anterior en la manera en que el
profesor interviene en la clase sin alterar el ambiente, utilizando estrategias desde
la improvisación y creatividad del uso del habla, el ejemplo de esto es cuando el
profesor les indica a los alumnos que les queda un minuto para realizar el trabajo
pero con el objetivo oculto de que ellos guarden sielncio, lo cual provoca en los
estudiantes silencio y que continuen con su trabajo; esta manera te utilizar el habla
demuestra el conocimiento del profesor sobre el lenguaje de la sala de clases, él
tiene un conocimiento ideal de este y por lo tanto sabe como comunicarse en esta
comunidad del habla (Duranti, 2000).
En segundo lugar se encuentra la deixis, podemos observarla en varias
situaciones, una de estas es cuando suena el timbre del colegio, este funciona
como un signo que significa más que un sonido, es un indicador de que ya pueden
retirarse de las salas, y esto es un lenguaje particularmente de esta institución del
habla, ya que dentro de esta todas las personas comprenden lo que ocurre al
escuchar el timbre y por lo tanto saben como reaccionar a esto (Duranti, 2000).
Y por último se observa la participación al momento en que las alumnas me
saludan haciendo un gesto con la mano, el cual realizaron después de mi
presentación; este movimiento de la mano hacia los lados es conocido por todas
las personas que nos encontrabamos en la sala de clases como un saludo, es una
manera de ocupar el lenguaje corporal para comunicarse (Duranti, 2000).
Referencias:
Duranti, A. (2000). Antropología Lingüística. (PDF) Antropología lingüística
Alessandro Duranti | Fernanda Reyes Ramírez - Academia.edu .