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¿Qué ha sucedido para los alumnos de las primarias y secundarias públicas en los aprendizajes en

casa?: evidencia de dos encuestas durante el ciclo escolar 2020-2021

Marco Fernández
Daniel Hernández
Noemí Herrera

Este texto analiza los resultados de dos encuestas telefónicas nacionales levantadas a madres y
padres de familia de estudiantes de primaria y secundaria públicas 1,2. Las encuestas fueron
planeadas para recuperar las opiniones y percepciones a un par de meses de haber iniciado el ciclo
escolar 2020-2021 y unas semanas antes de que concluyera el ciclo. Corresponde al periodo en
que el sistema educativo mexicano se llevó por completo con escuelas cerradas y mediante
diversos mecanismos de educación a distancia 3.
El rasgo más importante del arranque del ciclo escolar analizado es que inició con clases a
distancia4. 61% de los padres de familia señaló su acuerdo con esta decisión de política educativa.
No se tiene diferencia en esta percepción por el número de hijos en educación básica, pero tiende
a ser menos positiva entre personas de más de 50 años (45.7%) o entre madres y padres con
menos grados de escolaridad (si solo hasta primaria, 37.6%, y si con estudios de secundaria,
53.4%). Por el contrario, la aceptación de la educación a distancia es de 73% entre aquellos con
estudios superiores o más (Cuadro 1).
Un aspecto que destaca es que la experiencia de la educación a distancia en los meses del ciclo
escolar 2019-2020 después de que se decretó el cierre de las escuelas en el mes de XX también
influye en el acuerdo con continuar las clases a distancia. Si los hijos concluyeron ese ciclo escolar
mediante clases por internet, el acuerdo es de 69.7%, si fue por clases por televisión es menor,
64.5%, pero si la enseñanza se presentó a través de tareas enviadas por correo o mensajes o
revisando los libros de texto, la aceptación es de 60%. Por supuesto, las madres y padres que
perciben un modelo que no mantuvo contacto con sus hijos, que en la encuesta de octubre de
2020 se clasifica como que el final del ciclo consistió en que “sólo los aprobaron”, tienen un
acuerdo bajo de continuar el ciclo con educación a distancia (42%) (Cuadro 1).

1
Las dos encuestas fueron realizadas por XXX. En octubre de 2020 72.4% de quienes contestaron la
encuesta fueron mujeres y en julio de 2021 fueron 71.8%.
2
En la encuesta se tiene que al inicio del ciclo escolar 8% de los entrevistados declaró haber tenido que
cambiar a su hijo de una escuela privada a una pública por motivos económicos. Para el cierre del ciclo
escolar, la población que participó en la encuesta señaló esta situación en 5.5%.
3
En el ciclo se realizaron algunos intentos por restablecer la educación presencial, como se registra en XXX,
pero su escala y duración fue limitada.
4
El cierre de escuelas ocurrió en los últimos meses del ciclo escolar 2019-2020

1
Cuadro 1. Proporción de entrevistados que dijo estar de acuerdo con que el nuevo ciclo escolar
2020-2021 haya iniciado con clases a la distancia, es decir, de manera no presencial en las
escuelas
% del total de entrevistados % que está de acuerdo
con la característica
TOTAL 100 60.6
1 hijo 27.8 61.1
2 o más hijos 72.2 60.4
18 a 29 años de edad 14.2 59.1
30 a 49 78.8 60.9
50 años de edad o más 7 45.7
Escolaridad hasta primaria 11.6 39.7
Algún grado de secundaria 29.2 53.4
Algún grado de bachillerato 28.8 63.2
Algún grado de profesional o más 29.6 73
Concluyó ciclo con clases en internet 21.8 69.7
En TV 12.4 64.5
Con solo libro de texto 8 60
Tareas por correo o mensajes 45 59.1
Solo pasó de grado 8.6 41.8
Fuente: elaboración propia con base en XXX.

Destaca que en el ciclo escolar 2019-2020 el principal mecanismo reconocido de trabajo educativo
fue a través de tareas recibidas por correo electrónico o mensajes (45%), seguido por clases en
internet (29.6%). El señalamiento de una mayor desvinculación con el trabajo de maestras y
maestros solo lo reporta 8.6% de los entrevistados (Cuadro 1).
Se ha discutido mucho el impacto del acceso de las y los estudiantes a internet, computadoras o
tabletas para poder avanzar en sus aprendizajes en la fase de distanciamiento social que llevó al
cierre de las escuelas5. Los datos analizados señalan que 56.8% de los entrevistados reportaron
tener acceso a internet y computadora/tableta; 20.2%, aunque no tenía computadora/tableta, si
tenía internet; y 18.6% no contaba ni con internet ni computadora/tableta (en estos dos últimos
grupos, el acceso a dispositivos celulares era de más de 90%.
Los estudiantes en cuyos hogares había internet y computadora/tableta, estuvieron en mayor
medida vinculados a clases por internet, aunque de cualquier forma 44% concluyó el ciclo
mediante tareas recibidas por correo electrónico o mensajes. Esta forma de vinculación educativa
se eleva hasta 50% a los hogares con internet pero sin computadora/tableta (50.4%). Entre los
hogares con menos recursos digitales, un dispositivo celular permitió tener clases por internet
(19.3%) o recibir tareas (43%). Dado el elevado costo de datos digitales por este mecanismo,
puede suponerse que el contacto con las y los maestros era poco frecuente.
Destaca que más de la mitad de los padres declaran tener acceso a recursos digitales, pero incluso
en estos solo uno de cada cuatro reporta que sus hijos concluyeron el ciclo escolar 2019-2020 con
5
De las personas entrevistadas que declararon tener computadora y/o tableta en su hogar, 36.3% tenía
ambas, solo computadora el 45.5% y solo tableta el 18.2%.

2
clases en internet. Esto refleja que, al momento del cierre de las escuelas, las instituciones
educativas no estaban preparadas para aprovechar los recursos digitales que si bien no eran de
acceso universal, si podían ser utilizados por más de la mitad de los hogares. Esto también puede
indicar que las instituciones no pudieron montar sistemas flexibles, que se adecuaran a las
distintas posibilidades de uso de las tecnologías de la información y comunicación en los hogares,
optando por la que respondía a los estudiantes con menor acceso a éstas. Finalmente, también
puede ser resultado de las limitaciones de recursos mismas por parte de las y los maestros, que no
pudieron desplegar clases por internet.

Cuadro 2. Proporción de entrevistados según manera que concluyeron sus hijos el ciclo escolar
2019-2020 y acceso a internet, computadora o tableta
Con internet, Con internet, sin Sin internet, ni
computadora o computadora ni computadora ni
tableta tableta tableta

Concluyó ciclo con clases en internet 26.1 11.9 19.3


En TV 11.3 15.8 11.8
Con solo libro de texto 7 5 14
Tareas recibidas 44 50.4 43
Solo pasó de grado 7.4 14.9 5.4
Proporción % del total de
entrevistados con esta característica 56.8 20.2 18.6
98% con celular 92% con celular
Fuente: elaboración propia con base en XXX.

Para el ciclo escolar 2020-2021, la autoridad educativa federal destacó el esfuerzo que se haría
para ofrecer sesiones educativas a través de la televisión (Aprende en Casa 2 6). Durante los
primeros meses de ese periodo educativo, la percepción de los padres estuvo dividida acerca de si
consideraban que la decisión de implementar la educación a distancia con clases por televisión fue
una decisión acertada. El 49% coincidió con esta disposición. Una proporción semejante las
clasificaba como muy buenas o buenas clases (7.6% y 40.6%, respectivamente) y, por el contrario,
9.8% señaló que le parecían malas, e incluso 4.2% que eran muy malas.
La percepción relativamente positiva sobre las clases por televisión de aproximadamente la mitad
de las y los entrevistados disminuye fuertemente al indagar sobre si éstas captan la atención de
sus hijos7: 67.6% indican que a sus hijos no les están gustando las clases por televisión. Cuando se
tiene solo un hijo en primaria o secundaria, esta opinión mejora un poco y solo 61.1% reporta que
no le gusta a su hijo, pero cuando se tienen 2 o más hijos, 70% dicen que no les gusta a sus hijos
las clases por televisión (Cuadro 3).

6
XXX poner aquí ejemplo de mensaje mediático con fecha
7
En la encuesta de octubre de 2020 se incluyeron además una pregunta sobre la percepción de calidad de
los mecanismos a distancia: “¿Usted cree que las clases a distancia logran captar el interés de sus hijos o no
logran captar su interés?”. 58.2% de las personas señalan que a sus hijos ni les gustaban ni captaban el
interés de los estudiantes, pero la correlación entre ambas respuestas es de 0.421.

3
La opinión desfavorable sobre la estrategia de clases por televisión parece asociarse a la
desventaja de las clases a distancia por televisión que significa no tener la orientación del maestro:
entre los padres que indican que faltó esa orientación, solo 21.8% reportan que si les gustan las
clases a sus hijos (Cuadro 3). Si se reconoce que junto con las clases por televisión un maestro o
alguien de la escuela ha estado en contacto de manera frecuente con los hijos, aumenta la
proporción que apunta que les gustan las clases. Adicionalmente, entre los entrevistados que
señalan que la escuela les ha ofrecido clases o apoyos complementarios vía internet, además de
las clases por televisión, es más alta la proporción que advierten que las clases les gustan a sus
hijos (30.7%).
Así, parte de la satisfacción del estudiantado con las clases por televisión, desde la perspectiva de
los padres, se relaciona con el contacto y respaldo que reciben sus hijos de los maestros o sus
escuelas.

Cuadro 3. Proporción de entrevistados que reportan que a sus hijos les gustan o no las clases por
televisión, según número de hijos en el hogar que cursan primaria o secundaria, acceso a
orientación del maestro, o apoyo adicional a clases por televisión vía internet
Le gusta la clase No le gusta la clase
TOTAL 26.8 67.6
1 hijo en primaria o secundaria 34.5 61.1
2 o más hijos 23.8 70.1
No recibió orientación del maestro 21.8 72.7
Contacto frecuente de un maestro o alguien de la escuela 30.8 63.1
Recibió apoyo adicional vía internet 30.7 58.3

La educación a distancia en los primeros meses del ciclo 2020-2021 representó preocupaciones
para los padres de familia respecto al avance en los aprendizajes de sus hijos.
Tres de cada diez madres y padres de familia (75.2%) consideran que las clases a distancia
afectarán el aprendizaje de sus hijos y la calidad de su enseñanza. Esta percepción no cambia en
padres de estudiantes con acceso a internet y computadora/tableta 8.
Casi 8 de cada 10 entrevistados (79%) considera que las clases a distancia por televisión estaban
siendo menos efectivas que las clases presenciales para el aprendizaje de sus hijos. Esta
percepción no se reduce en hogares con acceso a internet y computadora/tableta; la opinión de
82.7% de los padres en estos hogares con tecnologías de información y comunicación es que el
aprovechamiento de estos recursos no resultaba igualmente eficaz que la educación presencial.
esbozarse

8
Un cambio que parece esbozarse es la mayor importancia que madres y padres den al logro de
aprendizajes de sus hijos en su valoración de los servicios educativos, asociado a que han estado en contacto
más cercano con las limitaciones y retos de lograr los aprendizajes. En un análisis de los autores de la
Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental (ENCIG) no se observa en 2019 una asociación entre
la percepción de la calidad de los servicios educativos públicos de educación básica y media superior y los
valores de cambio en el nivel de logro de aprendizajes de los estudiantes.

4
Las madres y padres entrevistados reconocieron en los primero s meses del ciclo escolar 2020-
2021 que uno de los principales retos de las clases a distancia era mantener la concentración de
las y los niños durante las clases (36%). En proporciones menores, pero por arriba del 30% de los
casos, se indicó el reto de que no abandonen los estudios (30.4%). Esta preocupación ejemplifica
la percepción del desinterés por el estudio que perecen percibir los entrevistados derivado de la
educación a distancia, o también de los rezagos de aprendizajes que ya se señalaron.
Un reto que se menciona en proporciones similares es que los estudiantes tengan iniciativa para
resolver obstáculos sin ayuda del maestro (31.6%). Aquí se tiene una de loas ámbitos más críticos
que se identifican en la encuesta: la falta de apoyo por los maestros. Si bien 75.2% de quienes
respondieron a la encuesta reportan que a la par de las clases por televisión, un maestro o alguien
de la escuela ha estado en contacto de manera frecuente con sus hijos, al señalar la principal
desventaja de las clases a distancia por televisión, 62.2% se inclinaron por “No tener la orientación
del maestro”, frente a las otras opciones de ”La calidad de las clases no es buena” o “La falta de
contacto con amigos y compañeros”.
Al preguntar sobre quién ayudaba en esos primeros meses del ciclo 2020-2021 a los estudiantes
de primaria y secundaria cuando tenían dudas de las clases o tareas, se reconoció que
generalmente lo hacía el entrevistado (62.4%). La importancia en esta tarea aumenta conforme se
tiene mayor nivel de escolaridad. Así, cuando quién responde la entrevista tiene algún grado de
educación superior, su apoyo en esta actividad llega a 80.4%. Por el contrario, si solo tienen hasta
algún grado de primaria, 34.5% dice que respalda a los estudiantes en este ámbito. Es otro familiar
(29.3%) quién ayuda a las niñas y niños en sus dudas (Cuadro 4).
Un punto importante es que se solo se reporta en 16.2% de las entrevistas que es un maestro el
que ayuda a resolver las preguntas de los estudiantes. Esto reitera la percepción en los hogares de
la frágil vinculación con las y los docentes en la condición de cierre de las escuelas.

Cuadro 4. Distribución porcentual de quién ayuda a los estudiantes a resolver sus dudas, según
escolaridad del entrevistado
Hasta primaria Algún grado Algún grado Algún grado TOTAL
secundaria bachillerato superior
Entrevistado 34.5 56.2 61.1 80.4 62.4

Otro familiar 29.3 16.4 13.9 5.4 13.8

Maestro 15.5 19.2 19.4 10.1 16.2

Compañero 6.9 0.7 0.0 1.4 1.4

Otro 5.2 5.5 4.9 2.7 4.4

Nadie 6.9 2.1 0.7 0.0 1.6

Total 100.0 100.0 100.0 100.0 100.0

5
Este resultado evidencia la relevancia que ha tenido el respaldo de los miembros del hogar en el
proceso de aprendizaje a distancia. Solo 28% de las madres y padres contestaron que sus hijos
toman las clases a distancia solos la mayor parte del tiempo. Esta respuesta es similar cuando solo
se reportó que tenían un hijo estudiando (28.8%) o dos o más hijos (27.7%).
El apoyo del hogar para los estudios ha representado distintos efectos, que tienden a ser más
declarados cuando el entrevistado tiene dos o más hijos estudiando (en cualquier nivel escolar).
Pero incluso entre aquellos que solo tienen un hijo estudiando, 66.2% reporta que con las clases a
distancia se le han complicado las actividades diarias, 36% que le ha afectado mucho en sus
actividades diarias que las clases de sus hijos no sean en la escuela, 55.4% que el/ella o alguien de
la familia tuvo que modificar sus actividades diarias para poder estar en casa mientras los hijos
tomaban las clases a distancia, y 32.4% indica que las clases a distancia han significado más gasto
económico. Como se presenta en el Cuadro 5, la proporción de mamás o papás con dos o más
hijos estudiando a distancia que señala estas situaciones es más alta.
En especial, destaca que los efectos económicos sean más graves para los hogares que no cuentan
con internet ni computadora/tableta. Una fracción mayor de estos señalaron más gastos asociados
a la educación a distancia (55.9%) que los hogares con acceso a estas tecnologías de la información
y la comunicación (34.5%). Así, las repercusiones económicas se han percibido con más frecuencia
en los hogares con menos recursos (presumiblemente los que no tenían acceso a herramientas
digitales).

Cuadro 5. Proporción de entrevistados que señalan distintos efectos en el hogar de las clases a
distancia
Efectos 1 hijo 2 hijos o más Total
estudiando estudiando
Le han complicado sus actividades diarias 66.2 75.9 73.2
Le han afectado mucho 36 47.6 44.4
Entrevistado o alguien de su familia tuvo que modificar 55.4 68.7 65
sus actividades diarias para poder estar en casa mientras
sus hijos toman las clases a distancia
Han significado al entrevistado o su familia más gastos 32.4 45.4 41.8
económicos
Han significado al entrevistado o su familia más gastos
económicos si en su hogar tiene:
i) Internet y computadora/tableta 22.1 39.1 34.5
ii) Internet pero sin computadora/tableta 42.4 50 47.5
iii) Sin internet ni computadora/tableta 55.5 56 55.9

Las y los entrevistados también respondieron sobre otras repercusiones del cierre de las escuelas y
la dinámica de educación a distancia, como son las condiciones emocionales de sus hijos. En
principio, 40.6% de los entrevistados reconoce que la pandemia del coronavirus ha afectado a sus

6
hijos en el estado de ánimo. Esta incidencia es ligeramente menor del 48.8% que subrayan mucha
afectación en el aspecto escolar.
Considerando cuatro expresiones de afectación emocional (tristeza, ansiedad, miedo y enojo),
17.2% de los padres indicó que no observó evidencia de ninguna de estas señales y 20.2% que solo
había percibido una de estas manifestaciones. Por el contrario, 25.2% encuentra alguna
combinación de tres de estos indicios en sus hijos y 15.2% que nota los cuatro síntomas en sus
hijos que no habían asistido a clases presenciales en las escuelas los últimos meses del ciclo 2019-
2020 y los primeros del ciclo 2020-2021 (Cuadro 6).
El elemento emocional con mayor incidencia para los padres es el enojo (67.4%), seguido por
ansiedad (advertido por 53.2%), tristeza (que reconocen 50.8% de las mamás y papás en sus hijos)
y miedo (el menos identificado, por solo 29.4% de los entrevistados). Es importante que esta
impresión no es sustancialmente distinta entre hogares con uno o dos o más niños estudiando, ni
si se tiene acceso a recursos de tecnología de la información y comunicación, que se asocia a
prácticas de aprendizaje con mayor contacto con maestros.

Cuadro 6. Proporción de padres según incidencia identificada de efectos emocionales de la no


asistencia de sus hijos a las escuelas y combinaciones de estos
Expresión (incidencia) % de presencia percibida por los padres en sus hijos
Enojo 67.4
Ansiedad 53.2
Tristeza 50.8
Miedo 29.4
Combinaciones
4 expresiones 15.2
3 expresiones 25.2
2 expresiones 24.2
Enojo y ansiedad 9
Enojo y tristeza 5.4
Enojo y miedo 3
Ansiedad y miedo 3.6
Ansiedad y tristeza 2.4
Tristeza y miedo 0.8
1 expresión 20.2
Ninguna 17.2

En octubre de 2020, solo 12% de quienes respondieron la encuesta, pensaban que era muy
probable que sus hijos regresaran a clases presenciales en el ciclo escolar 2020-2021. Otro 20%
creía que había alguna posibilidad.
Esta opinión se articulaba con la mayor importancia que daban 84% de los padres sobre seguir
tomado clases a distancia para evitar riesgos, frente al 15% que consideraba más importante que
ya regresaran a la escuela sus hijos, aunque existieran riesgos de contagio. Así, después de los

7
primeros meses del ciclo escolar que inició con escuelas cerradas, y aunque se reconocían efectos
negativos de no asistir a las escuelas sobre aspectos de aprendizaje y expresiones emocionales, la
gran mayoría no expresó deseo o urgencia de que se restableciera la enseñanza presencial.
Al estar por terminar el mismo año escolar, en julio 2021 se realizó una nueva encuesta las
opiniones y percepciones de las madres y padres de los estudiantes de primaria y secundaria de
escuelas públicas9. De forma relevante, 58.3% de los entrevistados está a favor del inicio del
siguiente ciclo escolar (2021-2022) en una combinación de clases presenciales y a distancia, en
tanto 41.3% no coincide con esta propuesta. Aún después de todos los meses de trabajo escolar
con un proceso a distancia, todavía una relativamente alta proporción de padres no desea que sus
hijos regresen a las escuelas, así sea de forma híbrida (mezclando aprendizajes presenciales y no
presenciales).
Entre octubre de 2020 y julio de 2021, la proporción de madres y padres que opinaban que tenían
una buena opinión sobre las clases a distancia había aumentado. Esto se dio principalmente entre
quiénes las consideraban “buenas”, que aumentó de 40.6% a 51.8%. En el ciclo escolar 2020-2021
se puede pensar que se fortaleció el trabajo educativo a distancia, de forma que disminuyó el
porcentaje que las percibía como malas (de 23.6% a 17.8%) y muy malas (de 9.8% a 5%) (Cuadro
7).

Cuadro 7. Proporción de padres según valoración de la calidad de las clases de sus hijos en
octubre de 2020 y julio de 2021 (%)
Hasta ahora (octubre 2020) En lo que va del ciclo que inició en
¿cómo calificaría la calidad de las enero (julio 2021), ¿cómo calificaría la
clases a distancia que están calidad de las clases a distancia que
llevando sus hijos por televisión? están llevando sus hijos por a distancia
Muy buenas 7.6 9.7
Buenas 40.6 51.8
Regular 14.2 15.0
Malas 23.6 17.8
Muy malas 9.8 5.0

En el Cuadro 8 se muestra como entre aquellos que desean el regreso de sus hijos a clases
presenciales en julio de 2021, hay una más alta fracción que valoran como muy buenas/buenas las
clases que han tenido sus hijos (64%; Cuadro 8). En contraste, los que no desean esta medida
sostienen esta posición aunque tienen una menos favorable impresión de la interacción educativa
a distancia de los estudiantes (58% declaran que la calidad es muy buena/buena).
Otros factores que podrían asociarse al deseo a las y los niños y adolescentes a las escuelas es la
carga de trabajo o los gastos por tener estudiantes en casa, el acceso a tecnologías de la
información y comunicación, la percepción de los efectos negativos sobre los aprendizajes o la
presencia de efectos emocionales en los niños.

9
Esta segunda encuesta es probabilística para resultados nacionales. No es un seguimiento a los
entrevistados en la primera encuesta.

8
Cuadro 8. Proporción de padres según valoración de la calidad de las clases de sus hijos y opinión
sobre el regreso a clases en julio de 2021 (%)
Si desea regreso a las escuelas No coincide con la propuesta de
regreso a las escuelas
Muy buenas 10.3 8.9
Buenas 54.0 48.8
Regular 14.9 14.9
Malas 14.9 22.2
Muy malas 5.1 4.8

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