Está en la página 1de 4

INTRODUCCIÓN

Una vez planteado el problema, es necesario formular los objetivos de la


investigación, lo que es de gran relevancia en el proceso de investigación, porque:

 Orientan las demás fases del proceso.


 Determinan los límites y la amplitud.
 Permiten definir las etapas que requiere el estudio.
 Sitúan el estudio dentro de un contexto general.

Los objetivos son imprescindibles, ya que indican lo que se espera de la


investigación y definen la forma en que se alcanzará el resultado. Plantear un
objetivo es determinar la meta a la que se aspira llegar mediante la investigación.
Las cualidades de un buen objetivo son:

 Tener claridad y precisión.


 Estar dirigidos a los elementos básicos del problema.
 Ser mensurables y observables.
 Seguir un orden lógico o metodológico.
 Estar expresados en verbos en infinitivo.

Los objetivos contienen un verbo en infinitivo que indica la acción que se va a


realizar. Hay que poner especial atención para elegir los que describan mejor la
actividad que se llevará a cabo; la precisión y la claridad dependen de ese cuidado.
Los objetivos, además de ser claros y precisos, deben ser congruentes con el
problema y con las hipótesis de investigación de la que forman parte. Se entiende
por congruencia la concordancia y continuidad entre los factores implicados: todos
deben apuntar a un mismo propósito.

OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN
Propósitos por los cuales se hace la investigación.

Objetivo general
Propósito general que tiene el investigador.

Objetivos específicos
Propósitos específicos por los cuales se puede lograr el objetivo general.

El proceso científico, formulado a partir del planteamiento del problema, se orienta


a la búsqueda de respuesta de la situación descrita, objeto de la investigación. Por
ello, es de gran ayuda responder a la pregunta: ¿Para qué se investiga y qué se busca
con la investigación propuesta? Dar respuesta a esta pregunta permite delimitar el
marco de estudio y sus alcances.

Se investiga con el propósito de identificar elementos que ayuden al proceso de


toma de decisiones de una organización, de una institución educativa, de un
hospital, etc.; definir estrategias para el desarrollo de un país o región; evaluar la
eficiencia de una determinada política económica, empresarial, etcétera.

La definición precisa del objetivo es el eje en torno al cual se diseña la estructura del
estudio. Si no está suficientemente claro, será difícil tomar decisiones sobre el tipo
de estudio más apropiado, la población que se debe incluir o las variables que deben
medirse.

Inicialmente el objetivo se formula en términos genéricos y se establece una


pregunta amplia y ambiciosa, para después acotarla progresivamente hasta
formular una pregunta precisa que permita evaluar una hipótesis concreta. La
formulación explícita de este objetivo específico determina la planificación
subsiguiente.

El objetivo ...

Uno de los principales retos del planteamiento de propuestas de investigación es


formular objetivos, pues estos deben expresar, de forma clara y precisa, las metas
del estudio a realizar.

A continuación, revisamos algunos aspectos claves acerca de los objetivos de


investigación, y proponemos consejos prácticos que sirvan de orientación para su
formulación.

Los Objetivos y el Problema de


investigación
La investigación es un proceso planificado. La formulación de los objetivos es la
concreción de las metas del estudio a realizar, y son, por tanto, las guías de todo
el proceso, a lo largo de sus distintas etapas:

 Delimitación del tema a estudiar


 Elaboración del marco de referencia o marco teórico
 Definición de la estrategia metodológica
 Recolección, análisis e interpretación de datos
 Presentación de resultados y conclusiones del estudio.

Para ello, se deben formular objetivos generales y específicos, los cuales se


redactan con verbos en infinitivo, denotando acciones concretas, de determinado
nivel de conocimiento.
El objetivo general es la meta global del estudio, y se divide en metas de menor
alcance (objetivos específicos), las cuales, unidas conforman o completan el nivel
de dicha meta global.

Los objetivos de investigación guardan una estrecha relación de coherencia con


las preguntas de investigación. En este sentido, así como se definen metas
generales (centrales) y específicas (partes “más pequeñas”, o de menor alcance),
las preguntas de investigación también pueden ser clasificadas como generales y
específicas.

Por ende, puede señalarse que, así como los objetivos son las preguntas
convertidas en metas de determinado nivel de alcance, las preguntas son, a su vez,
cuestionamientos que buscan ser respondidos a partir del cumplimiento de las
metas definidas en los objetivos.

Cabe señalar que, comúnmente, se trabaja con una pregunta central (problema de
investigación) y un objetivo general y tres o cuatro preguntas y objetivos
específicos, aunque, todo depende del alcance o profundidad de cada estudio en
particular.

Los objetivos generales y específicos


Para formular el objetivo general de una investigación hay que tener como guía la
pregunta central o global que buscamos responder (problema de investigación) a
partir de la realización de la investigación. El objetivo general será el enunciado de
una acción meta que deberá alcanzarse para obtener esa respuesta global.

Los objetivos específicos son el desglose de la meta general. Corresponden a


metas más específicas, de menor nivel de conocimiento.

Existe un orden lógico que hay que visualizar y respetar en el momento de formular
los objetivos. Dicho orden corresponde al proceso lógico a través del cual se va
completando la meta general, a partir del cumplimiento de cada meta específica.

Sumados, los objetivos específicos deben dar como resultado el objetivo general;
no puede faltar ni sobrar nada: el conjunto de objetivos específicos debe cerrar
coherentemente el nivel de conocimiento del objetivo general, y deben quedar
abarcados los contenidos teóricos, las variables y aspectos que forman parte del
problema de investigación planteado.

Con frecuencia, se asume que la formulación de los objetivos se reduce a un


asunto de redacción, dejando de lado los criterios teórico-metodológicos y la
requerida coherencia de las metas, respecto al Problema de investigación y las
preguntas a las que deben referirse.
Por lo anterior, conviene enfatizar que los objetivos de investigación deben estar
bien escritos, ser claros y libres de ambigüedades; pero, para ser adecuados,
principalmente, deben enunciar acciones que sean factibles y consistentes en
términos teórico-metodológicos.

También podría gustarte