violencia escolar

Cuando se habla de violencia escolar, se refiere a cualquier agresión realizada dentro de las
instalaciones de las instituciones escolares, esta acción rompe el equilibrio de respeto
comprensión, disciplina y resolución en forma pacífica de los conflictos que debe existir en la
escuela y entre sus miembros. Esta puede manifestarse de diferentes maneras por parte de los
victimarios que forman la comunidad estudiantil. Ellos utilizan la agresión verbal (Insultos, burlas,
humillación, desprestigio, chisme, etc.), física (golpes, heridas o traumatismo con objetos,
destrozo de pertenencias, etc.) y psicológica (amenazas, amedrentamientos, manipulación,
presión, imposiciónes, etc.) contra sus víctimas con la intención de controlarlos y dañarlos . Los
victimarios generalmente suelen venir de un ambiente de constantes agresiones o con un deficit de
atención familiar, entornos donde se acepta la agresividad como un tipo de conducta. Así mismo
las víctimas se someten, ya que poseen la incapacidad de actuar en forma agresiva para su
defensa, siendo objeto de abusos que en ocasiones los marcan negativamente para toda la vida.

La violencia escolar es conocida desde que ha existido los ambientes escolares, pero esta ha
ido aumentando progresivamente hasta convertirse en un problema, complicado de resolver. Los
victimarios poseen una serie de características que los definen, es importante que los académicos
observen el comportamiento de los estudiantes, como actuan en momentos criticos y el trato que
dan a los demás, para así determinar quien pudiera ser un posible agresor escolar. Algunas de
estas caracteristicas pueden ser: poseer una personalidad irritable y agresiva, no tiene control de
su carácter ni de sus actos, ausencia de sentimientos nobles hacia sus compeñeros, tiende a
comportarse de manera violenta y amenazante, es impulsivo y no se arrepiente de sus malos actos,
su rendimiento académico suele ser bajo y en ocasiones obliga a sus compañeros a realizar sus
tareas escolares bajo amedrentamiento, generalmente es algo mayor que el resto de la clase por
haber repetido uno o varios cursos, su comportamiento en el aula se caracteriza por alzar la voz
fuertemente, hacer bromas pesadas e incluso tienen actitudes desafiantes frente a profesores y
compañeros.

Pero, ¿a qué se debe este tipo de conducta de algunos alumnos dentro de las escuelas? Según
estudios realizados, existe la probabilidad de que pertenezca a una familia desestructurada y con
antecedentes de violencia doméstica. El agresor escolar asumen la posición de líder, y es
reconocido como tal por un grupo de estudiantes con características semejantes y que buscan ser
reconocidos y ser integrados dentro de un grupo afín.

Es importante destacar que los agresores, una vez identificados por los familiares y
profesores, pudieran ser sometidos a terapias psicológicas dentro y fuera de las instituciones
académicas, de esta manera se les estará ofreciendo la oportunidad de encaminar su vida hacia un
objetivo próspero.

En cuanto a las víctimas, que es la otra cara dela moneda, presentan un perfil muy diferente.
lo cierto, es que lo conforman un grupo variado, lamentablemente cualquier estudiante podría
convertirse en blanco de uno o más agresores, que en muchas ocasiones son elegidos al azar. Sin
embargo, existen algunos elementos que hacen que puedan sufrir violencia escolar: discapacidad
en el aspecto físico o psíquico, poseer algun tipo de trastorno del aprendizaje, problemas con el
lenguaje oral, ser parte de un grupo étnico, religioso o de orientación sexual minoritario, tener las
mejores notas académicas (nerd=cerebrito), entre otras.

Es de resaltar que los individuos que reciben violencia escolar, asumen un posición
reservada, aunado a esto, algunos por tener una mala comunicación con los padres o profesores
dificulta que los chicos denuncien este tipo de situaciones a tiempo, esto trae como resultado que
la violencia escolar alcance niveles de peligro, posiblemente graves para las víctimas y se
complica buscar una solucion eficaz para resolver esta problemática que actualmente esta
sucediendo en la gran mayoría de las instituciones académicas. Es tiempo de ponerle fin.

Para concluir es necesario promover la implementación de normas eficaces dentro de las

instituciones escolares para la prevención de la violencia y tomar las medidas necesarias para
favorecer las relaciones interpersonales y la buena convivencia entre los estudiantes.

También es importante considerar que el agresor por tener baja autoestima se considera
internamente menos importante, y es eso lo que le lleva a tener esa reacción defensiva de
prepotencia y arrogancia, pues siente que atemorizando a los demás es una forma de obtener
respeto.

Tanto el victimario como la víctima, necesitan con un urgencia ser tratados por un
especialista en este tipo de conductas, que lo que trae es la formación de individuos no deseables a
la sociedad que ya esta bastante deteriorada.