INSTITUTO POLITECNICO NACIONAL

CENTROS DE ESTUDIOS CIENTIFICOS Y

TECNOLOGICOS MIGUEL OTHON DE
MENDIZABAL

TECNICO LABORATORISTA CLINICO

UNIDAD DE APRENDIZAJE
ANALISIS INMUNOLOGICOS

Dra. RAMIREZ MARTINEZ MARÍA DE LOURDES

ALUMNO:
DE LOS SANTOS GONZALEZ LUIS ALBERTO

6IM4

FECHA DE ENTREGA: 30/05/22

 PRUEBAS DE COOMBS
Objetivo: Analizar los fundamentos, métodos y aplicaciones clínicas de las
pruebas cruzadas

Introducción:
La prueba de Coombs fue descrita por primera vez por los científicos Rob Race, Arthur
Morant, y Robin Coombs (por quien la prueba era llamada) en 1945
La prueba de Coombs emplea un antisuero llamado reactivo de Coombs, que contiene
anticuerpos de animales inmunizados dirigidos contra IgG, IgM, y/o complemento humano.
Estos anticuerpos se unen a los anticuerpos de los antígenos que están en la superficie de
los glóbulos rojos, causando aglutinación de las células. Esta aglutinación observada
corresponde a un resultado positivo, y la ausencia de aglutinación es un resultado negativo.
Existen 2 variantes de la prueba de Coombs:
Prueba de Coombs directo: evalúa directamente los glóbulos rojos de la sangre,
verificando si hay anticuerpos ligados al eritrocito y si esos anticuerpos son derivados del
propio sistema inmune de la persona o recibidos por transfusión. Este test normalmente se
realiza para detectar anemias hemolíticas autoinmunes. Conozca los principales síntomas
de la anemia hemolítica.
Prueba de Coombs indirecto: evalúa el suero de la sangre, identificando los anticuerpos
presentes y, generalmente se solicita en situaciones de transfusión, para garantizar que la
sangre que va a ser donada es compatible con la que se está recibiendo.

Desarrollo:
Pruebas Cruzadas (Proceso)
– Salina.
– Lavar y centrifugar los glóbulos rojos.
– Resuspender en una solución al 5%.
– Colocar una gota de esta solución en el tubo que contiene el suero del receptor.
– Mezclar suavemente.
– Centrifugar
-Observar
-Salina Térmica (A 37°C)
Si después de observar no hubo positividad, se prosigue a calentar a las IgM
-Poner en baño maría a 37°C por 15 min
-Secar y centrifugar
-Observar
En dado caso que no exista positividad, pasar a la siguiente fase (Fase Proteica)
– Proteica
-Agregar 2 gotas de albúmina al 22% al tubo donde se completó la fase salina.
-Mezclar suavemente
-Centrifugar
-Observar
En dado caso que no exista positividad, pasar a la siguiente etapa (Etapa térmica)
-Proteica térmica (A 37°C)
-Poner en baño maría a 37°C por 15 min
-Secar y centrifugar
-Observar
En dado caso que no exista positividad, pasar a la siguiente fase (Fase Coombs)
En la siguiente práctica mencionaremos acerca de la fase Coombs, por el momento nos
quedaremos hasta donde las pruebas cruzadas tienen alcance.

Fase de Coombs
Tomar las células del tubo y lavarlas con solución salina.
– Eliminar el sobrenadante.
– Agregar dos gotas de reactivo de Coombs.
– Mezclar suavemente.

– Centrifugar de 15 a 30 segundos.

Ilustración 1 Reactivo de Coombs

Resultados:
El resultado del test de Coombs es negativo cuando no existe el anticuerpo que provoca la
destrucción de los glóbulos rojos, por lo que este se considera un resultado normal. Sin
embargo, cuando el resultado es positivo, quiere decir que existe el anticuerpo en la sangre,
por lo que si el resultado fuera positivo en la prueba de Coombs directo significa que la
persona puede tener una enfermedad como:
Anemia hemolítica autoinmune; Infección por Mycoplasma sp.; Sífilis; Leucemia; Lupus
eritematoso; Mononucleosis.
En el equipo el resultado fue negativo, y así fue con todos los miembros de los demás
equipos.
Conclusión:
La prueba de Coombs no es un estudio de rutina, por lo cual, podemos considerarla como
una prueba especial y de valor clínico bastante elevado, las enfermedades que puede
encaminar son de gran relevancia. El fundamento de este estudio y sus aplicaciones la
convierten en una prueba con mucho dinamismo.

Referencias:
Cortes Buelvas, A. (2014). Inmunohematología básica y aplicada (1.a ed.). GCIAMT.

https://drive.google.com/file/d/1CoEXa1AEED4HDnVY_hKoEDfe7SxMEg-

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